UCR: La Academia demanda una adecuada atención para las mujeres embarazadas durante la pandemia
Expertas le recuerdan al Estado su responsabilidad de velar por los derechos reproductivos de esta población
De cara al riesgo de un colapso hospitalario debido al incremento de pacientes con COVID-19 en el país, el Observatorio de los Derechos Reproductivos de la Universidad de Costa Rica (UCR), le recuerda al Estado que las necesidades de salud de las mujeres embarazadas son impostergables.
Este proyecto, vinculado al Centro de Investigación en Estudios de la Mujer (CIEM), desarrolla una campaña en redes sociales, por medio de la cual informa a esta población sobre sus derechos reproductivos y llama a las autoridades sanitarias a velar por su adecuada atención en el marco de la pandemia.
La coordinadora del Observatorio, la Dra. Gabriela Arguedas Ramírez, afirmó que el Estado costarricense tiene la responsabilidad de mantener la atención de las mujeres embarazadas, en periodo de parto y posparto, como un grupo prioritario en medio de cualquier contexto.
Según la académica, la Caja Costarricense de Seguro Social (CCSS) y el Ministerio de Salud deben buscar alternativas de organización, que les permitan continuar brindando un servicio de calidad para evitar que “el costo de la pandemia lo paguen las mujeres y adolescentes embarazadas”.
Un servicio inadecuado a esta población podría generar un aumento de la mortalidad materna y neonatal o bien, de la morbilidad materna, que corresponde a secuelas físicas y mentales experimentadas como resultado de complicaciones en el embarazo, parto o postparto.
“Es comprensible que todas las necesidades de atención de salud se hayan visto afectadas por la pandemia, pero la situación no puede dejar desprotegidas a poblaciones como las mujeres embarazadas ni causar que se les dé una atención de menor calidad”, aseguró Arguedas.
En medio de la actual pandemia, el Observatorio vela por el cumplimiento de los derechos reproductivos de las mujeres y, por tanto, le recuerda al Estado las obligaciones que ha suscrito en virtud de los marcos internacionales de derechos humanos.
“Es indispensable mantener una alerta constante, llamando la atención de las autoridades sanitarias sobre las necesidades de salud de las mujeres, para que entren en la agenda prioritaria, sobre todo cuando estamos hablando del embarazo, parto y postparto”, enfatizó la investigadora.
El contexto incrementa los riesgos de vulneración
El Observatorio también alerta sobre los factores contextuales que podrían incrementar el riesgo de vulneración de las mujeres en periodo de embarazo, parto y posparto, al tiempo que señala la importancia de sensibilizar al personal de salud que las atiende.
Según la experta, el alarmante panorama que se pronostica para el país en los próximos meses, como resultado de la pandemia, demanda que la CCSS desarrolle planes de contingencia y defina los procedimientos para brindar la mejor atención posible a este grupo.
Sumado a lo anterior, la académica señaló la necesidad de facilitar al personal de salud la información actualizada y el conocimiento que se ha ido generado sobre el COVID-19 en otros países y, de esta forma, evitar errores en la atención de las mujeres embarazadas contagiadas con el virus.
“Este es un llamado de alerta respecto a la forma en que el contexto de la pandemia pone en riesgo y vulnera a estas mujeres. Sus necesidades no se pueden postergar o reagendar, su atención debe darse de manera adecuada”, concluyó la coordinadora del Observatorio.
Andrea Méndez Montero
Periodista, Oficina de Divulgación e Información