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UNA: Parques nacionales aportan un billón de colones a la economía del país
Escrito en . Publicado en Madre Tierra.
La implementación de políticas ambientales para la protección de parques nacionales y reservas biológicas ha sido considerada por una parte de la población como un gasto, no obstante, un estudio reciente deja al descubierto su aporte socioeconómico para el país.
El estudio “Contribuciones de los Parques Nacionales y Reservas Biológicas al desarrollo socioeconómico de Costa Rica, 2018: Línea base para el análisis de los efectos de la pandemia de COVID-19” dirigió sus esfuerzos en la actualización de la información pertinente al aporte económico de los PNRB en el año 2018, donde se evidenció la importancia no solo ecológica sino también económica, social e institucional, lo cual se refleja en actividades como el turismo, la protección del recurso hídrico para el abastecimiento de agua a comunidades y generación de energía hidroeléctrica, la investigación científica y otros servicios ambientales.
De esta manera la investigación llevada a cabo por el Centro Internacional de Política Económica para el Desarrollo Sostenible de la Universidad Nacional (CINPE-UNA) con el apoyo del Sistema Nacional de Áreas de Conservación (SINAC), estimó que el aporte a nivel nacional de los parques nacionales y reservas biológicas fue de aproximadamente ₡1.119.955.196.505 ($1.900.634.361 dólares estadounidenses) para el año 2018.
Las empresas dedicadas a actividades relacionadas con el turismo fueron las más beneficiadas con la existencia de los parques nacionales y reservas biológicas con aproximadamente ¢915.424.100.253 del total de ingresos, representando el 81.74% del aporte total generado. El servicio de mantenimiento del recurso hídrico por parte de estas áreas protegidas permitió obtener cerca de ¢153.943.524.777 en generación de electricidad.
Como se mencionó anteriormente, la actividad relacionada con los PNRB que más obtuvo beneficios (81,7%) fue el turismo, por lo anterior y teniendo en cuenta los tres posibles escenarios esbozados por la Organización Mundial de Turismo (OMT), que apuntaban a declives en las llegadas de turistas internacionales para el 2020, se efectuó un análisis de los posibles efectos en los aportes de los PNRB, calculados en el presente estudio. En el escenario 1 los aportes disminuirán un 56%, en el escenario 2 disminuirán un 66% y en el tercer escenario la disminución será de 68%. En el cuadro adjunto 2 se incluyen la variación en los aportes de los PNRB dependiendo de cada escenario.
Las actividades económicas más importantes dentro de la actividad turística que se desarrolla alrededor de PNRB son el alojamiento, la venta de alimentos, el transporte y el entretenimiento, que se verán afectadas por esta disminución en los aportes.
***Para mayor información con: Mary Luz Moreno, investigadora Cinpe-UNA (8355-8425) o con la Oficina de Comunicación de la Universidad Nacional, (8674-8535).
Enviado por Oficina de Comunicación, UNA.
Mujeres por Costa Rica hace propuesta para eje reactivación económica
Escrito en . Publicado en Derechos.
SURCOS recibió el siguiente documento del Colectivo Mujeres por Costa Rica:
Como parte del proceso Costa Ria Escucha, Propone y Dialoga el Colectivo Mujeres por Costa Rica propone:
I. INTRODUCCIÓN
La pandemia ha expuesto con magnitud microscópica los límites de un estilo de desarrollo que favoreció por más de tres décadas la producción articulada al mercado externo sin que lograra encadenar otros sectores de la economía orientados al mercado nacional. Un estilo de desarrollo que acentuó desigualdades estructurales que ante la actual crisis sanitaria, económica y política requiere de transformaciones profundas.
La protección y creación de nuevos empleos demanda acoplar ambos motores de la economía desde el paradigma del desarrollo humano sostenible para eliminar las condiciones estructurales que generan desigualdad, exclusión y pobreza. Ello exige transformaciones importantes en la estructura tributaria, la inversión pública, en el modelo educativo, en el sistema financiero y en la participación del Estado para garantizar más emprendimientos innovadores y empleos dignos. De particular importancia es la incorporación de las mujeres y la perspectiva de la igualdad de género en la elaboración y en la gestión de las propuestas, pues es sobre nosotras las mujeres –y muy particularmente las más pobres- sobre quienes recae el mayor peso de las desigualdades estructurales del estilo de desarrollo impulsado en las últimas décadas.
La reactivación deberá tomar en cuenta tanto las desigualdades estructurales internas, como las capacidades generadas por nuestro país para enfrentar los desafíos que nos impone la recuperación global. Esto demanda participación y sincronía de muchos actores e instituciones públicas y privadas para afrontar en el corto, medio y largo plazo cambios globales en los patrones de inversión, financiamiento, producción y consumo de bienes y servicios. Sin duda Costa Rica acumula gran experiencia en el sector turismo, en la agricultura para la exportación, comercio, servicios profesionales y tecnológicos, lo que nos permitirá ser una nación líder en desarrollo humano sostenible.
Nuestro país debe poner sus esfuerzos en actividades económicas que garanticen responsabilidad laboral y ambiental y para ello deberá hacer un esfuerzo importante en innovar procesos de producción, comercialización y consumo.
II. PRINCIPIOS Y PRIORIDADES
El conjunto de políticas, estrategias y medidas concretas que se asuman para impulsar la reactivación económica en materia de inversión, financiamiento, recomposición del diverso tejido empresarial y del empleo, deberán estar diseñadas a partir de las siguientes prioridades:
- Alimentación suficiente y de calidad para toda la población.
- Infraestructura y programas para garantizar la salud integral y la atención universal.
- Educación innovadora acorde a las necesidades del desarrollo inclusivo y ambientalmente sostenible.
- Instituciones de cuido para que las mujeres puedan integrarse al mercado laboral.
- Investigación y apoyo para la creación de nuevos emprendimientos orientados al desarrollo tecnológico.
- Infraestructura que permita la movilidad, producción y comercialización de los bienes y servicios de la nueva era del consumo global en el marco del desarrollo sostenible.
- Recreación y producción cultural.
- Desarrollo de diversos segmentos de turismo acordes con el desarrollo humano sostenible.
- Uso de energías alternativas favorables a la descarbonización.
III. PROPUESTAS
- Reactivación de las actividades agrícolas, pecuarias y pesqueras para garantizar la soberanía agroalimentaria y nutricional. Para esto se deben impulsar las técnicas de producción en armonía con el ambiente con menor dependencia de las semillas genéticamente modificadas y menor uso de agroquímicos; así como el impulso de los mercados justos, generación de cadenas de valor y creación de empleo rural de calidad, especialmente para las mujeres, cuyos empleos suelen ser ocasionales, informales y mal remunerados.
- Ampliación de las posibilidades de financiamiento para las diversas actividades productivas, a tasas preferenciales, períodos de gracia y plazos más amplios para los nuevos emprendimientos. La Banca para el Desarrollo debe dar el acompañamiento técnico necesario para que los proyectos resulten exitosos. En general, todo el sistema bancario nacional debe recuperar su papel de impulsor del desarrollo nacional.
- Estímulo a la demanda interna de bienes y servicios producidos en el país, impulsando la capacitación para el comercio de estos en plataformas digitales.
