Se le invita a ver y escuchar la lectura dramatizada por el actor y director teatral, José María Pou, del memorable poema «Esperando a los bárbaros» de Constantino Cavafis, en versión de Ramón Irigoyen.
La interpretación se realizó en 2015, en el marco de la sesión dedicada al poeta griego Cavafis, por la Fundación Juan March, en Madrid.
Esta poesía está ambientada en la época clásica, particularmente hace alusión a la caída del Imperio Romano.
El día de hoy, 8 de marzo, se realizó en el Parque de San Ramón, la conmemoración del Día Internacional de la Mujer. Entre las 8:00 am y 1:00 pm hubo puestos informativos, venta de artesanías, y la exposición del Concurso de Arcoiris. Además, entre la 1:00 pm y las 8:00 pm se realizó un acto conmemorativo y se llevaron a cabo actividades artísticas y culturales.
Se realizó una marcha a San José, y hubo plantones informativos en Limón, Coto Brus, y Puntarenas, organizado por la Red por los Derechos de la Mujer.
Compartido con SURCOS por la Red por los Derechos de la Mujer.
Este miércoles 23 de febrero se cumplen dos años (24-2-20) del asesinato de Jerhy Rivera, defensor de los derechos humanos, ambientales y territoriales del pueblo Brörán. Para conocer el contexto del crimen, el programa Voces y Política, contará a las 5:00 p.m. con la participación de Osvaldo Durán, docente del ITEC y ecologistas, además de la representación de las voces del pueblo Brörán, familiares de Jerhy Rivera y otros pueblos originarios.
Se invita a la participación en redes sociales o por medio de llamada telefónica. Teléfono: 2234 3233
Nuestro amado hijo Jerhy Helmut Rivera Rivera fue asesinado hace dos años en la lucha por la recuperación de tierras del territorio indígena Brörán conocido como Térraba.
Le invitamos a acompañarnos en la conmemoración de su vida a realizarse del 24 al 28 de febrero del 2022 en nuestra comunidad.
Agenda
Jueves 24
De 1:00pm a 4:00pm: Mesa con autoridades estatales: Recuperación de territorio indígena, desarrollo socioeconómico, producción alimentaria indígena.
De 4:00 a 6:00 pm Actividad Espiritual
Viernes 25
De 1:00 pm a 4:00p: pm: El negocio de la crisis climática / pueblos originarios y vigencia colonia., Con la participación de Osvaldo Duran.
De 4:00 pm a 6:00 pm: Actividad Espiritual
Sábado 26
De 10:00 am a 1:00 pm Caminata Río Grande de Térraba / Actividad espiritual a la orilla del río.
De 4: 00 pm a 6: 00 pm Actividad Espiritual
Domingo 27
De 10:00 am a 1:00 pm: Caminata al sitio donde fue asesinado Jerhy
De 4:00 pm a 5:00pm: presentación documental. Raquel Bolaños
De 5: 00pm a 7:00 pm: Actividad Espiritual
Lunes 28
De 3:00pm a 5:00pm: Conversatorio sobre Activistas en la lucha de los derechos de los pueblos indígenas.
De 5: 00pma 7:00pm Actividad Espiritual, cierre
Habrá hospedaje y camping disponible, por favor, confirmar con anticipación las fechas en las que nos pueden acompañar para hacer los preparativos.
Agradecemos su acompañamiento.
Con cariño. Enrique y Digna Rivera, padres de Jerhy.
La Cátedra Conmemorativa Clodomiro Picado Twight: Microbiología y Sociedad, le invita a participar del acto de conmemoración del centenario del nacimiento del Dr. Alfonso Trejos Willis, el cual se llevará a cabo el próximo miércoles 03 de noviembre del 2021, a las 10:00 a. m.
La transmisión se realizará vía Facebook@UniversidadCostaRica y Youtube:/UniversidadDeCR
El 1 ero de julio del año 1981, en Costa Rica, la joven Viviana Gallardo Camacho, de 18 años de edad, fue asesinada por varios disparos en una diminuta celda de detención de la Dirección General de la Guardia Civil, al tiempo que fueron heridas de bala dos compañeras suyas, también detenidas con ella.
