El festival de las bolas de barro, celebrado el domingo 11 de agosto, fue un evento diseñado para promover la conciencia y el compromiso en la comunidad hacia la protección de los cuerpos de agua. Durante el festival, se utilizó la biorremediación mediante esferas de barro tratadas con microorganismos efectivos (EM) con el objetivo de reducir la contaminación en ríos y lagunas.
Las actividades del evento incluyeron lanzar las bolas de barro al río, un conversatorio entre los participantes para intercambiar experiencias, un picnic compartido y presentaciones de bailes folclóricos a cargo del grupo estudiantil del Colegio Santa María.
El punto de encuentro fue en la terminal de buses de Salitrillos arriba, y el evento fue organizado por el Observatorio Ciudadano del Agua Río Cañas, junto con la participación de la comunidad y el colegio.
Presa de riego de Del Monte ubicada en el rio Volcán.
El 1ero de junio se celebró en Longo Mai de Volcán de Buenos Aires la octava edición de la Fiesta del Agua. Organizada entre otros por la Comisión Defensora de los Ríos Sonador y Convento, Movimiento Ríos Vivos y Programa Kioscos Socioambientales de la Universidad de Costa Rica, este Festival anual conmemora el triunfo de las comunidades organizadas de la zona Sur en su lucha para detener la construcción de 17 proyectos hidroeléctricos privados, además del Diquís, propuestos para ríos ubicados en los cantones de Pérez Zeledón, Buenos Aires y Coto Brus entre los años 2013 y 2019.
Los representantes de las comunidades que detuvieron la construcción de dichas represas estuvieron acompañados por lideres y lideresas de movimientos que actualmente enfrentan retos importantes, como la Alianza de Comunidades por la Defensa del Agua de Guacimal, Chomes y Manzanillo de Puntarenas, luchando contra quebradores que extraen material del río Guacimal y otros, y amenazan las fuentes de acueductos locales. Así mismo, las compañeras del Frente Ecologista de Cipreses (Eco-Cipreses), quienes lograron presionar al gobierno con una campaña nacional e internacional para prohibir el fungicida clorotalonil que contaminó las nacientes y acueductos de Cipreses y Santa Rosa de Oreamuno de Cartago. También estuvieron representantes del Frente Nacional de Lucha, una alianza integrada por más de 60 organizaciones de diversos sectores de la sociedad, preocupados por el rápido avance de las políticas neoliberales que han venido a deteriorar los servicios de instituciones que son parte del estado social solidario costarricense (CCSS, ICE, AyA, BCR, INA, MINAE, etc.).
Al calor de la celebración, y con un poco de duda y temor, algunos participantes nos preguntábamos si las actuales organizaciones ecologistas, grupos comunales y las nuevas generaciones de activistas, estábamos preparados para enfrentar las graves amenazas que se avecinan, como el proyecto de Ley de Armonización del Sistema Eléctrico Nacional (expediente legislativo N° 23.414) que se discute actualmente en la Asamblea Legislativa. Este proyecto, priorizado recientemente por la administración Chaves, propone modernizar la legislación del sistema eléctrico nacional: abriendo a la competencia los mercados de generación y distribución eléctrica; trasladando la rectoría del sector eléctrico del Instituto Costarricense de Electricidad (ICE) al Ministerio de Ambiente y Energía (MINAE); y creando un mercado mayorista, donde empresas generadoras de energía, distribuidoras eléctricas y consumidores podrían comprar y vender electricidad mediante el mecanismo de subasta.
Concretamente el temor de los activistas congregados en la Fiesta del Agua es que, además de facilitar el avance hacia la privatización del ICE y la desintegración del modelo eléctrico solidario costarricenses, la aprobación de este proyecto de ley podría generar una nueva ola de proyectos hidroeléctricos en los ríos de la zona Sur. Los cuales, a pesar de estar cada día más debilitados por la intensa extracción para riego de plantaciones de piña en los meses secos y del cambio climático acelerado, todavía serían capaces, aunque por un corto tiempo, de generar energía en los meses lluviosos, a precios atractivos, para exportar a países de la región centroamericana.
