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Etiqueta: vacuna

El engaño con una vacuna anti-covid: Lo peor y lo mejor del ser humano

Luis Fernando Astorga Gatjens

No nos hemos cansado de afirmarlo: Las grandes crisis sacan lo peor y lo mejor de los seres humanos. Y esta devastadora pandemia de la Covid-19 nos lo muestra todos los días, en nuestro país y fuera de nuestras fronteras.

La lucha contra la pandemia ha mostrado el inmenso valor de la solidaridad y del profesionalismo de millares de trabajadores y trabajadoras de la salud, y de otras áreas de primera fila de atención y riesgo. Su abnegación, sacrificio y compromiso tenaz con la salud pública, han sido reconocida a lo largo de más de un año de batalla constante.

Empero el 28 de abril anterior en Tres Ríos, sucedió un hecho (que pensamos que es absolutamente aislado) y que puso en evidencia la repudiable conducta de un trabajador de la salud. Ese día en un centro de vacunación de ese cantón cartaginés, un empleado de la Caja pretendió aparentar una inoculación de la vacuna anti-covid, en el hombro de un paciente de 82 años.

Por suerte para el paciente y para las personas decentes de Costa Rica, que somos legión, la falsa inoculación de la ansiada vacuna fue filmada con su celular, por su hijo. Es meritorio que fuera grabado el terrible engaño que se buscaba consumar y, más aún, que el indignado hijo lo compartiera por sus redes sociales. Bien sabemos que estas redes son como dagas, en virtud de que tienen un filo poderosamente democrático y justo, y otro potencialmente dañino, especialmente, por la trasmisión de infamantes noticias falsas (“fake news”). Empero hoy debemos celebrar el hecho de que están jugando un muy positivo y aleccionar papel, al permitir que esta abominable situación hayan podido conocerla millares de personas.

Las preguntas que surgen de inmediato son: ¿A cuántas personas este funcionario hizo lo mismo? ¿Cuántas personas que han acudido a este centro de inmunización, están confiadas de que ya fueron vacunadas y no lo han sido? Y también corresponde preguntarse: ¿Esta gravísima situación representa verdaderamente un caso aislado o bien, se ha podido haber dado en otros centros de vacunación del país?

Ya la CCSS separó a este empleado sanitario de sus funciones. Era lo mínimo para empezar y debía ser fulminante, como lo ha sido, pero es necesario analizar otras dimensiones de lo acaecido ante la extrema gravedad del hecho.

Hay una afectación individual en el paciente que no fue inoculado. Eso también la Caja lo corrigió al reprogramarle la cita. Sin embargo, es necesario ver el problema en varias dimensiones.

Veámoslo:

1) Repercusión social. Es un golpe a la campaña de vacunación, ya que este hecho produce, inevitablemente, incertidumbre entre las personas que ya han sido inoculadas y que termina favoreciendo a quienes llaman a la no-vacunación, con argumentos anticientíficos.

2) Derecho a la salud. De esta manera, también se ve afectado el derecho a la salud pública, por el debilitamiento de la confianza y la credibilidad en un procedimiento vacunal, tan esperado por miles de personas.

3) Afectación institucional. Es asimismo un golpe a la Caja que además de conducir una lentísima campaña de inmunización, ahora por la acción de este funcionario, se incrementan las dudas y sombras en un tema crucial para la salud y la economía del país.

Esperamos que más allá del masivo repudio que ha provocado el hecho denunciado, la inescrupulosa acción de este empleado sea llevada a los tribunales competentes y sea juzgada debida y oportunamente. El hecho debe ser juzgado y resuelto en proporción al daño individual, social e institucional provocado en estos aciagos tiempos, en los cuales el dolor humano y el luto, pueden incrementarse como consecuencia del irrespeto a la vida y la falta de la solidaridad.

Imagen de entrada: CCSS

Un abrazo a los funcionarios de salud

Freddy Pacheco León

Primeramente, la reafirmación de nuestra confianza hacia todo el personal de salud de San Pablo de Heredia (donde nos vacunaron) y hacia la inmensa mayoría de abnegados servidores que, a lo largo y ancho del país, han estado cumpliendo por más de 14 meses con la tarea sobrehumana que ha traído la pandemia. Así como una golondrina no hace verano, así también un extraño hecho irregular no ha de ser utilizado, para denigrar a quienes día y noche han estado presentes en «el frente de batalla» que nos protege, aún ante la amenaza de contagiarse y hasta morir. El ciudadano que aún frente a quien lo estaba filmando, no inyectó los 0,3 cc de la vacuna en el adulto mayor, fue suspendido y está siendo investigado. Por el daño provocado a la persona que confiadamente acudió al centro de salud, y la bien lograda imagen de CCSS, en medio de la suprema tarea por inmunizar a millones de personas, ha de ser sancionado según lo determinen los tribunales.

Lamentablemente, antes de iniciar la investigación para la eventual demanda penal, brotaron con no disimulada satisfacción, los antivacunas, los especuladores, los mensajeros anónimos, los creadores de teorías de conspiración. Personajes que desean denigrar el trabajo que, por razones egoístas, realiza esa gran institución estatal. El culpable fue el señor que cometió un grave delito ¡sin importarle el que estuviere siendo filmado!, y por ello muchas personas de las cerca de 800.000 vacunadas, ahora tienen dudas. Y principalmente los que no experimentaron ni los leves efectos secundarios que algunos tuvimos, como, por ejemplo, un incómodo dolor en el brazo. Dudas que provocan desazón en medio del peor momento de la pandemia, cuando la tensión y el estrés es algo común. Eso, aunque fuere solo eso, es imperdonable, porque, además, inmerecidamente, toca a todo el personal de la Caja que silenciosamente se ha sacrificado y se sacrifica por nosotros. A ellos hemos de darle nuestro apoyo, nuestro abrazo virtual de agradecimiento, nuestra voz de estímulo merecido para que no pierdan el ánimo, ante las «voces del odio» que les atacan con su afán de destruir y provocar el caos. La mayoría del pueblo de Costa Rica es un pueblo noble y agradecido, y les agradece el agobiante trabajo que ahora es precisamente más grande, por culpa de muchos irresponsables incapaces de obedecer las medidas sanitarias conocidas.

La Oposición en Venezuela utiliza la Vacuna de AstraZeneca como Arma Política

Lic. José A. Amesty R.

En estos momentos, la vacuna llamada AstraZeneca ha sido suspendida por varios países de Europa principalmente, así como otros países del mundo, después de reportes de posibles efectos secundarios graves y por las complicaciones que se han presentado a quienes han sido vacunados.

La principal preocupación de estos países se basa en los informes de que algunas personas vacunadas con el antídoto, creado por la farmacéutica AstraZeneca y la Universidad de Oxford, desarrollaron coágulos sanguíneos, sangrado, nivel bajo de las plaquetas.

La suspensión es hasta que la Agencia Europea de Medicamentos, investigue sobre los efectos secundarios sospechosos. No obstante, recientemente la Agencia Europea de Medicamentos (EMA, por sus siglas en inglés) informó de una posible relación entre la vacuna de COVID-19 de AstraZeneca, y unos pocos casos de coagulación de la sangre registrados en adultos que habían recibido la inyección.

