Productores celebran fallo judicial que revierte decisión sobre importación de aguacate mexicano
Representantes del sector agropecuario nacional calificaron como una “victoria legal y productiva” el reciente fallo del Tribunal Contencioso Administrativo, que anuló la resolución del Servicio Fitosanitario del Estado (SFE) que permitía la importación de aguacate desde México, sin los requisitos sanitarios previamente establecidos.
Durante una conferencia de prensa celebrada en el Colegio de Periodistas, organizaciones como FrutalCoop, APACOP, Frutales del Llano y productores independientes destacaron que el fallo reconoce que la medida del SFE fue tomada sin los análisis técnicos y jurídicos correspondientes, y bajo presiones políticas que pusieron en riesgo la sanidad vegetal del país.
Johanna Chanto Vargas, gerente de FrutalCoop, subrayó que el levantamiento de la restricción permitió la entrada de fruta sin garantías fitosanitarias, generando pérdidas económicas severas para los productores locales: “Nuestros agricultores enfrentaron una competencia desleal y no lograron colocar sus productos en los mercados nacionales; muchos debieron dejar perder su cosecha”.
Por su parte, el abogado Francisco Dall’Anese Álvarez, quien lideró el proceso judicial, criticó duramente al gobierno del presidente Rodrigo Chaves, acusándolo de actuar con negligencia en la defensa del estatus fitosanitario nacional. Dall’Anese Álvarez recordó que la resolución anulada carecía de sustento técnico y violaba acuerdos internacionales, como las normas fitosanitarias de la OMC.
Además, llamó al Poder Ejecutivo a no apelar la sentencia y proteger la reputación del país. “Costa Rica se expone a perder credibilidad internacional si permite la entrada de productos que no cumplen con los estándares exigidos”, advirtió.
Las organizaciones involucradas apelaron al artículo 50 de la Constitución Política, que obliga al Estado a velar por un ambiente sano y una producción nacional protegida. En este sentido, recalcaron que el fallo judicial también representa un triunfo para la salud pública y la soberanía alimentaria.
Los representantes concluyeron con un llamado a reconocer el agro como un pilar estratégico para el desarrollo del país y a reforzar políticas que garanticen condiciones justas para los productores locales. “No pedimos que nos regalen nada, solo que nos dejen trabajar con herramientas adecuadas y reglas claras”, afirmó Chanto.