Ir al contenido principal

Etiqueta: ROP

Costa Rica no está en venta

Álvaro Vega Sánchez, sociólogo

En 1972 el financista Robert Vesco, perseguido por la justicia de Estados Unidos y de Cuba por negocios financieros ilícitos, encontró acogida temporal como turista en Costa Rica. Se dice que sus pretensiones eran apropiarse de una isla caribeña para instalar su negocio, algo así como un “paraíso fiscal” de hoy. Pero, en el mientras tanto inscribió muchas de sus empresas en el país.

El periodista Julio Suñol, en ese contexto, escribió un libro que tituló “Vesco compra una república”. Por esos años, también se candidateaba el excéntrico G. W. Villalobos, quien haciendo alarde de su populismo barato, al estilo de algunos políticos de hoy, se fue hasta la casa del señor Vesco a lanzar disparos al aire retándolo a salir del país.

Del gesto de Villalobos, aunque políticamente poco ingenioso y más bien torpe, puede rescatarse el espíritu de protesta e indignación al que apelaba. Asimismo, el título del libro del periodista Suñol, que hace mención a la venta de la república a un financista fugitivo, título que en la realidad correspondía más bien a una metáfora de una “novela” que buscaba retratar el favoritismo y complicidad del gobierno con los intereses privados extranjeros. En este sentido, cabe llamar la atención en dos direcciones.

Por una parte, los “Vescos” de hoy no necesitan refugio en ninguna isla; se mueven de manera fluida –lo propio de las élites transfronterizas en la “sociedad líquida” globalizada (Bauman)–. Algunos, vestidos con el traje de marca internacional “FMI”, “BID”, “BM”, entre otras, viajan con sus valijas llenas comprando países con el pretexto de sacarlos del estado de quiebra; ahora, también se presentan como mercachifles de “pomada canaria” –“vendedores de veneno de serpiente económica” (Krugman)– para aplacar las consecuencias económicas y sociales de la pandemia producida por el Covid19.

Esta institucionalidad financiera internacional, que supuestamente está al servicio del desarrollo de los países empobrecidos del mundo, ha sabido vender este cuento de protectores y salvadores de estas naciones. En la realidad, lo que andan haciendo son buenos negocios para favorecer a sus pares en el sector privado, incluidas las grandes empresas evasoras que se ven favorecidas por las condiciones bajo las cuales negocian sus préstamos.

Efectivamente, favorecidas por partida doble: al contar con el “salvamento” de los préstamos, evitan la presión del Estado para que paguen los impuestos sobre sus ganancias reales –mientras ellas los evaden, los mismos de siempre seguirán pagándolos por los siglos…– y al privatizarse los activos más rentables del Estado se les facilita invertir en –o apropiarse de– esos jugosos negocios.

Valga un paréntesis, para destacar el descarado cinismo de algunas grandes empresas privadas, que siendo parasitarias de los recursos públicos, como La Nación S.A., usufructuando de los fondos de pensiones y recursos del sistema bancario nacional, lanza una campaña “guerrerista” contra la institucionalidad pública. Incluso, se atreve a ofrecer consejos para reformar los regímenes de pensiones, debilitando el sistema público del que recibe beneficios y favoreciendo los de perfil privado, como las pensiones complementarias y el ROP. No buscan otra cosa que la privatización, para acomodarse en nuevos nichos de negocios.

Por otra parte, el gobierno actúa al viejo estilo de las “repúblicas bananeras”, dejándose llevar dócilmente por los grandes intereses del capital financiero extranjero y nacional, cediendo en soberanía y dignidad. No atiende a las ´propuestas alternativas para no postrase ante esos intereses, que una vez más buscan socavar las bases de nuestro Estado Social de Derecho ¿Acaso queremos otra generación pérdida como la de la década de 1980, que hoy nos tiene recogiendo pobreza y desigualdad estructurales?

Pues bien, tenemos que decirles a los “Vescos” contemporáneos que Costa Rica no está en venta. Recordarle al gobierno que no es dueño de la patria, para servirla de festín en la mesa de los poderosos. Y también a los políticos y empresarios oportunistas, que esta vez “en río revuelto ganarán los peces”.

No hay que mendigar el abrazo cuando llega la noche de la soledad. La dignidad es la más sublime y excelsa de las virtudes que anida en el alma de cada ser humano, de los pueblos y de la naturaleza. No hay que permitir que sea mancillada por ningún mortal y frágil embustero, que pretenda adueñarse de nuestra voluntad y libertad a cambio de un “plato de lentejas”.

