En 2022 el gobierno de Joe Biden propuso una ley que buscaba fomentar la industria de los semiconductores a través de subsidios a diversas corporaciones, sin embargo, para Donald Trump, se trata de “una cosa horrible”, aunque fue aprobada de manera bipartidista.
Así, Trump ha solicitado a los legisladores (con mayoría del partido Republicano) que deroguen dicha Ley de CHIPS, que otorga US$ 52 mil 700 millones en subsidios para la fabricación y producción de semiconductores. En su lugar, TRUMP lo que busca es utilizar los fondos para pagar deuda. “La Ley de CHIPS es una cosa horrible, horrible. Damos cientos de miles de millones de dólares y no significa nada. Ellos toman nuestro dinero y lo gastan”, sentenció Trump. (DPL News). ¿CUANTO golpearía a Costa Rica, la iniciativa de TRUMP?
Aunque HOY nadie puede responder con certeza, sí conviene recordar que del 2021 al 2023, los dispositivos médicos (45 %) y los CHIPS (8 %) fueron los productos más importantes, exportados desde nuestro país, a los EUA, de los cuales, US$ 1.098 millones, fueron CHIPS.
Con la Ley de Chips, promovida por la administración del demócrata BIDEN, eran espectaculares las expectativas de multiplicar esas cifras. Actualmente, más bien reina la incertidumbre, pues, además, se desconocen las gestiones urgentes que, supuestamente, estaría realizando la administración Chaves, ante el gobierno estadounidense…
CON escoba prestada, el Chaves barrió, a los que llamó «asquerosos», por haber corregido el camino que seguía la Junta Directiva de la CCSS, que le permitía bloquear, con indebida injerencia política, (desde los tiempos de Marta Esquivel) la construcción del urgentísimo, hospital para Cartago y la zona de Los Santos.
En virtud de que ahora privarán criterios técnicos, ¡como corresponde a la institución autónoma!, lanzó escupitajos virtuales, hacia los que no obedecieron sus deseos, no dejando «santo con cabeza». Para él, la antes amada UCCAEP, ahora no es de fiar, son unos corruptos, no representan a nadie, está manejada por el Partido Liberación Nacional, hay que quitarle los representantes en la Junta Directiva de la Caja y en otras instituciones, mediante un supuesto proyecto de ley, sentenció, en palabras que no es conveniente repetir.
Resulta que, aunque él, quizá por casualidad, sí conoce, cuáles cámaras, federaciones, asociaciones…, se reúnen bajo el paraguas formal de la “Unión Costarricense de Cámaras y Asociaciones del Sector Privado” (UCCAEP) es oportuno que nosotros lo recordemos, para tener una mejor idea de la magnitud de la organización calumniada, de hacia dónde lanzó, uno de sus últimos y más duros ataques, de los usuales en el montado show de media semana.
Advertimos que la lista no es pequeña. ¡Veamos!
Algunas de las cámaras representadas en la UCCAEP, son las siguientes: Alianza Empresarial para el Comercio Seguro – BASC Costa Rica – Asociación Bancaria Costarricense (ABC), que reúne a todos los bancos, públicos y privados. – Asociación Costarricense de Agencias de Carga y Logística (ACACIA) – Asociación Costarricense de Escuelas y Facultades de Medicina (ACOFEMED) – Asociación Costarricense de Grandes Consumidores de Electricidad (ACOGRACE) – Asociación Costarricense de la Industria del Plástico (ACIPLAST) – Asociación Costarricense de Productores de Energía (ACOPE) – Asociación de Aseguradoras Privadas de Costa Rica (AAP) – Asociación de Empresarios Colombianos en Costa Rica (AECOL) – Asociación de Empresas de Zonas Francas de Costa Rica (AZOFRAS) – Asociación de Importadores de Vehículos y Maquinaria (AIVEMA) – Asociación de la Industria Farmacéutica Nacional (ASIFAN) – Asociación Nacional de Exportadores de la Industria Textil (ANEIT) – Cámara Costarricense de Corredores de Bienes Raíces (CCCBR) – Cámara Costarricense de Empresas de Factoreo – Cámara Costarricense de Hoteles (CCH) – Cámara Costarricense de Importadores de Graneles (CACIGRA) – Cámara Costarricense de la Industria Alimentaria (CACIA) – Cámara Costarricense de la Salud (PROMED) – Cámara Costarricense de Porcicultores (CAPORC) – Cámara Costarricense de Tecnologías de Información y Comunicación (CAMTIC) -Cámara Costarricense de Transportistas Unitarios (CCTU) – Cámara Costarricense Norteamericana de Comercio (AMCHAM) – Cámara de Comercio Exterior de Costa Rica (CRECEX) – Cámara de Consultores en Arquitectura e Ingeniería – Cámara de Empresarios del Combustible – Cámara de Industrias de Costa Rica (CICR) – Cámara de Infocomunicación y Tecnología (INFOCOM) – Cámara Costarricense de Médicos y Cirujanos – Cámara de Propietarios de Bienes Inmuebles de Costa Rica (CAPROBI) – Cámara de Publicidad Exterior (CAPEX) – Cámara Forestal Madera e Industria de Costa Rica – Cámara Nacional de Agricultura y Agroindustria (CNAA) – Cámara Costarricense de Navieros (NAVE) – Cámara Nacional de Avicultores de Costa Rica (CANAVI) – Cámara Nacional de Azucareros – Cámara Marina de Bananeros (CANABA) – Cámara Nacional de Cafetaleros (CAMCAFE) – Cámara Nacional de Comerciantes Detallistas y Afines (CANACODEA) – Cámara Nacional de la Educación Privada (CANAEP) – Cámara Nacional de Procesadores y Tostadores de Café – Cámara Nacional de Radio y Televisión (CANARTEL) – Cámara Nacional de Radiodifusión (CANARA) – Cámara Nacional de Transportes de Carga (CANATRAC) – Cámara Nacional de Turismo (CANATUR) – Comunidad de Empresas de Comunicación Comercial de Costa Rica – Consejo de Desarrollo Inmobiliario (CODI) – Federación Centroamericana de Laboratorios Farmacéuticos (FEDEFARMA) – Federación de Cámaras del Caribe h(FEDECARIBE) – Unidad de Rectores de las Universidades Privadas de Costa Rica (UNIRE) – Federación Nacional de Cámaras de Comercio y Asociaciones Empresariales (FEDECÁMARAS).
