Skip to main content

Etiqueta: investigadores

Posdoctorado de la UCR se propone atraer mentes deseosas de investigar a alto nivel en el trópico

Actualmente hay cinco investigadores e investigadoras incorporadas en proyectos de diversas disciplinas

Alicia Correa, de Ecuador; Marcelo Araya, de Costa Rica; y Diego Dierick, de Bélgica, son investigadores del Programa de Posdoctorado de la UCR. Fotos: Laura Rodríguez y Karla Richmond.

Alicia Correa vino a Costa Rica interesada en trabajar con un hidrólogo de la Universidad de Costa Rica (UCR) que había conocido en Escocia. Mientras hacía su doctorado en Alemania, se enteró de la posibilidad de formar parte del Programa de Posdoctorado en temas de su especialidad.

Diego Dierich saltó de Filipinas a Costa Rica, a la Estación Biológica La Selva, en Sarapiquí. Allí trabajaba en estudios de universidades estadounidenses y conoció a quien sería el investigador principal del proyecto en el que ahora participa como investigador de posdoctorado de la UCR en el área de ecología microbiana.

Marcelo Araya, quien hacía un posdoctorado en la Universidad Cornell, en Estados Unidos, decidió regresar al país al presentársele la oportunidad de hacer un posdoctorado con una bióloga de la UCR, sobre vocalizaciones y comportamiento animal en murciélagos, en Golfito, en el sur del país.

Estos tres investigadores -los dos primeros extranjeros y el último costarricense- decidieron realizar un posdoctorado con un académico reconocido de la UCR en el ámbito internacional y con afinidad a su campo de estudio.

Así fue como ellos se incorporaron al Programa de Posdoctorado de esta universidad, creado en el 2016, con la idea de “atraer a personas que han tenido un buen entrenamiento académico, dentro o fuera del país, para que colaboren con un investigador en un proyecto específico”, indicó el coordinador, Dr. César Rodríguez Sánchez.

La UCR es la primera universidad de la región centroamericana que crea la figura del posdoctorado, una estancia de investigación que funciona en muchas universidades del mundo para efectuar estudios de mayor alcance. Actualmente, hay cinco investigadores de este nivel académico en la UCR, que trabajan en diferentes disciplinas y en proyectos de impacto, tanto de ciencia básica como de ciencia aplicada.

Los posdoctorados son una fase de transición en el proceso de madurez de una persona que desea seguir una carrera académica. Luego del doctorado, los investigadores hacen posdoctorados antes de lograr establecerse en algún puesto fijo.

El Programa en la UCR se concibió para hacer convocatorias anuales y apoyar de cinco a seis solicitudes al año. La primera se hizo en el 2017 y la segunda en el 2018. En el 2019 no se abrió la convocatoria y en estos momentos se le está dando mayor visibilidad, con miras a reiniciarlo en el 2021.

La idea es que participen tanto costarricenses que residen dentro y fuera del país, como extranjeros que quieran venir a Costa Rica y aportar su conocimiento.

Diego Dierick ha trabajado instalando dispositivos para muestreos de agua y aire en el suelo de los zompoperos (túneles y otras estructuras construidas por estos insectos), en la Estación Biológica La Selva. Foto cortesía Diego Dierick.

“Ellos vienen al país con una filosofía de ganar-ganar, ya que pueden seguir mejorando su currículo por medio de publicaciones y mayor experiencia, y la Universidad se beneficia con la alta calificación que ellos traen”, dijo Rodríguez.

De Filipinas a Costa Rica

El belga Diego Dierick, de 41 años, hizo el doctorado en Alemania, en ecología forestal y silvicultura en los trópicos, con énfasis en fisiología de plantas. Este estudio lo llevó por primera vez al trópico, pues su trabajo de campo lo desarrolló en Filipinas.

Anteriormente, había realizado dos maestrías en Bélgica, una en ingeniería industrial electrónica y la otra en manejo de bosques y paisajes, áreas que aplica a su trabajo.

