En su emotivo discurso de despedida, José Alberto “Pepe” Mujica Cordano reflexionó sobre el final de su vida pública y política, expresando su gratitud y confianza en las nuevas generaciones que continuarán la lucha por un mundo mejor. Consciente de que ya no participará en campañas electorales, Mujica hizo un llamado a la unidad, la esperanza y la educación como pilares fundamentales para enfrentar los desafíos del futuro. “Cuando estos brazos se vayan, habrá miles de brazos”, afirmó, resaltando la importancia de la juventud en la construcción de un cambio profundo para la humanidad.
A continuación, se presenta la transcripción completa del discurso de despedida de José Mujica, en el que comparte sus reflexiones finales y su llamado a las nuevas generaciones:
“Gracias compañeros. Les pido un minuto, un minuto del corazón no de la garganta. Es la primera vez en los últimos 40 años que no participó en una campaña electoral y lo hago porque estoy peleando con la muerte, porque estoy al final del partido absolutamente convencido y consciente. Pero tenía que venir hoy acá por lo que simbolizan ustedes. Entonces, soy un anciano que está muy cerca de emprender la retirada de donde no se vuelve. Pero soy feliz porque están ustedes, porque cuando mis brazos se vayan, habrá miles de brazos sustituyendo la lucha y toda mi vida dije que los mejores dirigentes son los que dejan una barda que los supera con ventaja. Y hoy están ustedes! Está Yamandú, está Pacha, hay miles y otros que esperan y otros brazos jóvenes porque la lucha continúa por un mundo mejor y he gastado mi juventud, mi vida junto con mi compañera, que estoy vivo por ella y por esa otra mujer que es mi doctora. Si no me hubiera ido y tengo que venirme a agradecerles del corazón. Los más jóvenes van a vivir un cambio en el mundo que no ha conocido la humanidad. La inteligencia va a ser tan importante como el capital lo que significa que la formación terciaria se va a imponer para las nuevas generaciones. Si no somos capaces como país de educar y de formar a las generaciones que vienen, van a pertenecer al mundo de los irrelevantes, de los que no sirven ni para que los exploten. Este es el desafío más grande que tiene el país, por eso apoyo a Yamandú, porque se precisa un gobierno que abra el corazón y la cabeza con todo el país. No es poético lo que digo. Alguien lo tiene que decir, un anciano. No al odio, no a la confrontación. Hay que trabajar por la esperanza, hasta siempre les doy mi corazón. Y gracias, tengo que darle gracias a la vida porque cuando estos brazos se vayan, habrá miles de brazos. Gracias por existir, hasta siempre.”
Evo Morales, José Mujica, Vilma Rousseff, Cristina Fernández de Kirchner y Rafael Correa, expresidentes de Bolivia, Uruguay, Brasil, Argentina y Ecuador respectivamente. Imagen: www.meer.com
¿Se mueve el péndulo político latinoamericano?
Vladimir de la Cruz
América Latina, desde 1990 hasta hoy, ha venido recuperando el desarrollo democrático luego de la época de las dictaduras que cerraron el ciclo de las repercusiones de la Guerra Fría. Políticamente, se ha movido de manera pendular de un extremo a otro, de la derecha a la izquierda con distintas expresiones y manifestaciones de gobiernos, de la izquierda a la derecha y de nuevo la izquierda.
Podemos entender en general lo qué es la derecha. La izquierda latinoamericana, desde el ejercicio de gobiernos, es más heterogénea. En ella hay más matices de expresión. Fuera de los gobiernos, la izquierda es muy diversa, dispersa, desunida, y con muchos visos de sectarismo de lo que dentro de esa izquierda se valora qué es ser de izquierda hoy en América Latina y en cada país, y sin una clara orientación estratégica, como mayoritariamente tenían, en general, los partidos que se consideraban de izquierda antes de 1990.