- Construcción de toda la obra pública que los recursos estatales o bien las alianzas público-privadas permitan para generar empleo, dinamizar la economía, y al mismo tiempo reducir el rezago de años que tiene el país en este campo. El tren eléctrico metropolitano debería construirse para mejorar la movilidad urbana en la GAM. Si se decide hacerlo mediante una alianza público-privada se debe contemplar el riesgo que toda inversión implica, de manera que no sea asumido solamente por el Estado.
- Fomento de alternativas limpias de uso energético, producción y consumo, así como formalización de pequeñas empresas dedicadas al reciclaje y la reutilización de materiales.
- Impulso a la economía del cuido poniendo al servicio de las personas que se dedican a esta actividad, casi siempre mujeres, una remuneración justa, contando con los recursos de las diversas instituciones nacionales que puedan aportarlos para este fin: IMAS, INA, CCSS, INAMU.
- Estímulo a diversas modalidades de turismo que encadenen emprendimientos locales y la industria nacional en sintonía con la protección del patrimonio cultural y natural.
- Fortalecimiento de los gobiernos locales para que asuman un rol determinante en la identificación, creación y promoción de emprendimientos locales por medio de alianzas público-públicas y público-privadas.
- Ampliación y fortalecimiento de la infraestructura de conectividad digital, democratización de su acceso, capacitación para avanzar en la digitalización de las instituciones, empresas y comercio digital.
¿Cuál es el negocio de INCOPESCA de cobrar por ver ballenas?
Escrito en . Publicado en Análisis, Aportes para el desarrollo.
Vladimir de la Cruz
La Ballena está considerada como un animal marino, es un mamífero placentario, adaptado totalmente a la vida acuática. Son placentarios porque su cría en gestación se retiene, o son sostenidas, en el útero materno, por una placenta, durante el tiempo de gestación del embrión, donde es alimentado por la placenta, y permite el crecimiento dentro de la ballena madre.
La Ballena forma parte de los llamados cetáceos, entre los que se encuentran los cachalotes, las orcas, los delfines, las marsopas. En el orden de los llamados cetáceos hay unas 80 especies diferentes. De todos ellos solo cinco especies de delfines se sabe que viven en agua dulce, el resto son de agua salada, mares u océanos.
El nombre de cetáceo se atribuye al filósofo griego Aristóteles quien lo refirió a los animales marinos que tenían respiración pulmonar. Junto a la Ballena hay cetáceos con barba y hay cetáceos con dientes.
Se caracterizan entre otras cosas por su gran tamaño, siendo la más grande de ellas la Ballena Azul. Tienen una larga vida, arriba de los 60 años y pueden llegar a medir hasta unos 20 metros. Un pariente de los cetáceos es el hipopótamo, quizá por eso le encanta estar sumergido, aunque sea por poco tiempo, en el agua.
Como todos los seres vivos los cetáceos tienen sistemas de comunicación. Lo hacen moviendo los “labios” que tienen que les permite generar dos sonidos al mismo tiempo, que los especialistas clasifican como “canto”, con un sistema sensorial que se llama ecolocalización, por emisión de ondas sonoras.
Generalmente se puede pensar que este tipo de cetáceos son típicos de regiones lejanas a Costa Rica. Sin embargo, en las costas de Costa Rica, en ciertas épocas del año se pueden avistar fácilmente.
En Costa Rica son usuales los cetáceos llamados delfín manchado, el rotador, el común, el calderón menor, la orca, el calderón gris, el cachalote y el manatí, aunque pueden llegar a más de 40 tipos de cetáceos.
Las zonas donde más se pueden apreciar son la llamada Zona Económica Exclusiva del Pacífico de Costa Rica, en aguas oceánicas, y en las aguas costeras del Pacífico nacional, donde se concentran tres especies, el delfín nariz de botella o bufeo, el manchado y la ballena jorobada.
En los últimos años esta presencia de cetáceos, o de ballenas, especialmente ha sido muy importante para estimular las visitas turísticas a las regiones cercanas a donde se pueden ver estos cetáceos, contribuyendo también a estimular la educación, la educación ecológica y la educación biológica en general.
Los sitios de avistamiento, o de observación de ballenas, se han convertido en un polo de atracción turística regional y de viajes programados con ese fin en el mar. La costa Pacífica de Costa Rica es uno de los mejores lugares para estos avistamientos, y está considerada Costa Rica entre los mejores 10 lugares del mundo para estas observaciones. La más frecuentes de ver son las ballenas jorobadas, que se mueven en migración entre el norte y el sur del continente. También es frecuente ver las ballenas con sus crías.
Me ha tocado en varias ocasiones en la región de Guanacaste, acompañando a un hijo, en la pesca deportiva que le gusta, ver estas ballenas. En una ocasión vimos varias ballenas. Y, verdaderamente es una sensación extraordinaria la que se tiene al apreciar la maravilla de la naturaleza, del reino animal, y de estas extraordinarias ballenas, sobre todo cuando se quedan en un solo lugar, como si supieran que están posando para que se les aprecie o se les fotografíe o filme.
Ya las había visto hace muchos años en otra parte. Algunos de mis nietos, menores de 9 años, las han apreciado igualmente, lo que ha sido una experiencia de vida muy buena para ellos, por lo que aprenden de estos animales en videos y libros con los que se les refuerza su experiencia de vida.
Los capitanes de las embarcaciones muy rigurosamente se acercan hasta una distancia prudente que tienen regulada legalmente. Eso no impide que si se quiere nadar para tratar de oír los sonidos de las ballenas se pueda hacer, con las advertencias del Capitán de la nave. Yo no lo he hecho pero el hijo mío sí, y hasta ha grabado dentro del mar su acercamiento. En uno de esos viajes cuando mi hijo, buen nadador, se acercó lo más que pudo, entre la lancha y la ballena, para filmarla y tomarle fotos, le dije a mi nieto Julián, en ese momento de siete años, “lo que hace tu tata es muy peligroso, y la ballena lo puede golpear si da vuelta, o se mueve bruscamente”, y me contestó: “Abu, eso es lo que le gusta”, pero se puede morir en un accidente de ese tipo, le insistí, y me contestó que “moriría feliz”, a lo que no tuve respuesta ni otra pregunta, tan solo ver que todo estaba saliendo bien.
Es muy frecuente ver delfines y no pocos. Grandes tortugas también y, más raro aún, he visto, en tres ocasiones, tortugas grandes copulando a nivel de la superficie del mar.
Se pueden ver ballenas y delfines en el Parque Nacional Manuel Antonio que además se considera un hogar para estas ballenas, delfines y tortugas. En el Parque Nacional Ballena se pueden ver y apreciar las ballenas desde la playa. También se ven en la Península de Osa, considerada una de las más ricas regiones en diversidad biológica del mundo, en Golfo Dulce que es un lugar de apareamiento de ballenas, y en la Isla del Caño y en Bahía Drake.
Hay temporadas para el mejor avistamiento de ballenas del Pacífico desde la mitad de julio hasta la mitad de noviembre y desde mediados de diciembre hasta abril.
A propósito de estos avistamientos, y el flujo turístico que pueden provocar, el Instituto Costarricense de Pesca y Acuicultura (INCOPESCA) ha dispuesto cobrar 30 dólares a todos los turistas y operadores turísticos que hagan tours para ir a ver las ballenas, para lo cual hasta hay que sacar un carnet.