Esta información nos permite concluir, que, mediante sus representas, y acuerdos que regularmente se hacen públicos, la UCCAEP satisface plenamente la Ley Orgánica de la CCSS, en lo relativo a la representación patronal… aunque el Chaves afirme que no, y que él tiene una mejor idea. Cosa que, por los antecedentes, dudamos que sea así.
Mucha pena nos produce la infeliz resolución de la Dirección Jurídica de la Dirección General de Migración, publicada por su director general, don Omer Badilla Toledo, con la cual se trata de justificar, la actitud cómplice del presidente Chaves, con Donald Trump, vinculada a la repudiada deportación de migrantes desde suelo estadounidense.
Se trata de un texto, lleno de roces con la Ley General de Migración y Extranjería (N° 8764) que, aunque se sabe, ha de respetarse en su totalidad, no lo ha sido. Leemos en dicha resolución, que la misma se emite «en razón de la política migratoria adoptada por el gobierno de los EUA», y porque, «conforme a negociaciones realizadas entre los dos Gobiernos, Costa Rica aceptó recibir personas extranjeras que serán deportadas de los EUA, con el fin de que se materialice su retorno a los respectivos países de origen o destino final». Ya desde allí, se percibe cierta desagradable sumisión.
Aparte de que no se ha informado acerca de lo negociado o convenido, a cambio del almacenaje en Costa Rica (así lo percibimos), de esos «delincuentes«, según Trump, se infiere de la lectura de esa ilegal, vergonzosa e indigna resolución del Poder Ejecutivo, que los inmigrantes forzados, indebidamente tratados, parecieren estar jugando el papel, de «monedas de cambio«. Trabajadores miserables, que fueron sacados a la fuerza de sus viviendas y trabajos, sin importar sus relaciones afectivas y familiares, sus llantos, sus ruegos, para concentrarlos en, muy oportunas cárceles privadas, sin trámites legales y sin consideración alguna a sus muy posibles padecimientos médicos, crónicos, o provocados, como consecuencia al trato inhumano que recibieron, para luego, en su paradójico “Día D”, obligados a montarse en aviones militares, sin conocer lo que les esperaba al final de ese tétrico viaje. Y ello, como castigo, a haberse atrevido un día, a huir del hambre, la miseria, la violencia, vivida en países con antidemocráticos regímenes, principalmente, asiáticos. Así, dejaron atrás a sus familias, sus amigos, sus barrios, en un esfuerzo desesperado por sobrevivir, trabajando, así lo esperaban, en el país que por muchos años se ha nutrido de inmigrantes; algunos recibidos simbólicamente, por la formidable estatua de La Libertad, a su llegada a la ciudad de Nueva York.
Ante esa triste realidad, que ha provocado el rechazo, entre otros, de la gran mayoría de las denominaciones religiosas del planeta, que, como la iglesia católica, han suplicado misericordia por esos hermanos, no deja de conmovernos, el solo pensar, cómo se sentirán de impotentes, esas personas, tan lejos de sus padres, hermanos, e hijos, sufriendo de soledad, quizá solo esperando morir, a manos de esos soldados que les mueven de un lado para otro, cual si fueren parte de una manada de animales.
Costa Rica, todavía valorado en el mundo, como un país amante de la paz, del respeto a los sagrados Derechos Humanos, caracterizado por una democracia estable, preocupado por la justicia social, solidario, asiento de un pueblo noble, tiene mucho que perder con este oculto convenio, acordado por los dos gobiernos involucrados. De un día para otro, nuestra nación ha sido involucrada, en una acción repugnante que ejecuta su «principal socio comercial», según los nuevos tiempos mercantilistas. ¡Ya no son Thomas Jefferson y Abraham Lincoln, los modelos a seguir!; ahora el surafricano Elon Musk y el cubano- americano Marco Rubio, son los que importan.
El papa Francisco sintetizó así, la situación creada: «El acto de deportar personas que en muchos casos han dejado su propia tierra por motivos de pobreza extrema, de inseguridad, de explotación, de persecución o por el grave deterioro del medio ambiente, lastima la dignidad de muchos hombres y mujeres, de familias enteras, y los coloca en un estado de especial vulnerabilidad e indefensión».
Por otro lado, más allá de la dimensión humana de los acontecimientos, analicemos parte de la situación en el ámbito formal, legal, institucional.
Si los representantes consulares de Costa Rica tienen la delicada y exclusiva potestad, de actuar como agentes de migración en el exterior, incluyendo por supuesto, en los Estados Unidos de América, ¿quiénes dispusieron apartarlos de sus responsabilidades? ¿Ante cuál autoridad, a las personas deportadas, les presentaron, en Costa Rica o en los EUA, las correspondientes solicitudes de ingreso a nuestro país? Si no portan pasaportes o salvoconductos, como mínimo, ¿no es eso, causa de impedimento para ingresar, e este caso particular, por el aeropuerto internacional Juan Santamaría? Si las supuestas visas para ingresar al país, los extranjeros deben solicitarlas cuando la persona está en el exterior, ¿bastaría con levantar, en la oficina de Migración del aeropuerto, una lista informal, con las supuestas identidades de las personas transportadas en unos aviones militares?
