Ir al contenido principal

Etiqueta: EUA

Otro día sin inmigrantes

Por Memo Acuña
Sociólogo y escritor costarricense

La banda sonora de la producción “Otro día sin mexicanos” filmada en 2004 y dirigida por Sergio Arau, incluía una de las canciones más críticas compuestas sobre el tema migratorio, creada por el grupo mexicano Molotov.

En su letra se advertía el desencanto por el trato recibido por las personas migrantes mexicanas en Estados Unidos. Uno de sus fragmentos decía:

“Si tuvieras tú que esquivar las balas de unos cuantos gringos rancheros, ¿les seguirás diciendo: Good for nothing Wetback “si tuvieras tú que empezar de cero?”

La producción de bajo presupuesto abordaba una hipotética desaparición de todos los migrantes de origen hispano en el Estado de California y el impacto que producía en la economía, las interacciones cotidianas y los servicios realizados por esta población.

Mientras escribo esta columna la población migrante en Estados Unidos organizó una jornada parecida. Esta vez se convocó a no consumir productos estadounidenses, no ir al trabajo ni enviar a los hijos a las escuelas.

Me resulta inevitable no pensar en la fuerza de esta acción como acto de recibimiento de una ciudadanía activa e importante en ese país. Pero también pienso en el aporte significativo de una población que a menudo es colocada en niveles inferiores de valoración.

Durante los primeros meses de pandemia y dada la prohibición de entrada a Costa Rica de población proveniente de Nicaragua y Panamá, las autoridades del sector cafetalero costarricense encendieron las voces de alarma por la falta de manos para la corta del café de ese periodo, que dicho sea de paso sería concebida como uno de los momentos históricos en la producción del grano.

Ante la ausencia de las inmigraciones laborales, se acudió a una convocatoria para la población costarricense. Se esperaba un aproximado de 70.000 personas. Solo acudió la mitad.

Esta situación contingente demostró la relevancia del aporte de la población inmigrante en la economía costarricense. También en Costa Rica ante su ausencia muchas actividades esenciales se desplomarían sin duda.

En el actual contexto antiinmigración que campea en Estados Unidos, la convocatoria a un día sin inmigrantes es absolutamente necesaria la acción organizada pareciera ir levantando una respuesta frontal. Ni el miedo, ni la xenofobia, ni el racismo ni la exclusión son muros para detener esto que parece ser una reivindicación política contundente.

Una segunda parte de la producción cinematográfica de 2004 esperaba ser estrenada en 2012. Eso nunca sucedió. Sin embargo, estamos ante una de esas ocasiones en que la realidad supera a la ficción.

Esperemos por sus resultados. Por sus impactos. Por sus efectos en una sociedad que deberá entender sí o sí el alto valor cultural, económico y político de una población que ha construido con su aporte lo que Estados Unidos es hoy en día.

La juventud lo exige

Por Marlin Oscar Ávila

Marlin Óscar Ávila.

Es completamente vergonzoso ver a un grupo de jóvenes de ambos sexos ser expulsados de los Estados Unidos de Norte América, encadenados de pies y manos, atados unos a otros como si fuesen delincuentes. Todo mundo sabe que son jóvenes que emigran de sus comunidades en búsqueda de un mejor futuro.

Los grandes medios se niegan a hablar de la fuerte decaída económica, social y moral que está teniendo ese país, otrora eje de la economía mundial. Por esto nuestra juventud sigue viendo hacia el norte, sin ni siguiera detener su vista en la gran nación mexicana, que se está convirtiendo en una potencia mundial.

El poder económico y de oportunidades de EUA se está convirtiendo en un mito. El migrante no deja de ser explotado, con los más bajos salarios, por el hecho de considerarlo indocumentado. Los empleadores lo prefieren indocumentado porque así lo somete a sus caprichos. Esa situación de vulnerabilidad le hace vivir sometido y constantemente en un estado de miedo de ser deportado, de ser calificado terrorista por ese gobierno de extrema derecha.

Nuestros gobiernos en Iberoamérica si deben reunirse y unirse para construir una alternativa regional. La voz cantante la ha tenido la presidenta de Honduras, Xiomara Castro, como presidenta pro tempore de la CELAC, no obstante, su última convocatoria está siendo boicoteada por la derecha regional. Los ciudadanos iberoamericanos debemos apoyar esa convocatoria, para discutir los nuevos proyectos del gobierno estadounidense y construir una estrategia regional que le haga contrapeso con una visión de paz, humanista y de solidaridad entre los pueblos pobres.

Todos sabemos que el presidente D. Trump, representa la oligarquía gringa y las fuerzas del neofascismo en crecimiento mundial. El pueblo centroamericano no se puede quedar inerte viendo cómo se van empobreciendo los pueblos nuestros, concentrando en el uno por ciento (1%) las riquezas de todos y todas.

