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Etiqueta: CCSS

Declaración a la comunidad nacional sobre la solución a la deuda interna

El Movimiento de Ciudadanía que Construye Territorios Seguros, de manera responsable, como corresponde a la persona ciudadana que constitucionalmente debe asumirse como El Soberano, dio a conocer públicamente su posición sobre el tema de la deuda interna, desde el 2019, propuesta que fundamentamos debidamente en su momento, pero que, al mejor estilo de “lo políticamente correcto” del hacer nacional de distintos grupos y autodenominados dirigentes políticos, la discusión se pospuso en aras de esperar los resultados del paquete tributario aprobado en 2018, cuando nuestro Movimiento logró que se hiciera pública la lista de los Grandes Contribuyentes que no tributaron desde el 2008 y el desenlace de las elecciones que se avecinaban en febrero de 2022, donde muchos de ellos se veían protagonistas de primera línea.

Hoy el presidente Chaves ha presentado ante el Congreso su propuesta de vender a manos privadas el BCR y una parte del capital accionario del INS, lo que ha desatado -más por cálculo electoral, que de interés estratégico nacional- una polémica desde algunos “grupos y movimientos sociales” , como si la sola presentación del proyecto es ya una ley, dejando de lado que son los diputados, los que tomarán la última decisión, pero que curiosamente, no se les menciona como responsables de la situación, más bien, solidarizándose con  ellos y ellas, como si estuvieran obligados a cumplir, contra su voluntad, el designio presidencial. Esa minimización y personalización del problema es sumamente peligrosa, pues aleja el debate de lo que realmente es.

Hay que reconocer que el tema de la deuda interna es ideológico y político, desde cualquier enfoque que se le quiera abordar, no es simplemente económico, ni mucho menos de ungidos que solo ellos entienden el problema, el tema es nacional y debe discutirse con profundidad, reconociendo que la situación que afrontamos es responsabilidad de todos, unos por su silencio cómplice y otros, especialmente aquellos que desde la representación política y social -donde hay responsables con nombres y apellidos-, por ser autores intelectuales de la situación que vivimos.

 Entonces, el debate ideológico debe establecerse ya, teniendo como punto contundente de partida: “la clase política ya no le teme al pueblo” y “los pobres ya están acostumbrados a pasarla mal” para saber hacia dónde marcha el país y establecer de manera participativa, como lo manda el Art. 9 Constitucional, el país y la República Participativa que debemos construir en las actuales condiciones históricas y de crisis internacional, puesto que lo que nació en las administraciones ungidas desde 1982 por el Fondo Monetario Internacional, fue transformar nuestras más preciadas instituciones y posesiones, en una mercancía del sistema financiero y en una propiedad de alguno de ellos o ellas (porque en eso no existen problemas de género), profundizando la desigualdad existente y consolidando los niveles de violencia a los que poco a poco nos han ido acostumbrando.

También debe entenderse que nuestra banca nacionalizada, en procura del desarrollo nacional, dejó de serlo hace ya mucho tiempo, específicamente desde los periodos administrativos de Monge y Arias, quienes, atendiendo fielmente los mandatos del FMI, en una acción de venganza contra la Administración Carazo y con el aplauso de dirigentes sindicales, comunales, universitarios, del momento, propiciaron desde el INCAE y con el apoyo de la UCCAEP, la separación del Banco Central y la banca en la organización del desarrollo, para pasarlo al naciente sector financiero, para lo cual se establecieron leyes específicas, pasándolo a manos privadas a través del CONASSIF, órgano del que nadie quiere o se atreve a hablar, ni mucho menos señalar a sus integrantes y la responsabilidad directa en la construcción de la desigualdad nacional y disputar el liderazgo de Costa Rica en ese campo a nivel mundial, la facilitación para el blanqueo de capitales provenientes del narcotráfico o peor aún, haciendo de la moneda que es un factor de intercambio en el capitalismo para la construcción de riqueza, establecer ahora, que su posesión y su acumulación es ahora la riqueza, haciendo del sector financiero, el sector privilegiado.