Lo cierto es que la Agencia Europea de Medicamentos EMA, aunque afirma que más son los beneficios de la vacuna, y que seguirán investigando, quedan las sospechas e incertidumbres, y varios países están siendo cautelosos y esperan los últimos resultados.

Al margen de los resultados finales en esta diatriba, deseamos señalar cómo la oposición en Venezuela, en contra del gobierno legítimo de Nicolás Maduro y la Revolución Bolivariana, están utilizando esta situación como arma política, veamos…

Primero, ya sabemos que Juan Guaidó con el dinero robado a Venezuela, supuestamente financió la compra de la vacuna AstraZeneca. ¿Con qué intención?

Segundo, la oposición venezolana ha desatado una campaña psicológica y por redes sociales, a favor de la vacuna de AstraZeneca, para que a cualquier lugar la vacuna sea utilizada en Venezuela. ¿Con que intención?

Tercero, la campaña es: “dejen entrar las vacunas”, “el régimen no quiere que te vacunes”, “la elite chavista ya se vacunó”. Esta es la prueba contundente de las malas intenciones de la oposición venezolana, al desear la vacuna de AstraZeneca.

Cuarto, la farmacéutica inglesa-sueca que produce la vacuna llamada AstraZeneca, mantiene un prontuario de irregularidades y fraudes en las últimas dos décadas, cuyo proceder es muy oscuro.

Quinto, se agrega que el mecanismo Covax, el cual busca garantizar vacunas de manera equitativa para todos los países, principalmente los que tienen dificultades financieras, ha sido criticado, ya que solo tiene relaciones con las farmacéuticas occidentales, atraídas por el mercado que asegura la pandemia en términos de salud e investigación científica.

Sexto, además ya desde noviembre del 2020, según estudios de la Universidad Británica de Oxford y la Farmacéutica AstraZeneca, la vacuna desarrollada previene el Covid-19 en un 70,4% de los casos, indicaron resultados preliminares difundidos.

Estos datos contrastan con la efectividad del 95% mostrada por las vacunas producidas por las compañías Pfizer y Moderna. Asimismo, la Sputnik V, arroja una efectividad del 92%.

Con los anteriores puntos y las interrogantes planteadas, es evidente que estamos ante la más cruel y bárbara utilización de la pandemia y el uso de la vacuna de AstraZeneca, para que a toda costa, la oposición tome nuevamente el poder en Venezuela.

No les importa si la vacuna tiene efectos negativos o cause males de muerte. No les importa las múltiples denuncias contra la vacuna. No les importa hacer negocios con farmacéuticas mercantilistas e inhumanas, que solo les interesa la ganancia de dinero como sea.

Lo que les importa a la oposición venezolana, es erradicar la Revolución Bolivariana, llevándose a rastras a cualquier cantidad de venezolanos y venezolanas. Realmente es una actitud miserable y ruin, que será escrita en la historia de Venezuela, como la más despiadada, inhumana e inverosímil.

Aquí la salud es concebida como mercancía, y se encubre la empresa como parte del gran capital farmacéutico global, llamado la Big Pharma.

Por supuesto, Guaidó plantea de forma hipócrita y cínica que es el gobierno bolivariano quien está politizando el tema señalando “primero es la salud del pueblo”, la adquisición de la vacuna es “un paso importante para en los próximos meses hacerle frente al Covid-19. Una vacuna a través del mecanismo Covax, confiable, que podrá atender a seis millones de venezolanos y así brindar una solución a los más vulnerables en medio de esta pandemia”.

Entonces, la intención de presionar para la compra y el uso de las dosis de AstraZeneca, por parte del antichavismo, es de daño humanitario a los venezolanos, al parecer una nueva táctica de Guaidó, para sus fines políticos, en concordancia con el mecanismo Covax instrumento de confusión y agresión a Venezuela.

Para las pantallas internacionales, se entiende que el gobierno de Maduro no aprueba el uso del producto de AstraZeneca por indolencia y “control social” desde una posición dictatorial, cuando la decisión obedece a razones empíricamente científicas, y no se le puede imponer al país por la vía de la presión mediática, una vacuna que está siendo cuestionada por muchos otros Estados en el mundo.

Otros datos sobre AstraZeneca:

  1. Al inicio de la pandemia, ésta se benefició de un laboratorio financiado por el gobierno británico, en la universidad pública de Oxford, para generar una vacuna de acceso libre sin patente y con precios bajos garantizados.
  2. La economista india Jayati Ghosh, cuenta cómo se desarrolló la vacuna de AstraZeneca: La vacuna fue desarrollada en su totalidad por un laboratorio financiado con fondos públicos de la Universidad de Oxford. El modelo de distribución original era para una plataforma de licencia abierta, diseñada para que la vacuna estuviera disponible gratuitamente para cualquier fabricante. Sin embargo, la Fundación Gates, que tenía influencia porque había donado 750 millones de dólares a Oxford para el desarrollo de vacunas, persuadió a la universidad de cambiar de rumbo por completo y firmar “un acuerdo exclusivo de vacunación con AstraZeneca que le otorgaba al gigante farmacéutico los derechos exclusivos y ninguna garantía de precios bajos».

Oxford y AstraZeneca prometieron no obtener ganancias con la venta de la vacuna, pero los detalles se dejaron difusos. Si bien Oxford no recibirá regalías durante la pandemia, posteriormente podría beneficiarse de patentes, incluidas las de Vaccitech, una empresa derivada con fines de lucro.

Mientras tanto, AstraZeneca está cobrando precios diferenciales por sus vacunas enviadas a diferentes países, y algunos países más pobres pagan tarifas más altas. La Unión Europea paga $3,50 por dosis, mientras que Bangladesh paga $4 y Sudáfrica hasta $5,25.

¿Todo lo relatado por Ghosh no suena más bien a estafa?

  1. Y sin embargo es curioso que el fraude haya sido una constante de AstraZeneca, no solo durante estos meses pandémicos, en los que esta empresa se ha visto inmersa en escándalos de corrupta transparencia en los contratos firmados con la Comisión Europea y sobre el retraso y la cantidad de las dosis acordadas con cada país, también en otros periodos de la historia la farmacéutica anglosuiza ha estado en cortes estadounidenses y europeas procesada por delitos más o menos relacionados con lo reseñado.
  2. Una breve búsqueda en la web da cuenta de que en 2003, 2010, 2014, 2018 y 2020 la empresa AstraZeneca, ha tenido que pagar cientos de millones de dólares por casos de fraude, en las que sucesivamente sus representantes han tenido que aceptar la culpabilidad de las causas o han sido hallados culpables en juicio procesal.
  3. Así que no sería la primera vez en que el currículo de esta empresa, se ha visto manchado ante la opinión pública, la impunidad sobre estas farmacéuticas impera como un dogma religioso y seguirán mermando los intereses de la población pobre global, con el ojo puesto sobre el drama lucrativo que inyecta un mercado tan grande como la tragedia pandémica que vivimos.

