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Etiqueta: violencia

Marcha 25N – Día Internacional contra la Violencia hacia las Mujeres

Distintas organizaciones y colectivas feministas, así como activistas independientes y familiares de víctimas de femicidios, de varios lugares del país, están organizando de forma unitaria una gran jornada de lucha en las calles, este 25 de noviembre – Día Internacional contra la Violencia hacia las Mujeres.

Se invita a marchar contra la violencia del Estado, y exigen: ¡Basta de Impunidad y justicia Patriarcal!

¡No! al ajuste del FMI que viene a precarizar y violentar aún más a las mujeres. Exigen presupuesto en políticas públicas para combatir la violencia machista.

Desde la Coordinadora Feminista contra Femicidios e Impunidad, consideran que la violencia hacia mujeres, adolescentes y niñas continúa en aumento, mientras que la justicia patriarcal sigue siendo cómplice de femicidas y violentos. La crisis sanitaria y las políticas neoliberales de ajuste del gobierno han precarizado las condiciones de vida de las mayorías golpeando con más fuerza sobre las mujeres. Ante esto ven importante organizarse de forma unitaria para salir a las calles contra la violencia machista y el Estado opresor que perpetúa la violencia.

¡Alto a la represión contra el Pueblo Ngöbe!

Domingo 31 de octubre de 2021. Desde la Coordinadora de Lucha Sur Sur expresan su total repudio y condena por la represión y violencia ejercida por el gobierno de Panamá el pasado 29 de octubre de 2021. El Estado panameño continúa violando los derechos humanos contra el hermano Pueblo Ngöbe que se encuentra resistiendo y ejerciendo su derecho colectivo a la tierra – territorio en las inmediaciones del Proyecto Hidroeléctrico Barroblanco.

Desde el sur de Costa Rica, nuestro abrazo solidario al Pueblo Ngöbe.

Coordinadora de Lucha Sur Sur.

 

Publicación original en el siguiente enlace: https://www.facebook.com/111882987093775/posts/399868248295246/

Sobre el asesinato de un niño y otro joven que intentaban robar ropa

Por Carlos Meneses Reyes

Lo sucedido el pasado viernes 08 de octubre, en el municipio colombiano de Tibú, zona fronteriza con Venezuela, en el que fueron asesinados un niño y un joven de nacionalidad venezolana y dejados sus cuerpos baleados en la cabeza, en la carretera de salida, en un barrio de esa localidad; fue un claro y escueto linchamiento, iniciado en un local comercial al que presuntamente entraron, el niño de 11 años y el joven de 17 años dizque para robar ropa.

Las secuencias fotográficas existentes registran que ambos salen de los vestuarios con ropa del almacén puestas y presumible iban a huir sin pagarlas. Así expuesto, se trataría de un intento de hurto, al no mediar violencia alguna. No de robo, en el que el elemento violencia es lo determinante. Impetuosamente, esa si en forma violenta y grave, el propietario o encargado del almacén, procede a retenerlos, impidiendo que huyan o se salgan. Se forma la trifulca y en medio del alboroto aparece un justiciero, quien con infundada autoridad los condena y con ayuda de un secuaz los filman con un celular y habla: “Vamos a entregar a estos muchachos a las autoridades, para que se hagan cargo de los individuos estos, lamentablemente son muy jovencitos, no queremos verlos mañana tirados en la orilla de la carretera, bajo nuestra responsabilidad están”. Falso. El motivo o causa del suceso estaba determinado desde el momento en que inició la arbitraria retención. No digamos que se desvaneció la intención de entregarlos a las autoridades; sino que el sujeto incriminado relató el modus operandi de finalidad in si tu (en el lugar del hecho). En unos minutos, sujetos armados que se movilizaban en motocicletas, llegaron al almacén y se llevaron -a ojos vista- a los dos jóvenes. Minutos más tarde, los jóvenes fueron encontrados asesinados, con disparos en la cabeza, en Barrio Largo, en la vía que conduce a El Tarra. Un oficial de la Policía explicó que en momento alguno recibió llamada del propietario o encargado del almacén de ropas, ni ningún reporte por parte de la comunidad, ni se enteró del tumulto ocasionado por lo que estaba ocurriendo a las dos víctimas, vilmente asesinadas.

Versiones publicadas relatan que en la retención de los jóvenes también acudieron algunos habitantes, comerciantes y mototaxistas, de esa población de El Catatumbo, que les ataron las manos y les colocaron carteles que decía “ladrones”. Dizque al parecer las autoridades policiales no se enteraron de tamañas violaciones a sus derechos y todo ese proceder reprochable.

Desde el primer momento el niño y el joven fueron objeto de un linchamiento, resultado de ejecución tumultuaria, con claros sujetos individualizados y reconocidos, con la intención de aplicar justicia por mano propia. Colocados en una situación de indefensos al que fueron sometidos; con desconocimiento total de su condición notoria de menores; descartando cualquier emulación a la protección especial conque cobija la ley a los menores de edad. Ya el que hayan aparecido asesinados, es una relación concomitante que acompaña la acción delictiva, desde el inicio mismo de la retención de los menores.

Destaca un factor de distracción en todo este entramado: un oficial de la Policía resaltó que no tuvo ningún reporte, por parte de la comunidad o interesados, sobre el hecho que estaba ocurriendo con las dos víctimas asesinadas.