No debemos permitir que la campaña de la gran empresa contra la presidenta Xiomara tenga éxito alguno.

Los que siempre ganan

Federico Sanri

Las dos narrativas sobre la crisis diplomática entre Estados Unidos y Colombia, aunque contrastantes, coinciden en un punto: ambas presentan a un gran vencedor. Desde el lado de la maquinaria político-económica tradicional, reflejada principalmente en los medios de comunicación masivos, la responsabilidad está clara: no es Trump quien debe asumir la culpa por enviar a los migrantes colombianos como si fueran criminales, amarrados de pies y manos, sino Petro, por no haberlos recibido en esas condiciones. Además, circula la versión de que el presidente colombiano había dado su autorización, pero se arrepintió repentinamente. No faltan quienes sugieren que, a esa hora, Petro estaba bajo los efectos del alcohol, lo cual habría influido en su decisión de tuitear a las 3:30 a.m. la orden de no permitir el aterrizaje de los aviones.

Trump, en esta versión, amenaza con imponer sanciones, retirar visas, cerrar embajadas y llevar a Colombia al «infierno», mientras Petro cede sin mayores condiciones, aunque con una estrategia meramente verbal, hablando de dignidad y otros temas de su “abanico populista”. En este contexto, Petro es presentado como irresponsable. Efraín Cepeda, presidente del Senado, se encargó de señalar a quienes lo quisieron escuchar que Petro había jugado con el empleo de millones de colombianos y, además, se estaba «abrazando al régimen de Maduro». Así, la derecha resume la situación: el país está en manos de un irresponsable, de un loco que quiere pelear contra lo imposible.

En esta narrativa, la conclusión es clara: Trump gana, Petro pierde.

Sin embargo, en esta disputa por la verdad, donde los medios tradicionales han mostrado una creciente falta de imparcialidad, tanto la prensa alternativa como figuras cercanas al presidente han construido una narrativa completamente diferente. Según esta, el verdadero culpable de la crisis es Trump, por sus políticas discriminatorias y xenofóbicas, además de su arrogancia al intentar colocar a todos los países de la región a su servicio y pisotear la dignidad de los inmigrantes deportados. El mensaje de Trump es claro: «Nosotros no los necesitamos: ustedes nos necesitan». Desde la doctrina Monroe, que proclamaba que «América es para los americanos», se ha revelado que, en realidad, América es para los norteamericanos, dejándonos a nosotros fuera de la definición. Por eso, el «sueño americano» no incluye viajar a Machu Picchu.

Desde esta perspectiva alternativa, se muestra a un Petro lúcido, que fue engañado y no sabía que los colombianos serían deportados en esas condiciones. Petro nunca dijo que no aceptaría las deportaciones; simplemente revisó las condiciones bajo las cuales se aceptarían. Se le ve como un líder que representa un sentir regional y una dignidad histórica que ha sido pisoteada tantas veces que ya nadie recuerda lo que es una relación sin rodilleras con el coloso del Norte. Por eso, el presidente colombiano ha decidido que no aceptará aviones militares, sino que será Colombia quien enviará su propio avión a recoger a los deportados.

Por otro lado, cuando Trump amenaza con subir los aranceles, Petro responde de manera similar. No se amilana. En un paralelo con Samper (cuando con orgullo dijo que no necesitaba visa para ir a Chaparral), Petro casi que renuncia a volver a Norteamérica si no es para ir a los barrios populares. Finalmente, recurre y se ampara en símbolos vernáculos, como la ancestral orfebrería de Chiribiquete, para demostrar que también se siente orgulloso de sus raíces y que no necesita la bendición del imperio.

Según esta narrativa, el verdadero perdedor en esta disputa es Trump, quien tuvo que retroceder. Petro 1, Trump 0.

Los colombianos que siguen informándose a través de los medios tradicionales están convencidos de que el presidente colombiano perdió la cordura y esperan el pronto retorno de la clase política tradicional, que no pretende ni promete cambiar lo que ya es. «Si esto es el cambio, dejémoslo así y volvamos a lo seguro». Regresa el terror en las voces de miedo y los ojos que insisten en ver todo en blanco y negro, desde ambos extremos.

Que ambos lados reclamen la victoria no es sorprendente; lo realmente interesante será determinar quién ganó, una respuesta que solo el mediano y largo plazo podrán brindar. Por ahora, vemos las imágenes de los compatriotas recién deportados, quienes nunca se sintieron tan bien atendidos ni habrían sido recogidos en avión presidencial en un gobierno que no fuera de corte progresista. Que hayan sido recibidos en condiciones dignas es algo que no gusta a muchos; ya vislumbro investigaciones en los medios masivos sobre cuánto le costó al país el viaje del avión presidencial, mientras que Estados Unidos los devolvía sin gastar un solo peso. Incluso se abrirá el debate sobre si el avión presidencial puede ser usado para transportar inmigrantes ilegales como si fueran héroes: ya lo veremos.

