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Etiqueta: geopolítica

Las paradojas de la democracia costarricense

Rafael Ángel Ugalde Quirós*

Sí bien es cierto durante más de dos meses faltaron manos para vacunar contra la COVID19 a casi cinco millones de costarricenses, también debe reconocerse que la pandemia en este pequeño país afloró importantes paradojas sociales, económicas y morales, excelentemente blindadas hasta entonces por las “castas” gobernantes.

Una reciente protesta de médicos que buscaban campos clínicos en los hospitales de la Caja Costarricense del Seguro Social (CCSS), no solo puso en entredicho las bondades oficiales de la sanidad costarricense, sino el bien resguardado embudo con que los galenos locales cuidan la profesión de Hipócrates, en todo el sistema asistencial. Durante la breve transmisión por la televisión se vieron a decenas de jóvenes vistiendo “gabachas blancas” en plena calle y pidiendo un lugar en los hospitales, en tanto con pancartas improvisadas expresaban su deseo de ayudar a combatir la crisis sanitaria, traducida ya en más de tres mil muertos, hasta mediados del mes de mayo.

El modelo actual, tendiente a convertir todo en negocio, mientras no se demuestre su ilegalidad, o se cometa un error grueso ostentando una “american life”, en el mercado todo es válido. El norte es crear empleo a como haya lugar por una especie de “Estado” privado, enemigo jurado del otro Estado; el que usted y yo conocíamos y nos dio obras de infraestructuras que aún se mantienen, eliminó de nuestras casas las “canfineras”, nos brindó educación gratuita, salud con dignidad, justicia pronta y cumplida, etc. Aunque, a decir verdad, nadie sigue sin explicar cómo se crea empleo sin consumo.

Sin embargo, un Estado Social cada vez más debilitado y chueco, es más fácil de controlar y, consecuentemente, las actividades más importantes, reducidas ahora a negocio privado, resultan absolutamente necesarias para el cerrado grupo de cámaras, federaciones o foros profesionales. Aunque, sea, por tanto falso, el paradigma aquel del “rebalse de la riqueza” para “Edmundo y todo el mundo”.

De esta manera, aunque quiera negarse o produzca escozor entre quienes defienden a la Caja Costarricense del Seguro Social (CCSS), se dieron los primeros pasos hacia la medicina privada, ganando terreno las clínicas y los hospitales privados, deteriorándose a la vez la atención de la población en el Seguro Social. Muere aquel o éste; solo uno de los dos modelos sobrevivirá. Citando a la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económicos (OCDE), la periodista Angela Ávalos (La Nación 1/12/ 2017) reveló que el 80% del gasto para servicios de salud particulares se destina a citas médicas y compra de medicinas. Dicha investigación señala que entre el 2000 y el 2014 hubo un incremento en el gasto de los costarricenses en centros médicos particulares. Este pasó de representar el 18,7% de los ingresos totales del sistema general de salud del país (incluye servicios públicos y privados) a un 24,9%. Se evidencia en el estudio que un 30% de la población usó servicios privados al menos una vez al año, un 60% de encuestados en 2009 reconoció preferir proveedores particulares a la Caja, el 50% de la población pensaba, para esa fecha, que se debería permitir dejar de contribuir a la Caja para hacerlo a un seguro privado, un 80% del gasto de bolsillo se destina a consultas médicas y compra de fármacos.

La paradoja es que, en pleno pico de la pandemia, con hospitales repletos de enfermos de Covid 19, limitaciones de camas para atender infectados y personal sanitario agotado por extenuantes jornadas laborales, el pequeño grupo de galenos “especializados” rechazó la posibilidad de pedir ayuda internacional para que doctores, que no sean ellos, auxilien a los costarricenses. Alegó que a ellos también los golpea el desempleo en el sector. Así lo dio a conocer el Sindicato Nacional de Médicos Especialistas (Siname) ante la propuesta de un grupo de exdiputados, quienes pidieron al presidente de la República, Carlos Alvarado, activar un convenio internacional con Cuba, para solicitar la llegada de sus especialistas. Entre los países que recibieron ayuda humanitaria cubana por la pandemia están Italia, Andorra, Francia (para sus territorios de ultramar en el Caribe), Jamaica, Barbados, Venezuela, Nicaragua, Antigua y Barbuda, Belice, Dominica, Granada, Haití, San Vicente y las Granadinas, Santa Lucía, San Cristóbal y Nieves, Surinam, Catar y Angola, entre otros. La ínsula figura además como el primer país del continente americano con una vacuna contra la pandemia desarrollada de forma independiente a la gran metrópoli controladora de la mayor parte de la ciencia y la tecnología. Se trata del inmunizante “Soberana 02” aplicada masivamente a la población, sin reacciones adversas, según las autoridades médicas de la isla.

Un reporte de la cadena estadounidense CNN en español (Patrick Oppmann; 07:52 GMT 1/4/ 2021), dio cuenta que el país caribeño tiene cinco candidatos vacunales. Se trata de la Mambisa, suministrada por vía nasal, y Abdala, que esperan producirla en forma industrial y desarrolladas ambas por el Centro de Ingeniería Genética y Biotecnología (CIGB); en tanto Soberana 01, Soberana 02 y Soberana PLUS son generadas por el Instituto Finlay de vacunas.

El reportaje de la cadena estadounidense reflejó las difíciles condiciones en que la ciencia médica cubana combate la plaga de Covid. El noticiero Rusia Today (RT), por su parte, citando a altas autoridades de la isla, acaba de informar que la educación y la salud están entre los más golpeados por el bloqueo estadounidense, que ya dura más de medio siglo.

Desde el anuncio en Washington que el jefe de la diplomacia de Estados Unidos, Antony Blinken, haría su primer viaje a Latinoamérica, se conoció que entre los temas en portafolio traía lo que los norteamericanos consideran “la construcción de un hemisferio más democrático, próspero y seguro para todos”, tuiteó. Por lo tanto, de seguro -aunque no necesariamente trascienda- atajar la influencia rusa y china en la región en un mundo cada vez más multipolar estará a la orden del día cuando visite nuestro país; así como cerrar fila obligatoriamente con la Casa Blanca en los asuntos sensibles para la administración Biden en la ONU y en los intentos de independencia de los pueblos en Bolivia, Nicaragua, Venezuela o Cuba.

En este sentido, la Red en Defensa de la Humanidad (REDH), que aglutina alrededor del mundo a destacadas personalidades preocupadas por los derechos humanos y las injusticias sociales, pidió a la Asamblea General de la ONU condene nuevamente el bloqueo contra el pueblo cubano. En un documento en poder de “Surcos”, firmado por personalidades de 46 naciones, se califica de “criminal” la política estadounidense contra Cuba. Entre los firmantes están el influyente investigador norteamericano, Noam Chomsky, el vicepresidente boliviano, David Choquehuanca, los expresidentes Luiz Inácio Lula da Silva, Evo Morales, José Mujica y Fernando Lugo, el excanciller ecuatoriano Ricardo Patiño, los líderes políticos venezolanos Adán Chávez Frías y Ernesto Villegas Poljak, el premio Nobel de la Paz, Adolfo Pérez Esquivel, el profesor y fundador de la REDH Pablo González Casanova, los escritores e investigadores mexicanos Elena Poniatowska y Héctor Díaz Polanco, el historiador indio Vijay Prashad, los intelectuales brasileños Leonardo Boff y Frei Betto, los académicos e investigadores argentinos Atilio Borón y Stella Calloni, entre otros.

El “arte” de hacer dinero

La otra paradoja innegable de la democracia tica es la capacidad de controlar las contradicciones flotantes, a raíz de la actual pandemia, así como la inteligencia con que actúa para que los privilegios de sus élites queden inmunes o sufran mínimos daños colaterales. Aunque la Constitución Política es clara, en cuanto garantizaba a los trabajadores un “salario mínimo” inembargable, los bancos lograron por la vía del tribunal constitucional, quedar autorizados para dejar a cualquier asalariado sin sustento, así como a su familia, en caso de retenciones por deudas. Unos 30 mil costarricenses, cuyo salario es insuficiente y recurren a endeudarse para atender las necesidades básicas, quedan excluidos de la “salvaguarda” del salario mínimo ideada por el legislador constituyente. Ahora bajo un argumento jurídico de “avanzada” no deben negárseles créditos, aunque queden sin un centavo el fin de mes.

El nombramiento de los magistrados y la posible influencia en ello de los bancos y otros consorcios, aunque se quisiese disimular, sigue siendo un tema que “se las trae”, cuando abordamos el asunto de la “independencia” real del Poder Judicial, cuyas magistraturas son nombradas por los legisladores que siguen línea de partido. Formalmente, el poder judicial es independiente; sin embargo, el público “lobby” que hacen los candidatos a jueces para que se les nombre en un alto puesto judicial, hace dudar a miles de ticos sobre esta metodología. Es notorio, además – no hay medio de comunicación que no se haya ocupado del tema- que quienes controlan el negocio de los partidos políticos exigen altas sumas de dinero a quien aspire a un alto puesto político. Es decir, la “inversión” a largo plazo de esta “industria” de las agrupaciones electorales (con el perdón de los industriales sanitos), resta credibilidad a estos elegidos, pues difícilmente alguien saca de su patrimonio 20 o 29 millones de colones, si no tiene certeza de recuperarlos.

 Por eso, el tema del nombramiento de magistraturas no pierde relevancia en el país, estese en campaña electoral o en pleno cobro de la deuda política, ante el Tribunal Supremo de Elecciones. El asunto quedó en evidencia hace pocos días cuando la Corte Plena no recibió al relator de la Naciones Unidas, el peruano Diego García Sayan, para conocer un informe, precisamente, sobre la elección de magistrados. Los juristas, por amplia mayoría, calificaron de “injerencia” este informe especializado. Este calificado juez suramericano ha presentado dos informes muy críticos sobre el proceso de elección de magistraturas en Costa Rica.

