Etiqueta: Policía
ANEP informa del avance de negociaciones en el Ministerio de Seguridad Pública
Escrito en . Publicado en Derechos, Trabajo.
Una nota oficial del Ministerio de Seguridad Pública enviada por ANEP a SURCOS señala los siguientes acuerdos:
“PRIMERO. El Ministerio de Seguridad Pública no ha implementado o comunicado ninguna circular referente al cambio de rol policial.
SEGUNDO. Con relación al acuerdo primero, se convoca para el día lunes 24 de abril del 2023, a las 13 horas en el auditorio Príncipe de Asturias, para realizar mesas de trabajo y conocer las propuestas de los diferentes actores, en el contexto del proceso de diálogo abierto esta tarde.
TERCERO. A pedido de los firmantes se suspende a partir de las 15 horas del día 21 de abril del 2023. Continuándose el proceso de construcción con lo visto en el numeral segundo en aras de continuar el proceso de construcción de una propuesta viable para a contención de criminalidad y la violencia en Costa Rica”.
En la reunión se contó con la siguiente asistencia: ANEP, SITECO, UNP, MTSS, MSP, MP.
Creatividad e innovación para una gobernanza que brinde mejores condiciones de vida
Escrito en . Publicado en Análisis.
José Luis Pacheco Murillo
Hoy se celebra el El Día de la Creatividad y la Innovación y tiene como principal objetivo poner de manifiesto todo el potencial creativo de las personas a nivel mundial. La creatividad se refiere a ideas o pensamientos novedosos, que para que se concreten, es necesaria la puesta en marcha de planes innovadores que se transformen luego en una realidad palpable.
Al parecer mucho de esta creatividad e innovación le falta al señor presidente y a su ministro de Seguridad Pública y el resultado de ese ineficiente manejo de la situación de seguridad del país ha tenido como resultado algo inusual, que la fuerza pública se lance a las calles dejando al país indefenso y a expensas de la criminalidad.
Es decir, al presidente y al ministro les “salió el tiro por la culata” y hoy vivimos una acción como del cuento “el mundo del revés”.
Creatividad e innovación son necesarias para una gobernanza que brinde mejores condiciones de vida al país y a todos los ciudadanos. Eso implica menos shows y más diálogo, menos ocurrencias mediáticas y más concreción de acciones que posibiliten mejora en las condiciones que hoy tenemos y eso implica de manera urgente en la seguridad nacional.
No hay una lectura adecuada de los acontecimientos. La criminalidad tanto de delincuencia común como de crimen organizado no se enfrenta con ocurrencias si no con mejoras para quienes deben de enfrentarla, hoy a os policías se les pide mayor entrega sacrificando mucho de ellos, pero no se le mejoran las condiciones ni de horario laboral ni de equipamiento y condiciones físicas.
Ya no estamos en los años 60s o 70s estamos en el siglo XXI en donde el crimen organizado a nivel mundial está imponiéndose y manejando los hilos incluidos los de muchas instituciones gubernamentales.
Es urgente que hoy mismo se deje la arrogancia y el buscar sensacionalismos y se entre a un diálogo con los miembros de la fuerza pública y se asuman responsabilidades saje les cambien sus condiciones para poder enfrentar la criminalidad en todas sus formas.
Dios quiera que el presidente y el gobierno comprendan la gravedad de la situación de desestabilización en la que nos encontramos y la enfrente con especialmente con creatividad e innovación.
Movilización e indisciplina policial
Escrito en . Publicado en Derechos, Trabajo.
Marcos Chinchilla Montes
Este ha sido un gobierno de mucho efecto, pero poca inteligencia, desde el primer decreto malogrado que solo sirvió para hacer notar la incapacidad que tanto él como su equipo en Casa Presidencial tenían.
Sus errores se han venido acumulando de forma desenfrenada, aunque hay que reconocerle la capacidad que tiene para capitalizarlos, darles vuelta y finalmente invisibilizarlos, con el aplauso sórdido de las mazas que aún lo siguen.
