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Etiqueta: huella ecológica

¿Cómo medir nuestro impacto para construir un futuro sostenible?

Por Sofía Morera Oses

En julio de 2025, se registró el Día del Sobregiro de la Tierra, lo que quiere decir que la humanidad ya había consumido todos los recursos que la naturaleza puede regenerar de manera sustentable en un año; convirtiéndose en el sobregiro ecológico más anticipado del que se tenga registro (WWF, 2025).

La Red Global de la Huella Ecológica (GFN) junto con la Universidad de York, indicaron que actualmente la humanidad está haciendo uso de los recursos naturales un 80% más rápido que la capacidad en que los ecosistemas pueden regenerarse, lo que equivale a consumir los recursos de casi dos planetas Tierra para sostener ese nivel de actividad; este consumo insostenible de recursos naturales no solo afecta a la población actual, sino que compromete en gran medida la seguridad y disponibilidad de recursos para las generaciones futuras (WWF, 2025).

Con el objetivo de evaluar el impacto ambiental y promover acciones hacia un desarrollo sostenible se puede usar la Huella Ecológica, la cual es un indicador que mide el impacto de la actividad humana en el planeta, para esto, cuantifica la superficie biológicamente productiva necesaria para proveer los recursos consumidos y absorber los residuos generados por una persona, actividad o comunidad; la unidad de medida que se utiliza es la hectárea productiva (WWF, 2024).

Es decir, permite conocer la sostenibilidad del modo de vida y comparar regiones o países, entendiendo que no todos los países o personas demandan la misma cantidad de recursos, por lo que la huella que produce cada país/persona es diferente (WWF, 2024).

Por ejemplo, un ciudadano promedio de EE.UU. puede tener una huella ecológica de 8.2 hectáreas mientras que en Costa Rica es de aproximadamente 2 hectáreas por habitante. Ambos indicadores, superan el parámetro de comparación es la biocapacidad de la Tierra, que es actualmente de 1,6 hectáreas globales por persona, según el informe de World Wildlife Fund (WWF).

También se puede utilizar la Huella de Carbono, que cuantifica la cantidad de gases de efecto invernadero (GEI) que emiten las actividades humanas tanto directa como indirectamente (como el uso de combustibles fósiles en el transporte, industria, energía y agricultura), se mide en toneladas de CO2 equivalente (Espíndola y Valderrama, 2011). Entre más emisiones se generen, más se aporta al calentamiento global y por tanto al cambio climático.

Poder medir la huella de carbono resulta clave para diseñar planes de mitigación y reducción de emisiones en los países, contribuyendo a la lucha contra el cambio climático. Todas las personas tenemos una huella de carbono, hay diversos factores que influyen en el tamaño de esa huella, por ejemplo, del consumo de cada persona, los productos que suelen comprar, la dieta que tienen, cómo viajan, la forma en que se utiliza la energía en los hogares, etc.

Para ayudar al planeta, debemos:

Reducir el consumo de energía, aunque en Costa Rica la energía proviene en su mayoría de fuentes renovables, es fundamental ser conscientes de nuestro consumo de energía. Desconecte los aparatos electrónicos que no esté utilizando, evite dejar luces encendidas y revise las conexiones de su hogar.

Mejorar los hábitos de consumo, la producción de cualquier producto requiere el uso de energía y consumo de recursos naturales. Compre menos, reutilice, recicle y aproveche los productos de segunda mano. Antes de comprar algo, hágase la pregunta “¿realmente lo necesito?”.

Viajar responsablemente, los automóviles son sumamente contaminantes, si tiene la oportunidad opte por un auto eléctrico. También puede disminuir el uso: haga menos viajes, comparta el viaje, utilice transporte público o viaje en bicicleta siempre que pueda.

