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Etiqueta: cambio climático

Corredor biológico Paso de las Lapas – Alternativas

El Programa de radio Alternativas, bajo el lema “pensar libremente, para construir un país y un mundo integralmente mejores», transmitió un conversatorio sobre el Corredor Biológico Paso de las Lapas el pasado 8 de setiembre. 

El panel de personas invitadas estuvo integrado por: 

  • Luis Ángel Salazar Oses – exfuncionario SINAC y enlace de corredores Biológicos.
  • Karol Murillo – presidenta del Comité Local CBPL.
  • Guillermo Espinoza – administrador Parque Nacional La Cangreja.
  • Luis Alvarado – gestor ambiental Municipalidad de Puriscal.
  • Pablo Gordienko – gerente general Macaw Lodge.
  • Esteban Fernández – docente CTP La Gloria.

En cuanto a sus orígenes, existe un programa de corredores biológicos del SINAC que inició a finales de los años 90. En este sentido, el SINAC ha venido trabajando en la creación de estos corredores como un complemento de las áreas protegidas, las cuales fueron salvaguardando bosques muy importantes para la protección de los recursos hídricos, de especies y de ecosistemas.  

Esta necesidad de proteger los ecosistemas surge a raíz de la predominancia de un modelo de desarrollo económico que prioriza la producción para la acumulación de capital sobre la importancia de las zonas de vida.  

Ahora bien, los corredores biológicos pretenden fortalecer áreas protegidas y su conectividad estructural y funcional, mantener los servicios ecosistémicos, así como establecer medidas de mitigación y adaptación al cambio climático. 

 El corredor biológico paso de las Lapas se encuentra entre dos áreas de conservación: el Área de Conservación Central (donde se encuentran territorios de Puriscal y de Turrubares), y el Área de Conservación Pacífico Central (el cual incluye el cantón de Garabito y manglares de Guacalillo). De esta forma, aproximadamente un 25% del territorio se encuentra protegido bajo alguna modalidad de protección. 

Las lapas son una especie clave para la conservación del medio ambiente y para la sociedad costarricense porque posee un valor cultural y simbólico y, además, actúa como sombrilla para la protección de otras especies. Es un gran ejemplo de que sí es posible restaurar los daños humanos a la naturaleza. 

Sin embargo, debido a que el corredor está integrado también por propiedades privadas, algunas de las mayores amenazas que enfrenta es la deforestación y la fragmentación del bosque, la degradación del suelo por cambios de uso inadecuado, la contaminación de fuentes de agua, la cacería ilegal y los incendios forestales.  

Es fundamental, dentro del trabajo que realiza el Comité Local del Corredor Biológico, que las personas habitantes de las distintas zonas que abarca el corredor biológico de las Lapas puedan comprender la importancia de recuperar el territorio; no solo por su indudable riqueza natural que es patrimonio nacional y de la humanidad, sino también porque representa una fuente de oportunidades socioeconómicas y de modelos de vida más sustentables.  

Para escuchar el conversatorio completo haga click en el siguiente enlace: https://fb.watch/n3mRPuHyog/.  

La transición energética debe contribuir a frenar el cambio climático

Alberto Salom Echeverría

Introducción

Comento en esta ocasión un artículo del exministro de Ambiente, Energía y Telecomunicaciones de Costa Rica (2006-2010), Roberto Dobles.

Dobles nos habla de la necesidad de contar con un período de transición energética que tenga en cuenta lo que él llama las realidades complejas del mundo contemporáneo. Para ello, propone políticas públicas que estén libres de dogmas, sentimientos y emociones. De acuerdo con su propuesta, tales políticas deberían conducir a reducir la “inseguridad energética y tarifaria y los crecientes costos de la generación eléctrica nacional.” Según Dobles ello es debido a la “altísima exposición al cambio climático que tiene el sistema nacional de generación eléctrica.” Finalmente, asegura que para tener una transición energética en el mundo que sea ordenada, tanto el petróleo como el gas natural son parte de la solución.

Veremos si dicha propuesta para el caso costarricense nos abre realmente como país a una transición energética que lleve a la descarbonización, o nos ancla en el círculo vicioso de la dependencia de los hidrocarburos que producen más gases efecto invernadero, contaminación de la atmósfera y calentamiento climático en todas partes.

Observaciones preliminares

Las personas que optan por la “propuesta Dobles” (por llamarla así, solo para los efectos de este artículo), tienen ante sí una de dos opciones, o bien ambas, si es que ello fuera posible: la primera sería continuar facturando sumas muy relevantes del presupuesto nacional para importar, como lo hacemos hoy, ambos elementos. Esto, de acuerdo con las circunstancias implicaría un mayor endeudamiento público externo o interno. La segunda opción podría ser abrir la senda de la investigación, exploración y explotación del petróleo y el gas. Esta segunda hipótesis ha sido planteada ya por el actual gobierno de la República y alguna gente se aferra a ella con la convicción de quien cree que constituye nuestra “tabla de salvación”. Veremos si lo es.

El señor Dobles abre la alternativa de explorar y explotar el gas natural, considerando que Costa Rica cuenta con normativa ambiental para explorar y producir hidrocarburos, respetando la protección al ambiente. Ya en otro artículo, el 4 de marzo del 2013, había dejado sentada su posición en el sentido de que la importación de gas natural, aún con precios atractivos tendría un costo mayor que “la eventual producción nacional.” Hay que aclarar que, es pretencioso hablar de “producción nacional”, cuando como es sabido, el país tendría que encargarla a una empresa extranjera, que tenga experiencia en el negocio. Costa Rica carece de condiciones para acometer esta tarea por su cuenta y riesgo.

Por lo tanto, aquí vamos a escudriñar si eso es posible y cuánto tiempo demora la investigación, la exploración y explotación del gas, en el caso de que el país encontrara este hidrocarburo en cantidades óptimas para comercializarlo. Ya con anterioridad, Dobles mismo había dejado claro que “las importaciones, aun con precios atractivos…siempre tendrán un costo mucho mayor que la eventual producción nacional.” (sic). Pero, él mismo está consciente de que “…debemos investigar más el potencial que tenemos en una gran parte del país.” O sea, reconoce que es una tarea pendiente, si bien se muestra en extremo optimista en cuanto a que, dicho “potencial”, lo tenemos en una gran parte del país, ya que “ha sido establecido por exploraciones anteriores, para eventualmente desarrollarlo.” (Cfr. Dobles, Roberto. “La Política de Importación de Energía”. 4.03.2013. larepública.net). Es importante señalar que, aunque el exministro Dobles pone de relevancia sobre todo la necesidad de explorar y explotar el gas natural el cual, es menos contaminante que el petróleo, con anterioridad, había aceptado tajantemente que “Al final del día para tener una transición energética ordenada, el petróleo y el gas natural son parte de la solución.” (Cfr. Dobles, Roberto. “Lecciones Aprendidas sobre la Transición Energética en el Mundo: Aspectos Claves Analizados en la Conferencia de las Naciones Unidas (la COP 27).” 6.02.2023. larepública.net). En otras palabras, tanto el gas natural, como el petróleo (uno de los más contaminantes hidrocarburos, responsable por lo tanto del cambio climático y del calentamiento global) forman parte de la mencionada transición energética. ¿Cabe inquirir aquí, hacia dónde se encamina esta transición que, de acuerdo con el criterio del señor Dobles, no solo no puede prescindir de estos dos elementos contaminantes de la atmósfera, sobre todo el petróleo, sino que cuenta con ellos como parte constitutiva de la solución energética requerida?

Las realidades no son las mismas para todas las personas.

En su postrer artículo el exministro de Ambiente, Energía y Telecomunicaciones nos habla de realidades que según su criterio existen y deben por tanto ser tomadas en cuenta para una transición energética nos gusten o no. Dobles quiere con ello sentar la premisa de que el entorno de los países que es complejo y cambiante está determinado por realidades. En otros términos, podríamos deducir de su dicho que, aunque no nos guste tener que echar mano de los contaminantes hidrocarburos, la realidad nos lo impone.

Doble dice algo más “las realidades son las que existen”. Pues debo señalar que “las realidades que existen y que nos apremian”, no son las mismas para todas las personas; tienen distinta significación. Por ejemplo, “la realidad” para un hombre de negocios interesado en invertir en el campo de la exploración de los hidrocarburos (carbono, petróleo, gas natural y gas metano) es una. Mientras que, para personas carentes de recursos, que están sufriendo las consecuencias del calentamiento global en mayor medida que las otras dotadas de mejores recursos para hacerle frente a las inclemencias del clima, “la realidad” es completamente otra. Pensemos por ejemplo en las lluvias torrenciales, en los desbordamientos de ríos, en el clima inestable que da lugar a ciclones, huracanes, tifones, tornados; en el otro extremo incendios desaforados, devastación de los bosques, con la consiguiente extinción de especies de flora y fauna, tanto en la tierra como en el mar. Obviamente, esas y otras realidades existen, pero tienen una significación diferente para unas y otras personas en función de su situación socioeconómica, cultural, de influencia política, etc.

Las políticas públicas -dice Roberto Dobles- deben estar fuera de dogmas, sentimientos y emociones.

Esa pretensión sería muy loable y si ello fuera posible ayudaría mucho a la humanidad a alivianarla de conflictos y problemas. Pero, como lo reconoce el propio Roberto Dobles, la realidad es tan compleja, que casi no encuentro ejemplos claros de gobiernos que, en el mundo impulsen políticas públicas desprovistas de prejuicios, falsas premisas o axiomas (indemostrables por definición). Tampoco los hay carentes de emociones y sentimientos. Con frecuencia más bien actúan con una sobrecarga emocional importante. Los ejemplos saltan a la vista por todas partes: Donald Trump por ejemplo, un negador del cambio climático como producto de la acción humana, arremetió con toda la subjetividad de que fue capaz, para incrementar la producción de petróleo en su país y de gas natural; aunque como fue señalado con meridiana claridad en la COP 21 celebrada en París, los Estados Unidos y China son los dos países que más contribuyen con el cambio climático y el calentamiento global, merced a la incremental producción de hidrocarburos.

Tanta subjetividad y animosidad hay en el impulso a las políticas públicas que, a pesar de que la COP 21, celebrada en el 2015 en París, estableció basada en criterios científicos, por primera vez, umbrales muy rigurosos que no debían ser traspasados por las naciones productoras de hidrocarburos, a fin de lograr la descarbonización de la atmósfera y ralentizar así el calentamiento global de nuestra “Casa Común”, el Planeta Tierra, dichos umbrales fueron traspasados, justamente por las principales potencias responsables de la sobrecarga de CO2 (“overwhelm” en inglés), que inunda la atmósfera de gases de efecto invernadero proveniente de los hidrocarburos.

¿Por qué razón no se ha podido controlar el clima, el calentamiento global? Porque no existe la debida cooperación entre las naciones desarrolladas, así como tampoco entre éstas y los países subdesarrollados, para atenerse a los protocolos aprobados en la COP 21 y ratificados en las subsiguientes conferencias de las partes. Debido a ello es que no se ha conseguido ni siquiera ralentizar, menos aún detener la carbonización de la atmósfera, a pesar de todos los efectos perniciosos para la vida que ello conlleva.

La respuesta el señor Roberto Dobles la tiene a la vista: los hacedores de las políticas públicas, muy a pesar de sus intenciones, permanecen fuertemente influidos por sus dogmas y prejuicios que los llevan a obviar la gran diferencia que existen entre “el desarrollo”, considerado tradicionalmente como crecimiento económico medido en términos de crecimiento del PIB y el “desarrollo sostenible y sustentable con la Naturaleza, con la vida o, en una palabra, con los ecosistemas”. ¿En qué queda eso que usted denomina, señor Roberto Dobles la transición energética, sin estar acompañada de indicadores científicos rigurosos que permitan medir los esfuerzos de todas y cada una de las naciones por lograr una transición energética cada día más libre de carbono en su propia atmósfera, con esfuerzos comprobables por introducir cada vez más energías limpias, renovables y menos hidrocarburos? De no ser así, ¿de qué clase de transición energética estamos hablando? Necesitamos asegurar la ruta hacia un mundo más humano y habitable, para todos los seres de este planeta, pero, en especial para los más vulnerables; víctimas de sociedades altamente consumistas, excluyentes, con grandes índices de contaminación de la atmósfera, de las cuencas de los ríos, de la tierra toda y de los océanos. Necesitamos trazar un objetivo allá lejos, en lontananza, que asegure que nuestra “Casa Común” será habitable para las generaciones venideras.

