Skip to main content

Etiqueta: Fratelli Tutti

“Por sus hechos los conoceréis”

Alberto Salom Echeverría
albertolsalom@gmail.com

El papa Francisco: “Inauguró una nueva época en la Iglesia Católica.
Su estilo simple y descontracturado acercó a la institución
a los fieles de todo el mundo.”

Prólogo

La creación de una nueva época en la historia humana, en la de un país o en una institución como la “Iglesia Católica”, deviene como producto de la acumulación de una serie de hechos o acontecimientos generados por el pensamiento y la acción del ser humano y, ocasionalmente, concatenados con fenómenos naturales externos a la entidad. Estos hechos, van a contrapelo y rompen con la inercia, las creencias, costumbres o formas de hacer las cosas gestadas en épocas precedentes. En otras palabras, para que este cúmulo de sucesos den lugar a una nueva época, debe producirse una ruptura de la continuidad con relación a la concepción dominante del mundo. Es así como emerge una nueva cosmovisión que implica cambios en todos los órdenes de la vida social, política, económica y cultural, todo lo cual se traduce en cambios significativos en el comportamiento social.

¿Puede una persona por sí misma, generar un cambio de tal naturaleza? En la historia humana, ha habido líderes o lideresas que han desarrollado una influencia muy grande entre sus congéneres, a partir del núcleo más próximo al líder o a la lideresa. Este es el caso de algunas de las más grandes revoluciones sociales o religiosas, tales como la Revolución Francesa de 1789, donde los principales líderes en el período más radical fueron Robespierre, Danton y Marat. Por su parte, la Independencia de los Estados Unidos, fue guiada en lo militar por George Washington y, por algunos selectos intelectuales que, le proporcionaron el contenido a la gesta de independencia, tales como Thomas Jefferson, autor de la Declaración de Independencia, y otros de gran prestigio también como, Benjamin Franklin y John Adams. La revolución socialista en Rusia alcanzó el triunfo en octubre del 1917, bajo el liderazgo de Vladimir Ilich Ulianovsk, más conocido como Lenin. Otro tanto ocurrió con la revolución en China en 1949, conducida por Mao Zedong.

En América Latina, en los días de la Independencia de España, entre los más grandes inspiradores citamos a: Miguel Hidalgo y Costilla, José María Morelos Y Pavón, junto a Josefa Ortiz de Domínguez (conocida como “La Corregidora”) y Leona Vicario en México; descollaron en el sur del continente: Simón Bolívar, Francisco de Paula Santander, Antonio José de Sucre, José de San Martín, Bernardo O´Higgins, y José Gervasio Artigas y, entre las mujeres más destacadas mencionamos a Juana Azurduy y Manuela Sáenz.

En el ámbito religioso fue célebre en el siglo XVI la enorme Reforma de Martín Lutero, de origen alemán, nacido en 1483, pero cuya vida en su madurez, se desarrolló en el siglo XVI; fue Lutero el primero que desafió al catolicismo y dio origen al protestantismo. Posteriormente acaeció “La Segunda Reforma” propiciada por el teólogo francés, Juan Calvino, cuyo nacimiento y muerte se produjo, en el siglo XVI.

En el caso que nos ocupa hoy, el papa Francisco asume las riendas de la Iglesia Católica en la segunda década del actual siglo XXI, representando la corriente progresista. Su liderazgo fue creciendo cuando ya había sido nombrado papa, a medida que puso en práctica un vasto y extenuante programa de trabajo del cual intentaremos dar cuenta en este breve relato. Su prestigio se extendió sobre todo extramuros; visitó casi todos los continentes y se reunió tanto con fieles de la Iglesia Católica como de otras religiones, entablando con sus principales guías un diálogo inédito. Mientras tanto, al interior del Vaticano se acrecentó una fuerte oposición a su gestión por parte de la corriente conservadora. Un solo hombre, humilde de espíritu, pero inquebrantable y ambicioso en sus propósitos, supo aglutinar en torno a la fe en la Iglesia Católica y, a un intrépido programa de acción en procura de su renovación, a un valeroso grupo de hombres y mujeres eclesiásticos y seglares.

Por sus hechos los conoceréis.