Sin embargo, por primera vez en mucho tiempo, vemos cómo alguien le dice «no» a Trump. Falta ver si será la última. Una de las formas de entender el ganador del pulso será si alguien más en la región sigue el ejemplo de Petro.

Esta situación, sin duda, se presentará como una de las nuevas estrategias para introducir un escenario político polarizado de cara a las próximas elecciones, cuando se recordará este momento que ocasionó un pánico apenas lógico en un país que vende 13.100 millones de dólares anuales a la potencia del Norte (un 30% del total de nuestras exportaciones).

Es un estreno que parece descomunal para una recién nombrada Laura Sarabia; uno se pregunta, con razón, qué tan capacitada está para el cargo. Veremos cómo se manejará una crisis que aún no ha terminado ni comenzado del todo. Por ahora, con las declaraciones de maltrato que se conocen por parte de los inmigrantes colombianos que van llegando y denuncian los abusos de las autoridades del gobierno norteamericano, me gustaría pensar en un empate. Un empate en el que, sin embargo, todos se consideran ganadores.

Cada quien quédese con el suyo al final de este artículo.

La dignidad desencadenada

Por Memo Acuña
Sociólogo y escritor costarricense

Hace algunos años fui invitado por la querida Cynthia Loría a observar la llegada de vuelos de personas deportadas al aeropuerto La Aurora, en Ciudad de Guatemala.

Cynthia es una costarricense radicada en aquel país desde hace años y labora para organizaciones que abordan el tema migratorio a nivel regional.

Siempre le estaré agradecido por la oportunidad que tuve en esa ocasión de constatar la forma como regresan estas personas. Muchas de ellas con la ilusión destrozada, sin esperanza y sin cordones en sus zapatos.

Esto último me pareció curioso y al preguntar la razón, se me respondió que es para evitar algún episodio de auto flagelación durante el vuelo de regreso.

Siempre pensé en la dignidad de quienes ven su sueño truncarse por alguna razón. En ese concepto y lo que implica en una hora de la humanidad en la que pareciera no tener ningún valor ya.

Lo pienso ahora al observar las imágenes de los primeros deportados provenientes de Estados Unidos bajando las escalinatas de un avión recién aterrizado en un aeropuerto en Brasil.

Como si fueran presidiarios condenados, son encadenados en sus manos y pies y así hacen el vuelo, así los obligan a caminar por la pista de aterrizaje mientras esconden sus caras para que la prensa no los capte en su vergüenza, así llegan a sus países de origen.

El odio se ha instalado como bandera.

Y provoca escenas como esta y otras más que se repetirán a lo largo de América Latina, adonde arrojarán a las personas migrantes como si fueran delincuentes o seres humanos descartables.

Temo una escalada de violencia xenófoba. Pero también siento venir la respuesta autónoma de quienes se niegan a encadenar su dignidad.

En esto acompaño las reflexiones de mi querida lectora de tesis doctoral Amarela Varela, que insiste en reconocer la fuerza de la migración y de quienes se movilizan por encima de la pornoindustria de la desafección.

Una manera de cambiar el enfoque victimizante, es reconocerles como sujetos activos y protagonistas de su destino. Apelo a ese enfoque y actitud. Ahí empieza el camino para que su respuesta sea efectiva y contundente. Ahí empieza su recibimiento como lo que son: seres humanos.

Ante gobierno de Trump nuestras organizaciones sociales y económicas deben fortalecerse

Marlin Óscar Ávila.

Por Marlin Oscar Ávila

Ver a Trump y su esposa en la primera banca de una capilla donde una obispa le solicita que sea menos fuerte contra los migrantes a quienes va a expulsar desde el primer momento de ejercer, por segunda vez, como presidente de la nación más poderosa militarmente del mundo, fue interesante. Cualquiera se pregunta si él piensa y acepta ser menos poderoso que un ser supremo en el universo, aunque no dudamos que lo sienta así.

Sabemos que considera a los más altos tecnócratas del mundo, superiores a los mismos miembros de su propio gabinete de gobierno.

El segundo gobierno de Donald Trump, ideológicamente, es un movimiento hacia la derecha de los gobernantes de EUA de las últimas décadas. Ya derogó la mayor parte de los decretos ejecutivos de su antecesor Joe Biden y se manifiesta dispuesto a construir una nueva “América para los americanos”. Ahora mismo está expulsando a los migrantes que él considera delincuentes o criminales. Aun cuando él es descendiente de padre alemán y madre escocesa, se muestra como alguien que no tiene descendencia extranjera, algo así como un descendiente de indígenas estadounidenses que cruzaron el estrecho de Bering hace miles de años.

