El pasado 18 de julio el presidente de Colombia, Gustavo Petro, se hizo presente para la clausura de la Cumbre de los Pueblos. Su discurso estuvo dirigido a la reflexión sobre la situación de la integración latinoamericana y europea y la diversidad política existente en ambos mundos. Petro expuso que:
“Esta diversidad de proyectos al encontrarse con la Unión Europea entonces realmente lo que encuentra es una especie de soledad, aquí no está pasando lo mismo, aquí lo que está pasando es una derechización real, los movimientos alternativos europeos que antes nosotros mirábamos como faros hace unas décadas, ahora nos miran a nosotros y entonces nos preguntan y cómo hacemos. Indudablemente hay un digamos hay un balbuceo y una atención en el mundo que es importante entender, de eso hablamos ayer, yo soy casi estoy absolutamente convencido de lo que empieza a definir la política en el mundo los conflictos sociales y la posibilidad de una transformación, es la crisis misma del capitalismo, es decir, es el mismo capitalismo que nos está enseñando las rutas, no propiamente nuestra invención, no propiamente nuestra ilusión…”
Compartimos el video para escuchar el discurso de Gustavo Petro:
Es cierto colega Álvaro. El articulista Raúl Ramírez Tovar, que debe ser un abogado colombiano demócrata, tiene razón en su artículo «Lo que la prensa calló de La Haya».
Esos(sic) abogados, de pésimo desempeño jurídico exprimieron durante 30 años tal litigio. Sus honorarios fueron escandalosos en dólares. Cómodamente convinieron con equipos jurídicos de abogados internacionales jugosos contratos de servicios que sangraron al erario Nacional. Alegaban que requerían de la «asistencia técnica», internacional. Quedaron requetemal en el Foro Jurídico Académico Internacional. No lo sostengo yo solo.
Personalmente gasté «horas nalgas» «dándole seguimiento” a las Audiencias de Trámite y de Alegatos durante 20 años a ese litigio Nicaragua – Colombia. Lo conozco como el que más. No existen textos a consultar de los aportes técnicos de los tales calificados abogados internacionales. Y de los aportes, como doctrina jurídica internacional, de esos litigantes, no alcanzan para sustentar un curso universitario para estudiantes en cátedras de Derecho Internacional y vernáculo.
Los abogados colombianos de los tres gobiernos proclives a la geopolítica del imperio del año 2000 al año 2022, demostraron que, así como la Nación internamente pierde las demandas en su contra por falta de defensa, también se perdió (o perdieron ellos) la demanda de Nicaragua contra Colombia, que culminó con la sentencia de 2012 en la que luego de la desmembración de Panamá perdimos mar territorial por 75.000 Km2.
Pese a existir una Defensa Jurídica del Estado se multiplican en miles las demandas contra la Nación, convirtiéndose esa Oficina en perseguidora de los litigantes colombianos. Ni uno solo de esos abogados les calificaba, para si buscar Abogados y/o «técnicos» extranjeros muy bien requete pagos.
Eso constituye una bofetada a las escuelas de derecho nacionales. En mis escritos sobre análisis de esa sentencia condenatoria contra Colombia en el año 2012, resalto en el aspecto litigioso que el equipo de abogados nacionales confundió o pensaron que estaban litigando en estrados colombianos y con normativa procedimentales internas.
Al Acto Acusatorio y de Pretensiones nicaragüense, lo calificaron o denominaron «Demanda» y súpito observé que conforme al tecnicismo en derecho internacional que se denomina réplicas a lo pretendido por el Estado reclamante, los abogados criollos lo llamaron «Contestación de la Demanda» de Nicaragua. Es decir, como si estuvieran ante cualquier Juzgado del Circuito de Ocaña… Y peor aún: procedieron a contestar cada uno de los puntos del calificado acto de pretensiones nicaragüense, con el lánguido: «es cierto», «no es cierto», «no nos consta», «que se pruebe». Por favor, en el argot del litigio internacional no existe tal escenario.
Jamás, esa valiosa oportunidad procesal de defensa, además de compleja, era de enorme valor en el manejo, sobre todo de la oralidad. Implicaba algo creativo y fundamental. Por ello insisto en el criterio jurídico, visión sólida y formativa de un jurista. Tamaña ridiculez que dejó mal parado la otrora majestad de los jurisconsultos colombianos.
De igual manera redacté, en artículo anterior, mi experiencia cuando en mi desempeño en escenarios académicos internacionales, verifiqué – hacia finales de 1994 -luego de una visita a la Biblioteca de la Universidad de Managua-, que en el pensum académico de los estudios de Derecho incluían una materia denominada «Litigios fronterizos con la República de Colombia». Ello me alarmó como colombiano y me animé a escribir una carta al Ministerio de Relaciones Exteriores de Colombia exponiendo esa situación y la inminencia de demandas contra Colombia. Resaltaba que era egresado de la Facultad Nacional de Derecho y que mi profesor de Derecho Internacional lo fue el Dr. Diego Uribe Vargas. Pues como corresponde a las peticiones civilizadas de un Pedro Pueblo colombiano en el exterior, mi información no fue acatada.
De tal manera – colega Álvaro – y por su intermedio a todo el cuerpo de abogados y abogadas colombianas, analicemos con beneficio de inventario la última sentencia del Tribunal de La Haya a favor de Colombia. Aportemos desde nuestras organizaciones sociales profesionales pues estamos en mora de contar con un Colegio Único Oficial de Colegiatura de Abogados y Abogadas en Colombia, para contribuir, en el escenario de la diplomacia internacional, en la búsqueda definitiva y de respeto a la auto determinación de los pueblos y que conlleve a la sana armonía y convivencia con el aguerrido y luchador pueblo nicaragüense y en aval a la autonomía e independencia del imperio, de ambos pueblos.
Nicolas Boeglin, Profesor de Derecho Internacional Público, Facultad de Derecho, Universidad de Costa Rica (UCR) / Contacto: nboeglin@gmail.com
Este 13 de julio, la Corte Internacional Justicia (CIJ) dio a conocer su decisión con relación a las pretensiones de Nicaragua frente a Colombia en el Mar Caribe, al solicitar extender sus derechos en su plataforma continental más allá de 200 millas náuticas (véase texto de la sentencia en francés y en inglés).
Se trata de la respuesta del juez internacional a la demanda planteada por Nicaragua en septiembre del 2013 (véase texto completo). Los 10 años que separan ambos textos se deben en gran parte a las excepciones preliminares presentadas por Colombia en el 2014, intentado sustraer de la competencia de la CIJ la discusión sobre el fondo (véase decisión de la CIJ sobre excepciones preliminares de marzo del 2016, rechazando los alegatos sobre incompetencia de Colombia).
El contenido de la sentencia en breve
En la parte dispositiva (párrafo 104) de la sentencia escuchada este 13 de julio del 2023, se lee que la Corte:
«1) Par treize voix contre quatre,
Rejette la demande par laquelle la République du Nicaragua la prie de dire et juger que sa frontière maritime avec la République de Colombie, dans les zones du plateau continental qui, selon la République du Nicaragua, reviennent à chacune au-delà de la frontière fixée par la Cour dans son arrêt du 19 novembre 2012, suit des lignes géodésiques reliant les points 1 à 8 dont les coordonnées figurent au paragraphe 19 ci-dessus ; /…/
2) Par treize voix contre quatre,
Rejette la demande par laquelle la République du Nicaragua la prie de dire et juger que les îles de San Andrés et Providencia ont droit à un plateau continental jusqu’à une ligne constituée d’arcs de 200 milles marins partant des lignes de base à partir desquelles est mesurée la largeur de sa mer territoriale et reliant les points A, C et B dont les coordonnées figurent au paragraphe 19 ci-dessus; /…/
3) Par douze voix contre cinq,
Rejette la demande de la République du Nicaragua portant sur les droits à des espaces maritimes générés par Serranilla et Bajo Nuevo. /…/
…/…
(1) By thirteen votes to four,
Rejects the request made by the Republic of Nicaragua that the Court adjudge and declare that the maritime boundary between the Republic of Nicaragua and the Republic of Colombia in the areas of the continental shelf which, according to the Republic of Nicaragua, appertain to each of them beyond the boundary determined by the Court in its Judgment of 19 November 2012 follows geodetic lines connecting the points 1 to 8, the co-ordinates of which are referred to in paragraph 19 above; /…/
(2) By thirteen votes to four,
Rejects the request made by the Republic of Nicaragua that the Court adjudge and declare that the islands of San Andrés and Providencia are entitled to a continental shelf up to a line consisting of 200-nautical-mile arcs from the baselines from which the breadth of the territorial sea of Nicaragua is measured connecting the points A, C and B, the co-ordinates of which are referred to in paragraph 19 above; /…/
(3) By twelve votes to five,
Rejects the request made by the Republic of Nicaragua with respect to the maritime entitlements of Serranilla and Bajo Nuevo» /…/
Dos preguntas resueltas por la negativa
Como tuvimos la oportunidad de indicarlo (véase nuestra nota anterior), de manera inusual la CIJ ordenó en octubre del 2022 a los dos Estados dedicar sus alegatos a responderle dos preguntas muy precisas con relación a una pretendida costumbre internacional invocada por Nicaragua para exigir derechos en su plataforma continental más allá de 200 millas náuticas..
Las audiencias finales se celebraron en diciembre del 2022 y ambos Estados concentraron sus alegatos en ambas.
En su decisión del 13 de julio del 2023, la CIJ responde por la negativa a la primera pregunta, al indicar en el párrafo 79 que:
«79. Au vu de ce qui précède, la Cour conclut que, en droit international coutumier, le droit d’un État à un plateau continental au-delà de 200 milles marins des lignes de base à partir desquelles est mesurée la largeur de sa mer territoriale ne peut pas s’étendre à des espaces maritimes en deçà de 200 milles marins des lignes de base d’un autre État.»
../..
In view of the foregoing, the Court concludes that, under customary international law, a State’s entitlement to a continental shelf beyond 200 nautical miles from the baselines from which the breadth of its territorial sea is measured may not extend within 200 nautical miles from the baselines of another State«.
Por otra parte, con relación a la segunda pregunta, en el párrafo 82 leemos que:
«82. Il résulte de la réponse donnée par la Cour à la première question que, quels que soient les critères selon lesquels est établie la limite extérieure du plateau continental étendu auquel un État a droit, ce plateau continental étendu ne peut pas chevaucher la zone du plateau continental qui est située en deçà de 200 milles marins des lignes de base d’un autre État. En l’absence de droits concurrents sur les mêmes espaces maritimes, la Cour ne peut procéder à une délimitation maritime (voir le paragraphe 42 ci-dessus). Dès lors, point n’est besoin pour elle de se prononcer sur la seconde question.
../..
It follows from the Court’s answer to the first question that, regardless of the criteria that determine the outer limit of the extended continental shelf to which a State is entitled, its extended continental shelf cannot overlap with the area of continental shelf within 200 nautical miles from the baselines of another State. In the absence of overlapping entitlements over the same maritime areas, the Court cannot proceed to a maritime delimitation (see paragraph 42 above). Consequently, there is no need for the Court to address the second question».
Es de notar que esta sentencia viene acompañada de varias opiniones individuales separadas (tres en total), opiniones disidentes (cuatro) y de una declaración, lo cual evidencia el intenso debate intra muros que se dio entre los integrantes de la CIJ. Tomando en cuenta el hecho que la sentencia de la CIJ como tal no sobrepasa las 35 páginas, resulta de interés la lectura de la extensa opinión disidente del juez eslovaco (véase texto) y la de la jueza australiana (disponible aquí), así como la opinión separada elaborada por la jueza china (véase texto).