De esa forma, es que nuestra banca sigue siendo “nacional” porque el capital accionario pertenece a los costarricenses, pero está sujeta y determinada por los estándares de la banca comercial internacional, desde la aplicación de las normas determinadas por el FMI, donde fuimos entregados a los intereses transnacionales financieros y donde perdimos nuestra soberanía.

La ausencia de transparencia, rendición de cuentas y evaluación de resultados, consignados en nuestra Carta Magna en el Art. 11, crea una distancia entre la población y los funcionarios públicos, aunado al sentimiento de que éstos se asumen dueños de la institución, su ley y sus reglamentos, lo que ha fortalecido la corrupción y la impunidad, de la que todos nos hemos enterado.

Nuestro Movimiento está consciente de que en nuestro país existe una gran cantidad de personas decentes, responsables, llenas de sentido de patria, que buscan sacar adelante nuestro país, en ella se encuentran personas ciudadanas, empresarios grandes, pequeños y medianos: funcionarios públicos, académicos, profesionales y especialmente mujeres y jóvenes, con quienes podemos contar, pues la esperanza en ellos no muere.

De esta forma, es necesario incorporar en la defensa de estas instituciones, las acciones correctivas aquí señaladas, pues de lo contrario las acciones mismas serán débiles en el horizonte de lo que el país debe ser y la institucionalidad que se requiere para lograrlo.

Estamos en una situación que hemos pospuesto, muy a lo tico, pero también es el momento, al igual que en 1821 con el Pacto de Concordia y aprendiendo de ello, establecer un Nuevo Pacto Social, donde desde los más profundos disensos, establezcamos el consenso necesario para tener a tiempo la Costa Rica que desafiará el futuro.

Es un momento de inflexión nacional, con una situación internacional de profundo contenido de cambio, no podemos torpemente verlo y desestimarlo, ya ese error lo cometimos profundamente en los últimos 30 años del siglo pasado. Debemos ser profundamente críticos de nuestros errores y asumir con la responsabilidad que lo hicieran los defensores de nuestra independencia y fundadores de nuestra república, raíces que obstinadamente un malinchismo ha querido destrozar.

Propuesta ciudadana para manejar la deuda interna disponiendo de bienes nacionales

La propuesta que hemos alentado, consiste en:

  • La deuda es interna, es decir, nos debemos a nosotros mismos, es entre familia.
  • El estado ha incumplido con su tarea, desde luego los responsables tienen nombres y apellidos, debemos saber quiénes son, pues pueden ser los mismos que tendrán ahora en sus manos la decisión estratégica, lo cual es un alto riesgo.
  • Dar en dación de pago, no es lo mismo que vender, es un principio comercial simple, pues es un acuerdo.
  • De esta forma, por acuerdo nacional, como parte de un Nuevo Pacto Social, se otorga en dación de pago el Banco de Costa Rica y el Instituto Nacional de Seguros a la Caja Costarricense del Seguro Social, por la deuda pendiente con la institución.
  • En estos momentos debe transparentarse el proceso, debemos ser vigilantes ante el intento de venta.
  • Ya “los expertos” se frotan las manos por la cuantiosa suma de dinero que se ganarán por validar lo que valen nuestras instituciones en disputa, afectando el principio de abonar a la deuda, pues de camino se enriquecen algunos de manera inmoral, pero legal, lo que prostituye el proceso y el principio que debemos atender.
  • Sabemos que la CCSS no tiene la experiencia para manejar bancos ni seguros, pero como el interés final es salvaguardar nuestros activos, debemos replantearnos en las actuales condiciones el papel de los mismos, dándole fortaleza estratégica al sistema de salud, estableciendo el acompañamiento necesario, como lo hace cualquier institución o empresa moderna.
  • La ciudadanía responsable debe sin discusión, dar un paso al frente y hacerse garante del presente proceso, consciente de que su ausencia irresponsable, permite el espacio a la corrupción y la impunidad.
  • Deberá establecerse un proceso de rendición de cuentas (que no es un informe de labores) y evaluación de resultados organizado desde la ciudadanía tal cual lo establece el Art. 11 Constitucional, para transparentar las acciones institucionales, pues al fin y al cabo los dueños del sistema de salud son las personas ciudadanas que son las que lo mantienen con sus cuotas, por lo tanto, son los accionistas de la empresa de salud más importante de Costa Rica.
  • Deberán revisarse con profundidad los procedimientos de compra de proveedores de la CCSS así como su manejo financiero, para no arrastrar a las entidades nuevas que se le suman (BCR – INS) a subsidiar los malos procedimientos que hasta ahora están en función.
  • Así como el sistema de salud busca democratizar el acceso a la salud, deberá hacerlo en democratizar la economía, abriendo el acceso de las pymes locales, especialmente las mujeres y jóvenes vulnerables, para transformarse en proveedores del sistema, en los diferentes órdenes de aprovisionamiento, para lo cual se revisará la normativa existente para facilitarlo.

