Inició cumbre CELAC-UE entre temores y desafíos
Lic Rafael A. Ugalde Q.*
Periodista, abogado y notario por la U.C.R.
La IV Cumbre de los Estados Latinoamericanos y Caribeños junto a la Unión Europea (CELAC – UE) arrancó este fin de semana en la caribeña ciudad colombiana de Santa Marta, a más de 700 kilómetros de Bogotá, entre un innegable ambiente de guerra regional, un prometedor futuro a muy corto plazo y el declive de la que fue la primera potencia militar y económica del mundo.
El importante encuentro comienza con una amplia agenda de temas que abarcan desde las nuevas tecnologías, el ambiente, el intercambio comercial, la autodeterminación, la paz, las migraciones, el derecho de los migrantes, hasta cuestiones de género. El conclave se extenderá hasta el próximo 10 de noviembre con el anuncio de la próxima sede y un resumen de los acuerdos alcanzados más relevantes, precisaron voceros de la cancillería anfitriona.
Periodistas independientes acreditados en Santa Marta para dar cobertura a esta IV Cumbre recordaron que la misma viene precedida por fuertes fricciones entre los gobiernos encabezados por Luiz Inacio Lula, de Brasil, Gustavo Petro, de Colombia, y Donald Trump, de Estados Unidos, por la militarización del Caribe regional y el asesinato hasta ahora de 67 personas señaladas de narcoterroristas por la Casa Blanca.
Asimismo, enumeran el sonado fracaso de la X Reunión denominada de las Américas, promovida intensamente por el secretario de Estado norteamericano, Mario Rubio, prevista para celebrarse el próximo mes de diciembre en República Dominicana y suspendida abruptamente hasta nuevo aviso.
Los presidentes de México, Claudia Sheinbaum, Lula y Petro se negaron a asistir a la Cumbre de las “Américas” por la arbitraria decisión de la Organización de Estados Americanos (OEA), actuando históricamente como una especie de caja de resonancia de los intereses estadounidenses, de excluir de este importante conclave a Cuba, Nicaragua y la República Bolivariana de Venezuela.
Las presiones de Rubio contra Europa Occidental y los países controlados por la OEA no se hicieron esperar. Desafiando, sin embargo, estos estrujamientos, sí asistirán a Santa Marta el presidente español, Pedro Sánchez, el presidente del Consejo Europeo, António Costa, y el primer ministro de Portugal, Luís Montenegro; asimismo, según confirmó la cancillería colombiana a la prensa local, estarán presentes los jefes de Gobierno de Belice, Finlandia, Croacia y República Checa.
Identificados, en cambio, plenamente con los intereses estadounidense dentro de la Organización del Tratado del Atlántico Norte (OTAN), “el presidente francés, Emmanuel Macron, el canciller alemán, Friedrich Merz y la presidenta de la Comisión Europea, Ursula von der Leyen”, confirmaron su ausencia en la cita colombiana, consignó la agencia de noticias española EFE.
Portavoces del Gobierno alemán matizaron el servicio prestado a Rubio, indicando que la ausencia “responde a cuestiones de agenda y a la limitada presencia de otros jefes de Estado y de Gobierno”, mientras fuentes del Palacio del Elíseo indicaron que “no está prevista” su visita (de Macron) a Santa Marta, agregó Efe.
Y sí todo lo anterior es insuficiente, esta Cumbre de la CELAC tiene como telón de fondo, según varios diarios norteamericanos, la más grande base militar de Estados Unidos en el continente nuevamente recobrará su actividad, después de 20 años en desuso.
Mientras tanto, la isla de Trinidad y Tobago está “tomada” como centro de operaciones castrenses contra la revolución bolivariana, acaba de denunciar la cadena de noticias Telesur y Diosdado Cabello, actual ministro del Interior y Justicia venezolano.
Cabello, en su tradicional programa el “Mazo dando”, fustigó a la que llamó “oligarquía acabada” y “desesperada”, cuyos principales representantes “no volverán” nunca más a gobernar Venezuela. Piden la intervención estadounidense para “robarse” los recursos del país, pero si los invasores entran, tengan la certeza que nuestro pueblo se defenderá con todo, advirtió
La cadena estadounidense de noticias CNN en español, citando a la televisión local, informó que la nación bolivariana cuenta entre su arsenal con los temidos cazas Su-30, los tanques T-72, los misiles antiaéreos S-300, Pechora y Buk, y los portátiles Igla-S, e incluso los fusiles de la familia Kalashnikov, todos fabricados en Rusia desde la época soviética, precisó.
La conservadora cadena de noticias, de inmediato alardeó que, Estados Unidos tiene sobre el Caribe regional casi una decena de buques de guerra, incluyendo un crucero, tres destructores, buques de asalto anfibio —con una unidad de infantería de Marina a bordo— y un submarino. Además, 10 cazas furtivos F-35 fueron desplegados en Puerto Rico.