En el 2010 vino a Costa Rica, acompañado de su esposa, a trabajar en un proyecto de investigación en la Estación Biológica La Selva, por referencia de una compañera de doctorado. Lo único que conocía del país era su reputación como destino turístico verde, con un buen nivel de vida.

En La Selva conoció al Dr. Adrián Pinto Tomás, especialista de la UCR en ecología microbiana, en un proyecto en el que se estudiaba a las hormigas cortadoras de hojas, como las zompopas. Posteriormente, se enteró de la posibilidad de trabajar con él como investigador de posdoctorado.

Actualmente, Dierick forma parte del grupo que investiga el microbioma intestinal de mamíferos herbívoros, como la danta y los osos perezosos, y de algunos insectos xilófagos (que comen madera), como algunos escarabajos. Estos estudios podrían llegar a tener aplicación en el futuro, por ejemplo en la industria.

“No llevo ni un año en el Programa. Como vengo de otra disciplina, muchas de las técnicas y la teoría he tenido que aprenderlas. Es un reto porque es un campo muy diferente al mío y es un área de trabajo muy relevante en la actualidad”, comentó.

Dierick considera muy positiva esta experiencia, pues le permite trabajar en un grupo de investigación muy activo y realizar investigación de alto nivel. Además, le parece que el país ofrece una serie de ventajas, por ejemplo, un buen estándar de vida y una infraestructura adecuada para vivir y trabajar. Él vive en Sarapiquí con su esposa y dos niños, y los ingresos que percibe le alcanzan para solventar las necesidades de su familia.

Costa Rica no estaba en su mente

A Alicia Correa, de 34 años y de nacionalidad ecuatoriana, la atrajo la posibilidad de obtener experiencia al lado del investigador Christian Birkel, director del Observatorio del Agua y Cambio Global (OACG) de la Escuela de Geografía de la UCR.

Alicia Correa (segunda de izq. a der.) participa en un proyecto en zonas rurales con mujeres de las Asadas, a quienes se les enseña a monitorear el agua y a manejar algunas herramientas tecnológicas. Aquí en un taller en Liberia, Guanacaste. Foto: cortesía de Alicia Correa.

Ingeniera Civil de la Universidad de Cuenca, Ecuador; con una maestría en manejo de agua y suelo y con estudios de doctorado en hidrología, en Alemania, no dudó en trasladarse a nuestro país a trabajar como investigadora de posdoctorado.

“Costa Rica no estaba en mi mente. Siempre vi al país como un punto de vacaciones. Quería hacer un posdoctorado y tengo la convicción de que en universidades latinoamericanas podemos hacer ciencia de calidad”, expresó.

La llegada a Costa Rica, en el 2018, fue muy positiva desde el punto de vista cultural, “llegar a un país latinoamericano de nuevo”. Sin embargo, fue una de las primeras investigadoras posdoctoral en la UCR y le tocó abrir camino en la parte administrativa, cuando apenas se estaba creando el Programa.

Su trabajo se enfoca en hidrología tropical isotópica, como una herramienta para generar evidencia científica con una posterior aplicación en el manejo de los recursos hídricos. “Hay épocas muy secas y otras en las que hay mucho caudal. Entonces tratamos de interpretar cuáles factores están influyendo en el comportamiento de las cuencas”, explicó.

En la actualidad el OACG se encuentra monitoreando la cuenca del río San Carlos y realiza estudios de hidroclimatología, con un enfoque de ciencia ciudadana. Se trata de involucrar a la comunidad de la zona en el análisis de los resultados. Para Correa, este trabajo aporta beneficios en dos vías: “para nosotros porque nos ayudan a recoger datos, y para ellos porque se se empoderan con conocimiento de su entorno y de la calidad del agua».

También forman parte de redes nacionales e internacionales, como la Red de isótopos para el estudio de ecosistemas tropicales (Isonet) y Centers for Natural Resources and Development (CNRD), y han recibido financiamiento de Escocia, Alemania, Austria y Suiza. De hecho, su tercer año de posdoctorado será con fondos de Leverhulme Trust del Reino Unido, para un proyecto sobre modelación hidrológica en los trópicos.

