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Gobernar a punta de bronca: El arte de la Eristocracia

Msc. Esteban Beltrán Ulate
Profesor, columnista y militante del Partido de la Clase Trabajadora esbeltran@yandex.com

Había una vez un país donde una persona anunció que se comería la bronca, esa persona llegó a ser presidente, y en lugar de comerse la bronca lo que hizo fue crear más broncas. Hoy en día Costa Rica es gobernada a partir del fuego que genera la discordia, la manzana de la discordia alimenta la tensión popular, le echa gasolina al fuego. Lo anterior lo llamo Eristocracia, a continuación, les explico por qué.

Hay un relato antiguo de la mitología griega que cuenta como Éris, al no ser invitada a una boda e irrumpió en el banquete, lanzando una manzana dorada al aire y diciendo: para la más bella. Ese evento provocó una disputa entre las divinidades que tuvo que ser resuelta por el joven guerrero Paris, situación que lo llevó posteriormente a la caótica historia de la guerra de Troya. ¿Te resulta familiar esta historia?

El relato anterior, revela cómo a partir de la discordia, se cultiva la disputa en medio de los que comparten el pan, con el único objetivo de saciar la sed de poder de un individuo. A esto yo le llamo Eristocracia el arte de gobernar en medio de la discordia, en medio del caos. El Eristócrata no gobierna, simplemente provoca, y además le encanta tener las cámaras apuntando su imagen.

Esta forma de gobierno merece ser la analizada, pues crece como una mala hierba en nuestra región. El Eristócrata disfruta a carcajada limpia la controversia que genera entre sus gobernados, pues, en medio de su herida política, intenta saciarse con el caos que genera. Este tipo de políticos se presentan como seres iluminados, venidos de otro mundo, anuncian que se van a comer la bronca, y al final no se la comen entera, y además de eso lo que hacen es generar más bronca.

La Eristocracia debilita la democracia y es capaz de llevarla a un estado de agonía. El Eristócrata buscará por todos los medios, ser el centro de atención, y esto implica concentrar el poder, mientras los gobernados viven en discordia. Este tipo de gobernador procurará derrumbar cualquier contrapeso, cualquier oposición, cualquier voz diferente que lo confronte.

La manzana de la discordia ha sido lanzada al aire, ahora es tarea nuestra decidir, comernos la bronca o darle la espalda y rechazarla, para así, construir un nuevo futuro.

Cambio climático y obligaciones internacionales de los Estados: breves apuntes sobre la opinión consultiva de la Corte Internacional de Justicia (CIJ)

Nicolas Boeglin
Profesor de Derecho Internacional Público, Facultad de Derecho, Universidad de Costa Rica (UCR)

El 23 de julio del 2025, la Corte Internacional de Justicia (CIJ) ha dado a conocer su opinión consultiva con relación a las obligaciones jurídicas que pesan sobre los Estados en materia de cambio climático a raíz de preguntas que le formulara la Asamblea General de Naciones Unidas en el mes de marzo del 2023 (véase texto de las preguntas).

Contrariamente a los jueces de la Corte Interamericana de Derechos Humanos solicitados sobre este mismo tema, la CIJ no «reformuló» ninguna de las preguntas que le fueron sometidas por la Asamblea General de Naciones Unidas: véase al respecto nuestra nota BOEGLIN N., «Derechos humanos y cambio climático: breves reflexiones con relación a la Opinión Consultiva OC/32 de la Corte Interamericana de Derechos Humanos de este 3 de julio«, 3 de julio del 2025 (texto disponible aquí).

El 21 de mayo del 2024, fue el Tribunal Internacional de Derecho del Mar (más conocido por sus siglas en inglés de ITLOS) el que dio a conocer primero su opinión consultiva, solicitada por un grupo de Estados insulares amenazados por el aumento del nivel del mar, siempre relacionada a los efectos del cambio climático (véase texto en francés y en inglés). De igual manera que en el caso de la CIJ, los jueces del ITLOS no procedieron tampoco a «reformular» las preguntas que les fueron hechas.

Hay que tener claro que la formulación de las preguntas por parte de Estados a jueces internacionales constituye un ejercicio en el que cada palabra, cada expresión, cada referencia es sopesada, valorada y calibrada, y objeto de varias revisiones hasta lograr consenso entre los Estados. Por lo que plantea aún mayor interrogantes la ligereza con la que la Corte Interamericana de Derechos Humanos optó por «reformular» (sin aportar justificación alguna) las preguntas planteadas que le sometieron de manera conjunta Chile y Colombia.

Algunos detalles con respecto a la opinión consultiva de la CIJ de este 23 de julio del 2025

La decisión de la CIJ de La Haya de este 23 de julio fue tomada de manera unánime es decir contando con el respaldo sin discusión de sus 15 integrantes. La señal que manda la CIJ al resto de la comunidad internacional con esta unanimidad de criterio merece ser mencionada.

En los párrafos 3 a 22, la CIJ detalla cómo debió posponer varias veces el plazo de entrega de las opiniones jurídicas de Estados y de organizaciones: el primer plazo al 20 de octubre del 2023 (párrafo 3 de la opinión consultiva), fue prolongado al 22 de enero del 2024 a petición de Chile, Vanuatu y 14 Estados más así como la Comisión de Estados insulares (párrafo 8). La OPEP pidió también que se le otorgara la posibilidad de presentar su opinión jurídica, así como varias otras organizaciones internacionales (párrafos 9 y 10). En el párrafo 13 se extiende el plazo de presentación al 24 de junio del 2024 a petición de varios Estados isleños del Pacífico y de la Unión Africana (UA). El párrafo 17 finalmente enlista, por orden cronológico, las opiniones remitidas, iniciando en lo que conciernes a Estados, con Portugal, República Democrática del Congo y cerrando con Ghana, Tailandia y Alemania, sumando un total de 79 Estados. A título excepcional, se permitió fuera de los plazos presentar sus escritos Nepal, Burkina Faso y Gambia (párrafo 19). A solicitud e otros Estados más y organizaciones internacionales, un nuevo plazo fue otorgado al 15 de agosto del 2024 (párrafo 22). Una solicitud de Palestina en octubre del 2024 le permitió esta vez participar en las audiencias orales de diciembre del 2024 (párrafo 29).

En el párrafo 33, se lee que el 26 de noviembre del 2024, integrantes del GIEC pudieron explicar en detalle a los jueces de la CIJ aspectos técnicos y científicos relacionados al cambio climático.

De los párrafos 35 a 36 se detallan las delegaciones (y sus integrantes) que participaron en las audiencias celebradas del 2 al 16 de diciembre del 2024.

Una parte dispositiva de una gran claridad para unos y otros, luego de extensas audiencias públicas celebradas en diciembre del 2024

En la parte dispositiva de su opinión consultiva, la CIJ señala (párrafo 457, véase texto en francés y en inglés) de manera contundente que, lejos de las construcciones jurídicas de algunos para restarle validez a las obligaciones de los Estados en materia de lucha contra del cambio climático, tanto desde el punto de vista convencional como desde el punto de vista de las reglas consuetudinarias, los Estados están ante obligaciones jurídicas de cumplimiento obligatorio. ¿Obligatorio? Obligatorio.

En la parte final de este mismo párrafo 457, la CIJ contesta a preguntas adicionales para conocer las consecuencias jurídicas en caso de violación a estas obligaciones: adelantamos desde ya que, para la CIJ, y ello de manera unánime, esta violación constituye un hecho ilícito internacional, con todas las consecuencias previstas en derecho internacional público en materia de responsabilidad internacional del Estado. ¿Un hecho ilícito internacional? Exacto: un hecho ilícito internacional que pueden invocar como tal los Estados víctimas de esta violación.

Para los dirigentes de Estados que intentan restarle importancia al cambio climático (y sus círculos afines en el sector corporativo), así como a las obligaciones para luchar contra el calentamiento global, esta respuesta del juez internacional constituye una respuesta implacable que ahora los coloca frente a sus (ir)responsabilidades como jefes de Estado.

Durante las extensas audiencias públicas realizadas en La Haya (véase programa que precisa el orden de las intervenciones orales de un total de 97 Estados, así como el verbatim del primer día, el 2 de diciembre del 2024 y el verbatim del día de clausura de las audiencias, el 16 de diciembre), se pudo observar a estos Estados intentando convencer a los jueces de la CIJ de la solidez de sus argumentos y de la debilidad de los que sostienen el carácter vinculante de las obligaciones de los Estados en materia de lucha contra el cambio climático: los equipos legales de estos Estados deben reconocer que su labor fue vana, y que no lograron convencer a ninguno de los integrantes de la CIJ. ¿Ninguno? Ninguno. A ese respecto merecen mención la respuesta oficial de Estados Unidos a preguntas que le formularon varios jueces (véase respuesta), así como la de Arabia Saudita (véase respuesta), la de Rusia (véase respuesta) y la de Koweit (véase respuesta), entre varias más.

Por parte de América Latina, de previo a las audiencias en La Haya, presentaron sus escritos a los jueces de la CIJ una docena de Estados y resulta de interés observar qué sostuvieron ante los jueces de la CIJ (y compararlo con lo que sostienen ante sus jueces a nivel nacional cuando sus entidades son objeto de algún tipo de negligencia o inacción climática): véanse al respecto los escritos presentados por Argentina,  Bolivia, así como Brasil, Chile, Colombia, Costa Rica, Ecuador, El Salvador, México, Perú,  República Dominicana, y Uruguay

En el resto del hemisferio americano, se puede referir a los escritos presentados por Antigua y Barbuda, Bahamas, Barbados, Belice, Grenada, Santa Lucía, San Vicente y las Granadinas,

Para los Estados que sufren desde ya los efectos dramáticos del cambio climático, esta decisión puede dar pié para acciones ante la justicia internacional para obtener compensaciones por los daños observados en su territorio, en particular lo pequeños Estados insulares: un hecho ilícito internacional constituye el fundamento de la responsabilidad internacional del Estado, tal y como se explica en los manuales de derecho internacional público.

