Hombres que abrazan el cuido: campaña invita a transformar la corresponsabilidad en los hogares
La campaña “Rompiendo el molde: hombres que abrazan el cuido”, impulsada por MenEngage Costa Rica, MenEngage América Latina y WEM Costa Rica, propone un cambio cultural urgente: que los hombres asuman de manera consciente, activa y cotidiana las tareas de cuidado, tradicionalmente asignadas a las mujeres. A través de una serie de mensajes pedagógicos y visuales, la iniciativa cuestiona la división sexual del trabajo, promueve relaciones más igualitarias y ofrece orientaciones prácticas para ejercer un cuido responsable, empático y libre de violencias.
La campaña parte de un reconocimiento histórico: los roles de género asignaron a los hombres el papel de “proveedores”, relegando el cuido emocional, cotidiano y doméstico a las mujeres. Esto generó sobrecarga, desigualdad y una gran deuda en la corresponsabilidad. Frente a ese escenario, la iniciativa afirma que “los hombres también podemos cuidar” y que este cambio es hoy una posibilidad real.
Uno de los ejes centrales es redefinir lo que significa cuidar. No se trata de “ayudar”, sino de hacerse cargo: participar activamente en las tareas del hogar, en la crianza, en el acompañamiento emocional y en la sostenida distribución del trabajo reproductivo. El cuido implica también escucha, empatía, expresión emocional, paternidad activa y relaciones sin control ni poder.
La campaña destaca que el cuido beneficia a todas las personas involucradas:
— mejora la salud mental,
— reduce la violencia,
— fortalece los vínculos,
— disminuye la carga sobre las parejas,
— fomenta la justicia social.
Además, resalta que el cuido es una forma de amar que transforma y nos transforma. Al asumirlo como un ejercicio cotidiano y compartido, se construyen relaciones más equitativas y entornos familiares más saludables.
Las piezas gráficas incluyen también frases sencillas que expresan cuido y facilitan la comunicación afectiva entre hombres y sus círculos cercanos: “estoy aquí”, “quiero escucharte”, “¿qué puedo hacer por ti?”, “necesito apoyo”. Son recordatorios de que cuidar comienza por hablar con claridad, sin herir, y por escuchar con atención.
La iniciativa invita a romper los moldes aprendidos, asumir responsabilidades compartidas y construir masculinidades más diversas y humanas, donde el cuido sea parte fundamental de la vida cotidiana.