¿Cumplen esos 200 seres humanos deportados, con los requisitos de seguridad y salubridad, que manda la legislación costarricense?
Por otro lado, si no se trata de residentes temporales, asilados o refugiados, ¿en cuál de los 268 artículos de la Ley N°8764, aprobada durante la administración Arias Sánchez, se establece una innovadora categoría, que podríamos llamar, «deportados de desconocida nacionalidad, traídos al país en aviones militares«?
Si la ley dice que «Todas las personas que lleguen al país serán sometidas al correspondiente control migratorio, con el fin de determinar si están en condiciones de ser o no admitidas, de conformidad con las disposiciones legales y reglamentarias vigentes», ¿se cumplió tal mandato, o simplemente, dieron por un hecho que se estaba ante una evidente ilegalidad, que había que disimular?
Pero aún hay más. ¡Veamos!
Se trata de extranjeros, que, por la fuerza, ingresaron a Costa Rica, en ejecución de un supuesto convenio o acuerdo internacional, suscrito por el presidente de la República, no aprobado por quien le corresponde, o sea, por la Asamblea Legislativa. ¿Será que estamos frente a ¡otra violación al principio del respeto a la separación de poderes!, de parte del Poder Ejecutivo?
Pero, bueno, como sea, lo cierto es que ingresaron y los tienen «almacenados», por tiempo indefinido, en un lugar cercano al paso fronterizo con Panamá, donde, gracias a Dios, se han hecho presentes organizaciones que velan porque se les respete, al menos, sus Derechos Humanos, y convenios internacionales que procuran velar por los migrantes.
En cuanto al tiempo en que permanecerán en suelo costarricense, surge otra interrogante. Y es que, nadie, ni el presidente Chaves, responsable de lo convenido, podría garantizar, su eventual salida del territorio tico, hacia Panamá en 30, 90 o 100 días, o en meses o años, pues, los supuestos 30 días de permanencia, dice el director general de Migración, en su resolución, son prorrogables «mientras desaparecen los motivos que le impiden a la persona, continuar con su viaje». O sea, si los panameños no pueden, o no quieren recibirlos, los maltratados deberían seguir hacinados por tiempo indefinido, algo así, como en un campo de concentración, un albergue, o una cárcel, según lo perciba cada persona. “Pero no hay que preocuparse”, más o menos dice nuestro presidente, “el gobierno de Washington, paga por el pan que se coman…”
Como parte de este embrollo, pese a la colección de ilegalidades, que este biólogo amigo de ustedes, parece percibir, creemos que al buscar una solución al grave problema creado por el Poder Ejecutivo, se habrá de tomar en cuenta, la Ley General de Migración y Extranjería, que en algún momento debió de respetarse. En ella, por ejemplo, leemos que «Las personas extranjeras gozarán de los derechos y las garantías individuales y sociales reconocidos para las personas costarricenses en la Constitución Política, salvo las limitaciones que esta establezca. Las normas relativas a los derechos fundamentales de las personas extranjeras se interpretarán conforme a los convenios en materia de derechos humanos y a los tratados y acuerdos internacionales ratificados que se encuentren vigentes y, específicamente, por lo siguiente:
1)Toda persona extranjera tendrá derecho de acceso a la justicia, al respeto de las garantías del debido proceso, al derecho de defensa y al derecho de petición y respuesta. 2) Las personas extranjeras que cuenten con autorización para permanecer en el país podrán circular libremente por el territorio nacional, por el tiempo que defina la autorización. 3) Las personas extranjeras estarán sujetas a los requisitos fijados en esta Ley, su Reglamento y en otras normas jurídicas aplicables, para ingresar al país, permanecer en él o egresar de él«.
Párrafos que resumen muy bien, el civilizado pensamiento costarricense sobre tan sensible materia, y que, de paso, evidencian el chicharrón en que nos han metido, con ese apresurado convenio y atropellada resolución.
Pero, hay todavía más. Resulta que la tal «resolución», suscrita por el señor Omer Badilla Toledo, viceministro de Gobernación y Policía, en ciertos párrafos, se refiere, en forma descuidada, a “refugiados”(¡que no lo son!) o «a la persona extranjera beneficiada con este permiso», cual si se hubiera tramitado y concedido permiso de residencia alguno. Y agrega el viceministro citado, que si «la persona extranjera beneficiada con esta resolución», comete algún delito, «se le revocará de inmediato el permiso otorgado«, y se le aplicará la legislación pertinente. Preguntamos, ¿Lo deportarían? ¿Verdad que parece un chiste de mal gusto?
Párrafo que parece ser un vergonzoso «copy paste» de un caso totalmente diferente, seguro usado, para darle bulto a la tal resolución de la asesoría jurídica de Migración, ante lo inédito de un misterioso convenio, que, por complacer al secretario de Estado Marco Rubio, en representación de Donald Trump, fuere convenido, sin que les importara el debido sustento legal.
Para terminar, ¡he aquí otra perla!: «Las personas migrantes beneficiarias de la presente resolución, no podrán permanecer en el territorio nacional en forma irregular«, dice la resolución publicada en La Gaceta del 18 de febrero recién pasado.
Si se les está forzando a permanecer en suelo tico, en forma irregular, obviamente, en contra de su voluntad, ¿cabe esa condición?, además del cinismo de llamarlas “migrantes beneficiarias”.