Los tiros provinieron de un oficial de esta misma Guardia Civil, José Manuel Bolaños Quesada, quien, sin tener asignada la vigilancia de Viviana Gallardo y la de sus compañeras aquel fatídico día, llegó con su metralleta y al parecer, instrucciones muy claras.
En un texto del juez Rodolfo Piza Escalante adjuntado a una decisión de setiembre de 1983 de la Corte Interamericana de Derechos Humanos sobre este caso (véase enlace, páginas 19-31), se precisa que:
«2. El 1o. de julio de 1981, el Cabo de la Guardia Civil José Manuel Bolaños Quesada, que no estaba a cargo de la vigilancia de las detenidas, logró llegar hasta la puerta de su celda y disparar con una metralleta a través de la mirilla de la misma, causando la muerte de Viviana e hiriendo a sus compañeras Alejandra y Magaly«.
La noticia de la muerte de Viviana Gallardo estremeció a toda la sociedad costarricense y causó un profundo impacto en Costa Rica, en una época de violencia política que caracterizaba a la región centroamericana.
Desde la perspectiva internacional, el caso fue informado usando los canales usuales: por ejemplo, en este cable desclasificado de los archivos de la diplomacia de Argentina, se precisa la forma – algo escueta – en que fue informada la capital argentina por parte de uno de sus representantes en Costa Rica (véase texto). No se ha tenido acceso a otros cables diplomáticos enviados en la época desde San José (y se considera que una investigación al respecto sería muy deseable en aras de conocer mejor cómo la correspondencia diplomática comunicó al mundo este asesinato, y con base en qué tipo de fuentes).
Una reacción insólita del Estado costarricense
Desde la perspectiva del derecho internacional público, el caso del asesinato de Viviana Gallardo constituye una verdadera rareza, como lo detallaremos a continuación.
Se lee, en una primera decisión de la Corte Interamericana de Derechos Humanos del 13 de noviembre de 1981 (véase texto completo), que el Estado costarricense presentó una denuncia, muy pocos días después de los hechos, ante la misma Corte:
«1. Mediante telegrama del 6 de julio de 1981, el Gobierno de Costa Rica (en adelante «el Gobierno») anunció la introducción de la instancia de una demanda para que la Corte entrara a conocer el caso de Viviana Gallardo y otras. Por escrito del 15 de julio de 1981 ese anuncio fue formalizado. En su demanda el Gobierno manifestó a la Corte la decisión de someter a su conocimiento el caso de la muerte en prisión de la ciudadana costarricense Viviana Gallardo, así como el de las lesiones de sus compañeras de celda, causadas por un miembro de la Guardia Civil de Costa Rica, encargado de su vigilancia, en la Primera Comisaría de la Institución; hechos ocurridos el 1 de julio de 1981. En su demanda el Gobierno, invocando el artículo 62.3 de la Convención, solicitó que la Corte decidiera si esos hechos constituían una violación, por parte de las autoridades nacionales de Costa Rica, de los derechos humanos consagrados en los artículos 4 y 5 de la Convención, o de cualquier otro derecho contemplado en dicho instrumento internacional «.
El entonces Presidente de la Corte, el costarricense Rodolfo Piza Escalante, tramitó de manera muy célere la solicitud. Se lee en esta misma precitada decisión que:
«5.Por resolución del 15 de julio de 1981, el Presidente de la Corte, Dr. Rodolfo E. Piza E., decidió someter directamente la consideración de la demanda del Gobierno a la Corte en pleno. Resolvió igualmente, según lo dispuesto por el artículo 5.3 del Reglamento, ceder la Presidencia para el conocimiento del presente asunto al Vicepresidente, Dr. Máximo Cisneros. Habiendo sido electo Presidente de la Corte el Juez Carlos Roberto Reina el día 17 de julio de 1981, pasó desde la misma fecha a presidir las sesiones en sustitución del Juez Máximo Cisneros«.
La respuesta del juez interamericano se dio en dos tiempos.