¿Por qué -se han preguntado en las conferencias de cooperación a escala mundial- es tan difícil lograr la cooperación internacional sobre el cambio climático? Le voy a dar una respuesta contundente, de una fuente inobjetable: “[…Entre] los desafíos -dicen- se hicieron evidentes, conflicto de intereses, grandes diferencias culturales, competencia entre economías, discrepancias en infraestructura, falta de información, subcontratación entre otros.” (Cfr. Wachouston-org.translate.goog. World Affairs Council of Greater Houston).

Otra razón importante para que no exista cooperación internacional, la establecen los europeos en la ausencia de un protocolo donde se establezcan responsabilidades de parte de las naciones que incumplan los acuerdos alcanzados en las conferencias internacionales. En efecto, Europa ha insistido en la importancia de definir estrategias que contengan rendición de cuentas claras por parte de cada país signatario; pero, no ha habido respuestas claras en este sentido, ya que Europa no posee poder político para obligar a otros países a luchar contra el cambio climático. Como cuando la India se resistió en un principio a firmar el acuerdo de la COP 21, alegando que los compromisos excedían sus posibilidades como país de economía emergente. Australia, a su vez estuvo a punto de marginarse considerando que, si los Estados Unidos no estaban comprometidos con el acuerdo de París, se tornaba perjudicial para ellos presentar una legislación que los colocara en desventaja frente a los países desarrollados. A propósito, un informe del Instituto de Asuntos Internacionales Europeos (IIEA), señaló: “Es crucial mencionar o cuestionar la ética detrás de estas decisiones. Cuántas vidas son importantes, pero ‘menos importantes’ que una determinada cantidad de ganancias, en dólares. -Y luego externaron una pregunta- ¿Son todos los hombres iguales, pero algunos menos iguales? -A lo que responden- Las Instituciones Internacionales también han jugado un papel sesgado en este tema, atribuyendo más valor a poblaciones y líderes específicos…-A continuación, agregan-La teoría de las relaciones internacionales, está sesgada hacia occidente, lo que perjudica su capacidad para explicar y proporcionar un bien social. Gran parte de este sesgo occidental se debe al dominio político y militar histórico de occidente; los vencedores escriben la historia, y la filosofía política parece también hacerlo.” Concluyen afirmando: “El objetivo debería ser hacer políticas inclusivas y más amigables con el mundo mediante la voluntad de involucrar el pluralismo y encontrar los representantes correctos en las Instituciones y más críticos en los Estados.” (Cfr. Curtin, Joseph. “Instituto de Asuntos Internacionales y europeos.” https://www.iiea.com/publication/the-Paris-climate-agreement-versus-the-Trump-effect-countervailing-forces-for-descarbonsation)

Por contraposición, es muy significativo que, en ningún caso se refieran como una dificultad para la cooperación a una premisa a la que el señor Roberto Dobles parece atribuirle toda la importancia en su escrito, cuando citando a Ben Shapiro escribió: “…a los hechos (o sea a las realidades) no les importan los sentimientos”. (Ibidem. larepublica.net).

Las dificultades en la exploración y la extracción del gas natural.

Con alguna antelación he investigado acerca de los procedimientos, riesgos y dificultades, o eventuales ventajas derivadas de la exploración y extracción con fines productivos o comerciales del gas natural. Con anterioridad creo haber demostrado que la investigación no está tan desarrollada como lo ha pregonado recientemente el señor Roberto Dobles. Retrotraeré para mayor abundamiento, algunas citas textuales de mi artículo escrito el viernes 4 de febrero del 2022. Al mismo tiempo, los invito visitar el sitio para quien desee realizar la lectura completa (Cfr. Salom, Alberto. “El Gas Natural ¿Es una Buena Opción para Costa Rica?” laRepublica.net. 4.02.2022)

De lo expresado por mi persona entonces, entresaco lo siguiente. “Describiremos primero algunas de las características sobresalientes de este combustible fósil. Sus compuestos químicos son el metano que es el principal en un 85% (su fórmula química es CH4); otros de sus compuestos químicos son: el etano 10%, el propano 3% y el butano 0.1%. Tiene otros componentes, algunos muy indeseables como son: nitrógeno en un 0.7%, dióxido de carbono, ácido sulfhídrico y el agua. Los depósitos de gas suelen encontrarse entre 1,5 ó 4 kms de profundidad, como en España; no obstante, su profundidad puede ser aún mayor. Como combustible fósil que es, se trata de un gas contaminante. Suele afirmarse, que es el menos contaminante de los combustibles fósiles, lo cual es cierto, en términos generales. Veremos empero otras circunstancias que a nuestro modo de ver no lo hacen tan amistoso con la naturaleza y el medio ambiente. Los yacimientos de este gas suelen encontrarse a grandes profundidades, ya sea en el subsuelo terrestre (“onshore”) como en el marino (“offshore” o extraterritorial) y, puede encontrarse libre o asociado junto al petróleo. Cuando el gas propano se encuentra asociado al petróleo, deviene en un subproducto de éste; por lo que para obtener los subproductos emanados del gas se debe procesar primero el petróleo crudo en las refinerías para producir la separación de los compuestos químicos. Los usos del gas son: Industrias, uso doméstico, o para generación eléctrica.” (Cfr.“¿Cómo se obtiene el gas natural?” Google, htpps://www.nedgia.es, 2022).

Escribí entonces, además: “Gas natural: lo bueno, lo malo y lo feo. El gas natural, al igual que el petróleo y el carbón, se originó hace millones de años producto de la descomposición de materia orgánica proveniente de plantas y animales. Este combustible quedó atrapado en las profundidades del territorio (en tierra firme o en el mar), bajo gruesas capas de fango, arena, lodo y en formaciones rocosas. Estas formaciones pueden ser: rocas porosas, o rocas más densas o “no porosas” que impiden que el gas natural escape de sus depósitos hacia la superficie; en ocasiones puede encontrarse en la capa rocosa cercana a la superficie terrestre, conocida como Sial. (Cfr. “¿Cómo se produce gas?” Google, https://www2.osinerg).

En Costa Rica el estado de la exploración e investigación realizada no nos permite saber: en primer lugar, si tenemos gas natural en condiciones abundantes como para ser extraído y comercializado. En segundo lugar, aún menos sabemos si existe gas natural en abundancia en la roca porosa, o este se encuentra en profundidades atrapado en la roca “no porosa”.

Si resulta que el gas que eventualmente se extraería, se encuentra en las profundidades subterráneas desde los 400 hasta los 5.000 metros, el combustible será más difícil de extraer y se encontrará en menor concentración. Aquí comienzan los problemas para los países que están explotando el gas o los que lo intenten en el futuro, en caso de haber condiciones para ello.

¿Qué es el “fracking” o en español la “fractura hidráulica”?

La fractura hidráulica es un procedimiento que se emplea para extraer el gas o inclusive el petróleo, cuando estos combustibles se encuentran atrapados en las rocas densas y de baja porosidad. Se les denominan “gases no convencionales” y se hallan: en areniscas de baja permeabilidad (tight gas), en esquistos o pizarra (shale gas), metano en capas de carbón (coal bed methane), hidratos de metano (moléculas de metano atrapadas en compuestos helados de agua). (Cfr. istas.net/descargas/informe%20Fraching.pdf). De acuerdo con la información consultada, la fractura hidráulica, donde mayormente se usa es en esquistos o pizarra, aunque también se emplea para la extracción de otro tipo de gas no convencional y también para extraer petróleo en profundidades donde se encuentran rocas no porosas.

En el caso del gas de esquisto, se encuentra concentrado en pequeñas burbujas o poros, algunas veces microscópicos, dada su baja permeabilidad. El procedimiento consiste en romper o quebrar la roca mediante la fractura hidráulica, para que el gas de todas esas burbujas se unifique y fluya hacia la superficie. La técnica como se ha dicho se emplea también para perforar la roca donde hay petróleo. El procedimiento es no solo muy engorroso explican los técnicos, sino mucho más caro. ¿Cómo saber que, en Costa Rica en caso de existir gas en proporciones comercializables, no vamos a tener que vérnosla con este tipo de gas de esquisto o pizarra, u otros “no convencionales”?” (Si usted desea conocer en detalle el procedimiento de la fractura, le invito de nuevo a visitar el sitio indicado, donde encontrará mi artículo y las fuentes de la investigación realizada.)

Concluí entonces afirmando y lo reafirmo ahora: “En suma, se van generalizando las protestas en diferentes países del orbe contra este tipo de exploración y explotación del gas natural no convencional, que se encuentra en las profundidades terrestres o marítimas atrapado en rocas densas o no porosas. La mayoría de las protestas tienen que ver con la contaminación de los acuíferos, pero van surgiendo innumerables problemas derivados de la contaminación ambiental y de recursos tan indispensables a la salud humana como el agua. Mientras las naciones continúen aferradas a la producción de combustibles fósiles, se abstendrán de tomar el camino de investigar y abrirse a la producción de combustión mediante energías limpias; seguirán así enfermando más al Planeta, nuestra casa común. Juzguen ustedes si a Costa Rica le conviene comprarse el boleto de tener que lidiar en estas condiciones con la exploración y explotación de gas natural; no digamos ya del petróleo… Nuestro futuro es por un desarrollo sostenible con la Naturaleza y el ambiente, para enfrentar el calentamiento global.

El Co2 dicen los negacionistas es un gas que no contamina

Alberto Salom Echeverría

¿Cuál es el razonamiento de los negacionistas en boca de una de sus corrientes más fuertes?

El “negacionismo”, es el rechazo de un hecho histórico o de una evidencia que se consideran desagradables y crean malestar. Hay gente que se refugia en el negacionismo del cambio climático. A pesar de todas las evidencias que proporciona la ciencia, no son pocas las personas, ni poco influyentes, quienes niegan que el aumento desproporcionado del CO2 en la atmósfera es el factor fundamental responsable del calentamiento global que padecemos.

Una corriente del “negacionismo”, se destaca por levantar premisas que son verdaderas, para a partir de ellas extraer conclusiones totalmente falsas. Veamos, por ejemplo, una premisa verdadera como la siguiente: el CO2 ha sido y es positivo para el ser humano, puesto que las personas lo expelen de su organismo; el mismo elemento químico, es decir, el dióxido de carbono es recogido por las plantas en la tierra y en los océanos, para, mediante el proceso de fotosíntesis de las plantas, transformarlo en oxígeno. Este elemento a su vez es expulsado por el reino vegetal a la atmósfera, para que los animales lo reabsorban del aire y así llevarlo hasta los pulmones, en forma de oxígeno, a razón de 5 y 8 litros de aire por minuto. Luego, desde los alveolos ubicados en los pulmones se transfiere el 30% de cada litro a la sangre, aún cuando la persona esté en reposo, para reanimar la vida en un ciclo incesante, dador de vida entre el reino animal y el vegetal. Esta es la premisa verdadera número uno.

La conclusión falsa que los “negacionistas” quieren extraer de la premisa anterior estriba en sostener que, como es el propio organismo del ser humano a nivel celular (y el de otros animales) el que limpia la sangre y de ella se nutren para obtener oxígeno, descartando el CO2 a la atmósfera, y además este elemento químico regresa a las plantas para reiniciar el proceso de fotosíntesis, entonces mal se puede argumentar -nos dicen los negacionistas- que el CO2 es el contaminante principal que da cuenta del calentamiento global y el cambio climático.

La realidad que el negacionismo intenta desvirtuar.

El CO2 o dióxido de carbono, se convierte en el principal contaminante, responsable del calentamiento global, desde el momento en que se rompe un equilibrio fundamental, mediante el que se configura un intercambio entre oxígeno y dióxido de carbono. Esta ruptura del equilibrio químico entre los dos elementos que hemos mencionado es la que se da con el advenimiento de la época industrial a mediados del siglo XIX; en efecto, es a partir allí, que se comienza a producir en forma desproporcionada dióxido de carbono, altamente contaminante y de efecto invernadero proveniente en lo medular de los combustibles fósiles (carbón mineral, petróleo, gas natural y gas metano). Es debido a ello que se rompe el equilibrio preexistente con el oxígeno. Es pues, esta ruptura fenomenal del equilibrio entre los dos elementos mencionados, ambos en principio fundamentales para la vida, lo que da cuenta del calentamiento global y no simplemente la exhalación del dióxido de carbono por parte de los seres humanos y otros animales a la atmósfera, como lo plantean los negacionistas desvirtuando lo que realmente sucede.

