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Nos guste o no, hay que decidir, entre Figueres y Chaves

Vladimir de la Cruz

El próximo domingo nos toca a todos los ciudadanos, a todos los electores, decidir entre José María Figueres y Rodrigo Chaves Robles quien será el próximo Presidente de la República, nos gusten o no estos candidatos y ellos como personas.

No todos los ciudadanos participan con conciencia de la importancia de esta decisión, en el significado que cada uno de estos candidatos representa, expresa, o puede tener para que dirija los destinos del país, desde el Poder Ejecutivo, desde los Ministerios y desde las Juntas Directivas, de las Instituciones públicas, donde se hacen presentes con los nombramientos que les corresponde realizar, donde teóricamente impulsarán de acuerdo a los criterios de dirección que impulse el propio Presidente, de conformidad a lo que ofreció en la campaña electoral al Plan de Gobierno, que por primera vez, puede en algo manifestarse, el mismo mes de mayo, desde que asumen los puestos de dirección del país, del Estado y de la Administración Pública.

Esta es la cuarta vez que se procede a realizar una segunda ronda electoral para escoger al ganador de un proceso electoral nacional. La primera fue en las elecciones del 2002, entre Abel Pacheco y Rolando Araya, la segunda en el 2014, entre Luis Guillermo Solís y Johnny Araya, la tercera en el 2018, entre Fabricio Alvarado y Carlos Alvarado, y, ahora, en el 2022, entre José María Figueres y Rodrigo Chaves.

Pareciera que este camino de las segundas rondas llegaron para quedarse, lo que dependerá casi siempre, del buen gobierno y de la cultura política desarrollada que preceda a unas elecciones.

La primera vez que se hizo la segunda ronda no fue nada escalofriante, entre Abel Pacheco y Rolando Araya; fue sorpresiva por ser la primera.

La segunda, fue insólita cuando frente a Luis Guillermo Solís, un ex Secretario General del Partido Liberación Nacional, Johnny Araya públicamente se retiró, formalmente, de su candidatura, lo que legalmente no podía, dejando tirado al Partido Liberación Nacional, y a sus electores, que aún en su ausencia llegaron a votarle.

La tercera fue dramática y tensa por las circunstancias que la rodearon, Fabricio Alvarado ganador de la primera vuelta, con el tema de fondo relacionado con Derechos Humanos y el ultra fanatismo religioso a punto de instalarse en Zapote y, Carlos Alvarado, en segundo lugar, recibiendo un apoyo de sectores sociales, particularmente jóvenes, que terminaron imponiéndose, para salvaguardar el escenario de los Derechos Humanos que se veían amenazados.

Esta cuarta, entre José María Figueres y Rodrigo Chaves, nos coloca en un escenario decepcionante y tenebroso. Decepcionante por la ausencia de grandes temas, porque en la imagen nacional, e internacional, se tiene una disputa, que surge de 25 candidaturas, donde dos de ellas se ubican entre el centro derecha y la derecha, escenario que no se ha dado en ninguna parte del continente, donde se han discutido elecciones presidenciales entre dos finalistas. Tenebroso porque Chaves, con sus posturas y planteamientos amenaza la estabilidad política y democrática, provoca una situación de alta volatilidad, en escenario de conflictos sociales, y de enfrentamientos abiertos con diferentes sectores de la vida política, económica, social, académica y de los propios medios de comunicación.

Esto es lo que ha quedado reflejado del resultado electoral de febrero pasado, que se define el próximo domingo.

Aun así, el escenario electoral, del domingo tiene actores que convocan a no participar en el drama, que puede tener un final trágico para los costarricenses.

El derecho al sufragio supone la participación activa en la toma de decisiones, que por elecciones se realizan, para nombrar los representante populares que expresan el poder soberano de los ciudadanos. Negarse a ejercer el voto es asumir que quienes realizan el sufragio lo hacen también por quien se niega a participar y votar. El abstencionista de urna, el que no se presenta, es el que es representado por los que votan. No tiene derecho después de quejarse de un mal gobernante o de las políticas que impulsa. Sin posibilidad de escoger el candidato que desearía tiene al menos, si votara, el derecho de exigir y de criticar lo que no le gusta de la acción de gobierno. En la práctica quien no ejerce su derecho de voto en esta oportunidad arriesga su comodidad y existencia social. Si los electores no se hubieran movilizado a votar por Carlos Alvarado estaríamos, sin lugar a dudas, bajo políticas gobiernistas y públicas contrarias y restrictivas a los Derechos Humanos, se hubiera producido un retroceso político en el país de incalculables consecuencias. Con Rodrigo Chaves podría suceder un escenario parecido.

En términos de partidos políticos que participan en las segundas rondas, tenemos que en la primera fueron el Partido Liberación Nacional y la Unidad Social Cristiana, los dos partidos históricos que habían venido gobernando el Poder Ejecutivo desde 1953. En la segunda, la Unidad Social Cristiana quedó desplazada de participar dándole campo al Partido Acción Ciudadana, que disputó el Poder Ejecutivo con Liberación Nacional, donde emergió Acción Ciudadana como partido gobernante. En la tercera, sorpresivamente el Partido Acción Ciudadana se mantuvo como partido gobernante, frente al emergente partido Restauración Nacional, dejando por fuera, de ser finalistas, a la Unidad Social Cristiana, nuevamente, y a Liberación Nacional, un golpe muy fuerte contra el bipartidismo histórico de partidos gobernantes que estos partidos habían tenido. En esta cuarta, segunda ronda, Liberación Nacional rescata su papel de partido político finalista para disputar el dominio del Poder Ejecutivo, frente a un partido totalmente emergente, nuevo, y prácticamente improvisado, a última hora, el Partido Progreso Social Democrático.

Como candidatos en estas rondas tuvimos en la primera a dos bien conocidos políticos, Abel Pacheco y Rolando Araya; en la segunda dos activistas políticos conocidos, Luis Guillermo Solís y Johnny Araya; en la tercera, dos candidatos, Fabricio Alvarado y Carlos Alvarado, con poca experiencia política cada uno, y en esta cuarta, tenemos un político, José María Figueres, con amplia experiencia de vida política y de ejercicio de puestos públicos, Ministro y Presidente de la República, activista partidario, y otro, Rodrigo Chaves, sin ninguna experiencia política ni en ejercicio de cargos de Gobierno, ni de partidos políticos, ambos con una rica experiencia en organismos internacionales, uno de ellos, Rodrigo Chaves, cuestionado y sancionado en esos organismos por acoso y hostigamiento sexual con funcionarias.

El Partido Acción Ciudadana, en las elecciones del 2014 eligió 14 diputados, en la del 2018 eligió 10, en la del 2022 no eligió ninguno. El Partido Liberación Nacional en todas estas elecciones desde el 2006 ha mantenido la fracción legislativa mayoritaria, la más grande, que no ha bajado de 16 diputados.

El Partido Progreso Social Democrático, en ésta, su primera participación, eligió 10 diputados, igual cantidad que el gobierno de Carlos Alvarado mientras Liberación Nacional eligió 18, lo que significa para ambos candidatos su músculo político legislativo en caso de que ganen la Presidencia de la República.