Quedamos a sus órdenes sabiendo de su compromiso con nuestro país y convencidos de su espíritu de colaboración, nos manifestamos a la orden para aclarar cualquier duda, en nuestro teléfono 8769 8714 o al correo comusepo@gmail.com

De ustedes atentamente,

Carlos Campos Rojas
Coordinador Nacional

No hay ninguna “alza salarial”: lo que hay es una deuda salarial y las deudas se pagan

Albino Vargas Barrantes, secretario del ANEP, nos habla en este video intentando destapar la verdad de la realidad nacional que se está viviendo en el país con el tema de la deuda salarial en la CCSS y en el Gobierno Central y otras instituciones.

Nos habla que el término alza salarial es incorrecto, porque no se está subiendo sueldos, lo que hay es una deuda acumulada con la clase trabajadora del sector público y que debe ser pagada. Esta deuda se está acumulando desde el 2019, que fue la última vez que se negociaron salarios en el sector público.

Don Albino hace un llamado incentivando a que en todas las seccionales de ANEP, ministerios e instituciones nos pongamos en guardia contra la manipulación mediática y el periodismo de odio. El gobierno debe pagar sus deudas, al igual que paga su deuda pública, también debe pagar a los trabajadores.

Cápsula informativa del Sindicato de funcionarios Públicos de Costa Rica (SIFUPCR)

Juan C. Durán Castro señala que el sector no profesional de la Caja Costarricense del Seguro Social tuvo una pérdida del 12% del 2017 al 2022 en su salario. Mientras el sector profesional ha tenido una pérdida en ese mismo periodo de un 37%. 

Exclama que la regla fiscal debe aplicarse a los ministros y no solo a los trabajadores de la CCSS. Además, hace un llamado a la clase trabajadora a que esté alerta porque hay que defender la autonomía constitucional de la CCSS y nuestro derecho a un salario justo.

Salvar a la CCSS

José Luis Pacheco Murillo

La Caja Costarricense de Seguro Social fue una maravillosa decisión de personas que pensaron en el futuro de la salud de todo el pueblo. La decisión de constituirla evidenció un interés social y de ayuda para todos, independientemente de su condición económica. El sistema de fortalecimiento también fue un acierto. Tres partes aportando para bien de todos: patronos, empleados y gobierno.

Pese a ser tan excelente institución, desde el principio tuvo opositores. Los patronos no estuvieron muy contentos con tener que aportar e incluso algunos trabajadores, desinformados, también vieron con molestia que les rebajaran un pequeño porcentaje de su salario para aportarlo a la CCSS.

Pero a partir de la década de los 80s se desató una cacería para debilitar y casi que acabar con la obra social más importante.

Han pasado muchas cosas que ha tenido que soportar la institución gracias a su fortaleza, y las peores han venido de adentro. El golpe tan duro que se le dio a la institución en el gobierno de Arias Sánchez y con Doryan en la presidencia ejecutiva ha constituido el más duro de todos esos golpes y hay que decirlo, aún no se recupera de tan grosera agresión. Ampliar la planilla en 10 mil funcionarios en solo momento fue una decisión lamentable que aún hoy sigue causando daño. La CCSS se debilitó y a Dorian lo premiaron con trasladarlo al ICE para ver cuánto daño hacía en esa otra simbólica institución.