Es de notar que en luego de la emitirse la ordenanza de la CIJ del 4 de octubre del 2022 (véase texto en francés y en inglés), Colombia procedió a cambiar a parte de su equipo legal (véase nota de prensa de Semana al respecto del 25/10/2022). Mientras que, en el equipo legal de Nicaragua, desde el mes de marzo del 2022, y después de muchos años como asesor de Nicaragua en La Haya, uno de los juristas más experimentados del equipo de abogados internacionales, el norteamericano Paul Reichler, presentó su renuncia (Nota 1).
Con relación a los costos exactos que le significan a cada Estado el acudir a una instancia como La Haya durante varios largos años de procedimiento, la nebulosa se mantiene, tal y como la analizamos en nuestra nota relativa a la sentencia de abril del 2022 entre ambos Estados (con algunos montos oficiales dados a conocer en Nota 4 de la misma precitada nota referenciada). En el caso de Chile, el Poder Ejecutivo debió reconocer en el 2015 (y ello en contra de su voluntad) haber gastado 20,3 millones de US$ para enfrentar la única demanda de Perú interpuesta por Perú en enero del 2008 ante la CIJ (véase nota de prensa) y resuelta en enero del 2014 por el juez de La Haya.
A modo de conclusión
Al verse frenadas las pretensiones de Nicaragua con relación a su plataforma continental, los dos Estados deberán ahora encontrar la forma de negociar de manera conjunta lo relativo a su frontera marítima a partir de todo lo indicado en el fallo de noviembre del 2012 (véase texto completo de dicha sentencia).
Algo que no permitió ni el tono desafiante de Colombia a partir de noviembre del 2012, con la denuncia del Pacto de Bogotá (Nota 2) y la declaratoria de «inaplicabilidad» del fallo del 2012 en el año 2013 (Nota 3), ni tampoco las dos nuevas demandas presentadas en su contra por Nicaragua ante el juez internacional en el año 2013.
Con respecto a la primera de ellas, habíamos tenido la oportunidad de analizar esta decisión en la que la CIJ condenó a Colombia (véase comunicado oficial de Naciones Unidas): remitimos sobre esta sentencia a nuestros estimables lectores a nuestra nota, precedida en los días previos a la sentencia del 2022 de otra más extensa publicada en el sitio jurídico especializado de Ius360 (Nota 4).
Mapa extraído de nota de prensa titulada «Nicaragua pierde disputa marítima contra Colombia ante Corte de La Haya», Programa radial Amelia Rueda (Costa Rica), edición del 13/07/2023.
Es de esperar que ambos aparatos diplomáticos logren, a partir de este 13 de julio del 2023, crear un clima propicio para el acercamiento, el diálogo y la concertación. Para ello, las declaraciones oficiales en estos próximos días serán de gran importancia, así como la mesura y ponderación que contengan. En efecto, desde 1980, la contienda entre Nicaragua y Colombia ha afectado significativamente a varios Estados que pertenecen al Mar Caribe: un mar semi cerrado con una gran cantidad de zonas marítimas que se traslapan y que deben ser objeto de negociaciones entre Estados vecinos.
La incertidumbre generada por esta larga controversia que llegó a manos de la justicia internacional en el 2001, debería a partir de ahora considerarse como superada, en aras de lograr paulatinamente una gestión conjunta más armoniosa de estos espacios marinos.
– – Notas – –
Nota 1: Véase al respecto BOEGLIN N., «A propósito de la renuncia de uno de los artífices de los logros de Nicaragua ante la justicia internacional«, publicada en el medio Confidencial (Nicaragua), edición del 6/04/2022. Texto disponible aquí.
Nota 2: Véase al respecto BOEGLIN N., «La denuncia por Colombia del Pacto de Bogotá«, La Nación (Costa Rica), edición del 8/12/2012, disponible para suscriptores aquí. Y una versión más extensa pubicada en Francia, BOEGLIN N. «Le retrait du Pacte de Bogota par la Colombie», publicado en el sitio Le Monde du Droit, edición del 7/12/2012. Texto disponible aquí.
Nota 3: Véase al respecto BOEGLIN N., «El anuncio de Colombia de no aplicar el fallo de la CIJ«, Alainet, edición del 23/09/2013, disponible aquí. Y una versión más extensa publicada en Francia, BOEGLIN N., «La décision de la Colombie de déclarer l´arrêt de la CIJ «non applicable»: breves refléxions» Boletín Sentinelle (Société Francaise pour le Droit International – SFDI), edición del 23/09/2013. Texto disponible aquí.
Nota 4: Véase BOEGLIN N., «Nicaragua/Colombia: a propósito de la lectura de la sentenca de la CIJ«, Ius360, edición del 20/04/2022. Texto disponible aquí.
NOS parecía una pretensión insólita, pero al final y después de tanto tiempo, privó la razón de los argumentos jurídicos, expresados por los representantes de Colombia. La pretensión del gobierno de Nicaragua, aparentemente se sustentó en un vacío legal que, precisamente, por tratarse de algo jurídicamente insustentable, quizá no parecía necesario cerrar. Pero bueno, los abogados nicaragüenses pensaron diferente, y decidieron tratar de ingresar por ese «conjunto vacío» no aritmético, sino legal. Y, como era de esperar, nuevamente les fue mal en la Corte Internacional de Justicia de las Naciones Unidas, con sede en La Haya, Países Bajos.
En resumen, y en sencillo, los Estados ribereños que tienen bajo su zona contigua y zona económica exclusiva de hasta 200 millas de ancho, un lecho marino situado a una profundidad menor a los 200 metros, como prolongación natural del territorio continental, lo que constituye la PLATAFORMA CONTINENTAL.