Solicitud oficial del Sindicato Nacional de Periodistas de Costa Rica, a las autoridades de Salud

SURCOS comparte la siguiente solicitud del Sindicato de Periodistas de Costa Rica a las autoridades de salud referente al desarrollo de un plan de vacunación universal que considere a los/as periodistas trabajadores esenciales de primera línea durante la pandemia:

San José, 10 de marzo de 2021    SNP-048-2021

Doctor Román Macaya Hayes
Presidente Ejecutivo Caja Costarricense de Seguro Social
Máster Daniel Salas Peraza

Ministro de Salud

Estimados señores: Reciban un cordial saludo. Por este medio, les instamos a ustedes como representantes del Gobierno de Costa Rica en el área de salud, para lideren el desarrollo de un plan de vacunación universal que considere a los/as periodistas trabajadores esenciales de primera línea durante la pandemia.

Expresamos nuestra preocupación por la exclusión de los/as periodistas, fotoperiodistas y otros/as trabajadores/as de los medios de comunicación en los grupos prioritarios de vacunación contra el COVID-19.

La inclusión de los/as periodistas entre los grupos prioritarios se justifica por el hecho de que, al igual que otras profesiones, como los/as profesionales de la salud, los/as profesores, la policía o los bomberos, los/as trabajadores/as de los medios de comunicación se ven obligados/as a exponerse al virus por su trabajo, garantizando a todos los ciudadanos el acceso a una información de calidad y de interés público.

La Federación Internacional de Periodistas (FIP) apoya la petición para que los/as trabajadores/as de los medios de comunicación sean considerados como trabajadores esenciales y sean incluidos en los grupos prioritarios en las campañas de vacunación contra la COVID-19.

Debemos tener en cuenta el alto nivel de vulnerabilidad al que están expuestos nuestros/as colegas, que realizan coberturas periodísticas desde potenciales focos de infección.

El Secretario General de la FIP, Anthony Bellanger, declaró: «Desde el comienzo de la pandemia, los/as periodistas han demostrado de forma abrumadora el papel esencial que desempeñan a la hora de informar a sus ciudadanos y luchar contra la desinformación sobre el Covid-19. Los/as periodistas son trabajadores esenciales y así deben ser considerados/as dentro de las campañas nacionales de vacunación contra la COVID-19 en todo el mundo».

Por esta razón y conocedores de sus buenas gestiones es que acudimos ante ustedes, para solicitarles ese importante y necesario apoyo para las personas periodistas. Quedamos atentos a la respuesta.

Licda. Yamileth Alfaro Mora
Secretaria General SNP
Mgr. Gerardo Chavarría Vega

Secretario Adjunto SNP

Vacunas anti-covid: Los reveladores alcances del egoísmo, nacional e internacional

Luis Fernando Astorga Gatjens

La historia ha demostrado que las grandes crisis ponen a prueba la consciencia humana y la solidaridad, en todas sus dimensiones. Y la actual, que padecemos provocada por el coronavirus, ha sometido a tal escrutinio, tanto a países y sus principales líderes, como a personas con poder político o económico, en Costa Rica y otros países de la región. Sin embargo, los resultados indignantemente dominantes han develado el feo rostro de la insolidaridad y el egoísmo humano.

La vacuna para combatir la covid-19 ha estado en el epicentro de una mezquindad que no ha tenido ni límites éticos, ni escrúpulos. Esta vacuna ha sido desarrollada en tiempo récord por algunas pocas industrias farmacéuticas y países, pero como bien lo diagnosticó António Guterres, Secretario General de la ONU, representa un triunfo de la ciencia, pero es un fracaso de la solidaridad internacional.

Más de 200 millones de dosis de vacunas contra la Covid-19 fueron administradas en 107 países y territorios, mientras tanto el 45 por ciento fueron inyectadas en los países ricos del G-7, pese a que sólo albergan al 10 por ciento de la población mundial. Tal es el revelador recuento realizado por la agencia, France Press en semanas recientes. Es por eso que el Gobierno de México, encabezado por Andrés Manuel López Obrador, reclamó recientemente en la ONU tal acaparamiento de los países ricos y la grave brecha existente en la distribución global.

Tan desatinado egoísmo vacunal se ha desatado entonces entre países y dentro de los países. En semanas recientes, han emergido escándalos relacionados con la inoculación de la vacuna en varias naciones latinoamericanas. Ministros de Salud han debido renunciar por haber favorecido a familiares o amigos, sin que les correspondiera vacunarse dentro del plan nacional de vacunación.

Perú, Ecuador y Argentina han estado en el foco de esos escándalos donde el poder político ha abierto la puerta a la corrupción vacunal. Personas de los círculos de poder se brincaron la fila, poniéndose por delante de personas que la requerían por el riesgo de su labor o por la condición relacionada con la edad y otros factores de vulnerabilidad. Es muy probable que esta situación se haya dado en otros países de la región, pero la opacidad informativa la haya ocultado hasta ahora.

Dentro de tal contexto, internacional y regional, es preocupante la falta de información clara y transparente de la CCSS sobre el proceso de vacunación en Costa Rica. Tal y como informó el “Diario Extra”, en su edición del lunes, 8 de marzo, la Caja se ha negado a presentar la lista de personas vacunadas hasta el presente, alegando que no puede hacerlo porque esa información forma parte del expediente clínico.

En una coyuntura política donde la credibilidad de quienes ejercen cargos públicos se ha erosionado de manera tan ostensible, es urgente que esos datos sean sometidos al conocimiento de la ciudadanía. El alegato de orden legal de la Caja (que incluso ha sido refutado por algunos juristas), debe pasar a un segundo plano ante un asunto tan delicado y de enorme repercusión humana, social, política y ética.

Hay que recordar que los ¢ 47.700 millones destinados por el Gobierno dentro del plan de vacunación anti Covid-19, son dineros públicos. La rendición de cuentas entonces no puede postergarse ni un minuto más.

Igualmente, esa información transparente es impostergable, en virtud de la grave denuncia de Unión Médica Nacional (UMN) –también contenida en la nota informativa citada—de “que decenas de funcionarios han sido vacunados contra el coronavirus a pesar de no tratarse de personal médico en primera línea de atención de la pandemia”.

Urge también que la CCSS ofrezca esta información para demostrar que es fiel a sus principios filosóficos de igualdad, equidad y solidaridad, al no inmunizar a personas sin respetar la fila correspondiente al orden definido (por edad y riesgo), por las injustas razones que marcan el poder económico o político de las personas vacunadas.

(8 de marzo, 2021)

#8M2021 ¡Contra el virus del patriarcado y el capitalismo, la vacuna del feminismo y la solidaridad!

8 de marzo de 2021 – Día de las Mujerxs Trabajadoras – Llamado de Acción Global de La Vía Campesina

(Harare 25 de febrero 2021)

Este 8 de marzo 2021, articuladxs en nuestra diversidad, y en una sola voz, afirmamos ¡Contra el virus del patriarcado y el capitalismo, la vacuna del feminismo y la solidaridad!, a la vez que resaltamos el rol fundamental de las mujerxs del campo, y del campesinado en su conjunto, como primera línea en la producción de alimentos agroecológicos y saludables que sustentan la vida, y representan entre el 60 y el 70% de la producción mundial.