Más tarde compartiendo un delicioso café con veteranos de las luchas y reflexionando sobre las acciones que llevaron al Movimiento Ríos Vivos y las comisiones de defensa organizadas en más de 20 comunidades, al triunfo que hoy celebramos, llegamos a la conclusión de que: la memoria colectiva de luchas pasada —que conmemoramos cada año en la Fiesta del Agua– es nuestra mejor vacuna contra los ambiciosos desarrolladores que vendrían a construir nuevas represas para enriquecerse con el agua de nuestros ríos.
Al igual que el sistema inmune, que produce linfocitos (células sanguíneas) dotados de memoria después de exponerse por primera vez a un patógeno (antígeno) introducido al cuerpo durante una infección o mediante una vacuna, los veteranos de las luchas por la protección de los ríos cuentan con la memoria necesaria para responder más rápida, eficaz, y contundentemente la próxima vez que un desarrollador amenace con construir un nuevo proyecto hidroeléctrico en nuestros ríos.
Para resurgir, para recomenzar, para retomar el camino de la lucha por nuestros ríos y nuestras instituciones públicas, el mensaje de la celebración de la Fiesta del Agua es que debemos volver siempre al encuentro con nuestros colegas, con los compañeros y las compañeras que nos ayudan a invocar la memoria viva, concreta y palpitante de las primeras luchas. Una vez más … una dosis de refuerzo que fortalece nuestra inmunidad para enfrentar los retos que nos trae el día de hoy.
En el marco de la Fiesta del Agua, llevada a cabo el pasado 1 de junio en la comunidad Longo Mai, comunidades y organizaciones se encontraron con urgencia frente a múltiples proyectos que han venido privatizando el agua y los ríos del país, donde estos están generando una contaminación sobre la biodiversidad por medio de agroquímicos, como la destrucción por medio de los quebradores en los cauces de los ríos y proyectos hidroeléctricos, los cuales están poniendo en riesgo no solo el acceso al agua potable, sino que también están provocando una disminución en el caudal de los ríos.
Estas comunidades y organizaciones seguirán en la lucha por la prohibición del clorotalonil, el frente contra las represas hidroeléctricas y la intervención del código de minería.
Estas organizaciones hacen un llamado a la población a desarrollar grupos para la defensa del agua para la vida.
Este 1° de junio del 2024 representantes de organizaciones: Frente Ecocipreses, Ríos Vivos y Alianza de Comunidades por la Defensa del Agua, nos hemos reunido con preocupación y urgencia, frente a las múltiples formas en las que gobiernos neoliberales en alianza con corporaciones, han venido privatizando los ríos del país.
Nos queremos pronunciar con indignación contra la contaminación del agua con agroquímicos, los quebradores en los cauces de los ríos, proyectos de riego para monocultivos y proyectos hidroeléctricos. Todos esos proyectos mal llamados de desarrollo, han saqueado por años nuestros territorios y ponen en riesgo el acceso al agua para consumo humano, no solo por su calidad sino porque han provocado disminución de los caudales.
Queremos señalar que las comunidades aquí representadas, seguiremos luchando y construyendo propuestas para la defensa de nuestros territorios. Estaremos vigilantes de las formas en las que operan las instituciones estatales y las políticas públicas que se crean. Además, como organizaciones comunitarias, nos comprometemos a:
– Vigilar que se consolide la prohibición del clorotalonil en el país.
– Seguiremos construyendo las vías para qué se intervenga el código de minería.
– Oponernos al proyecto de ley del armonización del sistema eléctrico nacional.
– apoyamos a la comunidad indígena Rey Curré en su iniciativa para desarrollar una ley o normativa forestal de aplicación en su territorio bajo el principio de autonomía de los pueblos indígenas.
Invitamos a las personas, organizaciones y comunidades, a que se organicen en la defensa del agua para la vida.
#aguaparalavida #rioslibres
Nota:
Este comunicado se emitió durante la Fiesta del Agua en Longo Mai, Buenos Aires, una celebración anual que incluye talleres, charlas, actividades para niños, una feria agroecológica y música. Este evento contó con el apoyo de los Kioscos Socioambientales de la Universidad de Costa Rica, la Vicerrectoría de Acción Social, el TCU-590 de Kioscos Socioambientales, Caravanas por la Defensa de la Vida y la Alianza de Comunidades por la Defensa del Agua en Puntarenas.