Esta paremia o proverbio es de origen bíblico y se encuentra en Mateo 7,16. El refrán citado pertenece, según Mateo, al mismo Jesús cuando dio a sus discípulos el “Sermón de la Montaña”. No presumo de ser experto en la Biblia, pero he ido al capítulo introductorio de Mateo, el cual reza como sigue en el último párrafo de las Bienaventuranzas: “Bienaventurados seréis cuando os injurien, y os persigan y digan con mentira toda clase de mal contra vosotros por mi causa. Alegraos y regocijaos, porque vuestra recompensa será grande en los cielos; pues de la misma manera persiguieron a los profetas anteriores a vosotros.” (Cfr. Mateo 5: 11-12). Antes de eso cuenta Mateo todas las “Bienaventuranzas” a manera de preludio al “Sermón”: Bienaventurados los pobres de espíritu…/…los mansos…/…los que lloran…/…los que tienen hambre y sed de justicia…/…los misericordiosos…/…los limpios de corazón…/…los que trabajan por la paz…/…los perseguidos por causa de la justicia…/. En resumen, se quiere elogiar al humilde, exaltar el perdón, y poner de ejemplo el generoso cuidado del prójimo. Esto, no es otra cosa -cita nuevamente Mateo a Jesús- que “el Reino de Dios en un mundo restaurado.”

Desde mi modesta interpretación, el “Sermón de la Montaña” ha procurado poner el acento en la capacidad del ser humano para ser humilde en la acción, como lo fue Cristo, como lo intentó Francisco de Asís, y como finalmente lo quiso ser el papa Francisco. No ignoro que en la doctrina eclesiástica hay varias interpretaciones, pero la consecuencia entre la prédica de la teoría de la moral cristiana y la acción concreta, en “los hechos” radica, a mi entender, lo esencial del planteamiento del papa Francisco en sus doce años de pontificado. Postulo por ende que, en esa acción consecuente del papa n° 266 de la Iglesia Católica, Francisco, cuyo nombre secular era Jorge Bergoglio, estriba el éxito de su gestión.

Tres Encíclicas

No obstante, lo recientemente expresado, el papa Francisco se ocupó también de dejar escritas tres encíclicas, para dar orientación a su pontificado. Estas fueron: “Lumen Fidei” (2013), enfocada en cuestiones relativas a la fe y continuando la que ya había comenzado su predecesor Benedicto XVI; “Laudato Si” (2015), volcada sobre lo que debe ser la ecología para los cristianos; y, “Fratelli Tutti” (2020), destinada a explicar y pregonar la fraternidad universal.

La encíclica “Laudato Si”, traducida al español como “Alabado Seas”, tiene para mí una centralidad en la gestión del Pontífice, pues versa sobre el “cuidado de la casa común”. Esta es la época en la que, las corporaciones multinacionales manejadas por seres humanos que extraen y producen los hidrocarburos, son quienes no han tenido misericordia ni contemplaciones para devastar la naturaleza, provocar la extinción de muchos de los ecosistemas, de plantas y animales, en el contexto del industrialismo y del capitalismo voraz. Es cierto que todos dejamos nuestra huella ecológica desde que nacemos, pero ineludiblemente hay grados de responsabilidad. En primerísimo lugar se encuentran los que promueven las guerras, los que explotan a los demás hombres, afectando al mismo tiempo el medio ambiente, sin capacidad para entender que, todos somos los hijos de la Madre Tierra, y esta es nuestra casa común. “Alabado seas, cantaba San Francisco de Asís, mientras tanto el mismo papa Francisco pregonó: “Hemos despojado a la tierra de sus bosques naturales, hemos contaminado las aguas, su tierra, y su aire. Las plantas y las especies se están extinguiendo a un ritmo alarmante. La Tierra, nuestro hogar, está empezando a parecerse, cada vez más, a un inmenso montón de suciedad. Nuestro creciente uso de combustibles fósiles contaminantes, especialmente el carbón, el petróleo y el gas, está ayudando a impulsar el cambio climático, que es uno de los mayores desafíos que enfrentamos hoy en día. El cambio climático nos afecta a todos, pero son las comunidades más pobres las que más lo sufren. [Finalmente terminó diciendo en este párrafo]…Ahora estamos en un punto crítico, donde el futuro de nuestro planeta está en peligro, ya que, a pesar de esta crisis, no parece haber ninguna desaceleración en los estilos de vida de los países ricos.”

(Cfr. https://www.Manosunidas.org/sites/default/files/laudato_si_dinamica_para_jovenes1.pdf).