Para evaluar su propia huella y reflexionar sobre su estilo de vida actual, puede escanear los códigos QR. A la izquierda Huella Ecológica y a la derecha Huella de Carbono:

Bibliografía

Espíndola, C; & Valderrama, J. 2011. Huella del Carbono. Parte 1: Conceptos, Métodos de Estimación y Complejidades Metodológicas. Información Tecnológica Vol. 23 Nº 1 – 2012. https://scielo.conicyt.cl/pdf/infotec/v23n1/art17.pdf

WWF (World Wildlife Fund). 2024. ¿Qué es la huella ecológica?, ¿Cómo se produce? ¿Cómo la podemos reducir? Consultado el 05 de noviembre, 2025. https://www.wwf.es/nuestro_trabajo/informe_planeta_vivo_ipv/huella_ecologica/

WWF (World Wildlife Fund). 2025. La Tierra vive en 2025 el sobregiro ecológico más anticipado del que se tenga registro. Consultado el 05 de noviembre, 2025. https://wwf.panda.org/es/?14374441%2FLa-Tierra-vive-en-2025-el-sobregiro-ecologico-mas-anticipado-del-que-se-tenga-registro

Finca Boryana: hongos shiitake y conservación

Ignacio Arroyo Trejos

Rodeada de extensas áreas protegidas se encuentra Finca Boryana, emprendimiento ubicado en San Gerardo de Dota que ha perfeccionado la práctica milenaria del cultivo de hongos shiitake sobre sustratos naturales. A partir de 2013, la finca comenzó a experimentar con la producción de shiitake utilizando madera de roble como sustrato. Esta técnica se caracteriza por ser una actividad con una baja huella ecológica, además de producir hongos gourmet de excelente calidad. Actualmente se puede visitar la finca y realizar un recorrido para conocer sobre las propiedades nutritivas y medicinales de estos hongos, así como las prácticas sustentables que hacen posible su cultivo. Adicionalmente se realizan caminatas de observación de hongos silvestres y aves, entre otras actividades.

El shiitake (Lentinula edodes) es el segundo hongo más consumido a nivel mundial y lentamente se abre paso en los mercados costarricenses. Es una especie muy apreciada en la gastronomía oriental y gourmet por su textura y sabor. Entre sus propiedades nutricionales están: su proteína de alta calidad; un alto contenido de fibra dietética, vitaminas y minerales; y un bajo contenido de calorías; entre otras propiedades que lo vuelven una excelente opción para incluirlo como parte de una alimentación saludable.

Mención aparte merecen sus propiedades medicinales que lo han hecho una de las especies de hongos más estudiadas en décadas recientes. Estos avances en la investigación clínica de compuestos activos presentes en el shiitake han demostrado que es efectivo en el tratamiento para reducir el colesterol; presenta actividad antioxidante (previene el envejecimiento prematuro); tiene efecto inmunomodulador (ayuda a combatir infecciones virales y bacterianas) y efecto citostático (reduce el crecimiento de tumores). Es por esto que los extractos de esta especie ya se utilizan en la medicina alopática para el tratamiento del cáncer por ejemplo, además de su uso milenario en la medicina oriental.

La producción de hongos comestibles utilizando sustratos naturales es una actividad sustentable con una baja demanda de energía y una baja producción de residuos, entre otros beneficios ambientales. Mediante el aprovechamiento de podas controladas de árboles de roble, se permite la regeneración del bosque, reduciendo con esto la pérdida de biodiversidad. Al mismo tiempo, se aumenta la tasa de fijación de carbono atmosférico. Es por esto que la FAO la ha incluido entre los agrosistemas de importancia global para mitigar los efectos del cambio climático antropogénico. Por otra parte es una técnica de bajo costo inicial que no requiere de instalaciones, equipo ni personal altamente especializados, por lo que se constituye en una alternativa económicamente sustentable para las comunidades de las zonas altas de la cuenca del río Savegre.

La cuenca del río Savegre es de gran importancia para la conservación de la biodiversidad. Alberga hasta un 20% del total de especies de flora descritas en el país. En sus 58917 hectáreas se han descrito 44 ecosistemas distintos, de los cuales más de una cuarta parte corresponden a ecosistemas de altura, por encima de los 2100 metros sobre el nivel del mar. Es por esta razón que cualquier actividad humana que se realice en los robledales de las zonas altas del Savegre debe tener como principal objetivo la conservación de estos ecosistemas tropicales, de gran importancia para el aprovechamiento del recurso hídrico, como fuente de medicamentos, depósitos de carbono, sitios recreacionales y de gran belleza escénica, entre otros servicios ecosistémicos.

Finca Boryana tiene como misión el llevar a cabo actividades agroecoturísticas que permitan la bioalfabetización de los visitantes en temas de ecología y conservación del bosque nuboso, al mismo tiempo que se producen alimentos saludables sin provocar impactos negativos en el ambiente. Para más información contáctenos al teléfono (506) 8393-2734.

Le invitamos a ver el video explicativo: