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Etiqueta: cultura

UCR: Etnia ngäbe, guardianes de un patrimonio cultural vivo y en transformación

Las mujeres ngäbes han sido clave en la conservación de su patrimonio cultural. Ellas son las que generalmente se encargan de la elaboración de los vestidos tradicionales y de otras artesanías. Foto: Laura Rodríguez Rodríguez, UCR.

El resguardo de su patrimonio cultural es uno de los principales valores de la etnia ngäbe, junto con su incidencia política para lograr mejores condiciones de vida.

El pueblo indígena ngäbe destaca por su colorido arte, que incluye objetos como las chaquiras, las chácaras, los mastates (corteza de árbol que se trata hasta hacer una especie de tela sobre la cual se pintan diferentes figuras) y los sombreros. También resaltan los vestidos tradicionales que confeccionan las mujeres para su uso diario, los cuales son conocidos popularmente como naguas.

Estos últimos son una de las expresiones culturales más destacadas de la identidad y del patrimonio ngäbe. Los vestidos tradicionales son elaborados con telas lisas, a las cuales las mujeres les colocan coloridas aplicaciones geométricas triangulares o lineales.

Según expresa la diseñadora ngäbe Raquel Palacios Ruiz, la mayoría de estas figuras geométricas o lineales de los vestidos tradicionales están inspiradas en elementos de la naturaleza y específicamente simulan los colores de las serpientes.

Los diseños varían según el gusto de las mujeres, aunque aún se mantienen aspectos del concepto de vestido tradicional, tales como el tipo de corte amplio y el cuello de las prendas.

Estas prácticas culturales (la elaboración de los vestidos, chácaras, pulseras y collares) se transmiten de una generación a otra, gracias al aporte y el trabajo de las mujeres. Por su parte, los hombres de la etnia se encargan de preservar otras costumbres, como la elaboración de los sombreros, de enseñar la religión y de educar sobre la medicina tradicional.

Actualmente, estas tradiciones no solo les permiten a las personas ngäbe visibilizar y fortalecer su cultura, sino también tener la oportunidad de vender algunos productos artesanales y así aportar con su trabajo a la economía familiar y comunal.

En este último punto, el Dr. Pablo Ortiz Rosés, médico que ha trabajado durante más de 35 años con la comunidad de La Casona, resalta que el concepto que tenemos las personas no indígenas sobre las artesanías ngäbe es equívoco, ya que en realidad se constituyen como objetos de suma importancia para el quehacer y el estilo de vida de esta etnia.

“Estos objetos, por ejemplo, las chácaras, son usadas por los ngäbes para tener a sus bebés, las usan como cunas o para cargar objetos pesados como la leña. Los mastates son una forma de expresión. En fin, para nosotros son una artesanía, pero para ellos son parte de su forma de vida, les son de utilidad para su diario vivir”, afirma Ortiz.

Ahora, los ngäbes “han optado por vender una parte de lo que elaboran, primero porque tienen muchas habilidades para hacerlos y porque alguna gente se los pide, pero sobre todo para poder generar dinero para comer y sobrevivir”, porque este pueblo indígena “no tiene incorporado en su cosmovisión el concepto de comercio, tal y como nosotros los no indígenas lo entendemos”, agrega.

Creatividad y complejidad técnica

Cada uno de los diseños de los vestidos, las chácaras, los sombreros y las chaquiras ngäbes son irrepetibles y únicos, ya que su conceptualización nunca fue plasmada en un molde o en papel.

Cada persona artesana imagina las figuras en su mente y las realiza directo en el material de soporte durante el proceso de elaboración.

Esto hace que el aprendizaje del arte ngäbe sea complejo, ya que se da por medio de los mecanismos de tradición oral y de observación. De esta manera, las personas más jóvenes aprenden a elaborar estos artículos de uso diario, viendo y practicando junto a sus progenitores y familiares más cercanos.

Por esta razón, el valor y riqueza cultural del arte ngäbe es incalculable, ya que se trata de piezas exclusivas y únicas, a las cuales se les suma el hecho de estar inspiradas en una cosmovisión de cuidado, amor y respeto hacia la tierra y la naturaleza.

La M. Sc. Ana Patricia Rojas Hernández, arqueóloga de la Sede del Sur de la UCR y reconocida por su trayectoria en el resguardo del patrimonio cultural de diferentes comunidades indígenas, explicó que la comunidad ngäbe se caracteriza por elaborar artesanías, en las cuales los trazos de las figuras geométricas se realizan con alto grado de pericia y complejidad.

“Tanto los vestidos como los bolsos, los collares y las pulseras ngäbe son siempre de colores muy vistosos y sus combinaciones son muy hermosas. Los motivos geométricos, triangulares y lineales son elementos que también se encuentran en la cerámica precolombina y que precisamente responden a su cosmovisión sobre la naturaleza, en donde la figura de la serpiente tiene un rol fundamental”, explica Rojas.

En cuanto a la forma de conceptualizar y ejecutar la técnica, la arqueóloga comenta que sin duda tiene un alto grado de complejidad, ya que los artesanos piensan el diseño y lo van haciendo sobre la marcha, por lo que la forma de preservar la tradición es precisamente interactuando y viendo cómo se hacen los productos.

Rojas señaló que el rol de la UCR ha sido fundamental para reconocer y contribuir a preservar el legado cultural de la etnia ngäbe, más aún en cuanto a la generación de espacios de intercambio y de aprendizaje, en los cuales se promueve la importancia de la diversidad y el rescate de la riqueza cultural e histórica de las comunidades indígenas.

El arte ngäbe se transmite de una generación a otra, por medio de mecanismos de tradición oral y de observación. Foto: Laura Rodríguez Rodríguez, UCR.

Esta labor de dicha institución se realiza por medio de varios proyectos de docencia, acción social y de investigación de las diferentes sedes universitarias y unidades académicas, entre las que destacan la Escuela de Antropología, la Vicerrectoría de Acción Social, la Facultad de Odontología, la Escuela de Salud Pública y la Sede del Sur.

En el caso del patrimonio cultural ngäbe, la Sede del Sur, por medio del proyecto Golfito Cultura y Más, ha impulsado diferentes espacios educativos y de interacción en las comunidades indígenas, mediante los cuales se incentiva el aprendizaje sobre este acervo cultural en las personas más jóvenes.

“Para la UCR ha sido muy importante impulsar junto con las comunidades ngäbes diferentes procesos de interacción intergeneracional, en donde los adultos enseñen a los niños, así como facilitar espacios de encuentro y de intercambio para empoderar a las comunidades en el reconocimiento de su valor identitario y de su patrimonio cultural, con el fin de que esa riqueza y diversidad cultural no se pierda”, sostiene Rojas.

Para la investigadora, además de su llamativo arte, los ngäbes constituyen una de las comunidades indígenas de Costa Rica que ha logrado conservar gran parte de su cosmovisión a pesar de los procesos de penetración cultural.

“Ellos han mantenido, en la medida de lo posible, su cultura, a pesar de que actualmente existen procesos de aculturación muy fuertes. Es muy propio de ellos haber conservado su forma de pensamiento y de entender el mundo, por ejemplo, sus creencias, sus formas de vestir, sus formas de contar, su lengua, su gastronomía y principalmente el hecho de sentirse parte de un sistema más grande que lo es todo: la naturaleza”, amplía.

