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Etiqueta: mercado laboral

Notas de coyuntura migratoria en Costa Rica

Se invita a leer las notas de coyuntura migratoria en Costa Rica sobre el caso de la piña y el banano, elaborado por Koen Voorend, del Instituto de Investigaciones Sociales Universidad de Costa Rica y Gustavo Gatica López, del Centro de Investigación en Cultura y Desarrollo de la Universidad Estatal a Distancia.

En el documento se expone la transformación que ha sufrido la matriz productiva del país y cómo esto ha modificado las características y composición del mercado laboral; en cuanto a la agricultura se menciona que la participación de la población ha ido disminuyendo al pasar los años.

Si bien el sector agrícola en Costa Rica cede participación en el Producto Interno Bruto (PIB), hay dos productos agroexportadores que se han consolidado en las últimas dos décadas: el banano y la piña. Oficialmente, en ambas actividades participan unas 60,000 personas trabajadoras.

Por otra parte, en ambas actividades hay una importante cantidad de personas trabajadoras inmigrantes. De acuerdo con los datos de la Encuesta Continua de Empleo (ECE) del Instituto Nacional de Estadísticas y Censos (INEC), en la producción de banano la participación de personas trabajadoras migrantes es de aproximadamente el 18%, mientras que, en la piña, esta participación alcanza un 30%. En conversaciones con productores de piña y banano se maneja la sospecha de que los datos oficiales del INEC subestiman la participación de migrantes en estos sectores.

Se invita a leer, analizar y compartir los datos del documento adjunto.

UNA se repiensa con visión Prospectiva

Con el objetivo de plantear nuevas alternativas educativas para la sociedad costarricense, la Universidad Nacional realiza un “Análisis Prospectivo de las carreras y profesiones del futuro” para identificar ¿Cuáles son las carreras que deben impartirse a futuro en el país? y que puedan innovar una nueva oferta académica de acuerdo con las necesidades y tendencias que se vislumbran en el mercado laboral, manteniendo siempre el balance de las humanidades y las ciencias duras.

Esta iniciativa ha sido promovida desde el 2020 por la Rectoría, Rectoría Adjunta, en coordinación con la Escuela de Planificación y Promoción Social-EPPS-UNA, el Área de Planificación de la UNA-APEUNA, y con el apoyo de Red la Colombiana de Prospectiva, la Red Iberoamericana de Prospectiva y The Millennium Projetc.

Dicho análisis prospectivo trata de un proceso de construcción estratégico en el cual la comunidad universitaria pretende visualizar cuál será la universidad necesaria para el futuro del país.

Para ello, la UNA inició el análisis del 6 de al 13 de abril de 2021, por medio de foros (virtuales) con prospectivistas latinoamericanos, seguidos de talleres de trabajos, en los cuales participaron: el Rector de la UNA, MSc. Francisco González Alvarado, la Rectora Adjunta Dra. Marianela Rojas Garbanzo, el Director de la Escuela de Planificación y Promoción Social-EPPS-UNA, MSc Ángel Ortega Ortega, Dr. Juan Carlos Mora Montero, Director de la Maestría de Pensamiento Estratégico y Prospectiva y coordinador del proyecto “Análisis Prospectivo de las Carreras del Futuro”, así como académicos, funcionarios y estudiantes de la institución.

Los prospectivistas latinoamericanos que participaron son: Dr. Gabino Ayarza Sánchez (Panamá), M.S.c Jorge Mattar (México) M.S.c Lucio Mauricio Henao Vélez (Colombia), M.S.c Karelys Abarca Cadevilla (Venezuela) y Dr. Freddy Vargas Lama (Perú).

Una construcción estratégica

El M.S.c Ángel Ortega resaltó la importancia que tiene para la universidad los espacios de análisis prospectivo: “el futuro de las carreras es una de las preocupaciones más grandes que tenemos todas las personas que trabajamos en esta casa de estudio, por lo cual, las autoridades universitarias han querido generar estos espacios necesarios para la discusión, de ahí, nuestro compromiso como unidad académica de aportar en materia de planificación estratégica”.

Por otra parte Ortega indicó que la EPPS-UNA, ha promovido el acercamiento con la  Red Colombiana de Prospectiva, la Red Iberoamericana de Prospectiva (Riber); y The Millennium Project, como aliados estratégicos para referenciar diferentes prospectivistas que apoyarían este esfuerzo de la UNA, iluminando con su experiencia las distintas mesas de trabajo: “Estas organizaciones se destacan por sus análisis de enfoques prospectivos de alta trayectoria en Latinoamérica y el Caribe y se constituyen en laboratorios de ideas independientes sin fines de lucro, compuesto por futuristas,  académicos, responsables políticos y planificadores, que se centran en estudios e investigación de futuros globales”.

Por su parte, el Rector de la UNA, M.Sc. Francisco González indicó que, con el análisis prospectivo se pretende generar un cambio en el modelo de planificación de la universidad: “Este enfoque con visión prospectiva nos permite reflexionar, sobre la universidad, ya no en el corto plazo como lo hemos estado haciendo en los últimos años, sino con una visión de largo plazo, contando con un proceso científico y metodológico. Así como, mantener la reflexión, no solo entre nosotros mismos, sino también con la sociedad costarricense que es nuestro principal propósito”.

Agregó que, la razón de ser de la UNA está contemplada en sus aspectos visiónales y misionales, que es contribuir al desarrollo de la sociedad en mayor clave de equidad: “es importante que la institución educativa logre realizar cambios en el modelo de gestión universitario, reconociendo -con humildad– que necesitamos nuevos retos de distintos ámbitos; sabiendo que contamos con el potencial necesario, y que asistimos a un contexto social, económico y cultural absolutamente diferente y el cual ha sido acelerado por la pandemia y por las consecuencias que apenas se asoman”.

También dijo que un enfoque de planificación estratégica con visión prospectiva permitirá avanzar sobre los escenarios futuros que se deben construir: “Dentro de estos cambios nuestra reflexión sobre nuestro portafolio de carreras tanto de grado y pos grado tienen que ser unas de las metas centrales”.

El Rector reconoció también que, las formas de planificación curricular presentan limitaciones, y que algunas afectan las nuevas oportunidades de empleo que presenta las transformaciones del mundo laboral: “hoy con la revolución 4.0- 5.0 se han generado nuevas formas de organizarse y que responden a la demanda del mercado laboral. Sin embargo, como universidad no debemos olvidar que somos una universidad con sello humanista y eso nos debe mantener siempre presentes. Así, como la importancia de contar con profesionales en ciencias sociales que respondan de manera, crítica, acuisiosa, reflexiva y propositiva, a esas condiciones y visión crítica que se requiere de la sociedad”.