En fin, es otra muestra más de lo que, por medio de una “resolución”, emitida por una dirección de un ministerio, se le quiere dar carácter formal a un acto ¡jamás antes sucedido en Costa Rica!, que obliga a ser valorado por quienes corresponda, desde el punto de vista jurídico y, por supuesto, político. Si se le deja pasar, cual, si se tratara de algo intrascendente, no sería extraño que se siguiere repitiendo, una y otra vez, con las consecuencias que ello tendría para el prestigio de esta maltratada Patria. No merece Costa Rica tal atropello.
Cuerpos destrozados, desmembrados, quemados, imposibles de identificar, después de la espantosa explosión, yacían por doquier. Gran parte de la terminal portuaria, y grandes extensiones de Texas City, condado de Galveston, habían sido arrasadas, por un estruendoso estallido, sucedido en el buque de carga S.S. Grandcamp, desde donde se generó una instantánea y violenta onda expansiva, seguida por ardientes e inmensas llamaradas. Cinco mil heridos, y alrededor de 600 personas, de todas las edades, fallecidas, fue el resultado de esa catástrofe, sucedida el 16 de abril de 1947. Suceso inolvidable, recordado con mucho dolor, por los damnificados que vivían, incluso, a varios kilómetros del lugar.
Otra muy similar explosión, ocurrió en agosto del 2015, en el puerto de Tianjin, al norte de China. Destrozados sus órganos internos, por la potente onda expansiva, seguida por llamas infernales, dejaron por su veloz paso, cientos de heridos moribundos, y, oficialmente, 173 muertos. El desastre fue total, estimándose que la detonación, literalmente ensordecedora, fue equivalente a la explosión de ¡256 toneladas de dinamita!
Provocadas por la misma causa, una treintena de explosiones, se han contabilizado en el mundo, a partir del 1916, por lo cual, no se puede afirmar, que ese tipo de explosiones accidentales, sean «muy raras», porque, en realidad, no lo son; los hechos así lo demuestran.
Otro caso, particularmente impactante, sucedió en 1921, en una planta en Oppau, Alemania, donde 4.500 toneladas de nitrato de amonio, como en los casos anteriores, causaron una dantesca explosión, que provocó la muerte a ¡más de 500 personas, y más de mil heridos graves!, que hicieron colapsar los servicios hospitalarios.
En América Latina, los hermanos argentinos, sufrieron el atentado más trágico de su historia, un 18 de julio de 1994, cuando una explosión, también con nitrato de amonio, destrozó la sede de la Asociación Mutual Israelita Argentina (AMIA), dejando un saldo de 85 muertos y más de 300 heridos.
Un año después de la tragedia vivida en Argentina, sucedió otro caso muy doloroso, esta vez en Estados Unidos, en abril de 1995, cuando los terroristas Timothy McVeigh y Terry Nichols, usaron dos toneladas de nitrato de amonio, para un ataque con un camión bomba, contra un edificio federal de la Ciudad de Oklahoma, provocando la muerte de 168 personas, y cientos de heridos graves.
Los anteriores ejemplos tienen en común la misma causa, una sustancia química, sólida, cristalizada, usada para fabricar explosivos para minería y para demoliciones de grandes estructuras como edificios y represas, y como materia prima para la industria de fertilizantes. Hablamos del nitrato de amonio, que, pese a que no es explosivo por sí mismo, sí provoca, como potente agente oxidante, explosiones tan grandes como las anotadas, cuando, circunstancialmente, alguna sustancia cercana alza llama, o cuando se usa como arma mortal por grupos terroristas, que lo combinan con un detonante.
Antes de justificar ante ustedes, amigos lectores, la razón de esta urgente llamada de atención, que en verdad esperamos sea atendida por nuestras autoridades, por su importancia, cabe anotar sobre otra terrible explosión de nitrato de amonio, sucedida hace tan solo cuatro años y medio, en el puerto de Beirut, en el Líbano. Resulta que, desde una bodega, cercana al muelle, que contenía 2.750 toneladas del producto, que habían sido incautadas a un barco ruso, de bandera eslovena, supuestamente almacenadas en condiciones seguras (¡como siempre aseguran!), cumpliendo todas las regulaciones ambientales. Ello, aunque las autoridades del puerto habían advertido, varias veces, del peligro que significaba la presencia de esa sustancia en el lugar, por lo que urgían su remoción.
La explosión fue tan violenta, que el Observatorio Sismológico de Jordania estimó la energía liberada por la explosión, comparable con la de un terremoto de magnitud 4.5 en la escala Richter. En tanto el Servicio Geológico de los Estados Unidos, aunque informó que la explosión se midió como un terremoto de magnitud 3,3, estimó que su magnitud quizá fue mayor, pues fue a ras del suelo, donde se formó un cráter de 43 metros de profundidad.
Los fallecidos fueron unas 170 personas, los heridos graves más de 5.000 y, provocó el desplazamiento de unas 300.000 personas, entre ellas, 80.000 niños, pues fue tan grande, que también se sintió en Turquía, Siria, Israel, Palestina, partes de Europa, e incluso se escuchó en Chipre, a más de 240 km de distancia.
Pues bien, con esos antecedentes, suficientemente conocidos y documentados, habitantes del vecino Panamá, luego de que, por protestas públicas, se lograra el cierre de una gran mina de cobre, que se desarrollaba en una zona colindante al Parque Nacional La Amistad, que compartimos ticos y canaleros, se percataron que, en el lugar, están depositadas cerca de 8.000 toneladas de nitrato de amonio, ¡cantidad varias veces superior, a las 2.750 toneladas que provocaran la tragedia en Beirut!
Y, obviamente preocupados por la seguridad y supervivencia de sus compatriotas de todas las edades, los hermanos panameños, con la energía y responsabilidad, que demanda una situación semejante, exigieron a su gobierno, obligar a la empresa minera, a sacar rápidamente de su territorio, hasta el último kilogramo del potente químico, propiedad, aparentemente, de otra empresa dedicada a la fabricación de explosivos.
