Un platillo navideño típico en el Sur de Costa Rica
Uriel Rojas
Cada vez que llega diciembre y cambio de año muchas familias en el Sur de Costa Rica atizan sus fogones o colocan piedras sobre la superficie de la tierra para hacer fuego y cocinar los tamales de arroz.
¿Qué es un tamal de arroz?
Las familias costarricenses están acostumbradas al tamal de masa, un platillo tradicional durante las épocas navideñas, especialmente.
Pero en el Sur de Costa Rica, el tamal de arroz representa con honores la variada gastronomía de esta zona especialmente cuando nos referimos a la cultura indígena y chiricana.
El tamal de arroz requiere el mismo proceso preparativo que el tamal de masa, solamente que en vez de masa utiliza arroz, y sus demás ingredientes son bastantes similares.
Su exquisito sabor marca la diferencia y son pocos los pueblos que conservan este saber y más aún, pocas las cocineras que tienen el conocimiento para darle el punto preciso capaz de conquistar cualquier paladar exigente.
Su origen se le atribuye a la cocina indígena y chiricana. Este mestizaje gastronómico aún se conserva en poblados como Buenos Aires, Volcán, Potrero Grande, Pilas y las comunidades indígenas de la zona.
Para estas épocas navideñas, la cocina indígena y chiricana se lucen con este platillo y cada que vez que el visitante prueba el sabor queda encantado que hasta se come dos y si puede tres, acompañado de una taza de café.
El tamal de arroz habla mucho por la cultura popular del Sur, por su gente, sus modos de vida, sus costumbres y tradiciones.
Cuando se prepara una “tamalada” la familia se une.
Se distribuyen las tareas para lavar las hojas, (tradicionalmente de bijagua), preparar los mecates para amarrar, (tradicionalmente utiliza fibras de las hojas de itabo), preparar la carne, el arroz, y desde luego está una jefa, quien es la que “alinea” el sabor.
La preparación de una tamalada genera un ambiente festivo: mientras se prepara se cuentan historias, anécdotas, saberes, se comparten bebidas, bocadillos y uno que otro chisme reciente.
Si la actividad es comunal, se unen los vecinos y especialmente las cocineras.
Es un platillo de lujo que a veces se usan para algunas otras actividades muy especiales, tales como festivales culturales, por ejemplo.
El tamal de arroz es un platillo único del Sur de Costa Rica, especialmente del cantón de Buenos Aires y algunas familias en Osa, lugares en donde habitan las poblaciones indígenas con influencia chiricana o viceversa.
Su amplia historia de convivencia entre estas dos culturas, junto a la criolla campesina han hecho del Sur un mosaico de saberes y sabores que debes conocer cuando visitas estas vastas explanadas benditas.
Ingredientes para hacer 40 tamales:
1 bolsa de arroz
1 kilo de carne de cerdo o de pollo
1 cebolla picada
Sal al gusto
2 rollos de culantro
Achiote natural al gusto
2 chiles dulces (Y de manera opcional, un poquito de ajos o comino)
Preparación:
☑Primero se limpian las hojas de bijagua y se alistan los mecates de amarrar, (fibras de la hoja del itabo)
☑Se prepara la carne y el arroz por separado (se les agrega los demás ingredientes: chile, culantro, achiote, ajos, comino)
☑Luego, sobre la hoja de bijagua se echa el arroz preparado y los trocitos de carne. Se acomoda bien y se envuelve, amarrándose cada tamal con las fibras del itabo.
☑Se pone a cocinar con buen fuego unas dos horas y listo. A comer tamal de arroz con café o con la bebida de su agrado.
Feliz Navidad y año nuevo 2024 disfrutando de los ricos tamales de arroz.
Esta nota se elaboró con el apoyo de la familia Hernández Alvarado.
Actividad se llevará a cabo este sábado 23 de diciembre
Organizadores garantizan una excelente atención a cada caballista
La comunidad de Guagaral de Colinas, te espera este fin semana con un menú repleto de actividades deportivas, sociales y recreativas.
Para el viernes 22 de diciembre, las actividades inician con partidos de fútbol, ventas de ricas comidas y bebidas propias de la gastronomía local, refresquería bien fría, buena música y excelente animación.
Por la noche disfrute del karaoke bailable.
Para el sábado 23 de diciembre se ha organizado la mejor Súper Cabalgata Navideña del 2023.
