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Historias de un caminante – Solidaridad con Palestina

Edison Valverde Araya

Encuentro del Buen Vivir.

El sábado 6 de septiembre, miembros del Buen Vivir nos reunimos en la Finca Utopía del compañero Juan Félix Castro de San Ramón de Alajuela.

Así como deseamos Buen Vivir en Costa Rica, igual deseamos Buen Vivir en Palestina y el mundo entero.

En la foto compañeras y compañeros de Moravia, Territorios Indígenas Bribri y Ngäbe, Río Conejo, Moravia, Pacacua y El Rodeo de Mora, Desamparados, San Francisco de Dos Ríos, Naranjo, Cartago, San Ramón y Paso Ancho.

¡Alto al genocidio!

Foro en vivo: Manejo de desechos sólidos, ¿cuáles son las soluciones?

El próximo lunes 8 de septiembre a las 6:00 p.m., se realizará el foro “Manejo de desechos sólidos: ¿cuáles son las soluciones?”, un espacio de diálogo y análisis sobre alternativas para enfrentar uno de los principales retos ambientales del país.

El foro contará con la participación de:

  • Gina Borrero, ingeniera agrónoma, máster en Gestión de Recursos Naturales y Tecnologías de Producción, docente del INA.
  • Dayana Rojas, ingeniera en Biotecnología, máster en Responsabilidad Social Corporativa y presidenta de la Asociación Civil Pro Natura.
  • Ronald Arrieta, doctor en Biotecnología Ambiental, profesor jubilado de la UCR y especialista en manejo ecológico de desechos sólidos.

Te invitan:

  • Alianza por una Vida Digna
  • SURCOS digital
  • Kioscos Socioambientales
  • Escuela de Geografía de la Universidad de Costa Rica

Este espacio forma parte de una serie temática sobre desechos sólidos y su impacto en los territorios, que ya ha desarrollado dos conversatorios anteriores, disponibles para consulta:

            Rellenos sanitarios: Territorios de sacrificio y resistencia a la «basurización» Ver aquí.

            Rellenos sanitarios: Territorios amenazados por la «basurización» Ver aquí.

La invitación queda abierta para sumarse a esta transmisión mediante Facebook Live de SURCOS y reflexionar colectivamente sobre las alternativas posibles hacia una gestión más responsable y justa de los residuos.

Somos una extensión de nuestros ancestros: ¡La historia sí importa!

Por: Bernardo Archer Moore
Cahuita, Limón, Costa Rica

Preámbulo: Más allá del lugar de nacimiento, pigmentación de piel o de la nacionalidad, los pueblos afrodescendientes constituimos, de manera innegable, una prolongación viva de nuestros ancestros africanos.

La sociedad nos percibe de esa manera y dicha percepción repercute no solo en nuestra autoestima individual y colectiva, sino también en la formulación de políticas públicas que afectan directamente a nuestras comunidades.

En Talamanca la injusticia es aún más descarada: No sólo se han permitido los daños ambientales bajo la mirada complaciente del Ministerio de Ambiente y Energía (MINAET), sino que además, esa misma entidad estatal entre otras, han consumado el despojo de tierras a familias afrodescendientes más grande de la historia del país (1960 – 2010).

Este atropello se hizo sin ningún proceso legal de expropiación ni la más mínima indemnización, en abierta y flagrante violación del ordenamiento jurídico nacional e internacional.

A esta situación se añade la desacralización de cementerios ancestrales, donde reposan los antiguos propietarios de esas tierras. Y añadiendo «insulto al despojo», se han dado el lujo de pisotear las tumbas de los desposeídos. – Si sos negro, ¿qué más tendrán que hacer para que digás basta?

Este hecho constituye, por sí mismo, una de las ofensas e irrespetos más graves y perniciosos que el Estado costarricense ha infligido a la población afrocostarricense del país.

Nuestra realidad solo se entiende mirando la historia. En la Trata Transatlántica (siglos XVI–XIX), el control más cruel fue arrancar a los esclavizados de su historia, su lengua y su cosmovisión. Ese desarraigo permitió que la esclavitud sobreviviera más de tres siglos.