Como sujetos activos del linchamiento y ejecución de los dos menores de edad, están involucrados: el propietario y /o empleados del almacén. El autor de los vídeos que graba a los niños y al justiciero que adelanta sentencia, ni siquiera sumaria, al hacer apología del delito y entregar al niño y al joven a la muerte segura. Quienes les ataron las manos y colocaron los letreros. A la Policía del lugar que no se hizo presente y que con su omisión permitió la incursión de los sujetos armados; en un acto de sinceridad narrativa, ante la protuberante pestilencia y corrupción por acusaciones de vínculos con el para militarismo que asiste a la institución de las fuerzas armadas en Colombia. Los mismos medios de difusión oligárquicos reseñan, que precisamente, el doble asesinato hoy tiene en apuros a los policías de Tibú, pues varias personas que estuvieron presentes cuando los jóvenes fueron atrapados, presuntamente, robando en un local de ropa, denunciaron que llamaron más de una docena de veces a las autoridades para que se hicieran cargo de ellos, pero que jamás les contestaron.

HIPÓTESIS: El Terrorismo de Estado imperante en Colombia, ha dado instrucciones a los colaboradores paramilitares, para mantener “el orden” y la “seguridad”. Resalta una permisividad de actuar manifiesta. El tratamiento contra insurgente dado a la protesta social ha agudizado el problema de inseguridad en el país. Se asiste a un Estado inviable. Difunden la especie que las insurgencias colombianas armadas impulsan la tal “limpieza social”, dizque para obtener adeptos o aceptación en las comunidades y dizque tal fenómeno se agudizara hasta después de las elecciones del año 2.022… Tamaño despropósito no tiene cabida. Solo a un montaje de la inteligencia militar se puede explicar el que en días pasados aparezca un panfleto atribuido al EJERCITO POPULAR DE LIBERACIÓN (EPL) en el que anuncia que pondrá en práctica la tal “limpieza social” matando bazuqueros, traficantes, ladrones, en todo el país. Es decir, a un reducto que actúa principalmente en El Catatumbo, la Provincia de Ocaña y el Sur del Cesar, le dan a gratuito una cobertura nacional. Por el solo análisis de prensa de la región, inducen a que están siendo duramente golpeados y de buenas a primeras aparecen actuando con presencia en todo el país. De otro lado, la mediática falsaria difundió, de buenas a primeras, que los autores de los asesinatos del niño y el joven venezolanos, son las Nuevas Farc, que operan en Tibú, todo el Departamento de Norte de Santander y se a extienden al Magdalena Medio, bajo el mismo nombre de Frente 33 de las antiguas farc, como resultados de los incumplimientos oligárquicos a los Acuerdos de La Habana. De por sí, las guerrillas colombianas son anticapitalistas y no van a maquillar a una sociedad corrupta y en decadencia. Eso explica la no sintonía de la lucha armada con la solución inmediata a los graves problemas sociales y políticos, que genera el dominio de la corrupción y el destrozo de la cosa pública en Colombia. Ellos esperan que el Estado se auto destruya y en modo alguno contribuirán a que en forma alterna y sabia aplicación política, se pueda remediar el ejercicio del poder político en Colombia.

Que la opinión internacional y la comunidad mundial sepan de la grave situación y carencia de intervención estatal en Colombia, para recuperar el respeto a los Derechos Humanos en todos sus grados y generaciones. No se puede continuar con el solo registro de cifras.

Ahora aparece foto del joven asesinado en Tibú

Los nombres completos y verificación de nacionalidad y datos personales de los dos asesinados, pareciere un misterio. Esta clara la identidad del niño de 11 años, de origen indígena wayuu, y la penosa espera de su madre por recuperar su cadáver; pero del segundo, de cerca de 17 años- conforme a la denominada edad corporal, diferente a la edad real- no se sabe. Surgen especulaciones para deslustrar su minoría de edad. Entonces opera la mediática falsaria: difunden, según medios venezolanos de oposición, que la familia de Jackson Enrique-de quien informan es un desaparecido-vive en el sector Las Virtudes del municipio Tulio Febres Cordero, del Estado Mérida, en Venezuela; pero que no contarían con dinero para trasladarse a Cúcuta a identificarlo plenamente y solicitar la entrega del cuerpo para llevarlo y sepultarlo al otro lado de la frontera. Anuncian que Jackson Enrique Arriaga Parra, en medio del atroz hecho que se dio la mañana del viernes 08 de octubre y que ha causado rechazo, conmoción y la motivación del presente artículo, es un hombre, de 23 años, que al parecer es padre de una niña… Las fotografías lo muestran saliendo del vestidor con camisas que se estaba midiendo… No indica esto hasta ese momento acción delictiva. Así fueron apresados con las ropas puestas… Las mismas con las que fueron encontrados sus cuerpos acribillados… Un medio como el diario La Opinión, se presta al montaje. Da por cierta la identificación del “otro” asesinado, cuando corresponde es al forense venezolano identificarlo y que la inexistencia de unas relaciones exteriores, impiden que se aclare la identidad del occiso y por ende la carga de esa identidad la asuma el Estado colombiano.

