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Etiqueta: UNAH

Audiencia: “Justicia para Keyla”

SURCOS comparte la siguiente información:

El pasado 6 de febrero de 2021 Keyla Patricia Martínez (26), una joven estudiante de Licenciatura en Enfermería de la Universidad Nacional Autónoma de Honduras (UNAH), originaria de La Esperanza, Intibucá, fue detenida. Horas más tarde mientras ella permanecía bajo custodia en celda en La Esperanza, fue vil y cobardemente asesinada a manos de policías asignados esa esa delegación, llevado su cuerpo en la madrugada del día siguiente al Hospital de La Esperanza, DONDE SE DICTAMINA QUE SU CUERPO PRESENTA 30 MINUTOS DE FALLECIDA. Después de este vil feminicidio han sucedido muchas irregularidades contra su familia, comunidad y organizaciones de Derechos Humanos nacionales e internacionales articuladas en el proceso de búsqueda de justicia.

Hasta el momento solo el policía Jarol Rolando Perdomo está detenido con un proceso judicial ambiguo, acusado de femicidio agravado, a pesar de que, suficientes pruebas e indicios demuestran que participaron más policías concretos que se encontraban en ese momento preciso en su jornada laboral, quienes hasta este momento no han sido puestos a la orden de la justicia.

El colectivo Solidaridad con el Pueblo de Honduras se suma a la lucha y solicita al Gobierno de Honduras que hagan valer la ley, que las líneas de investigación sean claras y coherentes, se demuestre que la joven Keyla fue víctima de un FEMINICIDIO TIPIFICADO DESDE EL PROTOCOLO ESTABLECIDO.

Adjuntamos documento oficial del comunicado:

Denuncia Internacional: Nos unimos a familiares y comunidades de La Esperanza en Intibucá para exigir justicia frente a la muerte de joven enfermera, estudiante de la UNAH, Keyla Patricia Martínez Rodríguez

Información compartida con SURCOS por la Asociación Costarricense de Derechos Humanos (ACODEHU).

Varias instituciones y organizaciones han levantado una denuncia contra el Estado Hondureño, responsabilizando a este por la muerte de Keyla Patricia Martínez Rodríguez, joven de 26 años, estudiante de enfermería de la Universidad Nacional Autónoma de Honduras (UNAH), quien el pasado 6 de febrero del 2021 fue detenida por la Policía Nacional de Honduras, junto a otros doctores en la ciudad de La Esperanza, bajo el supuesto de infringir y violentar el toque de queda (PCM 26-021).

La denuncia se fundamenta en base a que los hechos en la forma en la que murió la joven no son claros, pues esta fue encontrada sin vida en las celdas de la Policía Nacional, alegando a un supuesto suicidio. Se responsabiliza al estado hondureño, por su incompetencia para garantizar la protección de la vida y de los derechos humanos.

Además, se manifiesta la preocupación de que esta muerte se da en el marco de la suspensión de garantías constitucionales decretado bajo el PCM 012-2021, mecanismo que está incrementando las sistemáticas acciones violatorios a los Derechos Humanos por parte de las fuerzas represoras del Estado Hondureño, mismo que agudiza el miedo y el estado de indefensión en tiempos de pandemia por el Covid-19 y en todos los contextos.

Por lo tanto, se exige al Ministerio Público una investigación exhaustiva en la mayor brevedad que puede dar claridad sobre la situación y los responsables de la muerte de Keyla Martínez, a su vez se extiende un abrazo solidario y sororo para familiares y amigos de parte de organizaciones sociales y colectivos de honduras, tales como: Asamblea de Mujeres Luchadoras de Honduras, Campesinas Lencas, Escuela de Enfermería UNAH, Red Nacional Defensoría de Derechos Humanos en Honduras.

Otra de las demandas es que la familia de Martínez tenga el derecho y potestad para acceder a todos los documentos oficiales y no oficiales pertinentes a este feminicidio, porque cada mujer asesinada le concierne a todo el pueblo.

Por último, se realizan 2 convocatorias una frente a la comandancia de la Policía Nacional de Honduras a las 9:00am, y la otra en las afueras de la Facultad de Ciencias Médicas de la UNAH a las 10:00am, con el objetivo de exigir una investigación detallada y exhaustiva por el femicidio de Keyla Martínez.