Hasta el hijo del fundador de tan prestigiosa institución, Calderón Fournier y estando adentro trató de debilitarla, con decisiones y especialmente con omisiones de su Junta Directiva.

El aporte estatal se ha venido disminuyendo, las pésimas decisiones en cuanto a gastos y la incontable cantidad de actos de corrupción, muchos de ellos cometidos durante la pandemia, tienen hoy a nuestra institución insignia en el aporte social a punto de sucumbir.

Aún estamos a tiempo de salvarla y robustecerla, pero esa decisión debe venir especialmente del Gobierno y de su Junta Directiva, de los funcionarios que laboran en ella y del pueblo en general. Vale la pena luchar por una institución que presta tanto bien a nuestra sociedad.

Dios quiera que se tome esa decisión de salvar a la CCSS y que todos la apoyemos.

La Caja no está quebrada

Las cifras financieras de la CCSS, contradicen rotundamente las afirmaciones del Presidente. ¡La Caja no está quebrada!

Los estados financieros de la Caja demuestran su alto grado de solvencia y solidez económica.

Entre 2018 y 2021, los ingresos superaron los gastos del Seguro de Enfermedad y Maternidad (SEM), generando un considerable superávit. En el 2020, el peor año de la crisis Covid-19, el superávit del SEM fue equivalente al 27% de los gastos, demostrando así la holgura financiera de la Caja aún en tiempos de crisis. Para el presente año 2022, el superávit proyectado llegará a los 1.1 billones de colones, es decir, que los excedentes serían capaces de cubrir un 37% del gasto. Dicho de otra forma, de cumplirse la proyección financiera, con solo el excedente de recursos proyectado para 2022 alcanzaría para financiar el equivalente a 4.5 meses adicionales de operación de todos los servicios de salud que brinda la CCSS a nivel nacional. Estos resultados son muy positivos, en particular si se toma en cuenta que la tasa de cotización al SEM se ha mantenido constante por 34 años en un valor del 15%.

Deuda total del estado.

La deuda del Estado con los seguros de salud y pensiones ha crecido desde el año 2016, pasando de 0.8 billones de colones en 2016 a 2.7 billones en abril 2022.

La deuda del estado perjudica la salud de los costarricenses.

La deuda acumulada del Estado es gigantesca y criminal. Si se pagara, la Caja tendría los recursos para mejorar la oportunidad de servicios. Para entender la magnitud de la deuda, el valor de la deuda acumulada por el Estado con el Seguro de Salud (SEM) en 2022 alcanzaría para construir 14 hospitales iguales al futuro hospital de Cartago.

La deuda del estado con el SEM, a abril 2022 alcanzó los ₡2,161,036 millones de colones (2.1 billones).

Solidez CCSS.

La solidez de la CCSS le permite soñar con tan ambiciosos planes de expansión, a pesar de la gigantesca deuda que le mantiene el Estado, la cual alcanza ya niveles preocupantes y vergonzosos, que pasaron de 1.0 billones de colones en 2015 a 2,7 billones en 2022. Cualquier plan del Gobierno para no asumir el pago de la deuda del Estado con la Caja, como ya lo quiere dar a entender el actual gobierno, atentaría no solo contra la institucionalidad del país, sino que sería también un grave atropello a la salud y el bienestar del pueblo costarricense.

Reserva financiera del seguro de salud.

Las reservas financieras son un indicador del nivel de solvencia financiera de cualquier entidad. La reserva financiera del Seguro de Enfermedad y Maternidad, SEM, alcanzó los 1.5 billones de colones en abril 2022. Está destinada a financiar un ambicioso proyecto de expansión de servicios hasta el año 2031, que incluye 227 proyectos para construir 1.25 millones de metros cuadrados de infraestructura entre 2022 y 2031. Adicionalmente, hacer la apertura de 340 nuevos EBAIS, la reclasificación de 107 centros de salud y el fortalecimiento de los servicios de geriatría a escala nacional, más una contratación proyectada de 12,522 plazas de personal en salud para atender la demanda creciente de servicios entre el 2022 y el 2031.