Un análisis de las dos fotografías que aparecen en ese diario, en la edición del 14 de octubre, de la faz izquierda del occiso, atinente a la morfología de la oreja derecha, tanto la del joven encontrado asesinado como el del “desaparecido” Jackson Enrrique, permiten destacar y determinar: 1. El tuberciulo de hélice- elix- conocido como Pabellón de la oreja- no coinciden en absoluto, en las dos fotografías. La del asesinado es más protuberante y en modo alguno el pabellón de la oreja de Jakson esta aprisionado por la orilla de la gorra, conque aparece en la fotografía. La raíz de hélice que penetra al oído interno no logra preciarse en las dos tomas fotográficas; pero si por el trago (no trazo), que da al orificio auditivo, se puede apuntar una coincidencia; impera la guía de los expertos: “la naturaleza nunca se repite así misma” y es diferente hacia la concha, o parte interna del pabellón la figura, forma, hechura o configuración de esa dos orejas. Y en cuanto a la zona de la oreja llamado antitrago, que está al frente del trago, denota forma diferente, en ambas fotografías. Qué no resaltar del lóbulo de la oreja que son totalmente diferentes y que significan el elemento de mayor identificación forense. De manera, que, a simple vista, se trata de dos orejas diferentes y por ende de distintas personas… A la inteligencia popular no se le mete el dedo en la boca… El militarismo de derecha narco en el poder, quiere o aspira a confundir en la minoría de edad de los dos asesinados, por sus aliados paramilitares.

Al momento de concluir la redacción de este artículo, el diario La Opinión de Cúcuta en edición de domingo 17 de octubre de 2021, anuncia que la Familia del joven asesinado en Tibú llegó a Cúcuta. En tanto, la fallida política e inexistente diplomacia del gobierno títere colombiano, para con la soberana República Bolivariana de Venezuela, le da plena jurisdicción a la Justicia Internacional, en este aberrante caso.

Jardín de Flores celebró la existencia y resistencia de las mujeres trans

En medio de verdes jardines, cubiertas por coloridas telas que simbolizaban flores por abrirse, 25 mujeres trans interpretaron una versión poética de la historia de sus vidas.

Invisibilizadas, pero visibles ante la mirada de quienes quieran reconocerlas. Coloridas, resilientes, llenas de vida, fuerza y alegría, estas mujeres han existido y resistido en un mundo que las ha confrontado, pero no ha podido con ellas.

Inspirado en la frase de Pablo Neruda: «Podrán cortar todas las flores, pero no podrán detener la primavera», el performance Jardín de Flores de la reconocida artista guatemalteca Regina José Galindo, celebró la vida de estas mujeres y recordó sus vivencias, luchas y derechos pendientes de alcanzar.

El montaje se realizó el pasado martes 5 de octubre en los jardines del Hotel Bougainvillea, donde durante dos días se realizó un taller participativo con funcionarios judiciales y de sociedad civil de Centroamérica sobre justicia abierta y datos abiertos, desde un enfoque de género y diversidad.

La artista creadora de la pieza comentó que la misma se basó en investigaciones realizadas por Hivos, organización que comisionó la obra, sobre la situación de las mujeres trans, las altas cifras de violencia, la falta de acceso que tienen a derechos básicos y lo difícil que les resulta, acceden a los mecanismos de administración de la justicia. “Me pareció fundamental intentar, a través del arte, poner esta nota de denuncia, este grito de auxilio y de ayuda, además porque el evento sucedería para operadoras y operadores de justicia, era vital poner el tema en la mesa para discutirlo”, dijo Galindo. 

La galardonada artista indicó que, en conjunto con la organización, se decidió usar la imagen de un jardín de flores, mediante la cual se podía expresar la situación de estas mujeres.

“A partir de esa frase tan hermosa de Pablo Neruda”, dijo, el performance abordó la forma en que el mundo “podrá lastimar o tratar de frenar sus derechos, pero la fuerza de estas mujeres es mayor y siempre saldrán”. No obstante, recordó que los estados centroamericanos tienen una deuda pendiente con ellas.

Keyra Martínez, de la organización Transvida, comentó que se sintió “en su charco” interpretando la obra pues también hace teatro con el grupo de la asociación. “Esta es una forma de llevar nuestro arte a otros ojos y otras poblaciones”.

La activista dijo además que para las mujeres de la organización es importante recalcar los vacíos políticos y sociales que todavía existen con respecto a las poblaciones LGBTQ+ y especialmente, mujeres trans a nivel centroamericano y latinoamericano. “Falta mucho por reivindicar, muchos derechos por conseguir”, comentó.

Tiffany Ortega, también integrante de Transvida dijo sentirse contenta pues considera importante “participar en actividades que nos hacen visibles y donde una vez más, pedimos derechos”.

Visibilizar la vida de las mujeres trans de forma integral, opinó, es urgente “para que la gente conozca la realidad, las vivencias, las cicatrices, las historias, porque cada mujer trans guarda una lucha, cada una es guerrera”. 

Tiffany agregó que “debajo de cualquier flor siempre hay un mañana y ese mañana es algo mejor, una nueva floreada, una nueva rosa, una nueva historia, así somos las mujeres trans, cada una va sembrando, dejando una semillita para que el futuro de las demás sea mejor y qué mejor que dejarles un mundo lleno de derechos”.