Como ha sucedido en el pasado con todo gobernante de los EUA, su estilo, mecanismos e ideología para gobernar, influye en nuestra Iberoamérica y nuestros gobiernos. Sin embargo, la presidenta de México, Claudia Sheinbaum, una científica, ha establecido pautas de lo que puede ser una relación de mutuo respeto. Así nuestros gobernantes tienen la pauta para darse a respetar en su dignidad y hacer respetar la autonomía de nuestras naciones. Después de estos ejemplos dados por México, sería una vergüenza que apareciera algún gobernante en nuestra región, sometiéndose a los dictados de Trump.

Tenemos una diversidad amplia de gobiernos en los cuales debería existir unión e integridad para hacer de Iberoamérica una región próspera, aprovechando sus múltiples recursos naturales, en particular los países que tienen en su suelo las tierras llamadas raras.

Todavía no hemos visto el sometimiento de los gobernantes centroamericanos a los decretos y dictados del magnate Donald Trump, tampoco nuestros pueblos verían en sus dictados el beneficio que les puede traer lo que él pregona, excepto a algunos grandes empresarios inversionistas en exportaciones hacia los EUA. No obstante, la demanda estadounidense está en decaída por la creciente depresión económica de esa economía.

La esperanza está puesta en el mercado oriental, principalmente China. No debemos sorprendernos si el gobierno de Trump venga a concretar la caída de la economía estadounidense. Desde luego, esa caída puede afectar toda Iberoamérica, dependiendo de nuestra preparación y resistencia. La preparación implica una ampliación en nuestro comercio y diversificación en las relaciones económicas, políticas y sociales. Por esta razón el fortalecimiento de nuestras organizaciones sociales y económicas debe ser una prioridad del desarrollo.

Frente a la arremetida imperialista, Cuba vencerá

Declaración del Gobierno Revolucionario

Arremete el presidente estadounidense Donald Trump contra Cuba desde el primer día y sin ningún pretexto. La decisión de restablecer las férreas medidas de guerra económica contra Cuba, que su predecesor eliminó solo días antes, es demostración de la agresividad del imperialismo estadounidense contra la soberanía, la paz y el bienestar de la población cubana. Entre ellas está la inclusión de nuestro país, nuevamente, en la lista arbitraria de Estados que supuestamente patrocinan el terrorismo, designación que evidencia un desprecio absoluto a la verdad.

Esto no sorprende. La declaración del Ministerio de Relaciones Exteriores del 14 de enero ya advertía: “que el gobierno de ese país podría revertir en el futuro las medidas hoy adoptadas, como ha ocurrido en otras ocasiones y como muestra de la falta de legitimidad, ética, consistencia y razón de su conducta contra Cuba”. También afirmó que “los políticos estadounidenses no suelen detenerse en encontrar justificación…”. Así se gobierna en ese país.

Trump ha interpretado su llegada al poder como la coronación de un emperador. Su ambición abarca, solo para empezar, la conquista de Canadá, la usurpación de Groenlandia, el cambio de nombre del Golfo de México y el despojo a los panameños de su canal. La hegemónica Doctrina Monroe y el Destino Manifiesto, que a golpe de sangre y fuego se impusieron en América Latina y el Caribe, son la guía del nuevo equipo de gobierno.

A él se asocian los grupos y políticos que han hecho de la agresión a Cuba un modo de vida, han lucrado durante décadas del negocio anticubano y comparten hoy la embriaguez del nuevo mandatario. Todos tienen una alta responsabilidad en la difícil situación económica del país y en el aumento del flujo migratorio de Cuba hacia los Estados Unidos.

Este nuevo acto de agresión del gobierno de Estados Unidos contra el pueblo cubano muestra, una vez más, el objetivo verdadero, cruel, despiadado de estas y tantas otras medidas de cerco y asfixia, que con fines de dominación se aplican contra Cuba. Constituye la reacción de impotencia frente a la incapacidad de doblegar nuestra voluntad y ante el respeto, simpatía y apoyo que concita la Revolución entre los pueblos del mundo.

El bloqueo económico, su reforzamiento y las nuevas medidas agresivas continuarán pesando, con efecto muy dañino, sobre nuestra economía, el nivel de vida, las potencialidades de desarrollo y legítimos sueños de justicia y bienestar del pueblo cubano, como ha sido en los últimos años.

No nos van a desviar del rumbo socialista, del empeño en recuperar la economía, de fomentar la mayor solidaridad, creatividad, talento, espíritu de trabajo, y de defender como un bastión inexpugnable la libertad, la independencia, la soberanía y el privilegio de construir un futuro sin injerencia extranjera.