En una primera decisión del 13 de noviembre de 1981 (cuyo documento original puede apreciarse en este enlace) los jueces decidieron rechazar la solicitud de Costa Rica, al leerse en la parte dispositiva que la Corte:
«1. Decide, unánimemente, no admitir la demanda introducida por el Gobierno de Costa Rica para el examen del caso de Viviana Gallardo y otras. 2. Decide, unánimemente, aceptar y tramitar la solicitud subsidiaria del Gobierno de Costa Rica para remitir el asunto a la Comisión Interamericana de Derechos Humanos. 3. Decide, unánimemente, retener la petición del Gobierno de Costa Rica en su lista de asuntos pendientes en espera del trámite ante la Comisión«.
Reenviado el caso a la Comisión, en este enlace se puede apreciar el informe de la Comisión Interamericana de Derechos Humanos del 30 de junio de 1983, que concluye:
«1. Declarar inadmisible la petición objeto del presente asunto de conformidad con el Artículo 48, numeral 1, inciso c) de la Convención Americana sobre Derechos Humanos. 2. Comunicar esta Resolución al Gobierno de Costa Rica y a la Corte Interamericana de Derechos Humanos. 3. Archivar este asunto de acuerdo con lo establecido en el Artículo 32 (c) del Reglamento de la Comisión Interamericana de Derechos Humanos«.
En un segundo tiempo, en una resolución del 8 de setiembre de 1983, la Corte Interamericana de Derechos Humanos (véase enlace pp.16-17), páginas decidió:
«1. Declarar inadmisible la petición objeto del presente asunto de conformidad con el artículo 48, numeral 1, inciso c) de la Convención Americana sobre Derechos Humanos. 2. Comunicar esta resolución al Gobierno de Costa Rica y a la Corte Interamericana de Derechos Humanos. 3. Archivar este asunto de acuerdo con lo establecido en el artículo 32 (c) del Reglamento de la Comisión Interamericana de Derechos Humanos. 4. Incluir la presente resolución en su Informe Anual a la Asamblea General de conformidad con el artículo 59 inciso g) del Reglamento de la Comisión«.
El precitado juez Rodolfo Piza Escalante se apartó del criterio de la mayoría (véase enlace, página 31), al indicar en una larga opinión disidente (o voto salvado) que:
«MI VOTO SALVADO es para que la Corte declare: 1. Que, en virtud de la Resolución de la Comisión No. 13/83 de 30 de junio de 1983, deben tenerse por agotados jurídicamente los procedimientos previstos en los artículos 48 a 50 de la Convención Americana sobre Derechos Humanos; 2. Que, en consecuencia, cumplida la condición de procedibilidad impuesta por el artículo 61.2 de la Convención y de conformidad con la Decisión de esta Corte del 13 de noviembre de 1981, debe la Corte reasumir el conocimiento de la petición presentada por el Gobierno de Costa Rica«.
En los anales del derecho internacional público, este caso resulta a todas luces insólito, en la medida en que, por primera (y única) vez, un Estado presentó una denuncia … en su contra. El sistema internacional de protección de los derechos humanos funciona como un régimen que asiste a las víctimas en caso de no encontrar justicia o respuesta a sus reclamos en un Estado Parte a un tratado internacional de derechos humanos: pero nunca fue ideado para que los Estados presenten denuncias en su contra.
Cuando el caso fue enviado para conocimiento de la Comisión, órgano interamericano jurídicamente habilitado para recibir denuncias por parte de las víctimas, una desgarradora carta de la madre de Viviana Gallardo a la Comisión Interamericana de Derechos Humanos de julio de 1983 (véase texto completo) señaló las condiciones inhumanas de detención previo al asesinato de su hija y las humillaciones a la que fue sometida días antes de aquel 1ero de julio de 1981.
Viviana Gallardo: preguntas lancinantes que no logra borrar el tiempo
En este muy completo artículo publicado por la BBC en el 2017 y titulado «Las incógnitas que rodean la muerte de Viviana Gallardo, unas de las páginas más opacas de la historia de Costa Rica» (y cuya lectura se recomienda), se lee que:
«Sin embargo, el Tribunal Superior Primero Penal condenó a Bolaños como autor único del crimen a 24 años de prisión, que después se redujeron a 18. Luego se le permitió visitar a sus hijos los fines de semana y el 30 de septiembre de 1987 obtuvo el beneficio de la libertad condicional.«
Una libertad condicional otorgada en setiembre de 1987 para hechos acaecidos en julio de 1981 plantea algunas interrogantes. No se ha tenido acceso a algún análisis desde la esfera penal que pueda explicar tan generoso beneficio obtenido de forma tan rápida por los defensores del señor Bolaños. Es de notar que en el precitado informe a la Comisión Interamericana de Derechos Humanos de 1983, el Estado costarricense se refirió a la pena de 18 años impuesta al señor Bolaños en una de sus respuestas:
» 13. El Gobierno de Costa Rica en nota del 24 de agosto de 1982 dio respuesta a la solicitud de la Comisión, adjuntando dos certificaciones debidamente autenticadas de las sentencias dictadas en la causa contra José Manuel Bolaños por los delitos de homicidio calificado, lesiones graves y lesiones leves en perjuicio de Viviana Gallardo, Alejandra Bonilla Leiva y Magaly Salazar Nasser. También informó que la pena de 18 años de prisión impuesta al señor Bolaños se cumple actualmente en el Centro Regional de Adaptación Social de Pérez Zeledón».
Fotografía de placa conmemorativa artesanal que apareció en el 2017 y fue a las pocas horas retirada, extraída de artículo de la BBC del 2017 titulado «Las incógnitas que rodean la muerte de Viviana Gallardo, unas de las páginas más opacas de la historia de Costa Rica».
En las conclusiones de su libro publicado en el 2017, titulado «El crimen de Viviana Gallardo» (véase texto completo), luego de un exhaustivo análisis, el historiador costarricense David Díaz Arias finalizó con dos preguntas que, 40 años después de los hechos, permanecen siempre muy válidas:
«El cabo Bolaños murió en junio del 2014 y la prensa comentó entonces que se había llevado a la tumba “el secreto” de por qué mató a Gallardo. En ese contexto, la segunda esposa de Bolaños repitió que aquel hombre había sido bueno, pero le indicó a La Nación que no quería ahondar en el pasado porque “ya lo que pasó pasó y él recibió la condena. Solo él y Dios saben lo que pasó y ya se lo llevó a la tumba”. Como se ve, es imposible que se dejen de tejer dudas sobre la muerte de Gallardo si la prensa insiste en crearlas o reproducirlas. No era exacto que Bolaños no hubiera dado una causa de por qué mató a Gallardo; de hecho, sí lo hizo, construyó dos explicaciones: la de que había sido una venganza, que ensayó entre julio de 1981 y marzo de 1982 y la de que había sido un plan construido desde “arriba” que primero reveló al Semanario Universidad en 1981 y que sostuvo y amplió en detalles desde 1982 hasta 1991. Su pena, además, fue drásticamente reducida de la que originalmente se le había impuesto.
Resulta claro ahora que la teoría de que Gallardo fue asesinada para evitar que delatara a los miembros de “La Familia” carece de fundamento, ya que desde el 17 de junio de 1981, las autoridades habían capturado prácticamente toda la documentación necesaria relacionada con ese grupo. Tampoco es creíble la teoría de que fueron altas autoridades políticas o policiales las que planearon el asesinato, dado que para efectos de combatir el comunismo era más estratégico que Gallardo permaneciera viva. Las preguntas de fondo, que permanecen sin responder son: ¿a quiénes les convenía que Gallardo muriera? ¿Quiénes podían ser directamente perjudicados si ella declaraba en los tribunales? » (pp.26-27).
En este artículo publicado por el periodista Fernando Francia el 2 de julio del 2020, titulado «Viviana Gallardo: un crimen aleccionador«, se lee que:
«El debate sobre terrorismo o revolucionaria se instaló para siempre. Los medios mantienen la versión de terrorismo, aunque estudiosos de historia, tanto David Díaz de la Universidad de Costa Rica como Eduardo Tristán de la Universidad de Santiago de Compostela, sostienen que, por sus postulados políticos, por los documentos encontrados y por las prácticas demostradas atribuidas a la organización no puede adosárseles el término de terrorismo. Era un grupo que cuestionaba el orden establecido y las injusticias y que pretendía realizar cambios por la vía armada».
A modo de conclusión
Salvo error de nuestra parte, en este 1ero de julio del 2021, no se ha observado ninguna iniciativa para conmemorar los 40 años desde que fue asesinada Viviana Gallardo en Costa Rica.