La pieza artística se presentó en el marco del proyecto Libre de Ser de Hivos América Latina, que busca mejorar las condiciones para salvaguardar la vida, la integridad y el avance de los derechos de las personas LGBTIQ+, especialmente de las personas trans. La iniciativa se enfoca en el mejoramiento de los datos para diseñar e implementar medidas de seguridad integrales, efectivas y eficaces; y en la creación y el posicionamiento de nuevas narrativas y estrategias de comunicación para visibilizar la discriminación y la violencia que las personas LGBTIQ+ enfrentan, combatiendo así la cultura de odio y favoreciendo el cumplimiento pleno de sus derechos.

Para coordinar entrevistas o conocer más del proyecto, no duden contactar a Mariana Arce, asesora de Comunicación de Hivos, al correo marianaarcem@gmail.com, prensa.libredeser@gmail.com  o comunicacionlibre@hivos.org, o bien al teléfono 7024-2773.  

Puede encontrar más información del proyecto en: 

ANEP avala aprobación del Convenio 190 de la OIT sobre la eliminación de la violencia y acoso en el mundo del trabajo

Comunicado de prensa

ANEP avala aprobación del Convenio 190 de la OIT sobre la eliminación de la violencia y acoso en el mundo del trabajo

  • Central Social Juanito Mora Porras -ANEP presentó una consulta institucional sobre el proyecto de ley del convenio 190 de la OIT que se tramita bajo el expediente 22.569

  • Proyecto se encuentra en la Comisión de Asuntos Sociales de la Asamblea Legislativa

La Asociación Nacional de Empleados Públicos y Privados (ANEP) avala y solicita a los legisladores en la Asamblea Legislativa aprobar el proyecto de Ley 22.569 que contiene la ratificación del Convenio 190 de la Organización Internacional del Trabajo (OIT) sobre la eliminación de la violencia y acoso en el mundo del trabajo.

El comunicado de prensa completo se puede encontrar en el siguiente enlace: https://anep.cr/anep-avala-ratificacion-del-convenio-190-de-la-oit-sobre-la-eliminacion-de-la-violencia-y-acoso-en-el-mundo-del-trabajo/

Anhelamos la paz y seguridad para nuestros pueblos indígenas

Texto de Mariana Delgado Morales del Pueblo Bribri de Salitre, Tubölwak

Para mí el día mundial de pueblos indígenas no tiene nada de celebración, debido a que solamente es un decir, de que existe este día para conmemorar a los pueblos indígenas en el mundo, y la realidad de estos pueblos no ha cambiado desde que llegó la colonización, el sometimiento y el exterminio, así como la imposición de un sistema extraño a nuestra cultura, que trajo consigo la violencia, la discriminación, el racismo y la casi desaparición de los nativos del continente americano.

En el presente, la situación de los pueblos indígenas no ha cambiado nada, o muy poco, ya que se continúan violentando los derechos establecidos, se continúan los tratos irrespetuosos y la negación de una vida digna a los pueblos indígenas, de la que gozan los demás ciudadanos. El Estado costarricense sigue sin prestar la atención necesaria a los pueblos indígenas y es responsable de los despojos de tierras por parte de usurpadores no indígenas, quienes han violentado nuestros derechos con torturas como marcas en nuestros cuerpos, agresiones físicas, destrucción y quema de casas, de cultivos, destruyen nuestros bosques.

También, las mujeres indígenas estamos sufriendo violencia psicológica debido a las constantes amenazas y ataques, que generan los terratenientes no indígenas contra nuestras vidas y contra nuestras familias. Algunas compañeras han sido amenazadas, físicamente con machete, por usurpadores que se acercan a las casas a amenazar de muerte a las mujeres que se levantan para defender sus derechos.

No celebramos el día mundial de los pueblos indígenas porque actualmente nuestros territorios no han sido saneados de violentos usurpadores que continúan usufructuando con áreas de tierras dentro de nuestros territorios.

El gobierno es ciego ante estas formas de violencia, las cuales llevaron a cabo el asesinato de nuestros hermanos indígenas Sergio Rojas y Jhery Rivera. En el caso de Sergio Rojas, no ha hecho una buena investigación que dé con los verdaderos asesinos que le arrebataron la vida. Los asesinatos de líderes indígenas y otros intentos de homicidio siguen en la impunidad permitiendo más amenazas de muerte hacia otros líderes indígenas, además permite que se organizasen grandes grupos de terratenientes, en algunos casos, apoyados por la Municipalidad del cantón de Buenos Aires, empresas autobuseras, medios televisivos que difaman a los indígenas que están en las recuperaciones territoriales.

Anhelamos la paz y seguridad para nuestros pueblos indígenas, pero lamentablemente no llega. Aún estamos lejos de tener un verdadero acceso a justicia.

 

Imagen tomada de la página UCR.

Información del Centro de Investigación en Cultura y Desarrollo (CICDE).

UCR: Proyecto retrata la lucha de mujeres defensoras del ambiente y los territorios en Costa Rica

Las disputas del poder que se libran en los cuerpos femeninos y los territorios costarricenses salen del anonimato en el proyecto “Campamento Audiovisual de Mujeres y Territorios (CAM)”.

Desde las costas hasta las zonas fronterizas, todos los días, las mujeres están resistiendo juntas las múltiples formas de violencia que atraviesan sus vidas, sus cuerpos y los territorios que habitan. Así lo pudo constatar un equipo interdisciplianrio de la Facultad de Ciencias Sociales de la Universidad de Costa Rica (UCR) en el proyecto ED-3437 “Campamento Audiovisual de Mujeres y Territorios (CAM)”.