Pero, aun en medio de tanta opresión, las comunidades no dejaron morir su memoria. Poco a poco fueron reconstruyendo los recuerdos de sus ancestros, rescatando prácticas culturales prohibidas, y de esa semilla brotaron los primeros movimientos de resistencia.

Estas rebeliones, que se intensificaron en el siglo XVIII en colonias como Jamaica, Haití y Surinam, fueron el resultado directo de esa toma de conciencia histórica. El punto culminante se evidenció en la Revolución Haitiana (1791–1804), cuando la reivindicación de los ancestros se convirtió en motor de libertad.

En este marco, debemos ser críticos ante la afirmación de que “el pasado no importa, solo el presente.” Adoptar esa perspectiva equivale a aceptar la ruptura con nuestra herencia ancestral, lo cual fortalece el statu quo y legítima narrativas distorsionadas de nuestras raíces.

Entre ellas, se han repetido falacias como que “los ancestros eran pobres y sin tierras porque eran indignos”, un discurso que busca erosionar la autoestima y la dignidad de los pueblos afrodescendientes. Reconectar con la historia ancestral no es un ejercicio nostálgico, sino un acto de resistencia cultural y política.

Preservar ese vínculo es un acto de resistencia: Significa no dejar que nuestra identidad sea borrada por narrativas impuestas ni por retóricas de interés ajeno. Significa sostenerla en la verdad histórica, en la dignidad de nuestro presente y en la continuidad invencible de nuestra memoria colectiva.

03/09/2025

Historias de un caminante: Los diablos en Barva de Heredia

Nada extraño es ver salir a los diablos del templo católico de Barva. Tampoco es extraño ver mascaradas y cimarronas en el centro de la ciudad. Se dice que este pueblo es el más fiestero de Costa Rica, y es que casi todas las semanas la fiesta está presente. Hay mascarada y cimarrona en los nacimientos, los bautizos, las bodas, los cumpleaños, los funerales, los triunfos del equipo herediano, etc.

Pero, ¿por qué los diablos? La historia es larga. Vemos cómo en muchos pueblos de Abya Yala (América) existe la diablada o los diablitos. ¿Quién trajo la figura del diablo a este continente? Paradójicamente, fueron los cristianos quienes trajeron la idea del diablo, figura poderosa que fue apropiada por los pueblos y las culturas de América.

A los diablos de Barva se agrega la costumbre de pegar con vejigas de chancho a los parroquianos que huyen despavoridos.

¡Barva, pueblo de cimarronas y mascaradas!

El racismo inadvertido es indoloro

Por Bernardo Archer Moore
Cahuita

Tan indoloro que puede llevarnos a celebrarlo y a normalizar esa conducta, confundiéndose con gestos de aprecio o muestras de afecto.

Durante el auge de la política de desalojo del Estado costarricense en el Caribe (1950–1970), el abandono deliberado en infraestructura, educación, agricultura, industria y salud dejó a nuestras comunidades en el desamparo.

De allí nace el objetivo familiar afro costarricense de emigrar, y unido a la precariedad económica, relegó a un segundo plano la posibilidad de titular tierras.

Para familias que apenas lograban cubrir un alquiler de ¢300 colones al mes y un desayuno familiar de ¢75 colones —desglosado en ¢0.10 por azúcar, ¢0.15 por mantequilla y ¢0.50 por pan—, pagar los honorarios de un ingeniero topógrafo y un notario público para registrar una finca o parcela resultaba un sueño inalcanzable.

En ese contexto, muchas madres negras alentaban a sus hijos a emigrar como única vía para escapar del sufrimiento. Emigrar significaba esperanza: La posibilidad de sacar a la familia de la pobreza.

Así, ‘irse para triunfar’ (Leaving to succeed); se transformó en filosofía de vida, y cada hijo que partía era celebrado como un logro familiar.

Puedo dar testimonio de la celebración que compartieron mi difunta madre y sus vecinas el día en que llegó la carta anunciando que mi hermano mayor había logrado enlistarse en la Armada de los Estados Unidos, en plena época de la Guerra de Vietnam, durante la década de 1960.

Pero detrás de esa aparente celebración se escondía la herida: La migración forzada como respuesta a la exclusión y al racismo estructural.