Este martes 7 de mayo a las 4:00 pm, hora de Centroamérica, se realizará un foro virtual de la mano de referentes regionales de la lucha por la defensa de los ríos.
Contaremos con la presencia de Gustavo Castro, de Otros Mundos; Juan Pablo Soler, de Comunidades SETAA-MAR y con Ana Laura Rojas, quien es defensora de los derechos humanos en Guatemala y comunicadora social, además, es parte de la Coordinadora de Comunidades Afectadas por la Empresa TRECSA.
Esta organización ha sido víctima de múltiples agresiones por parte de personas vinculadas a TRECSA.
En esta ocasión modera Dylanna Rodríguez, de Kioscos Socio-Ambientales.
Puede inscribirse al foro en solidaridad con Ana Laura en el enlace siguiente:
Participantes: Claudia Ortiz Gerena del Movimiento Ríos Colombia, Damaris Sánchez Samudio de la Red Nacional en Defensa del Agua de Panamá y Luis Monge Arrieta Movimiento de Ríos Vivos Costa Rica.
Fecha: viernes 1 de marzo 2024
Hora: 5:00pm
Lugar: Hotel Zima, San Isidro, Pérez Zeledón.
Se tendrá refrigerio.
Invita: Movimiento Ríos Vivos Costa Rica.
El porqué de este foro
Año 2020, logramos archivar el Proyecto Hidroeléctrico San Rafael, último de los 17 proyectos hidroeléctricos que se tenían proyectados construir en los ríos de la cuenca del Térraba, ubicados en los cantones de Coto Brus, Buenos Aires y Pérez Zeledón, en la zona sur de Costa Rica. Esto fue posible, porque desmostramos que esos proyectos favorecían a grupos empresariales y no eran motivados por una necesidad real de demanda de generación eléctrica en el país. Así por ejemplo, 10 de esos 17 proyectos hidroeléctricos que se plantearon, eran impulsados por la mega empresa constructora H. Solís, misma que estuvo envuelta en el escándalo de corrupción nacional, conocido como el «Caso Cochinilla». Pretendían lucrar con el agua de nuestros ríos y despojarnos de ese gran tesoro que pertenece a las comunidades.
A pesar de haber logrado detener esas amenazas para nuestros ríos y comunidades, en Costa Rica se han planteado varias iniciativas de proyecto y de propuestas gubernamentales para abrir las puertas a una mayor privatización de la generación eléctrica en el país y para ampliar la apertura de la distribución y generación del mercado eléctrico nacional, lo cual podría significar a futuro, que las amenazas de proyectos hidroeléctricos regresen a nuestros ríos. Procesos y discusiones parecidas ya han ocurrido en otros países de la región, en donde proyectos eléctricos se han instalado y expandido a costa de comunidades y ecosistemas, debido entre otras razones, a modelos basados en mercados privados o en la privatización de la generación eléctrica.
Por esta razón, les invitamos a participar de este foro, en donde conversaremos con dos compañeras admirables defensoras de los ríos de Colombia y Panamá, sobre las experiencias que hemos tenido como países de la región latinoamericana en torno al tema de generación eléctrica y los procesos de privatización, que afectan a nuestras comunidades y los invaluables ecosistemas.
¡Le esperamos! ¡Ríos para la vida!
Para más información del Movimiento Ríos Vivos Costa Rica, pueden seguir la página en Facebook Movimiento Ríos Vivos Costa Rica.
Esta serie es un llamado a la acción y la reflexión, pero también, un material educativo relacionado con las experiencias de los territorios y sus luchas.
Una producción de Canal Quince UCR y el Programa Kioscos Socioambientales.
