Katherine Ríos, recuperadora cabécar de Kono Jú desde 2019, fue atacada con piedras y patadas por integrantes de la familia Rivera.
Lunes 21 de febrero de 2022. El día 20 de febrero a las 5:30 p.m. Katherine Ríos se dirigía a Kono Jú a dejar unos víveres en una motocicleta con su cuñado, William Hernández. En el camino se encontró a Evelyn y Mariela Rivera quienes la increparon con insultos: «zorra», «hijueputa», etc. Luego cuando pasaron frente a la casa de la familia Rivera (que queda a unos pocos metros de la entrada de Kono Jú) le tiraron una piedra que por suerte no la impactó.
Minutos después, al terminar los pendientes en Kono Jú, Katherine y su cuñado se dirigían en motocicleta al centro del Territorio Cabécar de China Kichá. Justo en el momento de pasar frente a la casa de la familia Rivera, Katherine recibió el golpe de una piedra por lo que cayó de la motocicleta; cuando Katherine cayó al suelo, Karol, Jeylin y Darlyn Rivera le tiraron más piedras y la agredieron con patadas. William intentó detener el ataque pero fue golpeado con una piedra y fue mordido por Karol cuando éste intentó detener los golpes contra Katherine.
Katherine pudo huir con su cuñado, luego de recibir los golpes. En este momento se encuentra estable pero sí cuenta con varios moretones en su cuerpo. Katherine es una de las recuperadoras cabécares que recuperó Kono Jú, el primer terreno recuperado tras el asesinato del Uniwák Sergio Rojas Ortiz del Territorio Bribri de Salitre.
La familia Rivera ha sido denunciada pública y judicialmente en numerosas ocasiones. Es reconocida como uno de los actores más hostiles contra las personas recuperadoras cabécares de China Kichá y que también son afines a los intereses de los ocupantes ilegales no indígenas que se encuentran en el Territorio.
Demandamos a la familia Rivera que se abstenga de agredir a las y los compañeros recuperadores.
Exigimos, nuevamente, al Estado que garantice nuestra integridad física y vida. Además de que realice sus compromisos y expulse a los y las no indígenas del Territorio; de lo contrario la violencia seguirá en nuestra contra.
Recuperadoras y recuperadores cabécares de Kono Jú.
Por Mauricio Álvarez Mora. Coordinador del Proyecto ED-3526 “Geografía y Diálogo de Saberes», docente Escuela de Geografía, Ciencias Políticas, Programa Kioscos Socio ambientales UCR, IDELA-UNA.
Hoy 24 de febrero se cumplen dos años del asesinato de Jerhy Rivera, defensor de los derechos humanos, ambientales y territoriales del pueblo Brörán.
Jehry nació el 1 de noviembre de 1974 en Térraba. Desde joven, fue un valiente y vehemente dirigente indígena, luchó contra el despojo de tierras y la discriminación hacia los pueblos indígenas, por la recuperación del territorio y otros bienes comunes naturales y culturales. Lo conocimos luchando por la protección del Río Grande de Térraba ante la amenaza de la construcción de la represa hidroeléctrica Diquís, decía “el río no se entrega a cambio de una carretera o una construcción”.
El activista fue acribillado a balazos por la espalda dentro del territorio Bröran de Térraba, a la edad de 46 años, como resultado de un linchamiento por parte de usurpadores que han invadido el territorio Brörán. Este devastador acontecimiento involucra de manera directa al Estado, que siendo testigo del hecho, no intervino.
Hoy hace dos años, en horas de la mañana varias familias del pueblo originario Brörán iniciaron una nueva recuperación de su territorio, una de esas familias fueron los Rivera. Antes de las recuperaciones, los indígenas Brörán solo tenían la propiedad efectiva del 10% de su territorio, mientras el 90% estaba en manos de no indígenas, fincas de ganado de hasta 1000ha están en manos de una sola persona no indígena, así muchas familias fueron expulsadas, viéndose forzadas a migrar fuera de sus tierras, asignadas legalmente.
La respuesta a la recuperación de dichas tierras hace dos años, fue una turba de personas no indígenas que en principio quería, como se dice que expresaban, “tajadear” a machetazos al líder Pablo Sibar Sibar, quien además es investigador indígena de la Universidad Estatal a Distancia. Por milagro no hubo más víctimas, como cuenta la misma familia de Jehry, quienes sobrevivieron a un ataque la noche antes del asesinato, perpetrado por un grupo armado de más de 100 personas no indígenas que ejercieron violencia, “a vista y paciencia” de la Fuerza Pública.