Hoy, una de las armas más poderosas contra ese ‘racismo inadvertido’ es usar cada espacio para denunciarlo y generar conciencia: Desde el púlpito en la iglesia hasta las mesas de dominó en los patios, desde la palabra de los mayores hasta las conversaciones cotidianas en los porches de nuestras casas.

Porque el silencio nunca es neutral: El silencio siempre conduce al fracaso.

Luchas por el agua en Hatillo: Cuestionando los racionamientos como problema político y estructural

La presente nota se deriva de una producción del Observatorio de Bienes Comunes de la Universidad de Costa Rica (UCR), que profundiza en las luchas por el agua en Hatillo. Basada en la tesis de Andrés José Romero Méndez, «Territorios urbanos hidrosociales: una crítica a los racionamientos y desabastecimientos de agua en el distrito de Hatillo, San José (2020-2024)», se revela que los cortes de agua no son problemas meramente técnicos, sino el resultado de decisiones políticas, históricas y estructurales que han normalizado los racionamientos en estas comunidades.

La investigación introduce el concepto de territorios hidrosociales para entender el agua más allá de su condición física, como un campo de lucha influenciado por mecanismos biofísicos, jurídicos y decisiones políticas. Históricamente, la urbanización del agua en San José ha sido desigual, priorizando el este y oeste de la capital, mientras que Hatillo, concebido con una planificación deficiente, ha experimentado racionamientos desde los años 80. Estos cortes se han justificado bajo la idea de «escasez de agua» y un supuesto «desperdicio» por parte de los habitantes, a pesar de que la legislación es vaga y permite a los operadores definir la escasez a su conveniencia.

Frente a esta situación, las comunidades de Hatillo han gestado un fuerte movimiento de lucha social por el agua, especialmente a partir de 2020 con el «Movimiento Vecinos del Sur». La conflictividad emerge no del racionamiento en sí, sino del incumplimiento de horarios y la prolongación de los cortes, que afectan profundamente la vida cotidiana. Durante los momentos más tensos, hubo una disputa de narrativas: la comunidad utilizó manifestaciones, cierres estratégicos de calles y monitoreo digital para visibilizar su realidad, mientras que la institucionalidad buscó legitimar los racionamientos y deslegitimar los movimientos sociales, incluso con la represión policial a líderes y lideresas. La tesis de Romero Méndez cuestiona el paradigma hidráulico que despolitiza la gestión del agua y enfatiza la manipulación de datos para justificar acciones sin pruebas contundentes.

Para leer la nota completa: Le invitamos a visitar la página del Observatorio de Bienes Comunes de la UCR para conocer más sobre sus producciones y análisis sobre este y otros temas relevantes para los bienes comunes y las luchas sociales en el siguiente enlace: https://bienescomunes.fcs.ucr.ac.cr/luchas-por-el-agua-en-hatillo-que-nos-dicen-de-nuestros-territorios/

Le invitamos a ver el siguiente video:

«Luchas por el agua en Hatillo: Qué nos dicen de nuestros territorios».

Defensa pública de investigación sobre protección comunitaria del río Torres

La Universidad de Costa Rica, a través del Posgrado en Desarrollo Urbano y Gestión Territorial, anuncia la defensa pública del trabajo final de investigación aplicada titulado Programa de protección comunitaria del recurso hídrico río Torres. La investigación es desarrollada por Natalia Caro Bernal en el marco de la Maestría Profesional de Desarrollo Urbano y Gestión Territorial.

La actividad se realizará el viernes 29 de agosto a las 10:00 a.m., en modalidad presencial, en el Anfiteatro del Museo de la Niñez de Costa Rica.

La propuesta presentada busca articular acciones de resguardo y gestión comunitaria en torno al río Torres, bajo el lema “Río Torres conectando realidades”, promoviendo la vinculación entre investigación académica, participación ciudadana y protección de los recursos hídricos.

Escazú abre camino: el reto del diálogo real en el Plan Regulador

Observatorio de Bienes Comunes, UCR

Este martes 26 de agosto, el Concejo Municipal de Escazú confirmó el acuerdo alcanzado tras semanas de movilización ciudadana: se reinstala la Comisión Especial del Plan Regulador, garantizando que la ciudadanía tenga voz en la definición de este instrumento clave para el futuro del cantón.