La ignorancia, la educación y el poder en la pandemia

Juan Huaylupo Alcázar[1]

La ignorancia ha sido usada como epíteto contra adversarios, sin embargo, no existe nadie que carezca de conocimiento, todos poseemos conocimientos, pero nadie tiene los mismos conocimientos ni posee todos los conocimientos existentes. Así, todos somos ignorantes y sabedores de muchos conocimientos. No es un atentado contra la autoestima reconocerse ignorante, sin embargo, es vergonzoso no reconocerlo, porque la autosuficiencia omnisapiente del ignorante, es una posición atrevida, absurda y contradictoria.

Tampoco la ignorancia puede ser interpretada como contraria a la ciencia, pues la ciencia admite su ignorancia para superar sus propios conocimientos, descubrir nuevas realidades y crear nuevas explicaciones de realidades desconocidas. T.S. Eliot, en 1928, lo sintetiza en un ensayo: “No debemos dejar de explorar. Y al final de nuestras exploraciones llegaremos al lugar del que partimos, y lo conoceremos por primera vez” y lo reiteraba en un poema en 1934: “Todo nuestro conocimiento nos acerca a nuestra ignorancia”. La ciencia omnicomprensiva no existe, imaginarla absoluta, dogmática o estática, contradice lo que pretende comprender y explicar.

El sabernos ignorantes tampoco es motivo de satisfacción en las relaciones con las personas, organizaciones, la sociedad y el mundo, pues al desconocer el medio donde vivimos y trabajamos y nos relacionamos, perdemos libertad y somos víctimas de quienes pretenden modelar y dominar el devenir de los otros. Las nuevas interpretaciones son exigencias cognoscitivas, ante un mundo que se modifica radicalmente. Creer que todo puede seguir igual en medios convulsos, inciertos e imprevisibles, es sin duda, un conservadurismo regresivo, que impulsa prácticas caducas y fallidas. El nuevo conocimiento crea dudas, interrogantes y cuestiona lo que creíamos saber y dominar, luego aferrarse al pasado, sin reconocer el dinamismo del presente, satisface nuestras creencias y reafirma ideologías, pero alejadas y separadas de los acontecimientos y realidades que se reconstruyen permanente. Somos ignorantes de nuestra propia ignorancia, imposibilitados de reconocer y descifrar las inconsistencias de las creencias, ideologías, prejuicios y contradicciones del devenir cotidiano.

En el presente costarricense donde prevalece la autocracia sobre la democracia, la certidumbre sobre la relatividad de un mundo incierto y dinámico, es un absurdo sustentarse en falsos e inexistentes universos absolutos, aunque no pocos graduados universitarios pregonan y aplican repetitivas y estandarizadas certezas, a pesar que las realidades requieren interpretaciones particulares, complejas y holísticas. Aspectos sobre los que no se habla, analiza ni discute, por el contrario, se difunde mediáticamente e incluso se difunden en las aulas de algunas universidades, donde no importan las inconsistencias ni las contradicciones, pues se repite lo que muchos creen y hacen, sea por tradición, creencias, ideologías, prejuicios, estereotipos o por prácticas impuestas desde poderes ignorantes. El desarrollo del quehacer científico e investigativo convierte en conocimiento vulgar el pensamiento predominante, así como revela totalitarismo en algunas de las autodenominadas democracias.

La ignorancia sobre la falsedad de las certezas o verdades disciplinarias, no solo afecta el conocimiento sobre la situación y condición de la realidad, sea esta individual, social u organizacional, también puede tener efectos perniciosos en los negocios, la salud, el bienestar o el desarrollo, cuando se toman decisiones sobre realidades que se desconocen o que se pretenden modelar al antojo e interés.

Así, cuando los actuarios estiman que el régimen de pensión es insostenible, proponen aritméticamente, el aumento de las cotizaciones y cuotas, encubriendo ineficiencias administrativas y transgresiones políticas a los ciudadanos y justifican que sean los trabajadores quienes resuelvan la crisis fiscal del gobierno. De modo similar, las operadoras del Régimen Obligatorio de Pensiones Complementarias (ROP) se apropian y deciden sobre los dineros que no les pertenecen y en casos excepcionales, -como posiblemente se aprobará a partir del 28 de julio en la Asamblea Legislativa-, se devolverán parcial y en eternos tractos a sus dueños, que deberán demostrar a la burocracia estar sin trabajo remunerado, a pesar que la crisis muchos trabajadores están impedidos de satisfacer sus necesidades e inclusive afecta su alimentación y salud familiar, lo cual es evidente y no requiere demostración ni certificación patronal alguna.