En la realidad es el argumento negacionista, el que pretende desconocer el gran desequilibrio procesal, que se efectúa en la época industrial, cada vez en mayor intensidad entre el dióxido de carbono y el oxígeno. Esta corriente ideológica, falsea la realidad, ya que quiere asumir que la ciencia desconoce la importancia del intercambio entre oxígeno y dióxido de carbono, al postular que el dióxido de carbono se ha convertido en un elemento químico altamente contaminante. Es pues el argumento negacionista el que deviene rotundamente falaz, ya que pretende poner en boca de los científicos la peregrina idea de que el CO2 es malo ´per se´, por decir que se ha convertido en la época del industrialismo en un elemento contaminante, altamente tóxico, proveniente de la quema del carbón y los demás combustibles fósiles. Es en este instante donde queda plasmada la evidencia de que no es que el CO2 sea malo por naturaleza, la ciencia nunca lo ha expresado de esa manera; lo que está resultando desastroso, es su desequilibrio en el medio ambiente en la época industrial. En resumen y, en otras palabras, para decirlo una vez más, es la descomunal producción de combustibles fósiles: carbono, petróleo, gas natural y gas metano, o sea CO2 en demasía, lo que se ha convertido en la fuente más importante de producción de dióxido de carbono por parte del ser humano del industrialismo y es ello lo que ha dado lugar a los gases altamente contaminantes y de efecto invernadero.

Los océanos también capturan CO2 de la atmósfera y recogen en grandes proporciones los gases de efecto invernadero.

Esto han hecho y continúan haciendo los océanos, pero ya no pueden más, están exhaustos de los abusos de los seres humanos del industrialismo, el “industriae homo” hijo de la sociedad del desperdicio, de la sociedad que consume hasta lo innecesario y después descarta, bota para que otro u otra recoja; solo que ese otro no aparece, excepto que sea la naturaleza, transformada en receptora de todas las inmundicias, incluso de las que tardan milenios en degradarse como los fatídicos plásticos que se acumulan en los mares, o en las cuencas de los ríos, de los bosques devastados o desgastados también por efecto de la acción humana irresponsable; la naturaleza está agotada, e insisto la mar océano, es la superficie más extensa del planeta que está dando señales claras de que no puede más. Los ecosistemas marinos que han sostenido y multiplicado la vida de millones de especies han venido a menos rápidamente y muchas de estas especies, desde las más comunes hasta las más exóticas se han extinguido ya para siempre.

Podríamos estar en la fase inicial de una extinción masiva, como la que se produjo cuando se extinguieron los dinosaurios hace millones de años, por otras causas que no fueron antropocéntricas; es decir, no fue el ser humano como ocurre ahora el responsable de la extinción. Estamos viviendo en este planeta, como si tuviéramos otro adonde ir. Como lo expresa “El Libro de la Ecología”, un documento científico que, de una manera didáctica, también nos preconiza: “estamos jugando a los dados con el medio natural.”

¿Será posible desoír el llanto del planeta, la queja honda de los mares? Así será, mientras continuemos contaminando los océanos y toda la superficie terrestre, así será en el tanto sigamos convirtiendo a las cuencas de los ríos y a la mar océano en los vertederos de todo tipo de desechos, más peligrosos cuanto más lenta su degradación, como los plásticos, uno de los despojos más catastróficos, precisamente por la lentitud de su proceso de descomposición. Ellos son por eso mismo, responsables de afectar de un modo concluyente la vida de los ecosistemas marinos y de los ríos y con ello de los animales que los habitan y de una manera crucial del planctum, plancton o planctón. (del griego). Quiere decir, “comunidad de animales acuáticos vivos que existen tanto suspendidos en la columna de agua o flotando cerca de la superficie con poca o ninguna locomoción. Estos organismos están a la merced de las corrientes y vagan donde quiera que el flujo de agua los lleve.” El planton o fitoplancton es la base de la pirámide trófica, o sea es la base de la nutrición, del ecosistema marino. Así de simple. En virtud de la energía solar genera materia orgánica, por lo que el fitoplancton se convierte en el productor primario de la cadena alimentaria. Los derrames de petróleo y otros contaminantes han ocasionado enormes daños a los ecosistemas marinos, en particular al fitoplancton, con lo cual, como es fácilmente deducible, se interrumpe abruptamente el ciclo de la cadena alimentaria. Un verdadero desastre ecológico.

En consecuencia, en los océanos se ha dado también esta ecuación de intercambio de CO2 por Oxígeno en forma equilibrada a lo largo de millones de años, facilitando de manera natural la evolución de innumerables especies marinas mayores y menores; este intercambio ha sido esencial para los ecosistemas dadores de vida marina. Cuando se produjo la extinción masiva de los dinosaurios en la tierra y de otras especies de animales y plantas en el mar, el ser humano no existía. Fue en virtud de un nuevo equilibrio ecológico, que le costó al planeta muchos otros millones de años de evolución, que renació la vida en toda su enorme y rica biodiversidad, hasta la aparición del ser humano sobre la faz de la tierra.

El ser humano no es malo por naturaleza, ni es malo por producir CO2.

En realidad, la maldad o la bondad no existen por sí mismas; son una construcción humana, un “constructo” dicen la sociología y la antropología cultural. La bondad esta asociada a la ética del buen vivir en sociedad. La maldad es su contrario, es el desarrollo del espíritu destructivo en la especie humana, son las guerras desenfrenadas, es nuestra capacidad desarrollada de producir polución en la atmósfera terrestre y en muy poco tiempo destruir mucho de lo que le ha costado al planeta millones de años de evolución.

El “negacionismo” descontextualiza el fenómeno del cambio climático que se produce hoy, responsable del calentamiento global de la atmósfera, de la temperatura de los océanos con todas sus secuelas. Los eventos extremos que estamos viviendo a causa de ello, los ciclones y tormentas cada vez más frecuentes e intensos, el vertiginoso derretimiento de los casquetes polares y la consiguiente subida del nivel de las aguas oceánicas, son, como lo ha dicho el teólogo Leonardo Boff, parte de nuestra responsabilidad ética y política. Por otro lado, los enormes incendios, provocados o no por la mano humana, que están consumiendo muchos de los bosques, valles y montañas terrestres, por aquí, por allá y por acullá, son consecuencia del calentamiento global que lleva en sí la impronta de los seres humanos de la época industrial. Las lluvias torrenciales por otro lado, que acarrean el grave desbordamiento de ríos de sus cauces y se van revolcándolo todo, deambulando por doquier atropellando pueblos y ciudades, desbaratando sembradíos y sembrando en cambio a su paso indecible sufrimiento, el terror y el pánico en poblaciones enteras y ocasionando daños inconmensurables, con frecuencia irreparables en la vida de los seres humanos, de animales y plantas, constituyen gran parte del desafío que nos corresponde arrostrar como humanidad, en respuesta a la acción depredadora del “industriae homo”.

Sí, lo digo dolorosamente, es el “hombre” el principal responsable esta vez, del cambio climático, pero el “hombre industrial”, mejor dicho, son las grandes corporaciones multinacionales productoras de hidrocarburos altamente contaminantes de la atmósfera, de los ecosistemas marinos y terrestres, de la vida en la contemporaneidad. Aunque todos y cada uno de nosotros, dejamos también a nuestro paso una huella ecológica, de la que tampoco nos hemos predispuesto a hacernos cargo.

Frente a todos estos fenómenos nuevos, propios del industrialismo desenfrenado, nos corresponde asumir un compromiso ético, especialmente con los más postergados y afectados por los desastres ecológicos de nuestra época. La nueva ética consiste en asumir colectivamente el reto de forjar un nuevo estilo de vida más solidario, más austero y frugal. Debemos aprestarnos a abrir paso al desarrollo de nuevas industrias no contaminantes, o mucho menos contaminantes que la ciencia ha dado en llamar “industrias limpias”. La ética moderna nos impele a confrontar el cambio climático como el mayor reto de nuestra época. “Salvad la biosfera y podréis salvar el mundo” nos pregona con sabiduría también el “Libro de la ecología”.

Como puede verse, es una verdadera majadería de los negacionistas, creer que alguien pueda culpar al ser humano por expeler anhídrido carbónico a la atmósfera, mucho menos a la ciencia. La exhalación de CO2 y la consiguiente inhalación de oxígeno es parte consustancial de nuestro proceso de vida. Convertir algo tan elemental desde tiempos inmemoriales en una cuestión objeto de discusión, como hacen los negacionistas, es en fin una tontería. Pero, una tontería que tiene poseídos a muchos gobernantes incultos, e inclusive algunas veces hasta falsos intelectuales y profesionales que no parecen haber aprendido nada. Finalmente, lo que resulta inverosímil es que se pretenda negar la contaminación de la atmósfera, por medio de gases de efecto invernadero producidos básicamente por la industria moderna, mucha de la cual sigue aferrada a los combustibles fósiles. La única explicación para ello es politológica, los super empresarios que las fomentan están asidos a los intereses y gigantescos recursos pecuniarios o de cualquier otra índole que estos negocios les generan, aunque estén como nadie destruyendo la vida sobre la Tierra. Por lo tanto, la confrontación es de orden político, educativo, cultural. Si somos incapaces de situar el fenómeno del calentamiento global en su contexto, y vamos a seguir, a la manera de Trump o Bolsonaro y lamentablemente al modo de tantos otros gobernantes de pacotilla como el que aquí tenemos; si además sigue habiendo una caterva de gente sin consciencia detrás de ellos, aviados estaremos; tendríamos que “apagar las luces” y sentarnos a esperar que nos abrace la muerte colectivamente. No será así, la esperanza nunca morirá. Estamos listos a reemprender la lucha una y otra vez, sin fatiga, levantándonos tras un tropiezo cuantas veces sea necesario, porque otro mundo es posible, más prometedor, más humano, más solidario, con menos orgullo y más humildad, menos predispuestos a seguir guerreando entre las naciones y más proclives a buscar soluciones pacíficas a los conflictos, que las hay; mejor dicho, tiene que haberlas, porque el tiempo apremia.

Festival Ambiental de La Gamba de Golfito

El Programa de Gestión Local de la UNED trabaja en el desarrollo del 3° Festival Ambiental de La Gamba de Golfito, a realizarse el sábado 26 de agosto 2023, en el Salón Comunal de 8:00 am a 4:00 pm.

En este festival se realizarán conversatorios, exposiciones, actividades deportivas, educación ambiental, caminata al Parque Nacional Piedras Blancas, entre otras actividades para el disfrute de las personas de la comunidad de La Gamba y personas de organizaciones comunales y campesinas de la región que estarán acompañando el evento.

El Festival tiene como objetivo el involucrar a la comunidad de La Gamba en los procesos de sensibilización por el cambio climático y la protección del medio ambiente, compartiendo en todo momento acciones que coadyuban a generar interés tanto a nivel comunal como institucionales, para un adecuado manejo de los recursos naturales en pro y en beneficio de la colectividad.

Además, de mantener una relación estrecha con el Parque Nacional Piedra Blanca, el cual se encuentra en la parte territorial de la comunidad de La Gamba. La propuesta es que produzca un manejo compartido de las actividades que se desarrollan en el Área de Conservación de Osa, para que le permita una participación activa y fructífera a la comunidad de La Gamba.

Durante el desarrollo del festival, se proponen actividades en coordinación con las siguientes instituciones gubernamentales, la academia y organizaciones comunales:

Organizaciones comunales:

ADI – ASADA – Productores – Ambientalistas – Mujeres – Jóvenes – Artesanos.

Academia aliada:

UCR – UNA – UNED

Invitar a diferentes instituciones gubernamentales como:

MINAE- ACOSA – SINAC – INDER – MAG – ICT – JUDESUR – ICE – Municipalidad – Bomberos.

Un eje temático para la presentación artística es el agua.

Además:

Taller sobre compostaje.

Cuenta cuentos.

Estación de pintura con niños.

Presentación de música rock Syroplasma.