El INCOPESCA es la institución reguladora del aprovechamiento pesquero y de la captura de especies marinas. ¿Cuál aprovechamiento pesquero y captura de especies marinas hace? En sus barbas, en sus manos, con su posible complicidad, barcos pesqueros piratas extraen nuestra riqueza marítima, los domos de atún son brutalmente saqueados a ojos vista de INCOPESCA.
Que yo recuerde no hay una sola acción de este organismo preocupándose de cómo regular o vigilar este saqueo de nuestra riqueza marítima. ¿Habrá complicidad de esta institución en este saqueo? Esto es más importante que lo atienda INCOPESCA a que trace directrices de cobrar $30 dólares a turistas y operadores turísticos por ir a ver ballenas. Eso es un robo, un saqueo más, al bolsillo de los turistas, especialmente nacionales, y a sus escuálidos salarios que les quieren establecer, con las rebajas que se han impuesto, cuando con grandes esfuerzos pueden ir a este tipo de visitas.
En este sentido históricamente INCOPESCA no ha hecho nada, absolutamente nada, al menos públicamente conocido. Costa Rica con 1020 kilómetros de costa pacífica, y con poco más de 200 en la costa caribeña, con una proyección territorial marítima 10 veces más grande que el territorio nacional, es para que INCOPESCA, como instituto regulador de esta materia, hubiera impulsado y desarrollado políticas y acciones nacionales, desde hace mucho tiempo, desde su fundación, para efectivamente hacer un buen aprovechamiento de los recursos del mar, de haber impulsado nacionalmente, o del Estado en alianza con empresarios nacionales, una buena flota pesquera nacional, hubiera explotado racionalmente el mar, y no dejárselo a las empresas extranjeras, de distintas banderas, que llegan a nuestro mar territorial con la clara complacencia de esta Institución que nunca la he oído protestar ni quejarse de este saqueo. Quizá su regulación se limite a que traigan un poquillo del atún pescado a procesarlo en los esteros de Puntarenas para cumplir.
En la década de 1940, ante la crisis provocada por el impacto de la II Guerra Mundial, el Partido Comunista de Costa Rica, propuso una política para el suministro de alimentos del mar a la población…” Pescado a Peseta” (25 céntimos de la época) era la consigna. Más tarde, en la década de 1970, el diputado comunista, Arnoldo Ferreto Segura, preocupado por este asunto, impulsó una Ley reguladora de la actividad pesquera que se conoce con su nombre, la Ley Ferreto. No hay nada que se conozca similar de INCOPESCA preocupándose por el pueblo costarricense en políticas pesqueras.
Hasta ahorita se están preocupando por ver cómo le sacan más plata al pueblo que puede ir a turistear.
El avistamiento de ballenas NO le compete a INCOPESCA, ni a la Junta Directiva de esta institución, regularlo. Hoy quieren cobrar, esos directivos, por ir a ver ballenas. Mañana se les puede ocurrir cobrar por ir a ver los períodos de desove de los seis tipos de tortugas que llegan a Costa Rica a desovar, que quizá es más impresionante, que ir a ver las ballenas, por las miles de tortugas que vienen todos los años a nuestras costas a desovar, en el Atlántico entre marzo y noviembre, aunque suelen anidar entre abril y mayo, y las tortugas verde del Caribe que anidan entre marzo y octubre, de abril a junio, cuando es el desove de las tortugas baula, y de julio a octubre cuando se acercan a desovar las tortugas verdes.
O, en Ostional, de julio a noviembre, o en Tortuguero, a lo que debe su nombre…y así podría seguir mencionando situaciones por las cuales a algunos de los cerebros de INCOPESCA, se les pueden iluminar sus sesos, que por estar relacionados con la pesca, probablemente sean cerebros pequeños, como los de los peces, en relación al tamaño de sus cuerpos. Dicen los especialistas que el cerebro de los peces está también relacionado con sus hábitos alimenticios. En INCOPESCA el hábito alimenticio, como estamos viendo, es ver como se comen los $30 que quieren cobrarle a quienes quieran ir a ver ballenas.
El cerebro, la masa cerebral, de los peces se dice es un quinceavo de la masa cerebral de aves o mamíferos de un tamaño similar. Como todo cerebro está dividido en varias regiones. Una de esas regiones, en la parte frontal, es la parte olfativa. Esta parece ser la que han desarrollado los de INCOPESCA para oler donde sacan plata… de los turistas y de los costarricenses que quieren ir a ver ballenas.
Los de INCOPESCA huelen el dinero fácil… de los turistas, a quienes quieren extraérselo.
Por dicha la Junta Directiva de INCOPESCA o los funcionarios a quienes se les ocurrió cobrar los $30 por ir a ver ballenas no los han nombrado en Parques Nacionales, porque cobrarían por todo tipo de animales que se quieran avistar…
Si en el Reglamento para la Operación de Actividades Relacionadas con Cetáceos en Costa Rica, se obliga a los turistas y la tripulación de barcos a pagar por la observación de ballenas, es el momento para que se elimine esa norma reglamentaria, que probablemente no tenga asidero legal, de una LEY. Por Reglamento pareciera que no se pueden crear este tipo de exacciones económicas a la gente.
Con este tipo de medidas recaudatorias, o confiscatorias, no ayuda INCOPESCA a la reactivación económica del sector turístico, y menos a las condiciones gravosas de los ciudadanos, a quienes el gobierno está invitando constantemente a ir a turistear para favorecer y apoyar el sector turístico. Por el contrario, lo que es peor, es que tiende a ahuyentar a los turistas.
Es hora de que se elimine esa disposición, si está vigente, y no se siga robando de esa manera a la gente, a los ciudadanos y a los turistas parte de sus salarios o de sus ingresos.
El impacto turístico de quienes viene a avistar los cetáceos en Costa Rica es más importante que el cobro que a los turistas se les puede hacer. El avistamiento de cetáceos en Costa Rica representa la economía con mayor crecimiento de América en su ámbito turístico.
Si de cobrar se tratara, entonces, debería ser a favor del sector turístico y no de INCOPESCA, que nadie sabe para donde está bien justificado y destinado ese cobro. Y si de Parques Nacionales se trata, tampoco INCOPESCA administra los Parques Nacionales relacionados con el avistamiento de Ballenas. E, igualmente, en el Parque Marino Ballena, sería a Parques Nacionales los que le correspondería cobrar por avistar, pero no a INCOPESCA. No es de su competencia cobrar por ver ballenas. Pero, tampoco puede cobrar por el uso del mar o de las playas.
San Lucas: Conservación y Patrimonio ¿para beneficio de quiénes?
Escrito en . Publicado en Madre Tierra.
El Gobierno de Costa Rica ha celebrado recientemente la reapertura de Isla San Lucas a la visitación turística, tras algunas remodelaciones. El Refugio Nacional de Vida Silvestre Isla San Lucas es un territorio recuperado por el bosque seco, luego de que se inhabilitara para uso penitenciario en 1991.
Una semana atrás, la Asamblea Legislativa aprobó en segundo debate la conversión del Refugio Nacional de Vida Silvestre en un Parque Nacional, incluyendo su perímetro marítimo hasta los 6 metros de profundidad. Se pretende con este proyecto mejorar la obtención de recursos económicos “para la conservación” de la Isla bajo la categoría de Parque Nacional.