Esta especie de “verónica” – como dicen en la “fiesta brava”- con que la “bicentenaria” democracia “sortea” las profundas contradicciones sociales, así como el marcado proceso de desmoralización en casi todos los poderes de la república, bien merece un reconocimiento con caro champagne, a nombre de todos estos abnegados defensores de las poderosas élites. Por menos, en Colombia, una reforma tributaria – los cambios en cada nación son pocos, sí se comparan con la uniformidad dada por los banqueros a los gobiernos satélites- se perdió ya la cuenta de “desaparecidos” y dejó más de medio centenar de muertos, cuando el presidente Iván Duque dio trato “de guerra” a la protesta. En Chile, un alza en los pasajes del transporte del Metro desembocará, quieran o no dichas élites gobernantes, en una nueva Constitución, luego que el gobierno del conservador Sebastián Piñera también dio trato de guerra a las protestas del pueblo y los carabineros dejaran ciegos a un montón de chilenos, que siguen apareciendo con disparos en los ojos. En Bolivia, ahora se conoce, que el poder detrás del trono durante el golpe de estado instalado en la nación andina con el beneplácito de la OEA, el exministro Arturo Murillo, no solo dio también trato de guerra a las protestas en nombre de la “democracia”, como si estuviéramos nuevamente ante una nueva doctrina de seguridad nacional como fue el “Plan Cóndor” para la región, sino que se embuchacó $800 mil por sobreprecio a pertrechos para reprimir gente comprados a Brasil

En nuestro país el desempleo alcanzó 18,5%, equivalente a 452 mil personas sin trabajo, según la Encuesta Continua de Empleo, elaborada por el Instituto Nacional de Estadísticas y Censos (INEC), entre diciembre del 2020 – enero y febrero 2021; el hambre atormentó a 220 mil ticos – el 4,4% de la población- en el trienio de 2015-2017, según dio a conocer en noviembre pasado el periódico digital “ El Mundo” (https://www.elmundo.cr/costa-rica/220-mil-costarricenses-padecen-de-hambre-mientras-que-la-obesidad-y-el-sobrepeso-aumentan/). Sin embargo, sí algo siguen sin “driblar” – no se pueden ocultar los contraste sociales, aunque culpen de todo a la pandemia- son los altos niveles de corrupción salidos a flote en las altas esferas. Sobre precios de mascarillas en la CCSS, obras de infraestructura que alcanzan dos y tres veces el valor original, infiltración del narcotráfico, evasión de impuestos, contrabandos, etc.

Según la prensa, para citar el caso más reciente, una banda de supuestos traficantes de droga “importaban” directamente cocaína desde Colombia para luego “exportarla” en contenedores hacia Europa. Lo singular del caso es que dos de los investigados entraban al congreso como “Pedro por su casa” para sostener reuniones y conversaciones con los “padres” de la patria sobre futuras inversiones en el campo turístico e inmobiliario. Durante la estadía de los legisladores en el viejo edificio de la Asamblea Legislativa restringieron la presencia de público a las barras diputadiles, pues el ruido de las protestas los desconcentraba en su noble servicio a la patria; cuando tuvieron edificio nuevo los diputados por largo tiempo estuvieron largo del pueblo, gracias a unas láminas de zinc que impedían el acceso al lujoso edificio.

Con antelación a estos inversionistas que ahora son investigados por problemas con droga, un alcalde y otro joven diputado de la zona sur fueron vinculados con otra banda de presuntos narcos. Se supo además que uno de los investigados por tráfico de drogas hasta fue fiscal electoral en Limón.

¡Cosa más grande¡; diría Tres Patines.

 

(*) Periodista, abogado y notario por la U.C.R

Emplazan a Presidente y su ministro ante visita de Secretario de Estado estadounidense

SURCOS comparte la carta enviada por el Movimiento Patriótico por Costa Rica al presidente de la República y a su ministro de Relaciones Exteriores, ante la visita del Secretario de Estado de Estados Unidos de América.

Señor Carlos Alvarado Quesada
Presidente de la República,
Señor Rodolfo Solano Quirós
Ministro de Relaciones Exteriores y Culto
SM.

Presente

Ante la visita de Anthony Blinken, el Movimiento Patriótico por Costa Rica emplaza al Ministro de Relaciones Exteriores y al señor Presidente de la República.

1.- Señor Ministro Rodolfo Solano Quirós: Con fecha 27 de mayo de 2021 el Ministerio a su cargo anunció que:

«Costa Rica recibirá el 1 de junio, la visita del Secretario de Estado de los Estados Unidos de América, Anthony Blinken en el marco de la primera gira a la región».

2.- «Costa Rica será el primer país latinoamericano que visite el Secretario de Estado, desde que asumió funciones, confirmando así el excelente estado de las relaciones bilaterales existentes con los Estados Unidos de América».

3.- «En los últimos meses, los gobiernos de Costa Rica y los Estados Unidos han sostenido profundos y estratégicos acercamientos, que iniciaron con la conversación telefónica entre el Presidente Carlos Alvarado Quesada y el entonces presidente electo, Joseph Biden, el 30 de noviembre de 2020».

4.- «Desde entonces, en todos los espacios entre autoridades de ambos países, se ha confirmado la fuerte coincidencia de principios y valores, así como la importancia estratégica de la relación, lo cual se ratifica con la visita del Secretario Blinken».

5.-» Los grandes ejes de la relación estratégica con los Estados Unidos abarcan, entre otras áreas, el diálogo político, democracia, derechos humanos, seguridad, cambio climático, comercio, inversión y turismo, así como cooperación, incluyendo en materia de salud. «

Ante una agenda bilateral de tal naturaleza, de amplio espectro, que aborda temas sensibles y estratégicos para el futuro de nuestra nación, el Movimiento Patriótico por Costa Rica advierte a nuestros representantes y jerarcas políticos, señores Carlos Alvarado Quesada y Rodolfo Solano Quirós, Presidente de la República y Ministro de Relaciones Exteriores y Culto respectivamente, acerca de la necesidad de hacer respetar la dignidad patria, nuestra soberanía e independencia y en modo alguno comprometer en estas conversaciones, el uso de nuestro suelo patrio para algún objetivo contrario a nuestra tradición de paz.

En consecuencia manifestamos lo siguiente:

1.- El pueblo costarricense, a lo largo de su historia, ha sabido defender su libertad y la soberanía de nuestro suelo patrio.

2.- Las relaciones de amistad y colaboración de Costa Rica con naciones poderosas no debe comprometer nuestra independencia y soberanía en la toma de decisiones políticamente estratégicas. La ubicación geográfica de Costa Rica en el istmo centroamericano es de suma importancia en la geopolítica de las grandes potencias; de ahí el interés de los Estados Unidos a imponer y comprometer al país en los marcos de su política exterior.

En el pasado, durante el decenio de los ochenta del siglo pasado, correctas políticas de Estado y acertadas decisiones de gobierno, libraron a Costa Rica de involucrarse en las sangrientas guerras de Centro América. Por el contrario, fuimos abanderados de la neutralidad y pioneros en la consecución de la paz. Esto valió incluso un reconocimiento de la talla del Premio Nobel de la Paz.

3.- En el comunicado en mención se afirma que entre ambos países (CR-USA) «se ha confirmado la fuerte coincidencia de principios y valores, así como la importancia estratégica de la relación bilateral….»:

En relación con esta aseveración, el Movimiento Patriótico por Costa Rica considera que al contrastarla con los hechos históricos tal afirmación carece de veracidad.

En materia de paz, CR y USA tienen trayectorias divergentes pues sus intereses lejos están de ser los mismos: desde 1945 USA ha estado involucrado en la guerra y la división de países, primero en Corea, luego en Vietnam, continúa en Irak, Afganistán, Libia, Siria. La política injerencista y divisionista por medio de la guerra es evidente y la historia así lo registra. Además, su presupuesto militar ocupa el primer lugar entre todos los países del mundo. Costa Rica por su parte se caracteriza por ser un pueblo pacífico. En su Constitución Política queda definitivamente abolido el ejército como institución permanente. Aquello que otros países gastan en armas, Costa Rica lo invierte en educación, salud y bienestar social. En consecuencia, nuestro presupuesto militar tiende a cero.

4.- En la escala de valores de ambas sociedades tampoco existen las coincidencias que expresa el comunicado. Veamos uno: el respeto a los derechos humanos en ambos países. Cuántos años de lucha llevan los afrodescendientes por arrancar algunos derechos civiles. Sólo recordemos los sueños inconclusos aún, de Martin Luther King o la horrenda agonía de George Floyd asfixiado por un policía blanco que aprisiona a su cuello. Y el señor Anthony Blinken viene a hablar también de respeto a los derechos humanos luego de reunirse en Washington con la Ministra de Exteriores de Colombia y de darle su apoyo a Iván Duque, el presidente que ha reprimido las manifestaciones en ese país con saldo de decenas de muertos y centenares de heridos y desaparecidos.

No existen coincidencias, por tanto, señor Presidente y señor Ministro con los principios y valores que representa el Secretario de Estado de Estados Unidos.

5.- Otro tema que será abordado en las conversaciones bilaterales será el de seguridad. Al respecto señalamos que la realidad nos muestra que vivimos un mundo multipolar, en consecuencia, el multilateralismo se impondrá como práctica soberana e independiente de aquellos gobernantes que se respeten y respeten al pueblo que les eligió democráticamente.

Atrás han de quedar aquellos conceptos mesiánicos del llamado «Destino Manifiesto» que se traducían en frases como «América para los americanos». Respetemos los acuerdos de la inmensa mayoría de países miembros de la ONU, contenidos en la Agenda 2030, muestra del más puro multilateralismo.

Hoy el mundo tiene otras realidades (protección del medio ambiente, erradicar el hambre y la pobreza, y otras) y, con esas realidades y en paz debemos continuar construyendo el presente y el futuro de la HUMANIDAD.

Con el respeto debido

Movimiento Patriótico por Costa Rica-MPPCR

“Sepamos ser libres”

Mainier Barboza Soto, ced. 202790037. firma responsable

Dirección electrónica mainierbarbo@gmail.com

Colombia, ¿Va por el Petróleo Venezolano?

Lic. José A. Amesty R.

25-mayo-2021

Colombia, desde hace décadas continua con la escalada de guerra sucia contra la guerrilla, para “supuestamente proteger” sus reservas de Petróleo. E igualmente, EEUU, está apoyando con su fachada de búsqueda de “narco-terroristas”, pero su intención es establecer condiciones de seguridad en las regiones potencialmente ricas en petróleo, para las posibilidades futuras de las compañías privadas y de las compañías estatales del petróleo.

De allí el interés de EEUU en la región de Putumayo-Colombia, (Región remota, ubicada al suroeste del país, en la región Amazónica, limitando al norte con Cauca y Caquetá, al este con Amazonas, al sur con Perú y Ecuador, y al oeste con Nariño, y que se encuentra en el centro de la zona con mayores recursos de petróleo sin explotar.