La CIJ es particularmente explícita al indicar que:

«431. Ainsi, dans le contexte des changements climatiques, la Cour considère que chaque État lésé peut séparément invoquer la responsabilité de tout État auteur d’un fait internationalement illicite causant des dommages au système climatique et à d’autres composantes de l’environnement. Et lorsque plusieurs États sont responsables du même fait internationalement illicite, la responsabilité de chaque État peut être invoquée par rapport à ce fait.

  1. 432. Par conséquent, la Cour considère que les règles régissant la responsabilité des États prévoient la possibilité de déterminer la responsabilité des États dans le contexte des changements climatiques. Les questions factuelles qui se posent dans le cadre de l’attribution et de la part de responsabilité doivent être tranchées au cas par cas.

../..

  1. 431. Therefore, in the climate change context, the Court considers that each injured State may separately invoke the responsibility of every State which has committed an internationally wrongful act resulting in damage to the climate system and other parts of the environment. And where several States are responsible for the same internationally wrongful act, the responsibility of each State may be invoked in relation to that act.
  2. 432. Thus, the Court considers that the rules on State responsibility admit the possibility of determining the responsibility of States in the climate change context. Factual questions arising in the context of attribution and apportionment of responsibility are to be resolved on a case-by-case basis«.

Finalmente, para las ONGs que batallan duramente desde el mes de noviembre del 2016 (mes en el que entró en vigencia el Acuerdo de París suscrito en diciembre del 2015) ante los tribunales nacionales para obligar a sus autoridades, ya sea:

– para que cumplan a cabalidad con los compromisos internacionales en materia de lucha contra el cambio climático, o bien;

– para que tomen las decisiones que se imponen para prevenir mayores daños futuros a sus comunidades, a sus aguas y a su biodiversidad,

esta decisión unánime del juez de La Haya viene a reforzar sus argumentos de una manera indiscutible.

La contundencia de la CIJ además, bien podría dar lugar a nuevas acciones ante los tribunales nacionales.

La parte dispositiva de la opinión consultiva en breve

La lectura completa de la opinión consultiva se recomienda, en aras entender las diversas maniobras de unos y otros (que resultaron vanas) para intentar relativizar el carácter vinculante de las obligaciones en materia de cambio climático.

Es de notar que el plazo del «délibéré» (deliberaciones internas) de la CIJ inició el 16 de diciembre del 2024, culminando este 23 de julio, día de la lectura de la opinión consultiva: se puede considerar que los jueces de la CIJ sí consideraron, a diferencia de otras opiniones consultivas, responder a la urgencia climática a su manera.

A continuación, se reproduce únicamente el párrafo dispositivo 457 de esta histórica opinión consultiva, en sus versiones oficiales (francés e inglés):

«A. À l’unanimité,

Est d’avis que les traités relatifs aux changements climatiques imposent aux États parties des obligations contraignantes relativement à la protection du système climatique et d’autres composantes de l’environnement contre les émissions anthropiques de gaz à effet de serre. Ces obligations sont, entre autres, les suivantes :

  1. a) Les États parties à la convention-cadre des Nations Unies sur les changements climatiques ont l’obligation d’adopter des mesures en vue de contribuer à l’atténuation des émissions de gaz à effet de serre et à l’adaptation aux changements climatiques ;
  2. b) Les États parties figurant à l’annexe I de la convention-cadre des Nations Unies sur les changements climatiques ont en outre l’obligation d’être à l’avant-garde de la lutte contre les changements climatiques en limitant leurs émissions de gaz à effet de serre et en renforçant leurs puits et réservoirs de gaz à effet de serre ;
  3. c) Les États parties à la convention-cadre des Nations Unies sur les changements climatiques ont le devoir de coopérer les uns avec les autres pour atteindre l’objectif sous-jacent fixé par la convention ;
  4. d) Les États parties au protocole de Kyoto doivent se conformer aux dispositions applicables de celui-ci ;
  5. e) Les États parties à l’accord de Paris ont l’obligation d’agir avec la diligence requise en prenant, conformément à leurs responsabilités communes mais différenciées et à leurs capacités respectives, des mesures permettant de contribuer de manière adéquate à atteindre l’objectif de température énoncé dans l’accord ;
  6. f) Les États parties à l’accord de Paris ont l’obligation d’établir, de communiquer et d’actualiser des contributions déterminées au niveau national, successives et progressives, qui, notamment, prises ensemble, permettent d’atteindre l’objectif de température consistant à limiter le réchauffement de la planète à 1,5 °C par rapport aux niveaux préindustriels ;
  7. g) Les États parties à l’accord de Paris ont l’obligation de prendre des mesures permettant d’atteindre les objectifs énoncés dans leurs contributions déterminées au niveau national successives ; et
  8. h) Les États parties à l’accord de Paris ont des obligations d’adaptation et de coopération, y compris par des transferts de technologie et des transferts financiers, dont ils doivent s’acquitter de bonne foi ;
  9. À l’unanimité,

Est d’avis que le droit international coutumier impose aux États des obligations relativement à la protection du système climatique et d’autres composantes de l’environnement contre les émissions anthropiques de gaz à effet de serre. Ces obligations sont, entre autres, les suivantes :

  1. a) Les États ont l’obligation de prévenir les dommages significatifs à l’environnement en agissant avec la diligence requise et de mettre en œuvre tous les moyens à leur disposition pour empêcher que les activités exercées dans les limites de leur juridiction ou sous leur contrôle causent des dommages significatifs au système climatique et à d’autres composantes de l’environnement, conformément à leurs responsabilités communes mais différenciées et à leurs capacités respectives ;
  2. b) Les États ont le devoir de coopérer de bonne foi les uns avec les autres afin de prévenir les dommages significatifs au système climatique et à d’autres composantes de l’environnement, ce qui exige qu’ils mettent en place une coopération soutenue et continue lorsqu’ils prennent des mesures pour prévenir de tels dommages ;
  3. À l’unanimité,

Est d’avis que les États parties à la convention de Vienne pour la protection de la couche d’ozone ainsi qu’au protocole de Montréal relatif à des substances qui appauvrissent la couche d’ozone et à son amendement de Kigali, à la convention sur la diversité biologique et à la convention des Nations Unies sur la lutte contre la désertification dans les pays gravement touchés par la sécheresse et/ou la désertification, en particulier en Afrique, ont l’obligation, en vertu de ces instruments, de protéger le système climatique et d’autres composantes de l’environnement contre les émissions anthropiques de gaz à effet de serre ;

  1. À l’unanimité,

Est d’avis que les États parties à la convention des Nations Unies sur le droit de la mer ont l’obligation d’adopter des mesures pour protéger et préserver le milieu marin, y compris des effets néfastes des changements climatiques, et de coopérer de bonne foi ;

  1. À l’unanimité,

Est d’avis que les États ont l’obligation, en vertu du droit international des droits de l’homme, de respecter et de garantir la jouissance effective des droits de l’homme en prenant les mesures nécessaires pour protéger le système climatique et d’autres composantes de l’environnement ;

4) En ce qui concerne la question b) posée par l’Assemblée générale :

À l’unanimité,

Est d’avis qu’une violation de l’une quelconque des obligations définies en réponse à la question a) constitue, de la part d’un État, un fait internationalement illicite engageant sa responsabilité. L’État responsable a un devoir continu de s’acquitter de l’obligation à laquelle il a été manqué. Les conséquences juridiques résultant de la commission d’un fait internationalement illicite peuvent inclure les obligations suivantes :

  1. a) la cessation des actions ou omissions illicites, si elles se poursuivent ;
  2. b) la fourniture d’assurances et de garanties de non-répétition des actions ou omissions illicites, si les circonstances l’exigent ; et
  3. c) l’octroi d’une réparation intégrale aux États lésés sous forme de restitution, d’indemnisation et de satisfaction, sous réserve qu’il soit satisfait aux conditions générales prévues par le droit de la responsabilité de l’État, notamment qu’un lien de causalité suffisamment direct et certain puisse être établi entre le fait illicite et le préjudice subi«.

../..

  1. Unanimously,

Is of the opinion that the climate change treaties set forth binding obligations for States parties to ensure the protection of the climate system and other parts of the environment from anthropogenic greenhouse gas emissions. These obligations include the following:

(a) States parties to the United Nations Framework Convention on Climate Change have an obligation to adopt measures with a view to contributing to the mitigation of greenhouse gas emissions and adapting to climate change;

(b) States parties listed in Annex I to the United Nations Framework Convention on Climate Change have additional obligations to take the lead in combating climate change by limiting their greenhouse gas emissions and enhancing their greenhouse gas sinks and reservoirs;

(c) States parties to the United Nations Framework Convention on Climate Change have a duty to co-operate with each other in order to achieve the underlying objective of the Convention;

(d) States parties to the Kyoto Protocol must comply with applicable provisions of the Protocol;

(e) States parties to the Paris Agreement have an obligation to act with due diligence in taking measures in accordance with their common but differentiated responsibilities and respective capabilities capable of making an adequate contribution to achieving the temperature goal set out in the Agreement;

(f) States parties to the Paris Agreement have an obligation to prepare, communicate and maintain successive and progressive nationally determined contributions which, inter alia, when taken together, are capable of achieving the temperature goal of limiting global warming to 1.5°C above pre-industrial levels;

(g) States parties to the Paris Agreement have an obligation to pursue measures which are capable of achieving the objectives set out in their successive nationally determined contributions; and (h) States parties to the Paris Agreement have obligations of adaptation and co-operation, including through technology and financial transfers, which must be performed in good faith;

  1. Unanimously,

Is of the opinion that customary international law sets forth obligations for States to ensure the protection of the climate system and other parts of the environment from anthropogenic greenhouse gas emissions. These obligations include the following:

(a) States have a duty to prevent significant harm to the environment by acting with due diligence and to use all means at their disposal to prevent activities carried out within their jurisdiction or control from causing significant harm to the climate system and other parts of the environment, in accordance with their common but differentiated responsibilities and respective capabilities;

(b) States have a duty to co-operate with each other in good faith to prevent significant harm to the climate system and other parts of the environment, which requires sustained and continuous forms of co-operation by States when taking measures to prevent such harm; C. Unanimously, Is of the opinion that States parties to the Vienna Convention for the Protection of the Ozone Layer and to the Montreal Protocol on Substances that Deplete the Ozone Layer and its Kigali Amendment, the Convention on Biological Diversity and the United Nations Convention to Combat Desertification in Those Countries Experiencing Serious Drought and/or Desertification, Particularly in Africa, have obligations under these treaties to ensure the protection of the climate system and other parts of the environment from anthropogenic greenhouse gas emissions;

  1. Unanimously,

Is of the opinion that States parties to the United Nations Convention on the Law of the Sea have an obligation to adopt measures to protect and preserve the marine environment, including from the adverse effects of climate change and to co-operate in good faith;

  1. Unanimously,

Is of the opinion that States have obligations under international human rights law to respect and ensure the effective enjoyment of human rights by taking necessary measures to protect the climate system and other parts of the environment;

(4) As regards question (b) put by the General Assembly: Unanimously,

Is of the opinion that a breach by a State of any obligations identified in response to question (a) constitutes an internationally wrongful act entailing the responsibility of that State. The responsible State is under a continuing duty to perform the obligation breached. The legal consequences resulting from the commission of an internationally wrongful act may include the obligations of:

(a) cessation of the wrongful actions or omissions, if they are continuing;

(b) providing assurances and guarantees of non-repetition of wrongful actions or omissions, if circumstances so require; and

(c) full reparation to injured States in the form of restitution, compensation and satisfaction, provided that the general conditions of the law of State responsibility are met, including that a sufficiently direct and certain causal nexus can be shown between the wrongful act and injury«.

Como indicado anteriormente, el párrafo 457 constituye la culminación de un largo proceso anterior, en el que la CIJ balancea los argumentos de unos y otros y busca interpretar de la manera más auténtica el alcance de ls obligaciones jurídicas de los Estados en materia de cambio climático.

A modo de conclusión

Como se puede observar, en este mes de julio del 2025 se leyeron las respuestas de dos jurisdicciones internacionales solicitadas por Estados urgidos en aras de clarificar los alcances de las obligaciones internacionales existentes en materia de lucha contra el cambio climático, dada la emergencia climática en la que se encuentra el planeta y la extrema urgencia para muchas comunidades de encontrar respuestas adecuadas por parte de sus autoridades: Corte Interamericana de Derechos Humanos (3 de julio) y desde este 23 de julio, CIJ han precisado el alcance de estas obligaciones.

Mientras que la opinión consultiva del ITLOS y de la CIJ precisan cada una el alcance de las obligaciones internacionales en las relaciones entre Estados, la de la Corte Interamericana de Derechos Humanos profundiza este mismo alcance, pero en las relaciones entre Estados y las comunidades que viven dentro de su territorio.

No cabe duda que con la opinión consultiva de la CIJ de este 23 de julio, se abre una nueva etapa para el litigio climático en el ámbito nacional (pero también internacional) en aras de lograr que los Estados cumplan con sus objetivos en materia de lucha contra el cambio climático.

Los jueces internacionales de estas tres jurisdicciones han demostrado estar a la altura del momento, y es de esperar que inspiren de ahora en adelante a sus homólogos a nivel nacional, por más presiones que reciban del sector corporativo y de sus fichas políticas.

Frantz Fanon a 100 años: pensamiento vivo para la liberación

Este 2025 se conmemora el centenario del nacimiento de Frantz Fanon, psiquiatra, escritor y militante anticolonial nacido en Martinica. El Observatorio de Bienes Comunes de la Universidad de Costa Rica (UCR) ha publicado un artículo que recorre su legado, señalando cómo su pensamiento interpela las luchas actuales y exige coherencia entre palabra y acción.

A cien años de su llegada al mundo, su pensamiento no sólo conserva una vigencia inusitada, sino que sigue siendo una guía ética y política para los pueblos que resisten al racismo, el colonialismo y las múltiples formas de opresión que atraviesan el presente.

Fanon no solo fue un teórico radical del colonialismo y la subjetividad, fue un militante que vivió lo que escribió. En su obra “Piel negra, máscaras blancas” (1952), denunció cómo el racismo se incrusta en la subjetividad de las personas colonizadas, y cómo esa violencia simbólica las obliga a portar máscaras impuestas por la cultura blanca dominante.

En “Los condenados de la tierra” (1961), obra escrita poco antes de morir, afirmó que la violencia del colonizado no es gratuita ni irracional, sino una respuesta inevitable a la violencia estructural del colonialismo.

En la publicación el Observatorio destaca también su profundo compromiso político, ya que, renunció a su trabajo en el hospital psiquiátrico de Blida al no poder ser cómplice del régimen colonial francés, y se integró plenamente al movimiento de liberación argelino, asumió misiones diplomáticas y formó parte de una lucha que no era la “de su pueblo natal”, sino la de todos los pueblos colonizados del mundo. Fanon no defendía una causa local, sino una lucha humana y global contra la deshumanización.

Su pensamiento sigue interpelando las prácticas y discursos actuales: desde los movimientos indígenas hasta las juventudes precarizadas, desde las luchas contra el racismo ambiental hasta las búsquedas de salud comunitaria. La descolonización, advierte Fanon, no es solo una consigna académica o simbólica: es una ruptura concreta con las estructuras que jerarquizan vidas.

“El pensamiento de Fanon no se hereda; se activa en la práctica”, señala la nota.

Leé la nota completa en el sitio del Observatorio de Bienes Comunes: https://bienescomunes.fcs.ucr.ac.cr/frantz-fanon-a-100-anos-pensamiento-vivo-para-la-liberacion/

Estado del calentamiento global en los últimos tres años

Alberto Salom Echeverría

Introducción

Aunque en los balances conocidos sobre el cambio climático en los últimos años, se admiten algunos progresos en países o regiones determinadas de nuestro planeta, nuestra “Casa Común”, como también la llamamos, veremos, de acuerdo con la investigación consultada, que la tendencia general al calentamiento global, la contaminación ambiental y la devastación de la naturaleza, ha tendido a desmejorar. En algunas áreas, los efectos nocivos del calentamiento global y la contaminación resultan preocupantes para los científicos, las principales organizaciones ambientalistas y agencias que impulsan el desarrollo sostenible y sustentable.

No es ocioso insistir en que es extremadamente corto el tiempo que tenemos para detener la producción de hidrocarburos -principal factor responsable del cambio climático y la contaminación- y, es muy breve también el tiempo del que disponemos para corregir las prácticas devastadoras del ser humano, sobre los océanos, mares, lagos y lagunas, y sobre la superficie terrestre de mesetas, zonas boscosas y selvas. He afirmado que, el tiempo del que disponemos para detener la producción de los hidrocarburos, es extremadamente corto, o ya no existe, por cuanto ya, en este momento, o para expresarlo mejor desde el año 2024 se sobrepasó el límite de 1,5 °C de temperatura promedio a partir del cual, se han comenzado a desatar fenómenos ambientales que al acumularse tornarán inviable la vida en el planeta.

El límite de 1,5 °C, que nunca debimos haber sobrepasado, fue sugerido por el panel de científicos que asesoran las reuniones de las naciones del mundo donde se han tomado los acuerdos más importantes o COP´s. (Conferencia de las Partes, un término empleado en las convenciones internacionales de las Naciones Unidas, especialmente en la Convención Marco de las Naciones Unidas sobre el Cambio Climático -CMNUCC-). El plazo que tenía la humanidad para hacer todo tipo de correctivos encaminados a limitar o eliminar la producción de hidrocarburos era el año 2050. Como puede deducirse lo traspasamos 26 años antes. Así lo he dejado patente en la primera referencia o cita que introduje en este artículo y que aparece unos renglones más abajo.

A pesar de que, en todas las conferencias mundiales sobre el clima, desde la de París en el 2015, hasta la última, que tuvo lugar en Bakú, Azerbaiyán entre el 11 y 22 de noviembre del 2024, se insiste en este punto crítico, no se ha conseguido orquestar los esfuerzos entre las principales potencias mundiales y el resto de las naciones que asisten a estos cónclaves, para definir las líneas estratégicas que conduzcan eficazmente a la descarbonización del medio ambiente, o sea que permitan reducir o eliminar las emisiones de dióxido de carbono (CO2) y otros Gases de Efecto Invernadero (GEI) a la atmósfera. De modo que, en lugar de mejorar la situación mundial, se ha ralentizado o se ha retrasado la transición de una economía basada en combustibles fósiles, a otra sustentada en el uso de energías renovables y limpias, y por lo tanto baja en carbono, que mitigue el calentamiento climático y limite el aumento de la temperatura global.

Adelanto por ahora solamente uno de los datos al que deberíamos prestar mayor atención, es el siguiente: “Las señales claras del cambio climático inducido por [el ser humano] alcanzaron nuevas alturas en el 2024, que probablemente fue el primer año calendario en estar más de 1.5 °C por encima de la era preindustrial, con una temperatura media global cercana a la superficie de 1,55 +/- 0,13 °C por encima del promedio de 1850-1900.” (Cfr. https://wmo.int “Estado del Clima Global 2024” 19 de marzo,2025).

Estrategias más importantes que se han recomendado por el panel de expertos para impulsar la descarbonización del medio ambiente.

Reducción de Emisiones: Implica disminuir la cantidad de CO2 y otros GEI liberados a la atmósfera.

Transición a energías renovables: La descarbonización se basa en la sustitución de combustibles fósiles (carbón, petróleo y gas) por energías limpias y renovables como la solar, eólica, hidroeléctrica y geotérmica.