“La expectativa que tuve con Birkel fue muy alta y lo estamos logrando. La experiencia ha sido muy positiva”, afirmó.

De regreso a Costa Rica

Marcelo Araya, de 38 años y biólogo graduado en la UCR, volvió a la institución como investigador de posdoctorado en el 2018. Había permanecido durante tres años en la Universidad Cornell, en Estados Unidos, donde realizó un posdoctorado en el laboratorio de ornitología.

Araya hizo su doctorado en la Universidad de Nuevo México, en ese mismo país, y se especializó en bioacústica y ecología del comportamiento.

Marcelo Araya, especialista en vocalizaciones de animales, trabaja actualmente con un grupo de murciélagos que se refugian en hojas de heliconias, banano y plátano, en un proyecto de la Sede del Sur de la UCR.

“En Cornell está la colección más grande de sonidos animales y un laboratorio de bioacústica. Solo en el laboratorio de ornitología hay una comunidad de investigadores de posdoctorado cercana a las 30 personas. Trabajar allí era muy bonito, unos sabían de una cosa y otros de otra, todos estábamos en un salón grande, cada uno en su cubículo. Y si uno no sabía hacer algo, iba y se lo preguntaba a quien supiera del tema”, rememoró.

Su experiencia como investigador se ha centrado en la generación de herramientas computacionales para el estudio de vocalizaciones, principalmente de aves. Estos sonidos son utilizados por ellos para comunicarse, colaborar y sincronizarse entre miembros de un grupo social e, inclusive, entre diferentes especies..

Su primer contacto con el Programa de Posdoctorado de la UCR lo tuvo por medio de la bióloga e investigadora, Gloriana Chaverri Echandi, quien buscaba a un investigador para que colaborara en sus estudios sobre murciélagos. “Me interesaba trabajar con otro grupo de animales. Quería ver qué tanto funciona lo que yo he hecho para sonidos perceptibles por los humanos, con las vocalizaciones ultrasónicas de los murciélagos”, dijo Araya.

Actualmente trabaja con Chaverri en la interpretación de un sistema de comunicación de unos murciélagos que se refugian en las hojas de heliconias, bananos o plátanos. Estos mamíferos producen un llamado de búsqueda de su grupo social y los que están dentro de la hoja producen una respuesta. Según Araya, es un sistema de reconocimiento de su propio grupo.

El investigador destacó varios aspectos que a su juicio debe tener un programa de posdoctorado. En primer lugar, que haya afinidad entre el postulante y el investigador principal, quien debe tener “un bagaje” que les dé reconocimiento internacional y con quienes se logre aprender.

En segundo lugar, los contratos deben ser un poco flexibles y contemplar la posibilidad de realizar presentaciones o participar en congresos a nivel internacional y de dar clases.

Al mismo tiempo, Araya resaltó que para mucha gente puede ser muy interesante hacer ciencia en el trópico y sobre todo en un país como Costa Rica, que posee gran riqueza en su biodiversidad. “Costa Rica tiene muchas facilidades porque hay una infraestructura adecuada para poder moverse rápidamente, es un país pequeño e ir en unas cuantas horas de la montaña al mar”, añadió.

El deseo de este coronadeño es quedarse en el país y para esto está valorando opciones laborales. “Prefiero vivir aquí, donde tengo a mi familia y a mis amigos. No le veo sentido que el país invierta diez años en mi formación profesional y que luego yo me vaya a trabajar fuera”, concluyó.

 

Patricia Blanco Picado

Periodista, Oficina de Divulgación e Información

Información tomada de: http://www.ucr.ac.cr/

Sea parte de SURCOS:

https://surcosdigital.com/suscribirse/

Producción audiovisual y divulgación de la ciencia en la UNA

  • Vicerrectoría de Investigación inicia programas de capacitación en comunicación de la ciencia para investigadores de la UNA

UNA produccion audiovisual y divulgacion de la ciencia2

Durante 2 días (23-24 marzo 2017) un grupo de jóvenes investigadores y estudiantes universitarios compartieron ideas, sobre las posibilidades que brinda la producción audiovisual para divulgar los resultados de la investigación científica.