Lo que menos imaginaron los panameños, y por eso, preocupados nos advirtieron de ello, es que el destino escogido para almacenar el nitrato de amonio que, con razón les desvela, es, nada menos, que el territorio costarricense. Según se ha informado, las primeras 2.000 toneladas de nitrato de amonio, se transportarían por tierra, hacia el cantón puntarenense de Esparza, localidad de Macacona, donde la empresa dueña del producto químico, tiene un terreno donde podría depositarlo. Información confirmada por periodistas del Semanario Universidad, el recién pasado 28 de enero, y el periódico La Nación, en su edición del 5 de febrero, donde se identifica a la propietaria del nitrato de amonio, con el nombre de Austin Powder; con casa matriz en Cleveland, Ohio, dedicada a la industria de explosivos, dice su página de Internet.
Aunque la prensa consigna que esa empresa estadounidense, dueña y a cargo del transporte por tierra, informa que se trata solo de una parte (2.000 toneladas) del total almacenado en Donoso, Panamá, los vecinos del sur nos confirman, que el compromiso es sacar, de suelo panameño, todo lo allí depositado, y que, así lo exigirán. Tal evidente contradicción, entre otras, habrá de aclararse con los representantes de la citada empresa, por parte de nuestras autoridades ministeriales.
Por ejemplo, nuestra legislación ambiental, ejecutada por la Secretaría Técnica Nacional Ambiental (Setena), establece que, por las características de ese proyecto, indiscutiblemente clasificado como de Alto Impacto Ambiental Potencial, “en función de la naturaleza de su proceso productivo, y de sus efectos ambientales combinados, acumulativos o individuales”, que, como en este caso, se relaciona con el peligroso transporte por tierra, de miles de toneladas de nitrato de amonio, así como de su almacenamiento, de la posible fabricación de explosivos, y de su manejo en general.
Pese a que desconocemos el expediente procesado en la Setena (que nos comprometemos a analizar), con el cual se habría otorgado la Viabilidad Ambiental a tan amenazante proyecto, nos atrevemos a especular, que dentro de los aspectos ambientales de relevancia, que seguramente habrían sido tomados en cuenta, han de haberse considerado, los importantes criterios relacionados con la dimensión, pues es totalmente diferente, hablar de 200 toneladas de nitrato de amonio, comparado con 2.000, o, como afirman en Panamá, 7.800 toneladas.
Frente a esas circunstancias, se manejan aspectos ambientales, definidos por la misma Setena, que incluyen, entre otros, «El manejo de sustancias peligrosas (por ejemplo: combustibles, agroquímicos, explosivos, u otras sustancias químicas o biológicas peligrosas)». En fin, se trata de aspectos pertinentes, muy conocidos, por los profesionales de la Setena, así como por los que, en el MOPT y el Ministerio de Salud, habrían otorgado, imaginamos que ¡con especial cuidado!, los permisos relacionados con las particularidades del transporte, de algo tan impactante, como son las características de los vehículos usados, las rutas en nuestro país, los horarios, accidentes potenciales, atención de emergencias, etcétera, así como el lugar del almacenamiento, comunidades cercanas, características de la planta física, capacitación del personal, tiempo del almacenamiento, posible reexportación del químico, etcétera, y, por supuesto, los muy relevantes permisos otorgados por la Municipalidad de Esparza, ojalá, en estrecha coordinación, con los tres ministerios responsables de la seguridad de los habitantes, MINAE, MOPT y Salud.
Por la trascendencia que tienen las medidas de control y mitigación de eventuales accidentes atendibles, los costarricenses todos, y los habitantes de Esparza y otras localidades cercanas al kilómetro 101 de la carretera Interamericana norte, solicitamos públicamente a las autoridades ministeriales y del gobierno local, que han tenido que ver con los permisos otorgados a este proyecto de alto impacto ambiental, una aclaración en que, con los detalles imprescindibles, le aclaren a los habitantes las particularidades del mismo, y el por qué le fueron otorgados los permisos que, suponemos, fueron tramitados. La prudencia es sabia consejera, es oportuna, es fundamental, para prever la posibilidad de una horrorosa explosión con nitrato de amonio, que, como hemos analizado, no es inevitable.
Imagen: explosión ocurrida en Beirut aportada por el autor.
La indecisión, terminó venciendo a los cogobernantes Cisneros Chaves. No pudieron ponerse de acuerdo, sobre cuál ministro, sería el designado como candidato presidencial de Zapote, y se les acabó el tiempo. Luis Amador, «era el hombre», en quien se había invertido el mayor esfuerzo, pero el sospechoso pago de más de ¢1.000 millones a la constructora MECO, empujado por el Chaves y tramitado obedientemente por él, se lo trajo abajo, cual «chivo expiatorio». El Chaves no podía ser más su sombra; tenía que alejarse, y, así, se le cayó el candidato.