No podemos dejar de hacer lo que nos corresponde para cuidar el planeta

José Luis Pacheco Murillo

Esto dijo Al Gore el 11 de diciembre del 2014: “El Cambio Climático es evidente, basta saber que el año 2014 ha sido el año con mayor aumento de temperatura de toda la historia”. “El cambio climático ha producido como nunca, al mismo tiempo, inundaciones y sequías, grandes cambios desastrosos y perjudiciales”.

De aquella fecha a hoy han transcurrido tan solo 8 años 7 meses y 9 días y el asunto es que las condiciones climáticas no han mejorado, por el contrario, estamos cada día más afectados por todo eso que dijo Al Gore: hemos tenido las temperaturas más altas de toda la historia, inundaciones catastróficas, sequías que hacen que muchos mueran de hambre y ahora se unen en algunos países los terremotos.

El tema, la pregunta, hoy es exactamente la misma que hace casi 9 años ¿qué hacen los responsables de esta situación? Los llamados países industrializados han tomado acciones para evitar los hidrocarburos. Han hecho algo para reforestar el mundo. La respuesta desgraciadamente es negativa: NO HAN HECHO NADA.

Las consecuencias de no hacer nada está a la vista y peor aún, lo más trágico de todo este fenómeno del “niño” está por venir y será mucho peor si no hacemos algo ya.

Hace un par de días la noticia fue que Europa, Japón y Estados Unidos sufrirían las consecuencias de un calor desmedido.

Consecuencias que las sufren los pueblos y no los responsables de ellas.

No podemos dejar de hacer lo que nosotros individualmente nos corresponde. Ahorremos energía, reutilícenos envases, ojalá de vidrio, rechacemos el plástico, reciclemos y hagamos lo posible por educar a las nuevas generaciones.

Muchos no creyeron en los vaticinios de Al Gore… hoy son realidad.

Dios quiera que entendamos que solo un planeta tenemos y es el que no tenemos posibilidades de reemplazarlo, solamente tenemos una opción CUIDARLO, hagámoslo responsablemente.

La Setena llena de cangrejos «Imagínense…»

Por Juan Francisco Campos

Como si este país mantuviera una situación ecológica saludable, digna de la Nación próspera y culta que otrora fue, sin importar la ruina ambiental que ya padecen numerosos ecosistemas y zonas del territorio nacional producto de su explotación simulando una aplicación eficiente de las regulaciones ambientales, ni los desafíos del cambio climático que azotan el Planeta; el 8 de febrero 2023 durante la habitual conferencia de prensa semanal por parte del presidente de la República, a su estilo y léxico especializado anunció la promulgación de un “Reglamento de Evaluación, Control y Seguimiento Ambiental” (RECSA)1. Es decir, sencillamente por medio de un pobre acto político, oficialmente se informó que el país tendrá nueva reglamentación al respecto. Para los entendidos en la materia como la comunidad científica y en general para los habitantes de este país, a quienes históricamente les ha distinguido una cultura de conservación y protección de la naturaleza, una vez conocido el documento, este, no es menos que una nueva bofetada de dimensiones incalculables; algo característico de gobiernos autoritarios y desalmados.

Por consiguiente, esos fueron algunos de los primeros hechos específicos, con los cuales, las nuevas autoridades encabezadas por el presidente (economista), el ministro de Ambiente y Energía (economista), ministro de Economía, Industria y Comercio (economista) más otros empleados y fijos acompañantes como la Cámara Costarricense de la Construcción; hicieron pública la derogación del “Reglamento General sobre los Procedimientos de Evaluación de Impacto Ambiental” (EIA) y su Manual de Instrumentos Técnicos. Acerca del cual, una exdirectora de Setena y ex ministra de ambiente y energía lo calificara como “…posiblemente la herramienta técnica, administrativa y legal más fuerte que tiene el estado para hacer cumplir el artículo 50 constitucional”. Pero aun así, la disposición ya está consumada mediante el Decreto Ejecutivo No. 43898, publicado un día después de otro acto político en la sede del Colegio Federado de Ingenieros y Arquitectos (18/04/2023) con actores de inferior nivel, y donde la exposición de fondo a cargo del máximo jerarca de la Setena, sólo permitió exhibir su deficiente experticia en el tema2; 3. Un aparente desliz, quizás maquillado con la edición de materiales audiovisuales referentes al tema de la nueva reglamentación y luego colgados en los sitios web de Setena y MINAE4,5.

Vale señalar que, de los actos referidos se infiere que una norma consistentemente progresista como es el Reglamento General y su Manual EIA más la experiencia generada durante su vigencia de aproximadamente 20 años, fue sustituida por otra norma de corte regresivo y sustento economicista identificada como RECSA. Además, es deber señalar que, a esta evidente transgresión de la normativa ambiental, desde los gobiernos anteriores de Solís Rivera y Alvarado Quesada, se contribuyó en justificar repetidamente que, las acciones en esta línea, eran y son indispensables para la “reactivación económica del país, aumento de la inversión extranjera y más empleo”. Una típica cruzada en la que sus protagonistas, durante nueve años no han escatimado estratagemas ni recursos para conducir al país a la catástrofe ambiental, cuyos eventos llamados naturales y cada vez más frecuentes, se desarrollan tanto en el campo como en las ciudades y litorales; dejando al descubierto las severas amenazas a nuestra sobrevivencia.

Mientras en este país exista pobreza, desempleo, deficientes servicios públicos y otras necesidades básicas afectando a grandes sectores de la población, y a la vez mucha riqueza concentrada en sectores minoritarios, lo cual visibiliza la enorme desigualdad que nos distingue; es obvio que este indicador no revela paralización del desarrollo nacional, en tanto esa riqueza, aunque mal distribuida, es el producto de la explotación de los recursos naturales de la Nación y que no se ha detenido. Pero, si junto a esta situación, en el ambiente se determinan abundantes impactos negativos de una deficiente gestión del ambiente, frecuentemente determinada por entidades nacionales como la Contraloría General de la República y otras a nivel externo; debemos concluir que no es reactivación económica lo que se requiere, sino, un cambio radical del modelo neoextractivista y reorientación efectiva hacia el desarrollo sostenible. Vale repetir que el neoextractivismo no es compatible con el desarrollo ambientalmente sostenible.

Así mismo, tomemos en cuenta que, la acumulación de impactos ambientales negativos de las actividades humanas de toda dimensión, son parte de los principales contribuyentes a la fuerza destructiva de los eventos naturales extremos. Identificarlos y minimizarlos al desarrollar proyectos, obras o actividades, por ejemplo, en los talleres de mantenimiento vehicular, cuando se adolece del conocimiento técnico parece sencillo y basta con hablar. Pero prevenirlos y controlarlos ambientalmente, es trabajo profesional de personas con idoneidad calificada, honradas y comprometidas con todos; esto es, con la vida presente y venidera. Además, se requiere la inversión apropiada de recursos, sin discriminar elementos indispensables como tiempo y espacio. Nada de esto está explícito en el nuevo reglamento, pero sí la exclusión de esas y más actividades.

De manera que, el sesgado lenguaje economicista, y alegorías descalificadoras (Ej.: “imagínense, Setena en el campo”) contra la institución pública Setena, rectora de la evaluación de impacto ambiental, así como de su principal instrumento para llevar a cabo esa fundamental función; constituye el único sustento hasta ahora conocido para respaldar las acciones ejecutadas. Por lo tanto, no dan margen a la duda de las inconsistencias de forma y fondo con que las autoridades responsables, han llevado el proceso de eliminación de la normativa reglamentaria todavía vigente. Además, su alevosía es ilimitada al calificarla de “innecesaria”, “excesiva”, “onerosa” y de “trabas al crecimiento económico”; en resumen y según su dialecto un “cuello de botella”6. En este orden, puede plantearse que, si Costa Rica como bien sucede, no ha cumplido y menos ahora cumplirá su compromiso con los Objetivos del Desarrollo Sostenible (ODS), sólo faltaría que estas mismas autoridades explícitamente digan que, el Reglamento General de la EIA ha sido el mayor obstáculo. Pues jamás dirán lo que efectivamente representa: el principal instrumento técnico-científico para lograrlo, pero que durante su corta vigencia ellos mismos han impedido la cabal aplicación. Organismos como la Comisión Centroamericana de Ambiente y Desarrollo así lo han planteado al afirmar que, “el principal problema de la legislación ambiental en todos los países de Centroamérica es su poca aplicación y cumplimiento7”. Consecuentemente, aún si lo que interesara al gobierno fuera el desarrollo sostenible, la derogación de este Reglamento es desacertado.

En igual dirección de lo anterior, es observable que, tanto el presidente como los ministros involucrados, no han honrado con eficiencia las obligaciones que les exige la Carta Magna, por ejemplo: lo relacionado con el Artículo 140, inciso 3) Sancionar y promulgar las leyes, reglamentarlas, ejecutarlas y velar por su exacto cumplimiento. Y en cuanto a la idoneidad y probidad que, también deben los mandos medios, como el jerarca de la Setena; a pesar de que su currículo8 lo describe con más de veinte años de experiencia y buena lista de títulos, su principal mérito antes de ser elegido secretario de la institución, es la incrustación indefinida en un sólo departamento, desde el cual se desempeñó como “funcionario de especial confianza” de las jefaturas, así como de cierto sector de consultores ambientales y desarrolladores “profesionales” del lobby y las coimas. Su función evaluadora de proyectos, nunca conoció ni conoce en la actualidad acerca del rigor debido con “la ciencia, la técnica y la norma” que repite en su discursiva; elementos indispensables a la hora de analizar los deficientes estudios que, mayoritariamente son presentados ante la Setena en los trámites de la Viabilidad Ambiental. Obviamente no es la excepción, pero por tal desempeño, lo conocen e identifican defensores del ambiente, aunque no con el mismo aprecio que le tributan muchos desarrolladores; entre ellos algunos “cochinillos”.

En la trayectoria profesional del jerarca referido, a quien heredó su puesto la exsecretaria de Setena Cynthia Barzuna durante los últimos meses del gobierno anterior, aplica la metáfora de “las puertas giratorias” y en las titulaciones según currículo no faltan “patitos”. Por eso, nada extraño resulta en su discurso la abundancia de frases y conceptos vagos, así como, la pobre consistencia técnica para justificar las acciones descritas, en las cuales se supone asumió el protagonismo que le corresponde; o también las interpelaciones ante los miles de denuncias y quejas9 de la ciudadanía por daños al ambiente. Respecto a interpelaciones, el caso más reciente en el cual así se le ha observado públicamente, es el de la audiencia10 ante la Comisión de Ambiente legislativa, relacionado con la viabilidad ambiental firmada y defendida por él para un proyecto de incineración de residuos (Exp. Nº D1-0680-2020-SETENA). Claro está que, en ese actuar de aparentes irregularidades, hay tanto “errores involuntarios” como horrores por acción u omisión, para los cuales las promesas de anticorrupción por parte del gobierno no se han cumplido; y menos aún su representada honra la misión, visión y valores que exhiben11.

Además, como un hecho inédito en la audiencia legislativa antes citada, se registra la siguiente afirmación del señor Director General Ulises Álvarez: “Quiero aclarar, la Evaluación de Impacto Ambiental la realiza el equipo consultor, no es la Setena como erróneamente mencionan algunas personas, la hace el consultor o empresa consultora”. Sencillamente, se trata de una autodescalificación para el puesto que desempeña y cualquier otro dentro de la misma entidad rectora de la Evaluación de Impacto Ambiental a nivel nacional, por su confeso desconocimiento en la materia y por ende nula idoneidad. En estos términos, es obvio que las decisiones tomadas en el desempeño de sus funciones, arrastran nulidad debido a su contradicción con la ley (Artículo 17 de Ley Orgánica del Ambiente) y el Artículo 50 de la Constitución Política. No conocemos hasta hoy que, desde ningún poder de la República se haya actuado para corregir con la celeridad que ameritan las graves implicaciones de la situación existente de tal forma rebelada.

Debemos repetir que en el procedimiento seguido para elaborar y promulgar el RECSA, los protagonistas no cumplieron cabalmente con honrar principios elementales como el de participación, transparencia, no regresión y prevalencia de las reglas de la ciencia y la técnica. Aspectos en sumo relevantes que, sí fueron contemplados rigurosamente en el proceso cumplido para la puesta en vigencia del Reglamento General de la EIA y su Manual; basta leer y analizar su contenido integral, así como las actas que lo testimonian. Un ejercicio que, si algún protagonista de buena fe sobre el RECSA lo hubiera hecho, mucho más que derogarlo, se hubiera propuesto lo que de ley corresponde: su mejoramiento real y efectivo en el contexto de la inobjetable realidad que vivimos, y donde los signos presentes no son oráculos sacerdotales.