Ortiz opina que uno de los retos más grandes, en materia de resguardo del patrimonio cultural ngäbe, es lograr articular esfuerzos para que exista una política nacional que guíe las labores de la institucionalidad en este tema, con un enfoque de diálogo, de escucha y de aprendizaje mutuo.

“Hemos intentado ayudar a las comunidades ngäbe desde diferentes instituciones como la academia, la Caja Costarricense de Seguro Social y las organizaciones sociales, pero desde nuestra propia concepción de éxito y de progreso. Esto se refleja en múltiples proyectos y acciones que se han tratado de implementar con muy buenas intenciones, pero sin conocimiento y respeto de la cosmovisión de los ngäbes”, advierte.

En su criterio, “aún no hemos logrado entender que, si queremos ayudar, debemos hacerlo desde la escucha activa, el diálogo y el aprendizaje mutuo, en un modelo donde estas comunidades más bien nos enseñen cómo es que, desde su forma de entender el mundo, ellos han logrado solucionar sus principales necesidades de sobrevivencia. Y ahí, desde ese punto de partida, ver cómo nosotros podemos aportar”, manifiesta el profesional.

Empoderamiento comunal

El amor y respeto por la naturaleza forman parte de los valores más destacados de la cosmovisión ngäbe, así como el empoderamiento de las mujeres para mejorar las condiciones de vida de sus comunidades. Foto: Laura Rodríguez Rodríguez, UCR.

El resguardo de su patrimonio cultural es uno de los principales valores de la etnia ngäbe, aunque no es su única fortaleza. También han surgido y se han fortalecido otras características, tales como el liderazgo político de sus mujeres y el empoderamiento comunal para la búsqueda de mejores condiciones de vida.

Así describe la situación actual de este pueblo originario la Dra. Carolina Quesada Cordero, antropóloga de la UCR, quien ha estudiado a la comunidad ngäbe de Abrojo Montezuma, a través de diferentes proyectos de acción social y de investigación.

Desde su perspectiva, las mujeres y hombres de este pueblo no solo se han preocupado por resguardar sus tradiciones y costumbres, sino que también se han interesado en ocupar espacios de incidencia política que les permitan mejorar el acceso a la salud, la educación, al agua, en fin, a mejorar sus condiciones de vida.

“Es importante destacar que el hecho de que sean tan cuidadosos en mantener vivas sus tradiciones y costumbres no quiere decir que no estén deseosos de avanzar para tener mejores condiciones para su comunidad”, destaca Quesada.

Actualmente, el acceso a la salud y al agua, el mal estado de las calles, así como las pocas oportunidades laborales y de subsistencia son parte de los desafíos estructurales que enfrenta la población ngäbe. Estos últimos aspectos son los principales motivos por los cuales una parte de ellos se moviliza para trabajar temporalmente en la siembra y recolección de café.

Gracias al empoderamiento e incidencia política, principalmente de las mujeres, el pueblo ngäbe se ha ido organizando en asociaciones y otros grupos comunales. Esta situación ha impactado de forma positiva no solo el tema del resguardo de las tradiciones y costumbres, sino también el proceso hacia la construcción de una mejor calidad de vida.

“Algo muy importante es que quienes mantienen las artesanías como tradición en estas comunidades indígenas son las mujeres. Esta es una labor que está fuertemente asociada a ellas y su rol en el resguardo de la tradición es muy importante, porque son ellas las que conservan estas prácticas de generación en generación”, comenta Quesada.

Sin embargo, a muchas de estas mujeres también les ha tocado convertirse en jefas de hogar y en ese contexto han ido ocupando otros espacios de toma de decisiones que antes eran ocupados por hombres. En el caso de Abrojo Montezuma, por ejemplo, ellas lideran la asociación para la producción del cacao y se han involucrado en la práctica de deportes como el fútbol.

Además, aunque se mantienen algunas concepciones sobre lo que no debería cambiar en cuanto a las tradiciones y costumbres ngäbes, también hay consenso en la comunidad sobre cuáles son sus principales luchas y deseos de superación.

“El acceso a la tierra es muy importante para la comunidad ngäbe. También se ha ido avanzando en materia de recibir educación, muchas de las que terminan su formación más allá de la etapa del colegio son las mujeres; otro asunto importantísimo para ellos es la idea de conservar el idioma, de recuperar el conocimiento sobre algunas plantas medicinales y de sentir apego por la estructura familiar, por los ancestros, por saber de dónde vienen y cuál es su rol en cada una de las familias”, manifiesta la experta.

Por último, describe a esta comunidad indígena como una población con una cultura viva y en transformación, que mantiene su amor por la naturaleza y sus tradiciones, que aspira a mejorar su acceso a la salud, a la educación y a la infraestructura y, sobre todo, a que se les reconozca y se respete su cosmovisión.

Los indígenas ngäbes
La comunidad indígena ngäbe forma parte de los ochos pueblos originarios de Costa Rica. Esta etnia habita la provincia de Puntarenas en los cantones de Coto Brus, Corredores, Golfito y Puerto Jiménez, así como en Sixaola, en las cercanías de la frontera con Panamá, y en la zona de Los Santos. Su lengua materna es el ngäbere.
Según el Atlas de los pueblos indígenas de Costa Rica, esta comunidad cuenta con alrededor de 3 600 habitantes, quienes habitan los siguientes lugares: Territorio Indígena Abrojo Montezuma; Territorio Indígena Alto Laguna, Territorio Indígena Conte Burica; Territorio Indígena La Casona y el Territorio Indígena Altos de San Antonio.
Su economía se basa en la agricultura y cultivo del cacao, frijol, maíz y plátano, así como en la cría de cerdos y de aves de corral, la caza, la pesca y la elaboración de productos artesanales. Algunas personas de esta comunidad también se dedican a trabajar en fincas cercanas y otras participan temporalmente de las cogidas de café en Coto Brus y la zona de Los Santos.
La Escuela de Antropología muestra en una exposición virtual todos los detalles sobre los vestidos y artesanías ngäbes. Puede ingresar por medio de la página oficial de Facebook Antropología UCR.

 

Tatiana Carmona Rizo
Periodista, Oficina de Comunicación Institucional, UCR

UCR: Las arcillas de la Región Chorotega poseen gran potencial, según un estudio geológico

La elaboración de piezas de cerámica tipo chorotega es una tradición milenaria que se mantiene viva en las comunidades de Guaitil y San Vicente, en Guanacaste.

La riqueza y calidad de la materia prima para elaborar piezas inspiradas en la cerámica ancestral de Guanacaste augura un buen futuro para las comunidades dedicadas a esta tradición milenaria.

El temor entre los pobladores de que muy pronto se agote el barro con el que producen las piezas de cerámica tipo chorotega ha estado allí presente por años.

Sin embargo, una investigación reciente muestra lo contrario: la región de Nicoya y Santa Cruz, en Guanacaste, es rica en arcillas gracias a la composición del suelo y a las rocas que afloran en los cerros circundantes.