Desde el punto de vista de cantones gobernados por alcaldes, desde el 2006, Liberación Nacional ha tenido 49 de 82, mientras que el Partido Progreso Social Democrático no tiene una sola Alcaldía, lo que evidencia, para Liberación Nacional, una proyección y presencia territorial mucho más grande, lo que resulta, de su larga trayectoria histórica, de 71 años, y de nueve gobiernos bajo su poder, de 17 que han habido desde 1953.

En urna, quien vota nulo o en blanco, ejerce su voto manifestando su inconformidad con los partidos y candidatos propuestos. En difícil entender que con 25 candidatos en febrero se produzcan esas indecisiones. Y más complejo comprender y decidir para muchos de los votantes entre las dos opciones que hay para el próximo domingo. Pero, hay que decidir cuál de estas opciones puede ser mejor para el Gobierno, para el país y para los ciudadanos. Este punto no puede eludirse, sobre todo para quienes han participado activamente de la vida política, para quienes tienen conciencia clara de la lucha política y del progreso social.

La elección del domingo va a producir un resultado, va a sacar un ganador, que será el próximo Presidente de la República, por los próximos cuatro años. Será quien represente al país en foros internacionales, será quien defina la política internacional y exterior de Costa Rica, para todos los efectos será la cara pública del país y del pueblo costarricense.

El puesto de Presidente es el más alto cargo que se puede ostentar, desde el punto de vista político nacional; es un honor para quien lo tiene y es enorme la responsabilidad de ejercerlo. En él se representa toda la ciudadanía, todo el pueblo electoral, una vez que asume el cargo de Presidente, en tanto representa a toda la Nación costarricense, no así los diputados que representan a sus propios electores, de sus respectivos partidos políticos nacionales o provinciales.

El Presidente, en su investidura, nos recuerda cotidianamente la Independencia de la Nación costarricense, la Soberanía popular que en su figura se encarna, como receptor y representante supremo de la voluntad del pueblo, en el Poder Ejecutivo, representa igualmente el conjunto de instituciones y empresas públicas de todo el engranaje estatal y de la Administración Pública costarricense.

Por ello el Presidente de la República es como un Símbolo Patrio, al que se le deben guardar todos los respetos que el Protocolo exige para estos símbolos, y para las figuras, o personas, que los representan y ejercen, en el momento de desempeñarlo.

En Costa Rica, quizá por la tradición democrática pacifista, que hemos cultivado históricamente, ausente de militares gobernantes, de prácticas militares odiosas, de militarismo autoritario institucional, de dictaduras y tiranías, porque los presidentes son de tipo civil, porque en sus prácticas políticas electorales desarrollan cercanía directa con los electores, los ciudadanos, y las personas en general, y porque en su vida civil ordinaria, como personas y como políticos, aún activos, se desplazan sin seguridades odiosas, o distantes de la gente, ha hecho que las personas, más que democratizadas en su relación con el Mandatario, se consideran igualadas con él.

Sin embargo, de los dos candidatos del domingo, Rodrigo Chaves ha reiterado en su campaña, en sus discursos e intervenciones, una actuación suya, como Presidente, si llegara a serlo, de carácter autoritario, casi despótico o tiránico, irrespetuoso de la institucionalidad democrática existente por el Estado de Derecho, y por el Estado Social de Derecho que hemos desarrollado.

En Costa Rica, por la tradición democrática, pacifista, es usual que los Presidentes se desplacen a atender actos o compromisos sin mayor seguridad, y que cuando llegan a su destino rompan todo tipo de barrera protocolaria y de seguridad, y se trasladen, aunque sea pocos metros sin escoltas, de manera directa y que, de esa misma forma, con la seguridad con que actuamos todos los costarricenses, nos acerquemos a las personas que están a la espera del Presidente, o que son sorprendidas por su presencia, para saludarlas de manera afectuosa, aunque sea protocolaria la relación, y hasta se detenga el Presidente a firmar autógrafo cuando se lo piden, o dejarse retratar o tomarse hasta un selfie, a petición de parte. Esto es parte de la vida democrática nacional, que nos enorgullece, pero que también nos distingue de otros países cercanos y lejanos.

En la noticia destaca muchas veces esta cordialidad, familiaridad, seguridad, con que el Presidente se desplaza, y es, y debe ser, más noticia el respeto que se le brinda en su paso, cuando va desprotegido de escoltas.

Sinceramente. No veo a Rodrigo Chaves en este papel, porque se presenta de manera prepotente, arrogante, poco humilde, como se dice popularmente, se le suben los humos a la cabeza.

Esta segunda ronda, la del domingo, es para todos los efectos, más importante y decisiva que la del 2018. Aquí se juegan más proyecciones del país y el conjunto de toda la institucionalidad democrática hasta ahora lograda.

Como costarricenses debemos velar también que ese Símbolo Patrio, que significa la figura del Presidente de la República, sea, tenga y ostente, la mejor representación posible.

Es el pueblo costarricense el que se estará reflejando y representando en la figura del próximo Presidente de la República.

El domingo no se elige un mamarracho ni una caricatura presidencial, se escoge el Presidente de Costa Rica.

Hay que salir e ir a votar. Hay que pensar en la mejor opción de las que existen para el momento actual, de ahora, y de los próximos cuatro años, que mejor nos merecemos.

No votar es facilitar la posibilidad de mamarrachear la vida política nacional y bufonear el ejercicio de la Presidencia.

La Presidencia de la República es también una figura de prestancia, señorío, dignidad, excelencia, de calidad superior. No permitamos que con nuestro voto se deteriore.

Votando no se renuncia a ninguna agenda de lucha y de movilización popular. Votando no se renuncia a ideas ni a planteamientos políticos e ideológicos. Votando se afirma la voluntad de lucha de los ciudadanos, de apoyar lo que corresponda apoyar de un gobierno y de criticar lo que corresponda criticar. Votando se fortalecen y consolidan los derechos de agitación, movilización y organización popular, de fortalecer los estados de conciencia de los ciudadanos.

Gane quien gane las luchas populares se van a mantener, pero dependiendo quien gane también se puede lograr más en esas luchas y diálogos nacionales que puedan establecerse por parte de los sectores organizados con el próximo Presidente.

Las elecciones son un estado de la conciencia ciudadana. Muestre la suya. ¡Hágala valer!

Entre el miedo y el terror

Dr. Oscar Aguilar Bulgarelli. Historiador.

Escribo estas líneas a cuarenta y ocho horas del balotaje del 3 de abril y ante la grave circunstancia para los ciudadanos de tener que escoger entre dos candidatos que, por mucho, les falta todo para merecer ser Presidente de Costa Rica; por ello es que creo que Rodrigo Chaves y José María Figueres, nos ponen en la alternativa de el terror o el miedo.

Con todo el respeto que me merecen Rodrigo Chaves, su movimiento político que no me atrevo a llamarlo “partido” aunque su nombre sea PPSD y sus simpatizantes, lo veo tenebroso y oscuro, ausente de transparencia en decisiones y acciones fundamentales. Tiene como bandera fundamental la lucha contra la corrupción, pues según él, acabando con ella se tendría el dinero necesario para cambiar el rumbo del país en todos lsus órdenes, pero…¡hay en el candidato y su grupo tantos peros!, veamos.