Pese a ello, no cabe duda que en este caso (como en muchos otros casos de violaciones a los derechos humanos ocurridos en América Latina), la exigencia de justicia y de verdad se acentúa con el pasar de cada primavera, de cada conmemoración; al tiempo que, algunos de los testigos de aquella convulsa época en América Central podrían sentir (tal vez) que ya ha llegado el momento de liberar algunas cosas ocultadas durante 40 años.
(*) Este texto fue elaborado por Nicolás Boeglin, Profesor de Derecho Internacional Público, Facultad de Derecho, Universidad de Costa Rica (UCR)
En el Día Internacional de la Mujer, conozca a las docentes, investigadoras y administrativas que inspiran, impulsan y empoderan a otras mujeres para forjar un mundo más equitativo
Desde sus respectivos campos del conocimiento, las científicas y académicas de la UCR aportan decididamente a la construcción de un mundo más equitativo, en el cual las mujeres tengan pleno goce de sus derechos y oportunidades para incidir en el rumbo de la sociedad.
Sus aportes tocan las vidas de otras mujeres. Sus trabajos van desde generar evidencias para exigirle al Estado el respeto de sus derechos reproductivos, abrir camino en campos profesionales liderados tradicionalmente por hombres e, incluso, impulsar a jóvenes científicas a competir internacionalmente en el mundo de la ciencia.
Pueden encontrarse en un laboratorio, trabajando en el campo, en un aula o en la palestra pública. En cada lugar que pisan, ellas hacen la diferencia. En este Día Internacional de la Mujer, les presentamos a algunas de las mujeres de la UCR que representan a muchas otras docentes, investigadoras y administrativas de la Institución, mujeres comprometidas con la lucha por la equidad y la igualdad de oportunidades para todas.
En este Día Internacional de la Mujer, les presentamos a algunas de ellas #MujeresQueInspiran
La Dra. Jessie Usaga Barrientos es docente de la Escuela de Tecnología de Alimentos e Investigadora del Centro Nacional de Ciencia y Tecnología de Alimentos (CITA).
Concluyó su doctorado en el 2014 en la Universidad de Cornell y, en el 2018, recibió la Beca Malaspina para jóvenes científicos excepcionales de parte del International Life Science Institute (ILSI), por la alta calidad de su trabajo sobre producción inocua de productos lácteos artesanales. Desde entonces, Jessie se dedicó a impulsar a otras jóvenes a formar equipos interdisciplinarios para desarrollar productos que contribuyeran a hacer una diferencia en la sociedad. También las instó a competir internacionalmente y a darse cuenta de su gran potencial en el mundo de la ciencia de alimentos.
Bajo la mentoría de la Dra. Usaga, sus estudiantes han trabajado en la estabilización de la leche materna que gestiona el Banco de Leche Materna de la CCSS, en el desarrollo de productos que contribuyan a la nutrición de poblaciones como mujeres embarazadas, así como en la elaboración de prototipos de productos que aprovechan las tecnologías autóctonas, incorporan tecnologías de conservación y promueven el desarrollo local.
Gracias a su apoyo, por cinco años consecutivos, las estudiantes de la Escuela de Tecnología de Alimentos han colocado la bandera costarricense en lo alto del podio, pues han logrado los primeros lugares en diversas categorías de competencias internacionales de investigación y desarrollo de productos del prestigioso Instituto de Tecnólogos de Alimentos de los Estados Unidos (IFT) y de la Unión Internacional de Ciencia y Tecnología de Alimentos (IUFoST), donde se han medido con competidores de todo el mundo.
La M. Sc. Gabriela Arguedas es farmacéutica, bioeticista y, desde el año 2008, investiga el campo de los derechos reproductivos de las mujeres. En el 2013, inició el abordaje de la violencia obstétrica, cuando ni siquiera se utilizaba este término en el mundo académico y hacerlo generaba diversas resistencias.
La académica ha desarrollado una amplia investigación cualitativa, así como trabajo conceptual y teórico para plantear una forma más robusta de comprender la violencia obstétrica y proponer posibles soluciones.
Su trabajo ha contribuido a mejorar los servicios de salud ginecoobstétrica y neonatal. Además, ha ampliado la discusión social sobre las diversas formas de discriminación y violencia contra las mujeres, acciones que siguen estando normalizadas en las relaciones sociales.