La Rectora Adjunta, Dra. Marianela Rojas, planteó la importancia que tiene para la comunidad universitaria priorizar en este esfuerzo institucional: “Somos parte de una gran institución educativa y humanista, por ello, su participación es vital en estos escenarios, pues con sus conocimientos nos aportan valiosos elementos que nos permitirán avanzar en los nuevos campos de formación académica en Costa Rica, y en la identificación de nuevas carreras y profesiones, así como los ajustes y cambios que se hacen necesarios en carreras actuales y pensar con visión de largo plazo sobre el quehacer académico de la UNA”.

Para el Dr. Juan Carlos Mora, la disciplina prospectiva es necesaria para lograr las nuevas opciones de formación académica, así como cambios necesarios en las carreras actuales con visión a largo plazo sobre el quehacer académico de la UNA.

Según explicó Mora, la UNA trabaja desde hace un año en un proceso de fortalecimiento en el tema prospectivo, y en la toma de decisiones para construir la universidad del futuro.

Además, señaló la importancia que tienen los espacios virtuales para la formación de los estudiantes: “De ahí que, estos espacios de formación superior son para formar a los estudiantes, orientándolos en su investigación, la acción social y la vinculación externa con visión de futuro”, explicó Mora, quién enfatizó en que este es un proceso primordial en la UNA en el marco de cumplir con lo que se ha denominado “tercera misión”, como una institución que contribuya con calidad a atender los principales problemas del país: “una universidad que abra los espacios para que se reflexione sobre las agendas temáticas del país y desde luego contribuya con soluciones útiles a los desafíos que enfrenta Costa Rica en el contexto actual y futuro”.

Enfoques prospectivistas de gran ayuda

Para el prospectivista Dr. Gabino Ayarza quien tuvo a cargo la exposición, “Introducción a la Prospectiva”, se trata de una metodología que permite anticipar al futuro, concibiendo el presente de una manera global y sistemática, para generar acciones múltiples con alternativas de cambio: “No se trata de adivinar el futuro, sino, que es referido a las investigaciones y exploraciones que buscan anticipar lo que está por venir”.

Indicó que, la prospectiva es un término en latín que significa – “Prospicere”- referido: a las investigaciones y exploraciones que buscan anticipar el porvenir. Dicha disciplina explicó Ayarza, ha sido desarrollada desde la década de los años cuarenta y que se ha vendido implementando en las diferentes disciplinas de las ciencias sociales, científica y humanistas: “Contribuyendo a la identificación de formas innovadoras para hacer ese futuro viable y darle sentido al presente, para transformar la realidad con la esperanza hacia un mundo sostenible”.

Durante el desarrollo de las exposiciones se presentó el tema, “La profesión del economista en la sociedad del futuro” a cargo del Máster Jorge Mattar quien argumentó que, tanto en la enseñanza como en la práctica de la economía se deben incorporar el -análisis de futuros- con otras disciplinas: “especialmente para la concepción, diseño, implementación, seguimiento y evaluación de políticas públicas para el desarrollo”.

Mattar manifestó que, en estos momentos en los cuales el mundo sufre una crisis de salud, surge justamente la necesidad de crear una nueva realidad: “se habla de una nueva normalidad o realidad, como si fuera algo que se nos va ir imponiendo paulatinamente, pero, como bien ya lo dijo Gabino, de lo que se trata es que nosotros incidamos en el futuro y creo que desde la educación superior existe un campo enorme para actuar. Y, en ese sentido, hay una responsabilidad muy importante”.

Agregó que, es importante una revisión o cambio profundo del paradigma dominante de la economía: “Me parece que calza muy bien ese objetivo que tiene la Universidad Nacional de analizar de reformular, de proponer esa construcción de la universidad del futuro”.

Finalmente, Mattar se refirió a la importancia que tiene para la universidad analizar la estructura y la dinámica de la economía en estos momentos, donde la crisis originada por la pandemia (COVID 19) ha cambiado la manera del trabajo entre otros aspectos: “Es importante que la universidad piense en nuevos modelos, porque ya sabemos que en muchos casos el trabajo a distancia llegó para quedarse, por lo que debemos contar nuevas formas de ocio para nuestras familias, que los procesos y los modos de producción se están alterando dramáticamente, y seguramente van a surgir nuevos sectores que antes ni siquiera pensábamos. Entonces, en general todas las disciplinas que se aprenden en una universidad deben anticiparse y seguir esas mega tendencias globales para que se reflejen en los planes de la enseñanza y tener al final de cuentas los mejores estudiantes egresados”.

En cuanto, al tema del futuro de las profesiones, la exposición estuvo a cargo del M.S.c Lucio Mauricio Henao quien puntualizó que la prospectiva es una mirada reflexiva con intencionalidad de actuar: “Es decir, están las miradas introspectivas, donde vemos lo que somos como personas, pero también una mirada del lugar de la región y de la política, la que queremos ver de cómo somos- cómo nos miramos y la otra mirada retrospectiva ¿de dónde venimos quiénes somos, ¿qué hemos hecho para estar aquí, y cómo hemos mirado los fenómenos que hemos vivido?”.

Indicó que, la velocidad del cambio tecnológico en estos momentos permite que la gente cada día que pasa, se preocupe por el futuro de las profesiones: “Ocasionando, además, que se de una preocupación por los recursos hídricos, por la competencia en todos los segmentos del mercado y negocios y sobre todo la gran globalización y confrontación que tenemos alrededor de la incertidumbre iniciada, por la pandemia o procesos planetarios, u por otros”.

En ese sentido, argumentó que la disciplina prospectiva trabaja precisamente en escenarios de futuro, en la forma en que deben converger todas las miradas desde una perspectiva en cuya metodología rescate las señales del presente, pasado y futuro: “Es decir, el futuro es múltiple y lo podemos construir, el pasado es único y no lo podemos cambiar. Se trata de tener conciencia del mundo que estamos construyendo, a través de las imágenes del escenario del futuro, en todos aquellos espacios que se observan de las experiencias propias de cada ser humano”.

Durante la exposición “El futuro de la educación superior y la enseñanza universitaria: educación en un entorno incierto” la expositora: Karelys Abarca argumentó: “la educación superior es el centro de esos cambios y la transformación de diferentes ámbitos requieren el apalancamiento hacia los mercados laborales, cambio climático y energético, migraciones, y los objetivos de desarrollo sostenible (ODS) y riesgos con las desigualdades en la región”.