Las necesidades básicas insatisfechas de los asalariados inciden en sus demandas por reanudar sus labores para la obtención del salario de subsistencia, esa es su verdad, la cual coincide con las exigencias empresariales por la apertura de sus negocios para seguir obteniendo ganancias, -en muchas pequeñas y microempresas las ganancias son una transfiguración del salario-, pero para los dueños del capital, su verdad es incrementar sus riquezas con el trabajo de los asalariados. Son verdades polarizadas socialmente distintas y contradictorias, aunque son mutuamente dependientes, pero los dueños del capital cuentan con el servicio de una estructura social, política y económica que los beneficia, mientras que la institucionalidad pública, que debe auxiliar, amparar y proteger a los excluidos del poder, es débil, precaria, burocrática y caótica.

Las autoridades sanitarias, intelectuales y entidades internacionales de la salud, coinciden en que la reanudación de los negocios, sin vacuna ni tratamientos eficaces para contrarrestar la pandemia, incrementará el número de infectados que colapsará nuestro sistema hospitalario, con las fatales consecuencias, así como alterará dramáticamente la vida de sus familias y compañeros. Esta consideración no es una especulación, ya ocurre en otros espacios y también se inicia en Costa Rica. No obstante, los empresarios, el gobierno, los legisladores y magistrados no les interesa esa realidad y prefieren ignorar las previsiones y advertencias, así como eluden las contradicciones con las autoridades sanitarias para continuar la flexibilización y la eliminación de las restricciones sanitarias. ¿Podrá ser desconocimiento de los efectos de la eliminación de las medidas de las sanitarias, o es más bien una intención premeditada deshumanizada y totalitaria?

Las personas que están obligadas a trabajar se exponen a enfermarse, ante la fragilidad de la asistencia y ayuda estatal, como aquellas que son engañadas con la publicidad gubernamental y empresarial de supuestas y absolutas garantías sanitarias, son personas obedientes y disciplinadas al poder, y su confianza se trastoca en ignorancia, que les limita evitar el contagio y difusión del Covid-19 del cual además aún se ignoran todas las características de sus diversos modos de diseminación.

La transparente subordinación del poder político a los imperios de los dueños y administradores de negocios, que no les importa la salud pública ni la vida de trabajadores ni clientes, al fin y al cabo y otra vez más responsabilizarán a la población por irrespetar los cuidados sanitarios, dejando inmunes e impunes al gobierno y a los mercaderes causantes de la propagación de la enfermedad pandémica, como un medio para las determinaciones políticas contra las libertades, la democracia y la liquidación de la institucionalidad y el Estado Social de Derecho.

A través de los tiempos, la ignorancia y la obediencia ciega han sido los medios usados para el dominio y la explotación, así como, lo es para eliminar todo tipo de resistencia al poder y su perpetuación. En algunos contextos y en diversos periodos, la educación fue un contendiente radical contra la ignorancia y el poder tiránico, pero hoy la educación está debilitada, controlada, descontextualizada y es indiferente ante la problemática pública y nacional, así como pasiva en su función cognoscitiva transformadora de la sociedad. Al parecer, la educación sufre también el impacto conservador del presente, al reeditar su significación etimológica, relacionada con los actos de “reducir, seducir, inducir y conducir”, atributos propios de las prácticas políticas totalitarias.

La educación formal contemporánea al repetir caducos conocimientos, ya no reflexiona ni cuestiona interpretaciones sobre las realidades ni el poder. La supeditación política de la educación reproduce ignorancia. ¿Será la sabiduría de nuestra ignorancia la que nos de la fuerza para dudar y cuestionar el poder? En cualquier caso, la educación requiere ser pensada y revisada con una alta dosis de pensamiento crítico, pero ello no la exime de su compromiso con los procesos políticos en la pandemia.