#JusticiaparaKeyla #Niunfemicidiomás, ¡la policía no cuida, viola y asesina!, ¡Policía Nacional, ustedes son el mal! fueron algunos de los hashtags y consignas que se expresaron en reclamo por justicia ante este lamentable suceso.

Adjuntamos algunos documentos y comunicados de organizaciones y colectivos con respecto al tema:

Justicia para Cesario Padilla, Moisés Cáceres y Sergio Ulloa. Tres jóvenes defensores de la Educación Pública y Derechos Humanos

DENUNCIA CONJUNTA A NIVEL NACIONAL

8 de septiembre, 2020 / San José, Costa Rica

Consideramos, de suma urgencia, pronunciarnos ante el mundo sobre nuestro total repudio a la condena judicial que recae sobre tres ex líderes estudiantiles de la Universidad Nacional Autónoma de Honduras (UNAH), por representar una flagrante violación a los Derechos Humanos de la población hondureña y una escalonada en el detrimento de la ya golpeada democracia de este país. Ante esta situación, manifestamos:

  1. Sobre el contexto político de Honduras

El 28 de junio del 2009, la derecha hondureña, orquestada por el Partido Nacional en complicidad con las élites económicas, el Ejército, el Tribunal Supremo Electoral, el Congreso Nacional y el crimen organizado, rompieron el orden constitucional y democrático hondureño al ejecutar un golpe de estado para instaurar, desde ese momento a la actualidad, una narco dictadura que se ha caracterizado por escandalosos actos de corrupción, fraudes electorales, narcotráfico, lavado de dinero, procesos de criminalización, desapariciones y asesinatos contra activistas de derechos humanos y la población en general.

Durante estos once años de dictadura se han incrementado todos los índices referentes a la exclusión social, producto de los actos de corrupción y las políticas implementadas por las oligarquías neoliberales que benefician a los grupos hegemónicos en perjuicio del pueblo hondureño.

  1. Violación sistemática de Derechos Humanos

Ante los delitos cometidos por la dictadura de Juan Orlando Hernández (JOH), es de vital importancia la labor de comunidades, organizaciones y diversos sectores en la defensa de los Derechos Humanos y de la Tierra; sin embargo, la defensa de estos derechos es perseguida sistemáticamente por élites de poder que buscan el exterminio de medios de comunicación, organizaciones y de personas que con valentía alzan su voz contra las injusticias del sistema hegemónico, queriendo atacar la libertad, la autonomía y las luchas populares que defienden la vida. Esto mediante procesos de criminalización y judicialización de la protesta social, secuestros, torturas, exilios forzados y hasta múltiples asesinatos políticos, aún en impunidad.

Organizaciones de derechos humanos como la londinense “Global Witness”, ubica a Honduras desde el 2010, como uno de los países más peligrosos y violentos para las personas defensoras de derechos humanos y sus investigaciones demuestran el nexo entre las muertes de activistas con la corrupción estatal.

A su vez, denunciamos el secuestro de cinco integrantes de la Organización Fraternal Negra Hondureña (OFRANEH), Alberth Snider Centeno Tomás, Suami Aparicio Mejía García, Gerardo Mizael Rochez Cálix, Miltón Joel Martínez Alvarez y Junior Rafael Juarez Mejía que se encuentran desaparecidos desde el 18 de julio del 2020, por su labor política en defensa de los derechos humanos.

También denunciamos la muerte del activista de derechos humanos, el abogado Julio Andrés Pineda Díaz, quien pertenecía a la organización Mundo sin Guerras y sin Violencia. Su cuerpo fue hallado sin vida y con señales de tortura el 4 de septiembre del 2020, en Honduras. Esta violación institucional que se expresa en Honduras es parte de la violencia del sistema neoliberal presente en toda Latinoamérica.

  1. Sobre Julieta Castellanos Ruíz

La narco dictadura se ha encargado de que los puestos de jerarquías, a nivel institucional, sean asumidos por personas corruptas, dispuestas a mantener, a cualquier precio, el control de JOH sobre el estado. Una de estas personas es Julieta Castellanos Ruíz quien ocupó la Rectoría de la UNAH durante los años 2009 – 2017; posicionándose como enemiga de la educación pública y de la comunidad estudiantil; cómplice de la dictadura e impulsora de la apertura de expedientes administrativos y judiciales en contra de estudiantes que ejercían su derecho a la libertad de expresión; entre ellos, los tres jóvenes condenados ilegalmente.

