Estudio del IDESPO-UNA revela expectativas de posibles usuarios
Visitantes esperan que también el público en general pueda disfrutarlo
Natación, rescate, aquaeróbicos, buceo y clavado: las clases que deben impartirse, según los visitantes de La Sabana
9 de cada 10 visitantes a La Sabana opinan que el nuevo Centro Acuático deberá abrir al público en general, y no sólo a deportistas. Además esperan unas instalaciones modernas y espaciosas en las que se puedan impartir clases de natación, rescate, aquaeróbicos, buceo y clavado.
Estas cifras se desprenden de una reciente encuesta de percepción realizada por el Instituto de Estudios Sociales en Población de la Universidad Nacional (IDESPO-UNA) en noviembre anterior, entre visitantes del Parque Metropolitano La Sabana, usuarios y deportistas de la piscina María del Milagro París, ubicada en ese parque. “El objetivo era conocer qué opinan estas personas de cara a la construcción de lo que será el Centro Acuático más importante de Centroamérica, y que arrancaría a finales de año”, puntualizó Nelly López, directora del IDESPO.
El estudio también arrojó que “el 85% de los usuarios de la actual piscina María del Milagro París, piensan que un nuevo Centro Acuático debería preservar el paisaje natural. Además creen que la salud física sigue siendo el principal beneficio de la natación”, agregó María José Ureña, investigadora del IDESPO.
Según la consulta pública, los usuarios y deportistas de la piscina María del Milagro París, son personas entre los 36-64 años (49.8%) con educación universitaria completa (50.5%), y mujeres (62.5%). En su mayoría son de San José (83.7%) y la visitan ocasionalmente o solo en actividades especiales (28.6%), en promedio de 2 a 3 veces por semana (24.6%) en las mañanas preferiblemente. Llegan en autobús (41.8%) y vehículo propio (38.2%), utilizando la Ruta 27, y parqueando en los alrededores de las canchas de tenis (35.4%) o en el parqueo interno de La Sabana (32.3%).
Los encuestadores del IDESPO concluyeron que el 82% de los visitantes a La Sabana son josefinos, principalmente de zonas marginales como Pavas y Alajuelita, y casi un 10% provienen de Heredia, siendo el bus (40%) la más importante forma de movilización.
La encuesta del IDESPO, fue dada a conocer el pasado 16 de enero en conferencia de prensa, organizada conjuntamente con el Instituto Costarricense del Deporte y la Recreación (ICODER). Casualmente el ICODER, promotor del Centro Acuático, contrató los servicios del IDESPO para la ejecución del estudio, el cual forma parte de los trámites y requisitos del anteproyecto en mención.
*Más información. Oficina de Comunicación, UNA (2277-3067/2237-5929).
Imagen con fines ilustrativos tomada de http://gobierno.cr
El Instituto de Estudios Sociales en Población (IDESPO) de la Universidad Nacional (UNA) invita este miércoles 4 de octubre a las 9 a.m. a la conferencia de prensa para presentar los resultados de la encuesta: A 10 años del referéndum por el TLC: ¿qué elegirían hoy los costarricenses?, la cual se realizará en el Colegio de Periodistas de Costa Rica.
Investigadores del IDESPO presentarán un informe de esta encuesta, que revela datos como los siguientes:
La polarización continúa: un 44,1% de los costarricenses estaría a favor de mantenerse en el tratado, y un 44,5% apoyaría dejar el tratado, en caso de que fuera posible
Para la mayoría de la población los grandes empresarios son los beneficiados por el TLC; los pequeños y medianos, los trabajadores y productores agrícolas son los más perjudicados
Quienes votaron en el referéndum se informaron prioritariamente con análisis académicos, y casi no recuerdan el llamado “Memorándum del miedo”
Para mayores detalles en la Oficina de Comunicación, UNA. Teléfonos 2237-5929 / 2277-3067.
Personas de comunidades afectadas, organizaciones ecologistas, representantes sindicales y legisladores y legisladoras participaron en un encuentro para definir estrategias conjuntas y construir soluciones frente a las problemáticas socioambientales y laborales asociadas a la expansión intensiva y extensiva del monocultivo de la piña en Costa Rica.