Chaves chavacano ha sido un fiasco; no escucha, no negocia, pero lo mejor de todo es que no le importa: su ego patriarcal y machista se lo impide. Siempre atento a destruir la institucionalidad costarricense que tanto costó construir, que tantos réditos nos ha dejado a lo largo de casi ocho décadas; sin la menor duda, sigue siendo un excelente funcionario del Banco Mundial y su dogma neoliberal.
Chaves, el que casi muere por asfixia con un chop-suey de agricultores, sindicatos y otros actores políticos el pasado 29 de marzo, debe estar pasando esta noche una indigestión severa con la manifestación policial a las afueras de su apartamento en Curridabat y en otros lugares del país.
No se lo esperaba, como muchas otras personas tampoco lo esperábamos: que de pronto la disciplina policial se resquebrajara y exigiera su derecho a tener una vida digna: días de descanso, alimentación sana, equipo de trabajo, lugares decentes de descanso, salarios dignos. Casi en el nivel de insubordinación, varios policías sugirieron que la Fuerza Pública debía de quedar fuera de la Regla Fiscal y de la Ley del Empleo Público; tremenda y osada solicitud.
Conociendo a Chaves, en un primer momento asumió una pose de negación ante las manifestaciones policiales, posiblemente pensó que la policía llegó hasta su apartamento para agradecerle la nueva condición de precariedad en la que les sumió de la noche a la mañana. No obstante, en este momento se encontrará furioso, se preguntará cómo se atreven a contrariar sus decisiones.
Mañana o pasado cuando le toque resolver la compleja bronca que se le está armando, responsabilizará de la decisión al ministro de Seguridad, y en un coqueteo con los cuerpos policiales, procederá a despedirlo.
La policía nos dio una importante lección de movilización social, indisciplina incluida; puede que no tengan conciencia de clase, pero esta clase de luchas permiten avanzar en esa dirección; ojalá sepamos emularla, aunque le duela al exdiputado Carlos Ricardo Benavides.
Al margen. Y la ministra del MEP firmó un convenio con AmChan en la cual su prima, es presidenta de la Junta Directiva, desmiente que exista conflicto de intereses.
URGENTE: Policía desaloja a familias de Asentamiento en Pavón de Los Chiles: ocho personas detenidas
Escrito en . Publicado en Comunidad, Trabajo.
Comunicado
Los Chiles, 22 de marzo de 2023. El día de hoy cuatro patrullas y un bus de la Fuerza Pública ejecutaron un desalojo administrativo a más de 30 familias del asentamiento Las Vegas, ubicado en Pavón de Los Chiles, Provincia de Alajuela.
Este grupo se organizó recientemente para poner a trabajar estos terrenos ante la crisis económica, la pobreza y el desempleo que azota la región. El gobierno, INDER y las fuerzas policiales optan por esta medida represiva, en lugar de encaminar una solución a la problemática de las familias que integran el asentamiento.
Por si esto no fuera poco, los cuerpos policiales detuvieron a ocho personas, incluso a una de ellas llegaron a perseguirla hasta otra finca, lo cual refuerza la ofensiva represora contra este grupo campesino.
De parte de la Alianza Campesina denunciamos este desalojo contra el grupo de Pavón, ya que para nada representa una salida satisfactoria en favor de los ocupantes.
Exigimos la inmediata liberación de las 8 personas detenidas y el retiro de todos los cargos en su contra.
Llamamos al movimiento social, sindical, campesino y popular solidarizarse con esta lucha y denunciar la persecución y encarcelamiento acá acontecido.
Amazon despide y amenaza con la policía a los empleados que buscan sindicalizarse en EE.UU.
Escrito en . Publicado en Trabajo.
Amazon enfrenta una nueva polémica, tras ser acusado de reprimir en Estados Unidos los intentos de sus empleados de formar un sindicato en la empresa. Trabajadores de varios estados del país han denunciado despidos y avisos a la Policía con acusaciones falsas como parte de una “cacería de brujas”.