  1. Sobre la criminalización de los tres estudiantes de la UNAH

La sentencia dictada por el Tribunal de Sentencia conformado por Enilda Geraldina, Indiana Castellanos y José Roberto Mejía que condena a tres años de prisión a los jóvenes Cesario Padilla, Moisés Cáceres y Sergio Ulloa, es totalmente ilegítima e inconstitucional, por vicios a las garantías procesales que tienen carácter de nulidad absoluta.

Dichas trazas de inconstitucional se manifiestan en la violación al principio de legalidad penal, que indica expresamente que únicamente se pueden penalizar las conductas debidamente tipificadas en la legislación. A estos ex líderes estudiantiles se les está penando por los delitos de usurpación y detentación de espacios públicos; los cuales son inexistentes en el nuevo Código Penal hondureño; por lo que, entran a operar principios procesales como la irretroactividad de la norma penal, que estipula que en materia penal no se le debe aplicar una ley penal con efectos hacia el pasado cuando es perjudicial para el acusado; pero, cuando resulta beneficiosa para el acusado, debe aplicarse aunque sea con efectos retroactivos. Es decir, al no existir un delito tipificado al momento del juzgamiento, no se puede aplicar una norma que ya no existe, porque no constituye delito alguno. Esto sigue demostrando que el cuestionado sistema judicial de Honduras ha politizado la justicia.

En el marco jurídico internacional, el artículo 15 del Pacto Internacional de Derechos Civiles y Políticos y, en la Convención Americana de Derechos Humanos o Pacto de San José, en su artículo 9, se fija el principio de irretroactividad de la norma penal. Honduras ha suscrito y ratificado ambos convenios internacionales; aun así, violentan permanentemente la normativa aplicable en perjuicio de personas defensoras de la educación como derecho humano.

POR TANTO

  1. Repudiamos el accionar inconvencional, inconstitucional e ilegal del Tribunal de Sentencia al condenar a Cesario Padilla, Moisés Cáceres y Sergio Ulloa por ejercer sus derechos y garantías democráticas.
  2. Denunciamos la corrupción del sistema judicial de Honduras que resuelve sus sentencias por presiones políticas, politizando la justicia; por lo que ocasiona que esta no exista más que para someter al pueblo y perpetuar el poder de la dictadura hondureña.
  3. Denunciamos internacionalmente la criminalización y judicialización de la protesta social y el impedimento al libre pensamiento y libertad de expresión en la narco-corrupta dictadura de JOH.
  4. Reprochamos la sistemática violación de derechos humanos de la población hondureña y todos los tratos crueles ejecutados por la viciada institucionalidad hondureña.
  5. Exigimos a la Corte Suprema de Justicia que cumpla con el ordenamiento jurídico y dicte un sobreseimiento definitivo en el expediente en el que figuran como acusados Cesario Padilla, Moisés Cáceres y Sergio Ulloa.
  6. Exigimos el cumplimiento de los convenios internacionales de derechos humanos y se respeten las garantías procesales de los acusados.
  7. Hacemos un llamado de solidaridad a la comunidad internacional y a organizaciones de derechos humanos y a todo el pueblo hondureño a fiscalizar este proceso y a pronunciarse en contra de la criminalización de la protesta social.
  8. Exigimos a la rectoría de la UNAH que desistan del proceso judicial contra estos tres ex líderes estudiantiles.

Para apoyar esta petición firme AQUÍ

¡JUSTICIA PARA CESARIO PADILLA, MOISÉS CÁCERES Y SERGIO ULLOA!
A de Libertad * Acción Animal
Asociación de Desarrollo Sostenible LGTBI Costa Rica (ADS)
Asociación de Estudiantes Sede de Occidente / UCR
Casa El Emigrante (Human Rights) * Centro de Amigos para la Paz (CAP)
Círculo Bolivariano Yamileth López / CR * Colectivo Handmaids Costa Rica
Confederación Unitaria de Trabajadores (CUT)
Departamento Ecuménico de Investigaciones (DEI) * Familia Franciscana/JPIC Federación Costarricense para la Conservación del Ambiente (Fecon)
Federación de Estudiantes de la Universidad de Costa Rica
Femiamor Colectiva * Frente de Resistencia Animal y de la Tierra (FRAT)
Frente Ecologista Universitario (FECOU)
Justicia, Paz e Integridad de la Creación. JPIC/CLARET/CR.
Juventud Vanguardista Costarricense (JVC)
Movimiento de Trabajadores y Campesinos (MTC)
Mujeres Unidas en Salud y Desarrollo (MUSADE)
Organización Interseccional Pro Derechos Humanos (OIDH)
Organización Política “Carmen Lyra” * Partido Vanguardia Popular
Partido Revolucionario de las y los Trabajadores (PRT)
Radio Machete * Red de Solidaridad con Palestina /Costa Rica
Sembrando Libertad * Semilla Ramonense
Sindicato de Empleados(as) de la Universidad de Costa Rica (SINDEU) * Sindicato Patriótico de la Educación 7 de Agosto (SINPAE)
“Yo no apoyo las corridas de Toros” * “Yo no voy al Zoo”