Platos, vasijas, jarrones, ollas, entre otros objetos, se elaboran, desde tiempos precolombinos, con el barro y las técnicas de orfebrería heredadas de nuestros antepasados. Esta cerámica es única en el país y hasta el momento se realiza con materiales naturales.

Ante la poca información existente, el geólogo Diego Guadamuz Vargas analizó la calidad cerámica de los suelos en las cercanías de las dos principales comunidades que mantienen viva la tradición de elaborar réplicas de las cerámicas chorotegas: San Vicente de Nicoya y Guaitil de Santa Cruz.

Los colores tradicionales utilizados en San Vicente y en Guaitil son blanco, ocre (fanta) y amarillo, que los artesanos extraen de rocas arcillosas. Foto: Laura Rodríguez Rodríguez. UCR.

El trabajo fue presentado para optar por el grado de Licenciatura en Geología en la Universidad de Costa Rica (UCR) y fue publicado este año en la Revista Geológica de América Central.

La confección de piezas requiere mezclar los suelos ricos en arcillas con la arena de iguana, para posteriormente ser pintadas con un pigmento conocido como curiol.

El principal yacimiento de arcilla se encuentra ubicado dentro de una finca privada, razón por la cual las comunidades han tenido limitaciones para tener acceso al barro.

“La finca de donde se ha extraído el barro tradicionalmente pertenece a una familia, que la explotó por cerca de 40 años mediante un permiso de la Dirección de Geología y Minas (del Ministerio del Ambiente y Energía). Al no renovarse la solicitud de permiso, el sitio de extracción se volvió privado y ahora la comunidad debe solicitar un permiso a los dueños de la propiedad para obtener la arcilla”, comenta el geólogo.

Lo anterior ha generado que muchas familias que antes se dedicaban a la alfarería abandonaran esta actividad y que los jóvenes pierdan el interés y busquen otras fuentes de ingresos. También se han suscitado conflictos locales debido a la competencia por conseguir la materia prima.

Maribel Sánchez Grijalba es una de las mujeres líderes de San Vicente de Nicoya que aboga por enseñar el oficio a los niños y niñas y a la juventud para mantener la tradición de la cerámica chorotega.

Guadamuz menciona en su estudio que la falta de arcilla se atribuye a los cambios en el modelo de desarrollo del país desde los años noventa, que en Guanacaste han implicado la compra de fincas, antes dedicadas a labores agrícolas, para fines ganaderos y para la construcción de infraestructura turística.

El aporte de la geología

El investigador aplicó una serie de técnicas geológicas de campo y ensayos de laboratorio para evaluar las arcillas desde el punto de vista mecánico, cerámico y de las propiedades del suelo, con el fin de determinar las características y la calidad de este recurso.

Para tal fin recolectó 44 muestras de suelos y 30 muestras de rocas en puntos cercanos a la llanura aluvial en los cantones de Nicoya y Santa Cruz.

La zona de muestreo abarcó un área geográfica de 164 km2, que comprende parte del territorio delimitado en el 2016 por el sello de Denominación de Origen de la cerámica ancestral.

Este sello garantiza la autenticidad de las piezas producidas por los artesanos de la zona. También funciona como un reconocimiento a las comunidades que han luchado por mantener la milenaria tradición de producir cerámica, señala el investigador.

La materia prima

El barro:

Se obtiene de depósitos de barro de algunas fincas cercanas a las comunidades productoras de cerámica chorotega.

El curiol:

Procede de la cima del cerro San Vicente. Son los pigmentos blanco, ocre (fanta) y amarillo que los artesanos extraen de rocas arcillosas constituidas por óxidos de hierro y sílice para pintar (engobar) las piezas cerámicas.

La arena de iguana:

Es una arena de cuarzo, de grano fino a medio, que se mezcla con la arcilla para darle una mejor consistencia y reducir la plasticidad del material. Aflora en las orillas de algunas quebradas en las comunidades de Florida, San Vicente, Chira y Diría, en fincas privadas. El nombre procede de la asociación con los nidos de las iguanas.

Para que los productos sean distinguidos con el sello deben ser fabricados con los barros autóctonos, ser decorados con trazos geométricos o diseños zoomórficos y con los pigmentos arcillosos naturales. Por lo tanto, no se admite ningún aditivo artificial.

La aptitud cerámica de los suelos ensayados por Guadamuz se basó en los siete tipos de arcillas cerámicas establecidos en la literatura científica, en técnicas como la difracción de rayos X (DRX) y la petrografía microscópica de rocas.

Además, el autor comparó los resultados obtenidos en su estudio con los datos existentes sobre las arcillas que son empleadas por otros ceramistas del país.

Cerámica de calidad

Guadamuz concluye en su estudio que los suelos de los sitios estudiados tienen un gran potencial para producir cerámica de calidad. El 46 % se clasifica por su aptitud de generar cerámica de muy buena calidad (para piezas utilitarias) y el resto posee una calidad intermedia, principalmente para elaborar piezas ornamentales.

Las figuras zoomorfas forman parte de la decoración de las piezas de cerámica tipo chorotega. Foto: Laura Rodríguez Rodríguez, UCR.

“Los suelos del área de estudio son Vertisoles y Alfisoles, los cuales son buena materia prima para generar cerámicas, debido a que contienen arcillas de la familia de la esmectita y caolinita”, sostiene el geólogo en el artículo científico.

La caolinita y la esmectita son minerales arcillosos que le proporcionan calidad al barro para la producción de piezas cerámicas. La caolinita es una arcilla de color blancuzco de una gran pureza, la cual fue usada por los antiguos griegos para la elaboración de pequeñas esculturas.

La investigación revela además que tanto la arcilla como los otros materiales que se usan en la fabricación de las cerámicas de la Región Chorotega se obtienen a partir de las rocas ígneas (de origen volcánico), ricas en aluminio y sílice, y en rocas sedimentarias, como las areniscas líticas que se encuentran allí.

“Un proceso de alteración hidrotermal puede ser la principal causa para que se acelere la meteorización de las arcillas; es decir, ha ocurrido una alteración química y física de los materiales. Esto sucede en esa zona de Nicoya, en donde hay fallas que han facilitado la aparición de minerales como la caolinita”, agrega.

Carlos Villarreal Leitón, artesano de Guaitil (Santa Cruz) con 42 años de trabajar en el oficio de la alfarería, comenta que a los turistas le gustan más los colores llamativos, como verde, azul y turquesa, aunque estos no son originales de la cerámica chorotega.

En cuanto a las propiedades mecánicas, Guadamuz descubrió que los suelos arcillosos presentan porosidades entre el 51 % y el 61 %, índices de plasticidad del 14 a 29 y que, al cocinarse a 900 °C, experimentan un encogimiento menor al 11 % y una pérdida de humedad inferior al 30 %.

Estos valores son los que describen los ceramistas como propios de las mejores arcillas para alfarería.

La cerámica con las mejores propiedades es densa, ni muy porosa ni muy plástica para que el objeto modelado conserve la forma. “Si es muy plástica, al calentarse la cerámica esta se hincha porque los poros absorben el agua, la pieza se hidrata y se rompe”, detalla Guadamuz.