La caída de la Unión Soviética, de los países socialistas europeos que formaban parte del Pacto de Varsovia, y con ello la desintegración del Sistema Mundial Socialista, como se esbozaba en el contexto de la Guerra Fría, entre 1945 y 1991, coincidió en tiempo histórico con la desaparición de los regímenes militares, autoritarios y dictaduras militares que gobernaron especialmente en países suramericanos. La represión causada durante las dictaduras tuvo un gran impacto en el debilitamiento de las izquierdas políticamente organizadas como existían antes de los regímenes militares. La superación de estos gobiernos transitoriamente avanzó manteniendo en algunos de ellos restricciones políticas, particularmente contra partidos comunistas o identificados con el marxismo leninismo, y las izquierdas socialistas clásicas.
A esto se agregó el nuevo contexto de las relaciones internacionales, la globalización, el impulso de los Tratados de Libre Comercio, el surgimiento de los Estados Unidos como el líder político de esta época, Rusia avanzando dentro del capitalismo mundial, y la República Popular China convirtiéndose en la principal potencia y economía comercial del mundo.
En todo el continente solo la Revolución Cubana se ha mantenido, desde su origen, 1959, como una revolución socialista así declarada, en 1961, y así establecida en la Constitución Política de 1976. La particularidad de su sistema político ha hecho que los enemigos del socialismo, en todas sus formas, adversen constantemente su régimen político, su gobierno, ignoren su sistema político electoral, tratando de compararlo con los sistemas político electorales imperantes en el resto de los países latinoamericanos, para poder desde esta perspectiva disminuir su presencia continental, igualándola a los gobiernos dictatoriales que ha habido en América Latina, y para distinguirla de los países que hacen descansar su modelo democrático en los sistema electorales, con participación de partidos políticos y posibilidades de alternancia de sus gobernantes. En Cuba recientemente, luego de la muerte de Fidel Castro, se ha impulsado, por el mismo Raúl Castro, una reforma constitucional mediante la cual ningún gobernante puede estar más de ocho años en el poder. El mismo Raúl Castro renunció a esa posibilidad, y hoy Cuba tiene un nuevo gobernante surgido de esta decisión, Miguel Díaz Canel. De este modo, a la vuelta de los próximos 4 u 8 años, cuando se nombre un nuevo presidente de Cuba, el argumento del continuismo en el poder, como tema, se acabará en tanto en una buena parte de los países latinoamericanos los presidentes pueden reelegirse al menos una vez, exceptuándose de esta situación Venezuela y Nicaragua, países que no son socialistas en su modelo económico ni político, donde la reelección es prácticamente abierta, ilimitada.
Después de la Revolución Cubana solo el ascenso de la Unidad Popular en Chile, en 1970, con el Dr. Salvador Allende, derrocado en setiembre de 1973, abrió las posibilidades de avanzar al socialismo, por una vía pacífica de la revolución, la vía electoral. El golpe de estado contra Allende impulsó la vía armada para la toma del poder en algunos países, y para derrotar dictaduras, siendo Colombia el país que más guerrillas y resistencia de este tipo mantuvo, hasta la firma de los Acuerdos de Paz.
Ningún país, ni pueblo, de América Latina ha podido desarrollar un proceso consolidado semejante al cubano, por la vía de las armas o por medios electorales, en todo este tiempo. En Nicaragua, en 1979 triunfó la guerrilla del Frente Sandinista de Liberación Nacional, que no era una guerrilla marxista leninista ni se proponía el establecimiento del socialismo, y se acomodó, por el contexto político a desempeñarse dentro de los cánones democráticos republicano. Los acuerdos de paz en Centroamérica crearon las condiciones para la incorporación de los movimientos guerrilleros a la vida política. No casualmente el Frente Farabundo Martí, otro de los importantes movimientos guerrilleros existentes en Centroamérica, llegó a gobernar El Salvador, con Salvador Sánchez Cerén desde el 2014 hasta el 2019. Ni con el Frente Sandinista ni con el Frente Farabundo Martí se desarrollaron modelos socialistas de economía ni de organización política del Estado. Tampoco en Venezuela ha sucedido. Solo hay en estos países desarrollo capitalista y de relaciones capitalistas de producción. Ni siquiera hay un planteamiento como el de China, un poder político comunista, o socialista y dos economías, una socialista y otra de mercado, o capitalista.
En los países cuyos gobiernos levantaron, por un breve tiempo, las banderas del llamado Socialismo Siglo XXI, y de los partidos de esos países, que forman parte del Foro de Sao Paulo, tampoco pudieron impulsar modelos económicos o políticos socialistas.