Responsables:
Colectivo de Solidaridad con el Pueblo de Honduras / CR
Asociación Costarricense de Derechos Humanos
(ACODEHU)

Honduras: El asedio, a la vida universitaria

  • “El verdadero periodista defiende los valores universales del humanismo, en particular la paz, la democracia, los derechos del ser humano, el progreso social y la liberación nacional…así como el derecho de cada pueblo a escoger libremente y desarrollar su sistema político, social o económico”. (Código de ética periodística de la UNESCO, 1983)

 

Ronnie Huete Salgado (*)

Periodista y defensor de DD.HH

 

Latinoamérica, 13 de agosto de 2107. Tres estudiantes universitarios de la Universidad Nacional Autónoma de Honduras (UNAH), marcan el primer referente de estudiantes condenados en un tribunal de justicia en Latinoamérica, por defender la educación pública superior como un derecho universal.

Ante este acontecimiento, el asedio contra la vida en la Máxima Casa del Conocimiento en Honduras, fundamenta el dogma de la persecución, iniciado en los universitarios, Sergio Ulloa, Cesario Padilla y Moisés Cáceres.

La deformación de los acontecimientos en Honduras es una agenda que persiste en fomentar la apología del odio. En menos de tres meses dos asesinatos recorren en el imaginario colectivo de la opinión pública nacional e internacional, y lo vinculan con el conflicto de la UNAH.

Aún no existe un dictamen oficial de parte de las autoridades responsables, de efectuar las investigaciones pertinentes, que definan la causante de los asesinatos.

En el caso de la Universidad Nacional Autónoma de Honduras (UNAH), los intereses oscuros que realmente delinean las acciones de las autoridades del Alma Mater, motivan a que los mercenarios de la información destruyan el imaginario colectivo de las masas.

Cuando la razón y el humanismo dejan de existir en la toma de decisiones en la máxima casa de estudios, desde las altas esferas del odio, aniquilan la universalidad del pensamiento para la que fue creada la UNAH en 1848, involucionando en un terrorismo universitario.

Desde el principio de la crisis de 2017 en la UNAH, la comitiva del Alto Comisionado de los Derechos Humanos, así como el Comisionado Nacional de los Derechos Humanos en Honduras (CONADEH), aconsejaron utilizar la vía del dialogo bajo este contexto universal del pensamiento, sin embargo, este raciocinio de ambos organismos fue desvirtuado con respuestas abruptas desde la alta jerarquía universitaria.

Nuevamente el Ombudsman de Honduras, Roberto Herrera Cáceres, realiza una nueva recomendación, recurrir al Consejo Nacional de Educación, una instancia creada en Honduras por la ley fundamental de educación para garantizar el derecho humano a la educación de toda persona en Honduras.

Derecho humano que ha sido fuertemente violentado con la expulsión de 20 estudiantes universitarios, como una medida arbitraria dictaminada desde la rectoría y con el agregado de imputaciones judiciales desde los tribunales de justicia de este país.

Por tal motivo el Ombudsman hondureño fue contundente al expresar que, si ellos no encuentran la solución a la problemática, en los próximos días, es necesario que se asuma y se tome una decisión de Estado.

A casi tres meses de haber iniciado esta crisis de 2017, los acontecimientos van desde enfrentamientos entre estudiantes y la Policía Nacional, y algunos comunicadores sociales, hasta el asedio contra el Padre Jesuita Ismael Moreno.

Y es que la utilización de mercenarios dentro de la UNAH, para agredir físicamente y perseguir a los estudiantes y a las personas que allí se encuentran, no solo se resume en lo físico, puesto que los ataques mediante un reducido sector de la prensa, comprueba el precio que tiene el desinformar a la población.

