Actividades se realizarán durante el mes de marzo sobre el Río Térraba.
Si nunca has vivido la experiencia que conlleva un tour de pesca utilizando las técnicas tradicionales, ¡ésta es tu oportunidad!
Durante el mes de marzo, expertos guías locales te llevarán a vivir la inolvidable experiencia que significa un verdadero tour de pesca tradicional.
Este recorrido sobre las aguas del río Térraba incluye entre otras cosas: un kayak, carnada local para una buena pesca, guías que conocen los puntos estratégicos de pesca, equipo de seguridad y un almuerzo tradicional.
Este tour es una iniciativa del emprendimiento indígena Eco Aventuras Di Crí, situado en Rey Curré de Buenos Aires, Puntarenas.
Para más información, queda a sus órdenes el 8722 9043.
El presidente de la República visitó este jueves 22 de febrero a la comunidad indígena de Rey Curré, en el cantón de Buenos Aires, donde le recibió un ambiente muy colorido y lleno de elementos culturales.
El entorno estuvo decorado con hermosas máscaras que lucían diseños con figuras propias de la fauna regional, así como la flora y se complementaba con preciosos trajes hechos en algodón, vegetación natural y construcciones hechos según la costumbre ancestral de la comunidad, que impresionó a los más de 300 asistentes que colmaron este salón comunal.
La actividad inició con la entrada del mandatario al salón acompañado por la banda del Colegio Indígena local (Yímba Cájc) quienes se lucieron con un derroche de alegría y energía cargados de armoniosos sonidos de tambores, liras y un vistoso vestuario que les identifica con la cultura indígena local.
Posteriormente se dieron los discursos de parte del presidente de la Asociación de Desarrollo Indígena Curré, presidente ejecutivo del ICE y la Comisión Nacional de Emergencias.
En el intermedio se dio la presentación cultural por parte de los diablitos de la Escuela Indígena Curré y posteriormente el discurso por parte de la ministra de Vivienda.
El cierre del evento lo dio el discurso del señor presidente Rodrigo Chaves que en su lectura agradeció el esfuerzo interinstitucional que hicieron posible concretar algunos proyectos en la zona de reubicación tales como mejoras en caminos, electrificación, agua potable y por supuesto, la construcción del nuevo Colegio Indígena Yímba Cájc en las tierras recuperadas de Du Túj.
«Les agradezco, porque los logros de hoy han sido logros conjuntos: la comunidad y las instituciones, nos pusimos a trabajar juntos, unidos, para sacar la tarea adelante, y comenzar a ordenar, saldar deudas históricas de años de olvido, de promesas incumplidas, de estafas de pseudo líderes representantes”, replicó el mandatario.
Chaves resaltó el esfuerzo los avances en los proyectos de vivienda en las tierras reubicadas de Du Túj y Pantera, así como en la construcción de acueducto, electrificación y mejoras de caminos, a todas las familias que están necesitando de estos servicios tan fundamentales.
Posteriormente Chaves procedió a visitar el lugar donde se construirá en nuevo Colegio Indígena y en este lugar colocó la primera piedra, que simboliza el inicio de la construcción de estas nuevas instalaciones educativas.
Este proyecto de reubicación del Colegio Indígena significa un enlace de esfuerzos entre la CNE y el Ministerio de Educación Pública (MEP), el mismo, tiene un costo superior a los ₡2.250 millones, provenientes del Fondo Nacional de Emergencias (FNE), administrado por la CNE.
Anuncios de inversión en Rey Curré
Nuevo Colegio Indígena Yimba Cajc será una realidad – comunicado del MEP:
La Comisión Cagrú^ Rójc Yímba, el CLEI y la comunidad en general de Rey Curré extiende su agradecimiento a todas las personas que les visitaron para compartir su tradición ancestral de los Diablitos 20-24.
Los organizadores reconocen que el éxito alcanzado es un logro gracias a todos, quienes de una u otra forma disfrutaron de sus actividades.
☑Ceremonia ancestral se realizará del 25 al 28 de enero.
La comunidad indígena de Rey Curré ultima detalles para celebrar su festividad cultural más importante del año llamado “El Juego de los Diablitos”, una tradición ancestral que rememora las luchas que tuvieron sus antepasados ante los procesos de conquista, hace más de medio milenio.
Esta práctica ancestral es una de las ceremonias indígenas más antiguas de Costa Rica, decretado Patrimonio Cultural Inmaterial del país desde el 2017.