La reciente sindicalización del almacén JFK8 en el distrito de Staten Island, el más grande de la empresa en Nueva York, ha impulsado las esperanzas sindicales de empleados de otras sucursales. Sin embargo, desde esa victoria, los esfuerzos por intimidar a los trabajadores que buscan asociarse en defensa de sus derechos laborales van en aumento. Amazon ha sido acusada de despedir ilegalmente a trabajadores en Chicago, Nueva York y Ohio, así como de tomar represalias contra empleados en Nueva York y Pensilvania.
Para más información pueden leer la nota completa en https://actualidad.rt.com/actualidad/432792-amazon-despedir-amenazar-empleados-sindicato
Y LA NACIONALIDAD… ¿COMO PARA QUÉ?
Escrito en . Publicado en Análisis, Equidad y derechos de la mujer.
Por Memo Acuña (Sociólogo y escritor costarricense)
El pasado 19 de enero en pleno centro de la ciudad capital costarricense, se produjo un hecho que requirió la intervención policial.
En apariencia se trataba de un episodio en el que mediaba un arma de fuego e involucraba dos personas: el padre y su hijo. El evento término con la muerte del segundo en su propio vehículo, a manos de la policía destacada en el lugar.
El suceso ocurrió en una de las cuadras más concurridas de la capital en horas cercanas al medio día, situación propicia para que los noticieros de mayor alcance nacional dedicaran la apertura de sus emisiones o sus “portadas” como se suele indicar en el argot de producción televisiva, a informar en vivo lo que estaba ocurriendo.
Uno de los telenoticieros de mayor audiencia a esa hora acompañó su transmisión en vivo con videos que fueron tomados por personas-testigas de lo ocurrido, los que mostraban dicho sea de paso a decenas de personas con sus teléfonos celulares grabando o sacando fotografías del evento, que seguramente hoy circulen como tendencia o continúen siendo “viralizados en redes sociales”.
Ante estas nuevas formas de intermediar la realidad, solo se puede pensar en la hiperespectacularización de lo cotidiano, la ausencia de sensibilización ante el sufrimiento del otro o la otra y la banalización como acto central en la construcción de sentido de los eventos que se presencian.
De esto hablaremos en próximas reflexiones, al igual que la acción policial a todas luces errática, así como el tema de la deteriorada salud mental en la población costarricense.
Lo que quisiera compartir ahora es cómo una vez más algunas ideas son materia de un burdo tratamiento informativo. En esa misma emisión noticiosa y en un intercambio entre periodista y director en estudio, este último consultó si era conocida la nacionalidad de los involucrados en el hecho.
Esta sola consideración sugiere análisis extensos sobre construcción de la noticia, el miedo como premisa de contenido y la presunción de que en todo acto violento o de inseguridad, tiene que estar presente, si o si, una persona extranjera.
Si algo ha quedado en evidencia en estos dos años ya de pandemia es la asociación entre riesgo y extranjeros como una fuerte idea a través de la cual trazar hipótesis y explicaciones. Lo mismo ocurre con el tema de la inseguridad.
Hemos insistido desde esta columna en propiciar mejores lecturas, centradas sobre otras formas posibles de informar donde no medien percepciones ni presunciones de sospecha. La sola pregunta sobre la nacionalidad es prescindible porque no suma en la ecuación explicativa sobre el hecho en sí. Entonces ¿para qué lo hacen los medios?
La convivencia colectiva sigue siendo un asunto pendiente, que, dicho sea de paso, exige entre otras cosas discreción, respeto, sensibilidad. Empecemos por alguna de las tres. La última, si les parece.
¿Les parece?
Sobre el asesinato de un niño y otro joven que intentaban robar ropa
Escrito en . Publicado en Análisis, Aportes para el desarrollo.
Por Carlos Meneses Reyes
Lo sucedido el pasado viernes 08 de octubre, en el municipio colombiano de Tibú, zona fronteriza con Venezuela, en el que fueron asesinados un niño y un joven de nacionalidad venezolana y dejados sus cuerpos baleados en la cabeza, en la carretera de salida, en un barrio de esa localidad; fue un claro y escueto linchamiento, iniciado en un local comercial al que presuntamente entraron, el niño de 11 años y el joven de 17 años dizque para robar ropa.
