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Etiqueta: plan regulador

Caída en el Índice de Competitividad Nacional en Montes de Oca se debe principalmente a factores ajenos al gobierno local

Jorge Mora Portuguez

M.Sc. Jorge Mora Portuguez

Ante las interpretaciones erróneas y malintencionadas que han circulado recientemente sobre el Índice de Competitividad Nacional (ICN) 2025, es necesario aclarar que el descenso del cantón del puesto 3 al puesto 17 se debe principalmente a variaciones en indicadores que no son competencia del gobierno local.

El ICN 2025 muestra tres caídas críticas que explican la mayor parte del descenso:

1. Educación Técnica, que pasa de 100,0 a 0,8 puntos, y que es responsabilidad del Ministerio de Educación Pública (MEP).

2. Salud, que cae 23,5 puntos y que depende de la CCSS, no de la Municipalidad.

3. Acceso a Tecnologías de la Información y Comunicación (TIC) en educación, que también corresponde al MEP.

Estas tres caídas en esos indicadores suman más de 150 puntos de variación y representan la principal explicación del cambio en la posición del cantón en el ranking nacional.

Por otra parte, en áreas donde la Municipalidad sí tiene competencia directa, el ICN 2025 muestra avances importantes, entre ellos:

Compromiso con la sostenibilidad, que aumenta +27,6 puntos gracias a mejoras en gestión ambiental y recolección de residuos.

Dinamismo de mercados, que sube +33,8 puntos, evidenciando mayor articulación productiva y oportunidades económicas en el cantón.

Desde la Municipalidad reconocemos que existen retos por atender en trámites, digitalización y red vial cantonal; y ya se encuentran en ejecución acciones específicas para fortalecer estos ámbitos. Sin embargo, dichas variaciones no son la causa principal en el descenso general del cantón; cuyo origen, como se ha indicado, es, sobre todo, competencia de entidades nacionales ajenas al gobierno local.

Quienes formamos parte de la Municipalidad de Montes de Oca reafirmamos nuestro compromiso con la transparencia, la eficiencia y el desarrollo sostenible de nuestro cantón, e invitamos a los distintos sectores a analizar el ICN con rigurosidad y sin politiquería, para buscar soluciones que nos permitan volver a recuperar y mejorar el puesto que ha tenido históricamente nuestro cantón. La actualización del Plan Regulador que está ya en sus últimas etapas; el traslado de la sede del gobierno local al llamado “Outlet Mall”, a inicios del próximo año; la reestructuración del organigrama interno de la Municipalidad para hacerla mucho más eficiente en la prestación de sus servicios, así como la profundización del proceso de digitalización y modernización en los sistemas informáticos de nuestro gobierno local, resolverán en, buena medida, las debilidades que se han señalado en el ICN que corresponden al gobierno local.

Escazú avanza: convocan a reunión general del Movimiento Ciudadano Pro Plan Regulador tras histórico acuerdo municipal

El Movimiento Ciudadano Pro Plan Regulador de Escazú convoca a una reunión general el lunes 24 de noviembre, a las 6:30 p.m., en la sede de CODECE en San Antonio. La invitación está dirigida a todas las personas, organizaciones y colectivos que han venido articulando esfuerzos para garantizar una participación ciudadana efectiva en la construcción del nuevo Plan Regulador de Escazú.

Esta convocatoria se enmarca en un momento significativo para el cantón. Tal como informó la Municipalidad de Escazú en su sitio oficial —ejemplificado en la imagen sobre la próxima asamblea distrital de San Antonio para elegir representación ciudadana en la Comisión del Plan Regulador— el proceso de conformación de espacios participativos se está extendiendo a todos los distritos del cantón. En el caso de San Antonio, la asamblea distrital ampliada será el miércoles 3 de diciembre, en el Salón Distrital, para la elección de la persona representante de la sociedad civil para el período 2024–2028.

Un logro histórico construido desde la ciudadanía

Según detallan las organizaciones convocantes, este momento es producto de meses de civismo, educación, conocimiento colectivo y organización comunitaria.
Gracias a la articulación de diversos colectivos el Concejo Municipal aprobó, con 5 votos a favor y 2 en contra, la instauración de la Comisión del Plan Regulador con participación ciudadana, un avance calificado como histórico para la gobernanza local.

Este hito abre un camino hacia un proceso más transparente, democrático y alineado con las necesidades reales de los barrios y comunidades del cantón.