No obstante, la realidad petrolífera en los actuales momentos, según los analistas Lee Sustar y Ángel Ramón Núñez Hernández, Ingeniero de Petróleo, Jubilado de Pdvsa y cuya fuente de información es la Agencia Nacional de Hidrocarburos de Colombia (ANH), es que Colombia, producto del saqueo de EEUU, viene reflejando números en descenso en su producción anual, por el agotamiento de sus reservas, tanto de petróleo como de gas, así como por la poca incorporación de tales productos a la reserva.

Mencionando además, que durante los últimos años Colombia está buscando aventurarse en la práctica nefasta del fracking o fractura hidráulica, que es una técnica utilizada para sacar gas y petróleo de rocas profundas (hidrocarburos no convencionales), para lo cual se utiliza agua con químicos en alta presión hasta fracturar la roca. Práctica que inutiliza los suelos, malgasta el agua y utiliza mucha cantidad de la misma.

Por ejemplo, ya desde 2015 hasta el 2020, la producción de petróleo colombiano viene cayendo: 2015: 1.006 barriles diarios; 2016: 886; 2017: 854; 2018: 865; 2019: 886; 2020: 780. Significando que si comparamos el año 2015 con el 2020, cayo la producción en un-22,5%.

En este mismo periodo (2015-2019) las reservas colombianas probadas eran de: 2015: 2002, millones de barriles de petróleo; 2016: 1665; 2017: 1782; 2018: 1958; 2019: 2041. De acuerdo al consumo de estas reservas para el año 2019, el país neogranadino tenía reservas probadas de petróleo para 6,3 años.

Para que tengamos una idea, de lo dramático de la situación de Colombia en materia petrolera, para el 31 de diciembre del 2011, en Colombia se perforaron 125 pozos exploratorios, de los 35 que fueron productores, 54 estaban en pruebas y 36 fueron secos. Sin embargo, para el año 2019, Ecopetrol perforó 20 pozos exploratorios de hidrocarburos con una tasa de éxito de 40% (8 pozos exitosos).

Hasta noviembre de 2020, se habían perforado 16 pozos exploratorios, de los cuales, cuatro se realizaron en noviembre. Es importante destacar que la meta para el año 2020, era perforar 55 pozos exploratorios.

Colombia, para lograr mantener el ritmo de consumo actual, requiere perforar entre 80 a 100 pozos exploratorios por año y mantener una tasa de éxito superior al 25% (Tasa de éxito promedio a nivel mundial).

Datos más recientes y específicos, revelan que según el Ministerio de Minas y Energía de Colombia, la producción de petróleo en el mes de noviembre de 2020, fue de 760.940 barriles promedio día, que representan una disminución del 13,5% frente a noviembre de 2019.

Así mismo, la Cámara Colombiana de Petróleo, Gas y Energía (Campetrol), recalca que la producción de petróleo de Colombia en noviembre de 2020 fue de 759.000 barriles promedio día (bpd), lo que significó una caída del 13,8% en comparación con el mismo mes del 2019 cuando fue de 880.000 bpd.

En relación a los Taladros en operación, el número de taladros petroleros activos en Colombia en noviembre de 2020, se ubicó en los 100 equipos (22 de perforación), ocho taladros más que los registrados en noviembre cuando fueron 92. Sin embargo, la cifra es inferior a la registrada en noviembre de 2019, cuando había 140 taladros petroleros activos.

En cuanto a la función de los taladros, de los 258 equipos en existencia consolidados para noviembre de 2020, 114 fueron de labores de perforación, de los cuales 36 se reportaron como contratados y 22 como activos. Es importante resaltar que, de los 22 equipos activos, dos estuvieron en movilización y 20 en operación.

Finalmente, deseamos hacernos eco de los comentarios del analista Luis Prieto en su artículo “Un Momento con la Historia”, donde enfatizamos que, ante el panorama antes descrito, la escasez de reservas petroleras colombianas, el país neogranadino busca en Venezuela, alguna alternativa de solución.

Prieto nos recuerda que el polaco estadounidense Zbigniew Brzezinski, criminal de Guerra y reconocido fascista, elaboro una doctrina destinada a provocar conflictos intestinos en el mundo árabe y aprovechar dicha conflictividad, con el objeto de hacerse de vastas porciones de territorio y colocarlas como fuente proveedora de energía (Petróleo y Gas) para los EEUU.

Agregaríamos que también lo hicieron en Bosnia, en Irak, en Libia, lo intentaron en Bolivia, en Yemen, y por supuesto en el 2021, lo siguen intentando en Venezuela. Y por ende en Colombia.

Luis Prieto afirma que estamos convencidos de que los ataques criminales cometidos por los paramilitares, (supuestos miembros de las ex-FARC EP) colombianos, el 21 de marzo de 2021, en la población de la Victoria, Estado Apure, es una réplica de la Doctrina de Brzezinski.

Son los mismos esquemas usados por los Salafistas, El Estado Islámico y Al Qaeda, los Yi hadistas (por nombrar algunas) creados por la CIA y El Mossad.

Recordemos que la frontera entre Colombia y Venezuela, Estado Apure venezolano y el Arauca Colombiano, ha sido un escenario en el cual se han sucedido una serie de «enfrentamientos» entre irregulares colombianos (narcotraficantes, contrabandistas, bachaqueros, paramilitares), el ejército regular del narco Estado colombiano, la CIA Y el Mossad; y el Estado venezolano.

No es casual entonces, que la región del Estado Apure en Venezuela, rica en petróleo, sea un territorio apecetible para Colombia, buscando apropiarse de ella y solventar su crisis de reservas.

De allí que uno de los motivos reales de los enfrentamientos armados, tiene un fuerte olor a Petróleo.

Entonces, el trasfondo del enfrentamiento armado, es la apropiación de la reserva de petróleo existente en la zona del lado venezolano.

Ante lo anterior, nos preguntamos: ¿Se dan cuenta de la insistencia de Iván Duque en atacar al Gobierno Revolucionario de Venezuela?

Esta es la región venezolana, que nos hablara el comandante Hugo Rafael Chávez Frías, este territorio está constituido por los Estados Táchira Apure, Mérida Trujillo Zulia y Falcón de Venezuela, constituyéndose en la llamada media luna.

En resumen general, en Colombia hay una deficiencia de reservas de hidrocarburos, una industria que representa más de la mitad de las exportaciones nacionales. “Las reservas probadas de petróleo y gas del país son muy limitadas. Desde hace 40 años, no se encuentra un nuevo yacimiento convencional importante”, dijo a la AP, Francisco José Lloreda, presidente de la Asociación Colombiana de Petróleo. “A mediano plazo Colombia tiene dos opciones: encontrar un gran yacimiento en tierra firme o desarrollar sus yacimientos no convencionales a través de la técnica del fracking”.

Nosotros agregamos: o aventurarse a tomar por la fuerza territorios venezolanos ricos en petróleo, posibilidad-sugerencia que expusimos arriba.

Biden y el retorno de la Doctrina Kennan

Germán Gorraiz López – Analista

Con Joe Biden podríamos asistir al retorno de la tesis geopolítica de George Kennan, diplomático y consejero de EEUU en la década de los 40 e ideólogo de la denominada política de contención de la URSS, quién afirmó que “decir que el derrocamiento de los regímenes hostiles a EEUU es el objetivo principal de los servicios de inteligencia de EEUU, es un secreto a voces”, doctrina que podría tener su plasmación en la previsible defenestración de Al Asad y Erdogan.

Hacia la balcanización de Siria

Zbigniew Brzezinski, ex-asesor de seguridad nacional de la Casa Blanca bajo la presidencia de Jimmy Carter, advirtió sobre los peligros de una intervención en Siria y sobre el riesgo de una supuesta victoria de los rebeldes tras aseverar que “temo que la situación en Siria se dirija hacia una intervención estadounidense que carezca de eficacia» y expresar su perplejidad “tras la decisión de la CIA de desestabilizar Siria y derrocar a su Gobierno cuando los rebeldes son más hostiles para nosotros que Al Assad”. Con Joe Biden continuaría la estrategia diseñada por el general Martin Dempsey, jefe del Estado Mayor Conjunto de EE.UU con el entonces Jefe del Estado Mayor del Ejército de Defensa de Israel, Benny Gantz y que contaría con Jordania, Arabia Saudí, Turquía y Qatar como colaboradores necesarios para romper el Eje Teherán-Damasco-Beirut y obligar a Irán a renunciar a sus aspiraciones de la energía nuclear. Asimismo, según informa el diario israelí Haaretz, “Irán intentará aumentar considerablemente su presencia en Siria estableciendo una base aérea y otra naval”, lo que podría convertir a Siria en el portaviones continental de Irán y su grupo aliado Hezbolá, algo inadmisible para Israel que se vería obligado a dormir con sus más acérrimos enemigos.

Asimismo, el acuerdo de cooperación energética firmado en el 2011 entre Irak, Irán y Siria para la construcción del gasoducto de South Pars a Homms conectaría Irán con el Mar Mediterráneo y relativizaría la importancia estratégica del Proyecto del Gasoducto Trans-Adriático (TAP), (sustituto del fallido gasoducto Nabucco proyectado por EEUU para transportar el gas azerí a Europa a través de Turquía), así como el papel relevante de las monarquías árabes del Golfo como suministradores de crudo a Occidente, todo lo cual explicaría el afán de Qatar, Arabia Saudí y Turquía por defenestrar a Al-Asad, dentro del rol que se les ha asignado como peones de la partida geoestratégica que podremos contemplar en el próximo quinquenio.