Enseñando dogmas se impide la discusión, debate y el disenso en las aulas y en el quehacer cotidiano. En nuestro contexto, rebelarse contra la obsolescencia cognoscitiva, obtiene desaprobación y exclusión del poder prevaleciente y de los medios privados de difusión, como es de suponer, pero es lastimosa la función educativa que crea los peores analfabetos que, a decir de Ortega y Gasset, son los que sabiendo leer y escribir, no leen ni escriben, como pernicioso es el dicho acuñado, ante el temor a represalias y críticas, “calladito más bonito”. ¿Acaso en Costa Rica somos felices conservadores por temerosos e ignorantes?

La ignorancia se difunde mediáticamente y aprueba la repetición de falsedades, como la absurda negación de la existencia de la enfermedad pandémica por parte de fanáticos fundamentalistas amigos de viaje de las fuerzas políticas más conservadoras; la falaz creencia de que el cumplimiento de las restricciones sanitarias de manera individual, en un medio contaminado, es garantía para no contaminarse; o que la crisis se resuelve confiscando salarios a los trabajadores, entre otras mentiras, mientras se busca silenciar a quienes relativizan o cuestionan falsas verdades y anquilosados conocimientos.

Las falsedades son certezas para el ignorante, como la reiteración de las mentiras por parte de los medios y del poder tiránico, son parte de proyectos totalitarios. Voltaire lo escribía en 1736, como parte de las prácticas autoritarias: “Es necesario mentir como un demonio, sin timidez, no por el momento, sino intrépidamente y para siempre […] Mentid, amigos míos, mentid, que ya os lo pagaré cuando llegue la ocasión.” Al parecer, el poder totalitario, en todos los tiempos ha tenido en la mentira, en un recurso para la conservación y reproducción del poder, como también es el medio para que tiranos reclamen democracia como lo hacía Hitler, antes de alcanzar el poder estatal, o lo hacen actualmente los empresarios en la pandemia.

[1] Es catedrático en Administración Pública. Facultad de Ciencias Económicas. Universidad de Costa Rica.

Marcha regionalizada vehicular

“Por la defensa de los derechos del pueblo costarricense”

Día: 23 de julio. Hora de salida: 9:00 a.m. Salida desde diferentes puntos del país

EXIGIMOS:

  • No se cesen los contratos laborales de las personas trabajadoras del sector público y privado.
  • Cero impuestos a la canasta básica.
  • El ROP se entregue de manera completa, a las personas que se pensionen.
  • Se elimine la pretensión del Gobierno de ponerle un impuesto al Salario Escolar.
  • No se castigue al pueblo con más impuestos.
  • Se cobre un impuesto al patrimonio de los bancos y grandes empresas.
  • La defensa y no privatización de la Caja Costarricense del Seguro Social.
  • Se desista de la aprobación de la Ley de Empleo Público, que constituye una amenaza para las personas trabajadoras.
  • No se congelen las anualidades.
  • La clase trabajadora no pague los platos rotos de la crisis.
  • La defensa del Instituto Nacional de Aprendizaje (INA).
  • El retiro definitivo del Proyecto N° 21.738.

**Posteriormente se informarán los puntos de salida.

Esta caravana seguirá todos los protocolos establecidos por el Ministerio de Salud, de manera que no se exponga ninguna persona al contagio.

 

Enviado a SURCOS por distintos organismos del movimiento sindical y social.

SITRAHSAN propone salida de Rocío Aguilar de la SUPEN

En la propuesta Sindical Social, SITRAHSAN promoverá la tesis de: FUERA ROCIO AGUILAR DE LA SUPEN (ROP)

SITRAHSAN considera es una bofetada al sector laboral sea público o privado la dirección ejecutada por esta señora, con su actuar; ha demostrado que “le valen” las necesidades del Trabajador, en tiempos de pandemia y previo a tiempos de pandemia, con el impuesto a la canasta básica y a los servicios esenciales. Por eso pediremos su salida de la SUPEN

Gravar el consumo de agua, de internet en tiempos de teletrabajo, la luz, los alimentos esenciales, tiene un tinte muy fuerte de “empobrecimiento social” y hasta el transporte privado, que por cierto cada día que pasa UBER se lo puede “embuchar” a la espera del reglamento ya hoy retrasado por la administración tributaria.

Y mientras; los grandes empresarios, blindados en corporaciones, unas con grandes utilidades trasladan sus ganancias para asumir las pérdidas de su conglomerado y con ello logran declarar “CERO UTILIDADES”.