Próximos pasos

La reunión del 24 de noviembre permitirá:

  • Coordinar la participación del movimiento frente a las asambleas distritales.

  • Definir estrategias conjuntas para consolidar una representación amplia y legítima.

  • Informar a las personas asistentes sobre el avance del proceso y los roles ciudadanos en la Comisión del Plan Regulador.

  • Fortalecer el trabajo colectivo de cara a las próximas etapas.

Las organizaciones hacen un llamado a mantener la unidad que ha caracterizado el proceso:
“Porque cuando el pueblo se une, Escazú avanza”.

Imagen de cabecera: una de las actividades de participación ciudadana en este proceso.

Comunidad de Escazú impulsa la restauración de la Comisión de Trabajo del Plan Regulador

Escazú, 22 de octubre de 2025.
Vecinas y vecinos del cantón de Escazú hicieron un llamado a la transparencia y la participación ciudadana en la planificación del territorio, solicitando la reactivación de la Comisión de Trabajo del Plan Regulador, instancia legalmente establecida que por años funcionó de manera exitosa, integrando a la ciudadanía, el Concejo Municipal y la Administración en talleres y mesas de trabajo.

Sin embargo, durante las últimas administraciones municipales, esta comisión fue debilitada hasta desaparecer. En los meses recientes, gracias al esfuerzo de la comunidad y al apoyo de una minoría comprometida dentro del Concejo Municipal, se ha intentado su reactivación. El proceso, no obstante, ha sido desgastante y lleno de obstáculos: mociones aprobadas y luego derogadas, acuerdos incumplidos y trabas administrativas que han frenado la convocatoria de elecciones ciudadanas para elegir a las personas representantes.

Actualmente, la Comisión de Asuntos Jurídicos del Concejo Municipal de Escazú aprobó —en empate— una serie de nueve modificaciones al reglamento de creación de la Comisión, las cuales, de ser ratificadas, entorpecerían el proceso y pospondrían por más de seis meses la posibilidad de elegir representación ciudadana.

La decisión final sobre estas modificaciones se tomará el martes 28 de octubre a las 7:00 p.m., durante la sesión del Concejo Municipal de Escazú.

En una sesión anterior, la presencia masiva de la comunidad, junto con la cobertura de medios de comunicación y la intervención de la Policía Municipal, logró que todas las regidoras y regidores aprobaran la creación de la Comisión. Sin embargo, nuevas trabas administrativas amenazan con revertir ese avance.

La comunidad subraya la importancia de la participación ciudadana en la planificación urbana y ambiental, un derecho respaldado por la legislación costarricense y por el Acuerdo de Escazú, considerado un referente de democracia ambiental en América Latina.

“Queremos que Costa Rica sepa que Escazú está defendiendo su derecho a decidir sobre su desarrollo urbano, ambiental y social. La participación ciudadana no debe ser vista como un obstáculo, sino como una garantía de transparencia y buen gobierno”, señalaron representantes comunales.

Escazú discute el sentido de la participación ciudadana

Observatorio de Bienes Comunes

Después de que la presión vecinal lograra reinstalar la Comisión del Plan Regulador, el proceso vuelve a estar en disputa.

Una nueva reforma al reglamento podría restringir la voz ciudadana, al imponer procedimientos y requisitos que dejan en manos de la institucionalidad lo que debería ser un espacio de decisión comunal.

Vecinas y vecinos denuncian que esta reforma alarga los plazos, limita la autonomía y convierte la participación en un trámite controlado.

La discusión no es solo sobre normas: es sobre quién tiene derecho a decidir el futuro del territorio.

El Observatorio de Bienes Comunes UCR analiza este nuevo capítulo del proceso y las tensiones entre orden institucional y democracia participativa.

Leé la nota completa: https://bienescomunes.fcs.ucr.ac.cr/escazu-la-disputa-por-la-participacion-ciudadana-entra-en-una-nueva-etapa/

Concejo Municipal y la Alcaldía de Montes de Oca se solidarizan con personas afectadas

SURCOS recibió el siguiente comunicado enviado por el regidor Jorge Mora Portuguez

Desde el Concejo Municipal y la Alcaldía de Montes de Oca reafirmamos nuestro compromiso y nuestra solidaridad con las familias afectadas por las recientes inundaciones.

Ante la falta de respuesta oportuna del Gobierno Central y de la Comisión Nacional de Emergencias (CNE), la Municipalidad de Montes de Oca ha asumido un papel activo y solidario para atender la emergencia que vive nuestra comunidad.

