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Etiqueta: racismo

Cuatro magistrados exhiben su racismo al no permitir la consulta indígena para el Protocolo de Nagoya

  • La importancia del voto de minoría de tres magistrados que estiman que es necesario consultar a los pueblos indígenas.

  • País se expone a que las organizaciones indígenas lleven este caso ante la Corte Interamericana de Derechos Humanos.

(Bloque Verde 20 de junio 2023) En un reñido voto de cuatro contra tres la Sala Constitucional en la resolución número 2023006154 da luz verde al Protocolo de Nagoya para que siga su curso en segunda votación en la Asamblea Legislativa. Los tres magistrados consideran que es necesaria la consulta indígena según lo dispuesto en el artículo 6 del Convenio 169 de la OIT y refuerza la posición de la Defensoría de los Habitantes en cuanto que la ausencia de consulta si vulnera los derechos de los pueblos originarios.

Los magistrados Cruz Castro, Rueda Leal y Garita Navarro demostraron que la Sala Constitucional tenía un línea jurisprudencial que considera obligatoria la consulta indígena en casos de que una medida legislativa o administrativa es susceptible a afectar a los pueblos indígenas. Esta jurisprudencia lamentablemente se rompió con esta resolución que niega justamente la consulta a los pueblos originarios.

El dictamen de minoría también deja claro que la forma en la supuesta consulta hecha desde la Asamblea Legislativa no cumplió lo dispuesto en el Convenio 169. Hay que recordar que este procedimiento se realizó mediante envío por correo electrónico a las asociaciones de desarrollo de los 24 territorios indígenas con un plazo de ocho días hábiles. En este sentido los magistrados Cruz Castro, Rueda Leal y Garita Navarro insisten en que “no se constituye como un método idóneo para garantizar la efectiva participación y opinión de las comunidades indígenas y el correspondiente deber de consulta”

El Protocolo de Nagoya acelera procesos de desposesión por medio de mecanismos de mecanismos de propiedad intelectual como las patentes y los derechos de obtentor (como UPOV) sobre los conocimientos de los pueblos indígenas. Este tratado internacional provoca que los bienes comunes, entre ellos los recursos de la biodiversidad y conocimientos asociados, considerados como dominio público, de origen ancestral, hereditario y otros de soberanía del Estado, sean adjudicados como bienes patrimoniales del dominio privado.

Este proceso en vía de ratificación por la Asamblea Legislativa es a todas luces racista y discriminatorio porque afecta de manera negativa a las personas portadoras de conocimientos, en su mayoría adultas mayores de las comunidades. Pretende apropiarse de sus saberes y prácticas cotidianas heredadas ancestralmente, hasta el punto de patentarlas. Esto también niega la posibilidad de las futuras generaciones del goce de ese conocimiento ancestral.

Dentro del Protocolo de Nagoya quedan muy claras las formas de apropiación de esta riqueza cultural, lo que no queda para nada claro son las formas de “repartos de beneficios” que menciona insistentemente los propulsores de esta iniciativa. No está estipulado cómo la patente por parte de un tercero del uso de una planta, bacteria, hongo, insecto o animal va a “traer beneficio” a los pueblos que la han descubierto y resguardado por siglos o quizá milenios. Esto no fue preocupación de los y las legisladoras impulsoras de este proyecto.

Instamos a las organizaciones indígenas a llevar este caso de racismo judicial a la Corte Interamericana de Derechos Humanos para evidenciar esta injusticia estructural dentro del más alto tribunal de justicia costarricense.

Realizan taller para identificar el racismo y las acciones en la labor docente

Por Carmen Picado – Producción de tvsur

Desde la carrera de administración educativa de la UNED y COLYPRO en conjunto con la UCR se llevó a cabo un taller para identificar el racismo y las acciones que se pueden llevar desde los docentes.

La actividad fue dirigida por especialistas del Observatorio para la Acción contra el Racismo.

La intención es generar cooperaciones para informar sobre el tema, sobre todo la violencia que se esta generando en los centros educativos, sobre todo de colegios.

La charla fue en las instalaciones de la UNED en Villa en Pérez Zeledón.

Huelen a chancho: el odio como expresión de poder

Por Memo Acuña (Sociólogo y escritor costarricense)

Hace algunos días volví a compartir el dispositivo de sensibilidad e implicación subjetiva sobre las movilidades humanas en la región centroamericana.

Conversamos, accionamos, sentimos.