Representantes de organizaciones y comunidades de Costa Rica, reunidas el 26 de agosto 2023, para dialogar sobre el futuro del sistema eléctrico del país, MANIFESTAMOS:
Los ríos son ecosistemas integrales que incluyen el agua y todas las expresiones de vida presentes en ella, pero además todos los elementos que conviven en las cuencas hidrográficas. Los ríos deben ser reconocidos jurídicamente como sujetos con derechos propios para asegurar su existencia y su uso regulado, respetuoso y limitado, según necesidades ecosistémicas y sociales colectivas y solidarias. En esta tarea Costa Rica debe aprender de los avances de otros países orientados a ese reconocimiento.
Los usos prioritarios del agua y otros elementos de la biodiversidad deben ser definidos colectivamente y la protección de los ecosistemas debe ser el primero, seguido del agua para consumo humano, la soberanía alimentaria y posteriormente los fines comerciales y energéticos, regulados y limitados de acuerdo con estudios científicos de calidad y disponibilidad. En estas definiciones es indispensable reconocer el papel fundamental de las mujeres y de los Pueblos originarios de todo el mundo en el uso y protección del agua, lo mismo que las innumerables dificultades para asegurar el acceso a ésta. En esta misma línea rechazamos la negociación de futuros del agua en la bolsa de New York bajo el código “Agua-NQH2O” y cualquier otra vía de privatización y exclusión de la gente más pobre.
Nos solidarizamos con los pueblos en México, Chile, Perú y otros países, que mantienen cruentas y desiguales luchas en defensa del agua por su explotación comercial en aguacate y arándanos, que sumados a otros monocultivos han secado y desparecido los ríos y dejado sin agua a pueblos enteros.
Las comunidades y organizaciones sociales exigimos espacios efectivos de participación en la definición de las políticas energéticas y eléctricas, pues hasta ahora esas definiciones han sido exclusivas de instancias técnicas y políticas con exclusión total de los pueblos impactados negativamente. Reiteramos que todos los proyectos, sin importar su tamaño y condiciones, deben ser efectivamente consultados con las comunidades en las cuales se pretenden instalar, y que los criterios de éstas deben ser respetados.
El consumo de la energía indispensable para tener mejor calidad de vida, debe ser un derecho fundamental de los pueblos a precio justo y bajo principios de solidaridad, y esto demanda reconocer la incompatibilidad entre energía como derecho de la gente y energía como mercancía. Costa Rica debe enfilarse hacia su seguridad y soberanía energéticas asegurando el uso responsable de todos los ecosistemas. Esto demanda, de manea indispensable, incorporar en todos los proyectos el principio “indubio pro-natura” presente en la Ley de biodiversidad y convenios internacionales firmados por Costa Rica.
Nos solidarizamos y unimos a la lucha del Grupo ecologista León Cortés, la Asociación PROAL, ASADAS, Asociaciones de desarrollo y muchas más organizaciones de la zona Los Santos, para que el alcalde y el Consejo municipal, obedezcan a la población y aprueben “declarar León Cortés permanentemente libre de co-incineración de residuos sólidos y prohibir la instalación y contratación de cualquier servicio asociado con la co-incineración”.
Con la mayor vehemencia, instamos a los y las diputadas a impedir los gravísimos impactos sociales y ecológicos que tendrían en el país los proyectos de ley expedientes #23.414 “Armonización del sistema eléctrico nacional”, #22.701 “Ley de fortalecimiento en la venta y exportación de electricidad a asociaciones cooperativas, empresas distribuidoras y de servicios públicos” y #22.561 “Ley para la autorización a los generadores de electricidad para la venta de excedentes de energía en el mercado eléctrico regional”. En el debate de este último expediente hemos seguido con extrema preocupación la falta de argumentación técnica, social y ecológica con que está siendo defendido. Por esto le exigimos a los y las diputadas, estudiar, consultar, asumir responsabilidad e impedir su aprobación porque debilitan de forma irreversible el sistema público de electricidad, su condición como derecho de la gente y lo convierten en un sistema de lucho privado. En paralelo, y como lo hemos reiterado por más de 30 años, exigimos la derogatoria de leyes 7.200 y 7.508 porque siguen siendo un deleznable medio de lucro para un grupo de empresas privadas nacionales y transnacionales.