De acuerdo con los organizadores de este evento equino, se contará con una excelente premiación entre ellos:
☑5 novillas
☑6monturas
☑Dos hermosos cerdos
☑Una novillo como premio de consolación.
☑Tres valiosos premios en efectivo a rifar entre los caballistas.
☑Y más de 40 premios super fabulosos.
Y de último momento, los organizadores han confirmado ¡un premio sorpresa más! Y es una preciosa ternera que viene premiada con ¡¡¡50.000 colones en efectivo!!!
Además, los asistentes podrán disfrutar de otros concursos tradicionales como el agarrar el cerdo encebado, la pica de leña, subir al palo encebado y una espectacular noche bailable con el Grupo Nacional Nákar.
La organización ha informado que tienen preciosos caballos de alquiler para usar durante el evento, los cuales ya están debidamente adiestrados.
La pre inscripción para participar en esta Súper Cabalgata en Guagaral de Colinas tiene un costo de 13,000 colones, pero se cierra el día viernes 22 de diciembre.
Se realiza al whapssap 86852471 con Ruth Castro Rivera.
Los organizadores garantizan una excelente atención a cada caballista.
Para llegar a esta comunidad puedes utilizar la aplicación social Waze o también Google Maps indicando Guagaral de Colinas, Costa Rica.
¿Cómo llegar a Guagaral de Colinas?
La comunidad de Guagaral pertenece al distrito de Colinas, cantón de Buenos Aires.
Se ubica a unos 65 kilómetros al suroeste de Buenos Aires, Puntarenas y cuenta con tres vías de acceso:
1) Por Térraba: Se toma el camino que lleva a la comunidad de Térraba, donde se hace un desvío hacia la comunidad de Maíz y de ahí se va a la ruta que pasa por San Luis, pasa por Colinas y se llega a Guagaral.
2) Por Pacuar: Entre Pérez Zeledón y Buenos Aires, se toma la ruta que pasa por Las Juntas de Pacuar de Pérez Zeledón y luego por las comunidades de El Águila de Pejibaye, Veracruz y se llega a Guagaral.
3) Por La Cuesta de Burro: Cuya entrada está situada cerca de Ciudad Cortés. Sube por Filadelfia, llega al cruce de Colinas y avanza hacia Guagaral.
Te esperamos Fiestas Navideña Guagaral de Colinas 2023.
En cada época de verano y continuando el uso de una técnica ancestral, los indígenas borucas se organizan para visitar por varios días las playas de Ventanas, Piñuelas y Ballena, situados en el Pacifico Sur de nuestro país, con el fin de teñir sus madejas de hilos, que días antes han preparado.
Emprender este viaje es saborear una costumbre milenaria de sus antepasados, quienes antes de que existieran las carreteras, iban en sus botes de madera por el río Grande de Térraba, empujados por varillas y canaletes.
Los borucas no descuidan ningún detalle y se guían por la luna, quien en su fase de menguante les indica que es la época propicia para aprovechar el líquido acuoso de un molusco que les provee ese tinte color púrpura y que es de enorme significado, según dicen sus mayores.
Estos caracolitos del mar se encuentran adheridos a las rocas.
Los borucas lo toman, lo acarician y lo soplan con fuerza para que suelte esté líquido amarillento.
Viajan hombres, mujeres y niños.
Aprovechan además esta visita a las costas para conseguir pescados, plantas medicinales y bañarse en el mar.
Aprovechando el movimiento de las mareas, los indígenas borucas brincan de roca en roca, en busca de ese ser marino que les tiñe el hilo.
Y vaya que es una técnica ancestral, pues se requiere de mucho cuidado para no matar al molusco y conservar el equilibrio natural.
Por lo general, viajan en familia y es el varón quien extrae el líquido del molusco y se lo da a su pareja quien se encarga de lavarlo y ponerlo al sol hasta obtener el color morado.
Esta combinación de tareas hace que la misión sea más entretenida. Los niños solo miran y aprenden de sus padres.
El color morado en los hilos borucas es un símbolo de distinción.
Así ha sido toda la historia y solo lo usaban personajes de estratos sociales y políticos muy importantes.
En el tejido tradicional, las mantas de algodón que llevaran color morado solo eran para uso ocasional, especialmente durante épocas festivas y de enorme trascendencia colectiva.
Desde tiempos inmemoriales, las familias artesanas borucas llevan sus hilos al mar, en tiempos de luna, y con mucho respeto al mar, tiñen sus madejas, que, sin duda, evoca saberes ancestrales.