Eficiencia energética: Implica mejorar la eficiencia de los procesos industriales y el uso de la energía en general.

Electrificación: Se trata de sustituir el uso de combustibles fósiles por electricidad, especialmente en sectores como el transporte y la calefacción.

Compensación de emisiones: Implica la absorción de CO2 de la atmósfera a través de proyectos de reforestación y otras tecnologías de captura de carbono.

Objetivos Globales: La descarbonización es un esfuerzo global, con acuerdos internacionales como el Acuerdo de París que buscan limitar el calentamiento global y alcanzar la neutralidad del carbono.

Impacto económico: La transición a una economía baja en carbono puede generar nuevas oportunidades de crecimiento económico y creación de empleo en sectores como las energías renovables y la tecnología limpia.

En resumen, la descarbonización es un proceso fundamental para combatir el cambio climático y construir de esta manera, un futuro más sostenible. (Cfr. https://support.google.com/websearch?p=ai_overviews&hl=es ctrl+clic para seguir el vínculo).

Datos que dan cuenta del estado del clima a partir del año 2023.

1- Algunos puntos álgidos positivos que se han alcanzado en regiones o en países desarrollados.

1.a. En varias regiones se ha producido un progreso en la transición energética renovable, donde éstas ya superan la energía a base de combustibles fósiles.

1.b. Rastreando la información se encuentra que tanto en EE. UU como en Europa se ha logrado descarbonizar una buena parte del “mix energético”, al mismo tiempo que conservaban el crecimiento económico. Por otra parte, se generaron millones de empleos en los sectores de energías limpias o verdes. En Europa ello fue debido en gran medida por la menor demanda de energía y el cierre de las centrales de carbón. (Datos de la Agencia Europea del Medio Ambiente -EEA-).

1.c. Europa en promedio logró por fin en el año 2025, que la energía solar se convirtiera en la principal fuente eléctrica, representando el 22% del total de la electricidad en el viejo continente. La información da cuenta de que, en este año en Europa, tres cuartas partes del “mix energético”, provienen de fuentes no fósiles. (El “mix energético” de un país o región, se conoce también como matriz energética, es la proporción de diferentes fuentes de energía -fósil, nuclear o limpia- que se utilizan para satisfacer la demanda energética total de una región, un país o un continente.) Dinamarca. Portugal y Suecia ya generan más del 50-70% de su electricidad con renovables. Alemania fue una gran consumidora de carbón, pero ya ha cerrado muchas de sus centrales y está planificando para cerrarlas definitivamente para el 2038.

1.d. En los Estados Unidos en marzo de este año, las fuentes limpias aportaron el 42% de la electricidad, frente al 27% en el año 2005. Las emisiones de CO2 del sector eléctrico han disminuido más de un 35% desde el 2005. Ello fue debido, igual que lo hizo Alemania, al cierre de plantas de carbón, aunque en los Estados Unidos emergió la producción de gas natural. Sin embargo, se reporta que en la última década las energías renovables, eólica y solar, crecieron con fuerza. Veremos si todo este esfuerzo se revierte en la actual administración de Donald Trump, amigo de emplear las energías fósiles.

2- Datos negativos más importantes sobre el cambio climático.

2.a. El primer dato relevante que revela una gran calamidad es que el presupuesto de carbono crítico para mantener el umbral de 1.5 °C se está agotando, el mundo ya ha cruzado este límite.

2.b. La adaptación no se está produciendo con la celeridad requerida, pues hay grandes brechas financieras. Ello es derivado a su vez de que los acuerdos financieros en el ámbito internacional no avanzan con la velocidad requerida y las distancias crecen entre el mundo desarrollado y el subdesarrollado.

2.c. Por otra parte, los impactos climáticos extremos se están intensificando. Ejemplos de ello, como lo constata la investigación lo constituyen el blanqueamiento de los corales en los fondos marinos que por eso pierden la capacidad de retener CO2, como ha quedado en evidencia, las olas de calor crecen año tras año y los glaciares se están perdiendo su tamaño y consistencia aceleradamente.

2.d. Como lo dejamos registrado supra, el año 2024 fue el año más cálido desde que se lleva registro. Se reportó un promedio global de 1.6 °C. El 2023 fue el segundo más cálido arrojando en promedio de 1.48 °C. Pero se dieron algunos picos de calentamiento que habían superado el umbral del 1.5 °C.

2.e. Las emisiones de CO2. son otro dato inquietante para la humanidad en la lucha contra el cambio climático, porque las emisiones de combustibles fósiles aumentaron en todo el mundo, en el año 2024 un 0.8% lo que constituyó un récord de emisiones fósiles. Se registran aumentos exorbitantes en países como India donde se registró un 5.3% de aumento y en China un 0.4%.

2.d.f. La investigación científica logró calcular que para limitar el calentamiento global a 1.5 °C se requiere un presupuesto global de carbono estimado en 130 Gta. (o sea Gigatonelas de CO2 ), las cuales se advierte que podrían agotarse aproximadamente en 3 años, en tanto no se hayan disminuido las emisiones actuales, equivalentes a 40 Gt/año. Para que se pueda apreciar mejor lo que esto significa, la equivalencia de una unidad de Gt de carbono es igual a mil millones de toneladas métricas; o sea una cantidad muy grande de gas de efecto invernadero. De este modo es que se puede evaluar si hubo progreso o no en la emisión de gases de efecto invernadero en un año, en una región, un continente o en el mundo.

Conclusión

En estos últimos tres años se han producido ciertamente progresos tecnológicos importantes, que han incidido favorablemente en el desarrollo de tecnologías limpias, especialmente en países del mundo desarrollado.

No obstante, se han producido también emisiones globales de dióxido de carbono récord; el mundo ha presentado umbrales críticos que se han superado, así como brechas en adaptación de los países al cambio climático que ponen en riesgo los objetivos climáticos globales, establecidos en las Conferencias de las Partes o COP´s. Por último, como lo hemos puesto en evidencia, la oportunidad que tenía la humanidad para limitar el calentamiento global a 1.5 °C respecto de la época preindustrial, cada día se torna más difícil de alcanzar, puesto que ya el mundo, colectivamente, traspasó ese umbral.

Principales fuentes consultadas

https://www.washingtonpost.com/opinions/2025/07/21/europa-china-america-renewable-energy/?utm_source=chatgpt.com
https://www.livescience.com/planet-earth/climate-change/were-within-3-years-of-reaching-a-critical-climate-thershold-can-we-reverse-course?utm_source=chatgpt.com
https://www.vox.com/future-perfect/410553/climate-change-clean-clean-energy-carbon-emissions-renewable-energy-progress?utm_source=chatgpt.com

COLPER invita a foro sobre comunicación pública y nuevo SINART

El Colegio de Periodistas y Profesionales en Ciencias de la Comunicación Colectiva de Costa Rica (COLPER) invita al foro “Comunicación pública como política de Estado: propuesta para el nuevo SINART”, que se realizará el jueves 31 de julio de 2025 a las 10 a.m.

La actividad será presencial en el Salón de Expresidentes y Expresidentas de la República, en la Asamblea Legislativa. Además, contará con transmisión en vivo y está abierta al público general.

Participarán como panelistas la Mtr. Yanancy Noguera Calderón, presidenta del COLPER; la diputada Vanesa Castro Mora; la defensora de los habitantes, Lic. Angie Cruickshank; y el Dr. Óscar Aguilar Bulgarelli, fundador y exdirector del SINART.

Puede inscribirse en el siguiente enlace: https://forms.gle/ZKJRcB43GVRc7osc9

Fiesta Cubana celebrará 72° aniversario del asalto al Cuartel Moncada y al Cuartel Carlos Manuel de Céspedes

El Movimiento de Solidaridad Amor por Cuba – Costa Rica tiene el agrado de invitar cordialmente a la población a participar en la celebración del 72° aniversario del asalto al Cuartel Moncada y al Cuartel Carlos Manuel de Céspedes, organizado por la Embajada de la República de Cuba.

La actividad se realizará el sábado 26 de julio, a partir de las 2:00 p.m. en la Federación de Organizaciones Sociales (FOS), ubicada 150 metros al sur de la ULACIT.

Durante la actividad, se podrá disfrutar de una auténtica Fiesta Cubana con música tradicional, platillos típicos y bebidas de origen cubano, en un ambiente de fraternidad y solidaridad.

La Constitución se cumple… ¿cuándo conviene?

Elian Xavier Jiménez Campos
Estudiante de 4to año de Sociología, Universidad Nacional, Costa Rica
Pérez Zeledón, 25 de julio

Costa Rica celebra, o aparenta celebrar, su tradición democrática, su institucionalidad y su Constitución Política como si se tratara de una bandera inmaculada. Pero mientras tanto, hemos normalizado su incumplimiento cotidiano. Lo peligroso es que este incumplimiento ya no escandaliza: se vuelve hábito, estrategia política y, peor aún, parte de la rutina del poder.

La Constitución de 1949 no es un simple documento jurídico: es el pacto social que define los derechos, límites del poder y garantías mínimas para la ciudadanía. Sin embargo, hoy vivimos un momento donde ese pacto se está quebrando sin consecuencias reales.

Ejemplos sobran. El artículo 78 establece que la Educación Pública debe tener al menos un 8% del PIB. Aun así, los gobiernos negocian presupuestos a la baja y hacen recortes sistemáticos al FEES, desfinanciando la educación superior pública sin que haya consecuencias legales reales. El artículo 50, que habla del derecho a un ambiente sano y equilibrado, se contradice con decisiones que priorizan proyectos extractivos o infraestructura sin consulta ni evaluación ambiental adecuada.

Y ni hablar del artículo 56, que establece el derecho al trabajo digno, o el 58, que garantiza una jornada laboral máxima de 8 horas. Mientras se impulsan reformas como el Proyecto de Ley N° 24.290, que alargan la jornada sin reconocer los impactos sociales, el poder político actúa como si la Constitución fuera un obstáculo y no una base.