Desde las primeras horas, cuadrillas de Obras, la Policía Municipal, la Alcaldía y personal voluntario —incluyendo integrantes del Concejo Municipal— se han hecho presentes en las zonas afectadas, aportando maquinaria, medios de transporte y apoyo logístico para aliviar la situación de las familias damnificadas.

Mientras tanto, la Municipalidad continúa realizando gestiones para obtener los ₡5 mil millones necesarios para ejecutar las obras de infraestructura que brinden una solución definitiva y segura a este problema.

Es importante recordar que la causa principal de las inundaciones se originó en el colapso de la tubería de trasvase construida por la Municipalidad de San José dentro del territorio de Montes de Oca, la cual desviaba parte de las aguas de la quebrada Negritos hacia el río Torres.

Este sistema colapsó en 2023, generando las graves inundaciones ocurridas tanto en 2024 como en los últimos días.

Adicionalmente, según informes del Laboratorio Nacional de Materiales y Modelos Estructurales (LANAME), el MOPT construyó inadecuadamente los drenajes del puente frente a la Facultad de Derecho, lo que provoca anegamientos recurrentes en ese sector y el desbordamiento de aguas hacia Barrio Dent.

En el pasado la zona ha sufrido, además, los impactos de construcciones irregulares, incluso sobre tramos entubados de la quebrada Negritos entre Barrio Dent y Barrio Escalante, lo que ha agravado la situación.

A pesar de estas condiciones adversas, la Municipalidad ha mantenido una intervención constante, realizando labores de limpieza, dragado y mantenimiento del cauce para reducir los impactos y proteger a la población hasta donde ha sido posible.

Seguimos además con el proceso de elaboración de un nuevo Plan Regulador, bajo una visión de desarrollo sostenible y de adaptación frente al cambio climático, protegiendo y conservando las áreas naturales que aún quedan, en incentivando la construcción con mayores retiros, con cordones verdes y materiales que impidan la impermeabilización del suelo.

Nuestro compromiso y el de la Administración municipal es claro: seguir actuando con responsabilidad, transparencia y solidaridad hasta que podamos contar con soluciones estructurales que garanticen la seguridad y el bienestar de todas las personas.

Participar no es un trámite: Escazú entre la apertura y el control del Plan Regulador

Observatorio de Bienes Comunes, UCR

Hace apenas unas semanas, la reinstalación de la Comisión Especial del Plan Regulador fue celebrada como una victoria de la ciudadanía organizada. Tras semanas de presión y diálogo, el Concejo Municipal reconoció que la planificación del territorio no puede quedar únicamente en manos técnicas o institucionales.

Sin embargo, la propuesta de reforma al reglamento que regula esa misma Comisión abre una nueva discusión: ¿se garantiza realmente una participación ciudadana abierta o se corre el riesgo de transformarla en un trámite controlado?

De la movilización a la reglamentación

El documento COR-AL-2690-2025, firmado por el alcalde, propone cambios sustanciales al reglamento interno de la Comisión del Plan Regulador. Entre ellos, redefine las asambleas vecinales como Asambleas Ampliadas de Concejo de Distrito, formaliza los procesos de elección y rendición de cuentas de las personas representantes distritales, y establece nuevos formularios, plazos de inscripción de hasta seis meses, juramentaciones y validaciones técnicas.

A primera vista, estas medidas podrían leerse como un esfuerzo por fortalecer la transparencia. Pero la reforma también introduce un desplazamiento de poder: la participación ciudadana pasa de ser un derecho ejercido directamente por la comunidad a un procedimiento administrado desde la institucionalidad municipal.

Entre la apertura y la exclusión

La propuesta reconoce algunos avances importantes:

  • -Amplía la posibilidad de postular candidaturas a cualquier persona participante, no solo a representantes de asociaciones formalmente constituidas.

  • -Promueve la paridad de género y la publicidad de los procesos.

  • -Mantiene el derecho de las comunidades a remover representantes que no rindan cuentas.

Sin embargo, al mismo tiempo:

  • -Centraliza el control en los Concejos de Distrito, que ahora validan documentos, verifican requisitos y deciden quién puede participar.

  • -Excluye la inscripción en el momento de la asamblea, imponiendo una barrera temporal de seis meses que podría desincentivar la participación espontánea.

  • -Traslada la rendición de cuentas al ámbito institucional, debilitando la autonomía de las asambleas vecinales.