Cuba nunca abrazó como propia la bandera del Socialismo Siglo XXI, que surgió en la Venezuela de Hugo Chávez. Rafael Correa, presidente de Ecuador desde el 2007 hasta el 2017 impulsó su llamada Revolución Ciudadana, abrazando en el discurso el concepto de Socialismo Siglo XXI. Evo Morales en Bolivia, desde el 2006 hasta el 2019, desde su Revolución Pluriétnica y Pluricultural, también abrazó en el discurso el concepto del Socialismo Siglo XXI.
Con la muerte de Hugo Chávez, presidente de Venezuela desde 1999 hasta el 2013, tanto Correa como Morales, abandonaron el discurso del Socialismo Siglo XXI y volvieron a sus originales conceptos Revolución Ciudadana y Revolución Pluriétnica y Pluricultural. Daniel Ortega, presidente de Nicaragua de manera continua desde el 2007 tampoco levantó la bandera del Socialismo Siglo XXI.
Heinz Dieterich Steffan, el esposo de Marta Harnecker, periodista y escritora marxista, muy reconocida en Latinoamérica, residentes ambos en la Habana, México, y en Venezuela, fue el desarrollador de la idea del Socialismo Siglo XXI, como un nuevo proyecto histórico. Asesor en este campo de Hugo Chávez, rompió con él en el 2008 señalando que nada de eso se estaba desarrollando en Venezuela. Chávez mantuvo su discurso hasta su muerte. Nicolás Maduro, que sucedió a Chávez mantuvo esta bandera que ya ha bajado de la asta.
Durante el período de gobierno de Hugo Chávez él logró destacarse como el líder más importante de Suramérica, con gran proyección internacional, por sus posturas nacionalistas y antiimperialistas. En su entorno, Ernesto Kirchner, que gobernó Argentina desde el 2003 hasta el 2007, sucediéndole su esposa Cristina Fernández, ambos surgidos del peronismo, a la presidencia desde el 2007 hasta el 2015, actual vicepresidenta de Argentina, hicieron yunta con Hugo Chávez, apoyando lo proyectos políticos regionales que impulsó Chávez. En Perú, Allan García, presidente desde el 2006 al 2011, no abrazó el proyecto Socialismo Siglo XXI ni el bolivarianismo impulsado por Chávez. Ni el presidente Alejandro Toledo, 2001-2006, tampoco lo hizo. Tampoco lo hizo Ollanta Humala, 2011-2016. Perú ha sido un país en profunda crisis política, desde el 2000 hasta hoy ha tenido 7 presidentes. El actual presidente, Pedro Castillo, con solo un año de gobierno enfrenta juicios para una posible destitución.
Este proceso de destituciones presidenciales en Latinoamérica ha sustituido los tradicionales golpes de estado del período de la Guerra Fría. En lugar del golpe militar se acude a argucias constitucionales y legales, lo que se ha venido denominando golpes de estado blandos. Así se impulsaron los golpes contra Manuel Zelaya en Honduras en el 2008, contra Fernando Lugo en Paraguay, en el 2012, y contra Vilma Rousseff, en Brasil en el 2016. Desde 1992 hasta el 2016 se destituyeron o se interrumpieron 15 mandatos presidenciales en América Latina, en nueve países.
Estos golpes de estado blandos fueron para detener o debilitar proyectos políticos progresistas, algunos de ellos vinculados al desarrollo político que impulsaba regionalmente Hugo Chávez. Proyectos para frenar el ALCA, el Área de Libre Comercio de la Américas y en su lugar impulsar el ALBA, la Alianza Bolivariana de los Pueblos de Nuestra América, con un nuevo Tratado de Libre Comercio, haciendo énfasis en la autodeterminación, independencia e identidad de nuestros pueblos. El Proyecto de Petrocaribe, que reúne a Antigua y Barbuda, Bahamas, Belice, Cuba, Dominica, Granada, Guatemala, Guyana, Haití, Honduras, Jamaica, Nicaragua, República Dominicana, San Cristóbal y Nieves, San Vicente y las Granadinas, Santa Lucía, Surinam, Venezuela, orientado a apoyar a los países del Caribe, en una alianza petrolera. El Proyecto de UNASUR, de la Unión de Naciones Suramericanas, como una organización intergubernamental, de la que participaron Argentina, Bolivia; Brasil; Chile; Colombia; Ecuador; Guyana; Paraguay; Perú; Suriname; Uruguay y Venezuela. Con UNASU se impulsó el Banco Sur y Petrosur.