Las secuencias fotográficas existentes registran que ambos salen de los vestuarios con ropa del almacén puestas y presumible iban a huir sin pagarlas. Así expuesto, se trataría de un intento de hurto, al no mediar violencia alguna. No de robo, en el que el elemento violencia es lo determinante. Impetuosamente, esa si en forma violenta y grave, el propietario o encargado del almacén, procede a retenerlos, impidiendo que huyan o se salgan. Se forma la trifulca y en medio del alboroto aparece un justiciero, quien con infundada autoridad los condena y con ayuda de un secuaz los filman con un celular y habla: “Vamos a entregar a estos muchachos a las autoridades, para que se hagan cargo de los individuos estos, lamentablemente son muy jovencitos, no queremos verlos mañana tirados en la orilla de la carretera, bajo nuestra responsabilidad están”. Falso. El motivo o causa del suceso estaba determinado desde el momento en que inició la arbitraria retención. No digamos que se desvaneció la intención de entregarlos a las autoridades; sino que el sujeto incriminado relató el modus operandi de finalidad in si tu (en el lugar del hecho). En unos minutos, sujetos armados que se movilizaban en motocicletas, llegaron al almacén y se llevaron -a ojos vista- a los dos jóvenes. Minutos más tarde, los jóvenes fueron encontrados asesinados, con disparos en la cabeza, en Barrio Largo, en la vía que conduce a El Tarra. Un oficial de la Policía explicó que en momento alguno recibió llamada del propietario o encargado del almacén de ropas, ni ningún reporte por parte de la comunidad, ni se enteró del tumulto ocasionado por lo que estaba ocurriendo a las dos víctimas, vilmente asesinadas.
Versiones publicadas relatan que en la retención de los jóvenes también acudieron algunos habitantes, comerciantes y mototaxistas, de esa población de El Catatumbo, que les ataron las manos y les colocaron carteles que decía “ladrones”. Dizque al parecer las autoridades policiales no se enteraron de tamañas violaciones a sus derechos y todo ese proceder reprochable.
Desde el primer momento el niño y el joven fueron objeto de un linchamiento, resultado de ejecución tumultuaria, con claros sujetos individualizados y reconocidos, con la intención de aplicar justicia por mano propia. Colocados en una situación de indefensos al que fueron sometidos; con desconocimiento total de su condición notoria de menores; descartando cualquier emulación a la protección especial conque cobija la ley a los menores de edad. Ya el que hayan aparecido asesinados, es una relación concomitante que acompaña la acción delictiva, desde el inicio mismo de la retención de los menores.
Destaca un factor de distracción en todo este entramado: un oficial de la Policía resaltó que no tuvo ningún reporte, por parte de la comunidad o interesados, sobre el hecho que estaba ocurriendo con las dos víctimas asesinadas.
Como sujetos activos del linchamiento y ejecución de los dos menores de edad, están involucrados: el propietario y /o empleados del almacén. El autor de los vídeos que graba a los niños y al justiciero que adelanta sentencia, ni siquiera sumaria, al hacer apología del delito y entregar al niño y al joven a la muerte segura. Quienes les ataron las manos y colocaron los letreros. A la Policía del lugar que no se hizo presente y que con su omisión permitió la incursión de los sujetos armados; en un acto de sinceridad narrativa, ante la protuberante pestilencia y corrupción por acusaciones de vínculos con el para militarismo que asiste a la institución de las fuerzas armadas en Colombia. Los mismos medios de difusión oligárquicos reseñan, que precisamente, el doble asesinato hoy tiene en apuros a los policías de Tibú, pues varias personas que estuvieron presentes cuando los jóvenes fueron atrapados, presuntamente, robando en un local de ropa, denunciaron que llamaron más de una docena de veces a las autoridades para que se hicieran cargo de ellos, pero que jamás les contestaron.