Tanto los mercenarios de la información como los que atacan físicamente, se suman a los misteriosos ataques que se han perpetuado en los alrededores de la UNAH.

El pasado viernes 11 de agosto según información de un estudiante, un universitario que está siendo objeto de criminalización desde las altas esferas universitarias, fue víctima de un atraco y amenazado con un arma de fuego, despojándole de su celular.

Este hecho se efectuó dentro de las instalaciones de la universidad, ese mismo día, el atacante fue perseguido por los estudiantes que allí se encontraban, y la acción del atracador fue el de dispararles con arma de fuego en mano.

Por razones de seguridad no se revela el nombre de la fuente, sin embargo, aseguró que en donde se realiza la huelga de hambre que lleva 47 días, todas las noches son vigilados por vehículos desconocidos sin número de placa y con vidrios poralizados.

Son tres los estudiantes que mantienen la huelga de hambre y que han tenido relevos, por recomendaciones de la doctora Ligia Ramos, quien voluntariamente evalúa la salud de los estudiantes.

Por tal motivo la huelga de hambre se mantiene gracias a los relevos que han hecho los estudiantes, según las recomendaciones médicas, no obstante, aunque esta forma de acción es totalmente pacifica, es amedrentada utilizando técnicas que remarcan el fascismo.

Según informes de los propios estudiantes, los edificios de la UNAH, se encuentran cerrados como otra medida de presión y protesta, lo que ha resultado en la ausencia de clases durante los dos últimos meses.

Debido a esta acción, las autoridades del Alma Mater, publicaron un comunicado asegurando que no pagaran el salario de los docentes, puesto que no han impartido sus cursos según correspondía en el calendario académico y la rectoría los acusa de cómplices en la huelga que lidera el Movimiento Estudiantil Universitario (MEU).

La persecución también ha llegado a los docentes de la UNAH, quienes tendrán que enfrentarse a no recibir su próximo salario, puesto que la crisis es agudizada por dictamines fuera de orden en una nación cuasi incivilizada.

Sumado a esta persecución, recientemente fueron puestos a disposición de los tribunales de justicia 15 estudiante universitarios del Centro Universitario Regional Litoral del Pacifico, quienes ahora enfrentan cargos judiciales en su contra por hacer uso del derecho universal de la protesta.

En total son 44 los universitarios judicializados, y que enfrentan a la justicia de Honduras como si se tratase de delincuentes comunes.

Mi persona, también está siendo víctima de criminalización por hacer uso del libre ejercicio del periodismo cuando el 24 de mayo hice cobertura periodística internacional de una acción de protesta en el edificio administrativo de la UNAH, sin embargo, fui víctima de tortura, tratos crueles inhumanos o degradantes, robo y privación injusta de mi libertad y ahora se me imputan cargos.

Ser periodista y corresponsal internacional en Honduras, alejado de los lineamientos producidos por las altas esferas de la UNAH, lo puede llevar a la cárcel o incluso a la muerte.

En el último mes he sido objeto de seguimiento de parte de vehículos extraños, en las avenidas de Tegucigalpa, así como la intervención constante de mi teléfono celular, aunque ya interpuse una denuncia contra las personas que me torturaron y robaron el 24 de mayo de 2017 en la UNAH, aún no he tenido una respuesta contundente del Ministerio Publico de este país centroamericano.

A través de la Secretaria de Seguridad, mantienen una instancia llamada el Mecanismo de Protección de periodistas y defensores de derechos humanos, sin embargo, la protección de la misma solo se ha reducido a analizar mi caso para hacer un diagnóstico, desde hace casi tres meses de ocurridos estos hechos que atentaron contra mi vida.

En uno de los considerandos de la Carta Universal de los Derechos Humanos menciona “que el desconocimiento y el menosprecio de los derechos humanos han originado actos de barbarie ultrajantes para la conciencia de la humanidad, y que se ha proclamado, como la aspiración más elevada del hombre, el advenimiento de un mundo en que los seres humanos, liberados del temor y de la miseria, disfruten de la libertad de palabra y de la libertad de creencias”

Tal descripción bajo el contexto universal de los derechos humanos, confirman que en Honduras existe una barbarie, cuyo epicentro es la máxima casa de estudios. La guerra de baja intensidad persiste, ahora desde la casa universal del conocimiento.