El Campamento es un proyecto del Programa Kioscos Socioambientales que surgió en el año 2019 como un espacio de encuentro para mujeres de distintos territorios: costeros, urbanos, campesinos e indígenas, adonde participaron 24 mujeres de 14 comunidades y 13 organizaciones de Costa Rica.

Las participantes son mujeres vinculadas a organizaciones sociales de Heredia, La Carpio, Valle Bonito y El Progreso de Upala, Brasilito de Santa Cruz, Territorio Brorán y Territorio Bribrí de Salitre y Longo Mai de Buenos Aires, Finca Chánguena de Osa, Manzanillo y Costa de Pájaros de Puntarenas, Las Parcelas de Jacó, China Kichá y Cajón de Pérez Zeledón.

Luego de un largo proceso de reflexión sobre lo acontecido en los campamentos, el equipo presentó la Memoria del CAM el pasado lunes 12 de julio, por medio del FB Live del Programa Kioscos Socioambientales. En el documento, compilado por Zuiri Méndez Benavides y Catalina Tenorio Vargas, recogen los principales hallazgos y comparten su propuesta conceptual y metodológica, herramientas de comunicación y breves relatos de las participantes.

Un grupo de mujeres elaboró un comunicado contra Pesca de Arrastre Como parte de los ejercicios realizados durante el tercer Campamento Audiovisual de Mujeres y Territorios. (Captura de video grabado por Yoselyn Ríos).

Comunicación y comunidad

El proyecto incluyó tres campamentos que se efectuaron en diferentes territorios durante el 2019: en Punta Morales, en Longo Mai y en Sabanilla y La Carpio. En cada encuentro se compartieron herramientas de comunicación para apoyar las luchas de las mujeres por la defensa de sus territorios, utilizando equipos básicos como teléfonos celulares, estabilizadores y lámparas.

Además de brindarles capacitación en lenguaje audiovisual y uso de los equipos, en cada campamento se desarrollaron diferentes ejercicios y estrategias para despertar la capacidad de narrar de cada una de las integrantes, con el objetivo de que ellas mismas pudieran gestar sus propios procesos y productos audiovisuales.

 También se realizaron ejercicios sobre lo sensible, ejercicios sobre disputas de poder en cuerpos y territorios, ejercicios audiovisuales sobre otras miradas, ejercicios audiovisuales sobre la propia mirada y el campamento, facilitados por el equipo de Kioscos y La Feria Producciones.

“Las mujeres que participan en el CAM han aprendido herramientas de comunicación, lenguaje audiovisual, narrativa, guión, y sobre todo, le han dado valor a sus propias oralidades” explica, en la Memoria del CAM, Marcela Esquivel, productora audiovisual de la Feria Producciones. Para ella, la mirada desde otros cines les permitió apropiase de su capacidad de autorretratarse y retratar su comunidad, familia y país, utilizando los recursos que tienen a mano.

La propuesta del CAM plantea una aproximación metodológica novedosa en Costa Rica, sustentada en principios transversales como los feminismos, otros cines, el fortalecimiento organizativo, la construcción colectiva de saberes y las prácticas poéticas. Desde esta perspectiva, el cuerpo femenino se entiende como un territorio tanto de cuido como de disputa a donde también se libran los conflictos sociambientales.

Las luchas, las mujeres y el espacio

Este proyecto, además permitió reconocer y visibilizar las luchas que enfrentan varios colectivos de mujeres en diversos puntos del país para defender sus territorios y los bienes comunes. Por ejemplo: la construcción de plantas hidroeléctricas, las minas y tajos, la tala de bosques y selvas, la presencia de monocultivos de piña, banano, palma, caña y la ganadería extensiva.

La ilustración «Violencias y resistencias en la Defensa del Cuerpo Territorio», elaborada por Elizabeth Argüello, condensa los resultados de un ejercicio realizado durante el campamento que tomó como escala el cuerpo como primer territorio de disputa. Imagen reproducida de la Memoria del Campamento Audiovisual Mujeres y Territorios.

Durante los campamentos ellas también compartieron su preocupación por la contaminación de las aguas y ríos, los botaderos, el difícil acceso a la tenencia de tierra y vivienda para las mujeres y las invasiones de terratenientes en territorios indígenas. A estos conflictos se suman las diversas formas de violencia que enfrentan las mujeres en la cotidianidad como la violencia físca y sexual, el racismo o la xenofobia.

 “Teníamos mucha información sentida de lo que significa para tantas mujeres lo que es la defensa de sus territorios, del territorio de sus comunidades, de sus regiones, de sus barrios, de sus casas y del cuerpo” señaló la investigadora Zuiri Méndez durante la presentación de la Memoria.

Con estos valiosos insumos, ellas elaboraron una cartografía social participativa de lucha de mujeres en los territorios. Además, la diseñadora Elizabeth Argüello, logró representar este entramado de conflictos y violencias y resistencias en un mapa del cuerpo, ilustración que consta en la Memoria del CAM.

«¿Qué pasa con nuestro derecho al agua, si el agua está en las tierras que tomaron los terratenientes?». Esta poderosa frase, dicha por una mujer, forma parte de la memoria de este proyecto. En él pueden encontrarse otros pequeños relatos de resistencia y denuncia que las mujeres tienen para contar pero que pocas veces son escuchados.