HIPÓTESIS: El Terrorismo de Estado imperante en Colombia, ha dado instrucciones a los colaboradores paramilitares, para mantener “el orden” y la “seguridad”. Resalta una permisividad de actuar manifiesta. El tratamiento contra insurgente dado a la protesta social ha agudizado el problema de inseguridad en el país. Se asiste a un Estado inviable. Difunden la especie que las insurgencias colombianas armadas impulsan la tal “limpieza social”, dizque para obtener adeptos o aceptación en las comunidades y dizque tal fenómeno se agudizara hasta después de las elecciones del año 2.022… Tamaño despropósito no tiene cabida. Solo a un montaje de la inteligencia militar se puede explicar el que en días pasados aparezca un panfleto atribuido al EJERCITO POPULAR DE LIBERACIÓN (EPL) en el que anuncia que pondrá en práctica la tal “limpieza social” matando bazuqueros, traficantes, ladrones, en todo el país. Es decir, a un reducto que actúa principalmente en El Catatumbo, la Provincia de Ocaña y el Sur del Cesar, le dan a gratuito una cobertura nacional. Por el solo análisis de prensa de la región, inducen a que están siendo duramente golpeados y de buenas a primeras aparecen actuando con presencia en todo el país. De otro lado, la mediática falsaria difundió, de buenas a primeras, que los autores de los asesinatos del niño y el joven venezolanos, son las Nuevas Farc, que operan en Tibú, todo el Departamento de Norte de Santander y se a extienden al Magdalena Medio, bajo el mismo nombre de Frente 33 de las antiguas farc, como resultados de los incumplimientos oligárquicos a los Acuerdos de La Habana. De por sí, las guerrillas colombianas son anticapitalistas y no van a maquillar a una sociedad corrupta y en decadencia. Eso explica la no sintonía de la lucha armada con la solución inmediata a los graves problemas sociales y políticos, que genera el dominio de la corrupción y el destrozo de la cosa pública en Colombia. Ellos esperan que el Estado se auto destruya y en modo alguno contribuirán a que en forma alterna y sabia aplicación política, se pueda remediar el ejercicio del poder político en Colombia.
Que la opinión internacional y la comunidad mundial sepan de la grave situación y carencia de intervención estatal en Colombia, para recuperar el respeto a los Derechos Humanos en todos sus grados y generaciones. No se puede continuar con el solo registro de cifras.
Ahora aparece foto del joven asesinado en Tibú
Los nombres completos y verificación de nacionalidad y datos personales de los dos asesinados, pareciere un misterio. Esta clara la identidad del niño de 11 años, de origen indígena wayuu, y la penosa espera de su madre por recuperar su cadáver; pero del segundo, de cerca de 17 años- conforme a la denominada edad corporal, diferente a la edad real- no se sabe. Surgen especulaciones para deslustrar su minoría de edad. Entonces opera la mediática falsaria: difunden, según medios venezolanos de oposición, que la familia de Jackson Enrique-de quien informan es un desaparecido-vive en el sector Las Virtudes del municipio Tulio Febres Cordero, del Estado Mérida, en Venezuela; pero que no contarían con dinero para trasladarse a Cúcuta a identificarlo plenamente y solicitar la entrega del cuerpo para llevarlo y sepultarlo al otro lado de la frontera. Anuncian que Jackson Enrique Arriaga Parra, en medio del atroz hecho que se dio la mañana del viernes 08 de octubre y que ha causado rechazo, conmoción y la motivación del presente artículo, es un hombre, de 23 años, que al parecer es padre de una niña… Las fotografías lo muestran saliendo del vestidor con camisas que se estaba midiendo… No indica esto hasta ese momento acción delictiva. Así fueron apresados con las ropas puestas… Las mismas con las que fueron encontrados sus cuerpos acribillados… Un medio como el diario La Opinión, se presta al montaje. Da por cierta la identificación del “otro” asesinado, cuando corresponde es al forense venezolano identificarlo y que la inexistencia de unas relaciones exteriores, impiden que se aclare la identidad del occiso y por ende la carga de esa identidad la asuma el Estado colombiano.
