Ahorro

Dr. Eliseo Valverde Monge

 

Cuando yo tenía cinco años, papá me dijo: “te voy a regalar un colón” y puso una cajita en mi mano llena de moneditas de cinco céntimos. ¡Qué felicidad! Luego preguntó: y ahora, qué harás con tanto dinero, yo contesté que compraría melcochas de menta. Entonces, me aconsejó comprar una por día y que guardara lo que iba sobrando, así tendría para muchas melcochas más. Al finalizar la escuela primaria a los doce años, conseguí trabajo y ganaba 25 colones por semana. El primer pago lo lleve a papá quien preguntó: “¿qué vas a hacer con tanto?”, contesté que compraría una bicicleta. Sí, dijo, me parece bien, pero te aconsejo una libreta de ahorros con el banco donde guardarás una parte de los pagos semanales hasta completar el valor de ella. Así lo hice. Al finalizar diciembre, me regalé la bicicleta. Aprendí que ahorrar es importante. Ahora mi consejo es que si uno gana cinco colones, debe gastar cuatro y ahorrar uno, no gastar seis, pues es esta y no otra, la única forma de vivir con los propios medios sin solicitar dinero prestado, como viven muchas personas y, hasta el Gobierno que no se queda atrás. Para endeudarse, lo único que vale la pena es para comprar casa propia, claro, siempre respetando el alcance de sus ingresos. Si las personas aceptaran los buenos consejos, seguiríamos toda la vida siendo felices y hasta el Gobierno podría dejar de hacer tortas. Endeudarse mientras la fiesta sigue al paso de cumbia, la verdad, es una tontería que está pasando la factura. Hay quienes quieren vivir al día irresponsablemente, sin siquiera tener un nicho adonde enterrarse, pero sí, todos con carro y detrás de las “bandas roqueras” que vienen al país a hacer escándalos y a llevarse los ahorros.

La juventud, incluyendo algunos viejos, se pasa días y horas a la intemperie esperando ver a estos conjuntos de latas y trompetas. Luego, drogados, embrutecen hasta caer enfermos en los hospitales. Los padres también son responsables por ser permisivos y no ser más estrictos con los hijos a quienes también les permiten los bacanales de guaro y drogas en las fiestas del colegio. El país está colapsando entre los malos gobiernos, el desorden y la desorganización social. Con la irresponsabilidad fiscal y nosotros con el enorme despilfarro, terminaremos todos pagando los platos rotos. Todo lo que está sucediendo en el país es preocupante. La brecha social se cerrará cada vez más y no habrá dinero en el futuro ni para construir infraestructura que tanto necesitamos, con carreteras destrozadas, puentes en mal estado, escuelas y colegios deteriorados, cárceles hacinadas, etc. ¿A cuánto ascenderán las deudas netas del Gobierno y del sector público en este país?, estoy seguro que por ahora, no se sabe ni cuánto significa en el PIB. Se nos está acabando el dinero, no sabemos cómo lo perdemos, porque lo estamos tirando sin saber en qué se gasta. El país organizado, pujante que heredamos, ha comenzado a desvanecerse. Sin buenos consejos y con malos ejemplos, en medio de tanta apatía, nos iremos en el despeñadero junto con los irresponsables que aún siguen aplaudiendo y alabando a los Gobiernos desastrosos de los últimos años. Les pregunto: ¿dónde están los beneficios y la justificación de la deuda de los últimos años? Probablemente vamos a tener que ir a buscarlos. Por ahora, el dinero al mejor estilo de “fuman-chú”, se ha ido sin saber por dónde…

 

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