La cantaleta de “cuellos de botella”, desde el gobierno de Carlos Alvarado adquirió connotación trágica y en gran parte inducida desde la asamblea legislativa, donde varias voces gritaban y exigían al ejecutivo acciones de emergencia; pues según ellos, se perdían elevadas sumas de dinero a consecuencia de montañas de expedientes estancados en la Setena, aparentemente por negligencia de su personal12,13. Esto llevó a que la intervención política de la institución y la presión desde los gremios empresariales, nunca había sido tan fuerte y violatoria de la desconcentración máxima institucional; así lo reconoce la Contraloría General de la República en su más reciente informe. Otro hecho inédito de dicha situación, sucedió al conocerse que, desde otras instancias, en esa escena irrumpieron dos señoras: la primera dama Claudia Dobles y la vice ministra de gestión ambiental María Celeste López. Ambas, la primera indirectamente y la segunda de forma directa contra el Reglamento de EIA y la supuesta presa de miles de expedientes de proyectos en espera de la evaluación; una con sus mandaderos desde la casa de Zapote y la otra desde su instalación en la propia Setena14. No informaron nada sobre el RECSA heredado de la administración anterior, y sin importar variables como la calidad de los estudios, proceso evaluativo, la idoneidad y cantidad del recurso humano y la aplicación y cumplimiento estricto del Reglamento; pocos meses después sí divulgaron que la presa había acabado15. A partir de entonces, ya hay quienes dicen que ahora la Setena es eficiente, no obstante, todavía rige el mismo Reglamento General (hasta el 19/08/2023); pero “el milagro económico nacional” sigue esperando.

Cuando empezó ese ínterin, al finalizar el año 2018 e inicios del 2019, casi nadie supo ni se informó debidamente, por qué el jerarca institucional de entonces (Sergio Bermúdez Muñoz), a sólo 7 meses de su nombramiento fue cesado y en su lugar, aparentemente por orden de la primera dama y petición de UCCAEP, se nombró a la abogada Cynthia Barzuna Gutiérrez. Versión al parecer derivada del ligamen familiar entre esta abogada y un ejecutivo de esos gremios. Mientras tanto, de los colaboradores internos mejor “alineados”, algunos fueron promovidos a mandos medios y con ellos preparado el terreno para lo que vendría luego. El actual secretario Ulises Álvarez es una prueba al respecto, se dice que por su indiscutible “alineamiento” heredó la silla ocupada por Barzuna, de quien dicen también a lo interno de la institución, su principal aporte fue haber cambiado el logo de la Setena e insistir ante la prensa que la Setena iba a “migrar” de su modelo de EIA. Un asunto de repetición frecuente, lo cual, desnuda el desconocimiento de conceptos básicos en la materia de la EIA por parte de ella y quienes así lo repiten.

Acerca de la tarea de las interventoras en este caso contra el “Reglamento General sobre los Procedimientos de Evaluación de Impacto Ambiental (EIA)”, existen algunos antecedentes divulgados por diferentes medios. Por ejemplo: durante el gobierno Solís Rivera, una vez que adecuaron algunos mecanismos de participación pública según los intereses de las cámaras empresariales y otros entes afines como PROCOMER y CFIA; con el protagonismo de estos actores se elaboró el nuevo y primer Reglamento, pronto dado a conocer con el acrónimo RECSA15. Tanto en el sitio web de la Setena como por otros medios, también informaron que, para esos efectos, se facilitaron eventos de participación pública llamados mesas de diálogo. Sin embargo, no disponemos de evidencia suficiente si en verdad las autoridades de Setena facilitaron la efectiva participación pública que requiere este proceso. Pues la participación de la propia Setena, fue de bajo perfil y limitada a aspectos de forma. Así lo confirmaron algunos funcionarios consultados al respecto cuando se dio a conocer el documento, y de los pocos que tuvieron alguna participación, uno (Ing. Civil) respondió que, nunca entendió por qué lo incorporaron en esa tarea, si sólo tenía unos meses de haber sido contratado y el Reglamento a reformar, apenas empezaba a conocerlo.

Sin embargo, según nuestros informantes, durante la última semana del mismo gobierno, el entonces secretario de la Setena (Marco Arroyo), en su despedida ante el personal de la institución circuló un mensaje en el cual informó: “El decreto del RECSA junto a la derogatoria del 31849 que se adjunta, ya fue firmado por el presidente de la República (G. Solís) y está en fase de publicación oficial”. También se conoció que efectivamente, el documento había sido firmado por el presidente y los ministros del MINAE, S, MOP, MAG y MEIC. Así mismo, el número de oficio (DAJ-D-035-2018) con el que se registró y hasta el número de decreto ejecutivo que le correspondería para la publicación oficial (41132); se planteó como Derogatoria Parcial del Reglamento General EIA”. No obstante, transcurrido el primer año del nuevo gobierno encabezado por Carlos Alvarado, la publicación de ese decreto reglamentario no se había dado; pero en su lugar promulgaron otros relacionados con el mismo tema. Por ejemplo, los Decretos No. 41213-MINAE del 10 de julio de 2018 y el No. 41815-MINAE del 05 de julio 2019. Ambos concordantes con los objetivos de eliminar el requerimiento de la viabilidad ambiental, empezando con los proyectos según sus criterios de bajo impacto ambiental (54% de la totalidad de proyectos que ingresan por año – dijeron). Más adelante, la secretaria general declaró que se había determinado oportuno reformular el RECSA y que el asunto estaba a cargo del MIVAH. De manera que, según lo dispuesto en los decretos antes citados, sería de esperar otro reglamento todavía más acorde con los intereses del sector construcción y desarrollo inmobiliario. Siendo por ejemplo que, al tanto del tema, para mayo 2019 el presidente de la Cámara de la Construcción, también había declarado que tal documento se encontraba en revisión16.

Se infiere que, con esas reformas decretadas y otras disposiciones en igual dirección tanto al interior como a lo externo de la SETENA, para los citados sectores dominantes sobre los poderes de la República, el nuevo Reglamento heredado de la administración Solís y a un solo paso de adquirir su vigencia mediante la publicación; perdió interés. Pues, al generarse con el nuevo gobierno, mejores posibilidades de incidir a su favor en la administración del Estado para llevar a cabo transformaciones aún más regresivas, lo lograrían con otro Reglamento conservando el mismo nombre. En este caso, con un segundo RECSA, el cual podría catalogarse como una suplantación para evadir responsabilidades específicas. Algo similar a lo actuado con la viabilidad ambiental respecto al proyecto del nuevo edificio de la Asamblea Legislativa. Y como era de esperar, con fecha 25 de mayo 2021, aparentemente con ciertas restricciones y al interior de la Setena, algunos funcionarios conocieron un documento sin número de oficio pero que correspondía a una nueva propuesta cuyo título refiere: ”Reforma Integral de 31849-SETENA”.

Pero, si bien el gobierno Alvarado Quesada finalizó sin haberse publicado el nuevo Reglamento General de EIA reformado ni el RECSA, si se toma en cuenta que las llamadas presas de expedientes ya no existían gracias a sólo la eliminación del requisito de Viabilidad Ambiental para proyectos, obras o actividades de bajo impacto ambiental, relegados a simples registros y permisos sin estudios previos; más otras disposiciones en igual línea, la expectativa a nivel público por el nuevo Reglamento había bajado. No obstante, y como ya se dijo antes, aunque anunciado atrasadamente se conoció el oficio DAJ-D-030-2022 firmado en casa presidencial el 21 de diciembre 2022, anunciado el 8 de febrero del 2023 y publicado el 19 de abril de este mismo año; siendo por lo tanto el último RECSA17. Y para efectos de conocer acerca de su consistencia legal y técnica, debe considerarse que con fecha 17 de noviembre del 2020, el Consejo Nacional de Rectores, luego de sus análisis y los pronunciamientos de investigadores y unidades académicas del espectro universitario, concluyó en rechazar dicho reglamento “…puesto que alberga una cantidad importante de inconsistencias que están alejadas de la ciencia y la técnica, y por las evidentes transgresiones, por acción u omisión, del derecho de participación pública y el derecho de información, así como a la normativa en protección ambiental, cultural y patrimonial vigente18”.

En las actuaciones entre gobiernos sobre la reglamentación de impacto ambiental, se ha determinado que la del señor Alvarado, con su sucesor hizo algo similar a lo del antecesor, ya que, es durante su gestión que se redactó la propuesta titulada “Reforma Integral de 31849 SETENA”, fechada 25 de mayo 2021 en la Setena y dada a conocer como el nuevo documento para decretar el RECSA. Documento diferente al heredado, y sin duda alguna más regresivo y acorde con las potestades concedidas al sector construcción y de desarrollo inmobiliario para “Proponer un reglamento de evaluación, control y seguimiento ambiental (RECSA) con el contenido que considere correspondiente”. En tanto es “…el usuario más importante de la SETENA pues sus proyectos representan un 70% de lo que ahí se tramita”. (Observar Considerando VI y Artículo 2 del Decreto 41817-MINAE y otros)19.

Esta sesgada concesión, permite inferir acerca del proceso de participación ciudadana que se pudo haber cumplido en la elaboración el nuevo Reglamento; pues es claro que la llamada modernización, con tal reforma en la integración de la Comisión Mixta de Apoyo Técnico, lo que más se propuso fue reducir la participación y jamás, al menos igualar la que se facilitó con el Reglamento General de la EIA derogado. (Se recomienda leer lo que sobre este punto específico señala la CGR en el Informe No.DFOE-SOS-IF-00008-2022). En votos anteriores, la Sala Constitucional ha reiterado su reconocimiento a esta fortaleza reglamentaria. Por ejemplo, en la Resolución 2019-2009 dictada a favor de un recurso de inconstitucionalidad contra el Decreto Ejecutivo No. 32734, mediante el cual se pretendió derogar el requisito de la Viabilidad Ambiental en concesiones de agua20.

Finalmente, es necesario destacar que, de los documentos citados y dados a conocer desde el año 2018 acerca de reformas y derogaciones sobre la evaluación de impacto ambiental y su Reglamento General, se identifican tres documentos: 1. DAJ-D-035-2018, RECSA, su titulación se refiere “reforma parcial”. 2. Identificado con la leyenda 25-5-2021-SETENA, Reglamento, el título indica “reforma integral”. 3. DAJ-D-030-2022, RECSA, firmado el 21/12/2022, anunciado el 08/02/2023, presentado el 18/04/2023 y por último publicado el 19/4/2023 como D.E. 43898-MINAE. Sin embargo, este decreto no corresponde al mismo RECSA dado a conocer hace aproximadamente cinco años, si fuera así, hubiese sido firmado dos veces; la primera por el gobierno Solís Rivera el 03 de mayo 2018 y la segunda por el gobierno Chaves Robles el 21 de diciembre 2022.

También, es importante señalar que al publicarse el D.E. 41815 del 2019 con ello fue dispuesto que se eliminó el requisito de viabilidad ambiental del 54% de los proyectos, obras o actividades que se presentaban a la Setena con el D2; relegados a un trámite de simple registro e inmediato permiso. Mientras con el RECSA último, se indicó igualmente comprende la eliminación del mismo requisito de tramitación con el D2 pero en términos del 63 o 65 % de los proyectos, obras o actividades de bajo y muy bajo impacto ambiental21,22. Por lo tanto, aparentemente estamos en presencia de dos posibles mentiras expuestas al más alto nivel de autoridades de gobierno y a través de las cuales, de la lectura comparativa con el Reglamento General de EIA, se evidencia en el RECSA la constante regresividad que sus principales actores no tuvieron contemplaciones de imponer en ausencia de efectivas y concisas sustentaciones técnicas.