Abarca, puntualizó en que se trata de un trema transversal en el cual confluyen los avances tecnológicos que han venido generando una ola disruptiva: internet móvil, la tecnología de nube, aumento del poder los procesadores, la big data, las energías alternativas, internet de las cosas, economía, colaborativa, robótica y transporte autónomo, inteligencia artificial, avances en las manufacturas impresión 3D, y en los materiales, biotecnología: “La educación, no está divorciada de los diferentes cambios que van ocurriendo. Sin embargo, estas tendencias están cambiando el mercado laboral haciendo que sea cada vez menos necesarios la presencia de humanos en los procesos industriales”.

Acotó, el efecto que la crisis de la pandemia ha ocasionado que se tenga que robotizar muchos procesos, para que no se paralice la economía: “Lo anterior, porque ya se habla de que vendrá otras crisis, por lo que este tipo de situaciones se van a convertir en una cotidianidad, entonces robotizar o automatizar todos los procesos productivos en áreas estratégicas va a ser fundamental para que no se paralicen las economías”.

Estas situaciones de crisis, indicó la expositora, han permitido que, el teletrabajo se imponga como una realidad y posiblemente, después de que pase la pandemia muchos trabajos se queden en la modalidad a distancia: “ porque le conviene más a las empresas, porque genera menos costos y mayor eficiencia, y en ese sentido la educación e incluso va a dejar en muchos campos de ser presencial, excepto carreras específicas, no obstante, habría que legislar más con respecto a los derechos de los trabajadores en teletrabajo”.

Por tanto, puntualizó la experta habrá una mayor demanda en profesionales expertos en datos y tecnología y la educación online se va a transformar en un hecho común: “repensar la educación desde una plataforma online para generar pensamientos críticos y habilidades blandas”, expresó.

De acuerdo con Abarca, las tendencias educativas deberán ser abiertas a todo el mundo, innovadoras a nivel de los avances tecnológicos, cooperativas y globales, sin ningún tipo de discriminación. También se refirió a una educación tecnológica, transdisciplinaria, flexible de acuerdo con los programas curriculares y de especialización: “Una educación internacional donde se brinden seminarios abiertos con expertos de cualquier parte del mundo y que pueda estar conectada 100% a las necesidades de la empresa, así como el rol del profesor”.

El quinto foro finalizó con la participación del Dr. Freddy Vargas quien expuso el tema, “La Prospectiva: tendencias del mundo y América Latina y su posible importancia para la educación superior”.

Vargas se refirió al contexto mundial actual, como un mundo complejo y sistemático y de aceleraciones múltiples donde el ser humano está siendo revaluado en su roll frente a la realidad existente: “Estas confrontaciones y aceleraciones pueden ser buenas a nivel de formación y trabajo. Como son los grandes avances de las nuevas tecnologías, en el campo social de disrupciones e inequidades múltiples y económicas”.

Insistió en que, el ser humano a través de su historia ha acumulado conocimiento, dinero, entre otras cosas, pero, con la finalidad de entrar al mundo del Poder transformando las realidades que vivimos:

“Esta experiencia humana nos permite revaluar nuestro roll en un mundo donde la cantidad de tecnología y flujos a mediano plazo, dan paso a tener una tecnología que va a ser omnipresente y desafía los conceptos de inclusividad y medio ambiente”, agregó Vargas Lama.

No obstante, se refirió a aspecto positivos que dan esperanza de cara al futuro: “Podemos decir que, las máquinas son buenas, pero los seres humanos somos los únicos que sentimos, existimos y creamos, y precisamente eso es nuestra parte como docentes y de cómo vamos a enfrentar este futuro”, concluyó Vargas Lama.

Durante los días que se llevaron a cabo los foros, se realizaron sesiones de trabajo con unidades académicas, sedes regionales, decanaturas y facultades de la universidad. De esta manera, se brindó espacio a las motivaciones del proyecto: “Análisis Prospectivo de las Carreras y Profesiones del Futuro”, y se expuso por parte de los integrantes del proyecto sobre los aspectos metodológicos, para que las diversas instancias universitarias, lleven a cabo sesiones de reflexión y de diálogo, que permitan visualizar los intereses, prioridades, necesidades y las realidades del contexto, para pensar las carreras y profesiones desde cada ámbito universitario.

A partir de las actividades realizadas, la comunidad universitaria UNA, priorizará en el análisis de la formación académica, bajo la estrategia de la prospectiva, y poder avanzar sobre los nuevos campos de formación profesional en Costa Rica, la identificación de nuevas carreras y profesiones, los ajustes y cambios que se hacen necesarios en carreras actuales y pensar con visión de largo plazo sobre el quehacer académico de la UNA.

Los organizadores del proyecto “Análisis de las Carreras y Profesiones del Futuro”, invitan a un Webinario, que se ha organizado para los días 28 y 29 de abril durante todo el día, en donde se intercambiarán las diferentes recomendaciones, propuestas y visiones de las instancias universitarias, que les toca asumir un rol relevante, para generar el punto de giro que requiere la Universidad en el nuevo contexto nacional e internacional.

 

Información:
maestpps@una.cr
jcmora1971@gmail.com
Tel. 25 62 42 37 – 88 93- 99-50

Por:
Efraín Cavallini Acuña-Académico EPPS-UNA
Daniel Cavallini Espinoza-Académico EPPS-UNA

¿Un ejercicio de política ficción o una pesadilla anunciada? (II)

Rogelio Cedeño Castro, sociólogo y escritor costarricense.

Segunda parte.

“La mitad de los puestos de trabajo del mercado laboral costarricense tiene un alto nivel de riesgo de ser reemplazados por máquinas o computadoras. Se trata de 1,06 millones de empleos de los 2.16 que existen en el país…Existe un conjunto de 20 empleos que concentran a la mayor cantidad de trabajadores actualmente en el país y que además tienen el nivel más elevado de riesgo de mecanización…En la lista se encuentran peones agrícolas y de construcción de edificios, conductores de automóviles y taxis, guardas de seguridad, cocineros y secretarios, entre otros.” Manuel Avendaño Arce “20 OCUPACIONES CORREN EL MAYOR RIESGO DE AUTOMATIZACIÓN Y SON LAS QUE MÁS EMPLEAN” EL FINANCIERO n° 1317 26 de diciembre de 2020 página 6.