Saberes compartidos

El CAM además se constituyó en un espacio de aprendizaje y crecimiento en común, donde tanto las participantes como las integrantes del equipo de la UCR generaron nuevos saberes. Para Shirley Barrantes, vecina de la Carpio y miembra de la Cooperativa de Vivienda, Construcción, Fuerza, Unión, Destreza y Ayuda Mutua R.L. (Coovifudam), el campamento fue un espacio de intercambio que las fortaleció y las empoderó para seguir adelante.

“Yo he sido líder comunal y he estado en la lucha por la vivienda, pero más allá de eso no me había dado cuenta del empoderamiento como mujer y el crecimiento personal y profesional que he adquirido y por medio del CAM también logramos identificar todas estas acciones que hacemos”, comentó Shirley durante la presentación de la Memoria del CAM.

La Memoria del Campamento Audiovisual de Mujeres y Territorios (CAM) está disponible en el repositorio Kerwá, la misma incluye herramientas metodológicas y una cartilla de herramientas de comunicación que pueden ser utilizadas por otras personas investigadoras y facilitadoras de procesos en comunidades.

Este proyecto, inscrito en la Facultad de Ciencias Sociales fue financiado con los Fondos Concursables 2019- 2020 de la Vicerrectoría de Acción Social de la Universidad de Costa Rica. Contó con la participación de los TCU de Escuela de Ciencias de la Comunicación Colectiva, del Programa de Economía Social Solidaria de la Escuela de Sociología, del programa Palabra de Mujer de canal Quince y de la Feria Producciones.

 

Imagen principal: Cinthya Hernández junto a otras mujeres participantes del segundo Campamento Audiovisual de Mujeres y Territorios (CAM), Fotografía: Rebeca Sánchez.

Katzy O`neal Coto
Periodista, Oficina de Divulgación e Información, UCR

Foro de Solidaridad: resistencia, criminalización y violencia

El viernes 06 de agosto del 2021 se llevará a cabo el FORO de SOLIDARIDAD sobre las resistencias en nuestros territorios y denunciando la criminalización y la violencia que se enfrenta.

Recientemente la Coordinadora de Lucha Sur Sur presentó el «Informe de agresiones y violaciones a los derechos humanos contra los Pueblos Originarios de la zona sur de Costa Rica, enero – diciembre de 2020”, que recopila y analiza detalladamente los hechos sucedidos durante uno de los años más violentos que han vivido las personas involucradas en procesos de recuperación de tierra-territorios. Esta nueva etapa de recuperaciones iniciaron luego de que en el año 2010 fueron sacados a rastras de la Asamblea Legislativa varios líderes de Pueblos Originarios que exigían la votación de un Proyecto de Ley sobre Autonomía Indígena; y decidieron construir sus procesos de autonomía desde sus territorios.

Para profundizar el tema se puede ingresar en el siguiente enlace con la siguiente nota periodística en audio: https://bit.ly/3A3lh1h

FB de la Coordinadora de Lucha Sur Sur: https://www.facebook.com/CoordinadoraLuchaSurSur

Presentan:

  • Gustavo Oreamuno – Asociación de Iniciativas Populares Ditsö y Coordinadora de Lucha Sur Sur.
  • Lesner Figueroa – Clan Tuadiwák. Concejo Ditsö Iríria Ajkönúk Wakpa, Autogobierno de Salitre.

Hora:

  • 10 a 11:30 hs Guatemala
  • 11 a 12:30 hs México
  • 13 a 14:30 hs Argentina

Se podrá sintonizar por medio de Facebook Live – Al toque Foro Latinoamericano

 

Publicación en FB de Red ALFORJA: https://bit.ly/3lBJoQO

Gobiernos locales de Palmares, Peñas Blancas y Coto Brus con acciones para erradicar la violencia contra las mujeres

El grupo Mujeres Unidas en Salud y Desarrollo, redes de mujeres en alianza con gobiernos locales de las comunidades de Palmares, Peñas Blancas y Coto Brus lograron establecer una declaratoria de gobiernos con cero tolerancia hacia la violencia contras las mujeres.

Esta acción se combina con la campaña: “Cambie el rollo y póngase la camiseta por los derechos de las mujeres”, vinculando a diferentes sectores de la sociedad con la promoción cultural del respeto hacia los derechos de la mujer. 

Con este se busca resaltar el derecho de las mujeres a tener una vida libre de violencia y opresión, cambiar roles tradicionales en la ciudadanía y generar un cambio individual y colectivo hacia el modelo hegemónico del patriarcado.

Más información sobre estas declaratorias de estos Concejos municipales en el siguiente link: 

https://drive.google.com/drive/folders/1e0krTars-u_NeK-v6rVsw6UuUmaPlrIG?usp=sharing

Análisis del estallido político

Por Carlos Meneses Reyes

 I.-Tras dos meses de manifiesta actividad popular en el desarrollo del Paro Nacional, corresponde ubicar los derroteros tomados por el movimiento de protesta, resaltando los virajes del mismo, en los objetivos de un fin propuesto.