Intereses comerciales sobre el RNVS Isla San Lucas
En el año 2008, siendo ministro de Turismo, el actual diputado Carlos Ricardo Benavides presentó una propuesta de Decreto para segregar un área de 25 hectáreas del Refugio Nacional de Vida Silvestre Isla San Lucas para que la Municipalidad de Puntarenas la administrara con fines turísticos.
La fragmentación del área de patrimonio histórico y la playa Cocos, pretendía ser compensada con 210 hectáreas en el mar, un tema que ambientalmente no tenía ningún fundamento, y por lo cual se presentaron tres acciones de inconstitucionalidad que en su momento determinaron la improcedencia de su aplicación.
Parque Nacional ¿Oportunidad para las comunidades del golfo?
En el planteamiento actual, lo que se observa es un cambio de categoría de conservación, elevándose en importancia al nivel de Parque Nacional, pero con un fuerte componente de inversión en las infraestructuras como atractivo turístico, justificándose en la necesidad de aumentar la recaudación de recursos para conservar, ante el progresivo abandono y deterioro de la isla.
Para el ecologista Juan Figuerola, quien trabajó varios años junto con las poblaciones de las islas Venado, Caballo y Chira, es obligatorio evaluar la oportunidad que esto puede significar para los habitantes del golfo, que históricamente han sido excluidos de las decisiones políticas centrales y amenazados de desplazamiento.
Figuerola propuso en el 2010 la posibilidad de crear condiciones de participación prioritaria de personas locales como guías turísticos hacia la isla y en las estrategias de conservación del patrimonio natural e histórico, permitiendo que haya participación económica para estas poblaciones, que subsisten casi exclusivamente de la pesca tradicional con sus limitaciones. “La conservación no puede existir sin la gente”, concluye al consultársele sobre la creación del Parque.
Mientras tanto, el abogado Álvaro Sagot manifestó su preocupación por el componente del desarrollo en infraestructuras turísticas, al desconocer los criterios técnicos para justificar la capacidad de carga que garantice a futuro el cumplimiento del objetivo de conservación, recalcando los intereses inconstitucionales que han existido para abrir la isla al turismo y crear condiciones para beneficios particulares.
Necesidad de un enfoque de ecología social
Para la FECON es prioritario que se garantice la inclusión social de las comunidades del golfo de Nicoya en las actividades de conservación y aprovechamiento sostenible del Patrimonio Natural e Histórico de Isla San Lucas, bajo la categoría de conservación que sea.
Si el proyecto en San Lucas no logra articular las economías locales, estaría gestándose un nuevo espacio de exclusión para las comunidades de base pesquera, que necesitan integrarse en la protección del golfo, en lugar de ser invisibilizadas y tener que enfrentar la negación sistemática de su espacio de vida histórico.
*Imagen: Entrada a zona patrimonial de San Lucas. Foto: Francis Cordero.
Covid-19 y crisis económica – Diez apuntes para un programa económico diferente
Escrito en . Publicado en Análisis, Aportes para el desarrollo.
Luis Paulino Vargas Solís
Economista. Director CICDE-UNED
Grupo Economía Pluralista
Dos preguntas básicas animan este artículo: ¿qué asuntos nos preocupan respecto del abordaje de la crisis económica y sus consecuencias sociales y humanas? ¿Qué respuestas alternativas deberían darse?
- Es desatinado debilitar la capacidad de respuesta de la institucionalidad pública, a través de la reducción de jornadas, el recorte de gastos y la aplicación de la regla fiscal:
- Ahora, más que nunca, resulta necesario dotar a esa institucionalidad del músculo y la capacidad de respuesta, requeridas para atender la multiplicación de necesidades y demandas que la crisis trae consigo.
- Por lo tanto, es desatinado y debe retirarse la propuesta de reducción de jornadas, que limitaría la disponibilidad de personal, incluso en áreas críticas como las de las instituciones de atención de la pobreza o las de implementación de las políticas de vivienda popular.
- Debe asimismo desaplicarse la regla fiscal. Resulta irracional que, en medio de una crisis de tal gravedad, esa regla se mantenga en pie, en vista de las rigideces y restricciones que impone.
- Deben reconsiderarse las políticas de austeridad fiscal. Se necesita más eficiencia y compromiso, no menos recursos. Y, sobre todo, el sector público tiene el deber de aportar un impulso positivo a la economía, en vez de sumar fuerzas contractivas, como resultaría de las políticas austeritarias.
- Es claro que el reparto de los costos de la crisis sigue siendo inequitativo.
- Es indispensable desarrollar un esquema muy progresivo de tributos y subsidios, bajo el criterio de que deben contribuir todos y todas quienes puedan hacerlo, y cada quien según sus posibilidades materiales, y de que se debe apoyar a todas y todos quienes realmente lo necesiten.
- Un esquema tributario progresivo, apropiadamente diseñado, no desestimulará la inversión productiva y la generación de empleos, aunque sí el despilfarro, los lujos extravagantes, la especulación y las actividades ambientalmente dañinas.
- Bajo las actuales condiciones de profunda recesión económica, un esquema muy progresivo de subsidios, dará poder adquisitivo a los sectores más carenciados, y ayudará así a activar el mercado interno y aliviar la recesión.
- Este esquema de subsidios progresivos –que bajo el actual gobierno tiene el nombre de Bono Proteger, el cual urge ampliar y reforzar– debe ser el primer paso hacia el establecimiento de una “renta básica universal”.
- Debe haber pasos firmes y una acción vigorosa de combate a todas las formas de fraude fiscal, bien si resultan de la evasión directa, o de los mecanismos, mucho más sofisticados y agresivos, de la elusión. En concordancia con lo anterior, debe haber un avance efectivo hacia la revisión y supresión de las exoneraciones (incluyendo las de zonas francas), de modo que se mantengan solo las que tienen justificaciones sociales muy sólidas.
- Se habla de reactivación pero las propuestas en esa materia parecen naufragar en la indefinición. Por ejemplo: las cifras tan significativas dadas a conocer el 4 de mayo, acerca de los presuntos programas de inversión pública que se pondrían en marcha (en el orden de alrededor del 5% anual como proporción del Producto Interno Bruto, PIB), siguen sin tener ningún aterrizaje claro.
- Entre otras acciones muy importantes, debe definirse prioridades y calendarios precisos del programa de inversiones a desarrollar, incluyendo un componente de corto plazo, de fácil ejecución, con gran potencial de generación de empleos (incluyendo explícitamente el empleo de mujeres), y beneficio para las regiones más rezagadas del país.
- Confiarse a la “reapertura” para lograr la reactivación es engañoso: la incertidumbre y desaliento son hoy tan extendidos, y las fuerzas que deprimen la economía, tan poderosas, que se necesita un empuje mucho más vigoroso, el cual solo puede darse desde el Estado.
- Se requiere, como ya se dijo, un programa de inversiones muy vigoroso y una serie de otras acciones cuyo liderazgo compete que sea ejercido desde el sector público. De ahí lo desatinado de las medidas recortistas que mutilan la capacidad de respuesta de la institucionalidad pública-estatal.
- En concordancia con lo antes indicado, y bajo las actuales circunstancias depresivas y de gran incertidumbre que rodean la economía, ni el crédito ni, más en general, la política monetaria, pueden ser eficaces en grado apreciable, para reactivar la inversión empresarial y la generación de empleos.