Al cumplirse 25 años de la construcción colectiva de la Soberanía Alimentaria, ésta es nuestra vía concreta y sostenible frente a las distintas crisis que hoy vivimos, necesitamos acabar con la violencia sistémicamente del capitalismo y del patriarcado, que hoy vulneran principalmente los derechos de las mujerxs, diversidades, de la niñez, y la clase trabajadora, excluyéndolos incluso, del acceso público y gratuito a una vacuna, que debería ser considerada así como la alimentación un derecho humano. Tal como lo defendemos en nuestro llamado internacional ¡Por el Derecho a la Salud pública y gratuita para todas las poblaciones!

En el mundo el rol político, social y económico de las mujerxs es vital, más aún en medio de esta pandemia, y seguimos recibiendo salarios más bajos, estamos en la informalidad, precarizadas, explotadas, somos migrantes, madres solteras, trabajadoras agrícolas, pescadoras, pastoras, que tenemos menor acceso a la tierra, a la tecnología, y a políticas públicas de salud, protección contra la violencia, educación y cultura. El mayor obstáculo al que nos enfrentamos en el campo es la falta de acceso a medios de producción como la tierra. En el mercado, las mujeres apenas poseemos el 1% de las tierras y aun así tenemos el reto de seguir garantizando la alimentación y cuidado de comunidades, familias y del mundo en condiciones de desigualdad política, económica y social.

En ese sentido, en esta jornada también exigimos a los Estados implementar la Declaración de la ONU sobre Derechos Campesinos y de otras personas que trabajan en zonas rurales (UNDROP, por sus siglas en inglés). Donde se reconoce a las mujeres y al campesinado como «sujetxs de derecho. Esta Declaración de las Naciones Unidas es un instrumento estratégico para fortalecer las luchas y propuestas de los movimientos rurales. Además, sienta una jurisprudencia y una perspectiva jurídica internacional para orientar la legislación y las políticas públicas en todos los niveles institucionales en beneficio de quienes alimentan al mundo.

El modelo del agronegocio imperante está estandarizado por el poder económico de la agroindustria, son las grandes corporaciones multinacionales las que controlan que se va a producir, qué comemos, cuánto comemos y el precio de lo que comemos, hacen lobbys con gobiernos, e incluso con organismos multilaterales, tal como hemos venido denunciando con la Cumbre de la Alimentación organizada por la FAO para este año, y cuyo objetivo es seguir acaparando aún más el mercado de la alimentación. Esta dinámica genera altas ganancias para las corporaciones, y costos gravísimos para la salud de las sociedades y del planeta.

A lo largo de la historia las mujerxs luchamos por ser sujetas de transformaciones, de movilización y concientización, es así que como La Vía Campesina saludamos todas las luchas y compañeras que resisten en la India, Colombia, Chile, Venezuela, Cuba, Kurdistán, Palestina, las zapatistas, las mujeres diversas organizadas en la Marcha Mundial de Mujeres y otras redes amigas, que están participando activamente de los cambios que precisan nuestras sociedades, por justicia y dignidad para las mayorías.

Movilízate:

Este 8 de marzo, como cada Día de las Mujeres trabajadoras, llamamos a nuestras organizaciones miembros, aliados y amigxs a conspirar desde todos los espacios donde estemos, en nuestras comunidades, calles, plazas, mercados, escuelas y trabajos, cuidando de la vida, sigamos denunciando y movilizando conciencias, presionando para que los estados se comprometan con las luchas históricas de las mujerxs de los campos y las ciudades.

¡Contra el virus del patriarcado y el capitalismo, la vacuna del feminismo y la solidaridad!

Envíen sus comunicados, fotografías, videos a lvcweb@viacampesina.org.

¡Amplifica nuestra voz, reproduce y comparte nuestros materiales!

Para descargar afiche oficial 2021 y materiales de comunicación para redes sociales, también puedes hacer tu afiche en tu lengua local encontrarás una versión en blanco, todo disponible aquí.

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BUSSCO: ¿Tráfico de influencias del gobierno en aplicación de vacuna covid-19?

SURCOS comparte el siguiente comunicado de prensa:

¿Tráfico de influencias del gobierno en       aplicación de vacuna covid-19?

El Presidente de la República y el gobierno no debe tener la potestad de resolver si se vacuna o no a los diputados. Esta decisión les compete a las instituciones especializadas en la materia, como son el Ministerio de Salud y la Caja Costarricense de Seguro Social (CCSS).

Sin embargo, podrían existir intentos de violar las autonomías, permitir el tráfico de influencias o favorecimientos debido a vínculos políticos en ambas instituciones. Todo puede pasar en el nombre de la «democracia neoliberal».

En la Caja, el Ministerio de Salud y otras entidades hay miles de trabajadores que no han sido vacunados, a pesar de estar en la primera línea de atención de los enfermos por COVID-19.

«Ha fallecido personal especialista y calificado en la Caja y miles de contagiados e incapacidades por coronavirus, con la subsiguiente perdida de salarios y vacaciones de los trabajadores», detalló Luis Chavarría, secretario general de UNDECA.

Lamentablemente hemos perdido a más de 2.000 ciudadanos a causa de la enfermedad, pero estos valerosos trabajadores del sector salud han salvado miles de vidas humanas y han evitado una mayor catástrofe, como se ha dado en otras naciones del inundo.

Vacunar a la clase política empresarial, antes que a los trabajadores de la primera línea es un acto siniestro, debería n tratar de arreglar las acciones que han llevado a nuestro país al borde de una debacle económica. Es hora de pasarles la factura.

Para más detalle comunicarse con Luis Chavarría, secretario general de UNDECA al 8367-2737.

Tomado del sitio web de UNDECA.

 

Imagen destacada tomada del Blog de Salmon.

Costa Rica posee una variante casi exclusiva del SARS-CoV-2 que aumenta su presencia en el país

  • El Dr. José A. Molina-Mora, de la Facultad de Microbiología de la UCR, explica los detalles y comparte su posición sobre la variante de Londres

Miércoles 27 de enero de 2021. En diciembre de 2020, once científicos de la Facultad de Microbiología de la Universidad de Costa Rica (UCR) y del Instituto Costarricense de Investigación y Enseñanza en Nutrición y Salud (Inciensa) le dieron a la comunidad científica internacional un reporte inédito: en Costa Rica existe una variante del SARS-CoV-2 que aumentó su presencia y que sobrepasó el estándar mundial.

Su nombre es T1117I y se ubica en la espícula (corona) del virus. Si bien esta mutación no hace al virus más letal, contagioso o agresivo, en el reporte de diciembre de 2020 (que analizó los casos de marzo a agosto) y el de enero de 2021 (que añade los casos de septiembre, octubre y noviembre), han ocurrido varios cambios.

Uno de ellos está en la cantidad reportada. En el reporte de diciembre de 2020, la variante T1117I registraba una presencia del 14,5 % en los 138 casos estudiados. Ahora, el reporte de enero de 2021 muestra que esa cifra aumentó a un 29.2 % con los 47 nuevos genomas secuenciados. Este dato supera, y por mucho, la frecuencia internacional que no llega ni al 1 %.

De acuerdo con la base de datos internacional GISAID, una plataforma que promueve la rápida distribución de información relacionada con virus (entre ellos el SARS-CoV-2), Nueva Zelanda, Australia y Bangladesh ya tienen la variante. Sin embargo, al 26 de enero de 2021, las tres naciones han contabilizado menos de dos casos.

