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Etiqueta: legados ancestrales

Curré/Yímba: un pueblo indígena con legados ancestrales

Por Uriel Rojas

En el cantón de Buenos Aires de Puntarenas, Zona Sur, se encuentra la comunidad indígena de Rey Curré/Yímba, un pueblo cuya historia data de unos 3000 años, según estudios del Museo Nacional en esta zona.

Admire legados ancestrales (esferas de piedra, cerámica antigua, petrograbados, metates precolombinos, muros de piedra, monolitos históricos), entre otros.

Conozca cómo se elabora la artesanía indígena local.

Aprenda acerca del proceso de teñir el algodón en forma natural. Hilar, tejer.

Conozca sobre los saberes asociados a la construcción de sus viviendas tradicionales.

Disfrute de su rica gastronomía local.

Aprenda sobre sus costumbres y tradiciones.

Además, del 30 de enero al 02 de febrero, tendrás la oportunidad de conocer una de las tradiciones indígenas más antiguas de nuestro país: el Juego de los Diablitos.

Agradecemos el apoyo de Marco “Guima” Gutiérrez en la elaboración de esta nota.

Rey Curré se ubica entre Palmar Norte y Buenos Aires, sobre carretera interamericana.

Más detalles e información al 87093735.

La herencia fácil ha creado hombres y mujeres débiles en el Caribe Sur

Bernardo Archer Moore

Por: Bernardo Archer (Walker)
Limonal, Cahuita 22-11-23

Cuando se compara la actual generación costarricense afrodescendiente con nuestros antepasados, no se puede evitar preguntarse ¿Qué ha pasado con nuestro pueblo?

La búsqueda de respuestas comienza comparando las circunstancias en las que cada generación llegó a este país. Nuestros antepasados en su mayoría literalmente llegaron a este territorio con una mano delante y la otra detrás, con el compromiso de construir un futuro para ellos, su familia y las generaciones venideras.

Tal propósito los hizo indiferentes hacia las selvas; así como a las serpientes, tigres y leones no fueron rival para su valentía y determinación. Tampoco lo fueron las políticas gubernamentales adversas que aparecieron después, para las cuales encontraron fuerza en la unidad y la solidaridad.

Así que nosotros, las generaciones actuales de negros, jóvenes y mayores, somos los benefactores del arduo trabajo y los sacrificios de nuestros antepasados. Algunos nunca tuvimos que luchar por nada porque ya lo habían hecho por nosotros.

Por lo tanto, esto creó un sentimiento de paternalismo entre nosotros, que nos ha llevado a tener la falsa esperanza de que alguien más resolverá nuestros problemas, un mesías como lo fueron nuestros antepasados.

Dicho esto, parece que la generación actual de adultos mayores negros y, por supuesto, adultos jóvenes aún no han trascendido de ser beneficiarios de los sacrificios de nuestros antepasados, a asumir la tarea de custodios y defensores de esos legados ancestrales en beneficio de las generaciones futuras de caribeños negros.

Nuestra conducta es como si el mundo fuera a acabarse con nuestra salida de él. Hemos perdido de vista que “solo el pueblo salva al pueblo”.

Hermanos y hermanas: No esperáis que Dios te ayude mientras que tú mismo no hacéis nada por ayudarse.