Pienso que este tipo de acciones son cada vez más necesarias en un contexto marcado por la incomprensión y los discursos discriminatorios a todo nivel. Las personas que no entienden las causas por las cuales se produce la migración, no tienen forma de sentir empatía, de acercarse y entender sus motivos. Lo mismo harán con otras poblaciones a las que inferiorizarán al instante.

Entonces son necesarios otros tipos de acercamientos más allá del dato duro y la estadística o cierta tendencia a la solidaridad académica si esta no se acompaña de una actitud permanente y reflexiva que apoye el ejercicio de la comprensión y el trabajo con otras poblaciones, más allá del activismo y la supuesta corrección política. Hay que ir más allá.

Como más allá hay que ir para entender ciertas dinámicas de rechazo experimentadas por poblaciones locales.

Solo en este año 2023 el ámbito educativo costarricense nos ha proporcionado ejemplos que encienden las luces de alarma, vinculados con la dificultad para estar juntos, aceptar al otro en la diferencia, vivir con esta permanentemente.

Primero fueron las manifestaciones de racismo hacia una niña afrodescendiente por parte de una maestra. Más recientemente, otra docente en apariencia, directora de otro centro educativo, manifestó a un grupo de niños con los que trabaja, también ubicado en Limón, región atlántica costarricense, que “olían como chanchos, como indígenas”.

Este es un acto de racismo que debe ser investigado hasta las últimas consecuencias.

De acuerdo con Olga Sabido Ramos (2012) cuando se muestra asco o repulsión hacia el otro, se está construyendo una relación desequilibrada de poder, colocando a ese otro en posición de extrañamiento.

No es posible dimensionar el impacto psicológico y emocional en un niño que es animalizado de esta forma, que es reducido a la mínima expresión. De igual forma, no es aceptable que alguien que trabaje en educación tenga tal desprecio por las poblaciones originarias hasta el punto de relacionarlas con malos olores o prácticas diferentes.

Algo, mucho, se debe hacer con este tipo de actitudes: no es solo reprimirlas y castigarlas. Se debe profundizar en procesos de formación con contenidos sobre la convivencia como eje educativo. Se debe trabajar en la raíz de la intolerancia como expresión del odio, para erradicarla de toda relación social.

Vivir con el otro es entenderlo. Procuremos hacerlo sobre la base de la razón, pero sobre todo, del afecto. En eso creemos. En eso trabajamos.

Un gesto cobarde

Por Memo Acuña (sociólogo y escritor costarricense)

La lucha contra la discriminación es continua y no se detiene. Plantea desafíos improrrogables y la tarea pareciera no concluir, dados los acontecimientos que lo confirman en lo cotidiano.

En Costa Rica esa disputa contra discursos y prácticas discriminatorias no cesa. Son cientos de ejemplos de cómo nacionalidad, género, color de piel, preferencia sexual y clase resultan categorías definitorias de un proceso irreversible, en franco deterioro en las interrelaciones sociales y la convivencia.

Hemos dicho en esta columna que toca refundarnos. Volver a redactar la letra menuda de un contrato social que debiera integrarnos a todos y todas. Esa actitud debe pasar justamente por un ajuste en el que debiéramos empezar por el principio.

Convendría entonces revisar nuestros vínculos. Asumirnos como comunidad de distintos en la diversidad. Eso es justamente lo que nos falta. La ausencia declarada de horizontalidad.

Un reciente juego de futbol de primera división desarrollado en el Pacífico costarricense tuvo que ser intervenido dos veces con el protocolo indicado por actos de homofobia y racismo. Dos veces.

La implicación social de este acontecimiento no es menor si se considera la asistencia de niños, niñas y jóvenes al evento. Irán naturalizando estas prácticas y del acto simbólico al físico sólo habrá un paso.

Un grito homofóbico y un insulto racista en un juego de fútbol sólo expresan la decadencia a la que asistimos. El contexto también es importante ya que la zona pacífica del país es objeto en la actualidad de una violencia generalizada propiciada por grupos criminales que pugnan por el control de sus territorios. Pobreza, desigualdad y fractura social son rasgos que caracterizan esa región.

Pero un grito homofóbico y un insulto racista también señala la cobardía de un gesto que escudado en el anonimato del colectivo encuentra su mejor forma para desarrollarse.

Es necesario no solo parar un partido de fútbol por estos actos. Es necesario detenerlos y cambiarlos por acciones formativas en materia sociocultural.

La tarea sigue siendo necesaria.

Una voz interior con ecos que restringen las políticas sociales

Miguel Sobrado

¿Qué es la voz interior para la psicología?