- No obstante lo anterior, sí es urgente canalizar financiamiento en condiciones muy favorables, para proporcionar flujo de caja y capital de trabajo a muchas micro, pequeñas y medianas empresas, e incluso algunas grandes empresas, que lo requieren con urgencia. Ello no puede hacerse con arreglo a la actual normativa del sistema financiero. Se necesita poner en marcha mecanismos muy innovadores, incluyendo un amplio programa de avales y garantías.
- Se insiste en recurrir a deuda externa para abaratar el costo asociado al pago de intereses, no obstante que hay mecanismos internos que podrían utilizarse con el mismo fin, sin incurrir en el riesgo cambiario y político asociado a una deuda externa incrementada.
- En este, como en otros aspectos (inclusive el indicado en el punto 5 anterior), es urgente que el Banco Central se sacuda de la modorra que lo paraliza, y empiece a dar la contribución necesaria para estabilizar la economía, aliviar los efectos negativos derivados de la crisis y contribuir a crear condiciones para la posterior recuperación.
- La crisis ha sacado a relucir los gravísimos problemas de exclusión y marginalidad existentes, lo mismo en zonas rurales –por ejemplo, en las plantaciones agroindustriales de la zona norte– que en áreas urbanas, en las cuarterías y en barriadas empobrecidas densamente pobladas. Esa realidad, que por tanto tiempo ha sido tercamente ignorada y negada, ha salido a luz dramáticamente, empujada por el Covid-19 y la pandemia.
- En el contexto de la crisis actual, es urgente que desde el Estado se movilicen recursos que permitan atender esas situaciones de carencia y privación, primero, por razones morales y de compromiso humanitario y solidario, y, segundo, porque ello es indispensable para frenar el contagio del Covid-19.
- Más allá de la crisis actual, y en perspectiva de mediano y largo plazo, el país debe reformular a profundidad sus estrategias de desarrollo, en relación con el empleo, la atracción de inversiones, la inversión pública, el impulso al desarrollo regional y las áreas o actividades productivas prioritarias.
- Es un error confiarse a las exportaciones y el turismo como los mecanismos que saquen a la economía de la recesión. Ninguno de los dos tendrá una fácil ni rápida recuperación. En el caso del turismo será seguramente mucho más lenta.
- Por lo tanto, es preciso reconocer que, al menos por un período que podría ser relativamente considerable, los mecanismos dinamizadores de la economía deben surgir desde dentro de ésta.
- Lo cual significa recuperar, al menos en parte y con las reformulaciones que sean necesarias, la noción de “desarrollo hacia dentro”, originalmente planteada por la CEPAL.
- Ello, a su vez, tiene dos implicaciones: primero, deben retomarse los objetivos de justicia social e igualdad, que en Costa Rica han quedado en abandono.
- Y, segundo, implica revalorizar el mercado interno, y convertirlo en motor de dinamización de la economía nacional.
- En concordancia con lo anterior, y aparte los programas de inversión pública propuestos, debe extirparse la retórica, comprobadamente hueca, para hacer efectivas y eficaces las políticas de fomento e impulso de micro, pequeñas y medianas empresas, así como de emprendimientos solidarios, asociativos y cooperativos.
- Tener una economía de alta productividad, diversificada, con densos encadenamientos productivos, que aproveche inteligentemente la dotación de recursos de que disponemos, es una meta de mediano y largo plazo, que en lo más inmediato pasa por un mercado interno fortalecido, mejores salarios y más justicia y equidad distributiva.
- Con esta crisis han emergido los temores ante la posibilidad de desabastecimiento alimentario, lo cual, a su vez, refleja el abandono histórico de la agricultura tradicional productora de alimentos para el mercado interno.
- Es necesario que el país redefina sus políticas en materia de soberanía y seguridad alimentaria, y reivindique el lugar que le corresponde a nuestra agricultura tradicional, y a nuestras agricultoras y agricultores. Un Plan Nacional de Producción de Alimentos, que incorpore medidas de ejecución inmediata, y con perspectiva de mediano y largo plazo, debe ponerse en marcha, incluyendo un componente que garantice la compra por parte de las instituciones del Estado, como la Caja del Seguro Social.
- El Covid-19 y la necesidad del confinamiento, han venido a resaltar las inequidades de género que comporta la división sexual del trabajo, con el recargo de doble o triple jornada que ha debido sobrellevar la mujer trabajadora que hace teletrabajo, pero que es un problema generalizado, históricamente puesto sobre las espaldas de las mujeres.
- Las políticas de cuido deben reforzarse y ampliarse, incluyendo la ampliación de la infraestructura de cuido, y la disponibilidad de más personal adecuadamente capacitado. El cuido debe ser una responsabilidad socialmente asumida, y no una obligación asignada, en casi su totalidad, a las mujeres.
Publicado en el blog https://sonarconlospiesenlatierra.blogspot.com/2020/07/covid-19-y-crisis-economica-diez.html?m=1
Compartido con SURCOS por el autor.
Covid-19 y “apertura” de la economía: No nos hagamos ilusiones
Escrito en . Publicado en Análisis, Aportes para el desarrollo.
Luis Paulino Vargas Solís
Economista, Director CICDE-UNED
Grupo Economía Pluralista
Tras semanas de parcial confinamiento, el gobierno de Carlos Alvarado inició un proceso así llamado de “apertura” de la economía, con la esperanza de restablecer una relativa “normalidad” que permita reanimar la actividad económica y recuperar empleos. Se comprende que esto se hace bajo un juego múltiple de presiones: en primera instancia por parte de las cámaras del gran empresariado, pero también por la severidad del derrumbe económico, la pérdida de empleos, el deterioro de la situación fiscal e, inclusive, la impaciencia misma de la gente.
Se ha intentado avanzar en la “apertura”, cuando al mismo tiempo se registra un fuerte incremento de los contagios por Covid-19. Esto plantea un gran desafío, y exige un altísimo grado de disciplina. Si el contagio se sale de control –y es lo que pareciera estarse dando– ello tendría consecuencias potencialmente catastróficas. No estoy del todo seguro si el común de las personas ha logrado interiorizar plenamente lo que esto significa. Pero lo que resulta más preocupante es el tipo de mensajes que lanzan algunos de los liderazgos empresariales, en especial la UCCAEP. Sus exabruptos, ofensivos y estridentes, transmiten un desprecio por la vida, que solo es propio de una ideología fascista. Confío, sin embargo, que, en su amplia mayoría, predomina en el empresariado costarricense, un compromiso ciudadano, de protección a la salud y de respeto a la vida, absolutamente indispensable en este momento.
Si la pandemia se desborda, los servicios hospitalarios colapsan y las muertes se disparan, la “apertura” de la economía inevitablemente se frenará. Por decisión de las autoridades o a causa del pánico que ello provocaría. No entender esto es no entender nada, y es obvio que la UCCAEP, incapaz de mirar más allá de la punta de su nariz, no lo entiende.
De ahí que sea un error hablar de establecer un “balance” entre la salud y la economía, lo cual sugiere que salud y economía están en el mismo nivel, tienen la misma importancia y pueden caminar la una a la par de la otra. Incorrecto. Incluso si se opta por “abrir” la economía, ello debe hacerse priorizando siempre la vida y la salud. De otra forma, la propia “apertura” se detendría cuando apenas empiece a caminar, y, al final, la factura que deba pagarse será mucho más cara.