Lo más preocupante no es solo el incumplimiento, sino la naturalización de este. El silencio cómplice de muchas instituciones y sectores es alarmante. Cuando la Constitución solo se cita cuando conviene, deja de ser norma suprema y se convierte en discurso vacío. ¿De qué sirve una Carta Magna que no se defiende ni se respeta en lo cotidiano?

Este fenómeno tiene consecuencias profundas. La pérdida de confianza en el Estado de Derecho no se da de un día para otro: se cultiva cuando las reglas no aplican igual para todas las personas. Cuando se flexibiliza la ley para los poderosos y se vuelve rígida para los sectores populares. Cuando se abandonan derechos fundamentales bajo la excusa de la “eficiencia” o el “orden”.

Esto no es solo un problema legal, sino un reflejo de la crisis de legitimidad política que atravesamos como sociedad. Si la Constitución ya no marca los límites del poder ni garantiza los derechos que promete, ¿qué nos queda como ciudadanía?

Hoy más que nunca, es urgente volver a politizar la Constitución, entenderla como herramienta viva y no como símbolo decorativo. No se trata de memorizar sus artículos, sino de exigir que se cumplan. Porque la Constitución solo tiene sentido si la defendemos cada vez que la quieren pisotear.

El futuro democrático del país no se juega en los discursos oficiales ni en actos públicos de revelación de partidos, sino en la coherencia con la que enfrentamos su incumplimiento cada día.

La gobernación y administración de China: una obra que Occidente rehúsa leer

¿Sabías que existe esta obra monumental?

Cuatro tomos, más de 350 documentos oficiales, discursos, entrevistas y textos programáticos del presidente Xi Jinping, traducidos al español, publicados por la Editorial de Lenguas Extranjeras de China y disponibles hace años. Y sin embargo, casi nadie en Occidente los ha leído. Ni en la academia, ni en los gabinetes presidenciales, ni en los comandos de campaña de la derecha. Tampoco en la izquierda, pero esa es otra historia.

Políticos de derechas y ultraderechas, y operadores fascistas en ascenso por todo Occidente, critican a China con una virulencia casi ritual. Hablan de autoritarismo, control, dictadura, amenaza roja. Pero no han leído ni una página de la obra doctrinaria de su principal antagonista. Se indignan, insultan, profetizan el colapso chino, y todo lo hacen en la oscuridad de su ignorancia.

Y no se trata solo de la ultraderecha. La clase política tradicional occidental —de centro, de derecha, e incluso en muchos casos del progresismo cómodo— rara vez lee un libro completo. Se conforman con resúmenes, con frases de ocasión, con titulares de columnas de opinión que no profundizan nada. Y en el caso extremo, esa ultraderecha ignorante que repite hasta la Biblia sin haberla leído realmente. ¿Cómo se combate contra eso? ¿Con libros? ¿Con pensamiento riguroso? Resulta, muchas veces, contraproducente y hasta absurdo. ¿Hacemos memes? ¿TikToks de 3 minutos? ¿Animaciones en 3D con caricaturas? Dejo la reflexión abierta.

Lo que sigue no es un panegírico ni una defensa ideológica. Es una invitación radical a pensar. Leer a Xi Jinping es una necesidad geopolítica. Entender el modelo chino desde su propia voz es una obligación para cualquiera que pretenda gobernar, legislar o escribir con mínima responsabilidad política en este siglo. Este texto está dirigido, sobre todo, a esa clase política occidental que se enorgullece de sus prejuicios y desprecia lo que no entiende. Y está escrito, también, para quienes nos enfrentamos a ella.

Yo también estoy leyendo estos tomos. No desde la devoción ni desde el prejuicio, sino desde la necesidad de entender qué sostiene a una potencia que no solo resiste, sino que avanza. Y lo confieso con la misma honestidad con que escribo estas líneas: me asombran, me interpelan, me obligan a pensar. A cada página, hay una estructura. A cada concepto, una historia. A cada omisión occidental, una página entera de documentos.

¿Quieres que te seduzca? Solo con leer los índices de esta colección uno intuye la vastedad de lo que se intenta gobernar desde allí. Cada tomo abre una puerta distinta: al combate contra la pobreza, a la gobernanza digital, a la moral socialista, a la diplomacia alternativa. Y es por eso que he decidido incluirlos íntegramente en este texto, uno a uno, para que puedan apreciarlos con calma. Pero antes, van los abstractos comentados: pequeñas ventanas interpretativas que abren paso a las venas internas de esta obra.

ABSTRACT GENERAL

La gobernación y administración de China es la obra central del pensamiento de Xi Jinping como secretario general del Partido Comunista Chino. Publicada entre 2014 y 2023 en cuatro tomos, ofrece una exposición ordenada, estratégica y progresiva de los fundamentos políticos, económicos, culturales y diplomáticos del modelo chino en la “nueva era”. Cada volumen contiene entre 79 y 109 documentos oficiales, organizados temáticamente, y recorre desde la consolidación del poder tras el XVIII Congreso del Partido hasta la proposición de un orden mundial multipolar postpandémico. Leer estos textos no es rendirles pleitesía, sino asumir que la competencia global requiere inteligencia.

El Tomo I presenta al “Sueño Chino” como horizonte de unidad nacional, al mismo tiempo que lanza la purga anticorrupción más profunda del siglo XXI. El Tomo II despliega con crudeza la estrategia de erradicación de la pobreza extrema y la convierte en política de Estado. El Tomo III responde a la pandemia con un modelo de control social altamente eficaz, que Occidente no quiso entender. Y el Tomo IV plantea la “prosperidad común” como nuevo pacto social post-neoliberal, mientras sugiere una reforma global del orden mundial. Quien se atreva a leer, no volverá a hablar de China como antes.

RESEÑA CRÍTICA Y ESTRUCTURAL

Esta colección no es literatura propagandística. Es un artefacto de gobierno. Es un instrumento de dirección doctrinaria. Es, sobre todo, una arquitectura de mundo. Xi Jinping no escribe para cautivar a Occidente, sino para sentar las bases de un modelo que desafía la hegemonía occidental desde el poder, no desde la queja.

La derecha europea y americana no quiere leer estos libros porque teme encontrar en ellos algo que funcione. Algo que cuestione su dogma del libre mercado absoluto. Algo que revele que es posible erradicar la pobreza sin democracia liberal, garantizar estabilidad sin alternancia y construir comunidad sin individualismo como ética.

Y más aún: Occidente teme que sus democracias en crisis —muchas veces inoperantes, desvirtuadas, capturadas por élites o vaciadas por la apatía— encuentren sentido en un modelo distinto. ¿Quién dice que el sistema de representación popular en China no es representativo? El Partido Comunista Chino cuenta con más de 98 millones de miembros activos. Dentro de él conviven opiniones, focos, líneas de pensamiento, críticas y propuestas. Y es en ese plano interno, estructurado por un ascenso basado en mérito y formación —donde no se cuela un solo ignorante—, que se discute políticamente el país. Las decisiones se toman por equipos competentes, después de extensos análisis, reflexión, pragmatismo y, sobre todo, principios fundamentales compartidos.

Leer y considerar estos escritos nos obliga a contrastar. ¿Qué sistema de representación representa realmente a sus supuestos representados? ¿Qué democracia? Díganme un solo país occidental donde hoy no haya una crisis estructural de legitimidad, participación o sentido político. ¿Dónde no se esté gobernando con encuestas, emociones o marketing en lugar de con ideas, programas y principios?

La izquierda tampoco los lee. Prefiere mirar con sospecha todo lo que huela a control o disciplina. Pero el problema es estructural: nuestra cultura política occidental, en su conjunto, desprecia lo que no domina. Y en ese desprecio se condena a la irrelevancia.

TOMO I: FUNDAMENTOS Y LIDERAZGO INICIAL (2012–2014)

Este volumen sienta las bases doctrinarias del Xiísmo. El “Sueño Chino” aparece como horizonte nacional de rejuvenecimiento colectivo, mientras se desata una campaña anticorrupción sin precedentes. No hay eufemismos: se trata de una purga política diseñada para reforzar la autoridad moral del Partido, una operación quirúrgica en la élite que marcó el tono de todo el mandato de Xi. En sus primeros discursos, Xi denunció que “el colapso de la URSS fue causado por la pérdida del alma ideológica del Partido”, y dejó claro que no permitiría la repetición de esa historia.

La consigna del Estado de derecho con características chinas aparece tempranamente como una forma de disciplina social, no como un símil del constitucionalismo liberal. El discurso inaugural de Xi en el Comité Central de 2012 ya contiene el germen de esta noción: la ley no es un límite al Partido, sino un instrumento para la cohesión de su proyecto. Por eso, el índice abre con la reafirmación del socialismo a la china y el llamado al renacimiento nacional.

Cuando Xi habla del Sueño Chino, no lo hace desde la retórica emocional, sino desde un programa: reducir la pobreza extrema (logrado antes de 2021), reconectar con la historia milenaria del país y proyectar orgullo nacional en el escenario global. Todo esto se acompaña de una renovación de la diplomacia vecinal, una ofensiva de soft power en Asia-Pacífico y África, y una visión sistemática del desarrollo ecológico, como se plasma en su famoso discurso sobre la “civilización ecológica” (2013), en el que declara que “las montañas verdes son también montañas de oro”.

La inclusión de Hong Kong en el índice —“Un país, dos sistemas”— no es casual. Desde este tomo comienza la preparación ideológica de la reunificación. En simultáneo, se observa una política activa de inserción cultural, revitalización moral y reconstrucción de comunidad, con una advertencia implícita: el Partido no es sólo gobierno, es también conciencia, escuela y estructura de sentido.

Este primer tomo no solo inaugura una doctrina, sino que codifica un nuevo tipo de liderazgo. Aquí, el índice cobra vida propia: cada entrada se convierte en una pista hacia el diseño de una China que busca afirmarse desde su especificidad.