Por décadas, la inacción, la omisión y la impunidad, han marcado la relación del Estado con los territorios indígenas, lo que ha implicado que instancias internacionales como la Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH), ordenen al Gobierno, tal y como sucedió en 2015 y nuevamente en 2016, tomar medidas especiales para proteger a los pueblos indígenas de la violencia y las amenazas que sufren por parte de los usurpadores no indígenas, ocupantes ilegales en los territorios de Térraba y Salitre.
Dos asesinatos, 16 líderes y lideresas amenazadas de muerte y más 86 actos de violencia dirigidos a pueblos indígenas, registrados solamente durante 2020, evidencian que el gobierno no sólo ha incumplido las medidas cautelares, sino también que es responsable de no intervenir para la detención de la violencia que sufren los pueblos indígenas, que además se ha incrementado y se ha extendido a la mayoría de territorios del Sur y hasta Bajo Chirripó en Matina, donde a finales de años pasado hubo un violento ataque contra el dirigente indígena cabécar Leonel García, catalogable como intento de homicidio.
En 2021, el Observatorio Comunitario de Acciones Colectivas (OCAC-IIS) registró 143 acciones como concentraciones, denuncias, marchas, bloqueos y otras relacionadas con la defensa de los territorios y los derechos de las personas indígenas, principalmente en las comunidades originarias al sur del país en donde son comunes las recuperaciones de tierras organizadas por las comunidades Salitre, Cabagra, Brörán de Térraba, Cabécar de China Kichá y el pueblo Brunca de Rey Curré.
En 2020 el Juzgado Penal de Buenos Aires de Puntarenas, rechazó la solicitud de la prisión preventiva y ordenó la libertad de los sospechosos por el asesinato de Jehry; quienes pasan libres y frecuentemente, frente a la casa de la familia Rivera y el jardín donde descansan los restos del activista. El ente judicial solamente impuso medida cautelar a uno de los implicados.
En octubre de 2021, tras una audiencia preliminar, ese mismo juzgado elevó a juicio la causa contra un sujeto de apellidos Varela Rojas, acusado de homicidio calificado, amenazas agravadas y portación ilegal de arma permitida.
La información del Ministerio Público apunta que al inicio de la investigación figuraron como imputados dos de los hermanos de apellido Varela, pero que “durante el proceso de recolección y análisis de pruebas por parte del Organismo de Investigación Judicial (OIJ) y la Fiscalía, únicamente se logró vincular a un acusado” con el delito. En síntesis, en dos años no hay asomo de justicia pronta y cumplida.
Sigamos luchando por la justicia y el fin de la impunidad, sumando acciones para que la verdadera democracia llegue a estos territorios.
*edición de estilo Rebeca Arguedas Ramirez, académica UNED
Testimonios de la madre y el padre, familiares y otro líderes indígenas:
Este miércoles 23 de febrero se cumplen dos años (24-2-20) del asesinato de Jerhy Rivera, defensor de los derechos humanos, ambientales y territoriales del pueblo Brörán. Para conocer el contexto del crimen, el programa Voces y Política, contará a las 5:00 p.m. con la participación de Osvaldo Durán, docente del ITEC y ecologistas, además de la representación de las voces del pueblo Brörán, familiares de Jerhy Rivera y otros pueblos originarios.
Se invita a la participación en redes sociales o por medio de llamada telefónica. Teléfono: 2234 3233
Desde la Coordinadora de Lucha Sur Sur (CLSS), se comparte el video documental «El conflicto indígena en Costa Rica: Usurpación, asesinatos y corrupción» del colectivo NO PASA NADA. Gracias al apoyo por la lucha de los derechos de los Pueblos Originarios, así como la confianza y coordinación con la CLSS para la producción del material.
En el 2021 inició una investigación para intentar exponer, desde la perspectiva de algunos pueblos indígenas, la complicada situación que viven hoy ante la inacción del gobierno costarricense.
¡Justicia para Sergio, Jerhy y los Pueblos Originarios!