El encuentro, realizado el pasado 4 de junio, fue un espacio para fortalecer y ampliar los esfuerzos de lucha contra la expansión piñera, y poder llevar esta acción a una escala nacional e internacional. Uno de los objetivos que se cumplieron en esta reunión fue construir un plan de acción conjunta ante esta problemática.
En la reunión participaron personas del Frente Nacional de Sectores Afectados por la Actividad Piñera (FRENASAPP), la Asociación de Iniciativas Populares Ditsö, la Coordinadora Norte Tierra y Libertad, la Coordinadora de Lucha Sur Sur, el Foro Ecuménico para el Desarrollo Alternativo de Guanacaste (FEDEAGUA), el Sindicato de Trabajadores de Plantaciones Agrícolas de Costa Rica (SITRAP), los despachos de la diputada Patricia Mora y del diputado Edgardo Araya, del Frente Amplio, el programa Era Verde de la Universidad de Costa Rica, COECOCEIBA y la Red de Coordinación en Biodiversidad, entre varios otros.
Este esfuerzo es importante porque es un espacio donde existe una voluntad compartida y reúne a mucha gente y a muchos actores que, durante casi 20 años, han trabajado y estudiado el tema de los daños causados por las piñeras y acompañando a las comunidades afectadas.
En el país, el sector piñero sigue buscando un crecimiento agresivo y formas de competir con otros países exportadores de piña. Ha quedado claro que actores poderosos como la Cámara Nacional de Productores y Exportadores de Piña (CANAPEP) ejercen fuerte presión ante el actual Gobierno, tanto en políticas agrícolas como en medidas fitosanitarias. Cuando recientemente el Servicio Fitosanitario del Estado (SFE) -adscrito al Ministerio de Agricultura y Ganadería (MAG)- ordenó la inspección de contenedores de piña para exportación en los puertos de salida, los productores se quejaron por este endurecimiento de controles sanitarios, y presionaron al Gobierno hasta que se sacó al director de dicha instancia, Francisco Dall’Anese. La medida había sido dictada por un aumento en los casos de detección de insectos en estos contenedores, destinados a Estados Unidos.
En las últimas décadas han aumentado en Costa Rica las héctareas sembradas de piña, el número de transnacionales instaladas y es claro que se ha generado una dinámica de dependencia de las economías locales donde están las fincas piñeras.
Investigadores del Instituto de Estudios Sociales en Población (IDESPO) de la Universidad Nacional realizaron un estudio sobre jóvenes nicaragüenses y las dinámicas laborales en fincas piñeras de la Zona Norte, específicamente en las localidades de Guatuso, Pital y Aguas Arcas de San Carlos, Los Chiles, y Upala.
De acuerdo con el estudio, las 21 personas entrevistadas no tienen jornadas laborales claras ni vacaciones sino que sus horarios están sujetos a la demanda del mercado exterior y al período de cosecha. Trabajan un promedio de 6-7 días a la semana y entre 8-10 horas al día. Además, no existe un salario mínimo y éste varía según la finca. Las violaciones más graves ocurren con la figura del contratista, pues según las personas entrevistadas éste no tiene responsabilidad patronal, no les paga seguro social ni póliza de riesgos y se les obliga a largas jornadas de trabajo.
En abril de este año se dio a conocer el estudio “Condiciones de producción, impactos humanos y ambientales del sector piña en Costa Rica”. El reporte, elaborado por Oxfam y la Oxfam y la Asociación Regional Centroamericana por el Agua y el Ambiente (ARCA) estaba dirigido a los países consumidores de la piña que se produce aquí.
La investigación concluyó que grandes empresas piñeras que alaban la sostenibilidad vierten sus aguas residuales contaminadas con químicos cerca de reservas de agua potable sin ocultarlo; y que compañías responsables de contaminar aguas subterráneas no han pagado indemnización alguna ni construido el sistema de abastecimiento de agua requerido para subsanar el daño. Asimismo, se destacaron las quejas de las personas trabajadoras en las piñeras sobre sueldos, horas de trabajo e incumplimiento de derechos sindicales.
Después de tener un panorama sobre las principales consecuencias socioambientales y laborales causadas por la expansión piñera -y que son resultado de experiencias de ex-trabajadores, de personas vecinas de las fincas piñeras, y de investigaciones académicas-, en el Encuentro se discutieron las posibles rutas a seguir en conjunto para la construcción de alternativas.