Esta nota se elaboró con el apoyo de Cerro Vueltas Lodge/High Mountain Eco Lodge.
Por: Alfonso Pardo Martínez Secretaría de Relaciones Internacionales-PVP
Trino Barrantes Araya Secretario General del PVP
“Si salgo, llego; si llego, entro; si entro, triunfo”
Cuando Fidel Castro dice que la Revolución Cubana, tiene como responsable ideológico a José Martí; lo que nos dice es la visión proletaria y antimperialista de la propuesta martiana, que se logró cristalizar con la derrota del imperialismo norteamericano.
Ciertamente, desde el 1 de enero de 1959, hoy a 65 años de ese gran triunfo histórico, el pueblo cubano bajo la dirección de su vanguardia propinó un certero golpe popular a la hegemonía de los Estados Unidos. Se lograba así, demostrarle al mundo que la nefasta doctrina Monroe, era penetrable, y que el imperialismo podía ser derrotado.
Por supuesto que el dolor político, económico e ideológico que constituyó este triunfo para América Latina, iba a dar lugar a las medidas más draconianas que conozca la historia de la humanidad contra la democracia popular, la libertad, la soberanía y la independencia. El anticastrismo y el bloqueo económico contra Cuba, devienen como parte de la nueva lógica de dominación imperial.
Ni la invasión a Bahía Cochinos, ni la Crisis de los Misiles, tampoco la caída del socialismo histórico y el surgimiento de un mundo unipolar, han podido detener el triunfo del pueblo cubano. Las derrotas sostenidas en el seno de las conferencias de la ONU contra el bloqueo, que ha sufrido los EE. UU, son la mejor muestra de que la revolución se ancló en el Morro y el corazón de los cubanos y por eso el imperialismo yanqui, suma una vez sí y otra también duras derrotas diplomáticas.
Desde el Comité Ejecutivo Nacional-CEN del PVP, hacemos llegar nuestro fraternal, solidario y revolucionario saludo al 65 Aniversario del Triunfo de la Revolución Cubana, porque Cuba es libre y soberana.
Trino Barrantes, secretario general del Partido Vanguardia Popular, ofrece su mensaje a propósito del 65 aniversario del triunfo de la Revolución Cubana.
Compartimos el video recibido en nuestra redacción con el mensaje de Trino Barrantes, secretario general del Partido Vanguardia Popular, con motivo del 63 aniversario del Instituto Cubano de Amistad con los Pueblos.
La elaboración de piezas de cerámica tipo chorotega es una tradición milenaria que se mantiene viva en las comunidades de Guaitil y San Vicente, en Guanacaste.
La riqueza y calidad de la materia prima para elaborar piezas inspiradas en la cerámica ancestral de Guanacaste augura un buen futuro para las comunidades dedicadas a esta tradición milenaria.
El temor entre los pobladores de que muy pronto se agote el barro con el que producen las piezas de cerámica tipo chorotega ha estado allí presente por años.
Sin embargo, una investigación reciente muestra lo contrario: la región de Nicoya y Santa Cruz, en Guanacaste, es rica en arcillas gracias a la composición del suelo y a las rocas que afloran en los cerros circundantes.
Platos, vasijas, jarrones, ollas, entre otros objetos, se elaboran, desde tiempos precolombinos, con el barro y las técnicas de orfebrería heredadas de nuestros antepasados. Esta cerámica es única en el país y hasta el momento se realiza con materiales naturales.
Ante la poca información existente, el geólogo Diego Guadamuz Vargas analizó la calidad cerámica de los suelos en las cercanías de las dos principales comunidades que mantienen viva la tradición de elaborar réplicas de las cerámicas chorotegas: San Vicente de Nicoya y Guaitil de Santa Cruz.
Los colores tradicionales utilizados en San Vicente y en Guaitil son blanco, ocre (fanta) y amarillo, que los artesanos extraen de rocas arcillosas.
Foto: Laura Rodríguez Rodríguez. UCR.
El trabajo fue presentado para optar por el grado de Licenciatura en Geología en la Universidad de Costa Rica (UCR) y fue publicado este año en la Revista Geológica de América Central.
La confección de piezas requiere mezclar los suelos ricos en arcillas con la arena de iguana, para posteriormente ser pintadas con un pigmento conocido como curiol.