La manifestación involucra una serie de actores que participan de manera secuencial, iniciando, en esta oportunidad, el jueves 25 de enero, a la medianoche, con la llamada “nacencia de los diablitos”; finaliza el domingo 28 de enero, en horas de la tarde-noche.
Para iniciar esta tradición, los diablitos suben en silencio a una loma cercana al pueblo, se visten con sus atuendos y esperan con respeto a que sea exactamente la medianoche.
El estallido de múltiples bombetas anuncia que la lucha ha iniciado. Los diablos mayores suenan caracoles y el ritual es acompañado por sonidos de tambores, flautas y acordeón.
De inmediato, los diablitos gritan, se abrazan, bailan, saloman y empiezan a descender de la loma, dirigidos por los diablos mayores, quienes son los encargados de dirigir la comitiva.
El pueblo entero se une a esta tradición acompañando a los diablitos y juntos recorrerán, hasta el amanecer, todas las casas de la comunidad en donde son recibidos por sus anfitriones, con mucho entusiasmo, mientras comparten chicha de maíz y tamales de arroz.
Nacencia de diablitos coincide con la luna llena
La nacencia de los Diablitos en Curré/Yímba 2024 coincidirá de manera natural con la luna llena, algo que suma expectativas y genera una gran emoción entre los pobladores indígenas de la comunidad, ya que desde tiempos antiguos la energía de los astros ha desempeñado un papel fundamental en la realización de ceremonias, rituales y eventos de gratitud a las deidades.
Esta coincidencia es una forma de amalgamar tributos a una antigua relación entre indígenas y la energía de los astros.
Actividad cultural es gratuita y abierto a todo público
Esta tradición es abierta al público y de manera gratuita.
La comunidad no posee servicios de hospedaje.
Se recomienda a los visitantes tomar en cuenta este detalle reservar hoteles y cabinas cercanos, los cuales se ubican a 25 minutos de Rey Curré en carro.
Sin embargo, la comunidad sí cuenta con espacios abiertos para acampar.
Se recomienda vestir ropa ligera, zapatos cómodos, utilizar bloqueador solar, repelente, agua embotellada, y comunicarse con los organizadores para obtener facilidades.
¿Cómo llegar a Curré?
La comunidad indígena de Curré/Yímba se ubica en la Zona Sur de Costa Rica, en el cantón de Buenos Aires, provincia de Puntarenas, a 220 km al sur de San José.
Su acceso es muy sencillo, ya que se ubica a orillas de la carretera Interamericana Sur, entre Palmar Norte y Buenos Aires.
Se cuenta con servicio de buses, que salen desde el GAM y pasan por Curré cada dos horas.
Se viajas desde la capital o el GAM, puedes llegar por la carretera que pasa por el Cerro de la Muerte, Pérez Zeledón, Buenos Aires, Curré/Yímba, o también por la Costanera, llegando hasta Palmar Norte y seguir hacia Curré.
Puedes usar las aplicaciones waze o Google maps digitando: Salón Comunal Rey Curré de Buenos Aires, Costa Rica.
Para más detalles, puede comunicarse vía WhatsApp al 8709-3735 o al correo electrónico: urieldecurre@gmail.com
Labrar un jícaro o calabazo (Crescentia cujete), es parte de las artesanías que realizan algunas familias en Rey Curré.
Se usan para elaborar dibujos alusivos al contexto natural indígena.
Por muchos años en Curré se conservaron las tinajas de barro que usaban para traer el agua del río Grande de Térraba.
Con la desaparición de estos utensilios se empezaron a usar los calabazos. Eran grandes en forma ovalada que vino a sustituir a las tinajas. Lo hacían sin decorar, si acaso alcanzaban a ponerle alguna inicial para distinguir quién era su dueño.
Los calabazos antiguos eran sencillos, no se les quitada la superficie ni se les elaboraba ningún dibujo.
Las primeras artesanas solo le hacían un hueco pequeño en la parte superior del calabazo y luego le sacaba las tripas del mismo, usando piedras pequeñas que están entre la arena del río.
Ellas eran curiosas, escogían la tarde o la mañana para ir a lavar con mucha paciencia estos calabazos y cuando estaban seguras de que no tenían ningún resto de tripas en sus adentros, regresaban con sus calabazos llenos de agua a su ranchitos y lo guardaban por tres días, enjuagándolos a diario para luego ser usado como utensilio de cocina.
Los calabazos daban al agua frescura y lo mantenía en buen estado hasta por tres días. Al hueco que le hacían en la parte superior del calabazo le adaptaban un pedazo de madera en forma de tapón, en especial de balso el cual también debe cumplir un proceso de limpieza o purificación.