En medio de este evento, o fenómeno social total que tensa toda la estructura social, dentro de una escala planetaria, al que conocemos bajo la denominación de Covid 19, hemos pasado por alto la llegada de otro hecho de esas proporciones: la llamada Cuarta Revolución Industrial y su inocente eliminación de aquellos empleos que presentan elevados riesgos de mecanización (Avendaño Arce, dixit), dentro de la que al parecer no son (o serán) eliminadas las gentes sino los empleos, de tal manera que durante las próximas décadas que transcurran hacia la mitad del siglo que corre ya no serán tan “necesarios”(o no lo serán del todo) los peones agrícolas pues en su caso se perderán 100.394 de esos empleos, los de construcción que verán disminuirse sus puestos hasta un total de 70.453 y los conductores de taxis y camionetas, siempre objeto de innumerables polémicas registrarán una disminución de hasta 68.153 plazas o empleos. No es que las élites del poder hayan decidido eliminarlos físicamente (mal pensados que son algunos), nada más lejos de las intenciones de los apóstoles de esta postrera revolución industrial (al parecer tan despiadada como la Primera, ocurrida hacia finales del siglo XVIII y durante las primeras décadas del siglo XIX), como resultado de la cual dejaron morir de hambre a miles de tejedores manuales (K. Marx, dixit).

Entonces ¿qué es lo que nos sucede a las gentes de este cambio de siglo, cuando ya entramos a la tercera década de su transcurrir?, parece que ya nada nos causa asombro, pues según parece todo es tan sencillo e inocuo que: “la automatización no se refiere a implementar Inteligencia Artificial (AI) o robots de última generación, puede ser el uso de computadoras, algoritmos, máquinas o técnicas de MACHINE LEARNING…Existen casos como los de un oficinista o un contador, en los que algunas de sus tareas se pueden reemplazar con algoritmos fórmulas programadas en hojas de Excel. Eso permite abaratar costos a las empresas” (EL FINANCIERO op.cit) Esos miles y millones de seres humanos ya no serán necesarios para las empresas que ahora no bajarán sus costos solamente mediante la evasión y elusión fiscales (son expertos en esas acciones), sino que simplemente ya no requerirán de ellos, al parecer ni siquiera como compradores. Pareciera entonces que el dios Mercado tiene sus días contados ¿cuál será entonces la nueva religión de los sumos sacerdotes y demás cultores del fundamentalismo neoliberal? Mientras tanto el agua, un elemento esencial para la vida humana, empezó a cotizarse en la Bolsa de Wall Street con lo que vivirán entonces sólo los que puedan pagarla, los restantes seres humanos serán declarados como “no existentes” o seres sin una existencia real, por lo que el panlogismo (no el celebérrimo de Hegel) de la nueva centuria será “todo dentro del mercado, nada fuera del mercado”, no importa si este sigue achicándose como resultado de la pérdida de empleos, donde al parecer las máquinas se tornarán consumidoras (extraña ecuación).

La lucha de clases se terminó, de una vez por todas: los ricachones de las finanzas y sus operaciones de bolsa (con el dinero que produce más dinero) derrotaron por knock out al famélico, además de disperso y avergonzado proletariado, pero también al empresariado iluso empeñado en la producción e intercambio de bienes y servicios que casi nadie comprará, por favor gentes tomen nota.

Es así como la obstinada voluntad del grupo hegemónico de las élites del poder en Costa Rica y en otros países de la región, a semejanza de lo que está ocurriendo en el resto del planeta, se mantiene sin cambio alguno a pesar de que sus postulados de reducción del gasto público, eliminación del déficit fiscal mediante la regla fiscal no resistan la menor contrastación con la realidad misma, los componentes y elementos esenciales de la vida social y económica son relegados al olvido, a pesar de que esas políticas nos llevan sin paracaídas hacia el abismo de la más profunda recesión económica. En este punto es casi imposible distinguir entre la ficción y la realidad, la escena ha tomado una nota surrealista, no si al estilo del poeta André Bretón para quien “la belleza será convulsiva o no será” o al del pintor Salvador Dalí, con aquellos extraños cuadros o pinturas que nos dejaron con la boca abierta, ante la visión de aquel reloj doblado a la mitad sobre la orilla de una mesa, como si fuera una hoja de papel y en medio de un montón de objetos, al parecer impregnados de un espíritu del absurdo que presidió los momentos más oscuros del siglo anterior.

Mientras en países como Argentina (los odiados peronistas Fernández, Alberto y Cristina), Bolivia con el regreso al poder del Movimiento al Socialismo al Socialismo (MAS), de Evo Morales Ayma y Luis Arce Catacora (el nuevo presidente de Bolivia), hace un par de meses, después de vencer limpiamente en las urnas a los golpistas que usurparon el poder en noviembre de 2019 y el México de Andrés Manuel López Obrador, se busca reactivar la economía poniendo circulante en manos de las gentes para que el mercado vuelva a funcionar y la economía crezca al aumentar el gasto de los hogares (Primer componente del PIB), otros como Carlos Alvarado, Juan Orlando Hernández, Lenin Moreno (electo con un programa político diferente) y demás alucinados por el encubierto “no mercado” y la nosociedad (Christophe Guilluy, dixit)) se apresuran a retirarlos de las manos de las gentes, mediante impuestos regresivos y una acusada reducción del gasto público (los empresarios y sus cortesanos (presidentes o diputados) no pagarán o dispondrán que se pague la crisis que han generado dilapidando los fondos públicos en gran escala, cosa que no han hecho los trabajadores de ese sector con sus cada vez más reducidos salarios, su agenda es otra: la del ladrón, diciendo a voz en cuello “agarren al ladrón”) que comprende el congelamiento de los salarios de los empleados del sector público, cuya capacidad de protesta y respuesta, tanto como su ingreso y poder de compra, ha sido mermada sensiblemente por una legislación represiva impulsada por el “liberacionista” Carlos Ricardo Benavides y algunos presuntos “cristianos” neopentecostales o neopentecostalistas, unos expertos en negociar con su fe en los templos de los mercaderes (Jesucristo, dixit). Es ahora que se hará evidente ¿cómo? y ¿de qué manera los incautos verán que no tendrán a quién venderle sus productos o los resultados de sus emprendimientos?, su informalidad los llevará a hundirse en el pantano de los seres no vivientes: el paraíso neoliberal y su mortal utopía no tiene ningún lugar para ellos, sigan por esa ruta lo verán…

Formalización del empleo en Costa Rica – Propuestas de política laboral

SURCOS comparte este texto publicado por la Fundación Friedrich Ebert, titulado “FORMALIZACIÓN DEL EMPLEO EN COSTA RICA – Propuestas de política laboral” y cuyo autor es José Carlos Mora Guerrero. En su presentación, se indica:

“La problemática laboral afecta a la mitad de la población trabajadora en la informalidad. Situación que tiene impacto diferenciado en la calidad de vida de los trabajadores y de las trabajadoras.