Pueblos Bribri y Cabécar, además de organizaciones que participan en la Coordinadora de Lucha Sur Sur (CLSS) desconocemos que Sonia Rojas sea parte de los Pueblos Originarios
Viernes 11 de febrero del 2022. Recordamos a la opinión pública de Costa Rica, una vez más, la conformación de los Pueblos Bribri y Cabécar; conformación que se debe a nuestra cosmogonía, cosmovisión y a nuestras tradiciones milenarias. Los Pueblos Bribri y Cabécar fueron creados por Sibö a través de los Ditsö que son las semillas que dieron origen a nuestros clanes, a nuestros Pueblos. Así, cada persona que pertenezca al Pueblo Bribri o Cabécar debe contar con un clan, el cual únicamente puede ser trasladado por las madres indígenas. Nuestros Pueblos son matrilineales, por lo tanto, toda persona Bribri o Cabécar cuenta con un clan que fue heredado por su madre indígena.
Este nuevo recordatorio resulta necesario ante las recientes declaraciones publicadas el día de hoy en una nota del Semanario Universidad, en que la diputada electa del Partido Liberación Nacional (PLN) por la provincia de Puntarenas, Sonia Rojas, dice ser parte de los Pueblos Bribri y Cabécar; y con ello dice ser la voz y la representante de nosotros, los Pueblos.
Como Pueblos Bribri, Cabécar y la Coordinadora de Lucha Sur Sur (CLSS) desmentimos sus palabras. Sonia Rojas no pertenece a ninguno de los Pueblos pues su madre no pertenece a ninguno de estos Pueblos. Así, de acuerdo al linaje matrilineal y la conformación clánica de nuestros Pueblos, Sonia Rojas no es una mujer indígena.
La señora, Sonia Rojas con sus declaraciones irrespeta profundamente nuestra cultura, cosmogonía y cosmovisión. Atenta directamente contra una de nuestras creencias más claras e importantes sobre nuestros Pueblos y con ello pretende desinformar y hacer creer a los Pueblos Originarios que tienen una representación en una Asamblea Legislativa que estará volcada al neoliberalismo y a la negación de nuestros derechos sobre la tierra-territorio, nuestra cultura, tradiciones y a las posibilidades de multiplicarla.
Así, rechazamos las palabras de Sonia Rojas y la desmentimos, también recordamos que el legado del Partido Liberación Nacional (PLN) en nuestros Pueblos ha sido una política clientelar, que niega nuestros derechos y que atenta contra nuestros Territorios. Fue Oscar Arias Sánchez quién en 2008 declaró de interés nacional el Proyecto Hidroeléctrico del Diquís que atentaba contra los Pueblos y Territorios: Brörán de Térraba, Bribri de Yâbamï Dí (conocido como Cabagra), Bribri de Salitre y Cabécar de China Kichá. También fue el PLN uno de los Partidos que se negó a discutir y aprobar el proyecto de Ley de Autonomía Indígena, fue durante un mandato del PLN cuando fuimos expulsados de la Asamblea Legislativa y un largo etcétera de acciones racistas por parte del PLN.
Ni Sonia Rojas, ni el PLN podrán nunca representar y ser nuestra voz como Pueblos Originarios. Frente al nuevo (des) Gobierno, como Pueblos Organizados prometemos resistencia, lucha y organización para la recuperación de nuestras tierras-territorios y el fortalecimiento de nuestros Pueblos.
El Observatorio Comunitario de Acciones Colectivas de la Universidad de Costa Rica (OCAC) ha publicado su más reciente informe correspondiente al año 2021. Entre las principales acciones colectivas registradas por el equipo de investigación, destaca la presencia de actores demandantes como los pueblos indígenas, seguidos de comunidades vecinas y en tercer lugar los sectores ambientalistas.
El informe señala que la mayoría de las demandas y acciones presentadas se enfocan contra instituciones gubernamentales y en menor medida contra la población en general, con el objetivo no solo de velar por la defensa de los derechos, sino para posicionar las problemáticas y conflictos en la discusión pública. En este sentido, a lo largo del 2021 se documentó por parte del equipo de investigación 147 acciones vinculadas a la defensa del ambiente y 143 acciones vinculadas a la defensa de los derechos de las personas indígenas y diferentes denuncias provenientes de estos grupos.
Sobre la temática indígena, el informe señala que las acciones “se ubican principalmente en la zona sur del país en las comunidades Bribri de Salitre, “Bribri Iríria Sá Ká, (conocido como Cabagra), Brörán de Térraba, Cabécar de China Kichá y Yimba Cajc (conocido como Curré)” (Chaves, 2021, p.4). Es vital señalar que las denuncias de amenazas y agresiones contra las personas indígenas se han desarrollado constantemente, presentando un total de 49 denuncias por esta razón en este año. En estas se señalan agresiones directas, amenazas de muerte, incendios, entre otras”.