Los otros países que también han hecho reportes de la T1117I, pero con casos mínimos, son Chile y Sudáfrica. Pocos países, incluido Costa Rica, han hecho público la existencia de la mutación.

Ahora bien, la pregunta es ¿por qué? ¿Qué posee Costa Rica que no tienen los demás países para tener una variación del virus que incrementa su presencia en el país, cuando en otras naciones no aumentó?, ¿podría esta variante poner en peligro la eficacia de la vacuna?

Para contestar esa interrogante recurrimos nuevamente al Dr. José Arturo Molina Mora, microbiólogo bioinformático del Centro de Investigación en Enfermedades Tropicales (CIET-UCR), de la Facultad de Microbiología, y coordinador del proyecto de análisis genómico del virus desde la UCR.

A continuación, les enviamos un resumen de la entrevista que usted podrá consultar de forma completa en https://www.ucr.ac.cr/noticias/2021/01/26/costa-rica-posee-una-variante-casi-exclusiva-del-sars-cov-2-que-aumenta-su-presencia-en-el-pais.html

  1. ¿Cuántas variantes, en general, han logrado encontrar hasta hoy?

José Molina Mora (JMM): “En la última entrevista le dije que habíamos descrito hasta 15 mutaciones por genoma y que esas mutaciones también se reportaban en el mundo. Al día de hoy, nosotros ya hemos detectado hasta 22 mutaciones por genoma, para un total de 283 diferentes mutaciones en todos los genomas que hemos analizado en conjunto.

Al igual que la vez anterior, no tenemos ninguna asociación de los genomas virales o tipos de virus con la mortalidad. En otras palabras, independientemente de la variante con la que se tenga la infección, por el momento es igual de probable fallecer (o no) por la enfermedad que genera el virus”.

  1. En relación con esta nueva variante, la T1117I de la espícula, ¿cuándo se dieron cuenta de que la teníamos en Costa Rica?

JMM: “En diciembre de 2020 nos dimos cuenta de la T1117I. Cuando se está haciendo el estudio, uno va mutación por mutación para analizar cuál podría ser el efecto. Al encontrar esa variante yo dije: ‘¿qué?, ¡espere un momento!’, y empecé a indagar más.

En el reporte de diciembre, que analizó el periodo marzo-agosto, decíamos que la T1117I en Costa Rica tenía una frecuencia del 14 % en agosto, mientras que en el mundo esa mutación no subía del 1 %, y que es muy escasamente reportada por otros países.

En el gráfico del GISAID vemos que esta variación es muy predominante en Costa Rica. Hay algunos pocos casos en Colombia, y muy pocos en Malasia y Australia.

A enero de 2020 actualizamos la información con genomas obtenidos de casos hasta noviembre y vemos un 29 % de frecuencia en dicha mutación en Costa Rica. Es decir, ya se duplicó en nuestro país en tan solo tres meses.

  1. Entonces, ¿se podría considerar esta variante, la T1117I, como la más frecuente de Costa Rica?

JMM: “No es la más frecuente, pero es la que está aumentando más con respecto a su histórico. Veamos el caso de la variante D614G de la espícula. Al inicio la teníamos en un 95 %, luego 98 % y ahora al 99 %.

Esos porcentajes reflejan que la variante D614G siempre ha sido muy alta y superior al 90 % de las secuencias. Pero esta, la T1117I de la espícula, antes estaba en cero y se mantuvo así por varios meses hasta mayo. Ahora, está aumentando.

Si llega la variante de Londres, por citar un caso, es esperable que suceda un aumento, parecido al que se ha reportado en Inglaterra y Estados Unidos, porque se sugiere que tiene mayor transmisión.

Lo importante aquí es que nosotros estudiamos detalladamente la variante T1117I de la espícula de primero en el mundo ante la comunidad científica. Aunque no tuvimos el primer caso, si hicimos el primer reporte con un incremento sostenido a niveles no observados en ningún otro país. El primer caso estuvo en Alemania”.

  1. ¿Y ya se sabe qué fue lo que propició el origen de esa mutación en Costa Rica?

JMM: “No. Hay muchas hipótesis. Como el primer caso reportado fue en Alemania, una opción es que alguna persona alemana llegara a Costa Rica y trajera esa mutación. Esa podría ser una explicación.

Otra es que pudo haberse originado completamente en Costa Rica a parte de Alemania, Australia y Malasia. Los escenarios son muy complejos.

Lo que sí sabemos es que los genomas que circulan en el país son producto de múltiples introducciones. Una vez me preguntaron, ¿entonces la culpa de que el COVID-19 lo tengamos en Costa Rica es del primer extranjero infectado que vino al país? La verdad no. Él fue un caso, pero hay muchos reportes más de personas que lo trajeron de otros países, incluidos costarricenses.

Al igual que los demás países del mundo, los genomas que circulan son producto de múltiples introducciones de personas de varias naciones”.

  1. Hay un término bastante técnico en el artículo científico que me parece importante rescatar aquí en palabras sencillas, y es el de la oligomerización viral. Este término hace referencia a la forma final que tendrá el virus ¿Acaso la T1117I influye de alguna forma a esa conformación final del SARS-CoV-2?

JMM: “Para explicar de forma sencilla sobre la oligomerización, digamos que usted compra una silla plegable. Usted tiene que armar la silla, acomodarla, abrirla y ponerle tapones. Esa silla, para usted poder armarla, tiene unas instrucciones que le ayudarán a tener una conformación final.

Para verlo desde el virus, sería lo siguiente. Si yo le digo: ‘constrúyame una cama’, pero hay una mutación de una M por una S, en vez de ‘cama’ usted leerá ‘casa’. Esa simple letra (mutación) generará un impacto grandísimo. Usted me dará una casa y no la cama.

También, la letra C puede mutar a una K. En tal caso, se leería ‘Kama’, que si bien está mal escrita con K, se sigue entendiendo que es una cama y no hay un verdadero efecto en el mensaje. Esto es lo que podría pasar con la T1117I.

La variante podría generar una conformación final ligeramente diferente de la espícula del SARS-CoV-2, pero que no propició cambios significativos en el comportamiento del virus”.

  1. Eso explicaría por qué esta variante no convierte al virus en una versión más agresiva, letal o contagiosa. ¿Estoy en lo correcto?

JMM: “Sí. El material genético trae las instrucciones de cómo el virus va a ensamblar su espícula (esos picos que tiene en forma de corona y que es su llave para entrar a la célula humana). La oligomerización le da a la proteína del virus su forma final y la capacidad para interactuar con la célula humana.

Si nos enfocamos en la mutación T1117I, al ubicarse tan abajo, los análisis bioinformáticos nos predicen que es muy probable que no tenga mayor efecto en cómo actúa la molécula con la célula humana. Por lo tanto, no debería afectar ningún cambio en la presentación de la enfermedad”.

  1. ¿Tampoco en la vacuna?

JMM: “Tampoco. Si esta mutación estuviera cerca de los sitios donde se reconocen los anticuerpos, ahí sí sería preocupante porque pondría en riesgo la eficacia de las vacunas. Pero este no es el caso. La mutación, al estar tan lejos, no debería afectar la vacuna.

  1. ¿Y qué podríamos tener de especial las y los costarricenses para poseer una variación del virus que incrementa su presencia en el país, cuando en otras naciones que reportaron la misma variante no tuvieron aumentos significativos?