Las cifras anteriores son más que suficientes para callarle la boca a cualquier persona que afirme que la Caja está en quiebra y desenmascaran las malas intenciones de quienes quieren dañar gratuitamente la reputación de la Caja.

Elaborado por:

Juan Carlos Durán Castro, Dirigente del SIFUPCR. 

Diseño: Alex O. Méndez M. 

Prensa e Información, SIFUPCR.

Referencias:

  • Deuda del Estado con la CCSS_ 2015-2021 V19092022. 
  • Informe de inversiones seguro de salud julio 2022.
  • Reservas financieras SEM 2022-09-19 at 21.03.21. 
  • Reservas financieras SEM gráfico 2022-09-19 at 21.07.17. 
  • Seguro de Salud-Ingresos-Gastos totales 2018-2022 con ajustes. 
  • Transferencias de obligaciones del Estado 2022-09-19 at 22.51.49

 

Compartido con SURCOS por el Sindicato de Funcionarios Públicos y Privados de Costa Rica.

Alerta para sindicatos del Bloque Salud-CCSS

El Bloque Sindical de la Caja Costarricense del Seguro Social, hace un llamado a todas las personas trabajadoras de la institución para estar alerta con respecto a la sesión extraordinaria que convocó la nueva Presidente Ejecutiva de la institución, Marta Eugenia Esquivel Rodríguez.

Esto, con la intención de realizar una revisión y eventual revocatoria del acuerdo firmado con la Junta Directiva para que se hiciera efectivo el pago del ajuste salarial que se le debe a todas las personas trabajadoras de la institución desde el año 2020.

Se recomienda estar alerta a las informaciones de este Bloque.

Llaman a defender la autonomía de la CCSS

Movimiento ciudadano diverso de todo el país llama a defender la Autonomía de la CCSS mediante carta pública

Luego de la destitución de quien fue reciente del expresidente ejecutivo de la CCSS, el Sr. Álvaro Ramos, más de 43 organizaciones e instituciones representadas entre el funcionariado de la CCSS, MEP, UCR, UNA, UNED, ICE así como organizaciones sociales y privadas en ámbitos como; derechos humanos, comunicación, defensa del ambiente, campesinado, asociaciones de desarrollo, juntas de salud, organizaciones sindicales, organizaciones de mujeres, organizaciones estudiantiles y partidos políticos han difundido carta pública en defensa de la autonomía de la CCSS.

¿La Caja en quiebra… o buscan quebrar la confianza ciudadana en la Caja? es la carta pública que representa al movimiento y busca en síntesis posicionar el valor de la institución para beneficio de toda la ciudadanía, así como contrarrestar las falsas declaraciones sobre la sostenibilidad financiera de la CCSS, logrado suscribir al día 27 de septiembre, más de 484 personas, ciudadanas independientes y organizaciones de todo el país.

Las y los firmantes, son un movimiento de personas ciudadanas diversas, defensoras del modelo social, universal y solidario de la Caja Costarricense del Seguro Social, quienes han reunido más de 484 suscripciones de personas ciudadanas independientes en todo el país.

Elementos más destacados en la carta ante la opinión pública son los siguientes:

  1. Desafortunadas declaraciones y acciones del Sr. presidente Rodrigo Chaves que se da en un contexto de lucha sindical por la aplicación del reajuste salarial en institciones públicas que no significa para las personas funionarias de la CCSS ni 250 colones diarios, así como el desacato a la aprobación de este reajuste salarial via decreto en el 2019, lo que ha generado gran desprestigio a la institucionalidad y la autonomía de la Caja, mediante acciones como la destitución de la Junta Directiva de la CCSS, el Sr. Álvaro Ramos.
  2. La Caja no está quebrada, aunque sus desafíos actuales y futuros son enormes, como ocurre en cualquier otro país del mundo.