Entre otros, el proyecto más ambicioso fue la creación de La Comunidad de Estados Latinoamericanos y Caribeños, CELAC, como un mecanismo intergubernamental de diálogo y concertación política, que excluye a Estados Unidos y Canadá. En cierta forma fue el intento de sustituir a la OEA, a la Organización de Estados Americanos. Estos proyectos hoy están muy débiles, sin el apoyo que durante los gobiernos de Hugo Chávez tenían, entre otras razones por el alto precio que llegó a alcanzar el petróleo.
Políticamente, el siglo XXI en América Latina surgieron una serie de partidos y líderes considerados de izquierda que triunfaron electoralmente, especialmente, en Suramérica. Así, en 1999 Hugo Chávez, en Venezuela; en el 2003, Luiz Inácio Lula da Silva, en Brasil; Néstor Kirchner, en el 2003, en Argentina luego de la crisis política de 2001; Tabaré Vázquez, en 2004, en Uruguay con el apoyo del Frente Amplio-Encuentro Progresista-Nueva Mayoría; Michelle Bachelet en Chile; Evo Morales en Bolivia; Rafael Correa en Ecuador En esta primera década también Martín Torrijos en Panamá y el retorno de Daniel Ortega a la presidencia de Nicaragua en el 2006.
En este mismo período los restantes países de América Latina frente a estos gobiernos se apreciaban como conservadores. El desarrollo político, de la segunda década de este siglo, impulsó cambios en la mayoría de esos países que se vieron como un movimiento pendular de regreso al conservadurismo y derechismo político.
Del mismo modo, la política latinoamericana se ha movido, recientemente, hacia el progresismo o la izquierda, en su sentido amplio, con el ascenso presidencial en Argentina, de Alberto Fernández y su vicepresidenta Cristina Fernández, en México con Andrés Manuel López Obrador, en Honduras con Xiomara Castro, en Perú con Pedro Castillo, en Bolivia con Luis Arce, en Chile con Gabriel Boric y más particularmente con la llegada a la presidencia de Colombia de Gustavo Petro, junto a Daniel Ortega en Nicaragua y Nicolás Maduro en Venezuela. Otros gobernantes que contribuyen esta idea progresista son Luis Rodolfo Abinader de República Dominicana, Nayib Bukele de el Salvador. Aunque Bukele es un híbrido en su apreciación valorativa, tanto se le ve de la derecha como de la izquierda. Por su parte, el lado conservador se expresa por los presidentes de Guatemala, Costa Rica, Panamá, Ecuador, Brasil y Uruguay, después de haber tenido a José Mujica.
De la izquierda continental el más destacado, para este momento histórico, es para mí, Gustavo Petro, el presidente recién electo de Colombia. De su gobierno y su desempeño, si lo dejan gobernar, puede llegarse a convertir en el líder más importante de las corrientes de la izquierda política latinoamericana, de esta década, y su modelo de enfrentar los graves problemas de la economía y del desarrollo de Colombia, que persisten en el resto de los países, pueden marcar sendas y nuevos caminos políticos, de amplios sectores, para unitariamente, superar los atrasos y cadenas que en la economía y en lo social pesan sobre las grandes masas de población y de trabajadores, urbanos y del campo de América Latina.
Discurso del Expresidente José Mujica en el Seminario ¿Cómo recuperar y transformar los Sistemas Agroalimentarios de América Latina post covid-19?, organizado por la FAO *
En nuestra América Latina, la Agricultura Familiar y el campesinado tienen un primer problema, hay que quererlo y darse cuenta de la importancia estratégica que tiene para la seguridad alimentaria, para el cuidado del medioambiente y para el porvenir de la propia humanidad.
La comida hay que producirla lo más cerca que se pueda de la cocina y hay que entender que hay que cuidar a los humanos que tienen esa posibilidad y esa aprehensión, pero nunca se va a generar voluntad política si no se quiere, la AF no tiene lobby y no tiene peso institucional y es específica en su problema y en sus debilidades.