La Dra. Arguedas dirige actualmente el Observatorio de los Derechos Reproductivos de la Universidad de Costa Rica (UCR) y es integrante de numerosas redes académicas y asociaciones internacionales.
Patricia Sedó Masís
Patricia Sedó Masís es docente e investigadora de la Escuela de Nutrición de la Universidad de Costa Rica. Posee una Maestría en Gerontología y una Licenciatura en Nutrición. Es coordinadora, desde el 2003, del proyecto TCU-486, el Programa EC-436 sobre Cocina Patrimonial de Costa Rica y de diversas actividades de investigación y acción social en temas de alimentación y cultura.
Sedó es una apasionada de la acción social y trabaja en proyectos con un enfoque integral, motivo por el cual ganó el Premio de Acción Social en el área de Salud en el 2020. Para ella, la acción social permea la docencia y se nutre desde la investigación.
Ella ha tenido la oportunidad de vincularse con diferentes grupos, organizaciones e instituciones públicas en cuanto a la conservación de la cocina costarricense y en el trabajo directo con la población adulta mayor. Además, ha logrado acercarse a las comunidades y contribuir, bajo un encuentro de saberes, al mejoramiento de la alimentación y nutrición (campo principal de estudio de esta especialista).
Durante su trayectoria, Sedó también ha tenido la posibilidad de coordinar algunos proyectos de educación dirigidos a varias poblaciones, los cuales le han servido para seguirse nutriendo desde la mirada estudiantil.
La Dra. Tania Camacho Azofeifa es flautista y musicóloga. En la Universidad de Costa Rica obtuvo el Bachillerato en Enseñanza de la Música, así como el Bachillerato y Licenciatura en Música con énfasis en Flauta Traversa. Obtuvo su Maestría en Flauta y el Doctorado en Musicología Histórica, en la Universidad de Texas en Austin. Actualmente, es docente e investigadora en la Escuela de Artes Musicales y en la Sede de Occidente. Además, coordina la carrera de Enseñanza de la Música en dicha sede.
Entre sus proyectos destacan las investigaciones sobre la obra de la compositora costarricense Rocío Sanz, que incluyen la reconstrucción de la partitura y el montaje de su obra Cantata a la Independencia Centroamericana. También está dedicada a investigar sobre la cantante costarricense de música popular Julia Cortés, contemporánea de Rocío Sanz. De esta manera, Camacho Azofeifa busca visibilizar el aporte de las mujeres en la música.
Con ese mismo espíritu, desde el año 2017 organiza el Simposio Internacional Mujeres en la Música, un espacio feminista que reúne a personas nacionales y extranjeras con interés en explorar temas relacionados con el quehacer de las mujeres en todas las áreas de acción musical, investigación, composición, interpretación instrumental y vocal, educación, y gestión cultural tanto en la música académica como en la popular.
Viviana Guerrero es licenciada en Filosofía y máster en Ciencias Políticas por la Universidad de Costa Rica. Trabaja como docente en la Escuela de Filosofía de la misma Universidad desde el 2007, como investigadora del Centro de Investigaciones Históricas de América Central desde el 2013 y del Centro de Investigaciones en Estudios de la Mujer desde el 2015. A su vez, labora como consultora del Instituto Interamericano de Derechos Humanos desde el 2019. Sus investigaciones giran en torno a dos ejes: por un lado, la bioética y el género; y por el otro, los derechos sexuales y reproductivos de las mujeres.
Viviana se ha caracterizado por combinar activamente la investigación académica con la lucha política en torno a los derechos humanos de las mujeres. En cuanto a investigación, ha desarrollado la temática de la violencia obstétrica, pero particularmente ha estudiado lo que ella llama la lactancia materna feminista. En cuanto a la lucha política, se ha involucrado con organizaciones de mujeres que promueven los derechos sexuales y los derechos reproductivos, y con organizaciones de víctimas de violencia obstétrica. A lo interno de la Universidad, ha participado en el establecimiento de las salas de lactancia en la Facultad de Letras y en la Facultad de Educación.
Stephanie Fallas Navarro es máster en Tecnología Educativa y Capacitación Corporativa, licenciada en Administración con énfasis en Dirección de Empresas y bachiller en Administración de Empresas con énfasis en Gestión Organizacional.