Ahora bien, el derecho internacional del mar, reconoce la posibilidad, de que dicha plataforma continental, en caso de proyectarse más allá del límite exterior de 200 millas de la zona económica exclusiva, hacia la altamar, por ejemplo, el Estado ribereño pueda reivindicar su derecho a extenderse hasta donde se supere la profundidad de 200 metros, pero a una anchura no mayor a las 150 millas, medidas a partir, reiteramos, del borde exterior de la zona económica exclusiva. Es decir, sumados a los derechos de soberanía que el Estado ribereño tiene sobre todos los recursos vivos y no vivos, que se encuentran en las aguas suprayacentes al lecho, en el lecho mismo, y en el subsuelo del mar, en la plataforma continental también se tienen derechos de soberanía, sobre los importantes recursos minerales y otros recursos no vivos del lecho del mar y su subsuelo.
Si consideramos que en la plataforma se localiza la cuarta parte de la producción mundial de petróleo y gas metano, quizá entendemos mejor el por qué se trata de un territorio más que interesante. Y si se pudiera extender esa plataforma continental más allá del límite exterior de la zona económica exclusiva, pues bienvenido sea, como lo han previsto algunos Estados, incluyendo a Costa Rica en el océano Pacífico. Se trata de algo normal, formalizado por la ONU, y principalmente, sin entrar en conflicto con otros Estados.
Pero hay un «detallito» que provocó el reciente fallo contra Nicaragua en la Corte de La Haya.
Resulta que la plataforma continental que los nicaragüenses reivindican más allá de las 200 millas que marcan su zona económica exclusiva, ¡se localiza bajo la zona económica exclusiva de Colombia!, en la zona del archipiélago de San Andrés, declarado como colombiano en el año 2012.
En otras palabras, los nicaragüenses pretendían que los jueces del máximo tribunal de la ONU, les abriera el camino de poder explorar y explotar los recursos minerales del fondo marino, que se podrían encontrar bajo el mar colombiano. Más allá de una invitación a conflictos permanentes entre ambos países, un fallo favorable a Nicaragua, habría echado por la borda el merecido reconocimiento y prestigio que tiene la Corte Internacional de Justicia. Aunque se tardaron 10 años, lo bueno fue que lo resolvieron correctamente.
En concreto, el pasado 13 de julio, por 13 votos a 4, se rechazó la solicitud hecha por la República de Nicaragua en busca de que la Corte adjudicara y declarara, que la delimitación marítima entre la República de Nicaragua y la República de Colombia, en las áreas de la plataforma continental que pertenecen a cada una de ellas, habría de estar, según Nicaragua, más allá de la delimitación determinada en el año 2012, es decir, más allá de donde se traslapan las zonas económicas exclusivas de ambos Estados. Con ello, su plataforma continental habría penetrado, muchas millas por abajo del mar Caribe colombiano. ¿Se imaginan ustedes, una plataforma extractora de petróleo, perteneciente a Nicaragua, ubicada en el mar patrimonial colombiano? Pues, tal sinsentido habría sido posible, si los vecinos del norte no hubiesen salidos derrotados en La Haya.
Con la presencia del presidente colombiano, Gustavo Petro, y el presidente de Cuba, Miguel Díaz-Canel, cerró este viernes en La Habana el tercer ciclo de la mesa de diálogo de paz entre el Gobierno de Colombia y el Ejército de Liberación Nacional (ELN), en el que se anunció un acuerdo de cese al fuego bilateral, nacional y temporal.
Este cese al fuego, como parte de los Acuerdos de Cuba, fue firmado por el jefe de la delegación del Gobierno colombiano, Otty Patiño, y el segundo comandante y jefe de la delegación del ELN, Pablo Beltrán.
Esta importante tregua busca desescalar la violencia que se ha extendido por más de medio siglo en el territorio colombiano, y está llamado a poner fin al fuego cruzado, las hostilidades y las acciones ofensivas entre la Fuerza Armada colombiana y los comandos guerrilleros.
El presidente Petro acompañó por primera vez el cierre formal de una ronda de diálogos con el ELN, la cual se desarrolló durante 35 días en la capital cubana, desde el pasado 2 de mayo, después de dos rondas precedentes en Ciudad de México y Caracas.
También participaron en la ceremonia el primer comandante del ELN Antonio García y otros altos jefes de la guerrilla.
En la ceremonia efectuada este 9 de junio, en el salón de Protocolo de Cubanacán “El Laguito”, estuvieron presentes igualmente los cancilleres de Cuba, Bruno Rodríguez Parrilla, y de Colombia, Álvaro Leyva Durán, así como otros representantes de los países garantes y acompañantes permanentes del proceso de conversaciones para la anhelada paz en la nación suramericana.
El canciller cubano dio lectura de los acuerdos firmados y anunció que el cuarto ciclo de conversaciones se realizará en Venezuela, entre el 14 de agosto y el 4 de septiembre, donde las partes harán un balance sobre el cumplimiento de lo que han pactado.
Rodríguez Parrilla comentó que “las partes han decidido dar inmediato cumplimento a los Acuerdos de Cuba”.
Ceremonia de cierre del tercer ciclo de la mesa de diálogo entre el ELN y el Gobierno de Colombia. Foto: CubaMinrex/Twitter
Delegación del Ejército de Liberación Nacional (ELN) revisando los acuerdos adoptados. Foto: @DelegacionEln/Twitter
Además, informó que la mesa de diálogo de paz “entra en una actividad permanente que conjuga distintas modalidades de trabajo, en diversos escenarios y tiempos, manteniéndose los ciclos de conversaciones”.