Ante ese contratiempo, por apresurarse a aplaudir, segura de ganarse «esa vacante», la libertaria Natalia Díaz, fue fumigada, desaparecida. Ante eso, Cisneros-Chaves, se trajeron a Laura Fernández, quien estaba vegetando en MIDEPLAN. Sin embargo, a pocos días de ponerla en el escenario del show semanal de mediodía, en Casa Presidencial, empezaron sus torpezas. Entre ellas, el pésimo manejo del proyecto de referendo, de la mano de Fabián Volio, Otto Guevara, Édgar Espinoza y José M. Villalobos, que fueron incapaces, de redactar un proyecto de ley, que no tuviese vicios de inconstitucionalidad. Al suceder así, se derrumbó, como un castillo de naipes, toda la estrategia de campaña electoral, que habría movilizado, se esperaba, a mucha gente por todo el país. Algunos lelos, hasta andaban recogiendo firmas, sin tener más que la foto del manoseado jaguar. Pero siguieron las torpezas. Una, que provocó hilaridad, fue la de ubicar el paso fronterizo de Peñas Blancas, ¡en el cantón de San Ramón!, y otra fue, en referencia a un asunto, de esos que, usualmente, no logra entender, dijo que era como tener «tigre amarrado contra burro suelto». Ni con la Media Docena nos hemos reído tanto. Lo que la gente cuenta, es que, al ser, por años, la «mano derecha» del alcalde de Cartago, el «genial» Mario Redondo, se habría contagiado de algunas de sus «virtudes». Por tanto, por eliminación, la ministra Fernández, perdió los pocos puntos, que la habrían llevado a la candidatura.
«Entonces, ¿qué podemos hacer?», se preguntó la pareja presidencial. Édgar Espinoza, quien por años le ha redactado los discursos, a su esposa Pilar, la buena lectora de noticieros, está muy cómodo y entretenido, haciendo esa tarea. Declinó, por tanto, ser candidato.
Buscando, apresurados, miraron hacia Quesada, el del AyA, ex Recope, pero ¡qué va!, ese está «con el agua al cuello», a punto de ahogarse, y, como era esperable, fue descartado.
Otro, podría ser, Batalla, el del MOPT, dedicado a medio terminar, algunas obras que le dejó don Rodolfo Méndez Mata, por lo cual, tiene poco que mostrar, aparte del malestar que provoca, la inauguración de obras inconclusas, como el puente del Saprissa, o «puente de las presas», o las incómodas rotondas en Hatillo. Además, su imagen «acartonada», como que no le ayuda.
En fin, al acabársele el tiempo, a los actuales ministros, a Cisneros-Chaves no les quedó más, que invitarlos a saltar al redondel, a ponerse las botas, y, como en el Coliseo Romano, a luchar por sobrevivir, ante las autoridades del imperio, donde, aunque parezca increíble, ¡hasta la Müller entró al juego!, después de analizar el horóscopo. ¿Habrá un ganador?
«Quien pone la música, manda en el baile», o como dijo: «Bailamos la música que haya que bailar.». Así de indigno, refiriéndose a Trump, es el mensaje, que el presidente de Costa Rica envía a Panamá, a México, y a todos los hermanos países latinoamericanos.
Y es que, sobre las irrespetuosas pretensiones del nuevo filibustero norteamericano, sobre el territorio panameño, el Chaves repitió las mentiras de Trump. Aunque parecía sobrio en su show público semanal, desde Zapote, se inventó «una negociación bilateral», ¡que no cabe!, por cierto, pues no hay nada que negociar, entre la pequeña y desarmada República de Panamá, y la gran potencia mundial, administrada desde Washington.
Para el mandatario tico, hay que negociar «sobre la influencia de China en la administración del canal», según él, ejercida mediante «un contrato desde hace unos 25 años», y sobre «las tarifas» que cobra Panamá, por el paso de los barcos.
Así, para bailar al son de Trump, miente sobre la realidad, que se conoce muy bien, y se adelanta a apoyar a los Estados Unidos en los irracionales reclamos de su presidente.
¡Claro que, a los costarricenses, nos avergüenza la actitud de nuestro mandatario!, y, por ello, humildemente, ofrecemos disculpas, aunque, por suerte, valoramos muchísimo, el acuerdo ejemplar, de la Asamblea Legislativa de Costa Rica, en que se repudian las irrespetuosas intenciones de Trump, expresadas días antes de regresar a la Casa Blanca.
En medio de tanta desinformación y prejuicios, contra todo lo estatal, algunos no se han enterado, que no solo los trabajadores del Estado pueden recibir el salario escolar.
Resulta que gracias a la Ley N.º 8682 para la promoción del salario escolar en el sector privado, el Banco Popular ofrece un producto voluntario, a partir de un porcentaje del salario bruto del trabajador (entre un 4.16% y el 8.33%)., donde los aportes realizados se devuelven, en su totalidad, en los primeros quince días del mes de enero de cada año.
Asimismo, a partir del tercer año desde la fecha en que el trabajador lo formaliza, la persona también recibe –según lo solicite– entre el 50% y el 90% de los intereses que genere su “Ahorro Salario Escolar”. Estableciéndose, además, que cada cinco años, ese trabajador podrá retirar el 100% de los rendimientos generados.
Se trata de ahorros exentos del impuesto sobre la renta, inembargables (excepto por pensión alimentaria), y los aportes mensuales, los realiza en forma directa el patrono, a través de una deducción de salario, determinada por el trabajador.
Así, gracias a esta buena legislación, este enero el Banco Popular está entregando cerca de ¢1.064 millones a un total de 12.681 trabajadores.
Las narraciones bíblicas y los estudios de los expertos nos confirman, como en Lucas 2; Juan 3:16; Juan 10:10b, que el viaje de 130 kilómetros, por caminos de piedra y tierra, para asnos y otras bestias, y estando muy cercana a dar a luz, fue particularmente peligroso y agotador para la jovencita adolescente Virgen María. Travesía en la que seguramente habría estado a punto de perder el sentido, por el hambre, la sed, la debilidad, pero que no podía detenerse, pues, movidos María y José, por el cumplimiento de una orden imperial, para ellos era, más que todo, una cuestión de fe.
Seguramente, en algunos momentos, tendrían que haberse detenido y caminado, para descansar de la muy incómoda posición que llevaba en la albarda del burrito que, también requería, agua, alimento y descanso. La imagen que imaginamos es la de José, descendiente del rey David, siempre caminando adelante, dirigiendo los pasos y la mirada en busca del pueblito de Belén de Judea, allá lejos, a 775 metros sobre el nivel del mar.