El resultado es un nuevo tipo de equilibrio inestable: se preserva la legalidad, pero se erosiona la vitalidad ciudadana que había hecho posible la reapertura de la Comisión.

El riesgo de la “participación controlada”

Regular la participación puede ser una forma de democratizar los procesos, pero también puede convertirse en una herramienta de filtrado social y político.

Cuando la posibilidad de incidir depende de formularios, juramentaciones y validaciones previas, el espacio público deja de ser un terreno de encuentro para transformarse en un espacio de autorización.

El poder de decidir quién puede hablar o votar se traslada del colectivo ciudadano al aparato administrativo.

En este sentido, la reforma no solo redefine el reglamento: redefine el tipo de ciudadanía que se considera legítima. Aquella que cumple los requisitos, domina el lenguaje técnico y tiene tiempo para navegar la burocracia. Quedan fuera —aunque no explícitamente— las voces menos organizadas, los liderazgos barriales emergentes y los grupos informales que históricamente han sido el motor de la defensa comunitaria del territorio.

La “participación controlada” no elimina la participación; la domestica. La vuelve predecible, clasificable y compatible con los ritmos de la gestión municipal. Pero pierde su potencial político: el de cuestionar, proponer y reinventar lo común.

Participar no es llenar un formulario

Participar no es solo cumplir un protocolo. Es incidir en las decisiones sobre el territorio, aportar saberes locales y defender el derecho colectivo a imaginar otros futuros posibles.

Si la reglamentación se convierte en un filtro, el proceso deja de ser un ejercicio de ciudadanía viva y pasa a ser un trámite para ciudadanos permitidos.

La reforma, en su intento por ordenar, corre el riesgo de debilitar aquello que el movimiento ciudadano de agosto demostró: que la planificación puede ser un acto de aprendizaje colectivo, no un expediente más.

Para seguir aprendiendo juntos

El debate sobre el Plan Regulador de Escazú apenas comienza.

La reinstalación de la Comisión fue una conquista ciudadana; la discusión sobre su reglamento será una prueba de madurez democrática.

De lo que se decida ahora dependerá si Escazú consolida un modelo de gestión territorial abierto, colaborativo y comunitario, o si deriva hacia una versión tecnificada de la participación donde todo está permitido… siempre que se pida por escrito.

Un verdadero diálogo sobre el territorio no se logra con más papeleo, sino con más confianza, transparencia y escucha mutua.

El reto está en construir una institucionalidad que no solo administre la participación, sino que aprenda de ella.

Fuente: Observatorio Bienes Comunes UCR.

Reforma al Reglamento del Plan Regulador de Escazú: la comunidad exige más participación

La organización CODECE informa a la comunidad de Escazú que este martes 30 de septiembre los regidores municipales presentarán una reforma al Reglamento de la Comisión del Plan Regulador de Escazú.

Desde la organización se recalca que cualquier modificación a este reglamento debe fortalecer la participación ciudadana y no restringirla, pues las decisiones sobre el desarrollo y ordenamiento territorial del cantón impactan directamente en la vida de sus habitantes, el uso del suelo y la protección de los recursos naturales.

CODECE advierte que se mantendrá atenta y vigilante ante la propuesta de reforma, recordando que el futuro de Escazú no puede decidirse a espaldas de la ciudadanía. La consigna es clara:
“¡Reforma en camino! La comunidad espera más participación”.

La organización hace un llamado a vecinos y vecinas a involucrarse activamente en este proceso, para asegurar que las decisiones que se tomen realmente reflejen los intereses colectivos y promuevan un desarrollo local sostenible, inclusivo y democrático.

Escazú abre camino: el reto del diálogo real en el Plan Regulador

Observatorio de Bienes Comunes, UCR

Este martes 26 de agosto, el Concejo Municipal de Escazú confirmó el acuerdo alcanzado tras semanas de movilización ciudadana: se reinstala la Comisión Especial del Plan Regulador, garantizando que la ciudadanía tenga voz en la definición de este instrumento clave para el futuro del cantón.

La decisión marca un hito en la defensa de la participación ciudadana en Escazú. Luego de intensas tensiones, denuncias públicas y vigilias en el propio Concejo, vecinas y vecinos lograron abrir nuevamente el espacio para incidir en el proceso, revirtiendo el intento de trasladar toda la responsabilidad a una oficina técnica sin representación comunitaria.