Le invitamos a ser parte de esta organización de trabajadores y con ello sumar más personas representadas; antes de que la pandemia nos deje sin un cinco y se lo justifiquen como perdidas las operadoras.

SITRAHSAN: LIBEREN EL ROP- Después no diga que no lo advertimos

El ROP debe devolverse a cada trabajador, está demostrado que estamos en Pandemia y al paso que vamos…

NO VAMOS A RETIRAR UN CINCO

No tenemos garantía alguna de que los mercados bursátiles levanten y cuando eso sucede en cualquier economía los ahorrantes retiran sus inversiones y parece que las Operadoras están dispuestas a seguir perdiendo dinero ajeno…

LIBEREN EL ROP.

Enviado a SURCOS por el Sindicato de Trabajadores del Ministerio de Hacienda y del Sistema Aduanero Nacional (SITRAHSAN).

Imagen ilustrativa.

Sea parte de SURCOS:
https://surcosdigital.com/suscribirse/

PANDEMIA DEL COVID-19 Y HECHOS FACTICOS CONCRETOS

El Covid-19 vino a dejar en evidencia una serie de enseñanzas al trabajador labriego y sencillo de este país, como las siguientes:

1- Costa Rica sostiene y mantiene una Seguridad Social envidiable en otras latitudes mundiales y la misma fue producto de un acuerdo consensuado entre diversas tendencias de pensamiento social y eso contribuyó notablemente en que su familia quizás no sea víctima de la pandemia aún.

2- Los primeros en blindarse legalmente, fueron los empresarios aglomerados en la UCCAEP y cámaras afines, no dudaron en generar las actuaciones necesarias, para crear leyes de moratoria fiscal, la flexibilización laboral y otras más que aún están por discutirse.

3- El Poder Ejecutivo como un todo pierde papel protagónico y en consecuencia surgen una serie de personajes con posibles pretensiones presidenciables y gustan del momento para hacer valer su imagen.

4- La pandémica económica persiste desde lustros atrás, y el trabajador siempre será el último eslabón para salvar. Dicho de otra manera “importa mi” el empleado, lo mando a la guerra, sin mayores defensas, sin recursos, si no levantan el “grito” los sindicatos, seguirán muriendo bajo la figura de Héroes muchos compañeros en el campo.

5- La frágil economía y la pandemia aseguran un escenario adecuado, para justificar que, con recursos financieros de préstamos, podríamos salvar la economía nacional, cuando está sobradamente demostrado, que hay recursos menos costosos, más líquidos y masivos como el ROP o el FCL.

6- Las diversas tesis parecen llevar este barco al mismo destino, es decir “a la deriva y sin rumbo”

7- Los recursos a la mano como el ROP y el FCL, serían los últimos para disponer, debido a que, en el Parlamento, la diversidad de pensamientos, criterios, prioridades y demás, dejan una serie de propuestas populistas, pero que no se concretan, unos dicen el 50%, otros los pensionados antes de…, otros que no vislumbran prioridades…. En fin, una serie de excusas, para no atender al paciente terminal, es decir al humilde trabajador y con ello proteger el no nada despreciable monto de caso 8, 5 billones que están en manos de los acaudalados acumuladores de riqueza disfrazados en Operadoras de Pensiones. Esto debe acabar.

8- Los grandes empresarios corren en busca de la vacuna estatal, para asegurarse que su capital o nuestros recursos se les quiten, al rato los tienen invertidos en otra cosa, hay “gato encerrado” en la forma como se escudan, aquí algo huele muy feo. Que no sea liberado en tiempos de pandemia, parece que nos ocultan y mucho. El millonario Banquero acaparador de riqueza, quizás se cree inmaculado o quizás le teme tanto a la muerte, pero no es morir por morir, es haber hecho tanta riqueza y que otros la disfruten, en especial a quién según él, no le costó un cinco hacerla. Ningún millonario desea morir como pobre labriego.

9- La realidad imperante de distanciamiento social, es una realidad desde hace muchos decenios, los ricos son pocos, los pobres somos más, la riqueza de los ricos es ilimitada, los ingresos de los trabajadores son sumamente limitados, escasos y además están hipotecados. “A coyol quebrado, coyol comido”

Breves reflexiones de una COVIC-19 que desmanteló el distanciamiento social entre los trabajadores, y los grandes empresarios, auxiliados, por muchos “padres de la patria” que se postraron a los intereses de los más fuertes y poderosos, pero que olvidan en mucho, su sagrado juramento “Juráis por la Patria… y si no os lo demandará”.