Las grandes reformas en la época del papa Francisco

Sustanciales transformaciones habrían de producirse, merced a la inspiración del Papa nacido en Argentina, pero que pronto adquirió un renombre mundial. Tres fueron los grandes pivotes sobre los cuales se asentaron las reformas: 1- la gran austeridad del pontificado del papa, representada desde el inicio en su decisión de cambiar el lugar de su residencia del Palacio Apostólico, habitual residencia de los papas desde 1903, a la Casa de Santa Marta también dentro del Vaticano, pero un lugar mucho más austero. Con esta decisión buscó demostrar su decisión de compromiso con la Iglesia más humilde y accesible, alejado de los lujos y la ostentación. 2- El segundo pilar que sirvió de guía a su reforma fueron los reiterados gestos de inclusión. La Iglesia Católica habría de ser en el futuro una hospedera para los pobres excluidos, para dar cabida a las mujeres en su conducción, para albergar a los homosexuales y personas trans, a fin de convertirse en una iglesia realmente universal. 3- El tercer pivote lo constituyó la lucha contra los abusos, tanto de carácter sexual en los que han incurrido una gran cantidad de sacerdotes y dirigentes de la iglesia, como los relacionados con la búsqueda de la comodidad, el confort y el lujo dentro de la iglesia y la disposición de usufructuar los bienes de ésta.

Sobre estos pilares cito algunas de las más conspicuas realizaciones del papa Francisco que lo hacen célebre en su pontificado:

1- Transformó radicalmente las estructuras internas del Vaticano, en un claro desafío a los más conservadores de la Iglesia.

2- La Iglesia se tornó en muchos aspectos en un espacio de pobres y para los pobres.

3- Abrió las estructuras de poder de la Iglesia para dar mayor presencia a las mujeres dentro de ella. Un ejemplo conspicuo lo constituye el nombramiento de Rafaella Petrini como la primera mujer presidenta de la Gobernación de la Ciudad del Vaticano. La Gobernación es el órgano mediante el cual se ejerce el poder ejecutivo en la Santa Sede. Otra mujer ascendida a un cargo relevante lo fue Simona Brambilla, nombrada prefecta para el Dicasterio de los Institutos de Vida Consagrada y las Sociedades de Vida Apostólica.

4- La Reforma Económica. Francisco promovió una reforma integral a la gestión de las arcas del Vaticano. Creó la Secretaría Económica, encargada de gestionar el patrimonio inmobiliario de la Iglesia. Por otra parte, se implementaron medidas para lograr la transparencia, el control de cuentas y una política de austeridad para los cardenales en el ejercicio de su ministerio. Se nombró una comisión para la búsqueda de fondos, debido a la disminución de las donaciones.

5- En el plano de la Ética, fue nodal la lucha contra la Pederastia y la protección de las víctimas dentro de la Iglesia. Asimismo, se creó una comisión pontificia para la protección de menores, la cual debe presentar un informe anual sobre su lucha contra los abusos. Se eliminó el secreto Pontificio en estos casos. Se exigió a las diócesis de cada país que crearan centros de atención a las víctimas (se ha reconocido que no se ha implementado en todas partes).

6- Se orientaron esfuerzos para una Iglesia más representativa y menos italiana.

7- En la parte administrativa, el papa junto a nueve cardenales se ocupó de promulgar una nueva Constitución “Praedicate Evangelium” (Predicad el Evangelio en español), por medio de la cual el papa Francisco reformó la Curia Romana, que es el cuerpo administrativo central de la Iglesia Católica, incluyendo a sus dicasterios.

8- Al papa Francisco le correspondió elegir al 80% de los cardenales que están hoy reunidos en el Colegio Cardenalicio y serán los responsables de elegir al nuevo papa. Gracias a ello, ahora, América Latina, Asia y África poseen una mayor representatividad en el conjunto del mencionado Colegio.

9- El papa bendijo parejas de homosexuales, lo que generó una gran oposición de parte de los sectores más conservadores.

(Cfr. https://www.emol.com/noticias/Internacional/2025/04/21/1164061/reformas-papa-francisco-iglesia-catolica.html).

10- Por último, citamos el cambio del Jubileo católico a un período de 25 años. (anteriormente era un lapso de 50 años.) La importancia del Jubileo para los católicos consiste en que “… se ofrece a los fieles la posibilidad de obtener indulgencia plenaria, que es el perdón completo de los pecados, tanto para ellos mismos como para los difuntos. La palabra “Jubileo” proviene del latín “iubilare”, que significa expresar o gritar alegría.” (Cfr. https://www.iglesiadesantiago.cl 28 de julio 2024).