Sin embargo, la arcilla debe tener cierta porosidad para que el curiol se adhiera al material.

El curiol es un tipo de roca arcillosa que se encuentra en el cerro San Vicente. La trituran y crean un tinte, como hace miles de años, para pintar las piezas. De esta manera extraen el color amarillo, ocre (fanta) y blanco.

El estudio del geólogo de la UCR, Diego Guadamuz Vargas, analizó la calidad cerámica de los suelos en las cercanías de las dos principales comunidades que mantienen viva la tradición de elaborar réplicas de las cerámicas chorotegas, en Guanacaste. Foto: Laura Rodríguez Rodríguez, UCR.

Según explica Guadamuz, aparentemente todos los suelos útiles, encontrados durante la investigación, proceden de un punto de erosión del cerro San Vicente. Los materiales se esparcieron con la ayuda del agua, así como debido a la gravedad, y enriquecieron los suelos.

El geólogo plantea que una solución al problema del acceso a los depósitos de arcillas sería el establecimiento de un proyecto de Minería Artesanal a Pequeña Escala (MAPE); es decir, que la comunidad cuente con su propio tajo.

“A futuro se busca que haya una declaratoria para la extracción regulada del barro o que las comunidades desarrollen una minería artesanal a pequeña escala”, propone.

Para Guadamuz, la geología cumple un rol social de gran importancia, pues aporta información a los pobladores locales y a las autoridades para la toma de decisiones sobre el futuro y la sostenibilidad de una tradición de nuestros pueblos ancestrales.

El futuro y los retos de las comunidades alfareras

“Mi mama nos daba un pedazo de barro para que nos estuviéramos queditos mientras ella trabajaba. Allí fue donde fui aprendiendo la técnica y después de los 12 años me gustó el trabajo, me gustó tener plata, y entonces empecé a elaborar las primeras piezas”, narra Johnny Sánchez Grijalba, de San Vicente de Nicoya.

La elaboración de artesanía chorotega es un conocimiento que se transmite en las familias. Como Johnny, los habitantes de esa comunidad aprenden este oficio viendo cómo las personas mayores dan forma al barro que extraen de las montañas cercanas.

Todo el proceso es manual, solo se ayudan con una torneta y ceguetas viejas. En 12 días pueden hacer hasta 15 piezas pequeñas. “Ese es el valor agregado que le damos a nuestros productos, están hechos totalmente a mano”, resalta Sánchez.

El proceso requiere tiempo, desde el procesamiento del barro hasta el secado, pulido y pintado de las piezas. La cocción se hace en hornos de barro calentados con leña, explica el artesano mientras trabaja en el taller que su mamá, Maribel Sánchez Grijalba, tiene en su casa.

“Me gusta preservar mi cultura, hablar de mi tierra, de los productos que utilizamos, de la utilidad que se le ha dado a la cerámica generación tras generación”, comenta orgulloso.

Allí trabaja también David Ramírez Zúñiga, quien con pincel en mano pinta las típicas bandas chorotegas a los platos, las vasijas y las jarras. “Aprendí viendo y haciendo. Tengo cerca de siete años de pintar. Lo más difícil para mí es hacer los dibujos”, dice.

Doña Maribel es una de las líderes que participó en la construcción del Ecomuseo de la Artesanía Chorotega de San Vicente de Nicoya, junto con entidades estatales, locales, privadas y la comunidad.

El beneficio que el Ecomuseo brinda a la comunidad es la exhibición y venta de productos, además de constituir un espacio de valor cultural. También da a conocer la cerámica chorotega a través de una página web.

“A nosotros nos gusta la tradición de hacer cerámica y hemos venido enseñando a los niños en el museo. Se han dado talleres a las mujeres y a los hombres y se les han abierto las puertas a otras comunidades. Al final, la mayoría somos mujeres”, manifiesta la líder.

Algunos de los alfareros han incorporado cambios en la forma tradicional de hacer las piezas, como por ejemplo en los tintes y diseños decorativos, debido a la presión del mercado y a la influencia del turismo.

Carlos Villarreal Leitón, artesano de Guaitil con 42 años de trabajar en este oficio, expresa que “al turista le gustan más los colores llamativos”, como verde, azul y turquesa, que según él los importan.

“Yo prefería quedarme con los colores antiguos, pero si yo quito estos colores verdes no voy a poder vender, porque ya aquí en Guaitil todo el mundo los está usando”, advierte.

Nury Marchena Grijalba, dirigente de la Cooperativa Coopesanguai, indica que están trabajando para crear estrategias de comercialización de los productos.

“La comercialización es la fuente de ingreso de nuestras familias. Ha sido muy duro, porque aquí no viene el turismo. Estamos organizando con el Gobierno la creación de una ruta turística para beneficio de ambas comunidades y otras aledañas”, destaca.

Según el estudio de Diego Guadamuz, en la zona hay cerca de 200 familias dedicadas a la alfarería. Guaitil es la comunidad más expuesta al turismo, en donde la mayoría de sus casas ofrecen cerámica al visitante.

Existe la preocupación tanto en San Vicente como en Guaitil sobre el futuro de esta práctica milenaria. Las generaciones más jóvenes se han ido del pueblo a estudiar o trabajar o no tienen interés en la artesanía.

“Queremos que los jóvenes se involucren en la artesanía para que no se pierda esta cultura, que es un orgullo de nuestros cantones y de nuestro país. No vamos a permitir que esto se venga abajo”, concluye categórica Marchena. 

En la fotografía, Johnny Sánchez Grijalba modela una pieza en el taller de su mamá en San Vicente de Nicoya. Foto: Laura Rodríguez.

 

Patricia Blanco Picado
Periodista Oficina de Comunicación Institucional, UCR

Universidad Nacional presenta: ¡Cultura, arte y recreación en su máxima expresión!

La Universidad Nacional (UNA), cree en la importancia de la cultura, el arte y la recreación para la formación integral de los estudiantes. Es por eso que se invita a todas las personas a la segunda muestra de Talleres Culturales, un evento que se llevará a cabo el 18 de octubre en el Auditorio Cora Ferro, ubicado en el Campus El Higuerón en Heredia.

Los talleres ofrecen una oportunidad única para descubrir y desarrollar el talento estudiantil en una amplia gama de disciplinas culturales. Ya sea que su pasión sea el canto, el baile, la música, el arte o el deporte, encontrará un espacio donde sus habilidades brillarán y sus horizontes se expandirán.

La comunidad universitaria de la UNA, compuesta por estudiantes, funcionarios y miembros de la comunidad, se unirá para compartir sus conocimientos y experiencias adquiridas en los distintos talleres. Es una oportunidad excepcional para conectarse con personas apasionadas y aprender de sus experiencias.

Detalles del evento:

Fecha: 18 de octubre de 2023

Lugar: Auditorio Cora Ferro, Campus El Higuerón, Heredia

Hora: A partir de las 5:00 p.m.

«La cultura y el arte son esenciales para el crecimiento personal y la formación integral de nuestros estudiantes. En la Universidad Nacional de Costa Rica, estamos comprometidos en fomentar el desarrollo de habilidades artísticas y culturales que enriquezcan sus vidas», declaró Dary Moya Chavarría, encargada de los talleres culturales.