Empecemos por señalar su financiamiento; desde la creación del fideicomiso “Costa Rica Próspera” se dieron negativas para saber quienes lo constituían y cuánto aportaban, hicieron consultas al TSE sobre si era legal hacer un esquema de financiamiento así para fundar un partido, de lo que reciben una respuesta positiva con la observación que, una vez fundado el dinero debía ingresar a la tesorería partidaria; sin embargo no solo crean el fideicomiso antes de recibir respuesta, sino que a pesar de ella lo siguen utilizando ilegalmente y ahora el 31 de marzo hay un comunicado elaborado por doña Pilar Cisneros que lo tergiversa y lanzan una “noticia falsa” sobre la legalidad de lo actuado que, pocas horas después es desmentida por el propio Tribunal. Por qué mentir en un tema fundamental, qué tratan de ocultar desde el principio las cosas al extremo de aparentaren un debate que Chaves entregaba la información al entonces candidato Feinzaig, por qué la información al TSE se hizo a cuenta gotas y en plazos vencidos? Pero como lo que se hace de noche, de día aparece -dice el refrán- la señorita Sofía Agüero Salazar, quien fuera  asistente de Rodrigo Chaves y muchas veces mencionada desde meses atrás como una de las encargadas del fideicomiso y también hija del diputado electo por San José Waldo Agüero, en reportaje de La Nación del mismo día 31 de marzo hace un relato minucioso, detallado y esclarecedor de la forma ilegal y fraudulenta en que se condujo todo ese negociado, a espaldas de lo dispuesto por el Código Electoral, a tal punto que estas denuncias deberían estar en la primera fila de la Fiscalía General. Hay muchas formas de corrupción: se corrompe la verdad con la mentira, y esa es talvez la peor, pues lleva a la desconfianza.

Otro hecho, en el debate de ayer en Canal 7 don Rodrigo arremete ferozmente contra los llamados “pensionados de lujo”, pues es un tema populista que, indudablemente, atrae simpatías; pero por qué utilizar una y otra vez información falsa, cuando tiene en sus manos los estudios que demuestran la realidad de esos pensionados. La Asociación de Jubilados en Acción le remitió hace meses a él y a doña Pilar los estudios técnicos y actuariales que demuestran la enorme carga de falsedades que sobre esto se ha dicho y que estén, inclusive, en manos de los tribunales de justicia. Y si bien hay casos reprochables, no hay duda, no son todos y son un porcentaje ínfimo con respeto a la totalidad; por eso hablar de 9000 personas que consumen 2 billones de colones, es absolutamente falso , pues hay 62.500 jubilados a cargo del Presupuesto Nacional y su presupuesto en menos de 1 billón de colones, al señor Chaves le han remitido estos estudios que lo ubican en la realidad, para qué?  Mentir, es corrupción.

También ha mentido sobre su equipo para gobernar y, para justificar su inexistencia, ha dicho que tiene contratada una empresa especializada en buscar personal para el sector privado que hará los concursos para ubicar a las personas idóneas. Ahí empieza por demostrar que no tiene idea de la diferencia entre la mentalidad para gobernabilidad y gobernanza, que es básico. Pero, ¿cómo va a ubicar con esa empresa a los 1200 funcionarios que tendría que nombraren menos de treinta días, empezando por sus ministros y presidentes ejecutivos? Otra nebulosa más.

Una característica de su campaña es decir en cada lugar y en cada grupo, lo que ellos quieren escuchar, típica actitud del populismo más criticable. Por eso cae en contradicciones como firmas acuerdos con grupos de iglesias evangélicas que luego son desmentidos por las oficinas correspondientes de esas organizaciones religiosas, pero igual va a la Conferencia Episcopal y los adula o a la Uccaep y los sindicatos. No hay una coherencia entre lo que se dice y se hace, cómo creerle sobre su forma de gobierno.

Para no extenderme más, su constante ataque a la institucionalidad y específicamente a las normas constitucionales, son de extrema gravedad. Chaves dice que no es cierto, pero basta escucharlo en su intervención en el debate del Canal 7, cuando se refirió a su idea de los plebiscitos, las disposiciones de la Sala IV y su ejemplo del TLC, refleja su palmaria ignorancia sobre estos aspectos fundamentales de nuestro régimen democrático. Si a esto le agregamos su idea de gobernar por decreto, la nebulosa que se crea es aun mayor. Si mentir es corrupción, en una democracia, lo peor es corromper las normas constitucionales pues eso nos crea una incertidumbre jurídico institucional enorme.

Muchos otros temas quedan en el tintero que don Rodrigo Chaves no ha aclarado o, más bien, los ha metido en su nebulosa forma de ser; cómo por ejemplo la verdad sobre su salida del Banco Mundial y la compra de su casa en un millón de dólares en efectivo, ¿por qué? Pero por ahora ahí queda, sumido en su campaña caracterizada por su orgullo, prepotencia, vanidad, egocéntrica propia para un “presidencialismo imperial” llena de llamados al odio y la división entre costarricenses que definitivamente… ¡da terror!

Pero en este callejón sin salida en que nos dejaron el 6 de febrero, don José María Figueres también tiene lo suyo, y da miedo. Creo que el fardo de pecados de su pasado, no pasa fácilmente por la rejilla del confesionario ciudadano y, sin faltar, al secreto de confesión pues no somos sacerdotes, recordemos algunos: caso Chemise, cierre del Banco Anglo y del INCOFER, la garroteada a los educadores y su nefasta ley de pensiones, huelgas, inflación y para cerrar con broche de oro, el caso ALCATEL, sobre el que miente pues, si bien nunca estuvo ante tribunales de justicia, se debió al “cachetico” de un buen amigo fiscal que supo prolongar la “investigación” que parecía hecha por el Dr. Chapatín, para que una jueza amigable le diera sobreseimiento por no encontrar delito a juzgar; y aun así pasó casi ocho años disfrutando de los goces de Europa.

Después de perder un proceso interno para el 2018, ahora volvió en búsqueda de la oportunidad de ser presidente, pero también con deudas con los ciudadanos. En primer lugar, y como lo dije en mi libro “Coyotes de la Misma Loma” Figueres representa el neoliberalismo progresista, con un discurso también plagado de populismo y severas contradicciones.

En primer término, debemos señalar que al igual que su contrincante, la corrupción es una de sus obseciones a tal punto que, para no quedarse atrás del Presidente Alvarado también nombró su comité de ética, pero no de tres personas sino de varias decenas y, por ser tantos, se colaron algunos que ni tan puros ni tan castos. Pero el primero con deudas pendientes en este campo es el propio candidato Figueres y su partido PLN sobre el que han pesado fuertes acusaciones por corrupción desde su padre don Pepe, don Daniel Oduber, don Luis Alberto Monge y el desfalco de la Comisión de Emergencia y así una extensa lista en la que cabe el TLC, la Trocha y más.

Pero, además, como puede hablar el PLN contra la corrupción, si su fracción legislativa aprobó y alcahueteó leyes como la Reforma Fiscal, la Ley de Empleo Público y el pago sin autorización presupuestaria de 800.000 millones de colones a la deuda pública en tiempo de Rocío Aguilar, además de otros “detalles” de verdadero cogobierno con el PAC. Y como si fuera poco, todas esas leyes cargadas de violaciones a la Constitución que fueron disimulados por una sala que, más que Cuarta se vuelve cuatrera cuando se une a la rapiña política de nuestra Constitución e institucionalidad, siendo el peor de los casos el pago hecho por la Ministro Rocío Aguilar. Por eso, con esos antecedentes cómo me habla de la lucha contra la corrupción y defensa de la institucionalidad, si la peor corrupción es violar la Carta Magna.