Algunas de estas acciones colectivas indígenas tienen como común denominador un reclamo ante la pasividad de instituciones gubernamentales ante las acciones de grupos no indígenas que contaminan, violentan los territorios y los bienes que los indígenas consideran comunes y propios según la ley.
Que es el ¿OCAC?
Surge en el año 2019 como un complemento a la base de datos PROTESTAS del Instituto de Investigaciones Sociales (IIS) de la Universidad de Costa Rica (UCR). En su página oficial señala que el Observatorio se plantea como una propuesta para sumar en la visibilización de los conflictos y las denuncias cotidianas que se generan desde diferentes comunidades y organizaciones.
• Alrededor de las 9 a.m. personas recuperadoras cabécares divisaron un incendio en el terreno recuperado, Sá Ka Keirö Kaska. Dos horas más tarde fue identificado un nuevo incendio en la misma recuperación.
Jueves 03 de febrero de 2022. Al ser las 9 de la mañana, personas recuperadoras cabécares divisaron humo en una de las recuperaciones de tierra-territorio. Se trata del terreno nombrado como Sá Ka Keirö Kaska (tierra de mayores) en el Territorio Cabécar de China Kichá.
El fuego inició en las cercanías del río General de Térraba. En las inmediaciones del terreno no fue divisado ninguna persona sospechosa pero sí un perro que fue abandonado al momento de provocar el incendio. Al ser la 1 p.m. alrededor de 30 hectáreas han sido consumidas por el fuego y a pesar de que las y los recuperadores continúan trabajando por detener su avance, el fuego sigue su curso.
Posteriormente, a las 11 a.m. fue identificado un nuevo incendio en las inmediaciones de la quebrada Pita, justo en la colindancia con otra propiedad de Gilberth Fernández. En ese lugar, fue identificado un peón de Fernández. Al ser la 1 p.m. Se identifica que al menos 10 hectáreas han sido consumidas por este segundo incendio.
Sá Ka Keirö Kaska era un terreno que fue ocupado ilegalmente por Gilberth Fernández, dueño de la empresa de autobuses MUSOC- GAFESO. Kaska fue recuperada el 28 de enero del 2020 por el Pueblo Cabécar. Desde entonces el hostigamiento, amenaza y riesgo de las y los recuperadores por parte de peones de Fernández ha sido una constante. Pues, Kaska limita con un terreno propiedad del dueño de MUSOC-GAFESO (que se encuentra fuera del Territorio Cabécar).
Estos incendios impactan directamente en la pérdida de cultivos de las familias recuperadoras y afectan la flora y fauna que se ha venido recuperando gracias al cuido de las y los recuperadores.
En 2020 la Coordinadora de Lucha Sur Sur (CLSS) denunció públicamente que los incendios provocados son una forma de hostigamiento en contra de los Pueblos Originarios que se encuentran recuperando sus Territorios ancestrales. Este flagelo también está dentro del: «Informe de agresiones y violaciones a los Derechos Humanos contra los Pueblos Originarios de la zona sur de Costa Rica; enero-diciembre 2020» y es una de las agresiones más recurrentes.
Demandamos al Estado que haga cumplir la ley Indígena de 1977, misma que reconoce que los únicos poseedores legales y ancestrales de estos Territorios somos los Pueblos Originarios.
También es responsabilidad del Estado proteger nuestra integridad física y vida.
¡Repudiamos esta agresión en nuestra contra!
¡Alto a la impunidad!
¡Justicia para Sergio, Jerhy y los Pueblos Originarios!
Recuperadoras (es) Cabécares de Sá Ka Keirö Kaska.
El 26 de enero de 2022 desde la Universidad de Costa Rica se emite un comunicado para repudiar el intento de asesinato hacia el líder indígena Leonel Garcia Segura, del Territorio Cabecar Bajo Chirripo (cantón Matina, provincia de Limón), acontecido el día 30 de diciembre de 2021). En esta nota, se exhorta al gobierno y a los otros poderes de la república, que se intervenga de forma oportuna para que se proteja la vida y los derechos de los líderes y las personas indígenas.
Durante más de cuatro décadas, mencionan, se ha incumplido la Ley Indígena, N° 6172, artículo 3, que establece que las “reservas indígenas son inalienables e imprescriptibles, no transferibles y exclusivas para las comunidades indígenas que las habitan”. Esto, efectivamente, se ha incumplido debido a la ocupación irregular de tierras por parte de personas no indígenas en los territorios indígenas oficialmente establecidos en Costa Rica.