Es una fuerza formidable, enfatizó, apenas una fracción del poder militar en esta operación militar del Comando Sur, liderada por unidades de la Armada.
Esta visión también fue divulgada ampliamente por periodistas obligados en octubre pasado a firmar un contrato con el Pentágono para ceñirse a informar exclusivamente lo que se les da en boletines informativos, al mejor estilo de Josep Goebbels, entusiasta promotor de la propaganda del Tercer Reich de Hitler desde 1933 a 1943.
Como se recuerda, el Caribe regional, conocido como una zona de paz, se militarizó por la administración Trump desde el pasado 2 de septiembre para acabar, según la versión oficial, con el flujo de drogas ilegales introducidas en la gran Unión.
Sin embargo, tanto el gobierno colombiano, como el venezolano, cuyo país bolivariano no tiene costa en el Pacifico, señalan que solo el 10% de los cargamentos de drogas ilegales utiliza el Caribe para transportar marihuana y cocaína a Estados Unidos; en tanto especialistas en estadísticas y actividad bancaria estadounidenses coinciden en que anualmente los carteles locales dentro de la Unión lavan anualmente $ 700 mil millones en los bancos del país.
Como sí lo anterior no bastase para Trump, resulta ahora que la Fundación Soros y la parte del complejo militar que llevó tuvo en la presidencia a Barack Obama, perfilan desde ya como eventual precandidato presidencial del Partido Demócrata a quien eligieron recientemente alcalde de Nueva York Zohran Mamdani.
El elegido por la cosmopolitana ciudad neoyorquina su primer discurso estuvo matizado profundamente por paradigmas reformistas socialdemócratas de “izquierda”, con los limitantes propios de como conceptualizan los norteamericanos estos términos junto a otros como progresistas, comunistas, etc.

El joven Mamdani reiteró que su programa gubernamental contempla contratar miles de profesores adicionales, reducir el gasto burocrático superfluo y restaurar los servicios en los complejos habitacionales públicos. Se trata de «una era en la que dejamos atrás lo viejo para entrar en lo nuevo».
El “marketing” de Mamdani empezó ya a venderse como un joven que promete ser la cabeza pensante de todos aquellos que hacen posibles “cambios” y “revoluciones” a base de whatsapasos y Facebook, desde el Río Bravo, hasta la Patagonia.
Así, ninguna de las tres anteriores Cumbres entre esta región y una fragmentada UE, desesperada por minerales, tierras raras y petróleo baratos, había transcurrido rodeadas por un ambiente tan enrarecido, en razón de un decrépito imperio que hace aguas y el llamado “neomonroísmo”, como diría el historiador ecuatoriano, Juan J. Paz y Miño Cepeda, quien define el capitalismo latinoamericano, a manera de ejemplo, como “tardío” y “periférico”.( https://redh-cuba.org/2025/11/america-latina-entre-la-multipolaridad-y-el-neomonroismo-por-juan-j-paz-y-mino-cepeda/).
Desde esta perspectiva, no pareciera difícil conciliar en esta IV cumbre CELAC – UE temas propios de un capitalismo periférico tardío, como el “desarrollo sostenible”. En este punto no hay problemas y es cuestión de ajustar intereses multinacionales y criterios.
Problema sería, en cambio, que alguien saliera en esta cumbre al rescate de la Amazonía o cualquier otro recurso natural en Nuestra América sobre las bases de la “ecoleninismo” inaugurada y promovida desde 1917 por los trabajadores soviéticos, cuando Lenin enfrentó a los revisionistas y mencheviques de entonces y decretó la nacionalización absoluta del suelo, subsuelo, flora y fauna en los Urales, bajo los principios de Marx y Engels de que la Naturaleza no le pertenece a ningún capitalista y es un bien común, cuyos dueños son todas las siguientes generaciones.
Por otra parte, la creciente demanda de energía en la región, como parte del proceso de globalización, hace que esta necesidad fuerce la integración energética, junto a la diversificación de alianzas, protección e integración de migrantes, refugiados y desplazados.
Otros temas analizados incluyeron la transición energética justa, la digitalización inclusiva, la seguridad alimentaria, la autosuficiencia sanitaria y la equidad de género, todas cuestiones dentro de la llamada agenda 2030 adoptadas por Naciones Unidas en 2015.
Sin embargo, el asunto político y militar palpitante, con amenazas estadounidense de invadir a Colombia y Venezuela, el grosero e ilegal bloqueo comercial y financiero contra Cuba y la influencia cada vez más evidente de los llamados BRICS como opción de un mundo multilateral, sin duda alguna enfrentará a quienes defenderán en esta cumbre un orden más justo e independiente versus los “libertaristas”, que ven todavía posible sacar del fuego las castañas a un decrépito imperio.
*Miembro activo del Comité Bolivariano de Solidaridad con los pueblos Yamilet López