No se puede saltar de la edad media a la agricultura robotizada, inteligente o vertical, hay que entenderla como es y hay que trabajar a partir de lo que es, mejorando escalón a escalón, pero eso implica voluntad política, creación de institucionalidad específica y especializada y la primera plaga que tiene que enfrentar la AF es la soledad.
No se puede pretender que familias aisladas puedan pelear con rentabilidad en el mundo de hoy y hay que luchar por el agrupamiento, la creación de empresas, cooperativas, comunidades o lo que fuera, porque en el campo “agrándate o vete” y entonces la política de agrupamiento me parece esencial, porque es el primer escalón de la rentabilidad, es que tengan acceso a poder vender lo más directamente posible, sacarse de encima la intermediación, que se queda con la parte más importante de la rentabilidad.
Las ciudades tienen que generar lugares para la presencia de la AF, pero no se puede de a uno, se requiere organización humana en equipo, no se puede trabajar la tierra si mal se vende y eso hay que entenderlo, la primera rentabilidad está en aminorar los costos que tiene la intermediación para la AF en todos los aspectos y para eso se necesita voluntad política, se necesita crear una institucionalidad y una investigación a partir de lo que hay y de lo que existe en cada lugar, para irlo mejorando escalón a escalón.
La investigación no puede estar solo dedicada al complejo agroalimentario industrial, tiene que ser una investigación específica para la AF y lo propio un extensionismo que no se puede atender de a uno, se debe atender de a grupo y para esto hay que poner gente comprometida y hay que extraer los mejores cuadros de la propia AF para hacer este extensionismo. Hoy si se quiere trabajar mejor la tierra, si se quiere hacerla sustentable, hay que tener en cuenta que la AF tiene que sacar partido de lo que tiene.
Es probable que la historia de la agricultura sea una fundación femenina, porque en todas las culturas se presenta frecuentemente a la agricultura como una diosa y por eso creo que la mejora implica trabajar no solo la tierra, trabajar en la cabeza de los agricultores.
Quiero señalar además que lo que viene es peligro, la inestabilidad del tiempo, las circunstancias del cambio climático, es una falta de imprevisión de las ciudades no cuidar a la AF. Hay que batallar para para lograr voluntad política, hay ejemplos aterradores, en la Argentina hay una ley para la agricultura familiar aprobada hace unos dos gobiernos que está sin reglamentar, esto no le va a pasar a la agricultura industrial o a los complejos agroalimentarios, le pasa a la agricultura campesina y a la AF, porque no tiene quién la represente donde se toman las decisiones políticas y hay que tener conciencia de esa deuda.
En primer término, quiero señalar que hay que diversificar la AF, puede ser generadora de micro energía y hay que introducir masivamente la producción de energía para el uso del riego y de miles de actividades que acompañan.
El urbanismo tiene que abrir puertas a la presencia de la AF por su propia seguridad y hay que entender lo siguiente: hasta cuándo van a crecer las ciudades monitoreadas y manejadas por el interés inmobiliario y si no fuera inteligente pensar en la medida de las ciudades, porque este es un problema que va a enfrentar el futuro de la humanidad, campos despoblados y ciudades atestadas dificultando todos los problemas de distribución y el urbanismo tiene que ver con esto.
Quiero señalar que hay partes de América donde el transporte es una herramienta que los poderes comunales tienen que enfrentar y hay que aprender de los propios campesinos que han logrado el milagro de sobrevivir en condiciones que son inexplicables y hay un mundo de sabiduría dispersa que hay que transformarlo en ciencia sencillamente para resembrarlo.
Quiero señalar además que es fundamental una especialización en la atención de los grupos de agricultores familiares y paralelamente la introducción de esa atención a toda la familia, la mujer tiene mucho que ver, si la mujer no participa tenemos la presencia de la soledad en la lucha campesina, es fundamental introducirla y recordar que existe un conjunto de técnicas que son maravillosas, están probadas y son viejas y hay que retomarlas y reaplicarlas a el trabajo con la maleza, distintas formas de regadío o al control de plagas, que necesitan la expansión del conocimiento especializado.