Muy oportuno es señalar que, en Resolución de Sala Constitucional (No. 2002-01220)23, sobre el mismo tema e iguales objetivos de las autoridades gubernamentales, se dictó que, hacer exclusiones de obligaciones ambientales para casos que determina de manera genérica y sin justificación técnica, “…evidencia un exceso del Poder Ejecutivo en el ejercicio de su potestad reglamentaria”. Así mismo reitera: “…el desarrollo de los derechos fundamentales y de las libertades públicas es reserva de ley; es por ello que en este campo, la potestad reglamentaria que la misma Constitución Política reserva al Poder Ejecutivo, es inimaginable sin la existencia de una ley. Ya se adelantó que la Ley Orgánica del Ambiente establece en el artículo 17, como desarrollo de lo que dispone el artículo 50 constitucional, la obligación de contar con un estudio de impacto ambiental para realizar actividades o proyectos que por su naturaleza puedan alterar o contaminar el medio ambiente”.

¿Y ahora? Como hechos importantes para la lectura crítica, hemos fijado atención a las más recientes celebraciones oficiales sobre el Día Mundial del Medio Ambiente y el Día Mundial de los Océanos. En una de ellas, Canal 13 presentó al señor presidente acompañado de dos de sus ministros en visita a la ciudad de Puntarenas; y desde allá, intentaron transmitir algunos mensajes en los que, quizás ellos mismos muy poco creen. Pero más allá de los mensajes, pretendimos conocer si viajaron en el carrusel blindado “donado” al presidente por los “bondadosos gringos”; ya que, como a tales resguardos se ha llegado en Costa Rica, este, es un signo revelador del acelerado retroceso de las condiciones de vida del costarricense y sin duda, parte de la calidad de su ambiente. Por otra parte, la inauguración del “Desvío Tiribí”, revela otro signo de lo que en el mismo contexto se viene haciendo mal, específicamente aguas arriba de la ubicación del colector de aguas residuales en la cuenca del río Tiribí. Daños ambientales que, además que procurar corregirlos es caro (más de 13.000.000.000)24,25, son irreversibles y los costos así manejados se vuelven carga pública.

Los ejemplos citados, también permiten inferir que, si junto con la nueva reglamentación, se informó que eliminaron la evaluación de impacto ambiental del 65 % de los proyectos que la requerían, y adicionalmente que, en los estudios de impacto ambiental se redujo en un 32.9 % los términos de referencia26; considerando que éstos, eran requerimientos exigidos por el Reglamento General de EIA en consistencia con las Leyes, Convenios Internacionales y la Constitución Política; además de ser una prueba irrefutable de regresividad normativa, lo que también indirectamente pronostican con el RECSA, es la aceleración hacia un ambiente cada vez más insano y desequilibrado. De tal manera que, si como repiten con acentuado chovinismo que, Costa Rica mantiene un destacado liderazgo mundial en la protección, conservación y restauración de la naturaleza27,28,29; con las evidencias descritas, tales ventajas jamás se pueden garantizar con leyes y reglamentos más laxos, ni con Órganos Adscritos de carácter técnico (Ej. La Setena) más concentrados, sometidos al poder político y nadando en corrupción.

A qué conduce el último RECSA, si tanto en la forma como de fondo, también persigue reglamentar de nuevo una materia que, por su complejidad debe ser en todo momento integradora y abarcadora; no obstante, es notable el carácter de simplificación extrema y excluyente que se adopta. Además: 1. Que, como una aparente justificación técnica, argumenta que se abandona un modelo de escritorio para adoptar uno de campo con mayor peso en el control; es decir, no sólo denota desconocimiento de las fases del proceso de la EIA, sino que opta por la corrección en detrimento de la prevención. 2. Que no posee consistencia con lo que establece la Ley Orgánica del Ambiente en sus Artículos 6 y 17, artículo 14 del Convenio de Biodiversidad del que somos Estado Parte, y el artículo 50 Constitucional entre otras. 3. Qué deroga obligaciones ya establecidas y plenamente dispuestas en el Reglamento General de la EIA y su Manual EIA, según lo descrito en los artículos 3, 39 y 91 del RECSA. 4. Que en evidente violación de la normativa del trabajo, induce al acoso psicológico laboral imponiendo plazos que, incluyen tiempo no laboral de los funcionarios encargados del proceso de la EIA para resolver y responder ante los usuarios, así como, advertencias de establecer en su contra procesos disciplinarios (Artículos 15, 17, 26.f, 30.7, 33.3, entre otros). 5. Que el marco de legalidad, no autoriza a la Setena a delegar total ni parcialmente las funciones que le son propias; sin embargo, dispone que los proyectos, obras o actividades a los que les elimina el requisito del proceso de la Viabilidad Ambiental ante Setena; les basta con el trámite que deberán cumplir en otras instituciones y acatar lo dispuesto en el Código de Buenas Prácticas Ambientales (Ej.: Artículo 32.c). 6. Que el Código de Buenas Prácticas Ambientales acerca del cual, la Setena tanto repite sobre su aplicación; son disposiciones que por años han estado en el aire y nadie cumple, ni siquiera la Setena donde la mayoría de funcionarios no lo conoce; pero a los usuarios se les cobra sin entregar nada a cambio; lo único es indicarles que lo lean en el sitio web. 7. Que para proyectos, obras o actividades sobre infraestructura de telecomunicaciones, zonas francas y caminos; la exclusión de la Viabilidad Ambiental, además de lo contemplado en el RECSA, también se han establecido disposiciones en normas de reciente promulgación y otras en trámite30,31.

En conclusión, es urgente y necesario por parte de cada funcionario y cada habitante de este país, asumir el compromiso ético y moral que dispone la Constitución Política y las Leyes; dignificar y defender nuestra institucionalidad democrática, denunciar ante la Nación y el mundo lo que haya que denunciar y, nunca bajar la bandera de Defensores de la Casa Común que ha distinguido a muchos costarricenses, algunos de ellos hoy verdaderos mártires. Sólo así, con hechos y no simples palabras, alcanzaremos legitimidad para pregonar por el mundo si es que fuera necesario, lo que tenemos y hacemos. Como nunca, necesitamos un país y un Planeta más inmune a los impactos irracionales y avanzando indefinidamente en protección y conservación de su biodiversidad.

Referencias

  1. https://www.presidencia.go.cr/comunicados/2023/02/65-de-proyectos-de-bajo-impacto-ambiental-que-ingresan-a-setena-ya-no-requeriran-viabilidad/
  2. https://cfia.or.cr/noticias/presentan-nuevo-reglamento-de-evaluacion-control-y-seguimiento-ambiental-en-colegio-federado-de-ingenieros-y-arquitectos.html
  3. https://www.prensa-latina.cu/2023/04/18/nuevo-reglamento-para-preservacion-ambiental-de-costa-rica.
  4. https://minae.go.cr/noticias/2023/DECI%20037%20GRAN%20INTERES%20DESPERTO%20DECRETO%20DE%20NUEVO%20REGLAMENTO%20DE%20SETENA%20QUE%20FUE%20PUBLICADO%20HOY%20EN%20LA%20GACETA.aspx
  5. https://www.setena.go.cr/es/Noticias/Presentacion-Nuevo-Reglamento-de-ECSA
  6. https://www.setena.go.cr/es/Noticias/setena-elimina-cuellos-de-botella
  7. https://www.sica.int/busqueda/busqueda_archivo.aspx?Archivo=odoc_5353_2_20122005.htm
  8. http://www.setena.go.cr/inicio/Noticias/Director-General
  9. https://www.facebook.com/radioasamblealegislativacr/videos/29-07-22-comisi%C3%B3n-permanente-especial-de-ambiente/613070723799557/
  10. https://www.minae.go.cr/organizacion/ministro/SETENA-SecretariaTecnicaNacionalAmbiental.aspx
  11. https://www.larepublica.net/noticia/setena-limita-el-crecimiento-economico
  12. https://www.construccion.co.cr/Post/Detalle/35228/ccc-busca-un-cambio-radical-en-setena
  13. https://www.presidencia.go.cr/comunicados/2018/09/gobierno-anuncia-propuesta-integral-de-acciones-para-la-reactivacion-economica/
  14. Cynthia Barzuna, secretaria general: “En Setena no se han suavizado los controles”
  15. https://observador.cr/noticia/empresarios-esperan-mayores-resultados-en-simplificacion-de-tramites/
  16. https://www.imprentanacional.go.cr/pub/2023/04/19/ALCA65A_19_04_2023.pdf
  17. https://www.elpais.cr/2020/11/17/consejo-nacional-de-rectores-rechaza-propuesta-del-reglamento-de-setena/
  18. http://www.pgrweb.go.cr/scij/Busqueda/Normativa/Normas/nrm_texto_completo.aspx?param1=NRTC&param2=1&nValor1=1&nValor2=89166&nValor3=116923&strTipM=TC&lResultado=1&nValor4=1&strSelect=sel
  19. http://www.pgrweb.go.cr/scij/Busqueda/Normativa/Normas/nrm_texto_completo.aspx?param1=NRTC&nValor1=1&nValor2=55847&nValor3=78379&strTipM=TC
  20. https://www.larepublica.net/noticia/gobierno-elimina-requisito-de-viabilidad-de-setena-para-65-de-proyectos-de-bajo-impacto-ambiental
  21. Gobierno elimina requisito de estudio de viabilidad ambiental a pequeños negocios «de bajo impacto»
  22. https://vlex.co.cr/vid/-498448770
  23. https://sinartdigital.com/trecenoticias/nacionales/item/en-el-dia-mundial-de-los-oceanos-gobierno-inaugura-obra-de-saneamiento-en-rio-tiribi
  24. https://www.larepublica.net/noticia/salvando-al-rio-tiribi-nuevo-colector-evitara-la-descarga-de-12-millones-de-litros-diarios-de-aguas-residuales
  25. https://semanariouniversidad.com/pais/gobierno-elimina-requisito-de-estudio-de-viabilidad-ambiental-a-pequenos-negocios-de-bajo-impacto-ambiental/
  26. https://www.swissinfo.ch/spa/costa-rica-medioambiente_costa-rica-anuncia-estrategia-de-carbono-azul-para-impulsar-la-conservaci%C3%B3n/48255292
  27. https://www.guanacastealaaltura.com/realizan-encuentro-de-mujeres-guardaparques/
  28. https://ojoalclima.com/adaptacion-permeara-posicion-tica-en-cop27/
  29. https://semanariouniversidad.com/pais/estructuracion-del-minae-excluiria-a-comunidades-indigenas-y-universidades-de-toma-de-decisiones-ambientales/
  30. https://delfino.cr/2023/02/comision-avala-proyecto-que-reforma-el-minae-y-quita-independencia-tecnica-de-la-setena

Los trabajadores del Edén: una finca pionera en la conservación de los recursos naturales

Uriel Rojas

Ubicada a 3 km al NE de la comunidad indígena de Rey Curré, se encuentra la Finca El Edén, un proyecto que combina la conservación de los recursos naturales y el cultivo de ganado de desarrollo en armonía con el bosque de una forma sustentable.

La siembra de árboles en Fincas El Edén, es uno de los compromisos fundamentales de este proyecto socio productivo, el cual lo considera como una práctica aliada en la lucha contra el cambio climático al ayudar a reducir la emisión de gases de efecto invernadero, y de paso aumentar la producción de ganado.

Este proyecto es un emprendimiento de la familia Lázaro Araya, su origen data de hace más de 60 años y actualmente liderado por el indígena de origen boruca, Rogelio Lázaro Nájera e hijos, los cuales tienen claro la misión de su proyecto y el compromiso con el medio ambiente.

En las entrañas de esta Finca El Edén, recorren las aguas de la quebrada Campanas, uno de los afluentes hídricos mejor conservados y con mayor riqueza en la reproducción de camarones y peces que emigran al Rio Grande de Térraba.

También en esta quebrada, yacen una de las pozas más hermosas y mejor conservadas de la zona. Gran parte de estas bellezas se debe en parte, a los esfuerzos de protección que desempeña los socios familiares de la Finca El Edén.

A nivel cultural, esta finca, el cual supera las 60 hectáreas posee legados arqueológicos, y protege diversos tipos de fibras naturales, los cuales son muy valiosos para la cultura indígena local como lo es el bejuco negro, cucharilla, tripa de pollo entre otros tantos.

Estas fibras son utilizadas para amarrar techos y paredes de ranchos, hacer jabas, canastas y sombreros.

En el campo socio productivo, implementa una estrategia de producción baja en carbono, el cual mantiene y reproduce árboles en linderos, cercas y potreros, y sostienen el bosque en las nacientes de ríos y quebradas, como prácticas para cuidar las áreas boscosas de la zona, los cuales comprenden más de 40 has de esta propiedad.