Gracias a su formación, ha aportado a la Universidad un modelo de capacitación en gestión directiva para autoridades académicas y al desarrollo de estrategias y capacitación para el aprendizaje en la virtualidad. También se ha identificado con otras oportunidades de mejora de la UCR, donde ha aportado junto con personas del sector administrativo a varias iniciativas que fortalecen la democracia y el bienestar de la comunidad universitaria.
Uno de sus objetivos es visibilizar el aporte de las mujeres en la Universidad de Costa Rica a la sociedad costarricense. Como madre, entiende y quiere evidenciar las desigualdades en cuanto a la responsabilidad en la crianza y cuido de la familia y cómo influye esto en la participación en el ámbito laboral y la remuneración. Se ha interesado por la flexibilización de procesos institucionales, que sean más equitativos para que las mujeres de la comunidad universitaria puedan acceder a oportunidades educativas de grado y posgrado, capacitación técnica y profesional en balance con sus ámbitos personal, familiar y sus proyectos de vida.
Fallas, actualmente, es la representante del sector administrativo en el Consejo Universitario. Ella es la primera mujer que ocupa este puesto.
La Dra. Ruth Cubillo Paniagua es doctora en Literatura por la Universidad Autónoma de Barcelona. Actualmente, es la directora del Posgrado en Literatura y profesora catedrática de la Escuela de Filología, Lingüística y Literatura, ambos de la Universidad de Costa Rica. Entre los libros que ha publicado se encuentran Mujeres e identidades: las escritoras del Repertorio Americano (1919-1959), EUCR (2001); Mujeres ensayistas e intelectualidad de vanguardia en la Costa Rica de la primera mitad del siglo XX, EUCR (2011); Novelistas españolas del siglo de oro: la obra de Mariana de Carvajal y Saavedra, EUCR (2014), y Pobreza y desigualdad social en la narrativa costarricense: 1890-1940 (Editorial Costa Rica y EUCR, 2021). Además, ha publicado numerosos artículos en revistas especializadas.
En sus más de 20 años como docente universitaria, ha sido profesora de grado y posgrado, ha dirigido más de 20 tesis, ha desarrollado múltiples investigaciones en temas de género, literatura costarricense y literatura centroamericana; así como diversos proyectos de acción social, entre ellos el programa radial Mis lecturas por la radio. Asimismo, ha impulsado el desarrollo de nuevos ámbitos de investigación y docencia en la UCR, en especial la literatura comparada y la transmedialidad, así como la realización de investigaciones inter y transdisciplinarias.
La Dra. Cecilia Díaz Soucy es docente de la Facultad de Educación, en el área de Administración de la Educación no Formal, y es miembro del Observatorio de la Educación Nacional y Regional del Instituto de Investigación en Educación de la UCR. Fue fundadora e integrante del Centro de Estudios y Publicaciones Alforja de Costa Rica.
Se le reconoce por su trabajo constante y comprometido en procesos socioeducativos que posibilitan una mayor inclusión, solidaridad, y equidad. El qué, cómo y por qué las mujeres necesitan espacios propios de convivencia y elaboración social han sido parte de sus investigaciones y publicaciones.
Sus indagaciones la han llevado a transitar una variedad de temas y abordajes en torno a la mujer, la teoría feminista, la educación popular y las mujeres campesinas. Esto se refleja en publicaciones como Ciudadanas concretas, visibles y notables, ¿un sueño posible?; Pensar la cultura política desde las mujeres; Experienciario: reflexiones en la cotidianidad con mujeres rurales; Reconociendo poderes entre mujeres: subjetividad feminista y liderazgos.
La Dra. Nadia Ugalde Binda es una de las mujeres que hacen la diferencia con su sello de calidad. Actualmente, es una de las cinco investigadoras más citadas en América Latina en temas de contabilidad. Es profesora de la Escuela de Administración de Negocios y docente de cursos sobre costos avanzados, costos en decisiones de corto plazo, costeo y contabilidad.