Las delegaciones del Gobierno de Colombia y el ELN suscribieron dos pactos en Cuba: el primero relacionado con “el proceso de participación de la sociedad en la construcción de la paz”; y el segundo, sobre “el cese al fuego bilateral, nacional y temporal”.
Primer Acuerdo de Cuba: El proceso de participación de la sociedad en la construcción de la paz. Segundo Acuerdo de Cuba: Cese al fuego bilateral, nacional y temporal.
Sobre la entrada en vigor del cese al fuego, el canciller cubano detalló que el acuerdo establece tres momentos para su aplicación.
Comentó que del 9 de junio al 5 de julio de 2023 tendrá lugar un proceso de alistamiento de la sociedad colombiana que incluye, entre otros, la activación de un canal de comunicación entre las partes, a través del representante especial del secretario general de la Organización de las Naciones Unidas en Colombia.
En ese periodo también se efectuará la redacción de protocolos pendientes, el inicio de las actividades de pedagogía y la preparación para la puesta en marcha del mecanismo de monitoreo y verificación.
Las órdenes de ceses de operaciones ofensivas por las partes se harán vigentes el 6 de julio de 2023.
El 10 de julio de 2023 se realizará una reunión plenaria y presencial de la mesa de diálogos de paz para aprobar los protocolos elaborados, y durante ese periodo, se continuarán desarrollando las actividades de pedagogía.
De acuerdo con el ministro de Exteriores de Cuba, a partir del 3 de agosto de 2023 se iniciará la implementación plena del proceso de alistamiento del cese al fuego bilateral nacional y temporal. Este, dijo, se efectuará “con la aplicación en su totalidad de los protocolos y el completo funcionamiento del mecanismo de monitoreo y verificación en todas sus instancias”.
Desde esa misma fecha, las partes empiezan a contar los 180 días o seis meses que tendrá vigencia el periodo efectivo del cese al fuego bilateral nacional y temporal, “el cual tendrá vocación de continuidad, previa evaluación de las partes”.
Aunque el acto de clausura del tercer ciclo estaba previsto realizarlo ayer jueves, se decidió aplazarlo para este viernes en aras de ultimar detalles de los textos de los Acuerdos de Cuba y sus respectivos protocolos, afirmaron las delegaciones en sus cuentas en Twitter, mediante el Comunicado Conjunto número diez.
Mesa de conversaciones de paz entre el Gobierno de Colombia y el Ejército de Liberación Nacional (ELN) en La Habana, 8 de junio de 2023. Foto: @DelegacionEln/Twitter
La paz es un derecho de todos
Ceremonia de cierre del tercer ciclo de la mesa de diálogo entre el ELN y el Gobierno de Colombia. Foto: CubaMinrex/Twitter
Al intervenir en la ceremonia, el jefe de la delegación del ELN, segundo comandante Pablo Beltrán, expresó su deseo de que la sociedad colombiana respalde los acuerdos firmados.
Dijo que la aplicación del cese al fuego procura que Colombia cambie y, con ello, el régimen existente, y que ha de ser cambiado políticamente para que haya canales democráticos, respeto a la protesta social y no haya un régimen represivo.
Valoró que este tipo de acuerdo es una luz de esperanza, de ahí -dijo- la importancia de pasar de su escritura a concretarlo.
Aspiramos a que no se repita la interpretación de la paz como pacificación, sino como análisis de las causas profundas del conflicto armado y de transformación para la paz, solicitó.
También hizo énfasis en la necesidad de dar más participación a sectores que hasta el momento han sido históricamente marginados, como los jóvenes, las mujeres, los indígenas, los trabajadores y las comunidades afrodescendientes.
Agradeció a Cuba el apoyo brindado a la paz en Colombia y calificó de injusticia que se haya incluido al país caribeño en la lista de naciones que supuestamente patrocinan el terrorismo.
Por su parte, el primer comandante del ELN, Antonio García, agradeció a la comunidad internacional y a Cuba por no haber dejado naufragar el proceso de paz en los últimos cuatro años. También a los países garantes, en particular aquellos que brindaron su territorio para celebrar conversaciones.
Asimismo, agradeció a Petro y a ambas delegaciones por la labor desplegada, y manifestó que el proceso de paz navegaba en la incertidumbre hasta que el clamor del país con sus protestas abrió la posibilidad de una transformación.
Apreció que históricamente la violencia robó el corazón y las palabras en Colombia. Hay que ir al encuentro de las palabras, que la sociedad se exprese y sea escuchada, dijo.
Aseguró que este proceso de paz va al encuentro del corazón y las palabras, que quiere decir vida digna para la gente, así como la construcción de un acuerdo nacional que marque la agenda del cambio en el país.
El jefe negociador del Gobierno de Colombia, Otty Patiño, agradeció al presidente Petro por la confianza en el pueblo colombiano y por creer posibles los cambios; así como a artífices de la paz total, entre los cuales mencionó integrantes de la delegación gubernamental y también del ELN.
Aseguró que estos cambios enfrentarán resistencias de grupos de poder y privilegios, así como otros vinculados a la violencia histórica.
Los retos serán innumerables pero vale la pena arrostrarlos. La paz es un derecho de todos, expresó.
Petro: Incluir a Cuba en la lista de países terroristas fue un acto de profunda injusticia
Ceremonia de cierre del tercer ciclo de la mesa de diálogo entre el ELN y el Gobierno de Colombia. Foto: CubaMinrex/Twitter
El presidente de Colombia, Gustavo Petro, agradeció a Cuba por su histórica hospitalidad a la paz en Colombia y recordó que durante su reciente visita a Washington le dijo al presidente de EE.UU. Joe Biden que incluir a Cuba en la lista de países terroristas fue un acto de profunda injusticia.
Petro instó a Biden a enmendar esa injusticia, causante de sanciones unilaterales y de vulneraciones a la vida y los derechos del pueblo cubano.