La segunda muestra de Talleres Culturales de la UNA promete ser un evento emocionante, enriquecedor y lleno de energía creativa. ¡No te lo pierdas! Te esperamos en la Universidad Nacional de Costa Rica para vivir una jornada inolvidable.

Para obtener más información y detalles sobre la segunda muestra de Talleres Culturales, visita las redes sociales de Facebook: Talleres Culturales Universidad Nacional y el Instagram: talleresculturales.una

Oficina de Comunicación
Universidad Nacional, Costa Rica

Movimiento Sector Cultura expresa profunda preocupación por la forma como se ha gestionado el diseño del presupuesto 2024

Comunicado

Desde las organizaciones que integran el Movimiento Sector Cultura queremos expresar nuestra profunda preocupación por la forma en que se ha venido gestionando el diseño del proyecto de presupuesto para el año 2024, mismo que será presentado y defendido por la jerarca del Ministerio de Cultura y Juventud ante la Asamblea Legislativa, el próximo 3 de octubre.

Luego de que se anunciara a través de distintos medios de comunicación, un posible recorte de ochocientos cincuenta y cinco millones de colones (₡855.000.000), ha habido muy poca información y no se han generado espacios de diálogo entre el MCJ y el sector, lo que crea un ambiente de incertidumbre.

Específicamente, nos preocupa que la propuesta presupuestaria 2024 del MCJ incluya estos recortes; pero, también nos genera inquietud tener conocimiento de las serias deficiencias en la ejecución de los fondos públicos asignados al ministerio en el año 2023, aspecto medular para la evaluación y aprobación del presupuesto por parte de las señoras diputadas y señores diputados de la República.

La dificultad para dar sostenibilidad a procesos de comunicación con el sector, cierto desgaste político de las autoridades de la institución, la subejecución de presupuestos asignados a remuneraciones en el 2023, el no nombramiento de personas en cargos de dirección de algunas adscritas del ministerio, el despido de personas funcionarias que ocupaban puestos de confianza en momentos claves durante el año 2023, así como la ausencia en la solución de problemáticas como los convenios de coproducción, son aspectos que dificultan la adecuada defensa y asignación de fondos públicos.

De ahí que hacemos un llamado a las autoridades del Gobierno Central y de la Asamblea Legislativa, para que se valore lo expuesto y que no se castigue el presupuesto del 2024 para el sector cultura, por la ausencia de liderazgo y de capacidad de gestión política y administrativa en el Ministerio de Cultura y Juventud.

Asimismo, informamos que estaremos proponiendo a las señoras diputadas y a los señores diputados, mociones que permitan aprobar un presupuesto sin los recortes planteados en el proyecto que presentará la Sra. ministra, pues con esos recursos se podrían financiar programas que vendrían a abonar en la lucha contra todas las formas de violencia que se están manifestando en estos momentos en la sociedad costarricense, para lo cual el arte y la cultura son herramientas imprescindibles.

Chomes con intenso programa cultural este fin de semana

La Universidad de Costa Rica en conjunto con Francis Leonardo Cordero Mojica, en el marco de la línea estratégica «Tejiendo redes: Diálogos en las regiones», perteneciente a la Vicerrectoría de Acción Social, llevará acabo la realización de una Peña Cultural en la que participarán diversos grupos artísticos, agrupaciones musicales, emprendedores y organizaciones comunitarias de la región de Chomes.

Esta iniciativa busca mantener y fortalecer los lazos entre la sociedad y la universidad, así como promover la pertinencia de la acción social como una actividad esencial.

Con este propósito se llevará a cabo una serie de eventos programados para el viernes 22 de setiembre desde la 4:00 p.m. hasta las 9:30 p.m., y sábado 23 de setiembre desde las 6:00 a.m. hasta las 9:00 pm.

El viernes se tiene planeado realizar un conversatorio cultural con miembros de la comunidad, seguido de la proyección del documental Ríos: Memoria que Fluye, finalmente se realizará un cine foro dirigido a la población infantil.

Para el sábado se ha organizado una Peña Cultural en la que participarán diversos grupos artísticos, agrupaciones musicales, emprendedores y organizaciones comunitarias de la región, así como agrupaciones invitadas de otras zonas del país.

Compartimos la información gráfica detallada para que pueda participar e invitar a otras personas.

La Sociedad Alimentada del Espectáculo, del Consumo y la Alienación

MSc. Anais Patricia Quirós Fernández
Especialista en la Enseñanza del Idioma Inglés
Estudios en Género, Diversidad y Derechos Humanos
Diplomada en Cambio Climático y Gestión Integral del Riesgo de Desastres
Académica Universitaria

Anais Patricia Quirós Fernández.

La «sociedad del espectáculo» es un concepto desarrollado por el filósofo francés Guy Debord en su obra «La sociedad del espectáculo» («La société du spectacle» en francés), publicada por primera vez en 1967. Este concepto se ha convertido en una parte importante de la teoría crítica y la crítica cultural en este siglo.

La sociedad del espectáculo, un concepto donde la cultura se vuelve un objeto de la imagen, convirtiéndose en un espectáculo diseñado, en que la realidad se presenta principalmente a través de medios de comunicación, publicidad y espectáculos, dejando a las personas desconectadas de sus experiencias directas. Una sociedad que convierte todo en una mercancía. Las relaciones sociales, la cultura y la identidad se comercializan y se convierten en productos que se consumen. La vida cotidiana se convierte en un espectáculo, donde las personas son espectadores pasivos en lugar de participantes activos en sus propias vidas. Las experiencias se reducen a imágenes y representaciones. El consumo constante y desenfrenado como una forma de llenar el vacío creado por la alienación y la falta de significado en la vida creando así, una falsa conciencia de lo real, cada vez alejándose de una activa participación en la toma de decisiones y en la construcción de vidas propias. Alejándose de la autenticidad y quedando las personas atrapadas en la búsqueda constante de entretenimiento y consumo extremo. Colocando la realización de metas en un papel de arroz formado por figuras inexistentes que más tarde lleva a la colonización de la mente aislando la auténtica realización personal.

En cada sociedad la participación individual juega distintos papeles y forma parte necesaria para construirla, pero la negación de lo real permite que el espectáculo se envuelva en el camuflaje perfecto volviendo lo verdadero en falso, y así facilitar el logro de fines deseados para obtener lo que no sería posible sin este. Convirtiéndose en una fusión entre la realidad y lo no real, creando una correlación estrecha entre ambos elementos para sostén de la sociedad actual.

La sociedad del espectáculo es el acto mas antiguo de la humanidad, un acto que carece de identidad, acto que termina desnudo ante la verdad de las cosas y que deja en descubierto lo único visible y real; el cadáver de una realidad ocultada pero invadida por la contemplación.