Por último y para no hacer más extensas estas líneas, don José María muestra una indudable unión con el Foro de Sao Pablo y el Socialismo del Siglo XXI representado en su papeleta presidencia nada menos que por su candidata a Vice Presidente Laura Arguedas activista LGBTI+ e impulsora de las políticas de género (aunque no le guste el concepto) en el Ministerio de Educación y otras instituciones. Precisamente, cuando José María Figueres se reunió con el excandidato Fabricio Alvarado y en una entrevista en la emisora cristiana Grupo Stereo Visión, se manifestó contrario a esa política, reconoció su incidencia en el MEP y la necesidad de corregir lo que se ha hecho. Esto provocó la grabación de un video, en que Figueres conjuntamente con doña Laura Arguedas tratan de corregir el rumbo señalando, en síntesis, que respetarán los derechos humanos logrados hasta ahora. Sin embargo, posteriormente Figueres ha reconocido que mantiene su posición con respecto a las políticas de género en el MEP, aunque acepta tener divergencia de criterio con su compañera de fórmula.

Muchas son las contradicciones de ambos candidatos, pero las zonas de luz y sombra son diferentes. Posiblemente por ser un partido tradicional y un candidato ya conocido, fogueado, para bien o para mal, los hechos y las cosas que puedan crear dudas e incertidumbres de don José María Figueres, fundamentalmente, están ahí, se conocen, se les puede hacer una disección política, histórica y social sin mayor problema; por eso crea miedo, se le conoce y se deduce certeramente o no, de lo que puede llegar a hacer, el  pasado de él y Liberación Nacional en la función pública puede ser evaluada con todo rigor y por eso, sin duda, los temores y los miedos de la colectividad.

Por su parte el candidato Rodrigo Chaves Robles tiene más sombras que claridad, como hemos visto. Sintetizo diciendo que su opacidad personal y de su organización, sus contradicciones al opinar un día sobre un tema para luego decir que fue mal interpretado, sacado de contexto y cosas por el estilo, crean desconfianza. Sus afirmaciones sin sustento sobre aspectos relevantes, o el desconocimiento de cosas básicas del Estado costarricense preocupa; su actitud prepotente y redentorista de un pueblo según él mayoritariamente engañado, corrupto y hasta un poco tonto, crea profunda incertidumbre. Si a ello le agregamos que hace menos de dos años era un personaje absolutamente desconocido, alejado del país por más de 30 años y elevado a la candidatura por fuerzas económicas extrañas en un partido cascarón, crea necesariamente mucho terror ciudadano.

Por eso llegamos a este tres de abril, entre el miedo y el terror, tratando de anular a los dos.

Mi criterio sobre el denominado balotaje y el futuro de Costa Rica

Mainier Barboza Soto. Movimiento Patriótico por Costa Rica 

Sobre lo primero:

Iniciaré con una pregunta, ¿Está el TSE en peligro de extinción?

La interrogante me surge, luego de varias validaciones, desde mi participación en la elección que cerró el 06 de febrero de 2022.

Veamos: En los 5 decenios de participación en actividades con organizaciones sociales: sindicatos, cooperativas, asociaciones comunales, deportivas, partidarias, universitarias, campesinas y otras tantas, nunca encontré, ligado directamente y comprometido a los cientos de políticos que han pasado por las municipalidades, Asamblea Legislativa, ni se diga presidencia de la República, de las autónomas, magistrados, y aquellas opciones donde se ejerce poder Político y además pagan…

El sinsabor (para esos) es que la lucha social es como la evangelización, (en especial del cristianismo católico), se hace por amor a la gente, a la creencia a una fe, que te indica que el espíritu gregario, la solidaridad, la justicia, la igualdad, entre las personas, deben ser el propósito y fin, para un pueblo, una ciudad, un país, una región, el mundo; que descanse en la armonía universal, y el bien común.

El amor así, superará al odio entre iguales, y a su contrario dialéctico el miedo, fórmula tenebrosa para desequilibrar sociedades.

¿Cómo encaja esto en la pregunta inicial?; es claro, las instituciones creadas surgen como manifestación de grupos de poder, para ejercer control; luego vienen los medios de comunicación, las teorías diversionistas, la manipulación del lenguaje, la apropiación, además de la riqueza total producida, de las palabras y un círculo alrededor de separación entre los que todos lo tienen y las inmensas mayorías irredentas.

Por eso el TSE, no representa porque se elige gente que nunca ha estado al lado de esas mayorías.

En esta elección participó mucha gente valiosa, siempre en lucha, y la población, incluidas familiares, de muchas candidaturas no tradicionalistas, representantes gremiales, de mujeres, juventud, votan por tradición y además, gente desconocida, o de reconocida influencia política y generalmente enemiga de esas irredentas mayorías; que  casi a diario, comen una vez por día, sin esperanza, que por una perfecta manipulación de la palabra, hacen ver a esa dirigencia entregada, noble, que nunca abandona como enemigos de sí mismos.

Está manipulación de la conciencia colectiva nos ha entregado vía electoral una Asamblea Legislativa totalmente rezagada, (con las excepciones conocidas),  enemiga declarada del Estado Social de Derecho y lo más grave,  de sus Instituciones icónicas,  de un sector público que, laboralmente se parte el alma por mantener este sector público; ¡ pueblo mío qué te han hecho!, como el viejo adagio, «no muerdas la mano del que te da de comer», una vez más, lo hace, sigue eligiendo a sus enemigos y la paradoja se confirma; los luchadores sociales que quedaron fuera de la posibilidad de estar en puestos públicos para beneficio popular, son los que asumiremos, como siempre, la defensa de los intereses de esas mayorías…Solo que ahora, estamos en el momento de recuperación de la memoria histórica, de formar sujetos políticos claros y consecuentes…

Segundo punto:

El Futuro del País…….

El balotaje nos pone en la disyuntiva, entre un político tradicional y un tecnócrata, de uno de los centros del poder mundial.

Ambos acusan una postura hacia el unilateralismo, fortaleza del neoliberalismo, (salvo, disposición en contrario, ante los acontecimientos actuales en la Geopolítica global).

De igual forma, por más que se hable de equipos, experiencia, o de, vamos a hacer y bla, bla; además, personas como las conocidas, ahora en la Asamblea Legislativa, sus voces de odio, antes pagadas, privadamente, ahora desde la plata del pueblo, serán asfixiantes…

No esperamos más que aumento de las necesidades, y una fuerte organización para defender el Estado, el sector público, la Constitución Política y las Garantías Sociales. Al lado de la Reivindicación y la Protesta, ahora tenemos la Propuesta, orgánica, formativa, clara y funcional…

Por vía de ejemplo: Auditoría Fiscal de la Producción Pública y Privada, control fiscal, (recuperaría la fuga por la evasión y elusión, en 3-años) control de los préstamos internacionales y los empréstitos. Participación por la Sociedad Civil, (Foro multisectorial), en la elaboración del Presupuesto Nacional, control del gasto, del ingreso, de los programas sociales, de desarrollo y de la distribución de la riqueza y el crédito para el desarrollo…

Reordenamiento del sector público, en las áreas definidas:

Desarrollo Productivo, referenciado al Sector de las pequeñas y medianas empresas, del comercio, de la industria, del agro, (con fuerte impulso a la alimentación nutritiva, seguridad alimentaria-los tres tiempos de comida, mínimo-el desarrollo del Mar, del turismo marítimo, de la pesca bajo condiciones de cooperación, entre otras.