Expresó que de cierta forma aquí termina una fase de la insurgencia en América Latina, región que ahora se transforma de otra manera.
Manifestó que se abren tiempos de llevar esperanza a los jóvenes y los Acuerdos de Cuba llevan al ELN a un cese al fuego inédito, que sigue con el compromiso de que en mayo de 2025 cese definitivamente la guerra entre el grupo armado y el Estado de Colombia.
Recordó, además, que para poner fin a la violencia hay que reconstruir a Colombia, pacto que demanda justicia y garantizar una vida digna a los sectores más humildes.
De ahí, recalcó, la importancia de debatir a nivel social las reformas que su Gobierno promueve para que se garanticen derechos sociales básicos y haya estabilidad laboral, reparto de la tierra, respeto a la protesta social y otros cambios que permitirán que el país no continúe siendo el más desigual de la región.
https://youtu.be/eHxiM_6drCg
Por su parte, el presidente cubano, Miguel Díaz-Canel, calificó de intensos los trabajos del tercer ciclo de diálogos y señaló que sus resultados son promisorios.
Afirmó que es un honor para Cuba que en estas pláticas se hayan alcanzado acuerdos de gran importancia para la paz en Colombia, como llevar alivios humanitarios a poblaciones, el cese al fuego bilateral, nacional y temporal, y las bases para construir la paz, todo lo cual es el resultado de esfuerzos durante muchos años.
Recordó que Cuba siempre ha cumplido sus compromisos políticos y ningún país puede exigirle que viole la palabra empeñada.
El precio que se pagó por cumplir lo acordado ha sido alto, pero no nos arrepentimos, recalcó.
Por último, solicitó a los colombianos avanzar lo más posible y aprovechar la actual coyuntura histórica. Colombianos, no se detengan. Pónganle el corazón a la paz en Colombia, finalizó Díaz-Canel.
https://youtu.be/_CBhgzkBTLo
Antes de partir hacia La Habana, el presidente colombiano anunció desde la Plaza de Bolívar que participaría en el cierre del tercer ciclo de negociaciones de paz con el ELN, asegurando ante cientos de miles de sus connacionales que desde Cuba se daría un hecho “importante para la historia de Colombia”.
“Voy a firmar un papel que puede significar el comienzo sin retroceso de una era de paz para este país”, precisó entonces el jefe de Estado colombiano, citado por los medios locales.
Petro también señaló que “va a ser difícil, todos los sabemos. Más difícil que hacer la guerra es hacer la paz”. “Quiero que construyamos el camino que se merece Colombia con ustedes, con el pueblo movilizado, no habrá cobardía en nuestros corazones”, enfatizó.
Los diálogos entre el ELN y el Gobierno de Colombia arrancaron en febrero de 2017 en Quito, Ecuador, durante la administración del presidente colombiano Juan Manuel Santos (2010-2018). El presidente ecuatoriano Rafael Correa aún gobernaba el país vecino.
En abril de 2018, el entonces mandatario Lenín Moreno anunció que Ecuador dejaría de ser sede, por lo que las negociaciones se trasladaron a Cuba.
Luego de varios años de estar suspendidas las conversaciones por el Gobierno de Iván Duque (2018-2022), el diálogo se reanudó con la llegada de Gustavo Petro a la presidencia en Colombia.
El 21 de noviembre de 2022 se reinició el diálogo en la capital venezolana, en un primer ciclo que se extendió hasta el 12 de diciembre y que culminó con un acuerdo para promover alivios humanitarios en algunas de las regiones más golpeadas por el conflicto armado.
Al cierre del segundo ciclo de los diálogos efectuado entre el 13 de febrero y el 10 de marzo en Ciudad de México, el presidente Petro firmó una resolución reconociendo al ELN como una “organización armada rebelde” e indicó que las conversaciones estaban encaminadas a “obtener soluciones al conflicto armado”.
En esa ocasión, las partes acordaron avanzar en una “nueva agenda de diálogos para la paz”, mediante seis puntos transversales que serían abordados en adelante: participación de la sociedad en la construcción de la paz, democracia para la paz, transformaciones para la paz, víctimas, fin del conflicto armado y plan general de ejecución de los acuerdos.
Las conversaciones cuentan con Brasil, Cuba, Chile, México, Noruega y Venezuela como países garantes; mientras que como acompañantes están España, Alemania, Suecia, Suiza.
También están como acompañantes permanentes el Representante Especial del Secretario General de la Organización de las Naciones Unidas y la Conferencia Episcopal de Colombia.
Prisma Latinoamérica publica un mensaje que hace un llamado a los colombianos para que se unan a la promoción de un sistema de salud inclusivo y participativo en Colombia. Existe un gran debate en Colombia sobre la reforma de la ley de salud, donde se plantea incorporar el sistema de salud de Costa Rica, que contó con una etapa primordial para un estado pleno unido.
Dicha etapa es el “hospital sin paredes” donde se levantó caso por caso información de la comunidad para combatir las enfermedades. “Un sistema de salud que transformó vidas en Costa Rica y que es posible replicarlo en Colombia. Por un futuro en el que nadie se quede sin atención médica, donde cada vida importa y todos tenemos la oportunidad de contribuir al bienestar de nuestra comunidad”, mencionó Prisma Latinoamérica.
La embajada de la República de Colombia en Costa Rica y su sección Consultar extiende una invitación cordial al conversatorio “El caso Unión Patriótica (Corte IDH) y la política de Paz Total en Colombia” a cargo de Carlos Rodríguez, Embajador de Colombia en Costa Rica, como expositor y Ronald Alfaro, Doctor en Ciencias Políticas por la Universidad de Pittsburgh y Master en Ciencias Políticas por Columbia University, catedrático e investigador del Centro de Investigación y Estudios Políticos de la Universidad de Costa Rica, como moderador.