El principal yacimiento de arcilla se encuentra ubicado dentro de una finca privada, razón por la cual las comunidades han tenido limitaciones para tener acceso al barro.
“La finca de donde se ha extraído el barro tradicionalmente pertenece a una familia, que la explotó por cerca de 40 años mediante un permiso de la Dirección de Geología y Minas (del Ministerio del Ambiente y Energía). Al no renovarse la solicitud de permiso, el sitio de extracción se volvió privado y ahora la comunidad debe solicitar un permiso a los dueños de la propiedad para obtener la arcilla”, comenta el geólogo.
Lo anterior ha generado que muchas familias que antes se dedicaban a la alfarería abandonaran esta actividad y que los jóvenes pierdan el interés y busquen otras fuentes de ingresos. También se han suscitado conflictos locales debido a la competencia por conseguir la materia prima.
Maribel Sánchez Grijalba es una de las mujeres líderes de San Vicente de Nicoya que aboga por enseñar el oficio a los niños y niñas y a la juventud para mantener la tradición de la cerámica chorotega.
Guadamuz menciona en su estudio que la falta de arcilla se atribuye a los cambios en el modelo de desarrollo del país desde los años noventa, que en Guanacaste han implicado la compra de fincas, antes dedicadas a labores agrícolas, para fines ganaderos y para la construcción de infraestructura turística.
El aporte de la geología
El investigador aplicó una serie de técnicas geológicas de campo y ensayos de laboratorio para evaluar las arcillas desde el punto de vista mecánico, cerámico y de las propiedades del suelo, con el fin de determinar las características y la calidad de este recurso.
Para tal fin recolectó 44 muestras de suelos y 30 muestras de rocas en puntos cercanos a la llanura aluvial en los cantones de Nicoya y Santa Cruz.
La zona de muestreo abarcó un área geográfica de 164 km2, que comprende parte del territorio delimitado en el 2016 por el sello de Denominación de Origen de la cerámica ancestral.
Este sello garantiza la autenticidad de las piezas producidas por los artesanos de la zona. También funciona como un reconocimiento a las comunidades que han luchado por mantener la milenaria tradición de producir cerámica, señala el investigador.
La materia prima
El barro:
Se obtiene de depósitos de barro de algunas fincas cercanas a las comunidades productoras de cerámica chorotega.
El curiol:
Procede de la cima del cerro San Vicente. Son los pigmentos blanco, ocre (fanta) y amarillo que los artesanos extraen de rocas arcillosas constituidas por óxidos de hierro y sílice para pintar (engobar) las piezas cerámicas.
La arena de iguana:
Es una arena de cuarzo, de grano fino a medio, que se mezcla con la arcilla para darle una mejor consistencia y reducir la plasticidad del material. Aflora en las orillas de algunas quebradas en las comunidades de Florida, San Vicente, Chira y Diría, en fincas privadas. El nombre procede de la asociación con los nidos de las iguanas.
Para que los productos sean distinguidos con el sello deben ser fabricados con los barros autóctonos, ser decorados con trazos geométricos o diseños zoomórficos y con los pigmentos arcillosos naturales. Por lo tanto, no se admite ningún aditivo artificial.
La aptitud cerámica de los suelos ensayados por Guadamuz se basó en los siete tipos de arcillas cerámicas establecidos en la literatura científica, en técnicas como la difracción de rayos X (DRX) y la petrografía microscópica de rocas.
Además, el autor comparó los resultados obtenidos en su estudio con los datos existentes sobre las arcillas que son empleadas por otros ceramistas del país.
Cerámica de calidad
Guadamuz concluye en su estudio que los suelos de los sitios estudiados tienen un gran potencial para producir cerámica de calidad. El 46 % se clasifica por su aptitud de generar cerámica de muy buena calidad (para piezas utilitarias) y el resto posee una calidad intermedia, principalmente para elaborar piezas ornamentales.
Las figuras zoomorfas forman parte de la decoración de las piezas de cerámica tipo chorotega.
Foto: Laura Rodríguez Rodríguez, UCR.
“Los suelos del área de estudio son Vertisoles y Alfisoles, los cuales son buena materia prima para generar cerámicas, debido a que contienen arcillas de la familia de la esmectita y caolinita”, sostiene el geólogo en el artículo científico.