JMM: “Podría ser algo casual y de comportamiento social, pero también la genética de cada población podría determinar la infección y los factores de fondo. Por ejemplo, ¿por qué la ACE2 (el receptor de la célula humana que le permite al virus la entrada) es tan importante cuando hablamos de pacientes con hipertensión arterial?

Porque hay una serie de tratamientos para la presión arterial que pueden aumentar la cantidad de receptores ACE2 en las células, dependiendo del tipo (alelo) de ACE2 que se tenga.

Entonces, por decirlo así, la persona tiene más puertas para que el virus se pegue y entre. Esto podría tener efectos en la cantidad de virus que se produce o incluso en severidad. Una persona con hipertensión arterial con ciertos tratamientos favorece la producción de estas moléculas ACE2. Es una hipótesis que se maneja incluso para explicar por qué los niños no se enferman como los adultos.

En una población con una alta prevalencia de hipertensión arterial, como el caso de Costa Rica, podría ser una de las razones que influya en el aumento de la transmisión y favorecer así a esta variante. En Costa Rica no se están haciendo estudios de esta índole, entonces es solo una hipótesis”.

  1. Finalmente, Dr. Molina, ¿qué puede esperar la población costarricense en los próximos meses?

JMM: “Lo más importante de esto, que aplica para la mutación de Costa Rica y Londres, es que por el momento ninguna de las mutaciones ha reportando un cambio en la forma en cómo va a dar la enfermedad.

El COVID-19 sigue dependiendo de los factores de riesgo. Hay que seguir tomando las medidas. También, que indistintamente si a mí me va a llegar la versión GH, GR o G del virus, debemos prevenir la infección desde el punto de vista individual y colectivo, en especial las personas de alto riesgo.

Nosotros desde la UCR y el Inciensa, vamos a seguir detectando mutaciones, pero esto seguramente no nos va a cambiar las normas para controlar el virus.

Ahora bien, desde el punto de vista de su frecuencia, es probable que la variante siga aumentando. Es completamente esperable tener otras mutaciones que aumenten y que alguna mutación, o su acúmulo, genere un cambio. A largo plazo se espera que las variantes atenúen el virus, pero eso no quita que pueda aparecer alguna mutación que complique la transmisión, severidad o tratamientos”.

 

Foto: Dr. José Molina Mora. Microbiólogo bioinformativo. Facultad de Microbiología, UCR. Foto: Laura Rodríguez, UCR.

No necesitamos héroes

Esteban Beltrán Ulate
Profesor
esbeltran@yandex.com

No podemos tener un héroe de paz porque la paz es una aspiración, es in ideal, es el horizonte que debemos aspirar como humanidad. La paz no es un anhelo personal, es un anhelo que debe sentirse en comunidad. No podemos tener un héroe de paz, porque la historia del héroe esta cargada de muchos discursos del pasado, el héroe no habla del pasado, mientras que la paz nos viene del futuro. No hay paz en el pasado, no hay paz en el presente, solo esperanza de un futuro con un cielo para todos, con una tierra sin fronteras, con pan y agua, palabra y amor para cada niño y niña que nace.

No hay paz cuando se manipula la historia para inventar falsos ídolos, no hay paz cuando se manosea el código trabajo para hacer las horas más largas y los salarios más pequeños. No hay paz cuando los vicarios de la economía dictan al oído de la educación y la salud los pasos que deben dar. No hay paz mientras apaguen las voces de los pueblos originarios que claman por una ecología integral, no hay paz mientas la violación y la muerte sean sinónimo de muerte de mujer. No hay paz mientras vivamos en una sociedad colonialista, patriarcal y capitalista; no hay paz mientras los gobiernos disputen la verdad frenando la libertad de prensa. No hay libertad mientras no exista una vacuna contra la corrupción.

No necesitamos esos héroes de paz falsificados, es imposible callar las voces del ayer que muestran la violencia en manos de intereses vanidosos por administrar el poder de gobierno. No necesitamos ídolos que digan a nuestro niños y niñas como debe forjarse un pueblo. Son muchos los mitos en los que vivimos como costarricenses, a lo largo de la historia de nuestra nación, hemos construido una caverna colmada de fantasías, una caverna que no permite que veamos más que sombras, ahí olvidamos nuestros océanos, nuestros bosques, incluso a nuestro prójimo.

Pero la historia también tiene fisuras, la historia se puede escribir y leer de muchas maneras, por eso, incluso en medio caverna que los poderes políticos dominantes han construido bajo la tienda de campaña de los últimos tres partidos en el poder, la ciudadanía puede negar sus ídolos, dar la espalda a la mentira y caminar hacia la verdad, que habita en el horizonte.

No necesitamos héroes, necesitamos las manos abiertas de nuestros compatriotas, aquellos que comparten el pan de la justicia y la igualdad. No necesitamos de figura mesiánica que se presente como el absoluto salvador, necesitamos de una humanidad dispuesta a transformarse y transformar la sociedad en la que vivimos, dispuestos a todo, por una vida digna, donde el pan, el techo, el agua, el aire, todo sea todos, para nuestras generaciones y para las venideras.

¡Mejor encerrados, que enterrados!

Vladimir de la Cruz

La gran discusión en torno a los impactos de la Pandemia en los países, como Costa Rica, es cuánto se debe cuidar a las personas, para que no se contagien y mueran, sean niños, adolescentes, ciudadanos, adultos, adultos mayores, adultos de la tercera edad, los “de oro”, viejos para decirlo mejor, y viejos viejos como los hay en Costa Rica, mujeres, hombres y de cualquier género con que la persona se identifique. Todos los viejos desde los adultos mayores para arriba todos son considerados de “riesgo” y “de alto riesgo”, entre ellos el que esto escribe con sus 74 años.

La Pandemia está generada por un virus que apenas se está conociendo, y por ello, experimentando tratamientos para detenerlo en su expansión, y para evitar el aniquilamiento que produce sin distinción geográfica, sin distinción de países y sin distinción de sectores sociales, desde los más pobres, los más afectados, hasta los más ricos, quizá los menos afectados.

La afectación por sectores sociales no la conocemos estadísticamente. Los informes diarios que se dan no lo destacan, más que indirectamente, por la concentración de casos en poblaciones, cantones, o barriadas de gran densidad, donde a la fuerza se vive en condiciones limitadas de espacio, de hacinamiento, en tugurios, covachas, chinchorros, cuarterías, con malas, débiles, escasas y ausentes atenciones de servicios públicos, como electricidad, agua, alcantarillados, control de aguas negras y excretas, obligados a desplazarse más apretadamente en buses, por el control y la prohibición de movilización en autos, por la ausencia de espacios sociales para reuniones familiares o de amigos. Tampoco se destaca la composición geográfica de los extranjeros infectados en Costa Rica, para evitar quizá expresiones xenofóbicas, y eso está bien.

El esfuerzo supremo, a nivel mundial, es lograr la vacuna en el más corto plazo posible, y sabemos que esa vacuna en sus efectos reales puede llevarse varios meses, incluso varios años, más en producirse con todos los reconocimientos científicos y mundiales del caso. Varios países compiten en este esfuerzo. El Presidente Trump, en su delirio, ofrece comprar monopólicamente las primeras vacunas que se produzcan solo para la población de Estados Unidos…lo que parece más un discurso electoral hacia noviembre de este año. El Presidente Ruso, Vladimir Putin, ayer nos dio la noticia de que ya Rusia la desarrolló, y está en su etapa final, habiéndola experimentado incluso con una hija suya.

