A Daniel Soto Ortega: Un poema de despedida

SOLEDAD

A Daniel Soto O.

León Triba, 1 de enero 2019

La soledad

es un cuchillo,

una pistola,

la llama furtiva

que calcina la última palabra.

365 cuchillas

afilando sus puntas

en los diálogos inconclusos.

Un grito de esperanza

en el silencio opaco

de las paredes,

el resultado de una vida de lucha

sin el lugar concreto

para brindar con la mano del otro.

El aullido de los perros

presagian una luctuosa lectura.

Nueve y treinta de la noche,

ni siquiera una hora justa

para dormir

con la soledad por compañera.

Los demás,

con esa frecuencia heredada

de un sistema descarnado

nos hacemos cómplices

del último grito de auxilio.

No hubo tiempo de pensarte.

Valía más la cena de media noche

que tu largo compromiso histórico.

Hoy, con el arrepentimiento

insalubre, nos muerde la ironía,

y tu cara de pájaro profeta

vuela en el grito ancestral

de otras voces.

Enviado a SURCOS por Trino Barrantes