En el plano faunístico, en esta finca agroforestal podrás disfrutar de avistamiento de aves, tales pavas, perdices, chancho de monte, quioros, lapas, zaínos, venados, tepezcuintles, pizote, panteras, entre otros animales silvestres, que hacen de este lugar, su propio Edén.

Los recorridos por la finca lo puedes hacer a pie a caballo solo debes coordinar con don Rogelio Lázaro al teléfono 8399 3491.

UNA trabaja con Asadas por la seguridad hídrica de la Región Chorotega

¿Cómo garantizar agua potable de calidad a los habitantes de Guanacaste y, a la vez, afrontar el reto de la adaptación al cambio climático en esa región? La Sede Regional Chorotega de la Universidad Nacional (UNA) trabaja en esa dirección.

Son varias las acciones que se impulsan: cómo fortalecer las capacidades técnicas de los administradores del agua para que, de esa manera, se pueda hacer una mejor evaluación del agua, se dé seguridad hídrica a los habitantes y se ofrezca una mejor infraestructura, gestión comunitaria y adaptación al cambio climático. Para lograrlo, se ha creado un vínculo del Centro de Recursos Hídricos para Centroamérica y el Caribe (Hidrocec), de la Sede Regional Chorotega-UNA, con las asociaciones administradoras de los sistemas de acueductos y alcantarillados comunales (Asadas), y el Instituto Costarricense de Acueductos y Alcantarillados (AyA).

Aunque Guanacaste es la provincia que cuenta con más Asadas (377), es, a la vez, la que presenta más deficiencias en la prestación de servicio de agua potable. Los principales retos que enfrenta son: a) condiciones climatológicas e hidrológicas muy marcadas, que presionan los sistemas de abastecimiento b) fuentes cuyos caudales no responden a la de­manda del recurso por parte de la población, c) presencia de metales pesados como el arsénico y la intrusión salina, d) incumplimiento de la factibilidad técnica que impide ofrecer nuevos servicios y disponibilidades de agua, e) uso de fuentes ilegales, f) presión en las zonas costeras por el desarrollo inmobiliario, g) presencia de asentamientos informales, h) terrenos en milla fronteriza, y i) asentamientos desabastecidos.

Pero la provincia enfrenta otras dificultades no menores, como el cambio climático con la llegada del fenómeno de El Niño de forma muy marcada entre el 2014 y 2016, las secuelas que dejó el Huracán Otto, la contaminación del agua con arsénicos en Bagaces, así como la salinización de los acueductos y pozos de las zonas costeras de Santa Cruz y Sardinal.

Asadas en la Región Chorotega

Andrea Suárez, coordinadora de Hidrocec-UNA, indicó que gracias a las alianzas estratégicas, se han podido realizar proyectos como Fortalecimiento de las Capacidades de Asadas, la capacitación e implementación de mejores técnicas e innovación en la gestión comunitaria del agua. Este proyecto de extensión se desarrolló en dos fases: 2015-2017 y 2017-2019; comenzó en 2015 con las Asadas costeras de Santa Cruz, Abangares y Nicoya. “Este proyecto implementó mejores prácticas y técnicas de innovación en la gestión comunitaria del agua, fortaleció las capacidades y la evaluación del agua en las Asadas y la seguridad hídrica en su calidad”, comentó Suárez.

En el caso de los acueductos de las zonas costeras de Santa Cruz—donde se presentan mayores problemas de salinización de pozos—Suárez dijo que se logró la construcción del acueducto de Nimboyores, el cual abastece de agua a una amplia población costera del cantón, incluyendo productores, comercio y diferentes desarrollos turísticos de la zona.

Otro proyecto de gran impacto es SCALL NIMBU III, un sistema de potabilización de agua de lluvia, cuyo objetivo es solventar el acceso y producción del agua potable para uso comercial. Este proyecto se desarrolla en Brasilito de Santa Cruz y se impulsó gracias al compromiso de la Asada local con dos instancias de la Sede Regional Chorotega: el Centro Mesoamericano de Desarrollo Sostenible del Trópico Seco (Cemede) y el Hidrocec. Su gran aporte es haber generado no solo conocimiento sobre el uso de tecnologías innovadoras sino que también ha fortalecido la operación de la Asada en la administración y producción de sus recursos.

En La Cruz se impulsó el proyecto VARCLIM, que impactó, principalmente, a las comunidades de El Jobo (administrado por AyA), Santa Cecilia (Asada) y Cuajiniquil (Asada). En este caso, destacó Suárez, el tema que se abordó fue la variabilidad climática y se trabajó con los sectores pesquero, turístico, agropecuario, además del hídrico, a quienes se les brindó transferencia de conocimiento sobre proyecciones climáticas y fortalecimiento de capacidades técnicas, incluido el tema hídrico, pero siguiendo la línea para el fortalecimiento de las regiones. Esta iniciativa se hizo en conjunto con el Consejo Nacional de Rectores (Conare), la UCR, el Centro Internacional de Política Económica (Cinpe) y el Cemede.

Otro proyecto que nació desde una asociación específica para el saneamiento y protección de los mantos acuíferos fue AGUASANA, que se hizo en dos fases: 2017-2019 y 2019-2020. En esta iniciativa participaron diferentes Asadas y ONGs de la región; el proyecto tuvo una incidencia ambiental y puso énfasis en el buen manejo de las aguas residuales.

Finalmente, está el Proyecto Asada de la Altura ACBT, que lo conforman las federaciones de Asadas de Abangares, Cañas, Bagaces y Tilarán. La iniciativa se creó en el el Consejo de Desarrollo Rural Territorial del Instituto Nacional de Desarrollo Rural (Inder) y aborda las capacidades de las Asadas para la gestión de cuencas, acciones operativas técnicas como evaluar la calidad del agua, retroalimentar para lograr mejoras en la gestión del acueducto, determinar las alturas potenciales de recarga en las cuencas hidrográficas y así medir las zonas de protección y reforestación a largo plazo.

Mitigación de sequías

A finales de 2022 se realizó un intercambio entre científicos alemanes con sus homólogos de la Sede Regional Chorotega de la UNA, con el fin de comprender los desafíos que representa para esta región las sequías prolongadas y cómo realizar una gestión del agua que permita seguir atendiendo actividades como la agricultura y el turismo.

Suárez explicó que fue en ese contexto donde surgió la iniciativa de desarrollar el proyecto GREAT. Se trata de un esfuerzo colaborativo en el que participan, por Costa Rica, el Cemede, el Laboratorio de Manejo Ambiental de Residuos de la Facultad de Química (Lagede-UNA), el Hidrocec- UNA y el Servicio Nacional de Riego y Drenaje de Aguas Subterráneas (Senara); por Alemania, el grupo de investigación sobre recarga gestionada de acuíferos (lnowas) de la Technische Universitat Dresden (TUD).

El proyecto GREAT trabaja en la zona costera de Santa Cruz y la región insular del Golfo de Nicoya para comprender mejor los desafíos relacionados con la seguridad hídrica en estos territorios. Esto incluye una colaboración para el desarrollo de capacidades de estudiantes y académicos costarricenses en Alemania, así como estudios de seguridad hídrica en las áreas de enfoque del proyecto.

Más detalles en este video:

Oficina de Comunicación
Universidad Nacional, Costa Rica

La batalla que no podemos perder

Alberto Salom Echeverría

“No solo los pobres y oprimidos deben liberarse. Hoy deben ser liberados

todos los seres humanos. Todos somos rehenes de un modelo de comportamiento

que nos sitúa, en contra del sentido del universo, por encima de las cosas, en vez de

estar con ellas dentro de la gran comunidad cósmica.”

Fazenda Sossego, Santana do Deserto, MG.

“…la esperanza [es de que] el futuro común no se construirá

sobre las ruinas del planeta y de la humanidad. Así como del caos originario

surgió la cosmogénesis, la litosfera, la hidrosfera, la atmósfera, la biosfera y

la antroposfera, también habrá de surgir la noosfera -la comunión de mentes

y corazones- en un centro de vida, de solidaridad y de <<amorización>> común.”

Fazenda Sossego, Santana do Deserto, MG.

Introducción

Estas dos, para mí, extraordinarias citas, que comparto con usted amigo y amiga lectora, se encuentran en la sucinta pero enjundiosa introducción al maravilloso libro del teólogo Leonardo Boff, “Grito de la Tierra, Grito de los Pobres, hacia una conciencia planetaria.”

Me enorgullezco al contarles que tanto el teólogo Leonardo Boff como Frei Beto, fueron invitados de honor en la Universidad Nacional (UNA) durante el ejercicio de mi rectoría e impartieron sendas conferencias de gran calado, alrededor de la temática del calentamiento global y el cambio climático, con un énfasis en una ética ecológica y desde una perspectiva cristiana. En el caso de Frei Beto fue galardonado como profesor Emérito de la UNA.

Muchos de nosotros, académicos, administrativos y estudiantes, adultos y jóvenes, nos vimos enriquecidos con sus reflexiones ora filosóficas y teológicas, ora éticas y ecológicas y creemos haberlos honrado (en mi caso tras haber llegado a la etapa jubilatoria en junio del 2020), al fundar una organización de la sociedad civil que denominamos: “Madre Tierra por el desarrollo sostenible y sustentable.”

En mi caso, les cuento que estaba -y estoy todavía- plenamente convencido de que la lucha por un desarrollo sostenible y sustentable con la Naturaleza, con la vida y los ecosistemas que la contienen, es la principal tarea de nuestros tiempos, so pena si no lo hacemos de sufrir nuestra generación o las próximas en un futuro inmediato, la hecatombe más mortífera y desastrosa que haya experimentado la humanidad y la vida de todas las especies de plantas y animales sobre la faz de la tierra, pudiendo llegar hasta su desaparición completa, es decir su extinción. Esta posibilidad es real y, los científicos más connotados de todos los países que, se han congregado varias veces desde 1972, en el estudio y profundización de investigaciones transdisciplinarias e interdisciplinarias, lo han constatado y han dado fe y certeza de ello a toda la humanidad. Los signos son evidentes, ominosos y patéticos. Sin embargo, veremos que la “batalla” para defendernos de semejante catástrofe no ha resultado tan eficaz ni eficiente, como lo hubiésemos creído originalmente y, por ende, estamos transitando por un camino inmensamente escarpado y difícil de alcanzar.

Nos llegó la hora de la verdad.

Procuro mantenerme bien informado respecto de la evolución de la enfermedad de la tierra. Es un deber autoimpuesto, desde que tomé la decisión de fundar junto con otras académicas y académicos, estudiantes, trabajadores en general, la Asociación Madre Tierra. Leo todos los libros que pueda, muchas personas amigas, mis hermanos, como saben que el tema es de mi particular interés e incumbencia, me regalan buenos libros; además me he dado a la tarea de leer muchos excelentes reportajes, seleccionando la fuente de la información, porque ‘está de dios’ en estos días que circulen también por las redes una abrumadora cantidad de noticias falsas, por lo que hay que agudizar el lente.

Siempre he vivido lleno de esperanza en la humanidad, ahora ya como adulto mayor, me he ido dotando de una buena dosis de realismo que combino con mi inveterada costumbre de ver el lado bueno de las cosas. Esto lo expreso porque casualmente en estos últimos días circula un buen cúmulo de información preocupante sobre el estado del paciente, nuestra Madre Tierra.

Para escribir este ensayo he seleccionado una investigación internacional, que me ha parecido veraz y cuyo contenido por tanto quiero compartir con mis amigos lectores. Se trata de un estudio realizado por investigadores del Centro Vasco de Investigación sobre el ‘Cambio Climático’, publicado la semana anterior en la revista Nature, según lo escrito por la científica Noelia Zafra. (Cfr. https://cadenaser.com/nacional/2023/05/31/una-investigación-internacional-revela-que-ya-se han-sobrepasado-siete-de-los-nueve-umbrales-que-permiten-la-vida-en-la-tierra-cadena-ser/):

El informe no puede ser más preocupante, ya que el Planeta en su conjunto ha sobrepasado siete de los nueve umbrales que permiten la vida en la tierra. Suena escalofriante, no es cierto (¡!). Se nos advierte, como lo he repetido en mis ensayos sobre la temática, que los daños no son idénticos en todas partes, sino que se mantienen los efectos desiguales de acuerdo con la exposición de las diferentes regiones a los efectos de la contaminación, la falta de agua y el clima, para citar tres de los siete baremos que han provocado que hayamos cruzado ‘las líneas rojas’ acerca de la habitabilidad de nuestra ‘Casa Común’. El documento también señala que desde el 2009, un grupo de científicos identificó los nueve indicadores que no deben traspasarse, para que la Tierra no se transforme en un lugar ‘hostil’ para la vida. Como puede verse ya hemos traspasado en muchas partes siete de esos nueve indicadores.