La filosofía pragmática, de conseguir el poder y el dinero acosta de lo que fuese, es el perfecto reflejo que brilla en el Estado fallido de Honduras.

Tras esta intensa etapa de crisis, es sumamente necesaria la praxis de la filosofía humana, para el servicio de la humanidad, rescatando los valores morales que enaltecen la honestidad y el amor al prójimo. La universidad es la responsable del óptimo desarrollo de la humanidad que habita Honduras.

La paz es necesaria para fortalecer los valores democráticos, sin embargo, en donde se desarrolla el conocimiento, a través de la universalidad del pensamiento, es decir la UNAH, se encuentra en una constante riña con la paz, puesto que la filosofía pragmática es la oscuridad que es inseparable de las actuales autoridades.

 

(*) Ronnie Huete es Licenciado en periodismo (UNAH) con Maestría en Cooperación al Desarrollo y elaboración de proyectos, estudió presencial en la Universidad Politécnica de Valencia, España y se ha desempeñado como docente universitario de la UNAH y otras universidades privadas. En 2010 vivió en Florianópolis, Brasil, regresando a Brasil el primer semestre de 2012 en la ciudad de São Paolo. en 2008 viajó por Centroamérica, para luego en 2013 desplazarse a California, EUA. En Julio de 2015 viajó hacía Washington D.C. y luego tuvo una corta estadía en Nueva York, terminando en el Estado de Florida. En 2016 produjo un programa radial en el Condado de Orage, California.

Actualmente se encuentra en Honduras, en donde estudiaba su segunda licenciatura en sociología, en la Universidad Nacional Autónoma de Honduras UNAH, sin embargo, fue víctima de criminalización y persecución judicial por parte de las autoridades universitarias, por lo que está tomando fuertes medidas de seguridad, ya que su vida corre peligro.

El 24 de mayo de 2017, el periodista Ronnie Huete Salgado, se encontraba en el edificio administrativo de la UNAH, en donde realizaba cobertura periodística internacional para la agencia brasileña de prensa desacato.info, sin embargo, fue torturado, despojado de su celular y privado de su libertad por elementos de la seguridad privada de la UNAH, para luego ser encarcelado. Actualmente posee medidas sustitutivas a la prisión y es víctima de persecución como resultado del trabajo que desempeña como periodista en su país natal Honduras.

Cualquier atentado o amenaza para el autor de este artículo es responsabilidad de quienes representan y gobiernan el Estado de Honduras y o los que menciono en el presente artículo.

El autor de este artículo es corresponsalía voluntaria para la Agencia informativa Latinoamericana Prensa Latina, Kaos en la red , el portal http://desacato.info editado en Florianópolis, Brasil, rebelion.org, http://conexihon.hn , criterio.hn, www.hondurastierralibre. Entre otras agencias de prensa internacional para la cual trabaja de forma independiente (freelance) y que cuyas publicaciones son efectivas en España, México, Argentina, entre otros países de América Latina.

 

Enviado por el autor.

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Periodista torturado hace un llamado internacional de auxilio

Yo, Ronnie Ezequiel Huete Salgado, licenciado en periodismo, graduado en la Universidad Nacional Autónoma de Honduras (UNAH), y con posgrado en Cooperación al Desarrollo, graduado en la Universidad Politécnica de Valencia, España y con número de identidad 0801-1981-01554 y con número de colegiación periodística C-1342 emitida por el Colegio de Periodistas de Honduras (CPH), ciudadano de Honduras, comparezco ante los organismos internacionales, que mantienen un fuerte vinculo diplomático y económico en Honduras, y sobre todo porque están al tanto del respeto de los derechos humanos en este país centroamericano, que como será de su conocimiento, hay un fuerte debilitamiento del respeto a la vida y por ende a los derechos humanos.

He trabajado en el ejercicio del periodismo durante los últimos 17 años, y me he desempeñado como catedrático universitario en la Escuela de Periodismo de la UNAH entre otras universidades privadas, así mismo he sido testigo de violaciones a los derechos humanos en Honduras, y de las que me he encargado de denunciar en su debido momento, en pro de la defensa de la vida.

Este trabajo periodístico que realizo como corresponsal internacional, me ha costado amenazas a muerte en 2009, exilio en 2010 y ahora estuve a punto de perder mi vida al brindar cobertura periodística en la noche del 24 de mayo de 2017, hasta la madrugada del 25 de mayo, día del periodista en Honduras.