El sufragio: cualidad de nuestra democracia

COMUNICADO

Una herencia importante en los valores esenciales de la Democracia Costarricense, es el poder del voto popular en los procesos de elección. Aunque el sufragio, se ha transformado y tuvo importantes reformas desde su creación, que coinciden, precisamente con la construcción del Estado Republicano, ha funcionado en el largo plazo, como un mecanismo de legalidad, de participación y de representación, es decir es el ejercicio ciudadano más generalizado hasta inicios del Siglo XXI.

El salto político que dio Costa Rica en el Siglo XIX , al desarrollar el concepto del sufragio primero indirecto, público y restringido, al sufragio directo universal y secreto, conllevó un largo proceso histórico, donde precisamente, confluyeron, las demandas, las necesidades, los intereses de distintos grupos sociales y económicos para el ejercicio pleno de la responsabilidad ciudadana de primer orden, quizás al tenerlo, como acto de absoluta voluntad, no estemos conscientes del valor y de la fuerza que implica ejércelo como herramienta y voz de cada uno de los ciudadanos

Estas cualidades, garantizaron que, el sufragio, directo, libre, universal, secreto y la capacidad jurídica de los ciudadanos para elegir, se convirtiera en un mecanismo de participación popular, aceptada y generalizada, durante estos dos siglos de vida independiente.

El voto lleva implícito una acción política poderosa, un criterio imperioso, una demanda firme, una voz potente, es derecho de ley, con ella elevamos nuestras demandas, escogemos a nuestros líderes, exigimos a quienes nos gobiernan una conducta coherente. No podemos hacer uso de esta herramienta de manera irresponsable, sin pensar, sin analizar, sin reflexionar, sin meditar en los alcances de una decisión, de cada uno y en conjunto de todos los que tenemos la obligación moral de ejercer el voto.

No se trata de votar únicamente por alguna filiación, no se trata de votar porque tengo intereses privativos y mezquinos, no se trata de votar solo con el corazón, no se trata de tematizar y polarizar las opiniones. Tampoco de despreciar el sufragio, anulándolo, no se trata de ejercer el voto protesta y no acudir a las urnas. Se requiere que las personas se informen sobre los temas de fondo, sobre los grandes retos y sobre la agenda que debemos resolver y afrontar todos y cada uno de los costarricenses.

Instamos a la ciudadanía costarricense a ejercer este sagrado derecho del sufragio y poder afirmar que la democracia formal, el sistema electoral y la alternabilidad en el poder, son garantía de nuestro Estado de Derecho.

Junta Directiva y Tribunal de Honor y Ética
Colegio de Periodistas y Profesionales en Ciencias de la
Comunicación Colectiva-Costa Rica

Un cambio en mi decisión de voto

Alberto Salom Echeverría

Hijos, Hermanos, primos, primas, amigos y amigas entrañables. He visto casi todos los debates entre ambos candidatos en esta segunda ronda. Aunque Figueres en muchos aspectos, no me acaba de convencer, su discurso se muestra respetuoso de algunos asuntos que son para mí de enorme importancia. Ha pregonado su respeto por el Estado Social de Derecho, y tiene una postura mucho más moderna y justa que su contrincante, respecto del desarrollo acorde con el ambiente y el respeto a la Naturaleza.

En contraposición, Chaves ha dado claras muestras de ostentar un estilo autoritario y poco transparente, anti democrático demagógico, desconocedor de la realidad política y nada costarricense. Ha propuesto explorar y explotar al menos uno de los hidrocarburos, el gas natural; exhibe crasa ignorancia en cuanto al estado incipiente de la investigación en Costa Rica de la existencia de petróleo y gas, muestra desconocimiento además en cuanto a que en muchos casos el gas aparece en la naturaleza junto al petróleo y por ende no se puede extraer sin este. Ni siquiera sabe que, debido al estado tan embrionario de la exploración realizada en CR de esos elementos, pasarán los próximos cuatro años, sin que se pueda siquiera haber empezado, si es que fuera conveniente, la fase de extracción y explotación de dicho elemento. Propone convocar a un referéndum, cada vez que se atasque un asunto en la agenda legislativa. Deja ver, por un lado, su falta de voluntad y confianza en su liderazgo para buscar acuerdos en la Asamblea Legislativa. Por otra parte, refleja su gran desconocimiento de la legislación, ya que no ha discriminado siquiera llevar a referéndum asuntos que están vedados por la Constitución.

Por otra parte, al ver el debate de los vicepresidentes en la UNA, pude observar con honda preocupación que, el vice presidente de Chaves que compareció, ofreció controlar radicalmente las universidades públicas violando la Constitución, y eliminando la libertad de cátedra, sin decirlo de ese modo, ya que de seguro ni sabe en qué consiste.

Todo lo anterior, sumado a las constantes expresiones de infravaloración de la mujer por parte del candidato Chaves y las muchas evidencias de su ignorancia y subvaloración acerca del papel de la mujer en la sociedad moderna, su paridad irrestricta junto al hombre en el trabajo, además de las múltiples muestras de irrespeto a la mujer en su conducta personal, me han llevado a un cambio de la decisión que hasta hoy había sostenido y predicado en cuanto al voto en esta segunda ronda electoral. 

Por lo dicho, contrario a lo que siempre sostuve, he tomado la decisión de darle mi voto a Figueres, pese a que mis dudas sobre su liderazgo y consistencia, no se han disipado del todo.

Votaré por Figueres, aun cuando su propuesta programática, en mi opinión presenta vacíos importantes o desconocimiento por ejemplo, respecto de la contundencia con la que hay que acometer las medidas de progresividad en los impuestos, para continuar atajando la enorme evasión y elusión de los mismos por parte de sectores cúpula de la sociedad.

No obstante lo anteriormente dicho, mi análisis acerca de la actual coyuntura de la sociedad en Costa Rica, tan delicada y endeble en lo económico, tan precaria en lo político, tan desigual en lo social, tan urgida de señales políticas claras en cuanto a una agenda que contemple pasos seguros hacia la sostenibilidad en el desarrollo, me han llevado a la decisión que he expresado de votar por Figueres, pese a que algunas de mis críticas y temores, como ya lo dije siguen en pie.

Afirmo que, he querido expresar abiertamente mi voto, entre los círculos ciudadanos en los que me desenvuelvo porque quiero instar al menos a familiares, amistades y otros círculos ciudadanos cercanos que, como yo conservan hasta hoy dudas, a tomar una decisión de dar el voto a José María Figueres, para contribuir aunque sea en una pequeña escala, a brindarle a un eventual gobierno suyo más legitimidad y consenso para acometer una agenda que al menos contemple: una ruta que dé continuidad a la estabilización de las finanzas públicas, de respeto irrestricto por la Constitución, lo que implica resguardo por la autonomía de las instituciones que requieren de este fuero para cumplir su cometido con solvencia, muy especialmente me refiero al ICE, la CCSS y la autonomía de las universidades públicas. El país requiere asimismo de acuerdos amplios para mejorar decisivamente la educación pública, en particular el fortalecimiento de escuelas y colegios públicos en las zonas rurales y urbanas menos favorecidas por las políticas públicas de nuestro país; el próximo gobierno requiere consensos de ancha base para apuntalar la agenda de descarbonización y la profundización de un desarrollo ambientalmente sostenible y sustentable, que vele por el uso de tecnologías limpias en reemplazo progresivo del uso de hidrocarburos contaminantes. Se requerirá de consensos también para profundizar la ruta costarricense de respeto irrestricto por los derechos humanos, en particular los de las mujeres, las personas con discapacidad, las minorías étnicas y el respeto a los derechos de las personas sexualmente diversas. El país está urgido de nuevos entendimientos políticos y en la sociedad civil, para enfrentar el narcotráfico y la corrupción en círculos de la administración pública y en el sector privado.