Aún con vacuna no se va a detener el coronavirus…va a seguir conviviendo con nosotros en Costa Rica, y en todo el Planeta, como siguen existiendo virus, bacterias y otros microorganismos patógenos, para los cuales hay vacunas, y virus, bacterias y otros microorganismos para los que todavía no las hay, pero hemos aprendido a vivir con ellos, algunos como amigos y otros como enemigos de nosotros, los seres humanos.

En Costa Rica se hacen esfuerzos científicos muy importantes, con reconocido ámbito internacional, por parte de los trabajadores y científicos del Instituto Clodomiro Picado, de la Universidad de Costa Rica.

Parte de sus avances, 80 frascos producidos de este suero, ya se están usando, con resultados positivos, con enfermos a quienes se les están suministrando los avances de estas investigaciones, que es el suero equino desarrollado como un posible tratamiento contra el Coronavirus, lo que se probará en su eficacia, en 26 personas, para combatir este Coronavirus. De la eficacia de su resultado se aplicará a los pacientes hospitalizados con síntomas graves.

La investigación que se está impulsando en el Instituto es con dos tipos de sueros resultantes de cuatro proteínas del virus.

Mi merecido reconocimiento a los funcionarios, desde los que cuidan los caballos hasta los científicos del Instituto Clodomiro Picado, en el 80 aniversario de la fundación de la Universidad de Costa Rica, con más de 50 años de existencia del Instituto, oficialmente establecido el 13 de abril de 1970, pero que ya existía desde principios de los 60s. y gestado desde los trabajos realizados por el Dr. Clodomiro Picado Twight, cuando impulsaba sus estudios desde el Laboratorio Clínico del Hospital San Juan de Dios.

En aquellos años de los 60s. recuerdo incluso un experimento que realizó un militar norteamericano, que colaboraba en ese Instituto, Herschel Flowers, Mayor del Ejército de los Estados Unidos, que mató a casi todos los caballos, percherones, que se tenían en el Instituto para la elaboración de los sueros. En la Universidad, cuando estudiaba, hicimos las protestas y denuncias del caso.

No solo sueros antiofídicos se producen en el Instituto Clodomiro Picado, que benefician hoy al país, a todo Centroamérica y a otros países del continente, y del mundo. Me consta. Cuando fui Embajador en la República Bolivariana de Venezuela desde el Instituto Clodomiro Picado se contribuía generosamente con instituciones como la Cruz Roja y el Cuerpo de Bomberos Venezolano, especialmente del Estado de Zulia, con el envío de sueros, incluso especializados para Venezuela, no solo antiofídicos, sino también para atender picaduras de otros animales venenosos, arañas, alacranes etc. Igualmente, se realizan antivenenos que se envían a Papúa, al África subsahariana, a Taiwán, a Guinea y a Sri Lanka.

En el Instituto se reúne Ciencia, Tecnología, Pensamiento científico y salubrista nacional. Las picaduras de serpientes se consideran un serio problema de salud pública, que producen muerte o secuelas permanentes. Parte de la proyección del Instituto es también en el campo veterinario.

Con el desarrollo del Instituto también se ha contribuido notablemente en el estudio de las serpientes venenosas de Costa Rica, sobre la composición de los venenos, sobre su composición proteica, y sobre el aislamiento de las toxinas y sus mecanismos de acción. Mucho del trabajo se orienta a la búsqueda de las sustancias con capacidad de inhibir la toxicidad de los venenos de serpientes y de otros animales venenosos.

Entre las preocupaciones científicas que se atienden en el Instituto Clodomiro Picado están los estudios de los efectos de las toxinas producidas por bacterias como la Anaerobia Clostridium Perfringens, las de la Brucella, y recientemente se han abocado a ver como se detiene el Coronavirus COVID 19, en su infección patógena.

Los campos, entre otros, que se atienden en el Instituto Clodomiro Picado, para su trabajo científico, son los antivenenos, la inmunobiología, la microbiología, la biología tumoral, la biología molecular, el clonaje y la expresión de ADN que codifica toxinas de venenos, el cultivo de células, la bioquímica, la toxicología, las antitoxinas, el plasma equino y el humano, éste último con atención especializada hoy hacia el combate contra el COVID 19.

Se trabaja intensamente en la búsqueda de nuevos productos como vacunas, en el desarrollo de antitoxinas y derivados de plasma humano.

El equipo profesional del Instituto es de lo más destacado del país, con formación y experiencia internacional, hoy uno de nuestros baluartes más importantes, junto al Ministerio de Salud y la Caja Costarricense del Seguro Social, y su sistema hospitalario nacional, en la lucha contra el Coronavirus.

En esta lucha, el plasma contra el Coronavirus que se ha desarrollado en el Instituto señala que inhibe el virus, el Coronavirus SARS-COV-2, que produce la enfermedad de la llamada Pandemia del COVID-19, plasma que es desarrollado con sangre de caballo, a partir del plasma de caballos, hiper inmunizados con proteínas virales, lo que ha permitido obtener los anticuerpos equinos que neutralizan este agente patógeno, bloqueando la entrada del virus en las células humanas.

El Instituto ha señalado, hasta hoy, que el medicamento puede ser muy eficiente para tratar a los pacientes.

Desde que inició la Pandemia en Costa Rica, desde marzo, la Caja Costarricense del Seguro Social y la Universidad de Costa Rica, ambas instituciones creadas en la Administración Calderón Guardia, hace 80 años, unieron sus esfuerzos colaborativos e investigativos para atender esta emergencia nacional. A ellos se sumó el Centro Nacional de Defensa de Enfermedades Infecciosas de la Universidad George Mason de Estados Unidos, que tiene el instrumental científico de bioseguridad más alto de ese país, que apadrina los resultados logrados en el Instituto Clodomiro Picado.

El plasma obtenido en Costa Rica de caballos es 100 veces más potente que el plasma de humanos. Merecen, me parece, gran reconocimiento nuestros caballos, seis, y el cuido que se tiene de ellos, que se han usado para este fin, así como la sangre de caballos, trabajada en el Instituto. Esperemos, que en este momento, no se vuelva a producir otra tragedia como la que ocasionó el Mayor Flowers.

Hasta ahora se avanza con bastante seguridad en este éxito científico costarricense, de las inmunoglobulinas equinas, tratando de garantizar el control de su calidad.

Lo que en el Instituto se ha logrado no es una vacuna, es un producto que contribuirá a bajar la carga viral para superar el contagio, es un fármaco que baja la efectividad del virus en el cuerpo de quienes se han contagiado, con mayor posibilidad de salvar sus vidas.

El avance científico logrado en el Instituto Clodomiro Picado ha sido declarado, como correspondía, de interés público y nacional por el Presidente Carlos Alvarado Quesada, que compromete también a INCIENSA, en “desarrollar, producir y validar la efectividad terapéutica de dos medicamentos para el tratamiento de pacientes con COVID19 y mejorar la atención de la pandemia que afecta la salud de la población costarricense”.

