UCR: Acción Social reconoció proyectos ganadores de fondos concursables
La UCR presentó 11 proyectos ganadores de la XVII convocatoria de Fondos Concursables de Acción Social
Autoría: Eduardo Muñoz-Sequeira (Vicerrectoría de Acción Social)
La Acción Social es “un hacer, un decir, una oportunidad de transformar las inequidades sociales”, aseguró la Dra. Marisol Gutiérrez Rojas, vicerrectora de Acción Social (VAS), durante el acto de anuncio de las propuestas ganadoras de la XVII Convocatoria de Fondos Concursables para el Fortalecimiento de la Relación Universidad-Sociedad.
El acto se realizó el pasado miércoles 22 de marzo en el auditorio de Educación Continua y como ha sido usual en las 16 convocatorias anteriores, este año se recibieron múltiples propuestas de unidades académicas, con proyectos orientados a proponer cambios sustantivos en la calidad de vida en las comunidades.
En total, once proyectos recibirán el apoyo institucional de la VAS, tras una deliberación del Comité Evaluador que recibió unas 30 propuestas enmarcadas en los ejes temáticos de la vicerrectoría, a saber: salud, educación, derechos culturales, socioproductividad y ambiente. La Dra. Lilliam Marín Arias, coordinadora de dicho cuerpo colegiado, comentó que el trabajo fue arduo desde la convocatoria y destacó que entre los seleccionados existe una importante representación de las sedes y áreas de trabajo mencionadas.
Los Fondos Concursables tienen como propósito fortalecer la presencia de la Universidad de Costa Rica (UCR) en las comunidades y territorios con proyectos de acción social. Para esta ocasión el eje central correspondió a la “inclusión social y equidad y el desarrollo territorial y sedes regionales”, como parte del Plan Estratégico Institucional (PEI) de la UCR.
Los proyectos ganadores se ejecutarán entre el 1 de marzo de 2023 y el 28 de febrero del 2025, con un presupuesto máximo de ¢10 millones de colones por la vigencia total del proyecto, distribuidos anualmente en partidas operativas, de acuerdo con el planteamiento académico.
El proceso de escogencia incluyó una serie de actividades como talleres virtuales sobre cómo diseñar proyectos de Acción social y un acompañamiento constante a las personas proponentes.
Esta convocatoria anual es un incentivo adicional para que las unidades académicas contribuyan de manera creativa en la solución de problemas detectados en comunidades y territorios.
Para la Dra. Gutiérrez, además de fortalecer el vínculo con la sociedad, estos proyectos demuestran “la pertinencia de la Educación Superior en momentos en que es mezquinamente cuestionada”.
¡MANOS A LA OBRA!
De las once propuestas ganadoras una corresponde a la Sede Regional de Occidente, cuyo proyecto “Fortalecimiento de las microempresas lideradas por mujeres”, que será ejecutado por el Centro de Investigaciones sobre Diversidad Cultural y Estudios Regionales (CIDICER), se propone mejorar las capacidades de las mujeres microempresarias de San Ramón. “Capacidades desde el punto de género y de empresariedad, ya que muchas inician sus empresas sin ningún estudio o capacitación. La idea es que varias instituciones nos unamos para diseñar una estrategia integral que las beneficie, y darle el seguimiento adecuado”, comentó la magister Jeannette Morales Po Zumbado, quien coordinará desde la Sede de Occidente el trabajo.
Por su parte, el Lic. Alfredo Chavarría Fennell, profesor de trombón en la Etapa Básica de Música, en Santa Cruz, proyecto de Sede de Guanacaste, fue galardonado por su propuesta “Trombonacaste”, que tiene como objetivo “llevar música a comunidades con bajos índices de escolaridad (…) con el apoyo de la Etapa Básica de Música se realizarán conciertos en un cuarteto de trombones, y con estudiantes avanzados, en comunidades ya escogidas pensando que no tienen acceso a actividades culturales. Por otro lado, se harán recitales didácticos en las escuelas de música de Colorado y Abangares”, comentó Chavarría.
“El fin último es dejar capacidades instaladas en las comunidades, y la verdad es que la universidad aprende en las comunidades, y ahí hay una agenda que se puede retomar luego para generar más líneas de trabajo a partir de lo que se identifique”, concluyó.
TERRITORIOS Y BIENES COMUNES
Para la Magister Dylanna Rodríguez Muñoz, docente en la Escuela de Ciencias Políticas, su proyecto “Entramarnos por la defensa de la vida” es una oportunidad para darle protagonismos a las cientos de “mujeres defensoras de todos los territorios campesinos, indígenas, transfronterizos, costeros, cuyos procesos organizativos llevan a cabo luchas y resistencia frente a los extractivismos de bienes comunes, entiéndase ríos, semillas, tierras, montañas, bosques, semillas”.
Ese proyecto trabajará dos grandes temas, a saber: la alimentación y las luchas comunitarias, subrayando en la producción diversificada frente a los agronegocios y los monocultivos, la industria alimentaria, los polinizadores, la cultura de la alimentación y preparación de alimentos, la producción orgánica.
“Nuestro enfoque incluye una devolución a las comunidades, y gracias a la coproducción con el Canal UCR, quedarán subidas en sus plataformas digitales y se producirán herramientas y materiales gráficos; es un nuevo punto de partida a otro proyecto de trabajo comunal que coordino llamado “Defensa comunitaria del territorio: extractivismos, organización y conflictos socioambientales” (TC-590).
Adicionalmente, el proyecto “Se’ Siwa’: co-creación del libro de historias Bribrís en el territorio Kèköldi” se enfoca en revitalizar el patrimonio cultural en esa comunidad retomando una publicación de 1994 titulada Se’ Siwa: Costumbres y Tradiciones Bribrís, recopiladas por Gloria Mayorga y Juanita Segundo Sánchez.
Bajo la coordinación del Dr. Luis Diego Mora Morales, docente de la Escuela de Bibliotecología y Ciencias de la Información (EBCI), esta propuesta se enfocará en la producción de una edición especial en la técnica de libro cartonero, que se realizará a partir de materiales reciclados. “Serán libros hechos a mano, desde su cubierta, una iniciativa que nació en América Latina, con la idea de democratizar la literatura y la lectura, en comunidades que tienen baja circulación de libros o bien dificultades para su adquisición, y busca rescatar el patrimonio cultural a partir de libros artesanales”, explicó el Magister Esteban González Pérez.
Otras unidades académicas reconocidas fueron las escuelas de Biología, Ciencias de la Computación e Informática, Ingeniería en Biosistemas; además del Instituto de Investigaciones en Educación (INIE) y los centros de investigación en Contaminación Ambiental (CICA) y el de Ciencias del Mar y Limnología (CIMAR)