En consecuencia, Al Asad podría convertirse en un obstáculo insalvable para el diseño de la nueva cartografía del Oriente Próximo, por lo que Putin y Biden podrían llegar a un acuerdo secreto en la Cumbre a celebrar en Junio entre ambos mandatarios para sacrificarlo en aras de lograr la pacificación del avispero sirio (previo desalojo de las tropas del ISIS que extenderán sus tentáculos hacia Libia y el Magreb) a cambio del cese de las sanciones económicas contra Rusia y la implementación de un nuevo status quo en Ucrania que supondrá la división de Ucrania en dos mitades casi simétricas (Sur y Este del país, incluida Crimea, bajo la órbita rusa) mientras el Centro y Oeste de la actual Ucrania navegarán tras la estela de la UE. Posteriormente, asistiremos a la partición de Siria en tres partes. Así tendremos la Siria alawita, protectorado ruso que abarcaría desde la costa mediterránea hasta Alepo, el Kurdistán sirio tutelado por EEUU y la zona sunita del sur sirio que se englobaría en el nuevo Sunistán sirio-iraquí, lo que unido a la división de Irak consagraría el triunfo de los esfuerzos de Israel para la balcanización de Siria e Irak, quedando tan solo el régimen teocrático chíita del Líder Supremo Ayatolah Jamenei como futuro objetivo de la estrategia balcanizadora de Brzezinski.

El delirio de Erdogan

Erdogan se negó a participar en las sanciones occidentales contra Moscú y compró a China misiles de defensa antiaérea HQ-9 y manifestó su deseo de integrarse en la Nueva Ruta de la Seda permitiendo inversiones del Banco Industrial y Comercial de China (ICBC) por lo que Erdogan sería un obstáculo para el diseño de la nueva doctrina de EEUU. En efecto, la nueva doctrina geopolítica de Erdogan pretende dejar de gravitar en la órbita occidental y convertirse en potencia regional, lo que implica que la lealtad a los intereses anglo-judíos en Oriente Próximo estaría en entredicho debido al fervoroso apoyo de Erdogan a la facción palestina Hamas y al consiguiente enfrentamiento con Israel así como la guerra sin cuartel declarada contra el PPK kurdo y su aliado sirio el PYD que chocaría con la nueva estrategia geopolítica de EEU. Así, la obsesión de Erdogan sería impedir el surgimiento de una autonomía kurda en Siria que sirva de plataforma al PKK por lo que el Congreso turco habría aprobado una ley que permite al Ejército turco (TSK) entrar en Siria e Irak para combatir a “grupos terroristas”, eufemismo bajo el que se englobarían no tanto el ISIS como el PKK y el PYD kurdo-sirio, aliado y hermano del PKK.

La frontera turco-siria sería el paso natural de los grupos yihadistas para abastecerse de armamento y sufragar el mantenimiento de sus operaciones militares mediante la venta de petróleo a precios irrisorios, términos reconocidos por el general Wesley Clark quien según la televisión libanesa de Hezbolá (Almanar) reconoció que “Turquía apoya al autodenominado Estado Islámico (EI) aunque nunca lo reconocerá” pero los bombarderos rusos sobre los tanques petrolíferos del ISIS supondrían un misil en la línea de flotación de los pingües beneficios obtenidos por Turquía mediante la reventa del crudo exportado por los yihadistas por lo que la miopía política de Erdogan le habría llevado a planificar el derribo del caza ruso SU-24.

Asimismo, la intervención turca en Libia para instalar una base militar que le facilite el control de las rutas gasísticas del Mediterráneo y así torpedear la construcción del gasoducto submarino EastMed, (iniciativa conjunta de Grecia, Chipre e Israel para transportar el gas de los yacimientos del Mediterráneo Sud-oriental a Europa) y convertirse junto con Rusia en los abastecedores únicos de gas a la Unión Europea. En este contexto, invocando el Derecho Internacional, Turquía exigió a Grecia y a Chipre una Zona económica exclusiva (ZEE), para explotar las importantes reservas de gas de la zona, tentativa que chocó con la frontal oposición de Francia que envió naves militares a la zona, con lo que Erdogan se habría granjeado la enemistad de Macron, Israel y del resto de la Unión Europea. Todo ello aunado con el hundimiento de la lira turca respecto al Dólar USD (14 % en el presente ejercicio) y el descontento popular ante la recesión económica que se avecina, podría provocar que el ejército turco (TSK) protagonice un nuevo golpe “virtual” o “posmoderno” que acabaría con el mandato de Erdogan, (rememorando el ‘golpe blando’ de 1997, cuando los generales kemalistas arrebataron el poder al Gobierno del presidente Necmettin Erbakanpor, quien lideraba una coalición islamista). Dicho golpe contaría con las bendiciones de Washington y Moscú al dejar Erdogan de ser un peón útil en el marco del nuevo escenario geopolítico mundial surgido tras el retorno al endemismo recurrente de la Guerra Fría entre EEUU y Rusia, quedando Siria y Turquía como portaaviones continentales de Rusia y EEUU respectivamente.

La estrategia de EEUU en Argentina

Germán Gorraiz López- Analista

La Alianza del Pacífico nació en el 2011 teniendo a México, Perú, Chile y Colombia como Estados fundadores, EEUU y China como observadores y Australia y Canadá como futuros Estados asociados y en la actualidad representa el 41% del PIB de América Latina y el 57% de su comercio exterior con un mercado potencial de cerca de 230 millones de personas. La celebración en Santiago de Chile de la XV Cumbre de las Alianza del Pacífico, sentó ya las bases para incorporar al Mercosur (Brasil, Argentina, Paraguay y Uruguay) siguiendo la teoría kentiana del “palo y la zanahoria“ expuesta por Sherman Kent en su libro “Inteligencia Estratégica para la Política Mundial Norteamericana” (1949).

La aceptación por Macri de los postulados del FMI supuso hipotecar la soberanía económica de Argentina pues tras el desembolso del FMI de cerca de 52.000 millones $ quedaría la rémora para el actual Gobierno de vencimientos de Deuda para el 2021 estimados en cerca de 15.000 millones $, monto inasumible para el Banco Central de Argentina que dispondría de unas reservas líquidas de unos 2.500 millones $ por lo que Argentina y el FMI habrían iniciado negociaciones para reestructurar el monto total de la deuda con dicho organismo estimada en 45.000 millones $.

Además, según BBVA Research, la inflación en Argentina alcanzará niveles ionosféricos en el 2021 (superior al 50%) lo que provocará la pérdida de competitividad de los productos argentinos con la consiguiente constricción en las exportaciones e incremento del déficit comercial que desembocará en una tasa de paro desoladora del 20% en el 2021. Igualmente, una inflación descontrolada conlleva la pérdida de poder adquisitivo de trabajadores y pensionistas, la contracción del consumo interno y la desincentivación del ahorro y búsqueda de rentas fuera de las actividades productivas que podría desembocar en una desertización productiva que fuera incapaz de satisfacer la demanda de productos básicos.

Según la ex-Directora Gerente del FMI, Lagarde, “la fortaleza del dólar junto con la debilidad de los precios de los productos crea riesgos para los balances y financiación de los países deudores en dólares”, de lo que se deduce que las economías de América Latina y Caribe estarán más expuestas a una posible apreciación del dólar y la reversión de los flujos de capital asociados, lo que podría reeditar la “Década perdida de América Latina” (Década de los 80) agravado por un notable incremento de la inestabilidad social, el aumento de las tasas de pobreza y un severo retroceso de las libertades democráticas.

En el plano geopolítico, la Administración Biden estaría seriamente preocupada por la creciente presencia de China y Rusia en el país a raíz del suministro de insumos médicos en el contexto de la actual pandemia sanitaria y en especial por la posibilidad de que China instale una base militar conjunta con Argentina en Usuhaia a cambio de respaldo financiero chino para instalar un gigantesco centro logístico en la provincia de Tierra del Fuego. A pesar de el propio Presidente argentino le habría prometido al enviado especial de Joe Biden,Juan González que “no habrá bases extranjeras en Argentina”, EEUU utilizará la estrategia kentiana del “palo y la zanahoria” para presionar al Gobierno argentino hasta lograr instalar una base conjunta en Usuhaia y así controlar el tráfico de megacontenedores por el Pasaje de Drake, alternativa al Canal de Panamá y en el supuesto de que el Gobierno de Alberto González no sea sensible a los dictados de Washington, no sería descartable un “golpe blando cívico militar” que contaría con las bendiciones de la Administración Biden.

Onvrez de fe y el derecho a decidir o de cómo la psicosis se disfraza de neurosis política

Escrito por Roberto Acuña

Inicialmente, pensaba utilizar el sustantivo Hombre, en mayúscula, porque de esta forma se representan, en sus cabezas, aquellos preocupados por la calidad vital del mundo, la reproducción del H. sapiens y, ciertamente, el mantenimiento de las costumbres más valiosas para la sociedad… patriarcal. Tal vez así, cediéndoles ese tratamiento artificioso, quienes se sintieran Hombres podrían siquiera entender que este artículo intenta entablar una conversación con ellos. Sin embargo, probablemente, del titular no pasen, así que, utilizaré esa categoría que los movimientos feministas han elaborado para referirse a ese colectivo abstracto, con límites difusos y a veces con alcance universal, es decir, la de onvre. Esta categoría, cuya intención es desvelar/satirizar la realidad del mundo imaginario que los contingentes de alfas y omegas han ideado para sí mismos, y han plasmado en las Leyes y las Culturas, no es para nada gratuita. Desde este entendido, en todos los estratos institucionales y en todas las estructuras de poder hay onvrez, redes de onvrez, incapaces de ceder a la construcción imaginaria y material que les ha asegurado, históricamente, el poder y la reproducción de sus delusiones.

Ahora bien, no es mi intención aquí profundizar en la tipología de masculinidades y, por ende, por asociación, en los significantes masculinos asociados, generalmente, a los hombres en su pluralidad, porque primero (1) la categoría de ‘hombre’ en la actualidad presenta muchas encarnaciones que no se pueden reducir a un sujeto con pene y (2) el ‘ser hombre’ es por sí mismo una abstracción del poder que en la práctica puede revertirse o potenciarse. Así, mi interés es hablar de un perfil peligroso de Hombre que ha ido tomando fuerza geopolíticamente en las Américas, y, donde Costa Rica, por más excepcionalista que sea, no es una excepción: el onvre de fe. Esto enmarcado, también, en un debate que, si por la víspera se saca el día, los partidos neopentecostales y fundamentalistas utilizarán para ganar almas y votos en las próximas elecciones nacionales: la iniciativa popular del aborto legal, seguro y gratuito.