En conclusión

Difícilmente puede haber mayor abundancia de “hechos” y de teoría fundamental en tres encíclicas y otros tantos documentos escritos en estos doce años, para llevar a la conclusión de que, con el pontificado de Francisco, comenzó sin duda una renovación en la Iglesia Católica. Una de las instituciones más grandes y significativas del mundo que, si el nuevo papa que resulte escogido por el colegio cardenalicio, junto con los cardenales, con todo el sínodo de los obispos, los sacerdotes renovados y, lo más importante, la feligresía centralmente constituida por los más humildes, seres bullentes, hombres y mujeres plenos, que sean ganados por el espíritu de las “Bienaventuranzas, entonces y solo entonces, la Iglesia Católica podrá convertirse en una de las instituciones más importantes del Planeta, para devolver la esperanza de vida a la Naturaleza entera. Habrá continuado una nueva época en la que se abra el camino para transformar los sistemas productivos del salvajismo, por otros en los que la Tierra se convierta en “una casa común”, un lugar de fraternidad y paz. ¿Utopía? Quizás, pero Francisco nos puso a soñar a creyentes y no creyentes, a hombres y mujeres de diferentes confesiones religiosas…a todos.

Pandemia y reactivación de la economía: una ocasión para un proyecto país

  1. La pandemia y su doble crisis, sanitaria y económica.

La crisis sanitaria producida por la pandemia del COVID-19 ha profundizado la crisis económica que venía desde antes, reflejada en el estancamiento del crecimiento económico del país en los últimos años. Por ejemplo, en el decenio transcurrido entre 2001 y 2010, la tasa de crecimiento real promedio de la economía de Costa Rica fue de 4,33%, mientras que en el decenio 2011-2020 la tasa de crecimiento real promedio fue de 2,70%. En el desempleo igualmente se venía de una situación compleja, que se agudizó en medio de la pandemia, pues desde la crisis económica del 2008-2009 el desempleo había llegado a los 2 dígitos y con la pandemia subió por encima del 20%, situación que, además, ha afectado en mayor proporción a las mujeres, a los jóvenes y a los habitantes de las regiones Chorotega, Pacífico Central y Brunca.

Además de las pérdidas lamentables de seres queridos, que se cuentan por miles en el país y por millones en el mundo, la pandemia ha dejado muchas personas con consecuencias en su salud, que requerirán atención permanente y apoyo social para retomar sus vidas. No podemos dejarlos solos, el Estado debe procurar los medios para atender a estas personas que sufrirán consecuencias en sus vidas una vez que la pandemia haya terminado. Pero también debemos buscar la manera de fortalecer financieramente la atención médica del país, que ha sufrido presiones enormes en medio de la crisis, debido a la caída en los ingresos de la CCSS y a una mayor demanda de los servicios de salud, que han llegado casi al límite de su capacidad.

  1. Una crisis siempre nos afecta y de ella nunca salimos igual, salimos peores o mejores.

El papa Francisco nos lo ha recordado con frecuencia, planteándonos el reto histórico de salir mejores. La crisis que estamos viviendo nos enseñó que una situación de estas requiere de la acción de todos, que solo con la ayuda de todos podemos salir adelante, que el apoyo para las personas más afectadas es esencial y que las acciones colectivas son fundamentales para sobrellevar los efectos de la crisis. El amor al prójimo debe reflejarse en el respeto a las medidas sanitarias que protegen a los demás, así como la disposición a construir soluciones en conjunto.

  1. Es importante hacer énfasis en la búsqueda de una solución para las personas más afectadas por el impacto económico de la pandemia

Debemos plantearnos como objetivo fundamental poder otorgar un ingreso vital mínimo para las personas que viven en pobreza, para que puedan vivir con dignidad, así como garantizar el derecho fundamental a una vivienda digna, a la salud, a una educación de calidad, al acceso a agua potable y a un ambiente sano.

La sociedad post pandémica debe plantearse como objetivo fundamental una sociedad más equitativa, también debemos tomar medidas para distribuir la inequidad en la distribución del ingreso. Evitar el deterioro de los salarios reales, reducir la informalidad y la precariedad laboral e impulsar un sistema tributario más progresivo, deben ser objetivos de la sociedad como un todo.