El pueblo de Cuba agradece las múltiples expresiones de respaldo y solidaridad recibidas de todas partes del mundo, de gobiernos, cubanos residentes en el exterior, parlamentos, organizaciones políticas, religiosas, sociales y de figuras políticas de Estados Unidos y de otros países.

Nadie debe llamarse a engaño. El pueblo cubano se expresó con clara determinación y fuerza en la marcha del pasado 20 de diciembre. Aquí prevalece la convicción de que CUBA VENCERÁ.

PATRIA O MUERTE, VENCEREMOS.

La Habana, 21 de enero de 2025

(Cubaminrex)

2025, un escenario para construir confianza y liderazgo de Estado… (II)

Caryl Alonso Jiménez

De la crisis migratoria a escenarios y teorías futuras, ¿Coyunturas en perspectiva?

Caryl Alonso Jiménez

Seguramente la anticipación y cálculo de riesgos es el mejor instrumento para escenarios predictivos. En esa línea, Oscar Picardo en su columna publicada en Disruptiva (6.1.2025), reconoce dos escenarios futuros que eventualmente concurrirán en este nuevo orden, y lo hace con ese particular estilo sobrio pero provocativo, El futuro: ¿Cisnes negros o cisnes verdes?

Al parecer más allá de las dinámicas del metaverso en las explanadas de la autopista virtual, ahora intensificadas por las redes sociales, es notable que abonan a la incertidumbre global en una mezcla de verdades a medias y enredos intencionados que generan temores que, seguramente están incidiendo en el comportamiento y sometimiento emocional.

Estoy seguro que Picardo en su nuevo libro (ya en prensas para el 2025), aborda justamente los males contemporáneos del comportamiento emocional. Por cierto, y estoy seguro (aunque no lo dice), revelará cómo los embusteros reúnen variables para posicionar una barata inteligencia al humor negro de la realidad.

Por extraño que parezca, el debate gubernamental, social y los medios nacionales e internacionales destacan previsiones para gigantescos procesos de retorno de la inmigración… y al parecer, dan por sentada la derrota de las negociaciones que deberían constituir la primera estrategia y la preparación de condiciones humanitarias dignas para una emergencia nacional.

Sin embargo, la verdad es que la primera víctima en este nuevo orden son los migrantes, particularmente centroamericanos, que fueron el telón de fondo (entre otros argumentos electorales) para construir esta nueva era que arranca en enero del 2025.

Aunque pareciera que no existe vínculo alguno y pudiera considerarse teorías de la conspiración, resulta que la Portada de Economist, “The World Ahead 2025”, (El mundo en perspectiva 2025), retrata series de presagios que pueden interpretarse posiblemente los desastres climáticos que ahora se viven en el oeste de USA.

Para entender las teorías del cisne negro (Taleb, 2007), que explica acontecimientos inesperados fuera de la lógica normal, y los Cisnes verdes (BIS, 2021), vinculados a la incertidumbre relacionada al cambio climático y sus efectos financieros, y que tienen una extraña relación con lo que está ocurriendo en esa región del oeste de USA.

No cabe duda los acontecimientos extremadamente trágicos y espantosos en los incendios incontrolables que se extienden en el Estado de California, particularmente en la ciudad de los Ángeles, que deja un rastro apocalíptico de las condiciones climáticas que, hacen prever no solamente los efectos devastadores del calentamiento global, sino al parecer la combustión que representa todo aquello que llamamos civilización y confort de consumo… y que tendrán impactos financieros incalculables, que en los casos de la ciudad de los Ángeles, confirma ya una larga y extensa tarea de reconstrucción para recuperar la normalidad.

Al parecer las teorías permiten interpretaciones para comprender aquellos sucesos que, por su dimensión, obligan a crear escenarios y proyecciones técnico-científicos que permiten calcular derroteros del comportamiento social, a partir de la relación de todas aquellas variables y sus vínculos en los contextos de la realidad.

Justamente, y así puede entenderse una de las columnas de León Krauze, en el diario The Washington Post, (9.1.2025), titulada, ¿Quién reconstruirá los Ángeles? Los migrantes, (Who will rebuild Los Ángeles? Inmigrats), y fuera replicado por la Revista Letras Libres en su sección virtual el 10.1.2025.

La pregunta del columnista Krause, por supuesto que no tiene discusión, no solo por la realidad del papel de los migrantes en los últimos 150 años en USA, sino por los datos que comparte del Informe del 2020 del American Inmigration Council, que destaca que el 43% de los trabajadores de la construcción en California son inmigrantes. Y destaca que “de acuerdo con datos de la National Association of Home Builders, el 31 % de los trabajadores de la construcción nacieron fuera de los Estados Unidos. ¿Acaso una coyuntura en perspectiva futura…?