Por su parte, la Ministra de Ciencia, Tecnología y Telecomunicaciones, Paola Vega Castillo, señaló que “el Covid-19 nos recuerda que poner los ojos en la búsqueda de soluciones a través de la ciencia, es ponerla al servicio de la humanidad. Nuestros científicos han demostrado que la mejor decisión que el país puede tomar hoy es tomar la ciencia para luchar contra esta pandemia”.

Mientras tanto, ¿qué hacer?, ¿qué medidas tomar frente a la Pandemia?

Hay que atender con la mayor rigurosidad, disciplina y voluntad posible las instrucciones que da permanentemente el Ministro de Salud Pública, Dr. Daniel Salas, y los altos funcionarios de la Caja Costarricense del Seguro Social, especialmente su Presidente el Dr. Román Macaya, en correspondencia con las directrices internacionales de la Organización Mundial de la Salud, que recoge a la vez la experiencia de muchos países, y sobre la base de nuestra propia práctica social y experiencia que vamos desarrollando en la lucha contra el Coronavirus.

Las medidas que se deben atender y seguir, de carácter general, las básicas, son:

1.- cubrirse siempre la boca y la nariz, con pañuelos desechables al toser o estornudar.
2.- no escupir
3.- botar en los recipientes de basura los pañuelos desechables
4.- usar “bozales” de tela, o mascarillas que tapen la boca y la nariz al estar siempre en sitios públicos.
5.- guardar distancia “social”, de 1.8 metros respecto a otras personas
6.- lavarse las manos cada vez que se tocan sitios públicos que pueden haber sido tocados por otras personas, entre ellos objetos de uso colectivo, carritos de cargar mercaderías en supermercados o tiendas.
7.- usar viseras o anteojeras
8.- usar mascarillas que tapen bien la cara, en boca, nariz y barbilla
9.- guardar las mascarillas en bolsas plásticas cuando no se usen
10.- lavar la mascarilla con agua y jabón o detergentes
11.- no usar mascarillas que dificulten la respiración
12.- no compartir mascarillas con otras personas
13.- evitar los saludos dándose la mano, dándose un beso, abrazándose
14.- saludar gestualmente con las manos o tocándose con los codos
15.- buscar atención médica si se tiene fiebre, tos o dificultad para respirar
16.- frente a los encierros solicitados o impuestos por las autoridades sanitarias hay que desarrollar comprensión, tolerancia y atención a todo el conjunto familiar
17.- explicar a las personas dentro del hogar el significado e importancia de las medidas que se están tomando, y asumirlas como hábitos de comportamiento
18.- lavarse las manos después de tocar animales o mascotas
19.- no poner a niños menores de dos años mascarillas
20.- evitar estar en aglomeraciones o concentraciones humanas o en espacios cerrados con muchas personas
21.- proteger a las personas mayores y a los viejitos de todas las familias
22.- ir a los centros hospitalarios o de salud solo en caso necesario
23.- acudir a los EBAIS y clínicas de salud inmediatamente ante sospechas de tener síntomas del Coronavirus
24.- limpiar regularmente en las casas, y sitios públicos, todas las superficies de contacto frecuente, mesas, perillas de puertas, inodoros, teléfonos etc.
25.- lavar bien la ropa
26.- atender, acatar y obedecer las instrucciones públicas del Ministerio de Salud relacionadas con la atención de actividades de concentración masivas, y de permisos sanitarios de funcionamiento de locales donde se atiende público

El uso de estos materiales y medidas está orientado a proteger e impedir la propagación del COVID-19. Cuando una persona se protege está protegiendo a las demás. El protegerse es una medida de prevención a favor de quien se protege, de uno mismo.

El Coronavirus es una enfermedad que ataca severamente las vías respiratorias, por eso las distancias de 1.8 metros. Este virus se propaga de persona a persona, por ello es el cuidado que hay que tener.

El Gobierno de la República hace bien en tratar de proteger la vida de todos los habitantes de Costa Rica. Nuestro sistema de Seguridad Social históricamente ha cubierto a la población más débil, económicamente más frágil.

Originalmente, a finales del siglo XIX, los seguros sociales se desarrollaron en Europa para atender y asegurar la salud y la vida de los trabajadores, para, igualmente, asegurar la reproducción de la fuerza de trabajo. De eso se trata en la actual Pandemia, asegurar la vida de los trabajadores, y de sus familias.

La atención de salud, en Costa Rica, no se le niega a nadie por su extracción popular. Los trasplantes de corazón aquí se han hecho a personas de escasos recursos, pobres, que en otros países hubieran estado condenados a morir por falte de ese trasplante. Pero sí se puede negar atención hospitalaria si el número de contagiados y personas en Unidades de Cuidados Intensivos sobrepasa la capacidad de atención que tiene el sistema hospitalario nacional. De esta posibilidad no escapan ni pobres ni ricos… si no hay campo hay que morir en la casa…así de simple. El que tiene plata y seguros médicos le atenderán en hospitales privados mientras la cobertura del seguro lo permita… así funcionan los seguros médicos.

La seguridad social en Costa Rica no es medicina exclusiva para ricos, al contrario, es medicina para el pueblo, para los trabajadores y sus familias.

La Seguridad Social y la Salud Pública en esta lucha contra la Pandemia del Coronavirus es para proteger la salud de todos los costarricenses y de quienes habiten nuestro territorio nacional.

Cuando el Obispo de Tilarán clamó, no al cielo, y reclamó a los costarricenses, que no acatan las disposiciones sanitarias impuestas por las autoridades de Salud, hizo lo correcto. Su mensaje fue contundente, “si quiere matarse mátese, pero no mate a los demás”, señaló vehementemente que estamos en la obligación de cuidarnos para no contagiar o enfermar a otros… No fue una invitación al suicidio, fue un llamado a no matar personas…actuando como francotiradores…

Cuando las autoridades de salud convocan al encierro de las personas, y de las familias, nos mandan un mensaje también muy contundente: ¡es mejor encerrados, que enterrados!

La vida vale, la vida de un costarricense vale, la vida de todos los costarricenses es lo mejor y lo más preciado de Costa Rica. La vida de cada costarricense es una historia personal, familiar y social que debemos preservar, recordar.

La vida de los pueblos se mantiene con la memoria del recuerdo. Si recordamos no olvidamos. Recordar es volver a vivir. Por su origen latino el recuerdo se asocia al corazón, a tener a los seres queridos en el corazón. También a conocer el pasado, como memoria histórica, para mejorar el futuro.

Recordamos las endemias, las epidemias y las pandemias que han tocado, en el pasado, nuestro suelo patrio y nos sabemos vencedores de ellas. Así va a suceder con esta Pandemia del Coronavirus, pero tenemos que poner de nuestra parte lo que nos corresponde.

El Ministerio de Salud Pública, la Caja Costarricense del Seguro Social y el Instituto Clodomiro Picado velan por nuestra salud.

Bíblicamente hay tiempo para vivir y tiempo para morir.

Terrenalmente nuestro tiempo es para vivir y, ojalá, de la mejor forma posible.

A la Pandemia y al Coronavirus los derrotaremos, pero necesitamos la vida para lograrlo.

¡Es mejor encerrados, que enterrados!