Por otra parte, debemos entender que la “apertura” no tiene más que muy limitadas posibilidades, si de recuperación de la economía y los empleos se trata.
Primero, hay un ambiente de enorme incertidumbre y temor, que inevitablemente frena el consumo de las personas y los hogares, y los proyectos empresariales de inversión. O sea, lo que cabe esperar es un proceso donde, al “abrirse” la economía, la gente retome a lo sumo de forma parcial algunos de sus viejos hábitos de consumo, pero manteniéndose cauta y contenida. En el caso de las empresas ese mismo efecto se daría, pero en grado incrementado, ya que se parte de un altísimo nivel de desocupación de la capacidad instalada. Difícilmente habrá alguna empresa que, bajo tales condiciones, quiera emprender nuevos proyectos de inversión.
O sea, la reapertura tan solo dará un empujón parcial e insuficiente a la economía, y, por ello mismo, tan solo se recuperará una parte de los empleos perdidos. Por lo tanto, mucha gente que se quedó sin trabajo, no podrá recuperarlo, lo que, a su vez, mantendrá en pie poderosas fuerzas contractivas, que harán aún más limitada la recuperación de la demanda de consumo, y deprimirá aún más la disposición empresarial a generar nuevas inversiones.
Los estímulos provenientes del exterior tampoco aportarán gran cosa. La profundidad de la recesión en países ricos, mantendrá deprimidas las exportaciones al menos por el resto de este año, pero seguramente el efecto se prolongará al año venidero. El turismo, por su parte, durará mucho tiempo –posiblemente años– antes de retornar a niveles comparables a los de los tiempos pre-Covid. Hay demasiado miedo circulando en la atmósfera sicológica del mundo entero, para pensar otra cosa, ni siquiera si se adoptasen estrictas medidas sanitarias, y ni siquiera si se descubriese una vacuna eficaz, teniendo presente que aún si ésta estuviese disponible, su aplicación universal llevaría tiempo.
Y aquí es importante aclarar una idea errónea, pero muy popular, inclusive entre economistas: la de que “fondear” los bancos, para que éstos tengan recursos y coloquen créditos, es una herramienta eficaz para dinamizar la economía[i]. La cuestión más bien funciona a la inversa. La economía no se reactiva porque se reactive el crédito; por el contrario, el crédito se reactiva en respuesta a la reactivación de la economía. Una vez la economía gana tracción, el crédito funcionará como lubricante que lo facilite y, eventualmente, contribuya a darle impulso. Pero el crédito no puede gatillar el proceso y ponerlo en marcha. Lo cierto es que no hay colocación de créditos, si no hay demanda de crédito. Y para que esta demanda exista, es necesario que la economía camine.
Ello asimismo demarca los límites de los estímulos monetarios que, vía tasas de interés, puedan ser aportados por el Banco Central. Existe, por un lado, el problema –entretención habitual en las conversaciones entre economistas costarricenses– acerca de la exasperante lentitud con que las tasas de interés en el sistema bancario, responden a las bajas acordadas por el Banco Central en su “tasa de política monetaria”. La razón de lo cual, según creo, hay que buscarla en el característico conservadurismo del propio Banco Central, el cual pareciera creer que basta con anunciar la baja, y por su linda cara los bancos le seguirán obedientes y sumisos. Lo cierto es que si no actúa con un mínimo de agresividad las tasas no bajarán. Y eso es lo que usualmente ocurre: las tasas no bajan. Se necesitaría mayor activismo, algo impensable en nuestro artrítico Banco Central.
Pero esa es una parte de la historia y, en las circunstancias actuales, la menos importante. Porque inclusive si las tasas de interés tuviesen una baja muy significativa, las fuerzas contractivas que mantienen frenados los planes de inversión de las empresas y los planes de consumo de las personas y las familias, seguirán en pie. Por un lado, la enorme capacidad productiva instalada de las empresas, que permanece ociosa. Por otro, la situación de amplísimo desempleo. Y súmele el congelamiento de las exportaciones y el turismo. Y, encima de tales factores objetivos, el ambiente sicológico de terrible incertidumbre y temor. Simplemente el crédito no se reactivaría, ni siquiera si las tasas de interés se aproximasen a cero.
Por su parte, el “libre mercado” carece de mecanismos que permitan desatascar esta maquinaria averiada. En el contexto de oscuridad que la incertidumbre reinante impone, esos mecanismos quedan paralizados. O, si acaso, solo podrían lograrlo después de un largo período y un cúmulo incalculable de sufrimiento humano, cuando, al fin, las empresas empiecen a hacer inversiones para sustituir capital destruido o depreciado, y/o las exportaciones de fuera de zona franca, empiecen a tener una reanimación significativa. Pero el lapso que tendría que transcurrir para ello, podría ser intolerable para la sociedad.
Estamos entrando a una fase donde se hace necesario recuperar, siquiera parcialmente y mínimo por algún tiempo, la noción cepalina de «desarrollo hacia adentro». No por razones ideológicas, sino por imperativo de la realidad. O sea: la economía costarricense tiene que reencontrarse con el mercado interno, y volver a priorizar objetivos de justicia social y mayor igualdad.
Teniendo eso claro y ante el contexto actual, el único agente económico que podría proporcionar el empujón que saque a la economía de ese sopor patológico y rompa la parálisis, es el sector público, y tendría que ser por medio de un amplio programa de inversión pública, planificado para que incorpore un componente de fácil ejecución en el corto plazo, capaz de generar muchos empleos y densos encadenamientos con actividades productivas nacionales. A mediano y largo plazo ese programa debería enfatizar las energías limpias, las tecnologías verdes, la modernización del transporte público, la fibra óptica, los acueductos y sistemas de alcantarillado y tratamientos de aguas residuales, la infraestructura educativa y sanitaria, los espacios públicos, el desarrollo de la ciencia y la tecnología y el acceso a la vivienda para toda la población.
Por ello mismo, resulta un desatino las propuestas de austeridad fiscal, que tan solo vendrían a reforzar las fuerzas contractivas que actualmente están en operación. Lo cierto es que la única forma saludable de volver manejables el déficit y la deuda pública, es a través de la dinamización de la economía.
Y siendo verdad que enfrentamos una severa restricción fiscal, por ello mismo se hace indispensable buscar formas alternativas e innovadoras de financiar ese programa de inversión, de forma que el déficit fiscal mismo no se vea incrementado. Entre las cosas rescatables en el programa de reactivación de la economía que el gobierno de Carlos Alvarado presentó el 4 de mayo pasado, había algunas ideas en este sentido. Los números ofrecidos eran interesantes, pero el planteamiento resultaba vago e impreciso, y lo sigue siendo hasta el día de hoy.
Se trata de poner a caminar la maquinaria económica, en la comprensión de que, una vez puesta en movimiento, el proceso de recuperación se alimentará a sí mismo. Será entonces cuando entre en juego el crédito, cuya demanda se verá incrementada una vez la economía agarre vuelo.
Ya para entonces los bancos volverán a funcionar como normalmente lo hacen: creando dinero prácticamente “del aire” para conceder crédito y, así, crear sus propios depósitos.