Es la voz con la que dialogamos a todas horas, en ocasiones llamada «la voz de la conciencia», «voz mental» o también «diálogo interno». Aunque, en términos científicos, sería más adecuado referirse a ella como la voz del córtex pre-frontal.

“A modo de definición, se puede decir que es una narración que nace en el interior de todo ser humano y se proyecta, generalmente, hacia el futuro a modo de preparación para los acontecimientos venideros”.

El diálogo interno es un fenómeno complejo y multifacético que tiene un enorme impacto en la estructura de nuestro cerebro y en nuestro comportamiento. Es necesario para ordenar nuestras ideas y planificar nuestras acciones.

La sociedad en la voz interna

Pero ¿Qué sucede cuando este diálogo no nos ayuda, sino que más bien nos boicotea o nos limita? Aquí es donde intervienen la estratificación y las relaciones sociales que se articulan alrededor de la familia, y cimientan los valores de la cultura prevaleciente.

Existen condicionantes sociales que configuran la voz interna y que tienen fuertes implicaciones

El contexto familiar trasmite desde la más temprana edad valores que configuran la posición social de las personas según el medio en que viven. Son muchos los estudios que describen cómo operan los prejuicios en las sociedades racistas y de clase generando minusvalía y dependencia. Debilitando la autoestima y promoviendo “techos mentales” que configuran socialmente las voces interiores de quienes se encuentran en estratos de bajo prestigio social.

Los estudios realizados en los Estados Unidos con niños negros de 3 a 7 años a quienes se les mostraron muñecas blancas y negras preguntándoles cual era buena y bella son muy significativos por sus respuestas. En esas edades tiernas ya habían asimilado a través de su entorno más cercano el prejuicio hacia su propio color, contestando que la blanca era bella y buena. De tal forma en el contexto social se dieron las condiciones configuraron una voz interna que va actuar posteriormente reduciendo sus aspiraciones y autoestima.

Estudios similares que se realizaron en México con niños indígenas, en un país donde la mayoría de la población es de ese origen, revelaron resultados similares de auto desvalorización por su origen étnico. En otras palabras el racismo ha calado tan profundamente en la cultura que se ha internalizado y pienso que en estos grupos y comunidades forma parte de esa voz interior que aconseja que acciones emprender y cuales mejor no.

Fenómenos similares han constatado los movimientos feministas y por eso demandan legislaciones y espacios sociales de igualdad.

La acción organizada y la ruptura de techos sociales que inciden sobre la voz interna

El racismo y el clasismo conllevan por lo general la exclusión social por las disminuidas oportunidades para el estudio, de acceso a los servicios de salud y superación social, de tal forma que las posibilidades de avance social se reducen. Y no solo se reducen, sino que los resultados se comportan en la práctica como las profecías que se auto cumplen. Esto es si la persona fracasa o tiene resultados mediocres es por su origen.

Operación tenazas

La exclusión social no se puede superar si no es con dos palancas fuertemente entrelazadas. Por una parte, la acción organizada de los excluidos o marginados para demandar su espacio y articular y poner en marcha sus propios proyectos y por otra con una política social, no asistencialista, sino proactiva de largo aliento centrada en una educación moderna y de amplia cobertura, que incluya a quienes a quienes perdieron la oportunidad educativa y tienen obligaciones familiares a su cargo. Esto último en procesos de autoorganización realizados en sus comunidades. Esta operación “tenazas” basa en la simbiosis de propósitos de las organizaciones que ajusten los servicios institucionales a sus necesidades. Son los efectos de la actividad organizada o vitamina “O” las que le dan poder efectivo a los excluidos y transforman su visión y perspectivas sociales. En este sentido rompen las voces internas que los inmovilizaban y se pueden transformar. Este proceso no solo cambia los horizontes, sino que posiblemente incida sobre la biología misma de los participantes, como lo sugiere las experiencias de la neurociencia.

El caso de las niñas prostituidas de Camboya citado por la siquiatra española Marian Rojas Estapé, donde se les registraron a las niñas el tamaño de los telómeros, medidores de edad de las células, cuando estaban en el burdel tenían 80 años y posteriormente de sacarlas de ese antro, en un nuevo contexto con capacitaciones ya habían recuperado su edad biológica.

Las transformaciones en gran escala que requiere la eliminación de la exclusión social no se pueden realizar por razones obvias a partir solo del trabajo de los siquiatras, requieren de un contexto favorable para la inclusión organizada y proactiva masiva de los afectados.