Los onvrez de fe, criados Hombres, y consolidados como tales por su hegemonía totalizante, son aquellos que presentan las siguientes características agentivas: (1) instrumentalizan las creencias de las personas para inmiscuir sus ideales eugenésicos y biopolíticos; (2) creen oportunistamente en el modelo tradicional de la familia, donde la mujer es una incubadora y reproductora de la simiente, y el Hombre es un baluarte de la sostenibilidad institucional; (3) vehiculizan la palabra del Dios Padre y la interpretan según una hermenéutica que favorezca la multiplicación del capital material y simbólico adueñado, naturalmente, por quien porta pene y tiene el “don” seminal de las gentes; (4) encubren, perspicazmente, delitos y corrupciones de sus redes espirituales porque, a la larga, no son tan espirituales ni tan perspicaces, más bien cínicos y fascistas; y  (5), aunque se podrían enumerar tantas características como falacias en sus discursos y acciones, tienen como objetivo, estratégico y final, asegurar, por todos los medios y niveles, que el útero continúe siendo un lugar donde la Iglesia y el Estado, compenetrados, tengan la última palabra, es decir, la prohibición.

El onvre de fe concibe el género como una ideología postmodernista —para él esto es de calidad risible, pues no puede dimensionar el desplazamiento del Hombre como molde de toda la estructura existencial— organizada por ‘feminazis’; o, en sus propios términos burlescos, porque de discusiones argumentativas y horizontales no conoce, pues solo utiliza la invectiva y la parodia misógina para elucubrar, como una invención de las agendas LGBT y ‘comunistas’ para asegurar la no reproducción de hombrecitos y mujercitas para sus proyectos tradicionales. Esta es la concepción más sofisticada. Sin embargo, concepciones hay muchas, y no necesariamente son planificadas y estructuradas, otras son discretas, mentales e inerciales, histórica y culturalmente; tal como, por ejemplo, el onvre que en redes sociales afirma que el aborto no es un derecho y que quienes promueven tal abominación son grupos de ‘aborteras’, o también quien afirma, vehementemente, que ojalá que Dios reprenda al Diablo, quien posiciona estos temas. Por su parte, no debemos olvidar que la jerarquía de los onvrez opera a partir de la dominación y la subordinación de otros onvrez, incapaces de vislumbrar las tácticas de dominación de las cuales son operarios pero al mismo tiempo víctimas. Probablemente, estos últimos sean onvrez de fe que suscriben las características anteriormente prescritas, pero: ¿por qué los onvrez de fe se resisten a perder o favorecer la pérdida del poder sobre la capacidad reproductiva de las mujeres o los cuerpos con útero?

Ciertamente, y esto ha sido formalmente estudiado e investigado por las investigadoras feministas[1], el Onvre ha construido históricamente en el útero un sistema biopolítico y eugenésico para la reproducción de la simiente y el derecho del Padre sobre su descendencia; y esto último no se agota en temas de paternidad o corresponsabilidad paterna, sino, más bien, atraviesa el patrimonio y el poder en las comunidades humanas, principalmente aquellas confesas y clericales. Paralelamente, sobre estas estructuras, también, ha arreglado un conjunto de códigos morales para asegurar que las costumbres también recaigan sobre el útero de las mujeres y los cuerpos matriciales; de manera que, toda mujer o persona gestante que quiera ejercer poder en su propio cuerpo para decidir sobre su vida sea atrapada en un acto contra la moral, las buenas costumbres y, ciertamente, contra el Estado y la familia. Para el Onvre, el derecho del esperma se antepone ante la valoración de la vida de las mujeres y quienes tengan matriz, no es casualidad que un feto, signo victorioso de la fecundación del esperma sobre ese territorio político que es el óvulo, sea tan importante para los grupos pro-aborto clandestino, potencialmente pro-femicidas y fascistas.

En este marco, los Onvrez han hecho de una psicosis política, actual e históricamente, una política y discusión de Estado. Desean, obsesivamente, que entendamos esa psicosis como una neurosis por el bienestar anímico de la ciudadanía (que en realidad es el bienestar patrimonial de los Hombres); se devanan los sesos pensando cómo comunicar evasivamente esa finalidad de sus palabras y acciones: inventan artificios discursivos, partidos políticos, canciones, oraciones, datos estadísticos, marchas, películas, muñecos, performances, publicaciones en redes sociales, anuncios, y hasta son capaces de representar una intermediación divina, gradualmente heredera del absolutismo monárquico, de los intereses de ese Dios tan lejano y egoísta que hasta ellos mismos burlan. Ciertamente, los onvrez son peligrosos, pero al mismo tiempo son muy evidentes en sus construcciones imaginarias; su único interés es asegurarse poder político y económico, de la forma más efectiva e incandescente: manipulando la fe de las personas.

En ellos, la psicosis de la realidad y su apalabramiento está motivada en estructuras institucionales y mentales que permean y movilizan a muchas personas. Los onvrez de fe son potenciales promotores de máximas coloniales; no es casualidad que quienes sean pro-aborto clandestino también tengan una agenda muy delimitada en cuanto a las discusiones étnicas o en relación con la realidad etnodemográfica de las tasas de natalidad y adopción en Costa Rica. No es el interés de los onvrez el bienestar superior de la niñez ni su cuidado, es en cambio la extensión de sus paradojas institucionales y de la concepción del Estado como un Padre que cobija a quien lo merezca por obediencia y alineación. El Estado hermanado, ciertamente, de los intereses corporativos y transnacionales: ahora, ya no importa el desempleo o el hambre, la realización de las personas y su futuro, lo que interesa es estratificar bien a las personas, darles un valor y estatus según su procedencia y nivel de adherencia a sus lugares en la pirámide social. El Estado de los Onvrez es un enigma que solo se fragua con la globalización, la transnacionalización y la adueñación de la vida y el cuerpo de las personas, pero también de la dominación de sus creencias y sus espiritualidades.

En fin, los onvrez de fe seguirán consolidando redes de estrategia, formación y producción política. Asegurarán bases que resuenen y repitan memorísticamente ideologías psicóticas con dosis de neurosis política para evidenciar una preocupación que nunca ha sido auténtica ni real: el bienestar social. La única y siempre presente majadería es la manutención del poder sobre el cuerpo de las mujeres, los cuerpos con úteros, y de toda aquella persona que represente una afrenta contra el fundamentalismo neopentecostal, pero también cristiano. Todos los onvrez son antiderechos, pero no todos los antiderechos son onvrez: también hay mujeres y hombres que desde sus disidencias no aportan a los debates feministas ni tampoco favorecen atmósferas de movilización.

Para aquellos hombres que quieran renunciar y desligarse de estas prácticas, o personas con significantes masculinos, a continuación, una posible orientación para navegar estos tiempos venideros:

  • Investigue de teoría feminista de calidad, es decir, toda aquella que se desprenda de las vivencias de quienes producen desde ese lugar. Lea, pero también escuche y tome nota.
  • Infórmese sobre colectivas que tengan por consigna los derechos de las mujeres. Informarse pasa por un proceso de concientización, no es algo aislado, debe encontrar motivación para empatizar y entender. Por ejemplo, puede leer contenido de Aborto Legal Costa Rica (@abortolegalcostarica) en Facebook, y firmar la iniciativa popular para que sea proyecto de ley en la Asamblea Legislativa.
  • Concientice a sus redes más próximas, de iguales, sobre la importancia de priorizar políticamente el derecho a decidir.
  • No emita comentarios o críticas que desplacen o deslegitimen la vivencia de quienes tienen útero ni sus luchas, por más informado o consciente que sea usted de la situación, desde su lugar de privilegio.
  • Comprenda que el aborto es un tema que pasa por el cuerpo de las mujeres y de quienes tengan útero; si usted no tiene útero, por tanto, no tiene autoridad para establecer el hacer, el pensar, el saber o el vivir de quienes sí lo tienen; dicho esto, su tarea es respaldar en calidad ciudadana una lucha civil por un derecho humano.
  • ¡Renuncie a sus privilegios!

Bien podríamos decir, en tono beauvoriano: “No se nace onvre, se deviene”, y, de tal forma, se debe evitar. Una amiga transfeminista, segura de su pensamiento, al mostrarle este escrito me dijo que, a pesar de que el uso de la categoría onvre le da un giro a la forma en la que los hombres han desplazado, nombrado y desnombrado a las feministas y sus luchas desde la mismidad, es importante no utilizarla en sustitución de la categoría de hombre, pues su consecuencia sería naturalizar esencialmente un destino biológico y político que, de por sí, en la actualidad, está cada vez más en crisis por las demandas y las exigencias que los sectores feministas hacen al contingente de hombres. En todo caso, la pregunta siempre es la misma: ¿cómo construir una forma de ser y vivir con cuerpo sexuado masculino que renuncie a los privilegios históricos de su constitución cultural y jurídica?

[1] Léase fundamentalmente a Gayle Rubin, Gerda Lerner, Mithu Sanyal, Kate Millet, Rita Segato, entre otras.  

Imagen: https://malvestida.com/2020/08/onvre-significado-que-es/

Después de Trump

Arnoldo Mora

La conciencia que la humanidad tiene del rol preponderante que juegan los Estados Unidos, el más reciente y último –eso esperamos- imperio universal de Occidente, quedó patente, una vez más, con la actitud asumida casi unánimemente por los pueblos de la tierra, frente a los acontecimientos que tuvieron verificativo en ese país durante las elecciones presidenciales pasadas y, sobre todo, ante los acontecimientos que pusieron término – ¿por ahora? – dramáticamente al conato de golpe de estado. Ese intento de golpe de estado, inspirado en la manera como ellos mismos lo acostumbran hacer en todas partes en donde ven amenazados sus “intereses”- es decir, los intereses de sus trasnacionales, que se nutren de la explotación de las materias primas de los países periféricos – puso en vilo a la humanidad entera; todo el mundo estaba consciente de que allí se jugaba, en medida no desdeñable, el destino de la especie sapiens; no era un asunto doméstico de quienes lo habían provocado; podría devenir en un asunto de vida o muerte para la humanidad entera; un golpe de estado de índole fascista en Washington haría realidad lo que Hitler intentó hacer y tuvo como desenlace la II Guerra Mundial. No nos ha de extrañar, por ende, el sentimiento de alivio que muchos en todos los rincones del planeta experimentaron cuando se dio el feliz desenlace de tan arriesgada y riesgosa aventura; sentimiento acentuado con la inusual ceremonia – marcada por las medidas militares de precaución ante la amenaza de terroristas nacionales y para evitar el contagio de la Covid-19- de la toma de posesión del nuevo presidente, un anciano de endeble salud y formado en la más rancia tradición política, pues su único oficio conocido es haber sido senador. La escogencia de Biden sólo puede interpretarse como una visceral y clara reacción de la mayoría del electorado yanqui, ante el fracaso de la afirmación de Trump de que todos los males de la sociedad norteamericana provenían de la corrupción del establishment político, incrustado en las instituciones consideradas, desde los días de los padres de la patria, como base fundamental del edificio “democrático” de la nación, y ubicadas en la Casa Blanca y el Capitolio; esto explica el ataque de hordas fascistas al Capitolio y el berrinche de Trump al verse obligado a abandonar, sino hasta el último minuto y sugiriendo que volvería, las instalaciones de la Casa Blanca.