[i] Esta es una idea que, por ejemplo, desarrolla con amplitud el muy respetado colega, don William Hayden, en un artículo en el medio digital La Revista (4 de julio de 2020): “Las alternativas económicas de nuestro país en el marco del covid-19”.
Información tomada del blog: https://sonarconlospiesenlatierra.blogspot.com/
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UCR, Voz experta: La industria de base tecnológica podría ser una opción para el crecimiento socioeconómico de Costa Rica
Escrito en . Publicado en Derechos.
Por Guillermo Santana, miembro del Consejo Universitario
Debido a la caída del mercado de turismo vigente antes de la pandemia, Costa Rica debe incentivar nuevas alternativas para fortalecer la economía

La actual emergencia sanitaria ya ha causado la lamentable muerte de 21 habitantes de nuestro país. Es nuestro deber destacar y agradecer la excelente respuesta del sector salud a esta pandemia. Los años de construcción y preservación de su estructura están rindiendo frutos en el mejor momento posible. Esta construcción inició en los años cuarenta del siglo pasado y ha crecido, y se ha consolidado en estricto apego al desarrollo socioeconómico del país.
Sin embargo, corresponde ahora agregar una vigésimo segunda fatalidad. Esta vez no se trata de un ser humano, sino de una industria nacional: el turismo.
La expectativa de un retorno al mercado de turismo existente antes del surgimiento del nuevo coronavirus resulta quimérica en el mejor de los casos. Nuestro principal socio turístico, Estados Unidos, enfrenta un panorama cada vez más sombrío. Contrario a la experiencia europea, a la fecha, el número de casos de contagio de COVID-19 está empezando una nueva curva de crecimiento sin que a la fecha se pueda estimar su estabilización y mucho menos su reducción.
Llenar un hueco tan grande requiere inducción de demanda en nuevos mercados o ampliación en mercados existentes, todos ubicados a mayor distancia de nuestro país. En cualquiera de los casos, los tiempos de vuelo promedio se incrementan en al menos dos horas. Esta circunstancia se vuelve casi insuperable en vista de la necesidad de llenar un vacío tan grande como el que deja el mercado estadounidense.
Debemos incentivar nuevas alternativas para el crecimiento socioeconómico del país. Una de las posibles alternativas puede ser la promoción de la industria de base tecnológica en forma de encadenamientos multinacionales. El recurso humano del país ha mostrado estar a la altura de la demanda en esa industria. El capital necesario para la expansión puede venir de inversión externa o inclusive mixta.
El compromiso a forjar en esta iniciativa debe involucrar al sector privado con el Gobierno y con la academia, como una hélice de tres aletas. Sin estos tres componentes claramente diferenciados y actuando cada uno en su propio dominio, nuestra nave no alcanzará la altura requerida.
Dr. Guillermo Santana
Miembro del Consejo Universitario
Encontrar caminos para salir de la crisis obliga a remover los viejos esquemas
Escrito en . Publicado en Análisis, Comunidad.
Miguel Sobrado
La pandemia del coronavirus ha provocado una recesión internacional que muchos compararan con la crisis de 1929. La mayor del siglo pasado, que desembocó en grandes transformaciones que rompieron estereotipos sobre el papel rector de la “mano invisible” del mercado en la conducción de la actividad económica y su ordenamiento social.
Como toda crisis, la actual nos obliga a repensar la actividad económica, la tecnología y las alianzas internacionales, buscando nuevas oportunidades y senderos que nos permitan reactivar, de forma sostenible, la vida económica y restablecer el balance del tejido social.
Retomar lo rural: territorial y local
Ya se han esbozado algunas propuestas importantes, que deben ser analizadas, pero sobre todo transformadas en proyectos operativos tales como el fortalecimiento de la lo rural, especialmente la agroecología, así como los encadenamientos en el ámbito de las economías locales. Es evidente con esta crisis donde se han resquebrajado los fundamentos de la globalización, que nuestra alimentación básica debe generarse en nuestro país, si no queremos renunciar a la soberanía. No hay que seguir pensando en consensos que se limiten a los viejos actores políticos, difícilmente de esos conclaves saldrá ideas que amplíen el horizonte. Es preciso recurrir a las grandes reservas de creatividad regional y local, ahí donde existen organizaciones y proyectos innovadores autónomos. Como lo he expresado en otros artículos en las zonas campesinas, especialmente cafetaleras y cacaoteras, se ha venido tensando el arco creativo, producto de una mejor educación y formación, encadenando actividades económicas y destacando el campo cultural y deportivo. Algunas de estas experiencias, como la del micro beneficio en el café han tenido premios internacionales. Dentro de ellas se destaca el premio dado por INTEL en 2014 a los jóvenes del colegio de Sixaola por encontrar con apoyo local la vacuna natural a la enfermedad la monilia del cacao.
Pienso que es fundamental invitar a opinar y participar en el establecimiento de senderos aportando su experiencia a estos sectores que constituyen la gran reserva nacional.
Romper con inercias del pasado
Por otra parte algunas medidas propias de “la guerra contra las drogas” vigentes en nuestro país como la prohibición de la siembra y explotación industrial de la mariguana, no tienen actualmente razón de ser cuando una docena de Estados norteamericanos la siembran y procesan legalmente con grandes dividendos y generación de empleo. Si estas medidas represivas las aprobamos en su momento para contribuir con el combate que tenían en los Estados Unidos contra ese cultivo, hoy en día deben ser revisadas frente al cambio de condiciones cuando la explotación industrial con fines médicos la ha transformado en una oportunidad.
Reorientar el turismo hacia el Asia que ha superado la pandemia
Estados Unidos y Europa, nuestros clientes turísticos tradicionales, tardarán todavía algunos meses en reponerse, mientras tanto la industria turística nuestra desfallece y no todos sobrevivirán al año 2021, donde se empezará, si todo sale bien, a recuperar el sector. Mientras tanto en Corea, Japón, Singapur y China, países que están superando exitosamente la pandemia, existe un gran mercado, potencialmente mayor hacia el cual podemos dirigir nuestros esfuerzos. No solo se trata de un gran mercado numérico, sino cualitativamente mejor dotado económicamente. Se ha estimado que un turista chino deja unos $4000 dólares por visita mientras los tradicionales dejan $1500.
Aquí hay que abrir la cabeza de nuevo porque el gobierno de Trump, ha desalentado nuestros contactos con China, como bien lo dijo el Ministro Pompeo durante su última visita a Costa Rica.
Pienso que no tenemos que entrar en conflicto con los Estados Unidos por abrirnos al turismo asiático. Es de interés común de la región estabilizar nuestra economía para que el resquebrajamiento del tejido social no sea aprovechado por la ruta de la coca para imponer el terror en las regiones pauperizadas, tanto fronterizas como costeras de nuestro país.
Imagen: http://agroecologa.org/costa-rica-y-la-agroecologia-una-practica-cotidiana-por-la-autonomia/
Campaña de Alimentos «Mano Vuelta» Caribe Sur
Escrito en . Publicado en Comunidad, Derechos.