Creo además que la AF debe sacar parido de lo que tiene, mano de obra en general ociosa en el conjunto de la familia y lograr en un grupo humano un grado de diversificación que le permita en conjunto accesar directamente al mercado, con una producción diferenciada.
Los barrios más pudientes de las ciudades, ahí debe tener presencia de venta el agricultor familiar en condiciones específicas y especiales, les voy a relatar lo que pasa en mi barrio, en mi país, las cadenas de supermercados están pagando 28 o 30 pesos por el paquete de lechuga, que lo venden a 95 pesos y lo pagan a 90 o 120 días y eso precisamente es lo que evita la rentabilidad.
Este abuso que están significando las grandes cadenas de distribución, se va comiendo gran parte de la rentabilidad y del esfuerzo arriba de la tierra y hay que llamar las cosas por su nombre, si no hay voluntad política para enfrentar estos problemas, por más que hagamos y por más que favorezcamos con cuestiones indirectas a la AF, va a sucumbir por la intermediación y el costo fabuloso de la masa de recursos que se traen, por eso creo que el principal problema es de índole política, de políticas no partidarias.
Por eso voy a saldar con lo que dije al primero, hay que quererlo, solamente cuando se tiene sentimiento se puede generar racionalidad a favor de defender esta causa, pero quiero señalar que si Europa cuida su campiña, si Europa subsidia su producción interna, es porque aprendió que su seguridad alimentaria es un resorte fundamental para la estabilidad de un país, esta es una ley mundial, es una ley que hay que entenderla.
No se puede depender la alimentación de los pueblos pura y exclusivamente de recursos que se importan, hay que asegurar una masa de alimentación lo más cercana posible a los centros de consumo y esa es la razón de existencia de porqué hay que volcar políticas específicas, especializadas de defensa y multiplicación de la AF, desde los bancos de tierras, al extensionismo y a los Ministerios especializados en la materia.
La tecnología de investigación dedicada a esta circunstancia, por qué?, porque lo que no es posible o rentable para una gran empresa, suele ser posible y rentable para la microempresa, la escala de la tecnología es infinita y es variada, hay pueblos de los que mucho hay que aprender, asombra los resultados de la AF que tiene el pueblo japonés en condiciones dificilísimas y no son cosas del otro mundo, hay una máquina de arrancar yuyo prácticamente construida con alambres elásticos para usarla en el momento preciso.
Hay montones de ingenio, el problema es difundirlo, me quedé asombrado una vez en Brasil, un grupo indígena que tiene la capacidad de conservar la carne sin usar sal ni heladera y hacerla durar meses, utilizando algunos engendros de una hierba de la Amazonía, hay conocimiento que se debe transformar en ciencia, pero esto necesita que la Universidad vaya al campesinado y no esperar que el campesino vuelva a la Universidad, porque probablemente ya deje de ser campesino.
Entonces esta simbiosis, me parece que es una política de largo plazo, pero necesitamos antes que nada voluntad política, por eso he seguido el rumbo de la discusión y me parece formidable, pero tengan presente lo más formidable es conseguir voluntad política y la voluntad política es una dependencia, es una responsabilidad de quienes están en el Gobierno, pero para esto en primer término hay que entender la necesidad imperiosa que tiene la humanidad de cuidar a sus agricultores y sobre todo a sus agricultores familiares.
Porque las empresas se van a preocupar de la rentabilidad y está bien, así tiene que ser, pero a la larga los humanos también tenemos identidad, el campesino no es una forma de vida ni mejor ni peor, es una forma distinta y hay que entender sus claves, y para eso respetarlas, entenderlas y quererlas y darse cuenta que es tremendamente útil, sobre todo cuando las catástrofes y las necesidades nos acucian, cuando las reglas de intercambio se fracturan, cuando el comercio internacional tenga frenos por decisiones políticas que pueden tomar las potencias.
La única seguridad de alimentos, es lo que se produce cerca de casa y ese es el papel que tiene que cumplir la AF, entonces hay que tener un cuerpo de bomberos en una sociedad, porque no se sabe cuándo hay incendio, como hay que tener un club de capacidad médica para atender las enfermedades, hay que tener un grupo para atender la comida de la gente, esto es un problema de sentido común, el proteccionismo de la AF es ganar seguridad de vida en el correr del tiempo en un mundo cada vez ferozmente urbanizado.