Sin embargo, la crisis está por comenzar y la mejor anticipación será la creación de condiciones institucionales, para una larga emergencia que demandará el llamado al sector económico y público para una acción histórica. Por ahora, la previsión Estatal y el liderazgo institucional tienen una oportunidad que abre las puertas para recuperar confianza, y esta oportunidad, será un marco que construya las bases para una mirada de largo plazo y será el retrato de compromisos histórico…

Hoy es cuando, tal como le cantó una vez Miguel Ángel Asturias a esta Nación, “Hay alguien que ha entrado descubierta la frente y herramienta en la mano, levántate a su encuentro porque tienes derecho de abrazar a tu hijo, de quien hiciste un hombre que hoy viene con el jornal ganado…”, pero, ¿realmente los recibiremos…?

¿Cuba terrorista?

Mg. José A. Amesty Rivera

El pasado 14 de enero del año 2025 en curso, el gobierno saliente de EEUU anuncio la decisión de A) excluir a Cuba de la lista del Departamento de Estado de países que supuestamente patrocinan el terrorismo; B) hacer uso de la prerrogativa presidencial para impedir que se pueda tomar acción en tribunales estadounidenses ante demandas judiciales presentadas al amparo del Título III de la ley Helms-Burton; y C) eliminar la lista de entidades cubanas restringidas que designa a un grupo de instituciones con las cuales se prohíbe a ciudadanos e instituciones estadounidenses realizar transacciones financieras, lo que ha tenido efecto en terceros países.

Recordemos que, Cuba formó parte de esta lista desde 1982 hasta 2015, cuando Barack Obama la sacó de ella. Luego, el presidente Donald Trump, en 2021, la incluyó nuevamente, como una de sus medidas últimas de su anterior mandato. Ahora, a pocos días de la finalización del mandato de Joe Biden, la excluye nuevamente.

Que, por cierto, Biden decidió cumplir la promesa que hiciera al asumir su función como mandatario de los Estados Unidos, y dispuso el retiro de Cuba de la denominada «Lista de Países que patrocinan el Terrorismo».

Algunos aducen que Trump, ahora, puede volver a incluir a Cuba en la lista; pero necesita una excusa y crear el contexto, la primera vez demoró 4 años y lo impuso en sus últimos días en el gobierno, como ya lo indicamos.

Precisemos y reflexionemos sobre algunos elementos de la designación-expresión del Departamento de Estado norteamericano al designar a Cuba como Estado patrocinador del terrorismo.

  1. ¿Qué significa patrocinar? Según la Real Academia Española, significa: Apoyar o financiar una actividad. Nos preguntamos, desde la década de 1960, cuando ya a Cuba se le había impuesto el embargo económico comercial, hasta ahora que continúa, ¿cómo una isla pequeña de las Antillas podía, sin recursos económicos, podrá patrocinar alguna actividad de cualquier índole?

A su conveniencia, EEUU desde 1983 ha utilizado la siguiente definición referente al terrorismo, que afirma: «Terrorismo: Violencia premeditada y con motivos políticos perpetrada contra objetivos civiles por grupos subnacionales o agentes clandestinos, generalmente con la intención de influenciar a un público determinado». Que es la que le sirve para sus andanzas.

Ahora, precisamos que Cuba, si ha podido con su potencial humano, enviar brigadas médicas y de otra índole, a varios países del mundo, entonces, ha patrocinado el bienestar humano y la solidaridad.

En este sentido, ha sido más bien antiterrorista y humana. Como señala una expresión coloquial venezolana, ¿Cuba terrorista?, «ponte a creer«.

  1. Así mismo, esa política cruel e injusta de estar cambiando de cuando en cuando, la designación de terroristas, revela una falta de legitimidad, de argumentos válidos, de ética, de consistencia y razón en su conducta por parte de EEUU contra Cuba.

Así como un juego macabro y malsano, irrespetuoso y grosero, para cualquier país o nación.

  1. Por otro lado, el sacar a Cuba de la ignominiosa lista, se trata, de una medida que no merece aplauso ni gratitud de parte de nadie; porque implica una decisión que nunca debió ser adoptada por Estados Unidos y que, si hoy es revocada, eso hay que atribuirlo al rechazo generalizado que se suscita en el escenario mundial.
  2. Por ende, esta medida debió haberse llevado a cabo hace muchos años, «como acto elemental de justicia, sin reclamar nada a cambio y sin fabricar pretextos para justificar la inacción, si es que se deseaba actuar correctamente. Para excluir a Cuba de la lista arbitraria de Estados patrocinadores del terrorismo, debió bastar el reconocimiento de la verdad, la ausencia total de razones para tal designación y el desempeño ejemplar de nuestros países en el enfrentamiento al terrorismo, lo cual han admitido incluso agencias del gobierno de Estados Unidos», como lo señala el escritor peruano Gustavo Espinoza M.
  3. La inclusión arbitraria de Cuba en la espuria lista no buscaba combatir el terrorismo, sino asfixiar económicamente a la Isla con esa medida adicional, de las tantas que le aplican como parte de la guerra económica.