Algunos son de resorte directo de la institución y otros no lo son. Entre los primeros están sus ingentes inversiones y la eficiencia y calidad del gasto, las acuciantes listas de espera, la escasez de especialistas en áreas críticas. Y entre los segundos, la subdeclaración salarial, el elevado empleo informal, el no pago de la deuda del Estado, la búsqueda de fuentes alternativas de financiamiento y los nuevos retos ante el envejecimiento poblacional, entre otros.

  • La Caja no está quebrada. Una muestra contundente de la solidez financiera y de la extraordinaria fortaleza humana de sus funcionarios la vimos en su capacidad de respuesta a la reciente crisis de la Covid-19, dando un ejemplo mundial de robustez económica e institucional. En 2020, el peor año de la pandemia, y pese al enorme desafío sanitario afrontado por el país, el excedente del Seguro de Enfermedad y Maternidad (SEM) alcanzó los 772.7 miles de millones de colones. El excedente subió a 1 billón de colones en 2021, y se proyecta que a final de 2022 rondará los 1,1 billones de colones. A abril 2022, las reservas financieras del SEM alcanzaron 1.5 billones de colones.
  • Holgura financiera de la CCSS le permitió no solo salir bien librada de la crisis del Covid-19, incluso recibiendo menos ingresos, sino también cuidar los recursos que permitirán implementar un ambicioso portafolio de inversiones que incluye 227 proyectos para construir 1.25 millones de metros cuadrados de infraestructura entre 2022 y 2031. Lo anterior sin contar la apertura de 340 nuevos EBAIS, la reclasificación de 107 centros de salud y el fortalecimiento de los servicios de geriatría a escala nacional; proyectos que se acompañan con una contratación proyectada de 12,522 plazas de personal en salud para atender la demanda creciente de servicios entre el 2022 y el 2031.
  • Pese a la gigantesca deuda que el Estado costarricense le mantiene a la CCSS, la cual alcanza niveles alarmantes y vergonzosos, pues pasó de 1,064 billones de colones en 2015 a 2,669 billones en 2022. Aun así, la CCSS no está quebrada, por lo que la afirmación del señor presidente pone necesariamente en alerta al escudarse en el manual de la privatización, buscando desprestigiar la Institución más querida por el pueblo costarricense y generar desconfianza entre los actuales y futuros cotizantes.

Ante lo anterior que se describe a detalle en la carta pública, el Movimiento hace un llamado a defender la institucionalidad y la autonomía de la Caja, así como aportar soluciones para lograr su fortalecimiento y enfrentar los desafíos de la institución benemérita.

Vocerías

Augusto Guerrero: Federación de Estudiantes Universitarios Universidad Nacional (FEUNA).
Vivian Rodríguez: Dirigente sindical sector educación SEC.
Lenin Hernández: Secretario General Sindicato Nacional de Enfermería y AFINES (SINAE AFINES).
Henry Mora: Economista, investigador y académico UNA.
Juliana Martínez: Catedrática UCR, Premio Forster Fundación Humboldt.
Oscar Cruz Morales: Sindicato de Funcionarios Públicos de Costa Rica (SIFUPCR)

Enlace para firmar la carta.

Documento con las firmas actuales para descargar y compartir:

Mensaje del Dr. Álvaro Ramos-Chaves al pueblo costarricense

El señor Álvaro Ramos Chaves, expresidente de la Caja Costarricense de Seguro Social (CCSS), en un vídeo publicado, agradeció la oportunidad que le brindó el país al permitirle ejercer como jerarca de una de las instituciones más importantes de Costa Rica como lo es la CCSS, asimismo, externó su agradecimiento a los trabajadores de la salud por haber dado su mayor esfuerzo por controlar el avance del COVID-19 durante la pandemia y a los empresarios y trabajadores independientes que, en los momentos de mayor dificultad económica por la crisis sanitaria, continuaron pagando sus cotizaciones ante la Caja.

De igual forma, el expresidente de la CCSS, reiteró que se pretendió aliviar la situación económica de los trabajadores de la Caja otorgándoles un aumento salarial por el que habían estado esperando por más dos años, pero también se estaba aplicando reformas orientadas a reducir la base mínima contributiva para aliviar el esfuerzo del sector empresarial por sostener la pandemia.