La caolinita y la esmectita son minerales arcillosos que le proporcionan calidad al barro para la producción de piezas cerámicas. La caolinita es una arcilla de color blancuzco de una gran pureza, la cual fue usada por los antiguos griegos para la elaboración de pequeñas esculturas.
La investigación revela además que tanto la arcilla como los otros materiales que se usan en la fabricación de las cerámicas de la Región Chorotega se obtienen a partir de las rocas ígneas (de origen volcánico), ricas en aluminio y sílice, y en rocas sedimentarias, como las areniscas líticas que se encuentran allí.
“Un proceso de alteración hidrotermal puede ser la principal causa para que se acelere la meteorización de las arcillas; es decir, ha ocurrido una alteración química y física de los materiales. Esto sucede en esa zona de Nicoya, en donde hay fallas que han facilitado la aparición de minerales como la caolinita”, agrega.
Carlos Villarreal Leitón, artesano de Guaitil (Santa Cruz) con 42 años de trabajar en el oficio de la alfarería, comenta que a los turistas le gustan más los colores llamativos, como verde, azul y turquesa, aunque estos no son originales de la cerámica chorotega.
En cuanto a las propiedades mecánicas, Guadamuz descubrió que los suelos arcillosos presentan porosidades entre el 51 % y el 61 %, índices de plasticidad del 14 a 29 y que, al cocinarse a 900 °C, experimentan un encogimiento menor al 11 % y una pérdida de humedad inferior al 30 %.
Estos valores son los que describen los ceramistas como propios de las mejores arcillas para alfarería.
La cerámica con las mejores propiedades es densa, ni muy porosa ni muy plástica para que el objeto modelado conserve la forma. “Si es muy plástica, al calentarse la cerámica esta se hincha porque los poros absorben el agua, la pieza se hidrata y se rompe”, detalla Guadamuz.
Sin embargo, la arcilla debe tener cierta porosidad para que el curiol se adhiera al material.
El curiol es un tipo de roca arcillosa que se encuentra en el cerro San Vicente. La trituran y crean un tinte, como hace miles de años, para pintar las piezas. De esta manera extraen el color amarillo, ocre (fanta) y blanco.
El estudio del geólogo de la UCR, Diego Guadamuz Vargas, analizó la calidad cerámica de los suelos en las cercanías de las dos principales comunidades que mantienen viva la tradición de elaborar réplicas de las cerámicas chorotegas, en Guanacaste.
Foto: Laura Rodríguez Rodríguez, UCR.
Según explica Guadamuz, aparentemente todos los suelos útiles, encontrados durante la investigación, proceden de un punto de erosión del cerro San Vicente. Los materiales se esparcieron con la ayuda del agua, así como debido a la gravedad, y enriquecieron los suelos.
El geólogo plantea que una solución al problema del acceso a los depósitos de arcillas sería el establecimiento de un proyecto de Minería Artesanal a Pequeña Escala (MAPE); es decir, que la comunidad cuente con su propio tajo.
“A futuro se busca que haya una declaratoria para la extracción regulada del barro o que las comunidades desarrollen una minería artesanal a pequeña escala”, propone.
Para Guadamuz, la geología cumple un rol social de gran importancia, pues aporta información a los pobladores locales y a las autoridades para la toma de decisiones sobre el futuro y la sostenibilidad de una tradición de nuestros pueblos ancestrales.
El futuro y los retos de las comunidades alfareras
“Mi mama nos daba un pedazo de barro para que nos estuviéramos queditos mientras ella trabajaba. Allí fue donde fui aprendiendo la técnica y después de los 12 años me gustó el trabajo, me gustó tener plata, y entonces empecé a elaborar las primeras piezas”, narra Johnny Sánchez Grijalba, de San Vicente de Nicoya.
La elaboración de artesanía chorotega es un conocimiento que se transmite en las familias. Como Johnny, los habitantes de esa comunidad aprenden este oficio viendo cómo las personas mayores dan forma al barro que extraen de las montañas cercanas.
Todo el proceso es manual, solo se ayudan con una torneta y ceguetas viejas. En 12 días pueden hacer hasta 15 piezas pequeñas. “Ese es el valor agregado que le damos a nuestros productos, están hechos totalmente a mano”, resalta Sánchez.
El proceso requiere tiempo, desde el procesamiento del barro hasta el secado, pulido y pintado de las piezas. La cocción se hace en hornos de barro calentados con leña, explica el artesano mientras trabaja en el taller que su mamá, Maribel Sánchez Grijalba, tiene en su casa.