Sostienen que “es la desposesión de sus derechos territoriales y culturales, las razones que obligan a las personas indígenas a emprender sus propias gestiones legales, administrativas y comunitarias para restituir y proteger sus territorios”. Ya desde el 2014 ha habido asesinatos y un aumento en la violencia con respecto a estos temas, de los cuales la Universidad de Costa Rica les advierte. Por ese motivo, es que están invitando a construir una sociedad e institucionalidad que respete la integridad individual y colectiva de los pueblos indígenas y fortalecer las acciones que garanticen sus derechos humanos.
En los últimos años hemos sido testigos y testigas del nivel desproporcionado de violencia que sufren los pueblos indígenas y la amenaza a su modo de vida, la llamada ley indígena delimitó como territorios indígenas, muchas de las tierras donde los pueblos originarios resisten tratando de conservar su estilo de vida, sin embargo las transnacionales del monocultivo, y los grandes terratenientes ocupan hoy en día la mayor cantidad de este territorios (70%), esto a pesar de ir en contra de dicha ley, sin embargo desde 1977 hasta 2009 el estado nunca mostró interés en que esta ocupación violenta no solo se mantenía sino aumentaba, es por eso que los pueblos en 2009 se organizan y toman la asamblea legislativa para exigir que se les devuelvan sus tierras, sin embargo esto concluyó con desalojo por la fuerza contra las personas indígenas, lo que originó que la determinación de recuperar los terrenos usurpados desde de los territorios indígenas, con lo cual iniciaron los procesos de las recuperaciones del territorio indígena.
La violencia organizada y la complicidad del Estado Las recuperaciones del territorio indígena por parte de las comunidades, han tenido que enfrentar una serie hostilidades y agresiones contra las comunidades indígenas que buscan hacer cumplir su derecho a la tierra, las continuas amenazas por parte de los terratenientes y sus peones, sin olvidar trasnacionales del monocultivo que usurpan los territorios, las hostilidades han ido desde amenazas, hasta auténticas “cacerías” donde turbas de terratenientes y peones llegan a intimidar incluso con armas de fuego alas comunidades, todo esto ante presencia de la policía, sin que esta intervenga a desarmar o dispersar estos grupos de atacantes, y es así como la violencia ha llegado incluso a la quema de las casas de las personas indígenas, cabe resaltar el cobarde asesinato de Sergio Rojas a tiros en su casa en Salitre, después de haber sido preso político del estado, las agresiones de este tipo son bastante frecuentes, por lo que la Corte Interamericana ordeno en 2015 darle protección especial a los pueblos indígenas de Térraba y Salitre además devolver las tierras usurpadas sin embargo esto es algo que nunca paso del papel y la violencia contra los pueblos sigue en aumento, así estas “turbas” fueron también responsables de la muerte del activista indígena Jhery Rivera asesinado en su comunidad, con un arma de fuego por personas ajenas a la comunidad que llegaron en manada a intimidar y amenazar al pueblo de Térraba, sin embargo el estado continua con oídos sordos sobre esta problemática, y existen ya un numero muy grande de agresiones, amenazas e intentos de asesinato contra activistas indígenas que siguen siendo constantes, el ultimo perpetuado el 30 de diciembre de 2021 donde Leonel Garcia fue macheteado en todo su cuerpo (brazos, piernas, tronco cabeza) hecho que casi acaba con su vida y lo mantuvo hospitalizado 2 semanas en condición grave, el ataque fue perpetrado por un finquero no indígena de la zona, quien ya previamente lo había amenazado de muerte, ante todo este panorama de violencia y a pesar de los fallos de la corte interamericana de derechos humanos, el estado sigue sin responder, mostrando con su silencio la complicidad en contra de los pueblos indígenas.
Exigimos un alto a la violencia contra los pueblos indígenas
No daremos nuestro silencio ante estos ataques y queremos que las medidas de protección se cumplan de verdad y se extiendan a todos los territorios indígenas, también que el estado cumpla con lo históricamente adeudado y devuelva por fin las tierras de los territorios indígenas
Invitamos a las organizaciones autónomas, que luchan por la defensa de la tierra, de los pueblos originarios, de los derechos humanos, a quienes luchan por la libertad total, que desde sus individualidad o colectivos firman este comunicado para brindar su apoyo, y/o colaboren con la difusión de esta información, y que las personas se mantengan informadas sobre esta situación.