El alimento, como sucede para infinidad de migrantes actuales, era muy escaso. El agua casi ausente. El clima implacable, y los días y noches en que durara el viaje, los pasaban a la intemperie. Fue más de una semana de caminar lento, y especialmente doloroso para la jovencita María, hasta que eventualmente llegaron a Belén, tierra natal de José, donde sus penalidades, con María a punto de dar a luz, más bien se multiplicarían, para ellos, y el Hijo de Dios que estaba por nacer.
Allí, todas las puertas se les cerraron, pues los ocupantes jamás se imaginaban que se trataba del nacimiento del esperado Mesías, que venía a este mundo, designado a sufrir un martirio inimaginable, voluntario, sangriento, pero pleno de amor para abrir las puertas celestiales a la humanidad.
Lo paradójico es que, sin nacer el Hijo de Dios, esa misma humanidad, ya ejecutaba su persecución y sentencia injusta, pues desde entonces, desde hace más de dos mil años, los pueblos ya sufrían una particular ceguera.
Después de nacido el Divino Niño, en un pesebre en que comen los animales domésticos, narra la historia bíblica, que dormía José, cuando fuese despertado por un Ángel, quien le advierte de la persecución que ejecutará el gobernante criminal.
El evangelista describe cómo «Después que ellos partieron, un Ángel del Señor apareció en sueños a José, diciéndole: Levántate, toma al niño y a su madre y huye a Egipto, y estate allí hasta que yo te avise; pues Herodes ha de buscar al niño para matarle. Levantándose José, tomó al niño y a su madre, de noche, y se retiró a Egipto”. (Mt 2, 13-14).
Cabe resaltar que Egipto era el país clásico de refugio político por ser provincia romana. Allí había muchos judíos, colonias florecientes en barrios habitados por ellos, que prestaban socorro a sus conciudadanos.
Y, al igual que sucede con los migrantes de hoy, la Sagrada Familia inició un viaje que no sabían tenían que realizar. Un viaje a Egipto, sin duda, doloroso, al extranjero, sin conocer el sendero, ni las costumbres, ni la cultura, ni el idioma, sin saber lo que les esperaba para sobrevivir y proteger al hijo recién nacido.
Parte así la familia migrante, y al amanecer, se muestra la imagen muy conmovedora, solitaria, de un pequeñito recién nacido, abrigado en los brazos de su madre, una Adolescente Virgen, en el lomo de un burro, siguiendo el rumbo que le marca el padre que camina sin descanso por delante. Sin mirar atrás, y con paso apresurado para que los soldados del sátrapa gobernante, no les alcancen; migrantes con destino incierto… como los de hoy.
En la emigración de la Sagrada Familia hacia Egipto, «Mateo ve detrás de la desgracia de la persecución del Niño y la muerte de los inocentes el cumplimiento del designio de Dios en la formación del nuevo pueblo a través de Jesús«.
Este 24 de diciembre del 2024, con gran dolor en el alma, vemos como, debido al genocidio que padece el pueblo palestino, otra vez no se pudo celebrar la Noche Buena en el pueblito de Belén. Donde debería de predominar la paz, se escuchan, por doquier, los llantos y lamentos de los niños, de los ancianos, de todos los inocentes, masacrados indiscriminadamente, para quienes no hay “Feliz Navidad” que valga.
Sobre una queja de la Cisneros, en cuanto a que es una barbaridad que el Chaves no pueda entrar a las instalaciones del Banco Mundial y el FMI, cabe recordar que, en el fallo en que un Tribunal del BM en Nueva York, lo sanciona, el 7 de junio del 2021, por varios casos de acoso sexual, se toma la siguiente decisión:
«(1) El Banco tomará las medidas razonables para notificar a las Solicitantes, con anticipación, sobre las, siguientes circunstancias: (i) cualquier caso en el que Mr. C busque acceder a las instalaciones del BM o del FMI». Asimismo, como «Mr. C» había renunciado antes del fallo final que le impone varias sanciones, el Banco Mundial tuvo que pagar a dos de las jóvenes, «los honorarios y costos legales de las Solicitantes por un monto de US$ 64,838.00», que no se le podrían cobrar a «Mr. C», por estar ya en Costa Rica.
O sea, el presidente de Costa Rica sí puede poner pie en el Banco Mundial y el Fondo Monetario Internacional, pero, para protección de las muchachas acosadas que allí laboran, a ellas se les debe notificar, que «Mr C» estaría llegando a esas instalaciones… ¿Feo verdad?
Vivimos momentos álgidos alrededor de la institucionalidad de Costa Rica, de tan profundas raíces históricas. Al revisar acciones reiteradas del cogobierno Chaves-Cisneros, vemos que intencionalmente, con perversas intenciones, han arriado los símbolos patrios, y, con ellos, caros valores característicos del ser costarricense. Ante ello, y cuando todavía estamos a tiempo de rescatar la nación que ellos desprecian, sentimos la necesidad de nutrirnos del pensamiento y la acción, de grandes compatriotas.
Por ello, rescatamos un mensaje brotado de su corazón, de gran sentido, que el expresidente don Rodrigo Carazo, enviara por correo-e, dos años antes de fallecer, dirigido a los cientos de miles de compatriotas, que se habían “atrevido” a enfrentar la ola neoliberal que, desde entonces, permeaba la dirigencia política nacional, y que, se expresaba como parte de un TLC negociado a espaldas del pueblo.