Esta cobertura periodística la realice en la Universidad Nacional Autónoma de Honduras (UNAH), específicamente en el edificio administrativo en donde un grupo de 19 estudiantes realizaban una toma pacífica de este predio, utilizando el derecho universal de la protesta, tal y cual lo establece la carta universal de los derechos humanos.

Desde hace 7 años, brindo cobertura periodística en la UNAH, y a la vez realizo observación en el respeto de los derechos humanos, puesto que, en la UNAH, en los últimos meses se han violentado estos derechos.

Yo, recibí una llamada anónima, de que se efectuaba una toma en la UNAH, y que había peligro del irrespeto a la vida, inmediatamente como periodista y defensor de derechos humanos, me hice presente en las instalaciones del Alma Mater.

Al llegar, no comprendía exactamente lo que estaba ocurriendo, y al observar a los alrededores del edificio administrativo de la UNAH, observe a un grupo de guardias de la seguridad privada de la UNAH, cuya compañía privada es conocida como ESPA.

Como periodista internacional, les pregunte a ellos que estaba ocurriendo, sin embargo, me respondieron que no estaban autorizados a brindar declaraciones, por lo que me desplace a los alrededores del edificio administrativo y vi a un grupo de personas que cubrían su rostro y se identificaron como estudiantes, quienes accedieron a dar declaraciones en vivo para el medio al cual trabajo.

Comencé hacer mi labor periodística, a grabar los hechos, a explicar al mundo lo que estaba pasando, esa noche del 24 de mayo de 2017 en la UNAH.

Seguí con mi trabajo periodístico indagando sobre lo que ocurría, me desplace al estacionamiento de la planta baja del edificio administrativo, en donde observe que los estudiantes y un grupo de personas, encapuchadas y con palos en sus manos, estaban discutiendo con los estudiantes, quienes también se cubrían el rostro; la escena me dictaba a mi persona, que podría haber pérdidas humanas, por lo que me dispuse a seguir grabando con mi herramienta de trabajo periodístico, un celular que me permitía transmitir en vivo, para la página oficial para el medio de comunicación para el cual realizo corresponsalía internacional hasta la República Federativa de Brasil con cobertura por internet al mundo.

Al ver que el peligro era latente hice el llamado a la prensa nacional e internacional, así como a mi familiar más cercano, mi papá. Comenzó una fuerte discusión entre ambas partes, por lo que intente mediar para que primara la paz, pero ya era tarde, los sujetos encapuchados con una camisa blanca y algunos hasta dejaron al descubierto su dorso, se lanzaron de la planta baja del edificio hasta el estacionamiento, para dar persecución a los estudiantes.

Estos sujetos al bajar, comenzaron a golpear con sus palos una de las puertas que conduce a la recepción del edificio y luego se abalanzaron hacía mi persona, rociándome con gas pimienta directamente a mi rostro. Este toxico que es prohibido por convenios internacionales.

Luego de haberme rociado me identifiqué como periodista, les mostré mi credencial como corresponsal internacional y defensor de derechos humanos, sin embargo, ellos procedieron a quitarme mi celular y carnet de periodista internacional, acto seguido comenzaron a golpearme con los palos que sujetaban en sus manos, y con fuertes patadas me tiraron al suelo.

Les repetí constantemente que estaba trabajando en mis funciones como periodista, sin embargo, no me escuchaban y sus respuestas solo eran golpes contra mi persona, les implore por mi vida, pensé que moriría en ese momento.

Uno de esos sujetos quien portaba un pantalón negro con rayas verdes, y su dorso desnudo, les dijo que pararan, procedieron a levantarme del suelo de ese estacionamiento, para decirme que no me moviera, les volví a repetir que era periodista, pero se limitaron a decirme que me callara o procederían a golpearme nuevamente, estaba privado de mi libertad por sujetos encapuchados, cuyo pantalón negro era delineado por una raya verde.

En mi vista y manos sentía fuego, como producto del gas pimienta que me habían rociado, sentía dolor en mi mano derecha por la contusión de la que fui víctima, y el mismo dolor se fue desplazando en varias partes de mi cuerpo, fui víctima de tratos crueles, inhumanos o degradantes, fui torturado en la Universidad Nacional Autónoma de Honduras.

Nunca en la historia de la UNAH, un periodista había sido torturado por cumplir sus funciones como corresponde.

