Sin Ciudadanía No hay Democracia

Por Tribunal de Honor y Ética-Colegio de Periodistas

Costa Rica ha entrado en una prolongada crisis de valores, pero su Estado de Derecho sigue incólume, su institucionalidad está intacta, funciona, nos permite convivir y también desarrollarnos como Sociedad. Ciertamente, en las últimas décadas, las transformaciones mundiales, regionales, locales vienen permeando el sentido de ser y pertenecer. Hay nuevos desafíos, retos y demandas, son tiempos nuevos y complejos, donde emergen actores sociales, gremiales y corporativos, cuyas exigencias, a veces desbordan, las soluciones que el Estado brinda, y esto obliga a repensar el Estado.

Los alarmismos, fundamentalismos y llamadas a subvertir el orden público, suscitados en nuestro país en las últimas semanas no son propios del ser costarricense, ni de su idiosincrasia. Actos de violencia como las suscitadas para perpetuar el pánico en la sociedad van en contra de toda una tradición democrática en donde el ciudadano tiene el marco jurídico, las instituciones que velan por éste, las herramientas y los mecanismos para ejercer su ciudadanía plena. No debemos dudar de que, la democracia participativa está protegida y garantizada.

Costa Rica, no debe ser escenario de actos vandálicos vestidos de movimientos sociales, tampoco se debe aceptar la alteración del orden público y de la tranquilidad ciudadana con poses anárquicas, voces disonantes y extremistas, menos aún amenazas y acciones sediciosas, tampoco es aceptable la recurrencia a recursos violentos como mecanismos para responder al Estado, a las leyes ni a las instituciones.

De igual forma, cabe señalar la iniquidad moral que asalta las redes sociales (Internet) de grupúsculos amparados en el anonimato para desacreditar a funcionarios e instituciones, sin medir el grave daño, que estas tácticas provocan en la credibilidad de la ciudadanía, en las instituciones, en los valores de las personas y que buscan hacer creer que representan el descontento general. No, ustedes no nos representan.

Con la convicción de que el disenso y las diferencias son parte fundamental en toda democracia, el Tribunal de Honor y Ética del Colegio de Periodistas de Costa Rica hace un respetuoso llamado a los diversos sectores del país para intensificar el diálogo nacional en busca de acuerdos que nos permitan seguir construyendo una sociedad sustentada en valores, de respeto a la libertad de opinión, de tolerancia activa, de crítica constructiva y, en general, la sociabilidad humana donde la Ciudadanía es la Democracia.

 

Enviado por M.S.c Efraín Cavallini Acuña, Presidente Tribunal de Honor y Ética COLPER.

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