Para las comunidades, se trata de un paso fundamental: el Plan Regulador incide directamente en la vida cotidiana, desde la protección de los Cerros de Escazú y las fuentes de agua, hasta la regulación de barrios, comercios e infraestructura.

Lo que viene: selección de representantes

Con el acuerdo ya en firme, el siguiente paso será la selección de las personas representantes de la ciudadanía que integrarán la Comisión. En cada uno de los tres distritos del cantón (Escazú, San Antonio y San Rafael) se realizarán audiencias públicas para elegir a quienes representarán la voz vecinal en este proceso. Esta fase será crucial para asegurar que exista una representación legítima, diversa y comprometida con los intereses colectivos.

Un diálogo necesario: conocimiento técnico y comunitario

Más allá de la conformación, se abre ahora una discusión de fondo: ¿cómo dialogan el conocimiento técnico y el comunitario en la construcción del Plan Regulador?

Tradicionalmente, la planificación territorial se ha basado en estudios técnicos —cartografía, imágenes satelitales, censos, diagnósticos sectoriales— que, aunque necesarios, resultan insuficientes para reflejar la complejidad de la vida cotidiana en el territorio.

El Manual de Planes Reguladores como Instrumento de Ordenamiento Territorial señala que la información para estos procesos puede y debe nutrirse de múltiples fuentes: inventarios ambientales, análisis socioeconómicos, talleres participativos, consultas locales, recorridos comunitarios y observación directa del entorno.

La experiencia de vecinas y vecinos aporta elementos que ningún estudio puede reemplazar: la memoria de inundaciones y deslizamientos, la relación con las quebradas y nacientes, el impacto de la expansión comercial en la vida barrial, la tensión entre agricultura y urbanización. Son trayectorias e historias de vida que permiten comprender el territorio en su dimensión más humana y comunitaria.

El reto estará en reconocer este conocimiento como parte legítima del proceso y no como un complemento secundario. Solo con un diálogo equilibrado entre lo técnico y lo comunitario será posible construir un Plan Regulador que garantice seguridad, sostenibilidad y calidad de vida para el cantón.

Un proceso en disputa

La reinstalación de la Comisión no significa que el camino esté despejado. Lo que viene será un proceso cargado de tensiones sobre qué contenidos se priorizan, cómo se recogen los aportes y hasta dónde se consideran las propuestas ciudadanas en las decisiones finales.

Sin embargo, la experiencia de estas semanas demuestra que la organización comunitaria es capaz de incidir. La presión vecinal no solo recuperó un espacio que se había cerrado, sino que dejó claro que la planificación territorial es un asunto de interés público que no puede definirse entre cuatro paredes.

Un nuevo capítulo para Escazú

Con este acuerdo, Escazú abre un nuevo capítulo en la gestión de su territorio. La Comisión Especial del Plan Regulador tendrá ahora la tarea de construir un puente entre la mirada técnica y la experiencia comunitaria.

El desafío será mantener viva la participación y asegurar que el futuro del cantón se decida de manera transparente, democrática y con la voz activa de quienes lo habitan día a día.

Herramientas y técnicas participativas disponibles

El Manual de Planes Reguladores enfatiza que la construcción de estos instrumentos no puede limitarse al análisis técnico, sino que debe integrar activamente la participación de las comunidades. Para ello, identifica un conjunto de herramientas que permiten recopilar, sistematizar y validar la información de manera inclusiva y transparente. Entre ellas se encuentran:

  1. Audiencias públicas: espacios formales donde se presentan avances, se recogen observaciones y se abren canales de diálogo directo con la ciudadanía.
  2. Talleres participativos: dinámicas grupales en las que se trabaja con mapas, dibujos y debates abiertos para recoger percepciones, propuestas y problemáticas locales.
  3. Mapeo comunitario: ejercicios donde las personas habitantes identifican en planos o cartografía sus recorridos, lugares de importancia, zonas de riesgo o sitios de conflicto.
  4. Entrevistas y encuestas: permiten profundizar en las experiencias de distintos sectores de la población, recogiendo datos cualitativos y cuantitativos.
  5. Mesas temáticas: espacios de discusión especializados (agua, movilidad, riesgo, vivienda, ambiente) que permiten detallar aportes sectoriales.
  6. Recorridos de campo y observación directa: visitas conjuntas a barrios, quebradas, zonas agrícolas o áreas de riesgo para complementar los diagnósticos técnicos con la mirada comunitaria.
  7. Inventarios y diagnósticos participativos: registros elaborados con apoyo de la población local sobre recursos naturales, espacios públicos, prácticas productivas o usos del suelo.