  1. De la crisis sanitaria la impresión generalizada es que estamos saliendo o vamos a salir relativamente pronto.

Poco a poco se empieza a ver la luz al final del túnel, aunque todavía nos falta caminar un trecho importante y empiezan a surgir nuevos retos. El mundo observa con preocupación cómo la variante Delta se vuelve la variante dominante del virus en muchos países, siendo esta variante más contagiosa que las otras, incluso que la variante original que presuntamente salió de Wuhan, China. Costa Rica ya registra la presencia de la variante Delta en el país, así como de la variante Lambda, ambas variantes de preocupación, según la OMS. Se suma a lo anterior, que existen personas en el país que se resisten a vacunarse, lo que ha frenado el avance inmunitario y el logro efectivo de la inmunidad de rebaño. En el interín tenemos que atender el llamado a seguir colaborando entre todos, mantener la vigilancia, el uso adecuado de mascarillas, a evitar actividades públicas masivas en lugares cerrados.

Por otra parte, se ha producido el acaparamiento de vacunas por parte de los países más ricos, al punto que se está llegando a la posibilidad de que muchas vacunas en poder de países desarrollados lleguen a alcanzar su fecha de vencimiento sin haber sido utilizadas. La tan deseada inmunidad de rebaño es global, no local, estamos conectados y este egoísmo y falta de solidaridad, y hasta engaño, atrasó toda proyección de mejora conjunta en el manejo de la crisis; ahí ya, empezamos a fallar en grande. Se difundieron además y con amplitud algunas de las dificultades que han ralentizado el sistema COVAX, un esfuerzo multinacional de acopio y distribución de vacunas contra el COVID-19. Así las cosas, el egoísmo con el que se ha manejado el tema de la vacunación mundialmente, está atrasando la salida del problema y provocando más enfermedad, una extensión de la crisis y más sufrimiento.

  1. Por ello, a nivel de países desarrollados y en vías de desarrollo, en lo que ya desde hace un tiempo se viene pensando es en la reactivación de la economía.

No cabe duda de que la reactivación económica es una necesidad, que la pandemia se ha convertido en un problema, simultáneamente, local y global. Pero una reactivación de la economía en términos de una superación de la crisis provocada por la pandemia, como una vuelta al pasado, manteniendo el mismo sistema económico y las formas insostenibles de relacionamiento con el ambiente, con la avidez de recuperación que lo caracteriza y de la que tecnológicamente hoy día es tan capaz, sería radicalmente insuficiente. ¿Cómo sería una reactivación pensada en términos de abandonar el uso de energías fósiles y optar por energías y tecnologías amigables con la naturaleza, objetivos hacia los que como un máximo pareciera ya se están dando pasos?

Este cambio es importante como necesario, pero es insuficiente. Recordemos que el Papa Francisco ya estaba escribiendo su carta Fratelli Tutti cuando sobrevino la pandemia, denunciando la naturaleza tan poco humana y fraterna inherente al sistema económico, financiero y comercial actual, que incluso la escribió años después (3/10/2020) de la Laudato Si’ (4/05/2015) sobre la imperiosa necesidad del cuidado del planeta, nuestra casa común. En otras palabras, la necesidad de concebir y crear otra economía es anterior y superior a reactivarla e incluso a hacerla más amigable con la naturaleza. Hay que hacerla humana. Tiene que ser una economía en función del ser humano. El ser humano todo y todos los seres humanos tienen que ser el centro de la economía.

En Costa Rica no concretamos una estrategia de reactivación efectiva y, más bien, nos hemos sumido en un proceso de ajuste fiscal centrado en recortes de gasto, que provocarán más problemas para llevar la economía costarricense a una senda sostenible de recuperación económica y atrasarán la necesaria reducción del desempleo.

  1. Conocedores, expertos y decisores en el campo de las tecnologías, sobre todo de la tecnología informática, ya nos están presentando la digitalización como la base cultural de la nueva forma de vida y cómo la tecnología será capaz de activarla.