Alimentando, regenerando fuentes locales de subsistencia, un complemento de otras iniciativas en la zona
La Campaña de Alimentos Mano Vuelta en el Caribe Sur es una iniciativa de Embajador@s del Mar y sus aliados comunitarios. Es una campaña complementaria a otros esfuerzos de los bancos de alimentos que se desarrollan en Cahuita y en Puerto Viejo para apoyar con alimentos a la población que ha perdido sus fuentes de sustento en esta emergencia de salud provocada por el COVID19.
Esta iniciativa en particular busca construir un entramado de hermanamiento entre familias que necesitan alimentos y gente que puede aportarle una bolsa semanal durante 8 semanas mientras se colocan en la nueva realidad. No solo pretende apoyar en lo inmediato, sino hacerlo reconstruyendo el tejido sociocultural de sustento que caracteriza la zona, un lugar en el que la gente ha vivido haciendo una variedad de actividades conforme los ciclos y las oportunidades. Para así aportar también en el proceso de regeneración de fuentes de subsistencia.
Todos los casos seleccionados refieren a personas, sobre todos adultos mayores o mujeres jefas de hogar, que por haber perdido sus trabajos o los hijos que los ayudan, necesitan apoyo para sobrellevar la crisis sin poner en mayor riesgo su salud, la de su familia y la de su comunidad.
La cobertura de esta iniciativa comunitaria es el Caribe Sur costero desde Cahuita hasta Manzanillo y algunas familias los territorios indígenas Kekoldi y Bribri.
En la primera semana de trabajo desde que inició el pasado 2 de abril, se ha atendido una decena de familias, entregando bolsas semanales de alimentos y construyendo un sistema de apoyo para regenerar actividades productivas apropiadas para la emergencia y el cambio que supone.
Una estrategia adaptada al contexto
“Mano Vuelta” hace homenaje a una práctica ancestral de cultura viva Bribri que significa que cuando una persona que le ha dado mucho a su comunidad, pierde su pareja o miembro de la familia con la cual desarrolla su parcela, la comunidad se organiza para ayudarla a sacar adelante las tareas a pesar de su pérdida. Mano Vuelta es un concepto alude a la imagen de que para dar hay que volver la palma de la mano hacía abajo para sostener lo que se entrega. Pero para disponerse a recibir apoyo cuando se necesita, hay que poner la palma vacía hacia arriba.
Por esta razón En la campaña actual, con cada una de las familias atendidas se valora cuáles han sido actividades productivas propias que han hecho en el pasado o complementariamente con el turismo valorando lo que necesitan para regenerar esas actividades en este contexto actual.
El contexto sugiere que la reactivación del turismo puede tomar más tiempo que la emergencia de salud en Costa Rica. “El segundo golpe más grande después de la morbilidad y mortalidad ocasionada por la combinación del COVID19 con otras enfermedades crónicas que sufre la humanidad, es la globalización de la movilidad social mundial debido a que el impacto del virus ha viajado por los principales medios mundiales de desplazamiento por el mundo” dice el documento de la iniciativa, reconociendo que, más allá de la atención localizada por Estados nacionales mediante el cierre de fronteras y en cierre de medios globalizados de movilidad social, lo que más tardará en reactivarse luego de la crisis de salud, será la de la movilidad internacional, sobre todo debido a que el impacto del virus varía de país en país.
Por ello la estrategia de entrega de alimentos para la emergencia incluye una valorización – familia por familia – de las actividades culturales ancestrales que les han permitido a las familias desarrollar formas complementarias de subsistencia en distintos momentos de sus vidas en el Caribe Sur -antes y durante – del boom del turismo.
“Aunque persiste el mito de que en el Caribe Sur todo el mundo vive del turismo actualmente, esta campaña está contribuyendo a comprobar que históricamente la gente del Caribe Sur de Talamanca ha sorteado situaciones difíciles porque despliega múltiples actividades productivas para vivir en una economía familiar y en el caso de los territorios indígenas, de una economía tribal” dice el fundamento de la iniciativa de los Embajador@s del Mar y sus colaboradoras.
Embajador@s del Mar y sus colaboradoras, en complemento con las personas de los censos de los bancos de alimentos, monitorean y crean el engranaje para que “la distribución de alimentos fluya casi solo sin que toquemos plata ni alimentos, sino solo corazones, conciencias y el enorme caudal de cultura viva del Caribe Sur y territorios indígenas de Talamanca”, dice el comunicado de la iniciativa.
Para ver los ejemplos concretos y fotos: http://escuelabuceocaribesur.blogspot.com/2020/04/campana-de-alimentos-mano-vuelta-caribe.html
Más información llamar al Centro Comunitario de Buceo Embajadores y Embajadoras del Mar al 86581091 o escribir a escuelabuceocaribesur@gmail.com Contacto periodista: María Suárez Toro, Embajador@s del Mar
¿Qué es la Campaña?
Una iniciativa sencilla, solidaria y de subsistencia durante la emergencia para detener epidemia de Coroniavirus, creando un hermanamiento de 8 semanas entre las 10 familias más necesitadas (priorizando adultos mayores y familias jefeadas por mujeres que perdieron sus trabajos), 10 familias que pueden aportarles una bolsa semanal de alimentos para complementar su forma de sobrevivir la crisis. Esto se da mediante almacenes de la economía local que se han dispuesto a recibir el dinero directamente de las familias que aportan mediante depósito a su cuenta. Mediante la lista de las familias receptoras, los almacenes entregan los alimentos semanalmente.
¿Dónde se desarrolla?
En la región del Caribe Sur: Puerto Viejo, Cahuita y Manzanillo, Kekoldi y Bribri, con posibilidad de multiplicarse a otras comunidades de aparecen promotores que la quieran llevar y organizar en sus comunidades.
¿Quiénes la llevan a cabo?
Centro Comunitario de Buceo Embajadores y Embajadoras del Mar con una activista de la Asociación Talamanqueña de Ecoturismo y Conservación (ATEC) y una mano amiga en Manzanillo y otra en Cahuita. Complementa y coordina listas de familias con las campañas de Banco de Alimentos de Puerto Viejo y el de la Comisión de Emergencia en Cahuita.
¿Cómo se organiza?
Cada familia que voluntariamente se hermana con una familia vulnerabilizada por la crisis, envía a un almacén la zona el aporte correspondiente a la bolsa semanal de alimentos. El almacén, apoyado por la coordinación de la iniciativa, entrega semanalmente la bolsa de alimentos a la familia que se le ha asignado. El proceso es monitoreado en forma sencilla semanalmente y por teléfono, por el CCB Embajador@s del Mar.
Al cabo de las 8 semanas se evaluará para valorar la situación, reactivación de sus economías y funcionamiento.
¿Con quiénes?
Cabe resaltar el papel de los almacenes de alimentos que están apoyando decididamente la campaña, disponiéndose a recibir los fondos para cada familia, preparar las bolsas y emitir una boleta para que cada familia retire sus alimentos, así como el aporte de las familias que se hermanan aportando sus recursos propios.
Los supermercados de economía local o nacional se han dispuesto a apoyar decididamente, no solo ayudando en la administración de los desembolsos de las familias colaboradoras sino la confección de las bolsas y hasta donaciones de sus empleados, dueños y gerentes.
Entre los negocios participantes están: Abastecedor Minisuper Arena Blanca, Mega Super de Puerto Viejo y Super Negro Hone Creek y Cocles.
Foto de cabecera: La casa de doña «Chilo» en Manzanillo volverá a ser panadería afro. MST, 2020