Seguido de esto, después de un tiempo de estar tirado en el suelo suplicando por mi vida, los sujetos torturadores me vigilaban, para que no saliera del lugar, ocupaba asistencia médica de inmediato, pero a ellos, no les importo.

No recuerdo el tiempo exacto que estuve allí, pero sí del fuego en mi rostro y manos como producto del gas lacrimógeno, me puse de pie como pude, para pedir auxilio, ya un defensor de derechos humanos estaba presente, escuché su vos, por lo que me dispuse a moverme con el temor de que los sujetos torturadores me torturan nuevamente.

Logré salir del estacionamiento, para desplazarme hacía la recepción del edificio administrativo, en donde se encontraba mi papá y el defensor de derechos humanos, les dije a los sujetos torturadores que me regresaran mi celular y mi credencial como periodista internacional, pero mi conversación fue en vano, nunca me regresaron mi herramienta de trabajo, ni tampoco mi credencial.

Seguido de esto, el defensor de derechos humanos, me dijo que necesitaba urgentemente asistencia médica, por lo que me desplace con él y mi papá hacia la planta baja del estacionamiento para poder salir.

Al salir del edificio se encontraba un contingente de la Policía Nacional, quienes nos preguntaron hacía donde íbamos, por lo que el defensor de derechos humanos, le respondió que aun hospital para asistir a mí persona, sin embargo, respondieron que tenían la orden de detener a todo el que saliera del edificio.

Rápidamente mostramos las credenciales, yo tenía una acreditación del Colegio de Periodistas de Honduras (CPH), guardada en mi cartera de bolsillo, a la que no tuvieron acceso los sujetos torturadores, se la mostré al policía que coordinaba el operativo, sin embargo, obvio mi credencial y procedió a detenerme.

Luego, fui trasladado a una posta policial, en donde se me privo de mi libertad por aproximadamente 36 horas, la tortura de la que fui víctima en la UNAH, seguía en los centros de detención, ya que dormí en el suelo, olores nauseabundos primaban en el lugar, y el acceso al agua y comida se había limitado.

Esposado de pies y manos en los juzgados de la granja, se me trato como un delincuente común, por el hecho de estar ejerciendo mi profesión como periodista.

Parte de estos hechos narrados, fue la experiencia que viví como torturado, por lo que hago de conocimiento internacional y nacional de que mi vida corre peligro en Honduras, me siento vulnerable y aún con fuertes traumas psicológicos, como producto de la tortura que se me propició en el Alma Mater de Honduras.

Alzo mi voz ante el mundo, pidiendo el auxilio internacional, ya que mi vida está en constante peligro después de estos hechos, me avoco hacía ustedes como instancia internacional veedora de los derechos humanos en Honduras, para solicitar la protección correspondiente, tal y cual lo establece la carta universal de los derechos humanos.

Pese a ser una víctima de tortura, se me imputan cargos judiciales en mi contra, y actualmente estoy con medidas cautelares, ya que los denunciantes aducen que yo fui parte de esa toma, lo cual es totalmente falso, puesto que me desempeñaba en mis funciones como corresponsal internacional, cumpliendo con mi labor de informar al mundo como periodista, lo que considero una acción violatoria al libre ejercicio del periodismo en Honduras, ya que fui víctima de tortura, en el lugar de los hechos ya descritos.

Comparezco ante ustedes muy respetuosamente, para que tomen en consideración mi testimonio, ya que mi vida corre peligro después de este hecho y mi derecho a la libertad tiende hacer irrespetado por la denuncia que pesa sobre mí. Denuncia que considero injusta, ya que como he descrito solo estaba cumpliendo con mi labor periodística.

 

A los 30 días del mes de mayo de 2017.

Atentamente.

 

Msc. Ronnie Ezequiel Huete Salgado

Periodista y Defensor de Derechos Humanos.

 

Detienen y torturan a periodista Ronnie Huete. Video:

https://youtu.be/6hSGqO2hg6I

 

Seguimiento de este hecho dado por otros medios hondureños:

http://criterio.hn/2017/05/31/periodista-torturado-la-policia-presenta-denuncia-violacion-derechos-ante-organismos-acreditados-honduras/

http://www.clibrehonduras.com/alerta/periodista-hondure%C3%B1o-es-detenido-el-d%C3%ADa-del-periodista

 

*Imagen tomada de criterio.hn

 

Enviado por Ronnie Huete Salgado.

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