El Dr. Alberto Salom Echeverría, Rector de la UNA y el Vicerrector de Investigación Msc. Daniel Rueda Araya, brindaron un mensaje de bienvenida al grupo y manifestaron que los beneficios para la investigación es altísima si se logra una difusión de calidad producto del trabajo de científicos que se familiaricen con el tema de la comunicación, que conozcan de diversas plataformas, aplicaciones y medios al alcance para difundir el conocimiento científico. También se hizo presente el Master Mario Alfaro Rodríguez, Presidente Ejecutivo del SINART y Vicepresidente del Consejo Directivo de la Asociación de Televisoras Educativas y Culturales de Iberoámerica.ATEI-Teib.

El Rector Salom resaltó la alianza con la Televisión Educativa Iberoamericana-teib para poder generar iniciativas de acompañamiento y sinergias para fortalecer la difusión de la ciencia en el ámbito comunal, nacional e internacional.

UNA produccion audiovisual y divulgacion de la ciencia4

El Vicerrector de Investigación Rueda Araya destacó la importancia de involucrar a las nuevas generaciones de investigadores de la UNA, para contribuir a la incorporación de la ciencia en la construcción de lo público y a la formación de una ciudadana informada y participativa. Acotó que la comunicación es determinante para la ciencia porque permite discursos, representaciones sobre la ciencia y su relación con la sociedad.

Con la participación de la Rectoría, Red de Jóvenes Investigadores, Programa de Innovación Metodológica Participación Estudiantil y Gestión del Conocimiento, estudiantes y otras dependencias dedicadas a la investigación en la Universidad Nacional, se exploraron diferentes formas de abordar la producción de cortos en vídeo como herramienta para difundir los alcances de las investigaciones en redes sociales, pauta en medios nacionales y a través de la plataforma de la Televisión Educativa Iberoamericana –Teib ( http://www.ibe.tv/) de la que forman parte universidades y canales de televisión en más de 23 países de Iberoamérica.

Este espacio académico estuvo a cargo de Alberto García Ferrer, Secretario General de la Televisión Educativa Iberoamericana y de Iris Amando, Coordinadora de Relaciones Institucionales y Comunicación de Teib y se constituyó en un esfuerzo del Programa de Capacitación y Divulgación Científica que impulsa la Vicerrectoría de Investigación para la popularización de la ciencia que realiza y produce en la UNA.

Este taller de Producción Audiovisual para la Investigación Científica el cual forma para del “Programa Árbol de Ciencia-TEIb” ( http://www.ibe.tv/es/canal/ciencia ) tiene como fin iniciar un proceso que permita un mayor acercamiento de los jóvenes investigadores a diversos formatos y géneros televisivos para impulsar la comunicación científica de la Universidad Nacional. De esta manera, contribuir en el desarrollo de capacidades creativas en el ámbito de producción de videos cortos para dar a conocer los procesos y resultados de sus proyectos.

UNA produccion audiovisual y divulgacion de la ciencia7

La dinámica del taller consistió en compartir los proyectos en los cuales están vinculados los y las participantes, así como generar reflexión y compartir entre las presentes ideas en materia de divulgación audiovisual, es decir, ¿qué se puede hacer con la información disponible? ¿Cómo la transmito al público? ¿Cómo utilizar el material disponible para contar una historia? ¿Qué formatos son los más apropiados? ¿Uso de lenguajes comunicativos de los materiales de investigación al alcance?

Para transformar y desarrollar las ideas en producción audiovisual, es necesario conocer el público meta, utilizar los recursos disponibles (contenido de video, imágenes, audios) para contar un relato que resuma los procesos y resultados de algún conocimiento científico, ser creativos, así como crear redes de apoyo e intercambio, manifestó el especialista García Ferrer.