ÍNDICE DEL TOMO I:

Socialismo con Características Chinas
El Sueño Chino
Reforma General y Profunda
Desarrollo Económico
Estado de Derecho
Una China Culturalmente Avanzada
Emprendimientos Sociales
Progreso Ecológico
Defensa Nacional
Un País, Dos Sistemas
Desarrollo Pacífico
Nuevo Modelo de Relaciones entre los Grandes Países
Diplomacia Vecina
Cooperación con Países en Desarrollo
Relaciones Multilaterales
Lazos Estrechos con el Pueblo
Combate a la Corrupción
Liderazgo del Partido Comunista
Apéndice: Hombre del Pueblo

TOMO II: CONSOLIDACIÓN Y PROYECCIÓN INTERNA (2014–2017)

Este tomo refleja un Partido que ya no necesita justificar su autoridad, sino demostrar su eficacia. Xi ya ha tomado el control absoluto del aparato central, y ahora articula la llamada “disposición estratégica de las cuatro integralidades”: construcción económica, profundización de reformas, gobernanza según la ley y rectitud del Partido. A partir de aquí, los discursos comienzan a operar como verdaderos programas de Estado.

Uno de los momentos más significativos es la declaración de “triunfo definitivo en la culminación de una sociedad modestamente acomodada”, que implicó sacar de la pobreza a más de 700 millones de personas en menos de una generación. En cada alocución sobre pobreza, Xi insiste en su concepto de precisión: no basta con subir el PIB, hay que saber dónde vive la pobreza, qué la causa, y qué políticas funcionan en cada territorio. Eso se traduce en despliegue tecnológico, censos digitales y asistencia planificada.

En materia de cultura socialista, se reactiva la pedagogía ideológica como parte del bienestar. Se distribuyen gratuitamente textos marxistas, se crean canales de televisión educativos y se refuerza la censura no como represión, sino como pedagogía pública. Se habla abiertamente de “crear una atmósfera de pensamiento correcto”.

Este tomo también sistematiza la noción de comunidad de destino compartido, uno de los conceptos clave de la doctrina Xi. Esta idea aparece por primera vez en un discurso ante la ONU y se repite luego en foros africanos, latinoamericanos y asiáticos, apuntando a una arquitectura mundial multipolar, donde los pueblos compartan recursos, infraestructuras y destino, sin la hegemonía unilateral de Estados Unidos.

Es un índice que traduce la maduración de una doctrina. Las categorías ya no son ideas aspiracionales: son resultados, métodos y campos de expansión estratégica.

ÍNDICE DEL TOMO II:

Mantener y desarrollar el socialismo con peculiaridades chinas
Ampliar las perspectivas de la causa socialista
Dirección del Partido como rasgo esencial del sistema chino
Disposición estratégica de las “cuatro integralidades”
Integración del sueño chino con el anhelo popular
Sin olvidar las aspiraciones fundacionales
La Gran Marcha contemporánea
Sociedad modestamente acomodada y revitalización
Popularización del marxismo con características chinas
Triunfo definitivo en la culminación de la sociedad acomodada
Fase decisiva y superación de dificultades estructurales
Lucha precisa contra la pobreza
Reformas estructurales continuas
Democracia socialista y gobernanza científica
Cultura socialista y valores comunes
Civilización ecológica y medioambiente
Modernización del Ejército Popular
Gobernanza moderna y autoconstrucción del Partido

TOMO III: CRISIS, RESILIENCIA Y REFORMA (2017–2020)

Este volumen está atravesado por el golpe civilizatorio de la pandemia de COVID-19. Los discursos y documentos reunidos aquí revelan una capacidad de reacción institucional muy superior a la de cualquier país occidental. Xi articula una estructura de comando político-científico centralizado, con mecanismos de seguimiento digital, cierre preventivo de fronteras internas y cooperación entre regiones para blindar zonas vulnerables.

La frase más repetida en este período es “el pueblo primero”, pero no como consigna abstracta, sino como principio rector de la política sanitaria. Desde marzo de 2020, cada provincia china tuvo planes de emergencia específicos, con coordinación directa desde el Comité Permanente. Al mismo tiempo, se documenta una aceleración de la gobernanza basada en datos, en la que sistemas de trazabilidad, inteligencia artificial y control territorial se funden con el aparato político.

El índice también revela el énfasis creciente en autorreforma del Partido: auditorías internas, rotación de cargos, controles ideológicos, y exigencia de formación continua. Esta parte de la obra confirma que el Partido Comunista Chino no es una máquina cerrada, sino un sistema de perfeccionamiento político permanente, sometido a tensiones, errores y ajustes.

El lector encontrará aquí no solo un registro de crisis, sino una exhibición de resiliencia como modelo. El índice está compuesto como una arquitectura: cada entrada funciona como pilar de una misma estrategia de largo plazo.

ÍNDICE DEL TOMO III:

Socialismo con características chinas para la nueva era
Liderazgo absoluto del Partido
Sistema y capacidad de gobernanza estatal
El pueblo como soberano
Erradicación de la pobreza y sociedad moderadamente próspera
Reforma estructural sostenida
Nueva apertura integral
Prevención de riesgos sistémicos
Desarrollo de alta calidad
Consolidación de la democracia socialista
Revitalización cultural china
Mejoramiento del bienestar social
Ecología y civilización verde
Ejército fuerte y leal al Partido
Hong Kong, Macao y reunificación
Diplomacia de gran país con características chinas
Comunidad de destino compartido para la humanidad
Autorreforma del Partido
Lucha contra el COVID-19 y dirección política en la emergencia

TOMO IV: MADURACIÓN DEL MODELO Y PROPUESTA GLOBAL (2020–2022)

En este tomo, la doctrina alcanza una etapa de formulación integral. La palabra clave es “prosperidad común”, entendida no solo como distribución material, sino como garantía estructural de igualdad de condiciones para todas las regiones y clases sociales. Se trata de cerrar la brecha entre las ciudades hipertecnológicas del este y las zonas rurales del interior. Aparecen propuestas como el “impuesto a la riqueza silenciosa” y regulaciones severas al sector tecnológico, que escandalizaron a los medios financieros de Wall Street.

La noción de “liderazgo global responsable” reemplaza a la antigua retórica de “ascenso pacífico”. China ya no se justifica: ahora propone. Desde los discursos de la Iniciativa de la Franja y la Ruta, pasando por los foros de gobernanza global, hasta las cumbres climáticas, Xi comienza a hablar como potencia normativa.

Este tomo también revela la integración entre seguridad nacional, tecnología y soberanía digital. Se refuerza el firewall, se desarrollan sistemas operativos propios, y se apuesta por la autosuficiencia tecnológica en sectores clave. El lenguaje de estos documentos deja claro que la gobernanza digital no es un apéndice técnico, sino parte estructural del modelo.

Es el tomo de mayor densidad estructural. En él se ofrecen todas las piezas de una cosmovisión orgánica. Leer el índice no es solo repasar temas, sino recorrer la arquitectura completa de un sistema que se propone a sí mismo como alternativa civilizatoria.

ÍNDICE DEL TOMO IV:

Consolidación del pensamiento de Xi Jinping como guía
Defensa nacional y seguridad integral
Liderazgo total del Partido sobre todos los ámbitos
Desarrollo económico de alta calidad
Reformas institucionales y dirección estratégica
Modernización socialista integral
Estabilidad financiera y autonomía tecnológica
Coordinación regional y desarrollo equilibrado
Seguridad alimentaria, energética y ambiental
Protección ecológica y economía verde
Construcción de un Estado de derecho socialista
Integración digital, cibernética y de datos
Promoción del bienestar común
Lucha sostenida contra la pobreza
Cohesión nacional y unidad étnica
Juventud, educación y cultura
Reforma del sistema educativo
Sistema disciplinario y anticorrupción
Defensa del sistema socialista ante ataques externos
Diplomacia y liderazgo global responsable
Propuesta china para la reforma del orden mundial

EPÍLOGO – ¿Y AHORA QUÉ HACEMOS CON ESTO?

No basta con leer a Xi Jinping. Pero es imprescindible haberlo leído para poder discutirlo con seriedad. La política occidental está repleta de opinantes de plató, candidatos de TikTok, tecnócratas de copia-pega y operadores ideológicos que no soportan la complejidad. Se asume que leer es una rareza, y estudiar al adversario, una traición. Así estamos: reaccionando con memes a civilizaciones enteras.

El dilema no es táctico, sino civilizatorio. ¿Cómo se puede gobernar un mundo multipolar si ni siquiera se entiende qué mueve a las potencias que lo configuran? ¿Cómo puede un parlamentario europeo, chileno o canadiense pretender votar sobre China si su conocimiento del país se limita a titulares de The Economist y frases de campaña?

Y aquí es donde el debate sobre “representación” merece ser reventado desde sus cimientos. ¿Cuál es el sistema verdaderamente representativo hoy? ¿El que elige actores, deportistas y herederos de apellidos para cargos de Estado en campañas financiadas por bancos y consorcios? ¿O el que forma cuadros políticos durante décadas, obliga a estudiar, a leer, a servir al pueblo, y permite que asciendan por mérito hasta llegar a la cúpula? Xi Jinping no nació en el poder. Fue hijo de un purgado, enviado al campo, y se abrió paso desde abajo. Trabajó en aldeas, en regiones marginales, en provincias difíciles. Estudió sin parar. Superó filtros internos. Ascendió con disciplina. Es, literalmente, producto de una carrera política basada en formación, evaluación constante y responsabilidad pública.