Un análisis de las dos fotografías que aparecen en ese diario, en la edición del 14 de octubre, de la faz izquierda del occiso, atinente a la morfología de la oreja derecha, tanto la del joven encontrado asesinado como el del “desaparecido” Jackson Enrrique, permiten destacar y determinar: 1. El tuberciulo de hélice- elix- conocido como Pabellón de la oreja- no coinciden en absoluto, en las dos fotografías. La del asesinado es más protuberante y en modo alguno el pabellón de la oreja de Jakson esta aprisionado por la orilla de la gorra, conque aparece en la fotografía. La raíz de hélice que penetra al oído interno no logra preciarse en las dos tomas fotográficas; pero si por el trago (no trazo), que da al orificio auditivo, se puede apuntar una coincidencia; impera la guía de los expertos: “la naturaleza nunca se repite así misma” y es diferente hacia la concha, o parte interna del pabellón la figura, forma, hechura o configuración de esa dos orejas. Y en cuanto a la zona de la oreja llamado antitrago, que está al frente del trago, denota forma diferente, en ambas fotografías. Qué no resaltar del lóbulo de la oreja que son totalmente diferentes y que significan el elemento de mayor identificación forense. De manera, que, a simple vista, se trata de dos orejas diferentes y por ende de distintas personas… A la inteligencia popular no se le mete el dedo en la boca… El militarismo de derecha narco en el poder, quiere o aspira a confundir en la minoría de edad de los dos asesinados, por sus aliados paramilitares.
Al momento de concluir la redacción de este artículo, el diario La Opinión de Cúcuta en edición de domingo 17 de octubre de 2021, anuncia que la Familia del joven asesinado en Tibú llegó a Cúcuta. En tanto, la fallida política e inexistente diplomacia del gobierno títere colombiano, para con la soberana República Bolivariana de Venezuela, le da plena jurisdicción a la Justicia Internacional, en este aberrante caso.
Con otros ropajes
Escrito en . Publicado en Análisis, Derechos.
Montes verdes rodean mi casa.
No distingo, desde las ventanas,
si el sonido es un disparo,
un ruido de pirotecnia,
o un carro que no esquivó el hueco de la carretera.
En mi tierra no hay ejército.
Ciertamente, lo celebro y aplaudo.
El cielo de fiesta tricolor se me oscurece.
La nación desarmada deviene en mito.
Se desmiente en la esquizofrenia
de una formación militar, intensificada.
El delegado policial, que otrora me cuidaba,
hoy represivo, en la manifestación callejera
me persigue y me calla,
apalea a las personas transgénero
y desatiende la demanda de la población originaria.
Así, la enmascarada militarización,
criminaliza la protesta ciudadana.
Sí, yo me enorgullezco
de que en mi país no circulen tanques.
Pero en tela de juicio se mece mi alarde.
Viví muchos años con ideas románticas.
Por no tener ejército, florecían las escuelas.
Nuestra fuerza era un gran número de docentes,
sus cuarteles, las aulas.
Yo lo creía.
¡Vaya que se ha hecho bien el trabajo!
El despertar me enoja:
Costa Rica, país centroamericano sin ejército,
es de los que más gastan en seguridad.
Se recortan presupuestos a programas sociales.
La cultura y la educación se ponen a mendigar.
¿Quedó en el limbo nuestra tradición pacífica?
¿Qué fue de nuestro espíritu civilista?
La mampara de la violencia institucional se rompe.
Se desnuda un circo, sale a la luz un ejército escondido.
La vieja institución castrense persiste, con otros ropajes.
Yo, posiblemente ilusa,
apelo
a una policía formada en escuelas policiacas
que no contradigan su función civilista y antimilitar.
A una policía que, nutrida por los derechos humanos,
evite la violencia, las malas praxis y el abuso de autoridad.
Llamo, desde esta tierra gentil.
Urgida, convoco, desde el límpido azul de mi cielo,
a una policía, inscrita, en un proyecto de justicia y paz.
Marta Rojas, a propósito del mito de un país sin ejército…
Denuncian que policía se lleva cinco personas de Longo Mai
Escrito en . Publicado en Comunidad, Derechos.
SURCOS recibió una denuncia que indica que la policía se llevó cinco personas de la comunidad Longo Mai a pesar de que no había bloqueo. Compartimos el audio, la imagen con los nombres recibida en SURCOS y una canción testimonial de Guadalupe Urbina.