UNA produccion audiovisual y divulgacion de la ciencia8

Para los participantes una de las mayores preocupaciones es la forma en la que se difunde la información y que además ésta sea atractiva al público. Es decir existen obstáculos como lo es el uso del lenguaje, que dificultan la fluidez de la comunicación o que la hacen incomprensible  a la audiencia. Esta es una de las razones que motivan la ausencia de la ciencia en los medios de comunicación. Este taller abrió un espacio de reflexión y análisis de materiales producidos y otras opciones para producir, difundir investigaciones y dar visibilidad a los científicos y sus resultados.

Desde la Vicerrectoría de la Universidad Nacional, se pretende visibilizar los trabajos científicos que se realizan. Por ello, posterior al taller se pretende dar acompañamiento a aquellos investigadores interesados en producir y editar videos cortos, en trabajar en iniciativas de televisión piloto para la divulgación científica de la UNA en coordinación con la Franja NCI Ciencia, que se aloja en la plataforma Web del Programa TEIb, ibe.tv.

( http://www.ibe.tv/es/canal/nci/3630/NCI-Universidad-Iberoamericana-2132017.htm )

UNA produccion audiovisual y divulgacion de la ciencia6

UNA produccion audiovisual y divulgacion de la ciencia8

UNA produccion audiovisual y divulgacion de la ciencia9

Por:

Gabriela Corrales Alfaro

Estudiante Sociología UNA

Luis Barrantes Ponce

Relaciones Intencionales

 

Enviado a SURCOS por MSc. Efraín Cavallini Acuña, Asesor Comunicación, Rectoría UNA.

Suscríbase a SURCOS Digital:

https://surcosdigital.com/suscribirse/

 

Investigaciones de la UCR benefician a productores guanacastecos

Andrea Marín Castro,

Periodista Oficina de Divulgación e Información

investigaciones-de-la-ucr-benefician-a-productores
La Feria Experimental de Santa Cruz organizó el II día del productor guanacasteco para dar a conocer su quehacer en investigación y acción social a la comunidad de Guanacaste (foto archivo ODI).

Decenas de productores guanacastecos se reunieron en el Recinto de Santa Cruz de la Universidad de Costa Rica para conocer los distintos proyectos de investigación y acción social que se desarrollan en la Finca Experimental de Santa Cruz (FESC) que benefician las prácticas agrícolas en la zona.

El II día del productor guanacasteco se caracterizó por el interés de las y los asistentes en los resultados de diversos estudios que llevan a cabo estudiantes y profesores de la UCR.

Como parte de las exposiciones se habló sobre los estudios que se están realizando en relación con arbustos para la alimentación de animales, opciones forrajeras para Guanacaste, el manejo nutricional del cultivo de pitahaya, híbridos de maíz para el trópico seco, variedades de arroz, sorgo y maíz para Guanacaste, así como hidrología y cambio climático.

investigaciones-de-la-ucr-benefician-a-productores2
Margarita Cortés pertenece a una asociación de pequeños agricultores que se han visto beneficiados por la asesoría y colaboración de la UCR para el mejoramiento de sus actividades productivas (foto Anel Kenjekeeva).

Ana Rita Sánchez Jiménez y Margarita Cortés Cruz, pequeñas agricultoras de Nandayure, pertenecen a una asociación agrícola en la que se cosecha arroz y también practican la ganadería y el forraje, así como la siembra orgánica de pepino, papaya y chile dulce entre otros productos. Aquí la UCR ha colaborado con la comunidad brindándoles asesoría en el cultivo orgánico y en la provisión de semillas y abono.

Ambas mujeres reafirmaron la importancia de contar con la colaboración de la institución y el beneficio que esto produce en sus comunidades.

Por su parte, Marco Antonio Briceño Pizarro, gerente de Coope Chorotega, llegó a la actividad interesado en conocer acerca de los granos, pues son materia prima para el trabajo que desempeña en el área del procesamiento de carnes.

investigaciones-de-la-ucr-benefician-a-productores3
Marco Antonio Briceño se interesó por las investigaciones que realiza la FESC en el cultivo de granos para alimentación animal (foto Anel Kenjekeeva).

“Estas actividades deberían hacerse más seguido pues son las que ponen a la mano de los productores del sector agropecuario información idónea para las distintas actividades que realiza cada uno”, destacó Briceño.