El Partido Comunista Chino tiene cerca de 100 millones de miembros. Dentro de esa estructura —diversa, tensa, activa— se debate el país. Hay elecciones internas, hay niveles, hay órganos representativos, hay sesiones, hay mecanismos de consulta popular, hay deliberación. ¿Quién vota en las instancias primarias de base, en los representantes de pueblitos perdidos en el campo de la extensa China o desde el desierto del norte hasta los municipios o territorios administrativos de las desarrolladas ciudades del sureste? Pues el mismo pueblo chino de cada territorio. Y quién vota en las instancias técnicas y políticas siguientes? Aquellos que ya han demostrado competencia, compromiso, estudio y responsabilidad. El pueblo chino, lejos de sentirse marginado por esta estructura, confía en que quienes han ascendido dentro del Partido lo han hecho porque saben, porque pueden, y porque han demostrado estar a la altura. No es una fe ciega. Es una legitimidad construida desde abajo y sostenida por resultados.

China sí tiene elecciones. Sí hay sistema interno de debate. Lo que no hay es farsa. No hay marketing político. No hay operadores televisivos ni think tanks pagados por fundaciones imperialistas. Y no hay arcoíris de partidos que no representan a casi nadie y que buscan cuotas de poder por cuatro años para financiar así, desde el bolsillo del Estado, sus estructuras y pseudolíderes. Hay equipos. Hay planificación. Hay doctrina. Hay responsabilidad. Y hay resultados.

¿Dónde está la representación real? ¿En la democracia liberal colapsada de Estados Unidos, gobernada por encuestas, lobbies y estructuras judiciales vendidas? ¿En la Argentina de Milei, donde se hace política como si fuera un streaming? ¿En la Unión Europea, donde los votantes ya no entienden ni a quién eligen ni por qué? ¿O en un sistema que ha logrado sacar a 800 millones de personas de la pobreza extrema y mantener la cohesión nacional de la segunda población más grande del planeta?

Esto no es una apología. Es una interpelación. Rechacen a China, si quieren. Pero háganlo después de haberla entendido. Después de haber leído. Después de haber reconocido —aunque duela— que existe un modelo que, aunque profundamente distinto, ha funcionado. Y amenaza con desestabilizar el cómodo monopolio moral de Occidente.

Leer libros —enteros, difíciles, distintos— es hoy un acto radical. Y si además se discuten, se cruzan y se enseñan, puede que estemos empezando a recuperar algo del oficio político que perdimos cuando decidimos que gobernar era solo repetir eslóganes.

Aquí están los tomos. Está el índice. Está la propuesta. Que nadie diga después que no sabía por dónde empezar.

Y si después de todo esto, aún creen que China no representa a su pueblo, entonces háganse un favor: miren a sus propios gobiernos. Mírenlos bien. Y pregúntense quién los representa realmente. Y si no pueden responder esa pregunta, entonces el problema no es China.

En el fondo, el gran desafío no es leer a Xi Jinping. Es atreverse a repensar desde cero qué significa gobernar. Y quién debería hacerlo. Porque la pregunta que nos lanza China no es “¿te gusta este modelo?”, sino otra mucho más incómoda: ¿por qué seguimos tolerando modelos que ya no funcionan?

REFERENCIAS Y FORMAS DE ACCESO

  1. Editorial de Lenguas Extranjeras de China (外文出版社) – Casa editorial oficial. Todos los tomos han sido publicados en múltiples idiomas y están disponibles en su catálogo internacional. Versión española validada por el Buró de Traducción del Consejo de Estado.
  2. Puntos de acceso oficiales
  3. Versiones físicas – Se venden a través de AliExpressAmazon o librerías diplomáticas. También pueden encontrarse en embajadascentros culturales chinos y universidades asociadas a proyectos de cooperación con China.
  4. Versiones digitales – Aunque el acceso directo al PDF en español ha estado restringido, versiones en inglés y chino pueden descargarse libremente desde plataformas como archive.org o idcpc.org.cn.
  5. Sugerencia práctica – Solicitar una copia impresa o digital directamente al Centro Cultural de China en tu país o ciudad, o a través de la sección de prensa de la Embajada China en tu país.

Fuente:
https://www.pressenza.com/es/2025/07/la-gobernacion-y-administracion-de-china-una-obra-que-occidente-rehusa-leer/

¡Basta ya!

Tathiana Flores Acuña, PhD
Derecho internacional humanitario

Hambre como arma de guerra, hambre como instrumento para lograr el genocidio del pueblo gazatí, con la intención demostrada a través del bloqueo de ayuda humanitaria y de bienes esenciales, de destruirlo total o parcialmente.1 Así, con la mención explícita de la intención de destrucción total o parcial de un pueblo, es definido el genocidio por la Convención de 1948, que nació luego de las atrocidades de la II Guerra Mundial.2

Esta es la cruda realidad de Gaza en estos momentos. La Organización Mundial de la Salud (OMS), alertó este miércoles sobre una situación de «hambruna masiva» en Gaza, donde las muertes por desnutrición, incluidas las de niños y niñas, van en aumento en forma alarmante. Por su parte, más de 100 organizaciones humanitarias, entre ellas Save the Children, Oxfam y Médicos Sin Fronteras, han publicado un comunicado conjunto en el que denuncian lo que califican de «hambruna masiva» inminente en Gaza. Ya desde mayo, las Naciones Unidas informaron que, según la información de la Clasificación Integrada de la Seguridad Alimentaria en Fases (CIF), más de 470.000 personas en Gaza se enfrentan al hambre catastrófica (CIF Fase 5), y que toda su población sufre inseguridad alimentaria aguda. En días recientes, el Ministerio de Sanidad de Gaza ha registrado 101 muertes de palestinos por desnutrición, 15 de ellas en un periodo de 24 horas, de los cuales al menos 80 de los 101 son infantes.

Ante esta realidad aplastante y cruel quisiera traer a colación varios principios fundamentales del Derecho internacional. El primero de ellos es el principio de la «Responsabilidad de Proteger» (R2P) surgió como respuesta a los fracasos de la comunidad internacional para prevenir atrocidades masivas, como los genocidios de Ruanda y la ex Yugoslavia en la década de 1990. Se basa en la idea de que los Estados tienen la responsabilidad primordial de proteger a sus poblaciones de crímenes atroces, y que la comunidad internacional debe ayudar a los Estados a cumplir con esta obligación y, si es necesario, intervenir cuando un Estado falla en proteger a su población.

En esta Cumbre Mundial que tuvo lugar en 2005, todos los jefes de Estado y de Gobierno afirmaron la responsabilidad de proteger a las poblaciones frente al genocidio, los crímenes de guerra, la depuración étnica y los crímenes de lesa humanidad. El principio R2P se basa en tres pilares igual de importantes: la responsabilidad de cada Estado de proteger a sus poblaciones; la responsabilidad de la comunidad internacional de ayudar a los Estados a proteger a sus poblaciones; y la responsabilidad de la comunidad internacional de proteger a las poblaciones de un Estado cuando es evidente que este no logra hacerlo.

En el párrafo 139, el documento final de la Cumbre establece que «la comunidad internacional, por medio de las Naciones Unidas, tiene también la responsabilidad de utilizar los medios diplomáticos, humanitarios y otros medios pacíficos apropiados, de conformidad con los Capítulos VI y VIII de la Carta, para ayudar a proteger a las poblaciones del genocidio, los crímenes de guerra, la depuración étnica y los crímenes de lesa humanidad.

Dentro de estos medios pacíficos, quisiera mencionar tres que considero instrumentales con el fin de parar el genocidio, de forzar el restablecimiento de la ayuda humanitaria y de crear las condiciones, a través de la presión internacional, para un diálogo fructífero que a la postre lleve a la paz y al respeto de la determinación de los pueblos.

El primero es el recurso a los cascos azules de las Naciones Unidas, que trabajan para proteger a la población civil de la violencia, el abuso y la explotación, especialmente en zonas de conflicto. Las patrullas de personal militar de la ONU pueden desempeñar un papel crucial en situaciones de hambruna, principalmente protegiendo a la población civil y facilitando la entrega de ayuda humanitaria. Su presencia puede asegurar que la ayuda llegue a quienes más la necesitan y ayudar a crear un entorno seguro para las operaciones de socorro. La operación se establecería con el consentimiento de todas las partes involucradas en el conflicto, aunque se puede prever la autorización por el Consejo de Seguridad incluso sin ese consentimiento, si se considera una amenaza para la paz. El derecho de veto de los cinco miembros permanentes del Consejo de Seguridad, previsiblemente de Estados Unidos, es el gran obstáculo para recurrir a esta posibilidad de ayuda al pueblo gazatí.

El segundo es el recurso a las sanciones internacionales.3 En el derecho internacional, las sanciones son concebidas como medidas coercitivas que se aplican contra Estados, entidades o individuos que amenazan la paz y la seguridad internacionales, o que incumplen obligaciones internacionales. Las sanciones pueden ser utilizadas para disuadir o castigar acciones agresivas, o para proteger los derechos humanos y hacer respetar el derecho internacional humanitario.

El sistema de sanciones internacional no debe menospreciarse. Fueron las sanciones, junto con la lucha interna de los movimientos anti-apartheid, la presión diplomática y las reformas internas, factores clave que llevaron al desmantelamiento del apartheid en Sudáfrica a principios de la década de 1990. El 17 de junio de 1991, el Parlamento sudafricano derogó las leyes que sustentaban el apartheid y en 1994 se celebraron las primeras elecciones multirraciales en Sudáfrica, marcando el fin oficial del apartheid y el comienzo de una nueva era para el país.

El embargo de armas sería, en mi opinión, la sanción primordial a ejercer en el caso de Israel.

Pero esta medida parece improbable, en gran medida porque Alemania y Estados Unidos son los principales proveedores de armas de Israel — el 69% de las importaciones armamentistas israelíes provienen del país norteamericano— y en este momento se considera muy alejada la posibilidad de que ambos países reconsideren sus políticas.

Las sanciones comerciales son medidas importantes a considerar. Continuando con el ejemplo del régimen de apartheid en Sudáfrica, la comunidad internacional adoptó sanciones económicas como forma de condena y presión. Jamaica lideró el movimiento al ser el primer país en prohibir las mercancías procedentes de la Sudáfrica del apartheid en 1959.