Sabemos que la arquitectura contemporánea está pensando en los edificios verdes, que están pensando en la agricultura urbana, que están pensando en la agricultura vertical, en una cantidad de adelantos que son posibles, pero mientras tanto no desperdiciemos que nos va a salir más económico lo que tenemos al alcance de la mano, que es todavía la existencia de una masa de campesinos en nuestra América Latina.
“Se vale soñar, pero es más importante pelear por los sueños” expresó José Mujica, durante la conferencia que brindó el miércoles 19 de agosto, en la UCR (foto: Laura Rodríguez).
José Mujica Cordano, ex presidente de la República Oriental de Uruguay brindó este miércoles 19 de agosto, una conferencia en la Universidad de Costa Rica, en la cual se refirió a la importancia del fortalecimiento de la integración latinoamericana, la búsqueda de un sistema solidario y la lucha por la libertad.
Entre miles de personas y calurosos aplausos, Mujica destinó gran parte de su discurso motivar a los y las jóvenes costarricenses a que sean felices y no permitan que las dinámicas del mercado les impidan disfrutar de una vida integral.
“No dejes que te roben tu libertad, la vida no es solo para trabajar, hay que tener tiempo para vivir… su única riqueza verdadera es el tiempo” expresó.
Mujica, quien visitó nuestro país por invitación de la Federación de Estudiantes de la Universidad de Costa Rica criticó el hecho de que estemos ingresando a una época en la cual, de manera acelerada, «el formidable desarrollo de las fuerzas productivas y la explosión técnico científica sacuden la realidad de nuestro tiempo”.
“Por la masificación de la expectativa humana tras el sueño y la ambición de vivir mejor, en un mundo que se empequeñece, una civilización de Internet que va a hablar dos idiomas como mínimo en poco tiempo, como una imposición del porvenir… una civilización que nos aturde con la luz de la información y casi no nos deja tiempo para estar con nosotros mismos, para comunicarnos con el hombre amigo, época de mucha información pero de poco procesamiento propio” afirmó.
El ex presidente señaló también que somos una sociedad que cuenta con los recursos y las posibilidades para hacerle frente a la pobreza, el hambre, la desigualdad, el caos ambiental, pero que no hemos logrado solventar estas problemáticas por la “impotencia política” y porque “las direcciones políticas están sordas”.
El Dr. Henning Jensen Pennington, rector de la Universidad de Costa Rica y el joven Jordan Vargas Solano, presidente de la Federación de Estudiantes de la UCR, fueron los encargados de darle la bienvenida al ex mandatario, ambos manifestaron que para la institución fue un honor contar con la visita de un hombre que es referente del sueño de la unión de América Latina (foto Laura Rodríguez).
La necesaria y urgente integración de América Latina
Por otra parte, Mujica mencionó que América Latina tiene como desafío conseguir la “integración de inteligencias”; ya que desde su perspectiva, la verdadera fuente de progreso y libertad recae en la investigación y en buscar las herramientas para que los y las jóvenes que son formados en nuestras universidades se queden en el continente y sirvan a su sociedad.
“Muchos de nuestros muchachos en las universidades que pagan los pueblos se van al mundo rico a trabajar, porque les pagan más, porque los tratan como señores, porque nuestras pobres patrias no pueden pagar lo que paga el mundo central y formamos hombres de ciencia y nos damos el lujo de perder los mejores frecuentemente por una raíz de mercado” expresó Mujica.
Asimismo, el reconocido político subrayó la necesidad de que los países latinoamericanos se unan y puedan hacerle frente al desafío de una política concreta de integración, la cual le permita a América Latina tener más herramientas a la hora de enfrentarse a potencias como China o la India.
“El mundo que viene no tiene lugar para los débiles o más claro nuestras repúblicas serán hojas al viento si son incapaces de vertebrar acuerdos comunes que nos permitan crear un alero que nos defienda y que nos dé presencia de carácter internacional” manifestó el ex mandatario.