La informalidad en el empleo incide en grupos sociales y demográficos vulnerables, como es el caso de mujeres, jóvenes, microempresas y personas de bajos ingresos. La transición hacia la formalidad ha sido relegada, pero el incremento de la informalidad provoca que no se pueda seguir ignorando esta realidad.

Las propuestas de políticas buscan disminuir la informalidad en el empleo, fomentar un mercado laboral más inclusivo y que más personas gocen de los derechos”.

Compartimos el documento para descargar en el siguiente enlace:

La informalidad del empleo en Costa Rica. Caracterización y recomendaciones

La Fundación Friedrich Ebert compartió con SURCOS un texto de José Carlos Mora Guerrero que analiza la informalidad del empleo en Costa Rica.

En la presentación se explica:

“Este diagnóstico y análisis del mercado laboral destaca como uno de los principales problemas a la informalidad del empleo, sus implicaciones sociales, las limitaciones de acceso a un empleo digno y la falta de garantías laborales.

La informalidad en el empleo incide en personas consideradas vulnerables y el incremento de la informalidad en los últimos diez años provoca que esta situación sea, en la actualidad, una prioridad para la política.

Las recomendaciones de política buscan disminuir la informalidad en el empleo, así como generar un mercado laboral más inclusivo y permitir que más personas gocen de los derechos que, por ley, les pertenecen”.

Le compartimos el documento en el siguiente enlace donde hay más información sobre la Fundación Friedrich Ebert y su trabajo.

UNA, Costa Rica: Desarrollo Humano y Equidad de Género

Fabiola Quirós Segura*

 

Son muchos los esfuerzos realizados por diversas organizaciones internacionales para dar cuenta de los elementos que componen el progreso de un país de forma multidimensional. En esta oportunidad, se hará referencia al Índice de Desarrollo Humano (IDH) y al Índice de Desigualdad de Género (IDG) para Costa Rica, ambos elaborados por el Programa de Naciones Unidas para el Desarrollo (PNUD).

El IDH es un índice compuesto que estudia el progreso de un país a través de tres dimensiones: el disfrute de una vida larga y saludable, el acceso a la educación y tener una vida digna; por su parte, IDG hace hincapié en la salud reproductiva, el empoderamiento y la participación de las mujeres en el mercado laboral. En este sentido, el enfoque de dichos índices, da cuenta de los desafíos que enfrentan los países para un óptimo desarrollo humano, donde los indicadores económicos se acompañan de indicadores de índole social.

Según el último Informe (2016), de los 188 países que analiza el PNUD, Costa Rica ocupó el puesto 66 en el IDH, catalogándose como un país con “desarrollo humano alto”. Dentro de los datos más relevantes a resaltar, es que la esperanza de vida al nacer es de 79,6 años (hombres: 77,2; mujeres: 82,1), los años esperados de escolaridad rondan los 14,2 (Hombres: 13,8; Mujeres: 14,5), los años promedio de escolaridad los 8,7 (igual entre hombres y mujeres) y, el ingreso nacional bruto (INB) por persona (ajustado a PPA), ronda los 14 mil dólares anuales, monto muy cercano al de Brasil ($14.145), Tailandia ($14.519) y China ($13.345). Con respecto a este último indicador, si se desagrega por sexo, el INB de las mujeres es de S9.995, mientras que el de los hombres es prácticamente el doble: $18.052.

Con respecto al IDG, Costa Rica se ubica en la posición 63. Entre los indicadores más preocupantes de dicho índice está la elevada tasa de natalidad adolescente (56,5 nacimientos por cada mil mujeres de edades entre los 15 y 19 años) y la escasa ocupación de las mujeres en escaños políticos (para el 2014 eran del 33,3%, porcentaje que asciende en las recientes elecciones al 45,6%, cifra histórica más alta). Otro aspecto por resaltar es que, aunque el porcentaje de población con algún tipo de educación secundaria es mayor en las mujeres (mujeres: 54,5%, hombres: 53.8%), la tasa de participación en la fuerza de trabajo de ellas es bastante menor que la de ellos (46,8% vs. 76,6% en el 2015).

Lo anterior resulta preocupante ya que después de tres años, no hemos logrado incrementar la participación de las mujeres en la fuerza de trabajo. Según los datos de la Encuesta Continua de Empleo realizada por el INEC, para el II trimestre de 2018, la tasa de participación laboral de los hombres fue 74,9%, mientras la de las mujeres sigue siendo del 46,8%. Peor aún, aunque la tasa de participación femenina no ha variado en los últimos años, sí lo ha hecho la tasa de desempleo femenina, la cual pasó de un 10,6% a un 12% en el último año. A lo anterior, deben sumársele las manifestaciones de violencia sexual, psicológica y simbólica contra las mujeres que según datos del INAMU se han mantenido constantes en los últimos años, a pesar de las inversiones que ha realizado el Estado con el objetivo de reducirlas.

En síntesis, Costa Rica ha presentado avances en materia de desarrollo humano y en acceso a oportunidades para el desarrollo de una vida digna, que incluso nos acerca a los estándares de países desarrollados; sin embargo, siguen existiendo disparidades en torno al desarrollo económico-social que impactan negativamente a grupos particulares. Es de este modo que, en términos de género, las mujeres siguen siendo uno de los grupos que, aunque presentan características favorables en el acceso a la educación y salud, experimentan dificultades en el acceso al empleo, al salario equitativo y en la ocupación de curules políticas en toma de decisiones.

Por último, después de analizar los datos anteriores y dadas las manifestaciones de violencia contra la mujer que han sacudido al país en lo que llevamos del año, es necesario que el Estado, junto con el sector privado, articulen esfuerzos con miras a reducir la desigualdad de género -en todas sus dimensiones-, lo anterior considerando que se requiere de un esfuerzo país para poder alcanzar este objetivo, más aún, conociendo la situación fiscal que de no resolverse a corto plazo, podría terminar impactando negativamente a los grupos más vulnerables, entre ellos a las mujeres y las niñas.