He decidido así mi voto, porque he llegado a la conclusión de que frente a los múltiples peligros que representa Chaves, su improvisado partido y agenda política, el país requiere de un nuevo diálogo social y político para afianzar la democracia con pluralidad de pareceres, pero con voluntad de entendimientos transparentes frente al autoritarismo que representa Chaves. La arrogancia y prepotencia de que ha hecho gala y su falta de transparencia, su doble moral y opacidad conforme la cual ha manejado su campaña electoral, constituyen muestras claras del liderazgo pernicioso que quiere ejercer para gobernar a Costa Rica. Ha llevado una contabilidad paralela respecto de la que está legalmente autorizada en materia electoral, ha mostrado en ello una gran opacidad frente a la ciudadanía y el Tribunal Supremo de Elecciones. Todo el proceder del candidato Rodrigo Chaves refleja su endeblez política, su falta de convicciones democráticas, su tendencia al manejo de los asuntos políticos tras bambalinas, amén de una enorme demagogia y muy escasa experiencia para gobernar el país.

Por todo ello, quienes profesamos diversas ideas políticas, pero con firme vocación democrática, quienes apostamos por la transparencia en la política y la rendición de cuentas, debemos dar este paso al frente, para tener autoridad moral y contribuir así a formar ese nuevo consenso político, ante un gobierno de José María Figueres. Hagámoslo con espíritu crítico y con optimismo a la vez, pues Costa Rica merece nuevas oportunidades para un mejor bienestar para todos sus hijos e hijas.

Peligros del uso político electoral de las convicciones religiosas

Las agrupaciones, organizaciones e instancias firmantes, queremos llamar la atención de las personas ciudadanas ante acontecimientos derivados en la segunda ronda electoral para elegir el próximo presidente de la República. Estos hechos debilitan el ejercicio ciudadano en la definición de las políticas públicas y derechos consagrados en la normativa del país, así como también, el ejercicio transparente de la fe de las personas. Nos preocupan los siguientes hechos y riesgos para la sociedad costarricense:

1.            El uso instrumental de lo religioso para obtener votos. Cuando la religión se usa de forma calculada para aumentar los votos de candidaturas específicas, pierden las personas ciudadanas, porque, como en otros casos, las decisiones públicas no se toman desde los intereses de la ciudadanía en toda su amplitud y heterogeneidad y, por el contrario, se establecen desde los pactos realizados entre los políticos de turno y unos pocos líderes; se corre el peligro que de esta manera se repartan puestos y recursos públicos de forma poco transparente y antidemocrática. Pierden también las personas creyentes, porque su fe se instrumentaliza y se entrega a cambio de influencias y recursos para líderes religiosos específicos y sus corporaciones religiosas. Así, se corre el riesgo de hacer de la fe un negocio o botín político y luego, esos líderes pueden quedar atados a los privilegios del poder.

2.            De esa manera, los compromisos realizados por candidatos con corporaciones religiosas particulares podrían hipotecar políticas públicas, puestos de gobierno y recursos del Estado, favoreciendo intereses corporativos de líderes religiosos específicos, con el riesgo de dejar de lado criterios de idoneidad y probidad.

3.            El desconocimiento de la diversidad religiosa, espiritual y conviccional de la población costarricense.

4.            El uso malintencionado, engañoso y desinformado de términos como “género”, para congraciarse con determinados sectores, descalificando y desconociendo los derechos de las mujeres y de la población sexualmente diversa, asociados a ese término.

5.            A partir del punto anterior, se debilitan derechos reconocidos por tratados internacionales y la normativa nacional. Así, se corre el riesgo de promover conductas sociales de descalificación y agresión a mujeres y a grupos diversos.

6.            El peligro de empeñar la educación a agendas moralistas determinadas, violentando derechos que ya forman parte del corpus jurídico nacional.

Por lo que manifestamos nuestro rechazo:

–              a cualquier uso instrumental de lo religioso para ganar votos a favor de candidatos específicos,

–              al uso calculado y manipulado del término “ideología de género” para atentar contra derechos fundamentales de mujeres, minorías y diversidades y para pasar por encima de la institucionalidad costarricense.

A cambio promovemos:

–              El reconocimiento de la diversidad religiosa, espiritual y conviccional de la población costarricense.

–              La visibilización y recuperación de la plural y heterogénea riqueza espiritual y cultural de Costa Rica y los aportes que ofrece para construir la paz y la cordialidad, entre los seres humanos y entre estos y el planeta.

–              Pensar el presente y futuro del país desde los valores democráticos, de respeto y convivencia dentro de procesos ciudadanos, colectivos, públicos y transparentes que permitan generar una sociedad cada vez más inclusiva, libre, justa y solidaria.

San José 29 de marzo, 2022

Con convicción y esperanza:

o             Foro Interreligioso de Costa Rica.

o             Foro de Educación Religiosa de Costa Rica.

o             Escuela Ecuménica de Ciencias de la Religión (EECR), de la Universidad Nacional (UNA).

o             Universidad Bíblica Latinoamericana (UBL).

o             Asociación Luterana de Centroamérica (Casa Adobe).

o             Centro de Investigación en Cultura y Desarrollo (CICDE-UNED).

o             Departamento Ecuménico de Investigaciones (DEI).

o             Centro Dominico de Investigación (CEDI).

o             Red de Ecoespiritualidad.

o             Comunidad Fray Bartolomé de las Casas, Dominicos.

o             Observatorio de lo Religioso.

o             Observatorio de Género y Medios (GEMA).

o             Organización Interseccional Pro Derechos Humanos en Costa Rica (OIDHCR).

o             Colectivo Diásporas Feministas.

o             Iglesia Metodista Wesleyana Costarricense, Señor De La Paz.

o             Grupo Reflexión Acción.

o             Colectivo Festival Ecológico.

o             Colectivo Las de Magdala Podcast.

o             Colectiva Coexistir de Cartago

o             Asociación Voces Nuestras

o             Red de Interculturalidad

Legitimidad de anular

José Manuel Arroyo Gutiérrez

            No encuentro razones ideológicas, programáticas, legales ni éticas para votar por alguno de los candidatos en esta segunda vuelta.