El conversatorio se llevará a cabo el jueves 18 de mayo a las 4pm en la Universidad de Costa Rica, Sede San Pedro, Auditorio Alberto Brenes Córdoba contiguo al edificio B de la Facultad de Derecho.
Dr. Alirio Uribe Muñoz representante a la Cámara. Delegados de las organizaciones sociales de la Salud presentes.
La Asociación Americana de Juristas (AAJ) es una organización social de Abogados y Abogadas de países comprendidos desde Alaska hasta la Patagonia. Conforme a sus Estatutos es defensora del Estado de Derecho, de los Derechos Humanos, con enfoque de Derecho Alternativo y antiimperialista. Funge como cuerpo consultivo ante las Naciones Unidas.
Como miembro de la AAJ Rama Colombia destaco el contenido jurídico y de técnica legislativa en el Proyecto de Ley de Reforma a la Salud. Propugno porque los trabajadores (as) de la Salud se definan como empleados públicos y trabajadores oficiales.
Que los recursos públicos de la Salud sean manejados directamente por la entidad oficial, proyectando que las actuales EPS sean reducidas a la mínima expresión.
Propongo que las organizaciones sociales del entorno Salud coparticipen en concepción mixta y de solidarismo económico, en ser parte de la prestación de servicios de Salud (IPS).
Proyecto que el Nuevo Sistema de Salud en Colombia contribuya, en conjunto con la Reforma Laboral, en el impulso del sindicalismo de la Salud hacia un sindicalismo de industria.
Resalto que las EPS manejan $20 billones de pesos de recursos públicos y el peligro del gusano de la corrupción acecha a inocularse en la conciencia de senadores y representantes si optaran por disponer esas EPS tan sólo de $1billon de esos pesos en reparto, para continuar con los beneficios antipopulares que hoy ostentan.
Es de resaltar que la corrupción oficial es contenible, controlable; mas la privada es incontenible e inconmensurable.
Como Juristas nacionales e internacionales apoyamos la reforma a la Salud que confronta a las mafias blancas y en el entendido que la Salud es un derecho fundamental que no tiene fronteras.
Presentación de Carlos Meneses Reyes a nombre de la AAJ.
Hoy se celebra el día internacional de los y las trabajadores. No todo quien produce bienes y servicios es trabajador, puesto que lo es toda persona física que presta servicios bajo una remuneración.
Esa es dueña de su fuerza de trabajo y nada tiene que perder ante el capital explotador sino sus cadenas. Cuando a un trabajador (a) se le somete al cumplimiento inhumano de jornadas de trabajo, sea, por ejemplo, en el desempeño «desde su casa» por el medio digital, a eso se le llama esclavitud moderna.
El trabajo dignifica y hoy se reivindica la conquista de la lucha de los trabajadores y trabajadoras por 8 horas de trabajo, 8 horas de estudio, 8 horas de descanso.
En Colombia transitamos por una etapa alternativa pos capitalismo salvaje privacionista, por lo que se hace necesario el ejercicio de la democracia directa en las calles para que el movimiento obrero y popular obtenga las reivindicaciones con transformaciones de fondo y profundas en lo económico y social. Esto, porque aun cuando se cuenta con un gobierno de inspiración popular, el poder continúa bajo la férula del narcoparamilitarismo oligárquico, expresado en la piara corrupta del parlamento (Senado y Cámara) colombiano.
¡Puro Abogado!… y Al Servicio de Los Trabajadores!
Rogelio Cedeño Castro, sociólogo y escritor costarricense
“En Colombia hay dos países: el país político que se preocupa por las elecciones, las sinecuras burocráticas, los intereses económicos, los privilegios y las influencias… El país político y la oligarquía son la misma cosa…Y el país nacional, el pueblo que piensa en su trabajo, su salud, su cultura… Nosotros pertenecemos al país nacional, al pueblo de todos los partidos que luchan contra el país político, contra las oligarquías de todos los partidos.
JORGE ELIÉCER GAITÁN.
Hace tres cuartos de siglo, un viernes 9 de abril de 1948, a la una y cinco de la tarde, la oligarquía colombiana conservadora y liberal materializó la vía que había escogido de antemano para imponer su proyecto fascista al conjunto de la sociedad, por medio de la violencia y el exterminio colectivo de los sectores populares de filiación liberal gaitanista, asesinando al gran líder popular Jorge Eliécer Gaitán (1898-1948), quien venía clamando por la paz, el establecimiento de una democracia directa y por el fin de la violencia conservadora, cuando salía de su oficina en la Carrera Séptima con la Avenida Jiménez de Quesada, en la ciudad de Bogotá, en plena IX Conferencia Panamericana, con la presencia del General George Marshall, entonces Secretario de Estado de los Estados Unidos, que daría lugar a la fundación de la OEA, como un instrumento de la hegemonía estadounidense en la región, dando al traste con las esperanzas populares de justicia social, paz y democracia directa, originando una gran insurrección popular que hizo arder muchos edificios del centro histórico de la capital colombiana (donde fue aplastada rápidamente, de manera cruenta, con miles de muertos y heridos, por parte del ejército y de los sectores del lumpen afines al Partido Conservador y la reacción clerical) y en todo Colombia donde la prolongada resistencia dio lugar a un largo y sangriento conflicto armado, cuyas consecuencias se sienten todavía, sobre todo en la Colombia Rural del nuevo siglo, después de la firma de sucesivos acuerdos de paz, cuyo cumplimiento ha sido burlado reiteradamente por el establecimiento político, dando lugar a masacres contra los combatientes de la insurgencia desmovilizados, entre ellos más de tres mil dirigentes y militantes de la Unión Patriótica hacia fines de los ochenta y principios de los noventa.