Cual doloroso trámite de un parto para la sociedad colombiana, el resultado de las situaciones y efectos producidos son múltiples. Comenzando que por la injerencia de una magistrada de pretender condicionar la realización de manifestaciones y protestas, propios de un Paro Nacional a “permisos” por conceder; la decisión de la Alcaldía de Bogotá de revocar la autorización a los organizadores o Comité Nacional de Paro (CNP), de instalación de tarimas de oradores en la plaza de Bolívar; la actitud de dilación en el reconocimiento y trato de representatividad del Comité de Paro Nacional (CPN); designaron, desde el primer día, el propósito de darle a la protesta social, un tratamiento contra insurgente.

Blandieron el uso y aplicación constitucional, de dientes para afuera, como lo asimila la jerga popular, de protección y defensa de los derechos humanos y del derecho a la protesta y el condicionamiento de las armas oficiales, al uso de la fuerza a manera de distinción, proporcionalidad y el no uso de armas letales.

En total impunidad y mentira, han galopado sobre un estado de cosas inconstitucional (eci) y aplicado, con toda clase de calificaciones, estigmas, a cada una de las novedosas formas y contenido de las protestas que las jornadas callejeras han suscitado.

Se aplicó la más feroz arbitrariedad de las fuerzas armadas y el uso desmedido de la fuerza policial, sin distinción y con aplicación de salvaje insidia contra la juventud, en primera línea, en valeroso ejemplo de contención a los instrumentos de una dictadura en ejercicio.

Demasiados hechos políticos se han sucedido, que resumen toda la actividad del Paro Nacional. La constante manifiesta de la contra parte gubernamental ha sido: la de no conversar, de no dialogar, con los organizadores del Paro; como tampoco con los actores de concentraciones, manifestaciones y bloqueos.

Sin voluntad política para escuchar y reconocer las reclamaciones populares, primó la respuesta oficial y el uso de los efectos mediáticos. En respuesta, sobrevinieron las acciones de bloqueo, como expresión de la protesta popular. Estos bloqueos se generalizaron hacia las vías de acceso a las ciudades y carreteras de transito nacional, como resultado de la vinculación al Paro del sector de transportistas. En sucesión inusitada, las movilizaciones programadas resultaron superadas por las acciones de emprender de hecho, en las vías públicas; demostrándose la falta de capacidad y carencia de dirección del CNP ante la fuerza de los acontecimientos masivos que deparaba el accionar de las masas en el Paro Nacional.

La cadena de sucesos en el desenvolvimiento del Paro Nacional superó las figuras de estereotipos que sobre la protesta se tenía en Colombia. Pronto afloró que no se centraba en el contenido de pliegos de peticiones, reivindicaciones no cumplidas, o propuestas de carácter gremial o sindical y por ello la iniciativa del movimiento sindical colombiano, en ruta a niveles de escaños alcanzados, quedó superada por la exigencia de los sectores populares, palmariamente difundidas, lo cual conllevó a la connotación de carácter político del Paro; con el ítem, que su no reconocimiento político e intervención, en el caudal de la lucha popular, por parte de los movimientos políticos de oposición y del no rechazo de estas colectividades a las políticas de hegemonía oligárquica contra insurgentes aplicadas, ha derivado en un divorcio de lo programático partidario con lo coyuntural expuesto.

Las organizaciones políticas y partidos de oposición, por lo coyuntural de lo inmediato del debate y aspiraciones electorales, relegaron los vínculos que tienen con la lucha política por opción o vocación de poder, apartando o dejando a un lado la respuesta a los conflictos que agobian al movimiento popular colombiano, en lo económico, político, social, ecológico, con agenda propia y contradicciones subsistentes, hacia alcances de transformación estructurales.

Hablar de divorcio de las colectividades políticas de oposición, centra la discusión en la supremacía de la suerte de la vía electoral, cuando ello en modo alguno estaba en juego. Esto redunda en la resonancia al espíritu político de la dirigencia sindical, gremial, de organizaciones sociales; lo cual trajo como resultado la capitulación al leguleyismo santandereano, por parte de la Dirección del Comité de Paro. Se reemplazó así, la dinámica de la lucha y resistencia popular contra las medidas fascistas y dictatoriales, por la presentación de proyectos de ley, ante el corruptivo Congreso de la república y en momentos en que este asomó, como el principal enemigo de las luchas populares en Colombia y generador de tantos males.

El carácter comúnmente conocido o tradicional de Paro Cívico Nacional Indefinido, derivó en la huelga política, en el Paro Político Nacional (PPN). Ello explica la cortedad de manejo de la dirección del CNP, al aceptar la no capacidad representativa nacional de la mayoría de los sectores afectados, protestantes y manifestantes. Pero los cuadros sindicales no tuvieron la capacidad de dar el salto cualitativo a la caracterización política de la protesta y no quedarse en el mero calificativo de “estallido social”. Por ello la Dirección del Paro, se plegó a las estrategias de dilación y desconocimiento de la contra parte gubernamental. La contradicción suscitada en el seno de las organizaciones, movimientos, partidos y sectores sociales de la Asamblea de Delegados, no fue suficiente para otorgar una línea de trabajo a aplicar a la Dirección Nacional de Paro (DNP), con miras a superar las limitables de participación y asistencia, ante los efectos del rebrote político efervescente popular; manifestado en multiplicables sectores, de fuerzas regionales y de la sociedad civil, ante los cuales no tenía ni cubría alcance direccional.