Por ello, desde 1960, ya lo señalaba el entonces subsecretario de Estado Lester Mallory al indicar:

«…El único medio previsible que tenemos hoy para enajenar el apoyo interno a la Revolución es a través del desencanto y el desaliento, basado en la insatisfacción y las dificultades económicas… Debe utilizarse prontamente cualquier medio concebible para debilitar la vida económica de Cuba; negarle dinero y suministros para disminuir los salarios reales y monetarios, a fin de causar hambre, desesperación y el derrocamiento del gobierno».

Esta es la verdadera razón para incluir a Cuba en la lista, lo demás es propaganda de la acostumbrada contra países que defienden su derecho a ser independientes de los dictados de Washington.

  1. Para ir concluyendo estas reflexiones, cierto es que EEUU en su práctica política, utiliza la categorización de terrorista, según su conveniencia, así lo ejemplifica el escritor cubano Arthur González, al señalar, «una prueba de la manipulación que hace Estados Unidos de la clasificación del terrorismo, se puso en evidencia en estos días al levantar de un plumazo el ofrecimiento de 10 millones de dólares por la captura del rebelde sirio Ahmad al-Sharaa, llamado hasta hace poco Abu Mohammad al-Jolani, líder del grupo terrorista Hayat Tahrir al-Sham, o HTS, considerado una peligrosa organización, después que este logró tomar el poder de Siria y derrocar al presidente constitucional Bashar al Asad».
  2. Finalmente, Cuba debe seguir el camino de aguantar, que no es poco; y es mucho. Debe continuar enfrentando las crisis, que no significa su muerte, ni mucho menos su antesala. La Revolución cubana tiene, todavía, un horizonte estratégico, para avanzar hacia él. Por lo que, hay que terminar de hacer, la Revolución cubana, para ejemplo de otras revoluciones. Ya que, la suerte de la Revolución cubana es, también, la suerte de las luchas de los pueblos de la América Latina, el Caribe y el mundo.

Adopta Estados Unidos medidas en la dirección correcta, pero el bloqueo permanece

Declaración del Ministerio de Relaciones Exteriores de Cuba

El 14 de enero de 2025, el gobierno de Estados Unidos anunció la decisión de: 1) excluir a Cuba de la lista del Departamento de Estado de países que supuestamente patrocinan el terrorismo; 2) hacer uso de la prerrogativa presidencial para impedir que se pueda tomar acción en tribunales estadounidenses ante demandas judiciales presentadas al amparo del Título III de la ley Helms-Burton; y 3) eliminar la lista de entidades cubanas restringidas que designa a un grupo de instituciones con las cuales se prohíbe a ciudadanos e instituciones estadounidenses realizar transacciones financieras, lo que ha tenido efecto en terceros países.

A pesar de su carácter limitado, se trata de una decisión en la dirección correcta y en línea con el sostenido y firme reclamo del gobierno y el pueblo de Cuba, y con el llamado amplio, enfático y reiterado de numerosos gobiernos, en especial de América Latina y el Caribe, de cubanos residentes en el exterior, de organizaciones políticas, religiosas y sociales, y de numerosas figuras políticas de Estados Unidos y de otros países. El gobierno de Cuba agradece a todos por su contribución y sensibilidad.

Esta decisión pone fin a medidas coercitivas específicas que, junto a muchas otras, causan un grave daño a la economía cubana, con un efecto severo sobre la población. Este es y ha sido un tema presente en los intercambios oficiales de Cuba con el gobierno de Estados Unidos.

Es importante señalar que permanecen vigentes el bloqueo económico y buena parte de las decenas de medidas coercitivas que se pusieron en vigor desde 2017 para reforzarlo, con pleno efecto extraterritorial y en violación del Derecho Internacional y de los derechos humanos de todos los cubanos.

Por solo citar unos ejemplos, continúa la persecución ilegal y agresiva contra los suministros de combustible que Cuba tiene legítimo derecho a importar. Se mantiene la cruel y absurda persecución de los acuerdos legítimos de cooperación médica internacional de Cuba con otros países, amenazando así con privar a millones de personas de servicios de salud y limitando las potencialidades del sistema de salud pública cubano. Las transacciones financieras internacionales de Cuba o las de cualquier nacional que estén relacionadas con Cuba permanecen bajo prohibición y represalias. Los buques mercantes que atraquen en Cuba también siguen amenazados.

