UNA: Pruebas de bachillerato son de altas consecuencias y reflejan gran desigualdad en el país

  • Estudio de la Universidad Nacional revela que estudiantes de colegios ubicados en distritos con Índice de Desarrollo Social (IDS) bajo y muy bajo obtienen el menor porcentaje de aprobación en pruebas de bachillerato
  • Pruebas Nacionales de Bachillerato (PNB) son reflejo de una sociedad que territorialmente distribuye recursos y oportunidades de manera desigual
  • De no atenderse las amplias desigualdades territoriales, el sistema educativo acentúa la exclusión socioeducativa, en vista de que las PNB constituyen evaluaciones de altas consecuencias para la población estudiantil y la sociedad en su conjunto
  • Los resultados se pueden clasificar en tres estratos según la oferta educativa de los colegios, las que reflejan amplias desigualdades dentro del mismo sistema educativo
  • Consejo Superior de Educación conoce resultados y considera la información “sumamente importante y definitoria”

La investigación “Balance crítico de objetivos, modelo evaluativo, resultados y utilidad de las pruebas nacionales de bachillerato en educación media como instrumento de certificación del conocimiento de estudiantes” revela que la población estudiantil que obtiene menor rendimiento (menor aprobación y menores notas en los exámenes) en las Pruebas Nacionales de Bachillerato (PNB)) vive fuera de la GAM, en zona rural y reside en distritos con Índice de Desarrollo Social e IBINA de nivel bajo y muy bajo.

Realizado por académicos del Centro de Investigación y Docencia en Educación de la Universidad Nacional (CIDE-UNA), el estudio se estructura en 4 grandes apartados relacionados directamente con los siguientes objetivos: establecer la relación existente entre los resultados de las Pruebas Nacionales de Bachillerato y un conjunto de indicadores nacionales sobre desarrollo social y económico (cohorte del 2016), examinar los objetivos orientadores de las Pruebas Nacionales de Bachillerato y la percepción de sujetos clave sobre los mismos, caracterizar el modelo evaluativo que sustenta la elaboración y ejecución de las Pruebas Nacionales de Bachillerato, y valorar el uso que se hace de la información derivada de los resultados de las Pruebas Nacionales de Bachillerato por parte de los sectores involucrados en el proceso educativo.

A continuación se exponen de forma resumida las principales conclusiones generales, con el propósito de facilitar visualizar los principales hallazgos.

Conclusiones generales

  • El restablecimiento de las PNB con fines de acreditación de los aprendizajes en 1988 respondió a un contexto socioeducativo en el cual las concepciones de calidad de la educación se asociaban con las nociones de eficacia y eficiencia del sistema educativo. Hoy, tal concepción considera de manera sustantiva la pertinencia y la sensibilidad social como elementos vitales de todo proceso evaluativo. Los resultados de esta investigación muestran una importante diferencia en el rendimiento académico según las condiciones socioeconómicas del lugar de procedencia y la oferta educativa de acuerdo con la estratificación aquí planteada, por lo cual el sistema evaluativo debe ser sensible a estas disparidades. Es muy importante considerar los impactos de estas evaluaciones en función de las condiciones de desarrollo social de los lugares de residencia de los examinados, así como de las características de la oferta educativa de la que se proviene, pues en este momento se tiene una “talla única” para personas en condiciones muy desiguales.
  • Los propósitos que orientan la realización de las PNB se redactaron hace 30 años y forman parte de los objetivos de las pruebas nacionales contemplados en el Reglamento de Evaluación de los Aprendizajes. No han sido modificados, salvo de manera puntual en el 2018 con la eliminación de uno de los ocho objetivos originales y constituyen un conjunto de aspiraciones sobre el sistema nacional de educación como un todo, lo cual excede lo que se puede obtener de un sistema de evaluación nacional. Es decir, esperar que las PNB por sí solas cumplieran todos los objetivos que se les depositaron es algo que estas, por su naturaleza, no son capaces de cumplir.
  • Las PNB constituyen pruebas de altas consecuencias sociales para la persona estudiante que las realiza y para la sociedad en su conjunto, ya que la no aprobación de estas impide la certificación de la educación media y limita la posibilidad de continuar con estudios superiores, así como oportunidades de contratación laboral. Esto debido a que las PNB son “todo o nada”, es decir, o se las aprueba todas o no se recibe certificación.
  • Según se expresa en la literatura científica consultada, el modelo de pruebas referido a criterios es el más apropiado para la medición de los aprendizajes (a diferencia del actual modelo de las PNB referido a normas), lo cual es un argumento compartido por las personas entrevistadas especialistas en evaluación. Sin embargo, un cambio en el modelo de las PNB de normas a criterios, requeriría repensar los propósitos de estas y, sobre todo, las implicaciones que esto traería para el sistema educativo.
  • Respecto a la nota de presentación (NP) se constató que es un buen predictor del rendimiento obtenido por la población estudiantil que realiza las PNB. De igual forma, se considera que la NP opera como un incentivo de la evaluación sumativa y formativa propia de cada examinado durante el ciclo diversificado, por lo que debe continuar formando parte del modelo de evaluación de las PNB.
  • La incidencia de la aplicación de la “curva” es determinante para los resultados finales de las PNB para la población estudiantil que las realiza. Esta “curva” es un criterio que combina aspectos técnicos y políticos, aplicado por la Dirección de Gestión y Evaluación de la Calidad (DGEC) con el visto bueno del ministro o ministra, cada año, y tiene un gran impacto en el aumento de los niveles de aprobación de manera particular entre aquellos que provienen de los distritos con IDS bajo y muy bajo, y de zona rural. Sin la “curva” los porcentajes de aprobación nacional serían realmente calamitosos, situación que hace preocupante la calidad de la oferta educativa y nivel de desempeño del estudiantado en la educación diversificada.
  • Fue posible mostrar una correlación entre las condiciones de desarrollo de las Áreas de Menor y Mayor Desarrollo Relativo (AMMDR), según el IDS de los distritos de residencia de la población estudiantil que aplicó las PNB y el rendimiento obtenido por estos, siendo posible caracterizar un perfil socioeducativo de la población estudiantil según el grado de rendimiento en las PNB, tanto en los niveles de aprobación, como en los resultados de los exámenes por asignatura. Las personas de alto rendimiento en las PNB se caracterizan por vivir en distritos con niveles de desarrollo medios y altos. Mientras quienes viven en los distritos de nivel bajo y muy bajo obtuvieron los menores puntajes de aprobación y de nota en los exámenes por asignatura, situación que pone en evidencia el alto impacto de las PNB entre la población estudiantil nacional, lo cual sugiere un importante nivel de desigualdad y escasas posibilidades de desempeño de los examinados por las PNB. En este sentido, es importante reconocer que los distritos con IDS de niveles bajo y muy bajo, obtienen las puntuaciones más bajas en todas las asignaturas. Por lo expuesto, se considera que las PNB son el reflejo de una sociedad desigual que territorialmente distribuye recursos y oportunidades de manera injusta.
  • El perfil de la población estudiantil que obtienen mayor rendimiento (más aprobación y mejores notas en los exámenes) en las PNB se caracteriza por lo siguiente: viven en mayor proporción en la GAM y zona urbana, tienen una edad menor a 18 años, residen en distritos con IDS e IBINA medios y altos, son más hombres (solo para 2016), su mejor calificación la obtienen en la asignatura de inglés y en matemática obtienen una diferencia de 13 puntos porcentuales a favor con respecto a los que residen en distritos con IDS de nivel muy bajo. Finalmente, reciben un menor beneficio con la aplicación de la curva, dado que el margen de mejora es menor en comparación con quienes rinden más bajo.
  • El perfil de la población estudiantil que obtiene menor rendimiento (menor aprobación y menores notas en los exámenes) en las PNB se caracteriza por: viven fuera de la GAM y zona rural, tienen una edad mayor a los 18 años, residen en distritos con IDS e IBINA de nivel bajo y muy bajo, son más mujeres (solo para 2016), su mejor calificación la alcanzan en la asignatura de biología y la más baja en matemática, y obtienen un mayor beneficio con la aplicación de la curva dado el mayor margen de mejora que tienen con respecto al umbral de aprobación.
  • Considerando el tipo de financiamiento de los colegios, se encontró que los colegios privados y subvencionados muestran los mayores rendimientos y los públicos (con excepción de los científicos, humanísticos y bilingües) los más bajos.
  • Tomando como referencia el comportamiento de la calificación final de las PNB (suma de la NP y la nota obtenida en cada asignatura) fue posible, por medio de un análisis de conglomerados, obtener una alta asociación entre el rendimiento de la población estudiantil y las diferentes ofertas educativas, implicando la identificación de tres estratos de colegios. Estrato 1: estudiantes de colegios privados, subvencionados, públicos, científicos y experimentales bilingües. Estrato 2: estudiantes de colegios públicos, principalmente académicos diurnos y técnicos profesionales. Estrato 3: estudiantes de colegios rurales, indígenas y colegios no tradicionales. Esta clasificación representa una alternativa viable para analizar las diferencias en el rendimiento del bachillerato según el tipo de centro educativo.
  • Partiendo de la estratificación descrita, se estableció un perfil de las características predominantes en la población estudiantil para cada nivel estructural, las cuales se presentan a continuación. Estrato 1: mayoritariamente mujeres, con promedio de edad de 18,63 años, provienen de distritos cuyo índice de desarrollo social (IDS) es alto, residen en zona urbana, viven principalmente en la provincia de San José y en la GAM. Estrato 2: mayoritariamente mujeres, con promedio de edad de este estrato de 18,74 años, proviene de distritos cuyo índice de desarrollo social es medio y residen en zona urbana, viven principalmente en las provincias de San José y Puntarenas, y en la GAM. Estrato 3: son mayoritariamente mujeres, con promedio de edad de 23,17 años, provienen de distritos cuyo IDS es bajo o muy bajo y residen en zona urbana o rural en aproximadamente la misma proporción, viven principalmente en provincias diferentes a San José y fuera de la GAM.
  • Respecto a los informes anuales generados por la DGEC sobre los resultados de las PNB, resalta la calidad técnica de los mismos; no obstante, prevalecen algunas limitaciones, entre las que destacan: su escaso aprovechamiento para el mejoramiento de los procesos educativos en el aula y la gestión curricular de las instituciones, su poca articulación con otras instancias del MEP para que el uso de los resultados tenga repercusiones en la toma de decisiones relacionadas con el diseño y ejecución de políticas educativas, la poca orientación acerca de la utilidad de los resultados y las consecuencias de estos como parte de un enfoque de validez integral que contribuya al mejoramiento de los procesos educativos y la gestión curricular y pedagógica en los centros educativos. En la actualidad el MEP no cuenta con una instancia que de seguimiento a las acciones de mejora o planes remediales que toman como referente los resultados de las PNB; sólo se cuenta con las asesorías pedagógicas de las DRE, cuyas visitas durante el curso lectivo a las instituciones educativas son escasas,
  • El principio de igualdad de oportunidades que se supone en la realización del examen de bachillerato no se cumple en la realidad, en el tanto el mérito o el logro individual revela importantes vinculaciones con las condiciones socioeconómicas de las AMMDR de los distritos de procedencia de los examinados y las ofertas educativas existentes, como lo sugieren las correlaciones del rendimiento aquí presentadas con el IDS y el IBINA, así como la estratificación de tipos de centros educativos. La pregunta aquí es: ¿cómo reconocer este mérito escolar bajo el contexto en el que se ha desarrollado la población estudiantil?, así como también: ¿cómo crear condiciones de mayor igualdad y equidad educativa para todo el país? De no atenderse las amplias desigualdades aquí mostradas, el sistema educativo se convierte en una inclusión (oferta del sistema educativo) excluyente (examen de bachillerato). Por consiguiente, es perentorio que el MEP realice un proceso de transformación de las PNB de manera que se tome en consideración su propósito central y objetivos específicos, el modelo de evaluación, el uso de los resultados y, de manera urgente, las consecuencias de alto impacto que generan en el sistema educativo y en la sociedad costarricense en su conjunto. Además, el reconocimiento de desigualdades estructurales en la sociedad costarricense que se reflejan en los resultados de las PNB, debe llevar al análisis y establecimiento de un conjunto integral y estratégico de medidas orientadas a atenuar y superar estas diferencias, lo cual también podría ser objeto de futuras investigaciones.

La investigación

Lo anterior constituye un resumen general que expone los principales hallazgos de la investigación “Balance crítico de objetivos, modelo evaluativo, resultados y utilidad de la información de las Pruebas Nacionales de Bachillerato en Educación Media como instrumento de certificación del conocimiento de las y los estudiantes”, desarrollada desde el año 2017 por el Programa de Investigación “Perfiles, Dinámicas y Desafíos de la Educación Costarricense”, adscrito al Instituto de Estudios Interdisciplinarios de la Niñez y la Adolescencia (INEINA) del Centro de Investigación y Docencia en Educación (CIDE) de la Universidad Nacional.

La investigación busca aportar información con suficiente rigor científico y perspectiva territorial e histórica sobre algunos elementos centrales asociados con la realización de las Pruebas Nacionales de Bachillerato en Educación Media (PNB), que en el 2018 cumplen 30 años, luego de que fueron reestablecidas por el Ministerio de Educación Pública (MEP) en el año de 1988. El propósito es contribuir, a partir de sus principales hallazgos, con la discusión nacional en materia de política educativa, especialmente entre las instituciones académicas, las instancias técnicas del MEP y los órganos de mayor rango en la toma de decisiones educativas, particularmente en el Consejo Superior de Educación

Participaron en el estudio “Balance crítico de objetivos, modelo evaluativo, resultados y utilidad de la información de las Pruebas Nacionales de Bachillerato en Educación Media como instrumento de certificación del conocimiento de las y los estudiantes”, los investigadores e investigadoras: Francisco González Alvarado (coordinador), Cindy Artavia Aguilar, Guillermo Calderón Ramírez, Pablo Chaverri Chaves, Eddy Cruz Arroyo, Andrea Ramírez González, Magaly Rodríguez Pineda y José Solano Alpízar.

Se contó además con los estudiantes asistentes Ignacio Acosta Ballestero y María Pía Montero Jiménez.

Noviembre, 2018

Resumen general en:

https://sites.google.com/una.cr/programaperfiles

***Mayores detalles con los investigadores:

Francisco González Alvarado 88985427 (coordinador)

Pablo Chaverri Chaves 8842 4749

Cindy Artavia Aguilar 83413247

Andrea Ramírez González 88112473

*Imagen con fines ilustrativos tomada de Universidades.cr

Enviado por UNA Comunicación.

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