La decisión marca un hito en la defensa de la participación ciudadana en Escazú. Luego de intensas tensiones, denuncias públicas y vigilias en el propio Concejo, vecinas y vecinos lograron abrir nuevamente el espacio para incidir en el proceso, revirtiendo el intento de trasladar toda la responsabilidad a una oficina técnica sin representación comunitaria.

Para las comunidades, se trata de un paso fundamental: el Plan Regulador incide directamente en la vida cotidiana, desde la protección de los Cerros de Escazú y las fuentes de agua, hasta la regulación de barrios, comercios e infraestructura.

Lo que viene: selección de representantes

Con el acuerdo ya en firme, el siguiente paso será la selección de las personas representantes de la ciudadanía que integrarán la Comisión. En cada uno de los tres distritos del cantón (Escazú, San Antonio y San Rafael) se realizarán audiencias públicas para elegir a quienes representarán la voz vecinal en este proceso. Esta fase será crucial para asegurar que exista una representación legítima, diversa y comprometida con los intereses colectivos.

Un diálogo necesario: conocimiento técnico y comunitario

Más allá de la conformación, se abre ahora una discusión de fondo: ¿cómo dialogan el conocimiento técnico y el comunitario en la construcción del Plan Regulador?

Tradicionalmente, la planificación territorial se ha basado en estudios técnicos —cartografía, imágenes satelitales, censos, diagnósticos sectoriales— que, aunque necesarios, resultan insuficientes para reflejar la complejidad de la vida cotidiana en el territorio.

El Manual de Planes Reguladores como Instrumento de Ordenamiento Territorial señala que la información para estos procesos puede y debe nutrirse de múltiples fuentes: inventarios ambientales, análisis socioeconómicos, talleres participativos, consultas locales, recorridos comunitarios y observación directa del entorno.

La experiencia de vecinas y vecinos aporta elementos que ningún estudio puede reemplazar: la memoria de inundaciones y deslizamientos, la relación con las quebradas y nacientes, el impacto de la expansión comercial en la vida barrial, la tensión entre agricultura y urbanización. Son trayectorias e historias de vida que permiten comprender el territorio en su dimensión más humana y comunitaria.

El reto estará en reconocer este conocimiento como parte legítima del proceso y no como un complemento secundario. Solo con un diálogo equilibrado entre lo técnico y lo comunitario será posible construir un Plan Regulador que garantice seguridad, sostenibilidad y calidad de vida para el cantón.

Un proceso en disputa

La reinstalación de la Comisión no significa que el camino esté despejado. Lo que viene será un proceso cargado de tensiones sobre qué contenidos se priorizan, cómo se recogen los aportes y hasta dónde se consideran las propuestas ciudadanas en las decisiones finales.

Sin embargo, la experiencia de estas semanas demuestra que la organización comunitaria es capaz de incidir. La presión vecinal no solo recuperó un espacio que se había cerrado, sino que dejó claro que la planificación territorial es un asunto de interés público que no puede definirse entre cuatro paredes.

Un nuevo capítulo para Escazú

Con este acuerdo, Escazú abre un nuevo capítulo en la gestión de su territorio. La Comisión Especial del Plan Regulador tendrá ahora la tarea de construir un puente entre la mirada técnica y la experiencia comunitaria.

El desafío será mantener viva la participación y asegurar que el futuro del cantón se decida de manera transparente, democrática y con la voz activa de quienes lo habitan día a día.

Herramientas y técnicas participativas disponibles

El Manual de Planes Reguladores enfatiza que la construcción de estos instrumentos no puede limitarse al análisis técnico, sino que debe integrar activamente la participación de las comunidades. Para ello, identifica un conjunto de herramientas que permiten recopilar, sistematizar y validar la información de manera inclusiva y transparente. Entre ellas se encuentran:

  1. Audiencias públicas: espacios formales donde se presentan avances, se recogen observaciones y se abren canales de diálogo directo con la ciudadanía.
  2. Talleres participativos: dinámicas grupales en las que se trabaja con mapas, dibujos y debates abiertos para recoger percepciones, propuestas y problemáticas locales.
  3. Mapeo comunitario: ejercicios donde las personas habitantes identifican en planos o cartografía sus recorridos, lugares de importancia, zonas de riesgo o sitios de conflicto.
  4. Entrevistas y encuestas: permiten profundizar en las experiencias de distintos sectores de la población, recogiendo datos cualitativos y cuantitativos.
  5. Mesas temáticas: espacios de discusión especializados (agua, movilidad, riesgo, vivienda, ambiente) que permiten detallar aportes sectoriales.
  6. Recorridos de campo y observación directa: visitas conjuntas a barrios, quebradas, zonas agrícolas o áreas de riesgo para complementar los diagnósticos técnicos con la mirada comunitaria.
  7. Inventarios y diagnósticos participativos: registros elaborados con apoyo de la población local sobre recursos naturales, espacios públicos, prácticas productivas o usos del suelo.