Nos comprometemos a fortalecer la unión de organizaciones sociales del país integrantes de la “Coalición por la defensa del modelo eléctrico solidario para Costa Rica”, que bajo la consigna “Electricidad justa y solidaria para Costa Rica”, está orientada a la defensa del servicio social, público y solidario de electricidad que sólo ha sido posible por la existencia del Instituto costarricense de electricidad, ICE. En la tarea de resguardar de nuestra institucionalidad, nos sumamos al “Frente nacional en defensa del estado de bienestar costarricense”, para salvar nuestro sistema de salud y en particular la Caja costarricense de seguro social, la educación, la seguridad y soberanía alimentarias y las garantías laborales, que siguen sufriendo los embates del modelo de sociedad antisolidario y orientado a favorecer fines privados.
Instamos al gobierno de Costa Rica, instituciones, empresas y a la población en general, a asumir con respeto irrestricto, la existencia y derechos reconocidos nacional e internacionalmente de los Pueblos originarios, y en particular su derecho a la Tierra que les ha sido usurpada, y sus formas propias de organización y autogobierno según las leyes vigentes. En particular, rechazamos el eventual relanzamiento de la hidroeléctrica Diquís (646 megavatios), incluido en el plan de expansión eléctrico del actual gobierno.
El 22 de julio se celebra el Día Mundial Contra la Minería a Cielo Abierto, para concienciar a la población y a las naciones del mundo acerca de los efectos nocivos de esta actividad, conocida igualmente como megaminería, en el medio ambiente, el ecosistema y la salud de las personas.
Con la celebración de esta efeméride se pretende divulgar información acerca del impacto de esta práctica altamente contaminante, que afecta la biodiversidad del planeta, la calidad de vida de las personas y la vulneración de sus derechos humanos.
Nosotros somos testigos de que esa actividad es terrible para la naturaleza y nos hemos dado cuenta de las circunstancias que se han vivido en Crucitas por una actividad, primero intensa en cuanto a destrucción del bosque y de las fuentes de alimentos de muchísimas especies de animales. Luego el daño a la salud de cientos de personas que laboraban o vivían en las cercanías de donde se estaba llevando a cabo la depredación.
Ha sido muy lamentable lo que ha sucedido en esa zona de Crucitas, ahora con un manejo intenso y desordenado y con una gran afectación de humedales y de ríos en cuanto a contaminación. Un daño irreparable que muchos llamados “ambientalistas” hoy no se preocupan por hacer algo en beneficio de la naturaleza y de la población.
Algunos de los daños ocasionados en esa zona son:
Daños permanentes a las superficies naturales y ecosistemas.
Contaminación del agua de suelos y subsuelos.
Deforestación indiscriminada de capas boscosas y áreas verdes.
El uso de sustancias químicas aplicadas al proceso de megaminería genera daños en la flora y fauna de las superficies naturales intervenidas.
Lo peor de todo esto es que a pesar de tanta explotación que se dio en esa zona primero por una empresa y luego por los llamados “coligalleros”, Costa Rica no ha recibido ni media onza del oro extraído y ahora hay que soportar el desastre natural ocasionado.
Dios quiera que tomemos conciencia de lo dañino de esta actividad y que si en algún momento se desea aprovechar el recurso mineral que existe en la zona se haga apegados a acciones amigables con la naturaleza y que no cause tanto daño que ahora sabemos son irreparables, desgraciadamente.
Participamos en el Encuentro contra Quebradores (30 junio y 1 julio del 2023 en Chomes, Puntarenas) organizado por la Alianza de Comunidades por la Defensa del Agua, el TCU 590 Defensa comunitaria del territorio: extractivismos, organización y conflictos socioambientales y el Programa Kioscos Socioambientales, donde participaron personas de organizaciones provenientes de Judas de Chomes, Guacimal, Buenos Aires y Maquengal. En este espacio se reflexionó sobre las implicaciones que tienen los Quebradores en la vida comunitaria sus tensiones y desafíos para el sostenimiento de esos tejidos de vida que son los ríos en nuestros territorios. Por esta razón, aprovechamos y conversamos con las personas participantes para compartir sus inquietudes y reflexiones.