En la actualidad, se elabora un tipo de artesanía en jícara que asemeja a los calabazos antiguos pero ya no cumplen una función utilitaria en la cocina, se hacen para venderse en el mercado local y nacional.
Estos están decorados con figuras que están aún frescas en las memorias de estos nuevos artesanos tales como animales, plantas y figuras humanas que representan al contexto indígena de los antepasados, decorando los bordes con líneas espiraladas y grecas muy similares a las que aparecen en los petroglifos precolombinos.
Estos pequeños calabazos que hacen en la actualidad los artesanos de Curré tienen una belleza estética admirable y en la mayoría de casos le agregan una especie de canasta hecha de bejuco de capulín que extraen de la corteza de este árbol.
Esta canasta que ellos llaman “enrejado” le permite al comprador un fácil manejo del pequeño calabazo.
Para extraer esta corteza de capulín, se debe tomar en cuenta la menguante y se necesita de ciertos conocimientos adicionales para alcanzar una mejor calidad de los bejucos.
Luego de este proceso que dura hasta tres días en remojo, se debe hacer trenzas, para los cuales son las mujeres las especialistas, aunque se sabe de algunos varones que lo saben hacer muy bien.
Esta nota se elaboró con el apoyo de Alejandro Murillo V.
☑Figuras indispensables para seguir tejiendo su historia ancestral
Uriel Rojas
Rey Curré y Boruca, son los dos territorios indígenas que representan a la cultura boruca.
Ambos, han vivido momentos críticos o procesos de riesgos de desaparición de sus valores culturales, los cuales con esfuerzos han podido conservar.
En Boruca, desde tiempos inmemoriales se practica trabajos asociados al algodón, entre ellos el hilado, el cual consiste en hacer de manera manual el hilo que se tiñe y se usa en los tejidos de algodón.
La ocupación reciente de Rey Curré, cuyos orígenes se remontan a principios del siglo XX fueron familias que venían de boruca y se situaron en las orillas del río Grande de Térraba.
En este lugar, se fueron poblando más y más hasta que se hizo una comunidad independiente de Boruca.
Sin embargo, a mediados de 1980, Boruca empezó a sufrir una decadencia en la práctica del hilado del algodón. Casi no quedaban personas que supieran hilar el algodón y tejer los hilos.
Recuerdan los mayores que se tuvo que recurrir a una señora de Curré que se llamaba Adela Rojas, para que le fuera a enseñar a algunas personas en Boruca, quienes, de manera entusiasta lograron rescatar este saber y ponerlo de nuevo al servicio de la comunidad, entre ellos doña Ángela González, quien se llego a convertirse en una pionera fundamental en esta misión.
De manera que el hilado es una costumbre ancestral que data de muchísimos años.
Dicho conocimiento se sigue conservando y transmitiendo de generación en generación.
Las hilanderas tienen magia en sus manos.
Listo el algodón, las hilanderas deslizan sus dedos cuidadosamente y van sacando los hilos uniformes en sus usos bailarines que servirán para hacer luego, los tejidos de algodón.
Ellas son figuras indispensables para seguir tejiendo la historia boruca y sin hilanderas no hay tejidos.
Hay que resguardar estos saberes ancestrales y fortalecerlo cada vez más.
Varias familias que fueron reubicadas en el nuevo poblado de Du Túj, del Territorio Indígena de Rey Curré ya cuentan con electricidad.
Así lo confirmó la Asociación de Desarrollo Indígena local quienes junto al ICE unieron esfuerzos para hacer realidad este valioso servicio.
Estas familias habían sido afectadas por las crecientes del Río Grande en los últimos años y la Comisión Nacional de Emergencias había recomendado reubicarlas a un lugar más seguro, al igual que el Colegio Indígena que ya ha sido inundado en dos ocasiones.
Llevar la electricidad a estas familias es un esfuerzo que se empezó a gestar desde el 2021 y tras superar varios estudios técnicos y requisitos de viabilidad ya es una realidad.
De acuerdo con Laura Borbón, representante actual de la ADI Curré, “este proyecto significa muchos millones, que requería aparte de los estudios previos, hacer caminos transitables y públicos, construir las viviendas, brindar el servicio de agua, etc.
Gracias al ICE y a todas las instituciones del estado que se han puesto a trabajar juntos para dotar de estos servicios en un tiempo casi récord, considerando lo que eso implica”, subrayó la dirigente.
Du Túj es un nombre en idioma boruca y significa el Alto del Ñame, por las producciones que se daba de este tubérculo en la zona.
Además de la iluminación colocaron medidores, transformadores y nueva instalación eléctrica en el Salón Comunal.