Por otro lado, todo ciudadano estadounidense, empresa y entidad subsidiaria de una corporación de ese país, tiene prohibido comerciar con Cuba o entidades cubanas, salvo excepciones muy restringidas y reguladas. El acoso, la intimidación y las amenazas contra el nacional de cualquier país que se proponga comerciar con Cuba o invertir en este país, continúa siendo política oficial de Estados Unidos. Cuba sigue siendo un destino que el gobierno estadounidense prohíbe a sus ciudadanos.

La guerra económica permanece y persiste en plantear el obstáculo fundamental al desarrollo y la recuperación de la economía cubana con un alto costo humano para la población, y continúa siendo un estímulo a la emigración.

La decisión anunciada hoy por Estados Unidos corrige, de modo muy restringido, aspectos de una política cruel e injusta. Es una corrección que ocurre ahora, a punto de producirse un cambio de gobierno, cuando debió haberse materializado hace años, como acto elemental de justicia, sin reclamar nada a cambio y sin fabricar pretextos para justificar la inacción, si es que se deseaba actuar correctamente. Para excluir a Cuba de la lista arbitraria de Estados patrocinadores del terrorismo, debió bastar el reconocimiento de la verdad, la ausencia total de razones para tal designación y el desempeño ejemplar de nuestro país en el enfrentamiento al terrorismo, lo cual han admitido incluso agencias del gobierno de Estados Unidos.

Se conoce que el gobierno de ese país podría revertir en el futuro las medidas hoy adoptadas, como ha ocurrido en otras ocasiones y como muestra de la falta de legitimidad, ética, consistencia y razón en su conducta contra Cuba.

Para hacerlo, los políticos estadounidenses no suelen detenerse en encontrar justificación honesta, mientras siga vigente la visión descrita en 1960 por el entonces subsecretario de Estado asistente Lester Mallory, y la meta por él descrita de doblegar a los cubanos por vía del cerco económico, la miseria, el hambre y la desesperación. No se detendrían en justificaciones mientras ese gobierno continúe siendo incapaz de reconocer y aceptar el derecho de Cuba a la libre determinación, y mientras siga dispuesto a asumir el costo político del aislamiento internacional que le provoca su política genocida e ilegal de asfixia económica contra Cuba.

Cuba seguirá enfrentando y denunciando esta política de guerra económica, los programas de injerencia y las operaciones de desinformación y descrédito financiadas cada año con decenas de millones de dólares del presupuesto federal de Estados Unidos. También permanecerá dispuesta a desarrollar una relación de respeto con ese país, basada en el diálogo y la no injerencia en los asuntos internos de uno y otro, a pesar de las diferencias.

La Habana, 14 de enero de 2025

Ministerio de Relaciones Exteriores de Cuba.

El destino entrelazado de Groenlandia y Panamá

Rodrigo Cabezas Moya

Rodrigo Cabezas Moya.

Para sorpresa de todos, el presidente electo de Estados Unidos lanza la idea de retomar el Canal de Panamá, por la fuerza de ser necesario y también comprar el territorio semiautónomo de Groenlandia el cual pertenece a la nación soberana de Dinamarca.

Como se recuerda, Panamá era una provincia de Colombia y Estados Unidos deseaba construir un canal interoceánico en Colombia. La oferta no fue satisfactoria para Colombia y para su sorpresa esa provincia se, Washington la reconoce de inmediato como país soberano y de hecho su bandera fue bordada en el Hotel Waldorf Astoria de Nueva York.

Entonces Estados Unidos negocia con este nuevo país el Tratado Hay-Bunau Varilla que le concede a Estados Unidos el uso a perpetuidad del canal, así como una zona de ocho kilómetros en cada una de sus orillas con su total soberanía, a cambio de $10 millones más réditos anuales muy por debajo de las ganancias obtenidas por el tránsito de buques.

Así se mantuvo ese tratado hasta 1999 cuando el presidente Carter tuvo la valentía de devolver el canal a sus legítimos dueños mediate el Tratado Torrijos-Carter ratificado por el senado de su país.

El presidente electo también desea comprar Groenlandia por “razones de seguridad”. Como se recuerda, Groenlandia tiene una importancia económica dadas las nuevas rutas marítimas en desarrollo debido al deshielo en esa zona, además, de su posición geopolítica y de los recursos del subsuelo.

Los habitantes de Groenlandia han manifestado su deseo de independizarse de Dinamarca, por lo cual no sería sorpresa que el presidente electo de Estados Unidos interponga sus buenos oficios para lograrla y así negociar directamente con el nuevo país como lo hizo con Panamá.

En cuanto a Canadá, no creo que esas estrategias funcionen.