Marta Corea Mairena de Cañas Dulces de Liberia, contó que en su finca se dedican a la ganadería y a la siembra de maíz. Están en proceso de recuperar potreros sembrando pastos de manera orgánica, para una mejor alimentación del animal.

“Me gusta que la Universidad se acerque a los productores, porque está activa en investigar y nos está dando gotitas de sabiduría para ir mejorando. Las fincas deben ser diversificadas y aprovechar espacios de tierra y hoy nos están dando ideas en este sentido, lo que resulta de mucha utilidad para los que estamos aquí”, señaló Corea.

investigaciones-de-la-ucr-benefician-a-productores4
Las y los productores guanacastecos participaron en charlas donde conocieron a fondo el quehacer de la FESC (foto Anel Kenjekeeva).

Esta jornada se realizó con el fin de promover la articulación entre los productores y la Universidad, así como fortalecer el vínculo con organizaciones gubernamentales y privadas para impulsar el desarrollo del sector agropecuario de Guanacaste.

El Ing. Edgar Vidal Vega, coordinador de la FESC, explicó que la idea de este tipo de actividad es dar a conocer toda la labor que se realiza en la Finca, pero no solo esto, si no poner a disposición de los pequeños y medianos productores los resultados y productos que se han obtenido a lo largo de los años.

Oscar Vázquez Rosales, director regional del Ministerio de Agricultura y Ganadería (MAG), resaltó la importancia de la actividad ya que esto permite el avance como sociedad, y suma esfuerzos entre instituciones y productores. Recalcó que las investigaciones de la FESC son conocimientos prácticos aplicables al sistema productivo guanacasteco.

En la actividad participaron productores de la provincia de Guanacaste, así como funcionarios y funcionarias de instituciones públicas y privadas relacionadas con el tema agroproductivo.

 

Información tomada de: http://www.ucr.ac.cr/

Suscríbase a SURCOS Digital:

https://surcosdigital.com/suscribirse/

Promueven alternativas para reducir uso de plaguicidas

Katzy O`neal Coto,

Periodista Oficina de Divulgación e Información

Promueven alternativas para reducir uso de plaguicidas
La UCR capacita a agricultores en buenas prácticas para la aplicación de plaguicidas y la posterior limpieza de sus equipos y desecho de residuos (foto Archivo ODI).

Investigadores de diferentes centros e institutos de la UCR aportan conocimientos y nuevas alternativas para reducir el uso de pesticidas y plaguicidas en el sector agrícola, los cuales afectan la salud humana y el ambiente.

En Costa Rica el uso de estos productos químicos para el control de plagas en los cultivos está bastante extendido. Son utilizados, tanto por los grandes productores de frutas para exportación como la piña y el banano, como entre los pequeños productores de hortalizas y tubérculos como la papa, zanahoria y cebolla, entre muchos otros.

En el Laboratorio de Análisis de Residuos de Plaguicidas del Centro de Investigación en Contaminación Ambiental (CICA) se estudia y determinan los residuos de más de 150 plaguicidas de distintas familias presentes en el agua, frutas, vegetales, granos, suelos y sedimentos, gracias a que cuentan con equipo de alta tecnología, capaz de detectar concentraciones muy bajas de estos productos.

En el país los plaguicidas son un mal necesario, asegura el químico Mario Masís Mora, coordinador del Laboratorio de Análisis de Residuos de Plaguicidas. En su opinión, el mayor problema es que persisten prácticas inadecuadas en su aplicación y en el desecho de residuos que generan contaminación ambiental al acumularse en los suelos y en los ríos.

Con el propósito de aportar una alternativa para degradar los sobrantes de plaguicidas, los investigadores del Laboratorio de Biorremediación del CICA trabajan en el establecimiento de un método completamente natural que consiste en la neutralización de aguas contaminadas con altas cargas de plaguicidas, con el fin de evitar la contaminación de espacios acuíferos, y por lo tanto, de animales y personas. Este método conocido como biobeds utiliza una mezcla rica en microorganismos que permiten descomponer los materiales tóxicos utilizados como plaguicidas.