Las y los participantes en el Encuentro aseguraron que continuarán trabajando en esa dirección, al lado de las comunidades que sufren las consecuencias directas del desarrollo, muchas veces irresponsable, de la actividad piñera; a vista y paciencia de todo el aparato institucional.
Información enviada a SURCOS Digital por Fabiola Pomareda, Voces Nuestras.
Investigaciones sustentarían nuevas leyes y políticas al respecto
Elizabeth Rojas Arias,
Periodista Oficina de Divulgación e Información
La valoración del trabajo no remunerado y la creación de una cuenta satélite podría mejorar las condiciones de un alto porcentaje de mujeres en el futuro. Estudios sobre el tema fueron expuestos en un seminario para visibilizar estas labores que representan un alto porcentaje del PIB en el país (foto Archivo Luis Alvarado).
Valiosas investigaciones que se ha realizado en el país sobre el trabajo no remunerado de las mujeres fueron expuestas en un seminario que organizó en el mes de marzo el Centro Centroamericano de Población (CCP) de la Universidad de Costa Rica (UCR), el Instituto Nacional de la Mujeres (Inamu), el Programa Estado de la Nación y el Consejo Nacional de Rectores (Conare).
En esta ocasión se dieron a conocer resultados de estudios que podrían promover cambios en las leyes y en las políticas públicas en beneficio de la visibilización de labores como el cuido de niños y ancianos, así como el trabajo doméstico, ejecutado mayormente por mujeres en Costa Rica.
Dos de estos estudios tienen algunas coincidencias y reafirman la necesidad de que en el país se continúen realizando investigaciones sobre el trabajo no remunerado, el uso del tiempo libre y la creación de una cuenta satélite que favorecería el reconocimiento de este aporte.
Panorama de las brechas de género en Costa Rica fue el tema que expuso Natalia Morales y en el cual se concluye que las mujeres realizan en promedio más horas de trabajo no remunerado que los hombres, que muchos de los hogares jefeados por mujeres están en pobreza extrema, que la mayoría de los trabajos informales están en manos de mujeres y que a pesar de tener mejores niveles de educación, la fuerza de trabajo femenino se ha desacelerado en los últimos años.
El 36% de los hogares tiene jefatura femenina, la tendencia ha ido en aumento en las últimas décadas. Del total de hogares en pobreza extrema en el país un 46% son encabezados por mujeres.
En los hogares conformados por parejas el ingreso de la mujer ayuda a reducir la pobreza. El 40% de las jefas de hogar no cotizan para una pensión, por lo tanto tienen cobertura de salud indirecta o por el Estado. El 38% de las mujeres ocupadas y el 27% de los hombres no cuentan con seguro social.
A partir de los 15 años las mujeres realizan entre 3 y 7.5 horas de trabajo no remunerado, mientras que los hombres entre 3 y 4 horas. Al trabajo remunerado las mujeres le dedican medio tiempo (4 horas) en su edad más productiva mientras que los hombres si dedican una jornada laboral completa de 8 horas.
En el país, el 45% de las mujeres y el 42% de los hombres realizan empleos informales.
La investigador del Centro Centroamericano de Población Yanira Xirinachs expuso la experiencia de las cuentas en salud para Costa Rica (foto Denis Castro).
La tasa de desempleo en el 2015 era mayor en las mujeres (11,7%) que en los hombres (7,7) el total es de 9,2.
Las mujeres que trabajan tienen un mejor nivel de educación con respecto a los hombres. Con secundaria completa y más un 47% de las mujeres y 35% de los hombres.
Es importante aumentar el empleo en las mujeres porque se ha desacelerado el crecimiento de la fuerza de trabajo en los últimos años, considera Morales.
La participación laboral de las mujeres en Costa Rica es baja en comparación con el mundo. Sin embargo de 1990 (35%) al 2013 aumentó un 15 porciento. Pero permanece por debajo de la mayoría de los países de América Latina. Las naciones con más altos porcentajes en este campo son España, Francia y los países nórdicos.
Las razones de la inserción laboral desigual son por discriminación de género que va desde los aspectos culturales, segregación laboral por carreras y ocupaciones, carencia de redes de apoyo y el consecuente desempleo por maternidad.
