Pandemia y comunicación con la población

Notas a vuela pluma

José Luis Amador

He oído decir que la guerra contra la pandemia no se gana en los hospitales solamente, sino en el día a día de las personas. En otras palabras, es la gente, somos todos en la casa, el barrio, la calle y el trabajo los que estamos en la primera línea de enfrentamiento con el covid 19. De ahí la importancia de estar bien informados.

Más allá de la buena voluntad y del enorme esfuerzo del señor Ministro de Salud y sus colaboradores, siento que está haciendo falta afinar la estrategia de comunicación de los aspectos atinentes a la pandemia, de cara a la gente.

Voy a exponer algunas ideas de manera desordenada e informal. La otra opción era no hacerlo, pero prefiero dejar estas letras aquí, por si son útiles para alguien.

Muchas de las cosas que se dicen en las ruedas de prensa diarias, deben desglosarse, convertirse en instrucciones precisas que se difundan luego por los diversos medios utilizando recursos de propaganda y comunicación popular, para que bajen y sean conocidas y aplicadas.

Yo no creo que todo el mundo sepa exactamente qué es una burbuja, mucho menos qué es romper una burbuja. (Qué bueno sería una mini encuesta).

Yo no creo que todo el mundo tenga conciencia de qué es una pandemia como fenómeno histórico, global, cíclico. No es algo imposible de entender para la gente, especialmente cuando se ilustra con otras pandemias y sus estragos, pero ayudaría a más de uno a tomar conciencia de la verdadera dimensión del fenómeno.

Pienso que hay información ya dicha pero que debe estarse reiterando siempre, solo que buscando diversos modos de decirlo para restablecer la atención.

Esto incluye desde el procedimiento de lavado de manos, hasta la desinfección de productos recién comprados, protocolos de ingreso a la casa. Las cosas que se repiten mucho deben ser dichas nuevamente de otro modo, utilizando otros canales y otros actores para que sean nuevamente motivo de interés.

Hay que asociar los temas de la pandemia con otros temas de interés del público, por ejemplo, lo que está sucediendo en el fútbol, por qué no podemos bailar, por qué no podemos hacer fiestas (pero no en sentido coercitivo sino didáctico).

Involucrar actores cómicos gente del arte, teatro de muñecos muchos de ellos desempleados para realizar breves presentaciones didácticas (Sketches)

Estos productos deben difundirse dosificadamente y comentarse didácticamente en la rueda de prensa, pero también en YouTube y Facebook y en los mecanismos utilizados por el MEP en sus programas.

Alguna información puede hacer énfasis en el manejo de la pandemia en zonas de más alto riesgo.

¿Qué medidas pueden tomarse en zonas urbanas de mayor hacinamiento?

¿Cómo se comporta “Juanito” en su barrio?

¿Cómo se cuida “Juanito” cuando juega con otros niños o adolescentes?

¿Qué hace cuando llega a su casa y como saluda a su abuelita?

Ya deberíamos tener una campaña con un personaje tipo Jacinto Basurilla como lo hemos tenido para temas como la basura

Hace falta una campaña más ingeniosa decididamente dirigida a la gente. No a los medios, los empresarios, ni a los otros políticos.

Qué bueno sería contar con el aporte creativo de grandes compañías de publicidad que normalmente ganan mucho dinero vendiendo propaganda de las entidades pública y privadas.

Sería deseable conocer alguna propuesta en este sentido de sectores académicos, artísticos y ONGs vinculadas a la comunicación popular.

Incluso dentro del Estado mismo tienen que haber recursos de comunicación más dinámicos que los que se están utilizando actualmente para llegarle a la población.

Las filminas que se utilizan en rueda de prensa son demasiado técnicas, le falta dinamismo y le falta una presentación más adecuada para la comunicación popular. (A veces es un asunto de sentido común, textos muy pequeños y otros).

Otra opción es que estos conceptos sean luego “traducidos” utilizando recursos de comunicación popular.

He visto a los actores del programa “LA PENSIÓN” hablando de la pandemia. Recursos de este tipo pueden utilizarse conscientemente para llevar información de modo planificado a la gente acerca de cómo actuar.

Debe hacerse una lista de temas y subtemas que conviene que la gente sepa y temas que la gente se pregunta o les preocupan.

Migrantes y pandemia, por ejemplo. Debe informarse a la población de manera sistemática sobre la actividad laboral de las personas extranjeras que trabajan en el país, cuyo impacto en salud se ha cuestionado, sin analizar también cuál es su aporte social y económico.

Como decía, conviene realizar un acopio de los temas que la gente más pregunta o que se considera que la gente debe saber.

Estos temas deben ser puestas en brochures o presentaciones audiovisuales breves para ser divulgadas por las redes sociales oficiales y no oficiales. Así, por ejemplo, debe haber instructivos acerca de temas tales como:

¿Qué hacer si me enfermo?

¿Cómo debe actuar la familia cuando un miembro se enferma?

¿Cómo comportarse en el barrio cuando un vecino enferma? ¿Cómo ayudar?

¿Cómo vamos a vencer la pandemia en la casa y el barrio?

Debe existir un brochure, un pequeño vídeo al respecto.

En esta época de youtubers, de Facebook y otras redes sociales, es impensable no contar con estos recursos divulgativos ordenados por módulos temáticos.

Se trata de hacer cosas simples sencillas ordenadas fluidas. Recomiendo tener cuidado con esas aparatosas propuestas burocráticas que terminan convirtiendo una idea dinámica en un programita que no camina.

Imagen: http://blogosferados.blogspot.com/p/comunicacion-institucional-y-comunitaria.html