Estas herramientas demuestran que la información relevante para un Plan Regulador no proviene únicamente de estudios satelitales o consultorías técnicas, sino también del conocimiento acumulado en la vida cotidiana de las comunidades. Su incorporación fortalece la legitimidad del proceso y abre oportunidades para construir un ordenamiento territorial más justo y equilibrado.

Extracto de la sesión del Concejo Municipal

La educación como herramienta de liberación para la comunidad afrodescendiente

Marco Levy Virgo

A todos los afrodescendientes, dentro y fuera de Costa Rica

Soy Marco Levy Virgo, y me dirijo a ustedes con un análisis preciso y un llamado directo a replantear nuestras prioridades colectivas. En un contexto donde la opresión se manifiesta de manera sutil, es imperativo reconocer que la falta de visión y estrategia en muchos de nuestros líderes afrodescendientes ha perpetuado un enfoque equivocado: el privilegio del asistencialismo social por encima de la educación transformadora. Esta dinámica no es casual; históricamente, ha servido para mantenernos en situaciones de dependencia, instrumentalizados incluso por miembros de nuestra propia comunidad que, al momento de reclamar derechos y proponer soluciones, optan por lo accesorio en lugar de lo esencial.

El asistencialismo, aunque ofrece alivio inmediato, no resuelve las raíces de la desigualdad; al contrario, refuerza ciclos de opresión al limitar nuestra autonomía y capacidad de innovación. Nuestros líderes, en su miopía estratégica, han priorizado intervenciones paliativas que distraen de la verdadera empoderación. Es hora de invertir esa ecuación: la educación debe ser el pilar fundamental de nuestra lucha. Una educación integral, accesible y culturalmente relevante, que fomente el pensamiento crítico, el emprendimiento y la preservación de nuestra identidad, nos equipará para reclamar no solo derechos, sino también el control sobre nuestro destino.

Este enfoque no es un lujo teórico; es una necesidad urgente. Al fomentar la educación por encima del asistencialismo, rompemos las cadenas de la dependencia sutil y construimos una comunidad resiliente, capaz de generar soluciones sostenibles. Cada uno de nosotros tiene la responsabilidad de exigir y promover programas educativos que prioricen nuestra historia, habilidades y potencial, dejando atrás las propuestas superficiales que nos mantienen en la periferia.

Hago un llamado vehemente a que nos unamos en esta transformación: apoyen iniciativas educativas, presionen a líderes para redirigir recursos hacia la formación, y participen activamente en el desarrollo de estrategias que nos liberen de verdad. La pasividad ante esta falta de visión nos condena; la acción educativa nos eleva.

Con determinación y claridad estratégica.

Imagen con fines ilustrativos de UNFPA.

Escazú: Acuerdo sobre la gestión del Plan Regulador

Comunicado

La Municipalidad de Escazú comunica que el Concejo Municipal de Escazú y un grupo de ciudadanos acordaron la solución al tema de la gestión del Plan Regulador. El Plan Regulador se trabajará en conjunto entre la Oficina Técnica y la Comisión.

El acuerdo se dio luego de que el alcalde Orlando Umaña Umaña y el vecino Miguel León conversaron y promovieron una mesa de diálogo, para buscar soluciones en beneficio del cantón de Escazú, y convocaron a los 7 regidores propietarios para buscar un acuerdo.

Mañana martes se estará presentando el documento en la Sesión Ordinaria del Concejo Municipal, para que se apruebe el acuerdo al que se llegó para que trabajen la Oficina y la Comisión en conjunto.

Además, en otros puntos se fortalecerá las capacidades de la Oficina Técnica y los procesos de participación ciudadana.