 II.- En cuanto a los movimientos y/o partidos de oposición, no cualificaron con su soporte y participación de dirección y asistencia política al movimiento sindical en Paro Nacional; centrando todo su esfuerzo en lo participativo electoral. Ni siquiera asumieron el ejercicio “De la participación democrática de los partidos políticos”; desde el punto de vista de tema o asunto de recurrir a el cabildo abierto en los municipios; para en la práctica, superar las talanqueras o reparos impuestas a las expresiones de democracia directa participativa o “democracia de las calles”.

Se conoce que la reglamentación de lo constitucional, por parte de los hacedores de leyes narco para estatales, han relegado y desechado la naturaleza y eficacia practica de esos mecanismos de participación directa. Obvio que pesa la existencia de un congreso mayoritario narco oligárquico paramilitar, en el manejo estatal y gubernamental y en el recorte de inspiraciones del constituyente primario. No obstante, ello no es óbice para que sea la conducción política la que asume la superación de esos entuertos, de desconocer la cumplimentación y uso de participación de todos esos mecanismos constitucionales de democracia directa y no representativa. Comenzando por el voto mismo, en franca y total degradación, con un sistema electoral corrupto y de casino que aún a costa del desarme y desmovilización de una fuerza insurgente, lo mantienen sin asomo de implementación de los Acuerdos de La Habana y el Teatro Colón. Todo por el culto al electorerismo, también conocido como “cretinismo parlamentario”; cuando la esencia de la participación electoral en Colombia incluye el elemento material de superar la corrupción, clientelismo, compra venta de votos; el terror y el engaño, ínsito, propio y connatural del sistema electoral corrupto, que atornilla a todo lo espurio y falso de la llamada “democracia” colombiana.

 III.- La desigualdad social es más violenta que cualquier protesta. El número de reivindicaciones y cambios estructurales que fueron surgiendo durante el trazado y desarrollo del Paro Nacional, demostró la dinámica del mismo y la ausencia confusionista de objetivos.

Con militarización y violencia el gobierno nacional obstaculizó la negociación.

El gobierno desvirtuó el carácter pacífico de la protesta. Demostró que al sistema nada le importa eso. Arremetió en forma salvaje y desmedida. La acometida con el uso indiscriminado de disparos a los manifestantes, apoyados de civiles armados, resaltó en lo desigual del conflicto en escena; evidenciando la aplicación y el uso del paramilitarismo en lo urbano. Por ello se plantea que el tratamiento dado a la protesta fue contra insurgente.

A lo gubernamental afectó la irrupción de descontento, cual expresión política, sin depender de movimiento político orientador. Tanto el origen del conflicto actual como su no solución, implica que el único responsable de los efectos, en todos los planos, por resultado del Paro Nacional, es el actual gobierno del sub presidente Duque. La protesta generalizada y radicalizada surgió, por incompetencia e ineficacia gubernamental, en lo conocido como desgobierno, cual estallido de resistencia al régimen imperante y al modelo económico neoliberal. Allí radica la esencia de la protesta y el meollo del asunto a resolverse.

A la fecha se puede afirmar que el asunto, como materia y motivo a resolverse es de resultado y esencia originaria de motivación política, como protesta interminable y en escala, que suscitó el Paro Nacional desde el 28A, en forma creciente, ascendentes, de espiral imparable. No se registra antecedente que la represión policial-militar pueda dar al traste con esta clase de protesta política.

Por el contrario, se ha demostrado que aún sin un organismo de dirección activo, los enfrentamientos continúan en muchas ciudades capitales de departamento y la lluvia de reclamaciones y exigencias regionales, aumentan.

El gobierno le apuntó al desgaste de las dirigencias y de los manifestantes. Al enfrentamiento de estos con los sectores sociales en receso y población afectada por las acciones y movimientos de protesta. Descargó toda su culpa e ineficacia en la conducción gubernamental de solución al asunto, bajo la premisa de la dilación, la negación a la violación de los derechos humanos, la no condena a la violencia policial, lo cual redundaba en el camino explicito para el desmonte del Escuadrón de la Muerte Policial-Esmad, la reforma y cambio estructural de la actual policía militarizada y la apertura a un Nuevo Pacto social en Colombia.

 IV.- Los fines esenciales constitucionales del Estado han sido colocados en entredicho. El ejercicio de la soberanía popular en forma directa, vilipendiada. Violado el derecho a la vida y aplicado de facto el recurso de la muerte, con el asesinato, el desaparecimiento físico y tortura a los jóvenes. El trato y protección a ciudadanos, sin discriminación a marginados, minorías, pueblos autóctonos, fue desconocido. Los derechos sociales, económicos y culturales, mancillados; así como no reconocer, el carácter inalienable de los bienes y servicios públicos, a ojos vista privatizados y objeto de la furia inclemente de la indignación generadora de repulsa colectiva, en una acción que podría considerarse- en el imaginario popular- de descalificación y no empoderamiento de protección, como propio, hacia la cosa pública.

Así la situación, transcurridos dos meses de protestas no reconocidas e imparables; todo en Colombia está por darse. La Resistencia, continúa. No se requiere de una inteligencia preventiva para que el establecimiento acepte que días de mayor radicalización se darán y en vísperas del festejo de la primera independencia nacional y la lucha por la segunda independencia definitiva se está abriendo con mayor intensidad. Transitamos por la segunda oportunidad y bajo la premisa que “no hay mal que dure cien años, ni país que lo resista”.