Tecnológicamente hablando puede ser cierto. Pero el problema que enfrentamos, anterior a la emergencia de la pandemia, es humano, cultural y social, no meramente tecnológico, que en absoluto se va a resolver con el desarrollo de nuevas tecnologías y la intensificación de la globalización, al contrario, se va a agravar, con sus efectos ya presentes de concentración de riqueza, desigualdad, discriminación y exclusión, empobrecimiento y migraciones. El ser humano y su entorno, deben ser el centro de las políticas públicas, que busquen el bienestar general como objetivo final. La salida de la pandemia debe centrarse en esa premisa básica, o seguiremos tropezándonos con “las mismas piedras” que antes de la crisis del COVID-19. No podemos volver a la “normalidad” pre pandémica.

  1. La digitalización va a generar la pérdida de empleos, cantidad de puestos están siendo sustituidos por tecnologías que hacen el trabajo de otros y otras

La superación de la pandemia y la necesidad de reactivar la economía, deben ser ocasión para concebir, formular, proyectar y poner las bases progresivas de un proyecto país profundamente fraterno y solidario. Desde ya cada proyecto y política pública nuevos deben pensarse en esta nueva dirección, como pasos hacia la misma y de la misma, una comunidad nacional y global profundamente humana, fraterna y solidaria donde todos podamos desarrollarnos lo más humanamente posible. En ningún proyecto de los que se discuten en la Asamblea hay un énfasis en el reentrenamiento del personal. A este aspecto hay que darle mucho énfasis dadas las proyecciones futuras de un mundo más digitalizado, virtualizado y automatizado.

  1. En este sentido hay que retomar la parábola del buen samaritano, donde están los criterios para organizar el mundo tomando como centro al ser humano.

La inclusión o exclusión de las personas que sufren define los proyectos económicos, políticos, sociales y religiosos. Cada día enfrentamos la opción de ser el Buen Samaritano y para reconstruir el mundo es necesario tener los criterios de la parábola del Buen Samaritano. Reconocer y superar la tentación que nos circunda, somos analfabetos en acompañar, cuidar y sostener a los más frágiles y débiles.

Solo hay dos tipos de personas, los que se hacen cargo del dolor y los que pasan de largo. El creer en Dios no garantiza el vivir como a Dios le agrada. Hay que ver al Señor en el hermano, esto es un reto. Vivimos en un mundo donde se menciona al Señor, pero no nos apropiamos de Él…creemos que debe ser Él el que haga, que a nosotros no nos toca hacerlo.

  1. En este nuevo marco deben inscribirse leyes como las de reformas y proyectos de ley, como el Proyecto de Ley Marco de Empleo Público, y por supuesto todos los proyectos y políticas tendientes a la reactivación económica.

Es importante el orden de una materia fundamental como el empleo público, pero esto no puede ser llevado adelante con criterios fiscalistas como norte, que no piensen en las condiciones de trabajo de miles de funcionarios públicos que aportan a la construcción del país. Es importante que se exija eficiencia en sus funciones y responsabilidad por sus actos, pero esto debe hacerse con políticas que promuevan mejores prácticas de trabajo y no castiguen la remuneración salarial en general, como parte de políticas de austeridad que han comprobado su falencia en otros países.

  1. Hay que hacer un diagnóstico del país que necesitamos.

Debemos plantear un modelo económico que nos permite alcanzar el máximo bienestar por medio del bien común y escoger proyectos y políticas que nos conduzcan al mismo. Se trata de un proyecto país, con la participación de toda la ciudadanía, resultado de un consenso nacional, que atraviesa organizaciones sociales, empresarios, partidos y gobiernos. La responsabilidad es de los políticos con la participación crítica de la ciudadanía.

“Es posible comenzar de abajo y de a uno, pugnar por lo más concreto y local, hasta el último rincón de la patria y del mundo, con el mismo cuidado que el viajero de Samaría tuvo por cada llaga del herido. Busquemos a otros y hagámonos cargo de la realidad que nos corresponde sin miedo al dolor o a la impotencia, porque allí está todo lo bueno que Dios ha sembrado en el corazón del ser humano.”

Encíclica Fratelli Tutti

José Amando Robles Robles, céd. 800520054
Carlos Pentzke Pierson, céd. 800750461
Natalia Jiménez Carvajal, céd. 106200962
Arturo Córdoba Sequeira, céd. 108060635
Axel Fernández Fajardo, céd. 800490514
Deyanira Sequeira Ortíz, céd. 102480675
Virginia Hernández Esquivel, céd. 400970377
Fernando Rodríguez Garro, céd. 401650895
Del grupo Maestro Eckhart.