Estas herramientas demuestran que la información relevante para un Plan Regulador no proviene únicamente de estudios satelitales o consultorías técnicas, sino también del conocimiento acumulado en la vida cotidiana de las comunidades. Su incorporación fortalece la legitimidad del proceso y abre oportunidades para construir un ordenamiento territorial más justo y equilibrado.

Extracto de la sesión del Concejo Municipal

Escazú: Acuerdo sobre la gestión del Plan Regulador

Comunicado

La Municipalidad de Escazú comunica que el Concejo Municipal de Escazú y un grupo de ciudadanos acordaron la solución al tema de la gestión del Plan Regulador. El Plan Regulador se trabajará en conjunto entre la Oficina Técnica y la Comisión.

El acuerdo se dio luego de que el alcalde Orlando Umaña Umaña y el vecino Miguel León conversaron y promovieron una mesa de diálogo, para buscar soluciones en beneficio del cantón de Escazú, y convocaron a los 7 regidores propietarios para buscar un acuerdo.

Mañana martes se estará presentando el documento en la Sesión Ordinaria del Concejo Municipal, para que se apruebe el acuerdo al que se llegó para que trabajen la Oficina y la Comisión en conjunto.

Además, en otros puntos se fortalecerá las capacidades de la Oficina Técnica y los procesos de participación ciudadana.

Sesión municipal entre el interés ciudadano y el cálculo político

El Observatorio de Bienes Comunes de la Universidad de Costa Rica (UCR) presenta un análisis de lo sucedido en la sesión ordinaria del Concejo Municipal de Escazú del pasado 19 de agosto, en la que se esperaba debatir sobre el Plan Regulador.

No obstante, la agenda dio un giro inesperado: durante dos horas se expuso un informe sobre Vivienda Municipal y, de forma sorpresiva, se incluyó un nuevo punto para presentar los avances de la Oficina de Plan Regulador.

Lo que no se preparó fue el espacio para la ciudadanía. Afuera del edificio, cerca de cien vecinas y vecinos exigían una participación real en la construcción del Plan Regulador: incidir en las decisiones de zonificación, asegurar que el ordenamiento priorice zonas seguras y comunitarias y no solo negocios inmobiliarios, además de plantear medidas preventivas frente a la creciente presión urbanística.

A esto se suma la preocupación por la zona protectora de los Cerros de Escazú, vital para la recarga hídrica, la biodiversidad y la seguridad ante desastres. La disputa no es solo técnica, se trata de definir si el ordenamiento territorial garantizará condiciones de vida dignas y sostenibles para el cantón o si se impondrán intereses fragmentados y comerciales.

Mientras tanto, dentro de la sesión, la Municipalidad improvisaba con sillas y nunca resolvió los problemas de audio. Lo único asegurado fue la presencia de la Policía Municipal. Quienes asistieron denunciaron la falta de condiciones mínimas para la participación ciudadana y cuestionaron que las audiencias solicitadas iniciaran hasta pasadas las diez de la noche.

La administración, por su parte, defendió la labor de la Oficina de Plan Regulador con más de una hora de exposición, apelando a combatir la “desinformación” ciudadana. Pero lo que quedó en evidencia fue la ausencia de espacios efectivos de diálogo, el uso de advertencias sobre sanciones penales y una dinámica política marcada más por el cálculo que por la construcción de confianza.

El trasfondo revela que el Plan Regulador no es un asunto meramente técnico, en Escazú se entrecruzan tensiones entre agricultura, comercio y zonas residenciales. La presión inmobiliaria acorrala a las familias agricultoras y amenaza la zona protectora, mientras la falta de agua, las inundaciones recurrentes y la mezcla desordenada de usos de suelo son problemas que la ciudadanía identifica día a día.

La sesión se extendió hasta casi la medianoche, cuando finalmente se abrió un espacio para escuchar a la comunidad. Como resultado de la presión vecinal, se propuso convocar una sesión extraordinaria en el Centro Cívico, con condiciones adecuadas para un diálogo más abierto.

Acceda a la nota completa en la página del Observatorio de Bienes Comunes UCR: https://bienescomunes.fcs.ucr.ac.cr/sesion-municipal-entre-el-interes-ciudadano-y-el-calculo-politico/