Esto nos obliga a trascender los enfoques individuales de autoayuda. No basta ponernos positivos, ni alejarnos de personas y contextos tóxicos. La realidad es social y nosotros estamos dentro de ella. Es preciso crear condiciones y procesos de apoderamiento social a través de las políticas sociales que destapen y promuevan el potencial real de las personas. Transformando el sustento subjetivo a las voces interiores que promueven la pasividad y resignación.

Una tarea civilizatoria por hacer

Por Memo Acuña (Sociólogo y escritor costarricense)

El mismo día que en Costa Rica saltó a la luz pública un caso de racismo contra un jugador de fútbol de su liga profesional, se conocía el horror de la necropolítica sistemática y gubernamental del Estado mexicano contra las personas migrantes que atraviesan su territorio.

Ambos casos se conectan. Invariablemente en una matriz histórica que no cesa y que tiene al poder institucional y el poder cultural como ejes axiológicos de prácticas que siguen evidenciándose un día sí y otro también en este mundo de la post pandemia o la pandemia prolongada.

En el caso del jugador, extranjero en Costa Rica y proveniente de Jamaica, la denuncia implica no sólo el insulto y la provocación. Además, deja ver un escenario de naturalización de las prácticas de racismo instaladas en la epidermis y en la psique de una actividad que no cesa de reproducir día con día estas odiosas formas de discriminación, odio y exclusión sociocultural.

La mínima acción del equipo involucrado (terminar su ligamen con el entrenador al que se le atribuyen las acciones de racismo en contra del jugador) debiera a estas alturas ir acompañada de una actividad educativa a todo nivel, involucrando campañas de formación y sensibilización sobre ese tema, tan delicado en una sociedad como la costarricense.

El drama de las personas migrantes fallecidas en un centro de aseguramiento en México, por su parte, denota el desprecio absoluto por la vida y la desidia de un sistema migratorio basado en la seguridad como su principal derrotero.

Bajo estas premisas, si lo que muere no es “legal”, se naturaliza y hasta se justifica. Las vidas de los centroamericanos en tránsito por México valen menos que el costo de un combo en un restaurante de comida rápida.

Ambos sistemas, el del racismo y el de la secutización migratoria in extremis, asumen que hay un otro inferior al que debe desaparecerse hasta aniquilarlo, desde el discurso y la práctica.

Estos tiempos son tiempos “bisagra”. La clausura de ciclos y el comienzo de nuevos a los que les está costando dejar atarse el lastre del pasado. Mientras la vida importe menos que el aparto en el que escribo estas reflexiones, seguiremos involucionando hasta encontrarnos con el primer fuego.

Quizá esa sea la tarea civilizatoria que nos tocó vivir. Hagámosla entonces. Bien. Volvamos al principio. Intentemos de nuevo reconocernos en nuestra humanidad.

Racismo estructural hacia población mapuche en Mendoza, Argentina

El pasado miércoles 29 de marzo, las organizaciones y comunidades Indígenas Huarpe, Mapuche, Colla y Guaraní de la Provincia de Mendoza convocaron a organizaciones indígenas, sociales, culturales, ambientales, políticas, sindicales y de derechos humanos a una concentración frente a las puertas de la Legislatura de Mendoza.

Dicha movilización tuvo como propósito el solicitar el NO tratamiento de un dictamen que buscaba declarar al pueblo indígena mapuche como no argentino, lo cual representa un gran retroceso en los derechos humanos de los pueblos indígenas, así como la apertura al despojo de territorios ancestrales que les fueron otorgados en febrero del año pasado (Figueroa, 2023). 

A pesar de que dicha sentencia era anticonstitucional y representaba un intento de seguir institucionalizando el racismo estructural, la declaración se aprobó por 30 votos a favor, 8 en contra (la mayoría es kirchnerista), 6 abstenciones y 4 ausencias (Figueroa, 2023). 

Los artículos presentados para la aprobación del dictamen (fuertemente cuestionados por las poblaciones indígenas) fueron los siguientes (Figueroa, 2023): 

  • El primero rechaza la prórroga de la ley 26.160, que suspende las sentencias de desalojo y desocupación de las tierras comunitarias indígenas.
  • El segundo cuestiona el reconocimiento que el Instituto Nacional de Asuntos Indígenas (INAI) hizo a comunidades mapuches sobre territorios en Mendoza.
  • El tercero rechaza la argentinidad del pueblo mapuche.