Por el lado de la contaminación, se señala el uso abusivo de elementos químicos como el fósforo y el nitrógeno que están presentes en muchos de los pesticidas utilizados en la agricultura. Un informe reciente señala problemas serios en el registro de plaguicidas en el caso de Costa Rica. (Cfr. gustavo.ortega@nación.com. Aparecido en el diario esta misma semana el 6.06.2023). La página consultada señala que pese a haberse emitido en los últimos 17 años diez decretos ejecutivos encaminados a regular y agilizar el registro de agroquímicos, persisten una extensa lista de componentes pendientes de inscripción y cuestionamientos por la amenaza del rezago de casi dos décadas, lo que pone en verdadero riesgo la salud humana, la de los animales y el propio medio ambiente. Además, cita el profesional que, de acuerdo con lo dicho por Ileana Sánchez, presidente de la Asociación de Profesionales en Registro, las normativas se elaboran sin tomar en cuenta la opinión de los especialistas. Imaginémonos semejante desaguisado. La señora Sánchez habría afirmado que la eficacia del registro de agroquímicos en Costa Rica está puesta a prueba, después de más de 20 años de estudios plagados de fallas. En el 2004, la Contraloría General de la República, advirtió que el mismo Servicio Fitosanitario del Estado, incumplía la normativa tanto nacional como internacional en materia de registro de plaguicidas. (Cfr. Ibidem. Pag.21). El propio jerarca del Ministerio de Agricultura del actual gobierno, Víctor Carvajal afirmó que en este país tenemos leyes aprobadas, sin que contemos con la mínima información acerca de si los químicos que están aplicando los productores pasaron por pruebas de impacto ambiental, puesto que no pasaron por el suministro de información indispensable. Por último, en un estudio del PNUD (Naciones Unidas), realizado por el Ing. Agrónomo Elidier Vargas en el 2021, se afirman transgresiones sorprendentes, como que, a esa fecha se contabilizaron 1.884 plaguicidas cuyos registros ya habrían vencido y algunos tenían hasta 37 años de tener sus registros vencidos, a otros ni siquiera se les había asignado una fecha de vencimiento. Por añadidura, otros 16 agroquímicos empleados en el país arrojaban un 44% de factores de alerta alta y 50% de alerta moderada para la salud humana, el medio ambiente y especies animales.

Vuelvo al informe original del Centro Vasco de Investigación, para contarles que la vida natural de la biosfera es otro de los límites sobrepasados, debido a que la gestión de los ecosistemas falla en el mantenimiento y conservación de su integridad funcional, puesto que, cada vez poseen menos área merced a modificaciones y desbarajustes introducidos por el ser humano. Por otro lado, el límite del clima, al cual nos hemos referido tantas veces, estamos a punto de transgredirlo, puesto que estamos 1,2 grados por encima de la era preindustrial y el límite señalado por los científicos ecologistas es de 1,5 para el 2050. Sin tan solo haber llegado a este punto, estamos experimentando eventos extremos catastróficos de sequía que llevan rumbo a la desertificación y, por otra parte, el planeta debe soportar lluvias torrenciales desbordantes, huracanes, ciclones y otros fenómenos semejantes que nos azotan. En cuanto al agua, en grandes extensiones de territorios densamente poblados, nos encontramos ya en situaciones críticas de escasez tanto en el agua superficial como en la subterránea.

Los mínimos vitales de nuestra batalla por el rescate de la Madre Tierra.

1. Estratégicamente, la humanidad ha de prepararse para librar una persistente lucha por modificar la crisis de dimensión civilizatoria; habida cuenta de que en el mundo predomina un modelo consumista que hemos instalado, sobre todo a partir de la época industrialista, el cual se ha convertido en un modo productivo cada vez más depredador de los ecosistemas y de todos los entornos marítimos y terrestres, como lo comprobamos diariamente. Fazenda Sossego, lo ha expresado magistralmente en la introducción al libro citado del teólogo Leonardo Boff, como lo dejamos expresado en la primera cita y repetimos ahora: “todos somos rehenes de un modelo de comportamiento que nos sitúa en contra del sentido del universo, por encima de las cosas en vez de estar con ellas dentro de la gran comunidad cósmica.” Por eso afirmo que se trata de una lucha universal que nos comprende e implica a todos.

2. En vista de que los pobres de la Tierra son los seres más amenazados, por estar dotados de menos recursos económicos, culturales y sociales, la lucha debe orientarse con prioridad a establecer la justicia social con equidad y como ha dicho Noelia Zafra, este es un eje transversal que debe cruzar todo nuestro comportamiento. Debemos convertirla por lo tanto en una ética universal. Profiere la investigación de los vascos una frase que me ha encantado: “Cuando se superan determinados umbrales, no todas las personas, países o grupos sociales se van a ver afectados de la misma manera.” En efecto, tales desigualdades ya se observan en determinados epifenómenos del cambio climático. Por eso Noelia Zafra remata con una idea que me gusta más todavía, arguyendo que: “…hay que mantener un mínimo, no solamente para que sobreviva el planeta, sino para que todos los seres humanos que habitamos en él podamos vivir.” Para que ello sea posible -agrega Noelia parafraseándola- hay que mantener el umbral de superficie del planeta en estado virgen entre un 50 y 60%; hoy nos encontramos muy por debajo de estos umbrales. (Cfr. Zafra, Noelia. Op.cit.)

3. Debemos luchar con denuedo por cambiar la mentalidad de todos, en el sentido de que entendamos que la Tierra es suficiente para todos los seres humanos y demás animales que conviven con nosotros; pero como dijo Gandhi, no es suficiente y nunca lo será ya más para la voracidad de los consumidores.

4. Es menester asimismo que aprendamos a convivir con la idea del primer formulador de los estudios ecológicos, según lo dijo Boff, que fue Ernst Haeckel (1834-1919): “…la ecología es el estudio de la inter retro-relación de todos los sistemas vivos y no vivos entre sí y con su medio ambiente.” [añade L. Boff], “No se trata de estudiar el medio ambiente o los seres bióticos (vivos) o abióticos (inertes) en sí mismos. La singularidad del discurso ecológico no está en el estudio de uno u otro polo, tomados por sí mismos, sino en la interacción y en la interrelación mutua. Eso es lo que forma el medio ambiente…” (Cfr. O.cit. Boff, Leonardo).

5. En consonancia con lo anterior Boff propone recuperar una visión global de la naturaleza y, dentro de ella, de las especies y sus representantes individuales. Así, afirma el teólogo, la ecología es un saber acerca de las relaciones, interconexiones, interdependencias e intercambios de todo con todo, en todos los puntos y en todos los momentos. La ecología atañe por lo tanto antes que, a objetos de conocimiento, a las relaciones entre los objetos de conocimiento. Me gusta decir junto a Leonardo Boff y Frei Beto que, se trata de un ‘saber de saberes’ relacionados entre sí. Las ciencias particulares no quedan suprimidas, la física, la matemática, la geología, la oceanografía, la biología, la termodinámica, la biogenética, la zoología, la antropología, la astronáutica, y la cosmología etc. Sino que deben seguir construyéndose, pero atentas unas respecto de las otras, por la interdependencia que los objetos de estudio de cada una de ellas guardan entre sí. El ‘saber de saberes’, no es una suma de ellos, sino que constituye una totalidad orgánica y abierta a la realidad y al saber acerca de esa totalidad, constituyéndose en una cualidad nueva. Todo esto de extraordinaria lucidez a mi parecer se encuentra en la visión de Leonardo Boff, y hoy yo lo he querido retrotraer para presentarlo ante ustedes. Porque sí constituye una visión que, por haberla hecho muy mía, deseo compartirla y someterla constantemente a la consideración de mis contertulios por doquier. Por fin Boff llega a la convicción, junto al mayor de los ecólogos brasileños, según su criterio, se trata de José A. Lutzenberger, que la ecología, “…es la ciencia de la sinfonía de la vida, es la ciencia de la supervivencia.” (Cfr. Concepto de ecología: Revista Vozes -enero febrero de 1979- pag.64). Por esa sola razón, remata L. Boff, la ecología se ha transformado en una crítica radical del modelo de civilización que hemos construido y seguimos construyendo…altamente consumidor de energía y desestructurador de todos los ecosistemas.

6. La última propuesta que deseo formular hoy es la de que, en esta urgente batalla, cada ser humano tiene un importante papel que jugar. Un papel consciente, a diferencia del modelo destructor que está instalado, en el que una minoría mundial es poseedora del dominio político y de los recursos del planeta. Esta minoría es la que mueve todo y a todos seres vivos y materia inerte, como si fuesen fichas, como si se tratasen todos de objetos inertes, puesto que los pobres, los trabajadores en todo el mundo, las minorías sojuzgadas, las mujeres vilipendiadas, en el mejor de los casos han adquirido conciencia de su situación, sin haber podido desmontar el modelo civilizatorio que nos oprime y propende a la destrucción de la vida.

De ahí que cada uno tenga asignado y autoasignado un papel en la medida de su consciencia, hasta llegar a formar parte de un inmenso movimiento regenerador del planeta. Cada uno es responsable de su huella ecológica, y se las debe ver con ella; del mismo modo que las grandes corporaciones, que son la punta de lanza de este modelo civilizatorio destructor de la naturaleza, de los ecosistemas y de la vida que debe ser reemplazado, les compete asumir la responsabilidad por seguir devastando al planeta con su producción de hidrocarburos, o combustibles fósiles, los cuales son los grandes propulsores de la contaminación ambiental y de la destrucción de los ecosistemas, igual que de la explotación de las clases trabajadoras.

El tiempo apremia, cada persona tiene un papel y en ello nos va la vida; es urgente contribuir a echar a andar esa rica energía creadora, ética y moralizadora de la consciencia y de la vida, antes que nos consuman las fuerzas destructoras. La esperanza está inextricablemente ligada a ello. La esperanza no es por lo tanto una quimera, es la confianza en el potencial creador de la especie humana cobrando consciencia de sí misma y de su entorno.

Día Mundial de la Bicicleta

José Luis Pacheco Murillo

El Día Mundial de la Bicicleta se celebra cada 3 de junio, con la finalidad de visibilizar la importancia de un medio de transporte ecológico y saludable. Su uso contribuye a paliar la crisis del mundo actual, debido a la contaminación y al cambio climático que está experimentando el planeta.

Esta efeméride se creó gracias a un decreto de la Organización de las Naciones Unidas (ONU), proclamado en el año 2018.

Es el vehículo más amigo del ambiente, más amigable con la salud y más solidario con sus bolsillos o billeteras.

Hemos venido escuchando y viendo lo que está sucediendo en otros países que se han decidido a cambiar y a romper paradigmas y cambiar los modos y los vehículos de transporte y la bicicleta ha venido a sustituir en ambos casos a lo tradicional.

La bicicleta se puede transformar en un excelente medio para la práctica del deporte, ya que su impacto sobre el medio ambiente es 100% natural, a diferencia del que producen otros vehículos como los carros, las motocicletas y los autobuses. En pocas palabras, es un medio totalmente sostenible para los seres humanos.

Debemos de hacer lo posible en nuestros países por hacer de la bicicleta el vehículo de transporte más importante. Desde luego que eso implica realizar esfuerzos en infraestructuras, ciclovías, además de una profunda educación para que entendamos que no tenemos que usar un carro o una motocicleta para trasladarnos a poca distancia. También un cambio de cultura que permita que dejemos nuestras bicicletas parques as en un lugar y tener la certeza de que al volver ahí estarán. Eso es cultura y respeto a la propiedad de otros, es decir, si no es mío no lo toco.

Dios quiera que podamos llegar a usar la bicicleta como el medio más común para trasladarnos y que quienes estén en puestos de poder tengan la voluntad política para reformar la infraestructura actual.