 

*Observatorio Económico y Social, Escuela de Economía UNA.

 

Imagen con fines ilustrativos.

Enviado por UNA Comunicación.

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UNA: Se dispara desempleo juvenil en el Pacífico Central

Roxana Morales Ramos*

  • Desempleo juvenil llegó al 42,3% en el primer trimestre de 2018, en la región Pacífico Central

 

A partir de los datos de la Encuesta Continua de Empleo del INEC, se pueden analizar diversos indicadores del mercado laboral según región de planificación. A continuación, se presentan algunos resultados al primer trimestre (IT) de 2018, que dan cuenta de las dificultades que enfrentan los jóvenes y las mujeres en el mercado laboral, particularmente en la región Pacífico Central.

  • Desempleo abierto: de las seis regiones del país, la que enfrenta actualmente mayores problemas de desempleo es la Pacífico Central (14%, 4 p.p. más que tres años atrás), seguida por la Brunca, con un 12,4%, y la Chorotega con un 11%.
  • Desempleo por sexo: las mujeres registran mayor desempleo que los hombres en todas las regiones, siendo, precisamente en la Pacífico Central donde hay más problemas: la tasa de desempleo en el IT 2018, entre las mujeres, alcanzó el 20,5% de la fuerza de trabajo, casi el doble de la de los hombres.
  • Perfil educativo de personas desempleadas: a nivel nacional, el 62% de la población desempleada no ha terminado secundaria. En la Región Huetar Norte, ese porcentaje es del 78%, en la Brunca del 69%, en la Huetar Caribe del 68,7%, en la Pacífico Central del 67,7%, en la Chorotega del 62% y en la Central del 57,8%.
  • Subempleo: la región Pacífico Central es la que enfrenta mayor subempleo (13,6% de los ocupados), seguida por la Huetar Norte (14%), Chorotega y Brunca (10,7% c/u), Caribe (7,7%) y Central (5%).
  • Empleo informal: a nivel nacional, en el IT 2018, la informalidad ronda el 41.4% de los ocupados, sin embargo, este indicador sube hasta el 57.4% en la Región Brunca, 51.9% en la Huetar Norte, 48% en la Pacífico Central, 44.7% en la Chorotega, 42.5% en la Huetar Norte y, solamente por debajo de la media se ubica la región Central, con un 37.5%.
  • Desempleo juvenil: entre el primer trimestre de 2015 y el primer trimestre de 2018, de las seis regiones de planificación, solamente en la Central y en la Pacífico Central se incrementó el desempleo entre los jóvenes. En la Central, ascendió del 22,5% al 27,4% (+4,8 p.p.); mientras que, en la Región Pacífico Central, del 25,5% al escandaloso 42,3% (+16,8 p.p.).
  • Desempleados nacidos en otro país: en la región Huetar Norte es donde más participación dentro de los desempleados tienen las personas migrantes (24,9%), seguida por la Central (10,4%), Chorotega (5,9%), Brunca (5,4%), Pacífico Central (5,0%) y Huetar Caribe (4%). El promedio nacional es de 9,8% de participación migrante dentro de los desempleados.
  • Jóvenes que no estudian ni trabajan: a nivel nacional, el porcentaje de jóvenes que no estudian ni trabajan, fue del 21,8%. Por regiones, la Huetar Caribe, es la que presenta mayor porcentaje de jóvenes en esta condición (27,8%), seguido por la Huetar Norte y Chorotega (23% c/u), la Central con 21%, la Brunca con 20,9%, y la Pacífico Central con 18,3%. Las opciones de empleo y de estudios para los jóvenes son menores en zonas rurales y alejadas de la Gran Área Metropolitana, lo que puede estar explicando estas diferencias geográficas.

Los anteriores son solo algunos datos que dan cuenta de las serias dificultades que tiene la población para encontrar empleo, y empleo de calidad, particularmente las mujeres y los jóvenes, siendo en la Región Pacífico Central donde más se ha incrementado este problema en los últimos años. El tema del desempleo y la calidad del empleo debe ser tratado con urgencia, con políticas con enfoque territorial y con perspectiva de género, de lo contrario continuarán acrecentándose las brechas y reduciéndose la calidad de vida de una gran parte de la población.

 

Imagen con fines ilustrativos tomada de Otras Voces en Educación

Enviado por UNA Comunicación.

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“Desenganche” del bueno

Programa Martes Económicos

Greivin Hernández González*

Jeison Rodríguez Flores

 

Los resultados de la última Encuesta Continua de Empleo (ECE) revelaron un cambio positivo en la dinámica del mercado laboral, la economía está generando puestos de trabajo más rápido de lo que crece su producción. En artículos previos habíamos llamado la atención del fenómeno contrario, esto es, una situación en que la producción del país aumentaba, pero a pesar de ello no se generaban empleos, lo cual ocurrió en 2014 y 2015, momentos en que a pesar de que la economía nacional creció en promedio 4,2% cada año, se perdieron 60 764 puestos de trabajo en el bienio. Tal situación no afecta solamente a Costa Rica, es un fenómeno mundial causado en gran parte por el avance tecnológico, y la ausencia de políticas públicas para abordarlo.

La buena noticia es que la ECE muestra que a partir del cuarto trimestre de 2016, las variaciones trimestrales en el número de personas que tienen trabajo pasaron a ser positivas, luego de cinco trimestres consecutivos en que venían cayendo de manera significativa.

La encuesta del Instituto Nacional de Estadística y Censos (INEC), registra además una mejora casi generalizada sino fuese porque el sector construcción perdió empleos. Asimismo, evidencia la recuperación en el sector primario, las actividades de agricultura, silvicultura y pesca finalmente mostraron tasas positivas de generación de empleo, luego de seis trimestres consecutivos en que el número de trabajadores descendió.

El sector primario generó 20 mil empleos más en relación al segundo trimestre del año anterior, y el sector servicios 79 mil. En el segundo caso, transporte, almacenamiento, alojamiento y servicios de comida; comercio; y otras actividades de servicios, generaron: 25 mil, 22 mil y 14 mil empleos, respectivamente. Esto es notable por cuanto en el sector servicios es de los que presentaba de forma más aguda la desvinculación entre crecimiento y empleo, a pesar de su constante crecimiento productivo en los últimos años.

En cuanto al grado de calificación de los empleos generados, el mercado sigue privilegiando la formación en las aulas. Encontraron trabajo 71 195 personas con algún grado de educación universitaria, 26 673 que asistieron a la secundaria y 22 965 con estudios en primaria.