Finalmente, comentó que se estaban llevando a cabo esfuerzos por dar sostenibilidad a la CCSS a largo plazo y cumplir la promesa de universalidad, tanto en salud como en pensión, y con voluntad política, esta institución puede sobrellevar con todos los retos que se le presenten. Dijo que la CCSS no está quebrada.

Le invitamos a escuchar su mensaje:

Compartido con SURCOS por Juan Carlos Durán Castro.

El suicidio de los sindicatos

Hay que atacar el sistema en su raíz, no ser cómplices y defender privilegios que desvían la atención de los verdaderos problemas del país.

Miguel Sobrado. 19 agosto, 2019*

Afectar la salud y provocar el malestar de los asegurados, en un momento cuando se responsabiliza a los privilegios pagados a los empleados públicos del déficit fiscal del Gobierno Central y el mal funcionamiento del Estado, no parece cuerdo ni inteligente.

Por ese camino terminarán por destrozar las organizaciones sindicales y su capacidad de incidir en los cambios que necesita el país para superar el patrimonialismo del sistema o capitalismo de cuates, donde se incuba la corrupción y contagia a casi todo el aparato público.

El movimiento sindical, tanto del sector privado como público, debe poner su atención en garantizar servicios públicos eficientes y de buena calidad. Que nos sirvan a todos para el mejoramiento de la sociedad y la continuidad y estabilidad institucionales.

Hay que encontrar las causas en el sistema, que, muy acertadamente, Denise Dresser llama “capitalismo de cuates”, como he explicado en artículos anteriores.

Hay que preguntarse por qué las medicinas son más caras en nuestro país que en gran parte del mundo; por qué las carreteras son más caras, su construcción más lenta y pagamos más por el cemento, el transporte público y los créditos.

Hay que atacar el sistema en su raíz, no ser cómplices y defender privilegios que desvían la atención de las verdaderas causas sistémicas.

El sindicalismo, si quiere permanecer como lo que debe ser, un movimiento social que defiende sus legítimos intereses y propicia el cambio, pero no procura privilegios, debe recuperar las banderas solidarias de la salud y el buen servicio público y jamás recurrir al maltrato de los enfermos, que son trabajadores igual que ellos.

Actuar de manera irresponsable, como lo hicieron durante la huelga de la Caja Costarricense de Seguro Social, es ignorar el clima de repudio que generan sus acciones y su debilidad estratégica en la actual coyuntura, en la cual los medios han logrado ubicarlos como responsables de la crisis nacional. Es poner la cabeza bajo la guillotina en el momento en que el verdugo está listo para dejarla caer.

miguel.sobrado@gmail.com

El autor es sociólogo.

* El autor comparte con SURCOS esta reflexión dada su actualidad.

Alianza Sindical de Salud logra una exitosa medida de presión

Ya tenemos respuestas del gerente general de la CCSS respecto a su función de ejecutar el acuerdo de aplicar el reajuste salarial a todas y todos los trabajadores de la institución. Un acuerdo que es legal y ya se tramita.

Gracias a la reunión sostenida este 22 de septiembre del 2022 entre nuestra Alianza Sindical y autoridades de la CCSS, se acordó dar prioridad a la aplicación del reajuste salarial para luego, abordar el pago retroactivo.

Debido a nuestro accionar, quedó en evidencia que, sin el quórum respectivo de la Junta Directiva de la CCSS, no se podrá determinar la técnica financiera para el pago que el Gobierno nombre al representante correspondiente.

Para velar por el cumplimiento de los acuerdos en la reunión entre nuestra Alianza Sindical y las autoridades de la CCSS, tendremos otro encuentro el próximo 7 de octubre del 2022.

¡La CCSS no está quebrada! Tiene 1.600 billones en reserva y es sólida.

Trabajadores de la CCSS, no hagan caso a los intentos de desmovilización que realizan algunas personas sin interés de defender sus derechos.

¡Estén atentos a nuestro llamado!

 

Compartido con SURCOS por la Alianza Sindical de Salud.