Katzy O`neal Coto Periodista, Oficina de Divulgación e Información
SURCOS comparte el mensaje de Aida Alvarado González de la Red de Mujeres Rurales: «… nos recuerda el dolor de cuarenta mil mujeres costureras que por declararse en huelga hubo una gran masacre… ahí comenzó la pelea por los derechos y como nuestra organización es en base a los derechos, nos marca muy bien la cancha…»
SURCOS comparte el mensaje de la defensora indígena Elides Rivera, en el Día Internacional de la Mujer: «(…) como mujer indígena, recuperadora de los territorios y defensora del ambiente, para mí el 8 de marzo significa una retroalimentación a la lucha justa que nosotras como mujeres hacemos, (…)«.
Este 19 de diciembre fue una fecha que el pueblo costarricense debe colocar en su memoria colectiva y mantenerla siempre presente, el 19 de diciembre es un día de conmemoración, un día para rendir homenaje a 6 héroes de los trabajadores costarricenses que fueron asesinados el 19 de diciembre de 1948 en el Codo del Diablo, en los márgenes del río reventazón en la zona de Turrialba, 8 meses después de haber finalizado la guerra y a 7 meses de haber tomado el control político la Junta de Gobierno presidida por Jose Figueres Ferrer y a tan sólo 18 días del acto público que anunciaba la abolición del ejército en Costa Ria.
Los dirigentes comunistas fueron detenidos en sus casas en Limón, sin que mediara ningún cargo en su contra, excepto el ser todos miembros del Partido Comunista, el Partido Vanguardia Popular, una vez detenidos llegó la orden de trasladarlos a la capital, salieron de la cárcel esposados y en esa condición fueron subidos al vagón del tren con destino a San José.
Esta masacre, no fue el resultado de la irracionalidad o el abuso de un grupo indisciplinado de soldados del bando victorioso, el crimen, fue un crimen selectivo, fue un Crimen de Estado, planeado por altos dirigentes del grupo ganador con el fin de aterrorizar a los militantes y dirigentes comunistas del Partido Vanguardia Popular.
El crimen fue tan salvaje y la trama tan burda, que incluso varios miembros del grupo ganador reclamaron justicia y castigo contra los asesinos y la Junta de Gobierno se vio obligada a dejar que el poder judicial realizara un juicio, juicio que a su vez se convirtió en una de las farsas judiciales más vergonzosas de nuestra historia, pues aunque se conocieron los nombres de los sicarios y se dictó condena, ninguno fue a la cárcel, con ayuda del gobierno salieron del país, del asesino intelectual se conoció su nombre, aunque nunca se hizo público, se dice que ocupó altos puestos en el servicio exterior en la junta de gobierno y en luego repitió el cargo en varios gobiernos liberacionistas.
Este Crimen de Estado, no debe ser olvidado por el pueblo costarricenses. Toda persona con sensibilidad social, toda persona respetuosa de los valores de justicia, toda aquella persona interesada en la verdad histórica, toda aquella persona con interés en lograr una sociedad más justa e igualitaria, debe honrar a los mártires del Codo del Diablo e informarse sobre éste vergonzoso hecho de nuestra historia reciente. Debemos hacerlo del conocimiento de la juventud que hoy es víctima de un modelo educativo que no les enseña a conocer el pasado, debemos desarrollar lo que José Merino llamo la “estrategia de la memoria” como parte de la forma de lucha contra las políticas neoliberales que día a día nos van acorralando y quitando derechos que son producto de la lucha del pueblo, de la lucha que dieron los mártires del Codo del Diablo.
Gracias al trabajo de investigación y producción cinematográfica de los jóvenes, Antonio y Ernesto Jara Vargas, las nuevas generaciones hijas de la post guerra podemos conocer detalles del crimen en el documental El Codo del Diablo, que debe ser visto por todos los costarricenses: https://www.centrodecine.go.cr/producciones/codo-diablo
Hace pocos años la rectoría de la UCR publicó un excelente documental sobre los antecedentes, la confrontación y las consecuencias de la guerra de 1948, el director y realizador de ésta importante obra es el cineasta Andres Heindenreich, es un documental muy ilustrativo que también debe ser visto por todos los costarricenses.
También gracias a un importante grupo de jóvenes historiadores de la Escuela de Historia de la Universidad de Costa Rica, tenemos la oportunidad de leer varias importantes investigaciones que han publicado sobre los hechos ocultos durante décadas relacionados al conflicto armado de 1948.