En todos los proyectos que desarrolla el Centro de Investigación en Contaminación Ambiental (CICA) se incluyen capacitaciones orientadas a la promoción de buenas prácticas agrícolas y reducción de la contaminación, en las que participan agricultores, comunidades y organizaciones de la sociedad civil y del sector privado.

En la UCR otros centros de investigación y unidades también trabajan en el tema de los plaguicidas, aportando alternativas desde diferentes áreas del conocimiento.

En el Laboratorio de Microbiología Agrícola del Centro de Investigaciones Agronómicas (CIA) formularon productos de base natural para el control de plagas como una alternativa a los agroquímicos. Este Laboratorio desarrolla biofertilizantes, además de una amplia gama de microorganismos que se encuentran en diferentes etapas de desarrollo. Además, han establecido alianzas con el sector empresarial para distribuir estos productos entre los agricultores de todo el país.

En conjunto, el CICA y el Centro de Investigaciones Agronómicas desarrollaron un proyecto para contribuir al manejo y uso adecuado de los insecticidas nematicidas en la agricultura en colaboración con el Ministerio de Agricultura y Ganadería (MAG) y Corbana. El proyecto busca entender las implicaciones que conlleva la pérdida de eficacia de los insecticidas nematicidas, que los vuelve incapaces de controlar las plagas de nemátodos, lo cual genera importantes pérdidas en las cosechas y empuja a los productores a aplicar mayores dosis provocando una mayor contaminación del ambiente.

En el proyecto se determinó el tipo y tamaño de las poblaciones de nemátodos presentes en fincas productoras de papa en Cartago y de banano en Limón, se analizaron los residuos de plaguicidas en los suelos y se capacitó a agricultores y personal del MAG sobre el uso y manejo adecuado de estos productos para el control de plagas.

Por otra parte, desde el Laboratorio de Ensayos Biológicos (LEBI) se promueve una red de investigación sobre la toxicidad acumulativa de plaguicidas insecticidas y otros agroquímicos que afectan la salud humana y animal. Esta iniciativa responde a la preocupación por el aumento en el número de casos de enfermedad renal crónica en el país, que podrían estar relacionados con la acumulación de plaguicidas.

 

Información tomada de: http://www.ucr.ac.cr/

Suscríbase a SURCOS Digital:

https://surcosdigital.com/suscribirse/

Jóvenes científicos de la UCR participaron en expedición oceanográfica internacional

Compartieron conocimientos con investigadores de varios países

Jóvenes científicos de la UCR participaron en expedición oceanográfica internacional
El RSS James Cook es un barco científico inglés que cuenta con laboratorios e instrumentos especializados para la investigación de los océanos (foto Anel Kenjekeeva).

 

Andrea Marín Castro

Periodista Oficina de Divulgación e Información

 

Durante 45 días, Lizdenia y Octavio estuvieron en altamar a bordo del barco científico inglés RSS James Cook. Aunque tuvieron que sacrificar las celebraciones de fin de año, la experiencia valió la pena, pues junto con investigadores de Inglaterra, Ecuador, Colombia y Estados Unidos comenzaron a estudiar las profundidades de lo que se conoce como la Cuenca de Panamá.

Estos dos jóvenes costarricenses se vincularon a esta expedición, financiada por el National Environment  Research Counsil (NERC) del Reino Unido, por recomendación del Centro de Investigaciones en Ciencias del Mar y Limnología (Cimar) de la Universidad de Costa Rica (UCR).

Para Lizdenia Arce Marenco, egresada del Bachillerato en Física de la UCR, esta oportunidad se convertirá en la puerta de entrada a un posgrado en oceanografía física en la Universidad de Liverpool.

Jóvenes científicos de la UCR participaron en expedición oceanográfica internacional2
Octavio Esquivel y Lizdenia Arce fueron los investigadores costarricenses que estuvieron en el buque científico RSS James Cook, investigando el océano profundo (foto Anel Kenjekeeva).