El otro aspecto positivo que se desprende del análisis de los datos de la ECE es la mejora en las condiciones laborales de una parte importante de la población asalariada. La cantidad de trabajadores que reciben menos de un salario mínimo se redujo en relación al segundo semestre del 2016, en aproximadamente 8 600 personas, y quienes están en el rango de uno a dos salarios mínimos aumentó en 11 mil. En cuanto a horas laboradas, se presentó una reducción de las personas que trabajan más de 48 horas (cerca de 43 mil trabajadores), mientras que todas las personas que trabajaban menos de las 48 horas aumentaron el tiempo de trabajo.

Si bien el resultado global es alentador, pues se alcanza la tasa de desempleo más baja de los últimos siete años, 8,5%, aún no se recupera el nivel máximo de personas ocupadas registrado por la ECE en el IV trimestre de 2013, que fue de 2 088 282 trabajadores, y restan cerca de 193 mil personas por encontrar trabajo. Además existen retos en el mercado de laboral que es preciso atender, como el alto grado de informalidad, brechas de género y regionales.

No obstante lo anterior, es destacable que en medio de un crecimiento económico moderado, la mayor parte de actividades económicas estén siendo capaces de absorber más trabajadores de lo que su dinamismo productivo diría, lo cual es esperanzador, dado que muestra que es posible revertir una tendencia que condenaba a miles de costarricenses a las consecuencias negativas de la falta de opciones laborales. Sería deseable que el gobierno y el sector privado estudien a fondo el fenómeno, para promover políticas que fortalezcan la tendencia, dado que un mercado laboral fuerte genera un círculo virtuoso entre demanda impulsada por el consumo privado, crecimiento económico y mayores ingresos fiscales, a propósito de las necesidades que tiene el país actualmente en este último tema.

*Observatorio de la Coyuntura Económica y Social, Escuela de Economía UNA.

 

*Imagen con fines ilustrativos tomada de Masters a.

Enviado por UNA Comunicación.

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UNA: Situación actual de las mujeres en el mercado laboral costarricense

Programa Martes Económicos UNA

*Roxana Morales Ramos

 

Los datos de la Encuesta Continua de Empleo (ECE) del INEC muestran una mejora en varios indicadores para las mujeres en Costa Rica; no obstante, dicha mejora, como se verá, es un resultado solo aparente, es decir, responde a un efecto estadístico y no una mejora real en cantidad y calidad del empleo.

Indicadores que mejoraron en los últimos dos años (IV trimestre 2014 vs. IV trimestre 2016):

  • Cantidad de mujeres ocupadas sin seguro por trabajo (-54.274)
  • La tasa de presión general (-0,9 p.p.)
  • Cantidad de mujeres ocupadas que buscan cambiar de trabajo (-27.368)
  • Cantidad de mujeres con empleo informal (-38.527)
  • Cantidad de mujeres de 45 años y más con empleo informal (-35.782)
  • Cantidad de mujeres jóvenes con empleo informal (-13.840 mujeres)
  • Porcentaje de ocupadas con subempleo (-7,7 p.p.) (-63.911 mujeres)
  • Cantidad de mujeres que trabajan en la informalidad menos de 39 horas semanales (- 54.575)
  • Cantidad de mujeres que trabajan en la informalidad dentro de la propia vivienda o del patrono (-38.667). Relacionado con este resultado está la reducción en la cantidad de mujeres que laboran en el sector “Hogares como empleadores” (-14.787 mujeres).
  • Cantidad de mujeres que trabajan en la informalidad y que reciben mensualmente menos de un salario mínimo (-5.909 mujeres)
  • Otro indicador que pareciera mostrar una mejora, es la brecha de ingresos; muestra una tendencia a reducirse en los últimos trimestres.

¿Y por qué mejoraron estos indicadores?

La respuesta radica en que la población femenina fuera de la fuerza de trabajo aumentó en cerca de 83 mil en los últimos 2 años –en su mayoría mujeres catalogadas como no disponibles del todo para trabajar (+78 mil) o disponibles con limitaciones (+24 mil) –, es decir, las mujeres se están saliendo del mercado laboral y como resultado la tasa neta de participación se ha reducido.

Al desagregar los datos encontramos que las que se salieron del mercado en su mayoría son de la Región Central del país, jóvenes, mayores de 60 años (de las mujeres que se han salido del mercado laboral, el 64% se encuentra en este grupo de edad) y, con secundaria incompleta o menos.

Indicadores que empeoraron en los últimos dos años:

  • Tasa neta de participación (-2,7 p.p.)
  • Cantidad de ocupadas (-36.095).
  • Cantidad de ocupadas en edades de 15 a 24 años (-23.879)
  • Cantidad de ocupadas en edades de 45 a 59 años (-25.339)
  • Cantidad de desempleadas (+14.814)
  • Tasa de desempleo abierto entre las mujeres (+2 p.p.)
  • Mujeres con título universitario fuera de la fuerza de trabajo (+10 mil)

¿Y por qué se reduce la brecha de ingresos entre hombres y mujeres?

El ingreso promedio de las mujeres en la ocupación principal aumentó un 12,9% en los últimos dos años y entre los hombres solo un 3%; dando como resultado que la brecha de ingresos entre hombres y mujeres se redujera significativamente, pasando de 13,9% en el IV trimestre de 2014 a 6,9% en el mismo trimestre de 2016. Este resultado se explica por la salida de mujeres del mercado laboral que ostentaban bajos niveles de ingresos, lo que hace que el promedio nacional de ingresos aumente. En otras palabras, esto no significa que el ingreso entre las mujeres aumentó, sino que el promedio de ingresos creció al haber menos mujeres con empleo informal y con ocupaciones de bajos ingresos laborando (menos mujeres en condición de subempleo).

En fin, la mejora en varios indicadores de empleo para las mujeres, en los últimos dos años, no obedece a una mayor cantidad de ocupadas ni a mejores condiciones laborales para ellas. Lamentablemente, los mejores números responden a la salida de mujeres del mercado laboral. En otras palabras, la mejora en los indicadores es solo “aparente”. Es importante que el gobierno le de seguimiento a esta situación, ya que la autonomía económica de las mujeres es fundamental para reducir las brechas y desigualdades de género, y si las mujeres se están saliendo del mercado laboral, significa que las políticas públicas impulsadas no están teniendo el efecto deseado.

¿Y por qué se están saliendo las mujeres del mercado laboral?