El fracaso de Trump – ¿momentáneo? – es el fracaso de un intento de deslegitimar las tradiciones o, más exactamente, la rutina del ejercicio del poder político imperial. Pero, en realidad, sólo se trataba de cambiar las formas, no el fondo del quehacer político; más aún, si algún “mérito” (¿?) le hemos de reconocer a Trump, es haber puesto en evidencia la podredumbre que excreta el poder imperial de la Roma americana; como en la conocida y divertida leyenda, bastó que un niño –Trump- señalara que la noble dama Lady Godiva andaba desnuda, para que la impúdica farsa del poder imperial quedara al desnudo ante la mirada estupefacta del mundo entero.

Pero, no nos hagamos ilusiones, Trump puede estar no sólo ya muerto políticamente y a un tris de parar con sus huesos de viejo y degenerado corrupto en la cárcel -¡ojalá¡- pero sólo como persona física, porque el movimiento que él ha suscitado, sale hoy más fuerte que hace 4 años; las cifras no engañan: más de 74 millones votaron por él, 45% de los cuales le siguen con perruna fidelidad aún hoy día; 95% de los que votaron por Trump creen que hubo fraude, es decir, están firmemente convencidos de que el nuevo gobierno es espurio y, por ende, antidemocrático; la fe en el sistema “democrático” norteamericano está severamente golpeada; haga lo que haga la nueva administración, siempre será objeto de sospecha y rechazo por casi la mitad de los ciudadanos yanquis, pues en la política pasa lo mismo que en el amor: si se pierde la confianza todo está arruinado. Esto lo cambia todo; hoy el enemigo de Estados Unidos no está afuera; en vano se buscaría en Pekín o Moscú, y menos en Pyongyang, Caracas o la Habana, porque está en sus propias entrañas; como en la lúcida y esclarecedora película de Bergman, la serpiente ha incubado un huevo que engendrará una nueva víbora. Desde este punto de vista, buscar las causas de los males endémicos de la “democracia” norteamericana fuera de sus fronteras, no deja de ser un acto de mala fe, como sospecho parece estar incurriendo el nuevo Secretario de Estado; si insiste en ese trillado e irresponsable juego, como ya lo advirtió en la cumbre (virtual) de Davos el líder de China, la consolidada potencia hegemónica mundial, el nuevo gobierno yanqui pondría en peligro la paz mundial en detrimento de todos, incluidos en primer lugar, quienes lo provoquen. Por su parte, Putin, al derrotar en Siria a la OTAN y a sus aliados regionales del régimen sionista, ha demostrado estar mucho más avanzado en tecnología bélica y estrategias militares que sus adversarios occidentales. China ha proseguido con su política de conformar pactos de amplio espectro en el campo comercial, como lo demuestra la formación de una zona de libre comercio – la más amplia y poderosa del mundo actualmente- con todos los países de Asia y Oceanía, con la – ¿momentánea? – excepción de la India; en la misma línea de apertura mundial en los mercados, ha de interpretarse el acuerdo recién firmado entre China y la Unión Europea. Con ello, queda claro que el epicentro de las finanzas mundiales no es más Wall Street.

Las repercusiones en los ámbitos económico, social y político no han hecho sino ahondar y acelerar la crisis estructural del fallido modelo neoliberal, crisis que, desde 2008, ha venido siendo el protagonista principal del escenario de la geopolítica mundial. Hasta ahora, las medidas adoptadas por los sectores hegemónicos de la metrópoli imperial para enfrentar su crisis interna, no sobrepasan el ámbito coyuntural, muy justas por lo demás, tales como dar de inmediato multimillonarios subsidios a los sectores más empobrecidos, solventar el problema de los inmigrantes, contrarrestar la ola racista y combatir los prejuicios supremacistas tan en boga en la administración anterior y, lo más importante, tratar de imponer mayores cargas impositivas a las minorías plutocráticas. Pero esto no basta; para llegar al fondo del problema se debe cambiar radicalmente el “orden” económico-mundial imperante desde los acuerdos de Breton Wood, impuestos por la potencia que se creyó ganadora luego del cataclismo de la II Guerra Mundial. La solución no está en exportar la guerra a los países periféricos con el único fin de satisfacer los apetitos criminales de ganancias del complejo militar industrial, el más poderoso lobby en los sinuosos pasadizos de Washington; las élites imperiales deben, por fin, llegar al convencimiento de que la guerra ya no es un negocio, como lo ha señalado en múltiples ocasiones el Papa Francisco. Para lograr una salida a la crisis actual, se requiere que los países periféricos se unan y conformen un bloque que les dé protagonismo en el escenario de la geopolítica mundial; la pandemia ha demostrado fehacientemente que la humanidad es una sola, por lo que ya no hay problemas locales: las calenturas de unos pocos pronto se convierten en la pulmonía de todos…

Y para poner punto final a estas reflexiones, cabe preguntarse: y en Tiquicia ¿qué? Ese asunto lo trataré en un próximo artículo.

Evento virtual: Trayectorias geopolíticas de Centroamérica

El próximo viernes 29 de enero a las 10:00 am (hora Centroamérica) se llevará a cabo el evento virtual “Trayectorias geopolíticas de Centroamérica” con la participación de Carlos Granados (Costa Rica) y Heriberto Cairo (España).

La transmisión en vivo será vía Facebook GT Clacso Pensamiento Geográfico Critico Latinoamericano

 

Compartido con SURCOS por Alberto Gutiérrez Arguedas.

Vigencia de la revolución cubana

Dr. Arnoldo Mora Rodríguez. Filósofo, exministro de Cultura, Juventud y Deportes

Hablar desde una nueva época de lo que fue y ha significado la época anterior, es algo más que un ejercicio, no sólo de la memoria, sino, ante todo, de un compromiso del presente a fin de construir y avizorar el futuro; ya que la memoria es también una especie de tribunal que nos permite juzgar y sopesar el valor y sentido, la vigencia y presencia en el presente de los hechos más significativos y relevantes del pasado. Por eso, al echar un vistazo a lo que ha sido y significado para nuestros pueblos el siglo anterior, no podemos sino destacar lo que llamó la vigencia y la presencia de la mayor de las revoluciones que han realizado los pueblos de la periferia imperial en ese tiempo. Es allí donde destaca la Revolución Cubana; si ha habido en el siglo XX un acontecimiento que marcará para siempre la historia de nuestros pueblos y, más aún, la historia de la humanidad, ese acontecimiento es la Revolución que realizó el pueblo de Martí y Maceo y que encabezó Fidel Castro.

Un acontecimiento no es sólo un hecho, es decir, una acción realizada por seres humanos, en este caso no sólo por individuos, sino, sobre todo, por un pueblo entero; un evento que marca la historia y señala los rumbos de su destino, es un evento cuyo valor se mide por su vigencia, porque no nos deja indiferentes como si fuera un hecho lejano en el espacio y el tiempo; hoy el tiempo y el espacio se han reducido, gracias a los sorprendentes avances de la revolución científica y tecnológica en el campo de la comunicación; lo cual acrecienta la importancia y vigencia de determinados hechos que se convierten, por ello mismo, en una especie de patrimonio familiar para multitudes de gentes en todos los rincones del planeta. Porque hay hechos de hechos; los que siguen vigentes son aquellos que forman parte de nuestros valores más fundamentales que rigen nuestras vidas; son como el aire que respiramos, como el palpitar de nuestros corazones y la justificación de nuestras más caras convicciones; nos sentimos identificados con ellos por lo que representan de sentido en nuestras vidas individuales y en las de los pueblos dondequiera que radiquen geográficamente y cualquiera que sea su cultura y su régimen político y su modo de vida. La Revolución Cubana se hizo con el fin específico de derrotar a la más sangrienta tiranía que surgió en ese heroico pueblo en cuyo seno se vio nacer a José Martí y a Fidel Castro; pero muy pronto trascendió esa dimensión, se declaró latinoamericanista y fiel a los ideales de sus próceres, en concreto, de Martí, quien vio en la independencia de Cuba del yugo colonial español el primer paso para lograr su segunda y plena independencia, aquella que rompiera las cadenas que la subyugaba al imperio yanqui.

El primero de enero de 1959 se inició esa gesta. Se dio en plena Guerra Fría; se dio a tan sólo 150 millas de la metrópoli imperial; se dio en una isla situada en una de las zonas geopolíticas tradicionalmente más calientes del planeta; se dio en la mayor de las Antillas, dominada por el capital norteamericano y por las mafias de ese país; se dio en las fronteras del mayor imperio de la historia, el último imperio de Occidente. La Revolución Cubana derrotó a la dictadura del Sargento Fulgencio Batista impuesto por la embajada yanqui; la primera derrota de la doctrina Monroe, por la que se rigen hasta hoy las líneas estratégicas de la política imperial en todo el Continente, especialmente en su entorno caribeño, al que considera su traspatio; en el caso de Cuba, la humillación era aún mayor porque se regía por la tristemente célebre “Enmienda Pratt”, que hacía de Cuba una colonia. La importancia de esa política se mide por el hecho de la ubicación geopolítica de Cuba. El Caribe es para Nuestra América lo que el Mar Mediterráneo es para Europa, el Norte de África y el Medio Oriente; quien es dueño o controla esos mares es dueño de su entorno; quien es dueño del Mediterráneo es dueño de Europa entera; quien es dueño del Mar Caribe es dueño de todo el continente americano; porque el control de los mares es clave para medir el poderío de un imperio; en tierra firme se extrae la materia prima que suministra la parte material de la riqueza, que se mide por lo que Marx llamaba “su valor de uso”, es decir           que responde a las necesidades propias de un ser viviente; pero al ser metidas en una embarcación, esas materias primas se convierten en mercancías, es decir, son parte del comercio mundial porque su valor se rige por la ley del mercado, a saber, por la oferta y la demanda, esto es, por el valor de cambio; de ahí que, quien no controla las vías de comercio mundial no es dueño de la economía mundial. Actualmente el 80% de la economía mundial navega en los dos océanos más importantes del mundo: el Atlántico y el Pacífico; el Océano Atlántico, desde los viajes de Colón hasta la década de los 80s.del siglo pasado, fue el Océano más importante desde este punto de vista, pero desde la década de los 80s.es el Océano Pacífico el más importante, debido primero al auge económico del Japón y de la Costa del Pacífico norteamericano, pero ahora es la China, gracias al auge incontenible de su economía, que la ha convertido en la primera potencia comercial del mundo; eso explica por qué el Canal de Panamá es considerado la vía interoceánica más importante para el comercio mundial. Por otro lado, el Mar Caribe, dada su situación geográfica, une a las dos grandes moles continentales que componen la geografía del Nuevo Mundo.