Una sociedad que logra alimentarse del mejor espectáculo es aquella que la conforman las apariencias, relaciones nutridas por la mentira de lo que se ve. Aquella en que sus hijos son educados por la arrogancia de una comunidad consumista e imitadora. Donde los actos sociales utilizan el mejor de los maquillajes, ocultando la verdadera esencia detrás de los telones de cada “espectáculo.” Donde la percepción es casi perfeta desde el exterior, pero internamente no se ve el cáncer que devora el tejido. Grupos profesionales con perfiles envidiables en el ámbito social, pero con nebulosas internas que opacan su realidad diaria. Redes sociales que usan filtros oculares para promover su producto humano, ese producto que hoy se vende al mejor postor, por el físico, la imagen y las ideas.

La sociedad que se nutre del espectáculo fomenta las relaciones líquidas, construidas a base de falacia, engaño y falsedad, dando como resultado más tiempo al fracaso tardío. Es un espectáculo que termina cuando la línea aprendida se acaba. Aun así, al final de cada acto la verdad aflora, mostrando el vacío existencial en el que hoy vive gran parte de la humanidad. La sociedad del espectáculo es uno de los tantos tentáculos sociales que constituyen el modelo de las sociedades dominantes, que necesita de una mutación de conducta inducida sin aparentar el alejamiento de la realidad.

La sociedad que se alimenta del espectáculo… ¿funciona? -SI-

La actuación imita a la felicidad, a la coherencia, y trata de ser perfecta, cubriendo sus defectos y debilidades como aquel payaso que maquilla su rostro y viste con prendas coloridas para realizar su mejor acto, aun cuando su epidermis está deteriorada, herida y cicatrizada. Oh aquella bailarina de ballet; bella, perfecta, que hace su mejor presentación ante el público, y después se interna en el camerino con sus pies sangrando y su cuerpo adolorido.

El espectáculo tiene el objetivo común de llenar la carencia de sentido, de propósitos y de significado en la vida. Donde el espectador, cuanto mas contempla menos vive, cuanto mas se identifica con el espectáculo menos sentido encontrará y menos entenderá su origen de ser, arriesgando a volverse actor tarde o temprano. Por el contrario, el actor entre más actos realiza más entrara a un estado de enajenación, alejándose cada vez mas de su propia existencia.

Finalmente, cada individuo elige cuál será su espectáculo y su efecto social, siempre en busca de ese nutriente existencial a través de sus propias elecciones y acciones. Ese propósito ausente necesario para integrarse a la sociedad dominante que cada día exige mas para poder ser miembro de cada grupo que conforma “la sociedad alimentada del espectáculo, del consumo y la alienación”.

Carmina Burana – C. Orff y estreno mundial de la Sinfonía N°4 de las Hojas – M. Camacho el próximo fin de semana

Dos importantes espectáculos musicales estarán a la disposición del público desde el próximo viernes 7 al domingo 9 de julio. Se trata de la majestuosa cantata Carmina Burana, del compositor alemán Carl Orff, una de las obras más representativas del siglo XX, y el estreno mundial de la Cuarta Sinfonía del compositor costarricense y ganador del Premio Nacional de Música, Marvin Camacho Villegas.

La oferta musical estará a cargo de la Orquesta Sinfónica Municipal de Paraíso de Cartago, dirigida por el maestro Berny Siles Loaiza, así como la Orquesta Sinfónica Humanidades y el proyecto UCR Coral, ambos de la Universidad de Costa Rica bajo la dirección del maestro Didier Mora Monge y contará con la participación estelar de los solistas: Ivette Ortiz Davenport, soprano; Marcela Alfaro Castillo, mezzosoprano; Ernesto Rodríguez Montero, tenor; Esteban José Zúñiga Calderón, tenor; y Eric Alonso Mora Obando, barítono.

Para compra de entradas y más información se pueden comunicar los siguientes números telefónicos: 83178869/ 7059-1111/ 8879-3666/ 8848-7200.

El concierto del viernes 7 de julio se llevará a cabo en el Teatro Popular Melico Salazar a partir de las 7.30 de la noche y la entrada general tendrá un costo de 10.200 colones. El sábado 8 de julio la música viajará a Paraíso de Cartago, y tendrá lugar en el templo católico de esa ciudad, por su parte, el domingo 9 de julio, las agrupaciones musicales se presentarán en el Teatro Municipal de Turrialba, ambas giras forman parte de los programas de extensión cultural de la Universidad de Costa Rica.

La Sinfonía No. 4 de las hojas fue escrita por el pianista y compositor Marvin Camacho Villegas y la letra está basada en El susurro de las hojas cómplices, poemario de la doctora María Pérez Iglesias. La obra consta de cuatro movimientos y un interludio vocal entre el tercer y cuarto movimiento como preámbulo al cierre. 

Entre tanto, la Carmina Burana fue escrita por Carl Orff para dos coros, solistas y orquesta sinfónica. Fue estrenada en 1937 y es la parte inicial de Trioinfi, trilogía de cantatas que se completa con Catulli Carmina y Trionfo di Afrodite. Está basada en una colección de antiguos poemas medievales hallados en 1803 en un monasterio benedictino de la Alta Baviera, que exaltan el gozo por vivir, el interés por los placeres terrenales, el amor carnal y el goce de la naturaleza, así como una crítica satírica a los estamentos sociales y eclesiásticos de la época. Es una de las obras sinfónicas más famosas a nivel mundial y su movimiento más conocido es O Fortuna” con el que inicia y finaliza.

Este concierto tendrá más de 160 artistas entre el coro, la orquesta, los solistas y el director. El coro que interpretará la obra será UCR Coral, el cual consta de aproximadamente 100 coristas en su agrupación, cantidad pensada específicamente para la magnitud que las obras exigen. UCR Coral tiene amplia experiencia con obras sinfónico corales como Magnificat en Re Mayor de J.S. Bach, Carmina Burana de C. Orff, Salmos Cotidianos de Marvin Camacho (compositor costarricense), la ópera Aida de G. Verdi, Requiém de J. Rutter, Fantasía Coral de L.V. Beethoven, Oratorio de Navidad de Marvin Camacho, Novena Sinfonía de L.V. Beethoven, La Gran Misa en Do menor de W.A. Mozart, The Messiah de G.F. Händel, etc. Siendo uno de los pocos coros en Costa Rica que interpreta este tipo de obras tan técnicamente complejas. Según su director Didier Mora, “aún con experiencia, el coro ha tenido una larga preparación vocal y musical durante el semestre, lo que demuestra la complejidad técnico-vocal de las obras, especialmente Carmina Burana”.

UCR Coral frente al edificio de la Escuela de Estudios Generales de la UCR.

La Orquesta Sinfónica Humanidades de la Universidad de Costa Rica es una de las encargadas de tocar ambas obras, es dirigida por Didier Mora. Es una agrupación hermana de UCR Coral que se tuvo sus inicios en el 2012 con el objetivo de permitirle a estudiantes de diferentes áreas no relacionadas a la música, poder tener la posibilidad de mantener un acercamiento musical.

Didier Mora, director UCR Coral y Orquestra Sinfónica de Humanidades.
Concierto del décimo aniversario de UCR Coral junto a la Orquesta Humanidades en el Teatro Popular Melico Salazar.