Hoy, aunque la emergencia tiene matices diferentes, demanda de voces como la del querido gran patriota, que desde cualquier posición en que se encontrara, siempre fue ejemplo de entereza. Su amor por Costa Rica, siempre estuvo por encima de cualquier calculillo partidista, y por ello, se ganó, aunque todavía a algunos les duela, el cariño y agradecimiento de su pueblo. No está con nosotros, pero sí su mensaje oportuno, que, esperamos, sea una invitación a reflexionar, acerca del presente y el mañana de Costa Rica.
Nos dice don Rodrigo, lo siguiente:
“Queridas mujeres y hombres dignos de la Costa Rica de siempre.
Amigas y amigos que saben respetar los valores cívicos que engalanan a esta Patria madre de todos aquellos que realmente la honran.
¡Ustedes han escrito historia!
Ya sabemos bien quiénes la aman y respetan y cuáles son los que realmente desean aprovechar en su exclusivo beneficio lo que es Costa Rica.
¡Cómo han llorado nuestros cielos después del 7 de octubre, el dolor de esta tierra desgarrada por el trago amargo producido por el miedo y la avaricia! Llorado tanto o más, que como nos duelen a todos, los males causados por un clima inclemente que golpeó a nuestros suelos.
Pero bien lo sabemos: Costa Rica es eterna y jamás será doblegada. Esclavos, de nadie.
Nadie en particular ganó el referendo. El triunfo ha sido del pueblo de Costa Rica, puesto que, en esta consulta popular, vimos claramente que estamos a punto de perder la Patria.
El Tribunal Supremo de Elecciones (TSE), es un poder en Costa Rica, por lo tanto, tiene deberes y responsabilidades que afrontar; hay reglas claras y precisas que no puede ignorar. El TSE ha confundido su misión: no fue creado sólo para contar votos. Su misión es enmarcar las elecciones populares dentro de la legalidad y la paz, debe ser objetivo y neutral y no permitir el más mínimo desacato a la Constitución y las leyes.
Mi posición como Expresidente me permite no pertenecer a ningún partido político, sino más bien, apoyar libremente todo lo bueno que cualquiera de ellos pueda aportar para el bien de los costarricenses y el progreso del país. Con esa libertad, es que hoy vengo a recordar que es la segunda vez – y en un lapso muy corto, 20 meses apenas – que el TSE ha sido indolente y descuidado, haciendo a un lado las leyes y las normas que deben regir un proceso electoral.
Conocedor del tristemente conocido “memorando del miedo”, el TSE permitió que se violara la tregua electoral, dejando que un embajador extranjero se metiera en el proceso y permitiendo que altas autoridades del gobierno, usaran todos los medios de comunicación (radio, periódicos y televisión) para asustar y propalar las amenazas que un gobierno extranjero le hacía a Costa Rica.
De esto que les digo, somos testigos todos en Costa Rica, por las declaraciones dadas por el propio Embajador desde el TSE, felicitándose por haber sido él mismo, el que había traído el comunicado de la secretaria de Comercio Exterior de su país, oficiosamente, ya que no fue un comunicado oficial de gobierno a gobierno. Esto es inadmisible y no podemos dejarlo pasar sin una firme protesta, no contra el país extranjero, sino contra un Embajador inescrupuloso.
La gesta valiente de los costarricenses que se expresaron de una manera contundente contra el TLC “vende patria”, a pesar de los enormes obstáculos que se les pusieron enfrente – El Poder del Dinero, el Poder del Gobierno y el Poder de la Prensa – debe ser recordada en nuestra historia. A pesar de todo eso sacamos el 48% – lo que indica que el resultado de ese referendo está parejo; que las autoridades del Gobierno y de la Asamblea Legislativa, deben medir muy bien esta circunstancia, especialmente porque en este referendo, no se votó por un candidato ni por un partido, lo que se “votó” fue la suerte de Costa Rica y de su pueblo y con eso no se puede jugar tan fácilmente.
Un candidato puede ganar por un voto de diferencia, pero la suerte de un pueblo entero no es posible definirla por un tan escaso margen, como el que se dio a pesar de la inequidad de la lucha, de la presión ejercida y de la debilidad del TSE. Y menciono de nuevo el dinero, porque bien sabemos que a Costa Rica no la puede comprar nadie. El dinero compra a los corruptos y a los necesitados. La gente con miedo desnaturaliza la razón de ser de la democracia.
Aprendimos que el interés de un pequeño grupo, logra la ausencia de una agenda social que podría ser instrumento histórico para enfrentar los efectos nocivos de este TLC. Debemos estar alerta y trabajar muy duro para mantenernos independientes.
Lo más importante: vimos a un pueblo valiente, decidido, poderoso, enfrentarse con un civismo digno de lo mejor de nuestra historia al Poder del Dinero, de la avaricia y de la sumisión al dominio político de las transnacionales, al que vimos hacer gala de posesión por medio de la corrupción que transforma la amistad y el respeto entre los pueblos en obediencia y servilismo.
Los grupos cívicos, los sindicatos, las organizaciones agrícolas y tantas gentes organizadas, dieron un ejemplo histórico.
Los comités patrióticos nos hicieron y hacen ver que la vitalidad de este pueblo es inagotable. ¡Benditos sean!
Aprendimos una lección que debe seguir dando frutos, en beneficio del bienestar popular y la democracia. Aprendimos que la Patria vale más que los partidos y los grupos. Aprendimos que el Poder del Pueblo nos hará recuperar los valores nacionales y que nada se agota mientras haya civismo. Aprendimos que podemos recordar los triunfos de nuestra historia y nos convencimos de que juntos seremos capaces de que todos los ciudadanos, recuperen la vergüenza como arma cívica y que de nuevo, por amor a las generaciones futuras, levantemos lo mejor de los valores nacionales como estandarte.
Sí, reafirmemos una realidad: la de que sabemos respetar y seguir la hora de Juanito Mora.