Lo que plantearé a continuación son solo algunas hipótesis que me surgen al analizar la información de la ECE. Dichas hipótesis tendrían que ser validadas a través de encuestas y otros medios.

  1. a) Mujeres se están saliendo del mercado laboral porque los ingresos que perciben no son suficientes para cubrir el costo del cuidado de sus hijos.
  2. b) Mujeres se salen del mercado laboral por obligaciones familiares: cuido de menores de edad, adultos mayores, personas con discapacidad, etc. Cada vez el grupo de adultos mayores gana una mayor importancia relativa con respecto a los demás grupos de edad: envejecimiento de la población.
  3. c) Las familias se han endeudado mucho en los últimos años, por lo que se hace más difícil contar con suficientes recursos para contratar trabajadoras domésticas y, por ello, se ha reducido la cantidad de opciones de empleo en este sector.
  4. d) Aunado a lo anterior, los mayores controles del Estado para garantizar los derechos laborales de las trabajadoras domésticas podrían haber provocado que muchas familias dejen de contratar estos servicios debido a los mayores costos económicos.
  5. e) Muchas mujeres que se dedican a labores domésticas remuneradas cuentan con bajos niveles de escolaridad por lo que se les dificulta encontrar empleo en otras actividades y terminan abandonando el mercado de trabajo.
  6. f) El proceso de envejecimiento de la población hace que cada vez más mujeres se retiren del mercado laboral. Los datos sí evidencian esta situación.

*Observatorio de la Coyuntura Económica y Social, Escuela de Economía UNA.

 

Imagen con fines ilustrativos tomada de http://www.dinero.com

Enviado a SURCOS por Oficina de Comunicación UNA.

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UCR: Convenio permitirá a estudiantes de Marina Civil trabajar en cualquier parte del mundo

Convenio permitira a estudiantes de Marina Civil
Ante el faltante de 20 mil capitanes y oficiales en embarcaciones navales en todo el planeta, los alumnos de esta carrera tienen un promisorio futuro laboral dentro y fuera del país. Foto: Pablo Mora / Rectoría UCR.

Un trabajo seguro dentro o fuera del país, la posibilidad de laborar en cualquier buque del mundo – sin importar su país de origen -, y una certificación que valida sus conocimientos en todo el orbe, son algunos de los beneficios que obtendrán los estudiantes de Licenciatura en Marina Civil, que la Universidad de Costa Rica (UCR) imparte en la Sede del Caribe, tras la aprobación del Convenio STCW (Convenio internacional para la formación, titulación y guardia para la gente de mar, por sus siglas en inglés), por parte de los diputados en la Asamblea Legislativa, el 9 de enero.

Hasta ahora, los estudiantes de Marina Civil solo podían trabajar en embarcaciones de bandera nacional, pero una vez aplicado el convenio, se insertarán en uno de los mejores mercados laborales de la actualidad. Por el momento, tres estudiantes fueron contratados durante tres meses el año pasado para el trabajo de dragas en la construcción de la nueva Terminal de Contenedores de Moín. La empresa que firmó a estos jóvenes fue la holandesa Van Oord, líder en el mundo para este tipo de trabajos, que tiene a su haber la isla artificial de Dubai (famosa por su forma de palmera) y la ampliación del Canal de Suez.

Según el coordinador de la Licenciatura de Marina Civil, Dr. José María Silos, en el mundo existen al menos 20 mil plazas vacantes para capitanes y oficiales en embarcaciones, suficientes para que los 113 estudiantes que se encuentran cursando esta carrera no tengan problema alguno en vincularse al mercado laboral.

“La aprobación de este convenio es un cambio radical para la carrera, porque viene a regular las competencias mínimas que se requieren para trabajar en cualquier parte del mundo”, explicó el Dr. Silos, quien también fue profesor asociado de la Universidad de Cádiz (España), institución que facilitó la malla curricular inicial a la UCR para esta opción académica, aunque después se completó con las exigencias de las Escuelas de Ingeniería de la UCR, para que esta tuviera la categoría de Ingeniería.

Esta carrera tiene tres énfasis en los que se podrán desempeñar sus estudiantes: el primero es Ingeniería Náutica y Transporte Marítimo, que forma capitanes y oficiales de navegación para todo tipo de buques, navegación y bandera. Estos profesionales tienen por misión dirigir las embarcaciones y velar por su seguridad; la planificación y la seguridad de la carga y descarga de mercancías y el cumplimiento de normas nacionales e internacionales. También pueden convertirse en capitanes de puerto, inspectores de buques y otras ramificaciones.

El segundo énfasis, Ingeniería Marina, forma jefes y oficiales de máquinas para todo tipo de buques de cualquier bandera y navegación, quienes se encargarán de la operación y mantenimiento de todos los sistemas necesarios para que el navío opere de forma correcta.

Ingeniería Radioelectrónica es la tercera opción y tiene por fin la formación de oficiales radioelectrónicos, que son quienes se encargan de todos los equipos electrónicos del buque. Según el Convenio STCW, es obligatorio que existan este tipo de expertos a bordo de todas las embarcaciones del mundo, aunque también pueden trabajar en astilleros en construcción, reparación de buques, inspectores radioelectrónicos e instaladores de equipos de comunicaciones.

El director de la Sede del Caribe, Lic. Ricardo Wing, aseguró que este convenio le abre una gran cantidad de oportunidades laborales a la juventud limonense, en momentos en que el puerto de la firma APM Terminals está a 11 meses de iniciar las operaciones de la nueva Terminal de Contenedores de Moín.

“APM Terminals necesita personal para realizar trabajos propios del puerto. Svitzer América admitió como cadetes a 12 de nuestros estudiantes del último año de carrera. Además, la firma Svitzer necesita personal para trabajos como el remolque de buques para diferentes proyectos en el mundo. En total, APM Terminals maneja como 60 puertos en todo el planeta. Eso ofrece una amplia gama de posibilidades a nuestros alumnos”, aseveró el director de la Sede del Caribe.

Cabe destacar que, con la aprobación de este tratado, no solo los estudiantes de la UCR serán beneficiados, sino también aquellos que se forman en el Centro Náutico Pesquero del Instituto Nacional de Aprendizaje en Puntarenas, o incluso los guardacostas instruidos en la Academia Nacional de Guardacostas.

 

Pablo Mora Vargas

Periodista, Rectoría UCR.

 

Enviado a SURCOS por Lic. Otto Salas Murillo, Periodista Oficina de Divulgación e Información, UCR.

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