Por otro lado, la Orquesta Sinfónica Municipal de Paraíso, OTRA de las orquestas que interpretará las obras y la cual es dirigida por el maestro Berny Siles Loaiza ha hecho una labor estupenda de estudio y aprendizaje de la obra. Berny Siles es compositor, violista y director, por lo que tiene gran experiencia en el ámbito sinfónico coral y muchos años a cargo de instituciones como la Escuela Municipal de Música de Paraíso. Didier Mora ha trabajado en conjunto con Berny Siles en diversas ocasiones, entre las que se destaca la Gran Misa en Do menor de W.A. Mozart.

Orquesta Sinfónica Municipal de Paraíso, Berny Siles director.
Berny Siles, director Orquestra Sinfónica Municipal de Paraíso.

No se pierda la oportunidad de presenciar estas maravillosas obras con una producción de gran magnitud. Para compra de entradas y mayor información se pueden comunicar los siguientes números telefónicos: 8317-8869 / 7059-1111 / 8879-3666 / 8848-7200.

Merecemos como país enfrentar la crisis de seguridad y retomar la paz y la tranquilidad

José Luis Pacheco Murillo

El tema de la seguridad sigue siendo el que más preocupa a la ciudadanía y no es para menos, ya que lo que vivimos como sociedad es un verdadero caos, la delincuencia sigue haciendo de las suyas y a pesar de los esfuerzos del Ministerio de Seguridad Pública, el número de víctimas sigue creciendo.

No son solo los asesinatos, atribuidos la mayoría de ellos a las acciones del narcotráfico y sus ajustes de cuentas. También están los delitos contra la propiedad cada vez más comunes. Los robos de vehículos y los robos a viviendas también tienen en vilo a la ciudadanía.

Esta crisis requiere de acciones importantes pero la primera de ellas es la prevención. El señor ministro de Seguridad ya lo ha manifestado y lo tiene claro. Aquí deben intervenir muchas instituciones porque es un problema nacional y debe buscarse una solución nacional.

La educación, el deporte, la cultura deben aliarse para lograr el propósito. La recuperación de espacios públicos tomados por drogadictos y delincuentes es una tarea de todos. El retorno a un programa tan importante como DARÉ es urgente. Preparar a niños y jóvenes para que le digan NO a la droga es una tarea vital. En otros países se ha logrado, ¿por qué no lograrlo nosotros también?

El Poder Judicial debe poner de su parte para que las medidas cautelares permitan retenciones más prolongadas de delincuentes en las cárceles. No es posible que duren más los policías trasladándolos a la fiscalía que el tiempo en que están detenidos.

Esta situación de inseguridad carcome a la ciudadanía y la mantiene en zozobra y en incertidumbre constante y no se siente segura casi que, en ningún lugar, pues las acciones delictivas se dan a todas horas y en cualquier lugar.

Dios quiera que podamos como país enfrentar esta crisis de seguridad y logremos retomar la paz y la tranquilidad que tuvimos años atrás.

Peligra la institucionalidad democrática de Costa Rica – Reformas del gobierno neoliberal de Rodrigo Chaves

Vladimir de la Cruz

El gobierno neoliberal de Rodrigo Chaves en Costa Rica ha arremetido violentamente contra la estructura del Estado Social de Derecho costarricense. Parte de sus ataques son el debilitamiento de ciertas instituciones claves y básicas de la cultura y vida democrática nacional. Ha reducido el presupuesto nacional del Ministerio de Cultura, ha afectado de manera parecida al Ministerio de Educación y mantiene un ataque sostenido contra los presupuestos de las universidades públicas.

A ello suma el congelamiento real de salarios y de pensiones, que están seriamente afectados desde hace tres años y su proyección es por un plazo igual, sin que se controle el aumento de precios en los artículos de mayor necesidad de las personas, sin que se congelen en paralelo los costos de los servicios públicos, provocando en la práctica que los salarios suban por escalera y los precios por ascensor, haciendo cada vez más costosa la vida.

La reducción de estos presupuestos, en parte, lo justifica diciendo que es para destinar más recursos a las fuerzas policiales y del Ministerio de Seguridad Pública del país, frente a una ola creciente de homicidios e inseguridad ciudadana. Lo que es verdaderamente peligroso es que el Presidente Chaves ha insinuado las posibilidades de gobernar por la fuerza, mostrando sus rasgos autoritarios e intimidatorios de gobernante, retratándose acompañado de oficiales policiales que parecieran más guardaespaldas de un jefe mafioso, por la forma y ostentación de su indumentaria y sus armas de combate. Costa Rica ha sido un país que enarbola su régimen democrático sobre la base de que no tiene Ejército, de que el país ha tenido históricamente más maestros que soldados, lo que ya no es prácticamente cierto. Los cuarteles tradicionales del Ejército han sido transformados en museos e instituciones culturales, pero el aparato de seguridad del Estado se ha fortalecido exponencialmente comparado con esos otros rubros culturales y educativos. Los cuerpos policiales que operan privadamente, en varios miles de policías, el Presidente ha insinuado la posibilidad de llamarlos a cooperar y colaborar en la lucha contra el crimen organizado que debe atender el Ministerio de Seguridad Pública. El Presidente mismo ha dicho que le habría gustado gobernar por decreto, con lenguaje engañoso de que defiende la democracia y que él no se convertiría nunca en un dictador.

Parte de esta táctica es el ataque constante al prestigio y al papel de la Corte Suprema de Justicia, como un poder independiente, que quizá él quisiera controlar, como lo hacen algunos gobernantes latinoamericanos. Ha planteado esto dentro del lamento de no poder convocar una Asamblea Nacional Constituyente donde se estructuren estos poderes públicos como él quisiera.

En sus ataques institucionales enfrenta constantemente también al Poder Legislativo, especialmente a los diputados que le cuestionan y a los de la única fracción parlamentaria, de 6 de 57 diputados, que son francamente opositores, advirtiendo todos los días que no tiende puentes, que no escucha ni solicita opinión, ni desea acuerdos con quienes, como esos diputados lo critican, desconociendo totalmente la práctica de un régimen democrático y de una institución, como el Poder Legislativo, que en sus funciones, además de hacer leyes tiene la del control político sobre el Gobernante y sobre toda la institucionalidad político administrativa.

En sus ataques a diputados ha acudido al expediente del ataque personal, íntimo, que linda con aspectos que parecieran obtenidos por los aparatos de seguridad nacional, y de espionaje, del gobierno, policía adscrita a la Presidencia de la República, lo que evidencia violación elemental de derechos humanos y del derecho a la privacidad. Es la forma como ha venido minando poco a poco la seguridad pública ciudadana, y estableciendo un régimen de terror reverencial institucionalizado en sus mesas de prensa de todos los miércoles. Recientemente atacó a una destacada periodista, de mucha tradición nacional, seria, que en respuesta a sus ataques prepara una acusación al Presidente Chaves ante la Corte Suprema de Justicia. La periodista Vilma Ibarra ha recibido el apoyo del Colegio de Periodistas, de diputados, de una llamada de atención elegante que le hizo el Presidente de la Asamblea Legislativa, Rodrigo Arias Sánchez al Presidente de la República, y de distintas personalidades nacionales.