En este punto, Mujica hizo un llamado al público para que cada quien desde su campo de acción contribuya con esta política de integración y de construcción de una sociedad menos egoísta, menos desigual, y menos inequitativa.
A la actividad asistieron miles de personas, entre ellos integrantes de la comunidad universitaria, diputados y miembros de distintos grupos sociales, entre otros (foto Laura Rodríguez).
“Luchar por la felicidad humana”
En su opinión, el camino para conseguir la felicidad humana y el bienestar es el camino de la solidaridad y de una vida en sobriedad, por lo que instó a la juventud a no dejarse llevar por el egoísmo, la ambición de acumular riqueza y el consumismo.
“A la gente joven: si nos dejamos dominar culturalmente, por la cultura funcional que en esta etapa del desarrollo necesita el capitalismo y que lo ha logrado… cultura que nos hace ver y pensar que para ser feliz hay que comprar cosas nuevas… y como las cosas se compran con plata, y la plata se compra con el tiempo de tu vida, ¿qué tienes que gastar para tener esa plata? en el fondo has de darte cuenta que cuando derrochas en consumo estás derrochando tiempo de tu vida” recalcó.
Asimismo, alentó a los y las jóvenes a vivir con amor, a vivir el tiempo de su vida, a no dejarse quitar su libertad: “hay que luchar por el desarrollo pero hay que luchar por la felicidad humana, desarrollo sin felicidad humana es peor que un cuento chino, porque vida hay una sola”.
Desde su visión, el progreso debe darse pero debe ser un “progreso social”, en el que logremos sacarle el máximo provecho a la explosión tecnológica para tener más tiempo para vivir, compartir y hacer las cosas que nos gustan.
El papel de los partidos políticos
Durante su discurso, el reconocido político reiteró sobre la necesidad de fortalecer la unión entre los países de América Latina (foto: Anel Kenjekeeva).
Al final de su discurso, el político resaltó el papel que juegan los partidos políticos en la consecución del objetivo de la integración, en la eliminación de la pobreza y en el proceso de transformación social.
En este punto añadió, que los partidos no deben verse o entenderse como fines en sí mismos, ni agencias de colocación sino como la “organización de los esfuerzos colectivos para impulsar los cambios en la sociedad”.
“Los cambios no surgen de las mentes privilegiadas y aisladas surgen de la lucha de incontingentes colectivos, la democracia representativa requiere de partidos políticos fuertes que son los primeros filtros para funcione la sociedad” dijo el ex mandatario.
Mujica también explicó que el único mecanismo para frenar la corrupción dentro de los partidos políticos recae en el ejercicio de una intensa vida partidaria: “lo importante son las ideas y las causas, los hombres somos sustituibles, lo que no son sustituibles son las causas, y las causas necesitan del calor de los colectivos que luchan”.
El uruguayo también manifestó que los partidos políticos están antes y después del gobierno, y que “no hay que confundir la tarea de gobernar con la tarea del partido, el partido cultiva el mañana, cultiva la utopía, cultiva la formación de las generaciones que van a venir, el gobierno lucha por la administración del hoy”.
Al finalizar su discurso motivó nuevamente a la audiencia a tomar las riendas y a comprometerse en el proceso de construcción de la democracia “hay que poner algo, no se puede ser neutral ante el dolor de la gente”.
La conferencia “Cambios y Perspectivas para América Latina” fue organizada por la Federación de Estudiantes de la Universidad de Costa Rica y se llevó a cabo frente a la Escuela de Ingeniería Eléctrica a las 5:00 p.m.
Para acceder a la conferencia: Cambios y perspectivas para América Latina en el siglo XXI, dictada en la Universidad de Costa Rica el 19 de agosto de 2015, ingrese en el siguiente enlace:
El próximo miércoles 19 de agosto a las 5:00 p.m. se llevará a cabo la conferencia. “Cambios y Perspectivas para América Latina en el siglo XXI” a cargo de José Mujica, en el parqueo frente el Auditorio de la Ciudad de la Investigación, en la UCR (al aire libre).
La actividad es organizada por la Federación de Estudiantes de la UCR (FEUCR), en colaboración con el CICAP y el Decanato de Ciencias Sociales de la UCR.
Información enviada a SURCOS Digital por Isabel Ducca Durán.