            Tanto Figueres Olsen como Chaves Robles son hijos ideológicos de un fenómeno político-económico mundial gestado en la década de los años ochenta del siglo pasado. A partir de la era Reagan-Thatcher y el llamado Consenso de Washington, se abre paso al desmantelamiento del modelo de Estado Benefactor y su expresión jurídica, el Estado de Derecho. Ya no habrá tanto la necesidad de golpes de estado militares, bastará con la dictadura del mercado impuesta a través de la libérrima competencia, privatización de los servicios públicos, reducción al mínimo de instituciones y el debilitamiento máximo del Estado y su función contralora/reguladora. Al mismo tiempo, se “flexibilizan” las leyes y derechos laborales y se promete, en vano,  ingresar  a una era de prosperidad y desarrollo de la que todos se beneficiarían. Ya Figueres, dos décadas atrás, nos dio testimonio de ser alumno aplicado en materia de cerrar instituciones y servicios públicos, favorecer la concentración de riqueza y debilitar un aparato estatal con muy poca capacidad de administrar y controlar los excesos de las élites económico-políticas. Por su parte, Chaves es un funcionario internacional de carrera en el Banco Mundial, es decir, un burócrata encargado, por varias décadas, de aplicar aquellas mismas recetas, patentemente fracasadas,  en los países en vías de desarrollo.

            Cuarenta años después de emprender estos caminos, los resultados son evidentes. Sin necesidad de entrar en detalles, tanto en los Estados Unidos de América como en Inglaterra, el empobrecimiento generalizado, el ensanchamiento de la brecha económica y la reducción efectiva de los derechos fundamentales de grandes mayorías,  se consolidan en toda su brutalidad. En el caso latinoamericano, el buque insignia de estas políticas, la república de Chile, se debate hoy en la urgencia de cambiar de rumbo ante los resultados desastrosos del modelo. En el caso costarricense, esta ruta nos ha llevado de ser una de las tres naciones con mejor índice de equidad, a convertirnos en una de las diez  más inequitativas de la región.

            Por esto, gane quien gane el próximo 3 de abril, en lo esencial, el modelo económico a seguir, no tendrá grandes diferencias. Será más de lo mismo, incluidos desdichadamente las concesiones del PAC en los últimos años. Seguirá creciendo la inequidad en la sociedad costarricense, un porcentaje cada vez menor de familias concentrarán un porcentaje cada vez mayor de la riqueza y, a la inversa, las clases bajas y medias se tendrán que contentar con las migajas que queden. He aquí la razón de la sinrazón de una fobia incontrolable contra todo lo que huela a organizaciones y causas populares, a solidaridad social, a institucionalidad contralora, a pensamiento crítico universitario o a independencia judicial y de otras instituciones autónomas.

            ¿Puede caber duda al servicio de quiénes gobernarán ambos candidatos? Menciono sólo dos eventos muy recientes, en pleno curso de la segunda ronda, para ejemplificar lo que afirmamos.  Figueres recibe en donación,  de un magnate amigo,  el vuelo privado para reunirse con la élite económica de República Dominicana, embarcada como pocas naciones en la deriva neoliberal. Dejemos de lado la clandestinidad del viaje y si fue para recaudar dinero, para arreglar el mundo o para hablar sobre la guerra en Ucrania. Lo cierto es que este movimiento lo retrata de cuerpo entero. Desnuda quiénes son sus más cercanos aliados y quiénes serán su prioridad en un eventual gobierno suyo. Lejos están los tiempos en que República Dominicana envidiaba a Costa Rica, su modelo socialdemócrata de desarrollo y la calidad de sus instituciones. Ahora parece que vamos a la cola de las autocracias del libre mercado. Figueres Ferrer y Juan Bosch estarán revolcándose en sus tumbas. Del otro lado, Chaves, el hombre que regresa a su país más empujado por las circunstancias que por voluntad propia, es en realidad un perfecto desconocido. El tema de los acosos contra mujeres y las sanciones que se le impusieron en el Banco Mundial, han tenido el efecto secundario de no poder conocer otra serie de aspectos esenciales de su persona, como para depositar o no confianza en su candidatura. A estas alturas hay evidencia de la financiación irregular y oscura de su campaña, no sabemos al día de hoy cuánta financiación ha recibido ni de quiénes. Esto puede ser catastrófico cuando se hace política en tiempos del narco. Menudas sorpresas nos podremos llevar en el próximo cuatrienio.

            En lo programático, es un hecho que el PLN se ha cuidado de articular una propuesta elaborada y hasta progresista. Muy diferente al libelo improvisado, mínimo y superficial del PPSD. Pero no tenemos razón alguna para creer lo que ha sido puesto sobre el papel. Ya son muchas las veces que Figueres, entre desesperado e incoherente, ha asumido posiciones contrarias a su programa y ha tenido que desdecirse una y otra vez. A Chaves Robles, peor aún, le interesa muy poco tener un programa. Lo suyo son las consignas y frases huecas canalizadoras del descontento popular. Quizá esto explique por qué no hay verdadero debate de ideas, sino acusaciones sucias acerca de quién es más sucio. Esta es una hora lamentable para la democracia más antigua del continente iberoamericano.

            Desde el punto estrictamente legal, en Costa Rica abstenerse de votar no ha tenido consecuencias. Anular el voto está taxativamente previsto como posibilidad, sobre todo en el artículo 194 de Código Electoral. También es posible dejar en blanco la papeleta. Por viejos antecedentes jurisprudenciales del TSE, los votos nulos y en blanco se agrupan y contabilizan por separado, no se suman a ninguna de las otras opciones y su efecto, sobre todo para las primeras rondas, tiene que ver con la cifra de votos válidamente emitidos y si superan o no el 40% de ley para decidir una contienda en  primera instancia.      Anular el voto es una posibilidad legalmente prevista por el ordenamiento jurídico, y tan legítima desde el punto de vista cívico, como lo es el apoyo a cualquier candidatura.

            De modo que la voluntad del elector-ciudadano en nuestro país puede ser legítimamente abstenerse de votar, votar nulo o dejar la papeleta en blanco. Y en las actuales circunstancias, quienes estimamos que ninguno de los dos candidatos en la contienda merece nuestro apoyo, con total legitimidad podemos así manifestarlo. No hay derecho de reclamar a quienes decidamos expresar de estas maneras nuestra libre voluntad, a acusarnos de estar haciéndole el juego a uno u otro de los competidores por la sencilla razón de que no hemos sido parte de las “minorías mayoritarias” que nos metieron en esta encrucijada; tampoco se nos puede señalar irresponsabilidad alguna porque muchos de nosotros no estamos dejándonos llevar por la irreflexión, la mera subjetividad o la desidia. Todo lo contrario, estamos mandando el mensaje, a cualquiera de los  dos postulantes que gane, que lo hace con el mínimo de los apoyos y para que pongan su barba en remojo. Ya los neoliberales chilenos, con Sebastián Piñera a la cabeza, acaban de ser debidamente rasurados por el pueblo en las calles y en las urnas. Es una tendencia universal que busca poner freno a la teología del libre mercado, sus falsos profetas y su inalcanzable tierra prometida.

            Es más, no votar, anular o dejar en blanco la papeleta, no sólo son decisiones que pueden expresar un profundo malestar ciudadano, sino también puede constituir un legítimo gesto de integridad moral y claridad mental. En su novela Ensayo sobre la lucidez, el Premio Novel José Saramago, teje una aleccionadora trama en torno al tema que estamos tratando. En su ficción, un 83% del electorado decide votar en blanco. El sistema entra en crisis, pero ese alto porcentaje lo hace en razón del hartazgo popular por los abusos de la clase política, por el divorcio abismal entre los representantes y los representados, por la corrupción estructural que convierte la política  en una forma más de hacer negocios particulares, y por la distancia entre una democracia meramente formal frente a una democracia real y participativa. ¿Nos suena conocido? A ver si la literatura universal nos ayuda a salir del atolladero en que estamos. Este es el tópico que abre el campo de la ética pública en el ejercicio de los derechos ciudadanos y la necesidad de exigir cambios profundos en quienes se postulan para conducir el destino de todas y todos.