 El mercado capitalista se rige por las bolsas de valores, la más importante de las cuales es la de Nueva York, el conocido Wall Street; allí se negocia, en la llamada “economía de casino”, el 80% de las materias primas (comodities) del mundo; 31% de esas materias primas provienen de América Latina; de ahí que, controlar el Mar Caribe es de capital importancia para el capitalismo en su actual y última fase imperial, como lo calificaba Lenin, y cuya sede mayor está en los Estados Unidos; todo lo cual explica por qué en un país con costas en el Mar Caribe, como es Honduras, históricamente considerado como “la banana republic” por excelencia, está ubicada la base militar más grande del imperio fuera del territorio norteamericano, como es Palmerola; en realidad, se trata de dos bases, una dirigida contra Cuba y la otra cuyo objetivo es proteger el Canal de Panamá. Ha sido en el Mar Caribe en donde se ha iniciado en la historia la inserción de los pueblos de Nuestra América en el mundo occidental; Colón no salió de sus aguas, ni siquiera sospechó que estaba frente a un continente, siempre creyó que estaba en islas, vivió enamorado de la belleza del paisaje que contemplaban sus extasiados ojos, hasta el punto de que, en su segundo viaje, uno de los frailes que lo acompañaba, las consideró como el Edén de que hablan las primeras páginas de la Biblia; fue en tierras caribeñas, concretamente en Haití (1805) donde se inició la lucha emancipadora de nuestros pueblos; en 1815 Bolívar partió de Jamaica en campaña por la guerra de independencia en tierra firme; allí escribió su célebre carta, verdadera filosofía de la historia de nuestros pueblos; la primera gran revolución del siglo XX, la de Villa y Zapata, tuvo lugar en un país con amplias costas en el Caribe; pero será en la segunda mitad del siglo XX donde se dará la más importante revolución de los pueblos de Nuestra América en ese siglo, la revolución de Fidel y el Che; desde entonces, el eco de la Revolución Cubana se ha extendido al planeta entero, como lo reconoce Nelson Mandela cuando le dijo a Fidel que él – Fidel – era “el Bolívar del África Subsahariana”; la derrota de Sudáfrica racista significó para esos pueblos lo que la derrota del imperio en Playa Girón ha sido para los pueblos de Nuestra América. Desde entonces, ningún cambio transformador, en diversos niveles y diversas circunstancias y lugares geográficos, se ha dado donde no esté la impronta de la Revolución Cubana, donde el ímpetu libertario de nuestros pueblos no haya sido impulsado por el ejemplo de la Cuba Revolucionaria; el grito de rebeldía lanzado por un puñado de héroes en la Sierra Maestra resonó como un canto y un himno a la liberación y soberanía entonado en muchos rincones de nuestra geografía; más aún, el mensaje de los líderes de la Revolución Cubana ha sido escuchado por doquier y ha servido de inspiración a hombres y mujeres del mundo entero.

Pero la Revolución Cubana ha sido también y, en no menor medida, ejemplo de solidaridad humanitaria y humanista; sin medir distancias, ni geográficas, ideológicas o culturales de ninguna especie, Cuba no ha trasegado drogas, ni provocado invasiones militares, sino enviado legiones de médicos y maestros, científicos y artistas, a pesar del mayor y más cruel bloqueo, verdadero estado de sitio, a que el imperio ha sometido, violando todo el orden legal, a este heroico pueblo, a pesar del estrangulamiento de su economía; pero esto no ha impedido tener el mejor sistema de salud y de educación para todo el pueblo, unido a un admirable desarrollo científico, Io cual, insisto, nunca ha impedido desarrollar una política de solidaridad con todos los pueblos que lo solicitan, no interviene en la política interna ni buscando prebendas comerciales; esa política materializa los ideales de una revolución que desde sus orígenes, se ha inspirado en los más puros y auténticos ideales humanistas y humanitarios, ejemplo en nuestro tiempo; de ahí el odio del imperio y sus plumíferos; porque Cuba enseña, predica con su ejemplo, con su heroico desafío al imperio, demostrando que los designios imperiales no son un destino manifiesto sino la expresión de una voraz voluntad imperial que los pueblos están derrotando con sus luchas patrióticas y justicieras. La Revolución Cubana tiene hoy más vigencia que nunca; su mensaje de liberación, grito de rebeldía frente a la opresión imperial y frente a la explotación del capitalismo salvaje es escuchado donde quiera haya un hombre o una mujer cuyo corazón palpite en busca de una mayor y más plena dignidad humana. Cuba, hoy como en 1959, sigue siendo un faro que ilumina con rayos de esperanza y dignidad a todos los pueblos, incluso a los que viven al interior de regímenes imperiales y viven en carne propia su crisis terminal. Por eso la vigencia de la Revolución Cubana está ahora más viva que nunca.

La guerra del Coronavirus y sus daños colaterales

Vladimir de la Cruz

El impacto de la Pandemia del Coronavirus COVID-19 es de tal magnitud, por su alcance y trascendencia internacional, que ha roto, ha quebrado, todo el orden de las relaciones internacionales en todos los sentidos. Ha afectado obviamente las relaciones comerciales, productivas, de los procesos de encadenamiento económico a nivel internacional y a nivel local de cada uno de los países afectados.

Ha afectado áreas productivas, mercados internacionales de producción y abastecimientos de partes para la industria en general, ha afectado mercados de mano de obra barata en todos los continentes, ha afectado los mercados de colocación de mercaderías, estimulando, en cierta forma, todavía a escala reducida, los mercados internos de producción y de abastecimientos. Su impacto social, aún no evaluable, es el de llegar a causar mayor pobreza general y de mayor pobreza extrema en todos los países, junto el hambre, “hambrunas”, para grandes masas de personas, quizá sin que hayamos superado el impacto de la presencia del COVID-19.

El mundo del transporte aéreo, terrestre y marítimo se desplomó, por los controles de la expansión del Coronavirus que se han impuesto. La industria y la actividad turística, en todas partes del mundo, ha caído, con expectativa negativa para los próximos 18 meses por lo menos, y la economía de encadenamientos sujeta a ella ha sufrido igual impacto.

Las pequeñas empresas productivas, la MIPYMES y PYMES en general, son las más golpeadas, las empresas de venta y consumo de comidas, de servicios han cerrado estrepitosamente, creando un mayor impacto en las economías nacionales cuando estas pequeñas empresas son mayoritarias, y mayoritariamente empleadoras, en las actividades económicas de cada país, que con poca o baja contratación de personal, son también las que mantienen la mayor cantidad de empleo nacional, y en la situación actual conducen, por sus cierres, a que los índices de desempleo real aumenten de modo preocupante, agravando la situación social, de vida, de trabajo, de hambre real y de tensiones sociales y políticas que ello pueda producir.

El COVID-19 ha afectado el mundo del trabajo provocando cierres de empresas, despido de empleados, rebajo de jornadas de trabajo, nuevas formas laborales intensivas como el tele trabajo, el trabajo parcial con reducción de jornadas, y rebajo consecuente de salarios y beneficios sociales, desempleo total y desempleo parcial, con pérdida y reducción de salarios y sus beneficios sociales, ha afectado la capacidad de pago de obligaciones de trabajadores, de pequeños, medianos y algunos grandes empresarios. Los sindicatos mismos van a sufrir este impacto en su afiliación real, en sus cuotas de pago sindicales, así como en su actividad organizativa, y hasta en sus luchas.

Ha afectado los vínculos diplomáticos alterando las relaciones de países fronterizos por los cierres de fronteras, impuestos de cada lado, para mitigar, con el control de los procesos migratorios y de desplazamiento de nacionales y extranjeros, la posibilidad de expansión y contagio del Coronavirus. Ha cuestionado internacionalmente a aquellos gobernantes que no se han sometido a los parámetros de la Organización Mundial de la Salud para atender la pandemia, e irresponsablemente, en sus países, han sido laxos frente al avance del Coronavirus, con las repercusiones internacionales que eso tiene.

El Coronavirus ha surgido como una fuerza de combate en guerra en todos los países, contra todas las personas, sin que estuvieran preparados para ella.

El Coronavirus se ha desarrollado como un movimiento guerrillero, apareciendo por aquí y por allá, y simultáneamente en todos los países, como si fueran diferentes frentes de combate, donde no se le puede enfrentar en el campo militar. De allí, por ahora su fuerza, por su capacidad sorpresiva de aparición provocando daños directos y daños colaterales en cada país y sociedad, por el temor que desata su existencia. En unos países impacta más que en otros, pero nadie está exento de sufrir su presencia ni daños colaterales. Y dentro de los países hay regiones más afectadas que otras.

Por ahora es una guerra que está comenzando, con un enemigo que se le conoce, que se la ha logrado identificar, el COVID-19, pero que no se tiene capacidad de controlarlo, y no se sabe aún con certeza cuando podrá acabársele y de qué modo se hará, porque su manera de combatir es silenciosa, sorpresiva, universal, y en muchos casos precisa y fulminante.

Uno de los efectos más dramáticos que ha provocado es que no se ha logrado una acción internacional contra el Coronavirus.

El único campo internacional que opera es el de la ciencia médica y epidemiológica, donde se hacen esfuerzos de coordinación día a día, para ir analizando los movimientos y comportamientos del Coronavirus, como sus posibilidades de mutación, para buscar, en el campo de la ciencia, los mecanismos y armas para detenerlo y controlarlo. Si es por una vacuna, se ha dicho, es un proceso que puede durar por lo menos hasta dos años, de allí que lo más claro es que el Coronavirus ha llegado para quedarse y tengamos que aprender a vivir con él, como vivimos con un montón de bacterias, virus y microorganismos, que siguen causando muertes, y por miles, muchos de los cuales hoy los controlamos y disminuimos sus muertos con vacunas.