La autora recomienda mejorar el acceso y las condiciones de empleo para las mujeres. En cuanto a las brechas salarias sugiere una mayor inspección. Además promover la formalización del empleo femenino y crear puestos de trabajo de calidad en zonas de mayor desventaja.
Asimismo propone la valorización del trabajo doméstico y optimizar las garantías laborales.
La investigadora del Idespo-UNA Mag. Irma Sandoval en su estudio comprobó que las mujeres dedican menos tiempo libre y más tiempo al trabajo en otros hogares por semana con respecto a los hombres (foto Denis Castro).
Valor del trabajo no remunerado
En la investigación denominada Experiencia de Costa Rica en la valoración económica del trabajo no remunerado, realizada por las magister Irma Sandoval Carvajal y Ligia González Vega, investigadoras del Instituto de Estudios Sociales en Población (Idespo) de la Universidad Nacional, se utiliza el costo de mercado de cada una de las actividades no remuneradas, ya sea tomando el precio de mercado o el pago que se recibe por realizar una actividad determinada.
Este método aunque es complejo se considera el más fiel para calcular el valor del trabajo doméstico con el salario que reciben por un trabajo equivalente cocineros(as), conserjes, enfermeras(os), etc. Este método fue el que se aplicó en Costa Rica en la encuesta que se realizó en Gran Área Metropolitana en el año 2011, cuya población urbana representa la mitad de la población nacional.
En este estudio se consultó sobre el tiempo promedio dedicado al trabajo doméstico no remunerado de la población de 12 años o más. Las diferencias más significativas entre hombres y mujeres se dan en el tiempo que dedica a la preparación de alimentos, limpieza y mantenimiento de la casa, cuidado de los niños y de personas dependientes, en donde las mujeres duplican o triplican los tiempos.
Por ejemplo en la limpieza de la vivienda las mujeres dedican en promedio 9:23 horas semanales mientras que los hombres reportan 3:58 horas; en el cuidado de niños y niñas menores de 12 años los hombres dedican 9:38 horas a la semana y las mujeres 15:25 horas en ese mismo período. Para el cuidado de personas integrantes del hogar totalmente dependientes los hombres dedican 14:14 horas a la semana y las mujeres 24:04 horas.
En total a la actividades domésticas las mujeres dedican 37:08 horas por semana y los hombres 15:29 horas.
En el estudio se hace una estimación del valor económico del trabajo no remunerado en la GAM en esos mismos rubros, las cifras totales revelan que las labores domésticas que realizan los hombres representan el 26% del total y las mujeres llevan la carga de trabajo con 74%, esto convertido en dinero representa, en el caso de las mujeres un aporte al país de 2.300.278,37 millones de colones. Los hombres aportan 805.582,19 millones de colones para un total de 3.105.860,56 millones de colones en el año 2011, que corresponde a un 15,72% del Producto Interno Bruto (PIB).
Las investigadoras Sandoval y González proponen que para la construcción de una cuenta satélite del trabajo no remunerado en Costa Rica se requiere realizar una encuesta nacional sobre uso del tiempo, cuyo instrumento se podría basar en este estudio.
Otros estudios y experiencias sobre el trabajo no remunerado
Durante el Seminario se dieron a conocer los resultados de otros estudios y experiencias sobre el tema Gestión del conocimiento para políticas públicas basada en la evidencia.
Desafíos para aumentar la participación de las mujeres en el mercado laboral de Pamela Jiménez, Programa Estado de la Nación y CCP-UCR.
Envejecimiento e informalidad den Colombia: Cuestión de Género, a cargo de Piedad Urdinola del Departamento de Estadística de la Universidad Nacional de Colombia.
Experiencia de las Cuentas en Salud para Costa Rica de Yanira Xirinachs de CCP-UCR.
Avances en el cumplimiento de la Ley Contabilización del aporte del trabajo doméstico no remunerado en Costa Rica, de Ana Rojas, Inamu.
Importancia de la Cuenta satélite de trabajo doméstico no remunerado a cargo de Carlos Carrillo de Cuentas nacionales del Banco Central de Costa Rica.
Políticas de corresponsabilidad social y redes de cuido, por parte de Ana Garita, Inamu.