            Por último, ciertamente considero de gran importancia acudir a los recintos electorales como gesto de respeto por la institucionalidad democrática y el costo humano –incluso cruento- que el sufragio universal ha tenido a lo largo de la historio. Pero acudir a esta cita, en mi caso, será para anular el voto y ayudar a construir tiempos mejores.

Corte Internacional de Justicia resuelve medidas cautelares solicitadas por Ucrania y ordena a Rusia suspender operaciones militares

SURCOS comparte el documento (en inglés) de la Corte Internacional de Justicia (CIJ), según el cual se resuelven las medidas cautelares solicitadas por Ucrania y ordena a la Federación Rusa «suspender, de inmediato, las operaciones militares iniciadas el 24 de febrero».

La Federación Rusa debe asegurar que cualquier fuerza armada irregular no pueda participar en ninguna operación militar.

Documento compartido con SURCOS por Manuel Hernández Venegas.

Inflación y regla fiscal en entidades públicas

*ANTE EL AUMENTO DE LA INFLACIÓN, APLICACIÓN DE LA REGLA FISCAL AFECTARÁ FUNCIONAMIENTO DE ENTIDADES PÚBLICAS

La inflación interanual del mes de febrero dio un salto importante, ubicándose fuera de la zona meta del Banco Central de Costa Rica, en un proceso de aceleración de esta variable que se inició desde el mes de noviembre del año 2021. Presiones importantes se seguirán reflejando en los precios locales, producto del aumento en el precio del petróleo, el incremento en los costos del transporte comercial marítimo, aumentos en el costo de los alimentos y aumento en el tipo de cambio en el país. El problema inflacionario no es solo local, sino también global, y afectará la capacidad de recuperación de las economías del mundo, incluyendo la nuestra. El impacto que tiene el conflicto en el este de Europa no solo afectará el precio de la energía, sino también de los alimentos, producto del aumento en el costo de los fertilizantes y en el precio de algunos granos.

En el caso de la regla fiscal, tal y como el Observatorio Económico y Social de la Escuela de Economía de la Universidad Nacional (OES-UNA) lo señaló desde el año anterior, es muy importante tener claro que este mecanismo no se diseñó para aplicarse en un entorno de crisis, tampoco se consideró en su diseño el ajuste de los límites de gasto en entornos económicos de gran volatilidad, particularmente cuando la inflación crece por encima de lo previsto. Dado el nivel de crecimiento del gasto para el 2022 y considerando los problemas inflacionarios que estamos empezando a observar, de mantenerse la aplicación de la regla en el presente año se abrirá una brecha en los presupuestos de las instituciones públicas que sería importante y que vendría a afectar los servicios que éstas le prestan al país. El crecimiento máximo del gasto definido para el 2022 está siendo afectado por la caída del PIB nominal en el 2020, y dado que este año tendremos una inflación por encima del rango meta del Banco Central, las instituciones públicas sufrirán una reducción de sus presupuestos en términos reales.

Para OES-UNA urge incorporar en la Ley de Fortalecimiento de las Finanzas Públicas, un ajuste en la regla fiscal para que el porcentaje de crecimiento del gasto no sea menor a la inflación proyectada y que este nivel sea ajustado en la práctica al menos cada trimestre, algo que por supuesto no está previsto en la actual redacción de la norma. Además de esta modificación, es importante someter la regla a una serie de ajustes adicionales que permita un crecimiento racional del gasto y que deje de ser un instrumento de reforma implícita del Estado. Solo para considerar un ejemplo de lo pernicioso que puede ser este mecanismo, si no se corrige, en caso de seguir aplicando la regla fiscal al gasto en educación, éste podría bajar del 6% del PIB en el transcurso de los próximos años, en medio de los graves problemas existentes en el sistema educativo nacional.

Para OES-UNA los siguientes deberían ser otros ajustes a considerar en la regla fiscal:

  • Sacar de la limitación del gasto al gasto de capital, pues en el actual entorno de incertidumbre económica, impulsar la inversión pública ayudaría al país a crecer más rápido y permitiría alcanzar más rápidamente un nivel de sostenibilidad de la deuda pública.
  • Sacar del límite del gasto los recursos públicos destinados a ayudas a familias en condición de pobreza y vulnerabilidad económica, así como el gasto destinado a subsidios y becas estudiantiles. El aumento en la inflación, pero sobre todo en el costo de los alimentos y, eventualmente, del transporte público, producirá un efecto negativo mayor sobre las finanzas de las familias de menores recursos. Limitar el crecimiento del gasto en este caso sería contraproducente.
  • Deberían quedar por fuera de la aplicación de los límites de la regla fiscal, aquellos gastos ejecutados por entidades públicas con recursos propios, generados por la venta de servicios y cobro de tarifas, por el cobro de tributos especiales en entidades autónomas, cobros por ingreso a áreas protegidas y zonas de recreación, etc. Autorizar el gasto de estos recursos no afectaría el déficit del gobierno central, pero sí está provocando problemas para que las entidades públicas utilicen recursos que tienen disponibles.
  • Considerando el punto anterior, tampoco tiene sentido que se limite la ejecución de recursos provenientes de donaciones, cooperación internacional y otros recursos recibidos por el país, como aquellos recibidos en reconocimiento de su política ambiental. No poder gastar libremente estos recursos podría tener un efecto desmesurado sobre entidades del sector ambiental.
  • Finalmente, las excepciones de aplicación de la regla fiscal producto de emergencias declaradas en el país, deberían aplicarse en el mismo plazo que se establece como vigencia para una declaración de emergencia, cinco años, y no dos años como dice actualmente la Ley 9635.

8 de marzo, 2022.

*Observatorio Económico y Social, Escuela de Economía UNA

Oficina de Comunicación

Se la trajeron al suelo políticos y magistrados

Manuel Hernández

En el siglo pasado, las democracias fueron derribadas con acciones militares y golpes de Estado.

En Guatemala, Chile, Argentina, Brasil, República Dominicana, la derrocaron con violentos golpes de Estado, que nos dejaron miles de compatriotas latinoamericanos muertos y desaparecidos.

Pero, modernamente, afirma The New York Times, las democracias se han derrumbado mayoritariamente, no con golpes violentos, sino a través de un deslizamiento gradual hacia el autoritarismo.

Nuestra democracia, la de la Suiza centroamericana, que aunque ciertamente nunca fue perfecta, radicada en la Constitución de 1949, resultado de una dolorosa guerra civil, la derrumbaron políticos y Magistrados, de manera motorizada, en menos de los últimos 4 años.

Esta subversión de la institucionalidad democrática, se fraguó a merced de un poderoso y autoritario tridente legislativo: Ley de Fortalecimiento de las Finanzas Públicas (2018), la regresiva Ley Antihuelgas (2020), y para coronar esta vorágine neoliberal, la Ley Marco de Empleo Publico (2022), que, en definitiva, dinamitó nuestro diseño constitucional.

Nuestro mayor desafío, ahora más que nunca, es recuperar el Estado Social y Democrático.
08/03/2022