El Coronavirus ha declarado, en cierta forma, una guerra contra toda la Humanidad. La guerra en que nos ha metido el Coronavirus no ha terminado. Los efectos devastadores de esta guerra todavía no los conocemos en toda su dimensión.

En el campo científico es una Guerra Total, que ha obligado a que todos los países muevan sus recursos y fuerzas, hasta donde se pueda, para destruir su capacidad contagiosa y de expansión. Como Guerra Total supone la subordinación de la política, no a la guerra como es la idea clásica militar, sino a la Ciencia, lo que no ha hecho el gobierno de Trump, y algunos otros, y que sí se hace en la mayoría de los países. Aquí, en Costa Rica, el Gobierno ha hecho muy bien de poner al frente, día a día, de esta batalla, incluso por el manejo de las Conferencias de Prensa diarias, al Ministro de Salud y al Presidente de la Caja Costarricense del Seguro Social. Hasta hoy el discurso oficial, en Costa Rica, descansa sobre todas las cosas en la ciencia para combatir el Coronavirus.

Importante papel puede llegar a jugar el Instituto Clodomiro Picado, de la Universidad de Costa Rica.

Por ahora el COVID-19 asusta por las muertes y contagios en todos los países, y atemoriza por el daño causado a la economía mundial, que es el daño colateral impuesto por este Coronavirus.

En las guerras modernas, y recientes, especialmente después de 1990, desde la Guerra del Golfo Pérsico, se habla de los daños colaterales, aquellos causados que están fuera de los objetivos militares a destruir, que son las víctimas civiles, particularmente, y así se justifican por quienes provocan estos daños colaterales, en estas guerras, generalmente por resultado de los bombardeos.

Se habla de daño colateral de aquel causado sin intención, de manera accidental, o por repercusión sin haberlo deseado, pero como resultado de una operación militar. En la sucia guerra de Vietnam los Estados Unidos usó este término para referirse al asesinato de civiles y la destrucción de sus propiedades.

Los daños colaterales militarmente se han extendido a las construcciones, hasta hospitalarias y diplomáticas, como ha sucedido, así como a los equipos y el personal, que puede ser afectado, en una operación militar, de fuerzas amigas de los atacantes. El daño colateral no quiere decir sin intención, aunque los ejércitos tratan de darle ese contenido conceptual. Es el daño adicional, subordinado, secundario, que resulta de una acción militar. Es el acto que puede resultar consciente, si es una ventaja táctica militar, en donde al destruir un objetivo deben eliminarse civiles e inocentes, o destruir instalaciones que no son objetivos militares.

El Coronavirus como agente militar, como arma de guerra, directamente ataca personas. El Coronavirus, en sus daños colaterales, afecta toda la economía, las fábricas, el transporte en todas sus manifestaciones, ciudades y pueblos completos, las refinerías lo que ha hecho caer el precio y la producción diaria de petróleo mundial. Afecta la salud emocional de las personas, sobre todo por los encierros obligados, las “cuarentenas” y restricciones de usos sociales, de comportamientos y de relaciones sociales que ha impuesto.

La autonomía de desplazamiento del Coronavirus en su ataque es demasiado amplia, llega donde tenga oportunidad de llegar, atacar y ocasionar el daño directo y el colateral respectivo. El Coronavirus por blanco estratégico tiene a los seres humanos. Eso está claro, de allí la necesidad de su protección.

En curso de la II Guerra Mundial, al mediar la década de 1940, las potencias aliadas impulsaron tres organismos de carácter mundial, en perspectiva del mundo que surgiría después de esa horrorosa guerra, el Fondo Monetario Internacional y el Banco Mundial, ambos en 1944, como resultado del Tratado de Breton Woods, y las Naciones Unidas, en octubre de 1945.

Al terminar la II Guerra Mundial el mundo había cambiado. Derrotado el nazifascismo surgió de manera poderosa un Sistema Mundial de países socialistas, que hizo cambiar el escenario de las relaciones internacionales. El mundo se enfrascó en una división internacional de Socialismo versus Capitalismo y de un escenario militar, la Guerra Fría.

El resultado práctico inmediato por parte de los Estados Unidos fue impulsar en la Europa capitalista existente el Plan Marshall, con el propósito de meter 12.000 millones de dólares, de esa época, para la reconstrucción europea, y presentar la Europa capitalista como una vitrina frente a la Europa socialista que también estaba surgiendo. Ello produjo en el campo militar, luego, el desarrollo de la Organización del Tratado del Atlántico Norte, por un lado y del Pacto de Varsovia por otro, para mantener los equilibrios militares en ese continente.

En América Latina el Plan Clayton, entre 1946 y 1947, se propuso igual propósito para contribuir a desarrollar la economía de la región, especialmente en el sector agrario o campesino, y frenar o neutralizar en el continente los movimientos insurgentes que estaban dándose. Para la parte militar en América Latina se impuso el Plan Truman. En 1948 se impulsó militarmente el Tratado Interamericano de Asistencia Recíproca, con la OEA de fondo y de soporte.

Después del Coronavirus el mundo va a ser otro. Frente al Coronavirus no se impulsan organizaciones de este tipo ni políticas de esta naturaleza, de carácter colectivo. Lo más cercano a ello es el apoyo a la Organización Mundial de la Salud, la abanderada internacional en la lucha contra el Coronavirus, y sus organismos regionales, como la Organización Panamericana de la Salud, hoy sin el apoyo económico del gobierno norteamericano, y del Presidente Trump, que ha anunciado quitarle los fondos económicos que le daban, acusándola de estar plegada, en esta situación pandémica, a los intereses de la República Popular China.

Igualmente, esos organismos, son hoy objeto de atención, y de llegada, para apoyar gobiernos y países con préstamos y políticas económico-financieras para enfrentar el Coronavirus en sus impactos financieros internos.

En el momento actual debe operar la política realista, de la diplomacia y de las acciones concretas y prácticas para atender la pandemia, cuando no hay un Gobierno mundial, ni hay un “ejército mundial” en capacidad de combatir el Coronavirus, que debe enfrentarse en cada país con las fuerzas médico-científicas que se tienen, y con las estructuras de salud pública y de seguridad social que cada país tiene y ha desarrollado históricamente.

El Coronavirus ha alterado en la práctica el equilibrio de poderes existentes en el mundo actual, ha debilitado a las grandes potencias, las ha alejado de sus propias relaciones, les ha debilitado sus carreras armamentistas para enfrentar al enemigo no tan invisible del Coronavirus. La “paz” internacional, exceptuando las guerras locales o regionales aún existentes, que han pasado a guerras de baja intensidad momentáneamente, también se ha alterado.

Para Trump la situación internacional es grave por el impacto que ella tiene al interior de los Estados Unidos en su elección de noviembre de este año. La torpeza con que ha actuado lo ha alejado del liderazgo internacional que los Estados Unidos ha significado, pero le ha debilitado su liderazgo interno, a nivel nacional y regional con sus propios Estados y sus autoridades locales, los gobernadores.

Pareciera que Trump siguiendo a Maquiavelo quisiera usar el mal para tratar de lograr el bien. Por ello engaña, hace trampa, mal informa, se enfrenta a la ciencia de su propio país, intriga contra quien se le oponga, enfrenta y limita la acción de los medios de información y de prensa, obliga a su Partido Republicano y a sus dirigentes a seguirle ciegamente, amenaza desarrollar los super poderes que se le permiten al Poder Ejecutivo en Estados Unidos, expulsa migrantes detenidos enfermos de coronavirus a sus países de origen, con el propósito de que enfermen en sus países de origen, como está haciendo con guatemaltecos repatriados.

Para Trump, como yo lo veo, el Coronavirus se le ha presentado como un elemento de limpieza étnica mundial, y en los propios Estados Unidos, por las personas que son afectadas mayoritariamente.

En la línea de enfrentamiento al Coronavirus el realismo político descansa en las decisiones racionales, científicas y médicas, que puedan tomarse e impulsarse para frenarlo, detenerlo y saberlo combatir y para superar, en el mayor corto plazo posible, los efectos colaterales que está provocando, especialmente en el plano de las economías nacionales, y en la reconstrucción de las redes de la economía mundial.

El interés nacional es lo que resalta en los países frente al Coronavirus. En Estados Unidos Trump ha sido muy claro “América Primero”. No son casuales sus políticas públicas internas y sus planteamientos internacionales en torno a cómo enfrentar y combatir el Coronavirus. Se trata de su supervivencia y su propia seguridad, no la del planeta. Por eso niega las políticas internaciones de ataque y confrontación al Coronavirus.

Con el Coronavirus no tenemos en el escenario internacional un país agresivo, una potencia amenazante de otros países, o de todos, por su carácter pandémico. Trump está tratando de pintar a la República Popular China, como esta amenaza, por el origen del Coronavirus, en la ciudad de Wuham, y para ver a este país como el agente agresivo internacional. Es parte de su estrategia geopolítica mundial frente al impacto que tiene la República Popular China en la economía mundial, y la disputa que tiene Estados Unidos en ese escenario para no ser desplazado.

El problema fundamental para Trump es que en la lucha contra el Coronavirus todos los Estados del mundo tienen igualdad de enfrentamiento, y no quieren ser derrotados por el Coronavirus.

El Coronavirus no nos ha metido en el mundo de Tomas Hobbes, el de la lucha, o de guerra, de todos contra todos. Al contrario, nos ha impuesto la tarea de enfrentarlo como una sola fuerza. La diversidad de países, y de posiciones políticas de cada uno de ellos, tiene que conducir a políticas unitarias de acción internacional. Este es el reto que nos impone la pandemia.

La estructura internacional de las Naciones Unidas, y sus organismos internacionales, nos da la posibilidad de actuar cooperativamente en nombre de toda la Humanidad.

Estamos ante un interés público, hoy un interés común, de toda la sociedad, de todas las sociedades existentes, por la defensa del bienestar, la felicidad y la satisfacción de las necesidades básicas de todos los seres humanos.

Enviado a SURCOS por el autor.

Imagen: https://news.un.org/es/story/2020/04/1472832