El ataque feroz contra el Estado Social de Derecho lo conduce hacia la reforma de las jornadas laborales, de carácter constitucional, de 48 horas semanales en tiempos de ocho horas diarias. La jornada de ocho horas en Costa Rica se estableció en diciembre de 1920. Se llevó a la Constitución Política de 1871, mediante las Reformas aprobadas como Capítulo de Garantías Sociales, en 1943, año y misma fecha que se aprobó también el Código de Trabajo. En la Constitución Política de 1949, vigente en este momento, se mantuvo y amplió esa Reforma Social, que ha sido uno de los pilares de la estabilidad política y social del país. En lugar de jornadas de ocho horas diarias quiere establece jornadas de 12 horas diarias por 4 días a la semana, para el total de las 48 horas semanales establecidas en la Constitución Política. En la propuesta real del Presidente el régimen de las 12 horas viola una serie de derechos sociales, relacionados con pago de jornadas extras, con disminución de derechos de pago de cesantía, de salario escolar, de aguinaldos, y de futuras pensiones entre otros. Violando con ello Derechos Humanos, Convenios internacionales, rebajándose ante los países de la OCDE, a la que pertenece Costa Rida como uno de los países con jornadas de trabajo más altas, cuando en Europa, y en otras partes del mundo, la tendencia es ir hacia la jornada de 35 y 36 horas semanales, y menores de las ocho horas diarias.

Parte de esas reformas sociales vigentes, surgidas a principios de la década de 1940, fueron la creación de la Universidad de Costa Rica, que es uno de los blancos preferidos de tiro del Presidente Chaves, y la Caja Costarricense del Seguro Social, una institución emblemática del país, también pilar de la democracia política y social que se disfruta como parte de la estabilidad social y política que Costa Rica exhibe internacionalmente., que permite por sus alcances nacionales que los costarricenses tengan un alto nivel de expectativa de vida, superior a los 80 años, con algunas regiones, zonas azules las llaman, donde los ciudadanos pasan con regularidad los cien años.

Quedan recursos a la población costarricense frente a estas políticas laborales que se quieren imponer. Están los recursos de inconstitucionalidad que puede poner la misma Asamblea Legislativa, como consulta obligada que haga ante la Sala Constitucional de la República y la que pueden hacer un pequeño grupo de diputados. Si la ley se llegare a aprobar, igualmente cualquier ciudadano, uno solo, podría acudir ante la Sala Constitucional, demandando su inconstitucionalidad. Del mismo modo se puede llevar esta ley a la Corte Interamericana de Derechos Humanos, que tiene sede en Costa Rica, para que también se pronuncie. Y, como un instrumento más de lucha ciudadana en defensa del Estado Social de Derecho del país se puede convocar a un Referéndum Revocatorio de esta ley, de esta jornada que establece el trabajo esclavo al estilo del siglo XIX. En los próximos días se definen estos caminos a seguir.

 

Artículo publicado en la revista MEER.com el 23 de junio del 2023 y compartido con SURCOS por el autor.

Cultura: eje central para el desarrollo sostenible

  • Como parte del proyecto: “Análisis de los efectos económicos, ambientales y sociales del Turismo y la Cultura en Costa Rica”; la académica de la Escuela de Economía UNA, María Fernanda Vega Solano, comparte un análisis de la cultura como eje central para el desarrollo sostenible de la economía en el país.

Para la Organización de las Naciones Unidas para la Educación, la Ciencia y la Cultura (UNESCO), la cultura abarca desde los grandes y famosos museos y monumentos históricos, hasta el arte contemporáneo y las prácticas de patrimonio vivo. Es el alma de una sociedad, tiene la potestad de unir a la gente por medio de los museos, teatros u otros. Además, nos ayuda a definir quiénes somos y nos brinda una identidad ante los demás; la cultura tiene muchos beneficios, de los cuales una gran parte son personales.

La participación en actividades culturales durante etapas tempranas mejora las habilidades, aumenta la autoestima y se convierte en un motor de superación importante para quienes se encuentran en riesgo social, estudios como el de Díaz y Ledezma (2019), demuestran que los estudiantes que participan en este tipo de actividades tienen más posibilidades de avanzar en sus estudios, es un aprendizaje para toda la vida, les permite una mejor comprensión de la historia y fortalece sus competencias blandas. 

Por su parte, cuando se trata de adultos mayores se ha demostrado que el arte trae consigo grandes beneficios, potencia la habilidad mental (razonamiento, memoria, pensamiento creativo), se convierte en un alivio a dolores de carácter emocional, ayuda a la mejora de la motora fina, es un factor fundamental para una adecuada salud mental y le da sentido a la vida de esta población tan vulnerable, pero que aumenta día a día.

Aun cuando en la Agenda 2030 no se plantea la cultura de manera explícita, se ha convertido en un eje transversal de este proyecto mundial, por tanto, la UNESCO en el 2022 elaboró el documento denominado “Re|Pensar las políticas para la creatividad: Plantear la cultura como un bien público global” donde el objetivo 3 específicamente establece “integrar la cultura en los marcos de desarrollo sostenible” y menciona que los datos recolectados evidencian que la cultura brinda recursos para el desarrollo local, hecho que potencia el progreso de los países y contribuye al crecimiento económico y la innovación.

La inversión en cultura es relativamente baja a nivel mundial, no supera el 1% del PIB, son pocos los países que como Estonia, Hungría, Dinamarca, Francia y España destinan más de 1% al sector; a nivel de Latinoamérica, un estudio realizado por Aguayo y Argüello (2021), demuestra que el gasto público en cultura rondó el 0,1% del PIB en 2020, y que Costa Rica es el país que mayor inversión cultural realizó en 2020 con 0,94 %, seguido de Chile con 0,87 %.

Costa Rica, en su Plan Nacional de Desarrollo y de Inversión Pública 2023-2026, cuenta con 3 metas sectoriales en cultura, y que están en su totalidad vinculadas a los ODS; el propósito está en aproximar las instituciones culturales a la población costarricense, principalmente a las periferias. Uno de los objetivos definidos para el sector está relacionado con el apoyo para emprendimientos e iniciativas culturales y artísticas, a partir de capacitaciones e incentivos económicos que estimulen, dinamicen y potencien la producción artística y la gestión cultural.

Pese a lo anterior, recientemente el ministro de Hacienda informó que el Ministerio de Cultura y Juventud de Costa Rica sufrirá un recorte a su presupuesto 2024, mismo que fue reducido cerca de 2% para el 2023. Estos recortes atentan contra la funcionalidad de una serie de entidades como son el Teatro Nacional, el Sistema Nacional de Educación Musical (SINEM), el Museo de Arte Costarricense, el Centro de Investigación y Conservación del Patrimonio Cultural, entre otras instituciones adscritas al Ministerio de Cultura y Juventud.

La cultura fortalece nuestra identidad, brinda oportunidades a quienes viven de su creatividad y talento, tiene un valor dual al poseer un valor económico y un valor simbólico que contribuye al desarrollo integral de los países, por tanto, no es un gasto es una inversión y debe ser tomada como tal, respetando lo establecido en las políticas nacionales y con miras al cumplimiento de lo estipulado en la Agenda 2030.

Oficina de Comunicación
Universidad Nacional, Costa Rica