Lámparas ya empezaron a funcionar este miércoles.
El Instituto Costarricense de Electricidad (sede Buenos Aires) y la Asociación de Desarrollo Indígena Curré, juntaron esfuerzos e iluminaron el centro de la comunidad utilizando recursos eléctricos de altos voltajes y Tecnologías LEDS.
Este valioso servicio se inauguró este miércoles13 de diciembre y llenó de iluminación todo el centro de esta comunidad.
De acuerdo a Laura Borbón, representante de la ADI Curré, solamente en los cambios de medidores, accesorios e instalación eléctrica del Salón Comunal se invirtió más de seis millones de colones, lo que viene a garantizar la seguridad y potencia en esta sede comunitaria.
Por su parte el ICE colocó tres postes con 8 lámparas frente al Salón Comunal, un nuevo transformador de 50 KVA, más 7 lámparas nuevas en Tecnología LEDS, una red principal que va desde la parada de bus hasta la escuela de Rey Curré.
Con este esta iniciativa, el ICE y la ADI local iluminan todo este sector de la Carretera Interamericana en el centro de Curré, de gran importancia para las fiestas tradicionales y eventos masivos que se puedan realizar.
Ademas, se instalaron medidores industriales en el Salón Comunal, garantizando un servicio eléctrico de alto rendimiento y seguridad para todos los vecinos de esta comunidad.
De acuerdo con la representante de la ADI Curré, se han instalado tres puntos 20 dentro del salón, 4 tomacorrientes nuevos en el sector norte a lo interno del salón.
Se ha reemplazado los anteriores tomacorrientes y también se hicieron mejoras eléctricas en la oficina ADI y en la Supervisión del MEP.
Ambos medidores o acometidas eléctricas fueron completamente sustituidas por nuevas y de alta tecnología.
La cultura indígena Boruca de Costa Rica, está actualmente representada por dos territorios denominados Rey Curré y Boruca, ambos situados en la Zona Sur de nuestro país.
Una de las tradiciones más arraigadas en esta cultura es el Juego de los Diablitos, o la Lucha de los Guerreros borucas, que se realiza a finales de año en Boruca y a finales de enero en la comunidad de Rey Curré.
Es una de las festividades culturales más antiguas del país y rememora la lucha que tuvieron sus antepasados durante la época de Conquista.
Recuerdan los mayores, que antiguamente los vestuarios que utilizaban eran muy sencillos.
La máscara, por ejemplo, lo usaban sin pintura y solamente representaban un rostro humano valiente, bravo de combate, para proteger sus rostros y asustar al enemigo.
Algunas máscaras la decoraban con plumas de aves que abundaban en el contexto comunitario y otras se diseñaban en representación con figuras zoomorfas tales como jaguares, águilas, chanchos, murciélagos, en fin, diablos, casi siempre con el acento en los cachos, los dientes, en los ojos y pómulos saltados.
Complementaba su vestimenta hojas de árboles que adherían a sus cuerpos, y posteriormente sacos que conseguían en lugares aledaños.
Esta tradición tiene un reglamento y antes era muy riguroso, pues castigaban drásticamente a quienes infringían dicha normativa.
Se respeta al diablo mayor y a sus asistentes, pues representan sus guías y los autorizados para dirigir la contienda.
Todos los diablos sabían salomar, lo que es, un grito de tonos bajos que poco a poco se van elevando alcanzando ritmos fuertes que desafían al enemigo y van marcando las etapas del juego.
El diablo mayor es la figura principal de los diablitos y es quien dirige el desarrollo de esta tradición por los cuatro días de lucha.
En Rey Curré, el primer diablo mayor fue don Lucas Rojas Céspedes (q.e.p.d.).
Esta nota se elaboró con el apoyo del prof. José Lázaro Ortiz.
La Junta Directiva de la Asociación de Desarrollo Integral Indígena de Rey Curré, en atención a lo dispuesto en el reglamento de DINADECO convoca a la Asamblea General ordinaria de afiliadas y afiliados que se celebrará el día 09 de diciembre de 2023 a las nueve de la mañana en el salón comunal de Rey Curré y que se regirá por la siguiente agenda:
De 8 a 9am. Refrigerio
De 9 am. en adelante
Registro y comprobación del quórum
Apertura
Discusión y aprobación de la agenda
Informe de la presidencia
Informe de la tesorería
Informe de fiscalía
Elección de miembros de la junta directiva y de la fiscalía 2024-2026
Discusión y aprobación del plan de trabajo y presupuesto para el periodo 2024-2026