Según Figueroa (2023), el proyecto fue impulsado por el gobierno de Suárez, con apoyo del senador radical Alfredo Cornejo y el impulso de su líder Mauricio Macri. Además, la Cámara de Diputados que lo aprobó responde al radical macrista Rodolfo Suárez, en conformidad con el ideario de derecha que atenta contra la población mapuche y les designa como el enemigo interno.

Una vez aprobado el dictamen, las distintas organizaciones y comunidades indígenas declararon que presentarán una denuncia penal contra el Estado. “somos mapuches y tenemos la ciudadanía argentina (…) nosotros votamos, pagamos los impuestos y cumplimos con nuestras obligaciones como ciudadanos argentinos”, definió Fabricio Silva, werkén (mensajero/vocero) de la comunidad We Newen (citado en Figueroa, 2023).

Lo que hay detrás de esta sentencia, además de un profundo racismo estructural y una agenda política de derecha, es el interés por explotar los recursos de las tierras para el beneficio de las grandes empresas. Este es el propósito de Rody Suárez: que no se reconozca el carácter ancestral de las tierras y, por ende, el Estado provincial se quede con la propiedad para su explotación (Figueroa, 2023). 

En realidad, el pueblo mapuche ha habitado esas tierras desde hace al menos 14 mil años, tal y como indican sus mayores, respaldados por arqueólogos y antropólogos (Figueroa, 2023). Es decir, que los mapuche han vivido en Mendoza desde antes que esta fuera Mendoza (Silva citado en Figueroa, 2023). 

 

Fuentes:

Convocatoria urgente contra el intento de institucionalizar el racismo en Mendoza (2023) https://docs.google.com/forms/d/e/1FAIpQLScsy-Rh5wbOT6OhUXgWQVTX6gfFwVVzVHoqsRnzKDFI4jl14A/viewform.  

Figueroa, A (2023). Negacionismo: La Cámara de Diputados de Mendoza declaró a los mapuches como «pueblo originario no argentino». Página/12. https://www.pagina12.com.ar/536070-mendoza-el-gobernador-suarez-quiere-avanzar-con-su-ley-antim?ampOptimize=1.  

Imagen ilustrativa.

Conversando sobre racismo, Radio 870 UCR

Como parte de la nueva temporada 2023 de la Radio 870 AM, Saber Vivir de la Universidad de Costa Rica, se llevará a cabo el programa «Conversando sobre racismo».

El próximo lunes 27 de marzo a las 8:00 a.m. iniciarán con la socialización de los principales resultados del módulo sobre el racismo en Costa Rica de la Encuesta ACTUALIDADES 2022, de la Escuela de Estadística de la UCR.

Gracias a la comunicadora Gloriana Rodríguez Corrales, se abrió este espacio mensual para identificar el racismo y de este modo, accionar hacia nuevas ideas y comportamientos en nuestra vida cotidiana y social. 

Participarán la Doctora Fernanda Alvarado Leitón, docente de la Escuela de Estadística, y la Bachiller María Fernanda Obando Sánchez, antropóloga y asistente del OBCRA durante el 2022.

Pueden descargar el informe de ACTUALIDADES en: http://www.estadistica.ucr.ac.cr/index.php/es/encuestas/actualidades/informes

La grabación del programa quedará disponible en el portal obcra.fcs.ucr.ac.cr

Link para acceder a la publicación:  https://www.instagram.com/p/CqI_54AuHV-/?igshid=ZTE2MDY0MWU=

Cineforo con la proyección de la película Figuras ocultas – viernes 24 a la 1

Invitación

Les invitamos desde el proyecto de acción social -Trabajo comunal universitario Semillero estudiantil para la acción contra el racismo al Cineforo, con la proyección de la película Figuras ocultas.

Estrenada en el 2017 y dirigida por Theodore Melfi, cuenta la historia de tres mujeres científicas afroamericanas (Katherine G. Johnson, Dorothy Vaughan y Mary Jackson), que trabajaron para la NASA en la década de 1960 y que lucharon por los derechos civiles de las personas afrodescendientes en EEUU.

Viernes 24 de marzo, a la 1 de la tarde en la Sala multimedios de la Facultad de Ciencias Sociales de la UCR.

Bienvenidas todas las personas, estudiantes, personal administrativo, docentes, familias y personas vecinas de la Sede Rodrigo Facio. Es un espacio abierto y gratuito.

Organizan las estudiantes del TCU Reyshel Martínez Sandoval y María Fernanda Hidalgo Quirós.

¡Hasta pronto!
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