¿De qué han servido los informes de las comisiones legislativas?

José Luis Pacheco Murillo

¿Qué resultados han tenido y de qué han servido los informes que han brindado las diferentes comisiones investigativas que se han formado en la Asamblea Legislativa? Desde que tengo memoria, esas comisiones para lo que han servido es para hacer de la lucha político electoral un circo y un show y no han producido ningún resultado positivo para el país.

Muchas de esas comisiones se han formado para investigar actuaciones de gastos, de inversiones improductivas, de acciones de funcionarios públicos, de decisiones de alcaldes, ministros y hasta el presidente de la República. ¿Cuáles han sido los resultados? ¿Podríamos los costarricenses sentirnos complacidos por los resultados de esas comisiones? Desde luego que no. En realidad, no han aportado nada. Han servido en muchos casos para linchar y despedazar a personas que por lo general tenían aspiraciones políticas y lo mejor era quitarlos del camino.

Lo que sí es real y completamente cuantificable son los miles de millones de colones que hemos tenido que pagar los costarricenses para que grupos de diputados confirmen esas comisiones que no producen nada.

Además, en muchos casos estas comisiones afectan en mucho las investigaciones que en ocasiones efectúa el Ministerio Público y eso en lugar de ayudar afecta negativamente posibles acciones que conduzcan a sancionar penalmente a responsables de actos de corrupción.

“Zapatero a tus zapatos” cada quien debe dedicarse especialmente a aquello para lo que se le ha elegido y los señores y señoras diputados deben abocarse especialmente a legislar y producir leyes que permitan el adecuado desarrollo del país y que ayuden a mejorar la calidad de vida de todos los habitantes de la República.

Las recomendaciones de esas comisiones no son ni obligatorias ni producen efectos en las acciones a tomar por parte de los otros poderes de la República. Por ende, en la mayoría de los casos, sus actuaciones y resultados son lo que el pueblo conoce como “un saludo a la bandera” o “una producción de humo””, es decir, no afectan ni positiva ni negativamente.

Aún tenemos a un magistrado que una comisión legislativa indicó que debía de renunciar y que no se eligiera más, esto hace más de cuarenta años, ese es un monumento a la ineficacia de dichas comisiones.

Dios quiera que los que ocupan cargos en la Asamblea Legislativa se dediquen a lo que les corresponde y no tomen cada situación que se presenta para crear comisiones. Ya hay comisiones permanentes que deben sacar los mejores proyectos para bien del país. Dedíquense a eso por el bien de todos.