Firman:
-Frente de Resistencia Animal y de la Tierra -Feminismo Antiespecista -Rinconcito Animal
Furia Antiespecista -Acción Animal – Sembrando Libertad – Yo no voy al zoo
-Frente Ecologista Universitario (FECOÜ) -Hablemos de Derechos Humanos -Red Punto Violeta
-La Cadejos Comunicacion Feminista -GuanaRED Red de arte y gestión cultural comunitaria
-Handmaids Costa Rica -Debate Feminista Costa Rica -Bloque Nacional de Vivienda
-Colectivo Solidaridad con el pueblo de Honduras -Movimiento de Trabajadores y Campesinos (MTC) -Asociación Costarricense de Derechos Humanos (ACODEHU)
-Confederación Unitaria de Trabajadores (CUT) -Sindicato Patriótico de la Educación (SINPAE)
Es una de las tradiciones indígenas más antiguas de Costa Rica.
Rememora las luchas que tuvieron sus antepasados durante el periodo de Conquista
La comunidad indígena de Rey Curré vive a partir de este jueves 27 de enero y hasta el domingo 30, una de las tradiciones más importantes a nivel de su cultura local como lo es el “El Juego de los Diablitos”, una tradición ancestral que rememora las luchas que tuvieron sus antepasados ante los procesos de conquista sucedido hace más de medio milenio.
Es una de las ceremonias indígenas más antiguas de Costa Rica, decretado desde el 2017 como Patrimonio Cultural Inmaterial de nuestro país, la cual involucra una serie de actores que participan de manera secuencial iniciando hoy jueves 27 de enero a la medianoche con la llamada “nacencia de los diablitos” y finaliza hasta el domingo 30 de enero en horas de la tarde-noche.
Para iniciar esta tradición, los diablitos suben en silencio a una loma cercana al pueblo, se disfrazan con sus atuendos y esperan con respeto a que sea exactamente la medianoche. El estallido de múltiples bombetas anuncia que la lucha ha iniciado. Los diablos mayores suenan caracoles y el ritual es acompañado por sonidos de tambores, flautas y acordeón.
De inmediato, los diablitos gritan, se abrazan, bailan, saloman y empiezan a descender de la loma dirigidos por los diablos mayores, quienes son los encargados de dirigir la comitiva.
El pueblo entero se une a esta tradición acompañando a los diablitos y juntos recorrerán, hasta el amanecer, todas las casas de la comunidad en donde son recibidos por sus anfitriones con mucho entusiasmo, mientras comparten chicha de maíz y tamales de arroz.
-Primer día del Juego. A eso de las 8 a.m., del viernes 28 de enero, los diablitos regresan a la acción, pero esta vez, tendrán la aparición inesperada de un actor que se convertirá por el resto de los días de lucha en su peor enemigo: el toro. Una figura simbólica semejante a un toro real, elaborado con madera liviana y atada a una cachamenta con la que embisten a los diablitos, interpretados por jóvenes indígenas del pueblo, vestidos con sacos de gangoche, con sus rostros protegidos por máscaras de madera de balsa con diseños zoomorfos y antropomorfos.
Esa será la dinámica de la lucha entre el toro y diablitos por los siguientes dos días de lucha (28 y 29 de enero): El toro ataca y los diablitos esquivan sus golpes.
-Segundo día del Juego (29 de enero). Similar al día anterior. Se suman más cantidad diablitos.
-Tercer y último día de juego. Al llegar el domingo 30 de enero, a eso de las 4pm., los diablitos son parcialmente doblegados por el toro en una de las fases llamada “La tumbazón”, es una de las fases más importantes de esta lucha que representa una transición hacia el desenlace del juego.
El toro, al dejar “tumbados” a los diablitos, huye a refugiarse en la montaña, no obstante, los diablitos despiertan casi de inmediato y se reincorporan a la lucha. Juntos van tras la cacería del toro que se esconde en el monte.
Lo encuentran, lo atan y lo llevan arrastrado al centro del pueblo donde lo matan, lo queman en una hoguera y, en señal del triunfo, se reparten de manera simbólica sus partes, concluyendo así el tradicional “Juego de los Diablitos” en la comunidad de Curré/Yímba 2022.
Si vas a visitar la comunidad se recomienda:
Usar ropa ligera
Zapatos tenis
Llevar bronceador
Llevar algún tipo de repelente
Llevar tienda para acampar
Comunicarse con los organizadores para obtener facilidades.
Si lo desea, llevar agua embotellada.
Para más detalles puede comunicarse vía WhatsApp al número 8709-3735. Si desea conocer parte de esta tradición puede ver el siguiente video: