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Si… al SINART

Dr. Oscar Aguilar Bulgarelli
Fundador y Expresidente Ejecutivo

Desde que el presidente Rodrigo Carazo me encomendó la hermosa e importante tarea de fundar el Sistema Nacional de Radio y Televisión Cultural hace un poco más de 46 años, éste aun siempre tuvo en el diario “La Nación” su peor enemigo, pues junto con otros medios impresos, de televisión y radio, nunca dejaron de parar mientes para encontrar justificaciones y cerrarlo, sin lograrlo aún. Por eso, cuando el desgobierno chavistas lo manipuló, instrumentalizó, lo alejó totalmente de sus objetivos iniciales hasta llevarlo al borde del desfinanciamiento, creí que los de la NaziOn y sus adláteres se frotaban las manos y decían…al fin!!

Pero el editorial de hoy de ese periódico, debo confesar y reconocerlo, me dejó con la boca abierta y la quijada pegando al piso, cual si fuera semejante a la presidencial zapoteña. ¡La NaziON apoya el SINART!, no lo podía creer, lo leí dos veces por si acaso, pues no quería equivocarme; pero no, estaba leyendo bien. Vinieron a mi memoria aquellas décadas en las que Rodolfo Jiménez Borbón (Don Popo) y los directores a su servicio, llenaban ese medio de noticias falsas y mal intencionados editoriales contra la institución, y las mil batallas dadas contra ellos que he dejado narradas parcialmente en mis Memorias. Pero pareciera que los “nuevos popitos” que asumieron el poder en esa empresa, tienen otros horizontes, pero no me hago ilusiones.

Sin embargo, hay tres observaciones que hace el editorialista, para justificar que el SINART debe sobrevivir y jamás pensar en cerrarlo que, dicho sea de paso, han de saber los acólitos o monaguillos de Chaves en el Consejo de Gobierno, que eso o un cambio de condición requiere una ley aprobada por la Asamblea Legislativa, les guste o no.

Esas tres condiciones son: a) los medios de comunicación del Estado y no del gobierno, que son cosas diferentes, deben ser alternativos a las programaciones de los medios comerciales; vaya por Dios, eso lo señalamos claramente en el decreto que dio Carazo, en el folleto un SINART diferente que publiqué en 1998 cuando don. Miguel Ángel Rodríguez me encomendó la dura tarea de reconstruirlo y en el proyecto de ley que, en ese momento, mandamos a la Asamblea Legislativa…costó 46 años que se dieran cuenta que nos combatieron sin necesidad. b) Qué deben ser ¡culturales!, por supuesto que sí, precisamente el nombre inicial del SINART incluye eso, y los documentos arriba citados también. Fue en la Asamblea Legislativa al aprobarse la ley, que quitaron la palabra cultural y crearon el adefesio de empresa S.A. para hacer de la institución un negocio y, aquí, coincidimos con la tercera observación del editorial: “La radio y televisión cultural son un servicio no un negocio”, lo mismo dijimos, lo hicimos, lo logramos y nos combatieron…ahora 46 años después nos dan la razón.

Pero bienvenido sea, nunca es tarde cuando la dicha es buena, dice el dicho. La lucha por rescatar el SINART es de todos los costarricenses, pues no debemos dejar que las malas prácticas que se vienen dando desde el 2006, bastante antes del chavismo, pero intensificadas ahora, liquiden la institución.

Es urgente que los diputados en la Asamblea Legislativa, debidamente asesorados, revisen la ley del 2003 y corrijan los errores que se convirtieron en un cáncer, como quitarle su sentido cultural, crear una ineficiente e inservible junta directiva, poner como superior a un ente político como el Consejo de Gobierno, aclarar adecuadamente el sentido del aporte del 10% de las instituciones al SINART y que no pueda ser tergiversado como lo hizo hace poco la Contraloría General de la República, pero sobre todo y muy especialmente, devolverle su independencia política y evitar que individuos sin peso cultural, académico y político llegue a la Presidencia Ejecutiva del SINART para ser un simple achichincle del Poder Ejecutivo.

31 de diciembre de 2014

Oscar Aguilar Bulgarelli, SINART