“Entre mis principales tareas estaba bajar diferentes instrumentos oceanográficos para el estudio de la columna vertical. Se estudió las propiedades físicas como temperatura, corrientes, salinidad, oxígeno, helio. Estos instrumentos se bajaban a profundidades desde los 1500 a 4000 metros y se recogieron muestras para luego ser analizadas”, explicó Arce.

Estar con científicos de primer nivel y compartir conocimientos, fue parte fundamental para el crecimiento profesional de los dos jóvenes, quienes destacaron la paciencia y buena disposición de los investigadores.

Jóvenes científicos de la UCR participaron en expedición oceanográfica internacional3
El buque RSS James Cook atracó en Caldera el pasado 16 de enero, donde culminó la expedición (foto Anel Kenjekeeva).

Octavio Esquivel Garrote es biólogo, por lo que su trabajo se centró en la recolección de muestras de zooplancton mediante arrastres verticales, desde los 100 metros de profundidad hasta la superficie, con una red de 200 micas. Según especificó, lo que se recoge con este tipo de red da una idea general de lo que puede haber en la columna de agua. Algunas de estas muestras se llevaron al Cimar para su análisis.

“Para uno que no está acostumbrado a hacer ciencia de esta manera es una experiencia increíble, por las facilidades que representa un buque de investigación como éste, con todos los recursos que tiene y que se pueden explotar”, recalcó Esquivel.

Para ambos científicos es importante que a partir de esta experiencia se logre una mayor vinculación académica y de investigación entre oceanógrafos nacionales e ingleses.

Jóvenes científicos de la UCR participaron en expedición oceanográfica internacional4
El Dr. Miguel Ángel Morales recalcó el interés científico, ambiental y económico que tiene la investigación de las profundidades del océano (foto Anel Kenjekeeva).

La expedición

Esta fue la primera campaña oceanográfica de una expedición internacional, para investigar la circulación del océano profundo en la Cuenca de Panamá, liderada por el oceanógrafo físico del Centro Nacional de Oceanografía, Dr. Miguel Ángel Morales Maqueda.

Jóvenes científicos de la UCR participaron en expedición oceanográfica internacional5
El Dr. Álvaro Morales, director del Cimar y el investigador Jenaro Acuña, recibieron en Caldera a los investigadores costarricenses y tuvieron la oportunidad de conversar con el Dr. Morales. con el objetivo de estrechar lazos académicos. En orden usual: Sonia Recalde, investigadora de Ecuador, Lizdenia Arce, Álvaro Morales, Octavio Esquivel, Miguel Ángel Morales y Jenaro Acuña (foto Anel Kenjekeeva).

Según explicó, la motivación para realizar la investigación se centró en que hay poco conocimiento de cómo funciona el océano profundo, esto quiere decir la masa de agua que está por debajo de los 1000 metros y que corresponde al 70% del océano.

“Uno de los objetivos de esta campaña era tratar de clarificar como es la circulación a la escala de una cuenca oceánica completa. El interés de la Cuenca de Panamá es que es una cuenca lo suficientemente grande para que uno pueda ver la circulación a gran escala, pero suficientemente pequeña para estudiarla en uno o dos meses”, mencionó el científico.

Para recabar información se lanzó equipo especializado en el centro y parte sur de la cuenca donde se midió temperatura, corrientes, salinidad, presión y turbulencia del agua. También se realizaron análisis para determinar la transmisión de la luz en el agua.

Dependiendo de los resultados que se obtengan, se planea volver con vehículos submarinos para tomar imágenes de las profundidades y complementar las investigaciones.

El proyecto inició en abril del 2014 y se extenderá a lo largo de cuatro años. La primera expedición, en la que participaron los estudiantes costarricenses, se realizó del 4 de diciembre de 2014 al 16 de enero de 2015.

Pie de foto: El RSS James Cook es un barco científico inglés que cuenta con laboratorios e instrumentos especializados para la investigación de los océanos (foto Anel Kenjekeeva).

 

Información tomada de: http://www.ucr.ac.cr/

Suscríbase a SURCOS Digital:

https://surcosdigital.com/suscribirse/