“Me gusta preservar mi cultura, hablar de mi tierra, de los productos que utilizamos, de la utilidad que se le ha dado a la cerámica generación tras generación”, comenta orgulloso.
Allí trabaja también David Ramírez Zúñiga, quien con pincel en mano pinta lastípicas bandas chorotegas a los platos, las vasijas y las jarras. “Aprendí viendo y haciendo. Tengo cerca de siete años de pintar. Lo más difícil para mí es hacer los dibujos”, dice.
Doña Maribel es una de las líderes que participó en la construcción del Ecomuseo de la Artesanía Chorotega de San Vicente de Nicoya, junto con entidades estatales, locales, privadas y la comunidad.
El beneficio que el Ecomuseo brinda a la comunidad es la exhibición y venta de productos, además de constituir un espacio de valor cultural. También da a conocer la cerámica chorotega a través de una página web.
“A nosotros nos gusta la tradición de hacer cerámica y hemos venido enseñando a los niños en el museo. Se han dado talleres a las mujeres y a los hombres y se les han abierto las puertas a otras comunidades. Al final, la mayoría somos mujeres”, manifiesta la líder.
Algunos de los alfareros han incorporado cambios en la forma tradicional de hacer las piezas, como por ejemplo en los tintes y diseños decorativos, debido a la presión del mercado y a la influencia del turismo.
Carlos Villarreal Leitón, artesano de Guaitil con 42 años de trabajar en este oficio, expresa que “al turista le gustan más los colores llamativos”, como verde, azul y turquesa, que según él los importan.
“Yo prefería quedarme con los colores antiguos, pero si yo quito estos colores verdes no voy a poder vender, porque ya aquí en Guaitil todo el mundo los está usando”, advierte.
Nury Marchena Grijalba, dirigente de la Cooperativa Coopesanguai, indica que están trabajando para crear estrategias de comercialización de los productos.
“La comercialización es la fuente de ingreso de nuestras familias. Ha sido muy duro, porque aquí no viene el turismo. Estamos organizando con el Gobierno la creación de una ruta turística para beneficio de ambas comunidades y otras aledañas”, destaca.
Según el estudio de Diego Guadamuz, en la zona hay cerca de 200 familias dedicadas a la alfarería. Guaitil es la comunidad más expuesta al turismo, en donde la mayoría de sus casas ofrecen cerámica al visitante.
Existe la preocupación tanto en San Vicente como en Guaitil sobre el futuro de esta práctica milenaria. Las generaciones más jóvenes se han ido del pueblo a estudiar o trabajar o no tienen interés en la artesanía.
“Queremos que los jóvenes se involucren en la artesanía para que no se pierda esta cultura, que es un orgullo de nuestros cantones y de nuestro país. No vamos a permitir que esto se venga abajo”, concluye categórica Marchena.
En la fotografía, Johnny Sánchez Grijalba modela una pieza en el taller de su mamá en San Vicente de Nicoya. Foto: Laura Rodríguez.
Patricia Blanco Picado Periodista Oficina de Comunicación Institucional, UCR
La iniciativa cultural de Montes de Oca le extiende una cordial invitación a unirse a nosotros en el evento anual de expresiones artísticas populares, que incluirá la representación teatral para niños titulada «El Bosque de Navidad». La obra teatral «La Piedra de la Felicidad» y un recital poético en honor a Jimena Mora Rivera y Sangra Vega Gómez.
Esta velada teatral está programada para el 20 de diciembre, desde las 6:00 p.m. hasta las 9:00 p.m., en el auditorio del Colegio de Cedros.
Su presencia será muy apreciada. ¡No se lo pierda!
El Gremio 506 y la Benemérita Biblioteca Nacional se complace en invitarle al conversatorio Hablemos de Art Toys, arte, diseño, producción y comunidad con artistas del Gremio 506.
La actividad se realizará el martes 19 de diciembre a las 3:00 a.m. en la Benemérita Biblioteca Nacional. También se transmitirá por el Facebook Biblioteca Nacional Costa Rica https://www.facebook.com/bibliotecanacional.mcj.cr/
La Benemérita Biblioteca Nacional, la Capilla de Adoración Santa Margarita y las Religiosas Oblatas al Divino Amor, se complacen en invitarle a la “Posada”.
La actividad se realizará el 21 de diciembre a las 2:30 p.m. en la Benemérita Biblioteca Nacional.