El ROP es un derecho legítimo que pertenece única y exclusivamente a cada trabajador y debe dársele la oportunidad en pandemia, hacer uso del mismo. No es de recibo que una “fulana protectora de los banqueros” pueda más que un millón de trabajadores. Esto debe cambiar.

Imagen ilustrativa.

Sea parte de SURCOS:
https://surcosdigital.com/suscribirse/

LIBEREN EL ROP

La seccional de ANEP y SITRAHSAN realizarán un trabajo mancomunado en defensa de la liberación total del ROP, pues «representaría un alivio para las finanzas personales del trabajador».

Un comunicado recibido en SURCOS señala: «A nivel nacional, el impacto en el bienestar de social y como paliativo en la pandemia financiera, contribuirá también a disminuir los índices de inflación, deuda y morosidad, sin olvidar los intereses de deuda, contrario a la ‘descomunal’ deuda por préstamos que nos pretenden endosar ‘los cabezas calientes’ y que en mucho son promotores de la defensa de los intereses de los poderosos financieros. También hay que tomar en cuenta, que la entrega del ROP en un sólo tracto en estos momentos tan difíciles, para los trabajadores (as) representaría una inyección muy importante de recursos, que va a ayudar mucho en la reactivación económica, además de que muchos empleados, tanto públicos como privados, podrían cancelar préstamos, tarjetas y demás deudas que los asfixian, con lo que podrían mejorar sustancialmente su estabilidad financiera, podrían además tener mayor liquidez para consumir y por lo tanto, para dinamizar el contraído mercado interno».

«No se vale que un trabajador tenga pandemia financiera, tenga ahorros, recursos frescos y no pueda hacer uso de ellos para asegurarse un mejor bienestar económico, en beneficio de su familia, de su tranquilidad emocional y sobrevivir de la pandemia en salud», concluye.

Imagen ilustrativa.

Sea parte de SURCOS:
https://surcosdigital.com/suscribirse/

SITRAHSAN defiende el reclamo social generalizado del sector laboral y pensionado

«Ya estamos bastante grandecitos, como para que algunos focos de poder pongan una Mamá postiza en la SUPEN y sean estos quienes indiquen; quién puede hacer uso del ROP o el FCL».

«¿Acaso los trabajadores no estamos en pandemia desde hace años?

El no permitir poner a disposición de los trabajadores el ROP generalizado y el FCL en tiempos de pandemia, es inaceptable, cuestionable y excesivamente reprochable, afirma un comunicado de SITRAHSAN enviado a SURCOS.

«Nuestro ministro, pensamos, quizás pretende justificar el préstamo o préstamos sin mayor análisis en la Asamblea, eso es una muestra de irespeto a la autonomía del primer poder de la República, ¿y para qué cargar de deuda al Estado?, si tiene activos líquidos, frescos y menos costosos en el mercado nacional».

No se justifica que un préstamo, por más blando que sea, y más favorable, sea la solución, aquí hay “gato encerrado”, dice la comunicación.

«No es posible que un organismo internacional, decida otorgar un crédito, si no hay garantía que lo respalde», agrega.

«Pensamos que el apalancamiento con el FMI y otros organismos internacionales promueve en poco tiempo un pago con activos, quizás en esa lista esté FANAL, el ICE, la intermediación de RECOPE, JAPDEVA, AYA, ferrocarriles y otras».

«Ya esto se está debatiendo mucho en redes sociales, y el pueblo trabajador está cansado de tanto abuso y actos que en nada contribuyen con el bienestar nacional de todos sus habitantes, porque parece ser buscan el bienestar nacional de los poderosos y mientras el pueblo a la deriva».

«Y mientras tanto, ¿que va a hacer usted?, ¿va a seguir aislado, sin organización que lo represente?, pregunta la organización sindical del Ministerio de Hacienda y el Sistema Aduanero Nacional.

«SITRAHSAN, promoverá con su aporte el diálogo de la mesa social y seremos su interlocutor. APOYENOS TRABAJO A REGLAMENTO».

«Esperamos de todos los funcionarios hacendarios, el respaldo y respuesta como un punto fundamental en la mesa del diálogo social, promovido por las Centrales Sindicales», concluye el comunicado.

Imagen ilustrativa.

Sea parte de SURCOS:
https://surcosdigital.com/suscribirse/