En lo inmediato, y como consecuencia del propio Bogotazo, sucedió que: “El pueblo respondió al asesinato de Gaitán con un levantamiento espontáneo, conocido como el Bogotazo. La multitud se tomó la ciudad en una oleada de furia colectiva, y saqueó y destruyó todo lo que simbolizaba las estructuras de poder que la excluían y empobrecían. No fue tan solo el lumpen el que se insubordinó, sino también los obreros, los pequeños comerciantes y la clase media baja, a quienes el liberalismo había dado identidad política…En provincia, la reacción al magnicidio fue más organizada y duradera. En Barrancabermeja, Rafael Rangel encabezó una Junta Revolucionaria durante 14 días. Eliseo Velázquez en los Llanos y Hermógenes Vargas en el sur del Tolima organizaron grupos de resistencia armada, que endurecieron la represión conservadora. A lo largo de 1948, hubo más de 43 mil víctimas de violencia, y el teatro de la lucha política se trasladó a las áreas rurales. El populacho urbano fue políticamente neutralizado y el gaitanismo no sobrevivió a la muerte de su líder.”(Jenny Pearce Colombia dentro del laberinto Altamira Ediciones Bogotá 1992 página 64).
Los conservadores, una vez asesinado Gaitán pactaron con la oligarquía liberal e intensificaron la persecución al movimiento sindical, crearon sindicatos afines al catolicismo conservador como la UTC, especialmente en Antioquia, y a la patronal, junto con el capital financiero y los intereses estadounidenses restringieron las conquistas sociales alcanzadas por los sectores populares, durante las décadas de 1930 y l940, dando lugar a numerosos despidos y a una aparatosa caída de los salarios reales, mientras que “La represión golpeó duramente al movimiento sindical: bajo el estado de sitio en vigor, se prohibieron las huelgas y las reuniones políticas, Fueron arrestados muchos líderes sindicales y reemplazados por delegados gubernamentales. Las sedes de los sindicatos fueron ocupadas y se despidió a miles de trabajadores en los sectores público y privado. En un solo ingenio azucarero del Valle del Cauca, fueron despedidos 900 obreros” (ibidem).
En medio de la violencia, del terror y de la ruina que cundía entre los campesinos, obreros y medianos empresarios, los patronos más poderosos obtuvieron ganancias insospechadas, de manera que: “A lo largo del período de la violencia, el proceso de acumulación de capital fue tan grande que Alberto Lleras Camargo escribió que sangre y acumulación iban juntas. “La situación colombiana es la mejor que hemos conocido jamás”, declaró el presidente de la ANDI (Asociación de Industriales de Colombia), en 1949, año en el que murieron 18.500 personas. “Reina la paz social”, se leía en un informe del ministro de Trabajo en 1951, año en el que fueron asesinadas 10.300 personas…Para la burguesía urbana y particularmente par los industriales, la situación no podría haber sido mejor…En 1954, los salarios descendieron en un 14% con relación a sus niveles de 1947, a pesar de que el año de 1949 anunciaba un período de gran prosperidad, entre 1948 y 1953, la producción industrial aumentó en un 56%” (Pearce, ibid, p 69).
El asesinato del caudillo liberal fue una respuesta homicida al aglutinamiento de fuerzas sociales y políticas alrededor de la figura de Jorge Eliécer Gaitán, que se vino consolidando al promediar la década de 1940, en medio de una crisis interna del Partido Liberal que se movía entre el gaitanismo, de gran base popular y el aparato de los viejos líderes de la oligarquía liberal que se oponían a las necesarias transformaciones sociales destinadas a llevar a Colombia a la modernidad, todo esto terminó dividiendo a los liberales y abriendo las puertas a la inmensa tragedia que vino después.
Los conservadores, o godos reaccionarios que habían ganado las elecciones generales de 1946, llevando a su candidato Mariano Ospina a la presidencia de la república, como resultado de la mencionada división del Partido Liberal que fue a esas elecciones con dos candidatos (Gabriel Turbay y Jorge Eliécer Gaitán), una vez instalados en la Casa de Nariño, emprendieron primero numerosas masacres de campesinos liberales gaitanistas en los departamentos del Eje Cafetero, en el Valle del Cauca, el Tolima, el macizo cundinoboyacense que comprende la mayor parte de los departamentos de Cundinamarca y Boyacá, los santanderes y en la región de los Llanos orientales asesinando, torturando, hiriendo, robando y obligando a la huida o al desplazamiento de miles de pobladores rurales, de cuyas tierras se apropiaban los grandes latifundistas, las que han venido cambiado de manos en sucesivos ciclos de violencia y nuevos desplazamientos de la población campesina, a lo largo de las ocho décadas transcurridas,
La muerte violenta y el terror acechaban a quienes se enfrentaban a las bandas paramilitares, de asesinos a sueldo, de la policía conservadora como fue el caso de los “chulavitas” o chulavos de Boyacá, los pájaros en el Valle del Cauca, los “aplanchadores” y otros grupos armados que sembraban el terror en aquellas comarcas o veredas donde se enraizaban el liberalismo y los afanes de justicia social entre los campesinos. El paramilitarismo de los latifundistas ganaderos del Magdalena Medio, el Urabá Antioqueño y otras regiones tanto del Pacífico como del Caribe ha hecho lo suyo, sembrando la muerte y el terror a lo largo de la segunda mitad del siglo XX y en las dos primeras décadas del presente.
El pensamiento de Gaitán está hoy más vigente que nunca, forma parte del ideario del Pacto Histórico y de las fuerzas que apoyan al actual presidente colombiano Gustavo Petro Urrego, en su búsqueda de la paz total, la democracia directa, el cese de la corrupción y la violencia oligárquicas, la justicia social y la distribución de la riqueza, en especial las tierras cultivables. Por la regeneración moral, a la Carga con Gaitán… era la consigna de los valientes liberales gaitanistas de aquellos tiempos de lucha y coraje, incluso contra toda esperanza.