Estas sanciones ejercieron una importante presión sobre el gobierno que contribuyó a poner fin al apartheid. En 1990, el presidente Frederik de Klerk reconoció la insostenibilidad económica de la carga de las sanciones internacionales, liberó al líder nacionalista africano Nelson Mandela y habilitó al Congreso Nacional Africano (ANC), previamente proscrito.

En el caso en estudio, dados los fuertes vínculos económicos entre la Unión Europea (UE) e Israel, la adopción de sanciones comerciales por este bloque regional constituiría una medida con gran impacto. En el 2024, la UE fue el principal socio comercial de Israel: el 32 % de las exportaciones israelíes se dirigieron a esta zona. Sin embargo, presiones políticas internas han hecho que la UE no haya tomado aún ninguna decisión al respecto.

De forma unilateral, Irlanda sí parece estar más cerca de aprobar un proyecto de ley que prohibirá el comercio con los asentamientos israelíes ilegales en los territorios ocupados de Cisjordania. El primer ministro irlandés ha dicho que la promulgación del proyecto de ley sería en gran medida simbólica, ya que tiene como objetivo ejercer presión sobre Israel para que ponga fin a la guerra en Gaza. Si la legislación –Proyecto de ley de 2025 sobre asentamientos israelíes en el territorio palestino ocupado (prohibición de importación de bienes)– se aprueba en el Parlamento de Irlanda, será la primera vez que un estado miembro de la Unión Europea promulgue una ley de este tipo. La adopción de sanciones comerciales por otros países del mundo contribuiría enormemente a crear una presión internacional importante.4

Con respecto a las sanciones individuales vale la pena recordar que la Corte Penal Internacional ha emitido órdenes de arresto contra el primer ministro israelí, Benjamin Netanyahu, y su entonces ministro de Defensa, Yoav Gallant, por crímenes de guerra y crímenes de lesa humanidad. En el caso de la UE, estas órdenes brindan motivos sólidos para sancionar a altos cargos del gobierno israelí responsables del genocidio en curso en Gaza, así como a personas y entidades que promueven la violencia de los colonos en los Territorios Palestinos Ocupados. En 2024, la UE sancionó a cinco colonos israelíes y tres entidades en Cisjordania y Jerusalén Oriental. Más recientemente, el Reino Unido, Australia, Canadá, Nueva Zelanda y Noruega impusieron sanciones específicas contra grupos e individuos israelíes acusados de violencia contra los palestinos en Cisjordania.

El boicot y la desinversión son otros medios de presión. Las medidas de boicot serian acciones de rechazo voluntario y no violento hacia productos, empresas e instituciones, generalmente motivadas por razones morales, sociales, políticas o ambientales. Los boicots se facilitan instando al público a evitar la compra de bienes fabricados por empresas israelíes y la desinversión instando a los bancos, fondos de pensiones y empresas internacionales a dejar de hacer negocios en Israel. El boicot y la desinversión en tanto que medidas individuales, pueden ser vistos como una acciones pequeñas, pero tienen el potencial de impactar significativamente, al reflejar valores personales y fomentar la responsabilidad civil. Al negarse a consumir o utilizar productos o servicios de una empresa o entidad de origen específico, se envía un mensaje claro sobre las acciones o prácticas inaceptables. Esta acción, puede generar un efecto dominó al influir en otros y, en última instancia, llevar a cambios que se reflejen a nivel macro.

Para concluir es imperativo hacer mención del último informe de la relatora especial de Naciones Unidas sobre los territorios palestinos, titulado “De la economía de la ocupación a la economía del genocidio” y presentado en junio 2025 ante el Consejo de Derechos Humanos de la ONU. En su informe, Francesca Albanese advirtió a las compañías que se arriesgan a ser cómplices de crímenes de guerra en Gaza y la Cisjordania ocupada al participar en lo que describió como «una economía del genocidio», instando a decenas de empresas multinacionales a dejar de hacer negocios con Israel. El informe contiene una lista que incluye, entre otros, al fabricante armamentístico Lockheed Martin por vender armas y a las empresas tecnológicas Alphabet, IBM, Microsoft y Amazon por proporcionar tecnología que permite a Israel rastrear y atacar a palestinos.

Existen medidas para presionar a un Estado hacia el cumplimento del Derecho Internacional y el respeto de los derechos humanos y del derecho internacional humanitario. Hagamos todo lo que esté a nuestro alcance para que este genocidio ¡termine ya! Es urgente, ¡imperativo!

1 El artículo II de la Convención, establece “ se entiende por genocidio cualquiera de los actos siguientes, perpetrados con la intención de destruir, total o parcialmente, a un grupo nacional, étnico, racial o religioso, como tal: matar a miembros del grupo; causar daño físico o mental grave a miembros del grupo; someter deliberadamente al grupo a condiciones de existencia que hayan de acarrear su destrucción física, total o parcial;

imponer medidas destinadas a impedir los nacimientos dentro del grupo; trasladar forzosamente a niños de un grupo a otro grupo (el subrayado es nuestro y aplica en todo este artículo).

2 Primero que todo vale la pena subrayar que la Convención se titula “Convención para la Prevención y la Sanción del Delito de Genocidio”, por lo que no es necesario que se lleve a cabo el genocidio para calificarlo como tal, sino que existe el deber de actuar ya en fases iniciales para, efectivamente, ¡lograr su prevención! El segundo elemento a destacar es que el artículo III de la Convención prevé sancionar, no solo el genocidio en sí, sino también la tentativa de genocidio y la complicidad en el genocidio. Importante es entonces destacar las sanciones previstas para estos dos actos, que podría y debería implicar sanciones y responsabilidad para los países que están apoyando con armas, entre otros, a Israel a cometer este genocidio. Finalmente, el articulo V prevé que las Partes contratantes se comprometen a adoptar, con arreglo a sus Constituciones respectivas, las medidas legislativas necesarias para asegurar la aplicación de las disposiciones de la presente Convención, y especialmente a establecer sanciones penales eficaces para castigar a las personas culpables de genocidio o de cualquier otro de los actos enumerados en el artículo III.

3 Este tema podría muy bien ser objeto de un artículo completo por la amplitud de sanciones existentes así como de países e individuos sancionados con características específicas y contextos determinados.

4 No quisiera referirme aquí al desacertados esfuerzos y anuncios del Gobierno de Costa Rica en sentido completamente opuesto, de firmar un Tratado de Libre Comercio con Israel.

La secta chavista

Óscar Madrigal

Oscar Madrigal

Una señora en EEUU manifestó que en una fecha determinada los Ovnis llegarían a La Tierra en una zona cercana porque ella tenía comunicación con los extraterrestres. Constituyó un grupo de seguidores que cada día crecía más. Llegada la fecha, los Ovnis no aparecieron.

Una secta religiosa pregona que el fin del mundo llegará un día de un año determinado. Esa secta crece a una gran velocidad. En la fecha dicha, el fin de mundo no ocurre. Fija otra fecha para tal Apocalipsis y así sucesivamente.

Ante estos fracasos, la razón indicaría que los seguidores de esos grupos abandonarían indignados la secta ante la evidencia del fallo. Pero ocurre que no es así. Al contrario, la inmensa mayoría de los pertenecientes a esos grupos continúan en ellos y muchos más bien reafirman sus convicciones.

Estas gentes con esas convicciones son difíciles de cambiar, aunque los hechos vayan en contra de sus creencias. Cuando se trata de mostrarle las evidencias de la realidad, él cuestionará sus fuentes y su defensa será el ataque personal, el insulto o solo el rechazo irracional. No importa los esfuerzos por explicar la situación, nunca serán suficientes.

Los miembros de esas sectas cuando sus creencias chocan con la realidad, cuando no se cumple por ejemplo una promesa o una afirmación, se refuerzan en su error por influencia del mismo grupo, de los mismos miembros de la secta.

Los dirigentes y miembros del grupo ejercen un control mental sobre la mayoría y una obediencia incondicional.

No importa que los pronósticos del fin del mundo o la fecha de la venida de los extraterrestres no se cumpla, las creencias seguirán intactas.

A este fenómeno se le ha llamado disociación de la realidad o teoría de la disonancia cognitiva.

La secta chavista se asemeja bastante a los grupos que fechan el fin del mundo, pregonan la venida de los ovnis o la sublimación de un líder.

¿Cómo es la secta chavista?

Son un grupo pequeño que se resume a los que se reunieron en el Parque Morazán, que a lo sumo llegan a 3 mil personas, en un 90% constituido por personas bastante mayores de edad.

Su característica principal, como es lógico de la secta, es tener un pensamiento absolutamente acrítico, personas que únicamente esperan órdenes para obedecer. Apoyaré el partido que diga Pilar y votaré por la persona que me diga Pilar y don Rodrigo, dicen. (En el pasado bipartidista votaban por cualquiera que les pusieran los dos partidos, independientemente de quién era el candidato, aunque al interior de estos había cierta competencia. En el chavismo existe solo el “dedazo”).

Existe una incomprensión de por qué se está en la secta. Solo 2 de cada 10 de los presentes en el Morazán, pudieron citar algún logro, por mínimo que fuera, del actual gobierno de Chaves. Sin embargo, la convicción es que ha sido un excelente gobierno. Ni siquiera los líderes pueden decir cuáles son las orientaciones económicas principales de ese movimiento. (Pilar no pudo decir nada al respecto).

Una de las principales motivaciones ideológicas que los agrupa es un furibundo anticomunismo, especialmente el trasnochado. (¡Váyanse para Cuba!). Políticamente son rabiosamente anti-liberacionistas y menos enemigos de otras agrupaciones del antiguo bipartidismo.

Por supuesto que existe el líder, el cual está fuera de toda controversia, crítica o equivocación. Si dice algo inexacto no es una mentira, aunque mienta muy a menudo, sino una falta de precisión.

El líder, en este caso Pilar y Chaves, los llevarán, siempre y cuando sean un rebaño mudo y obediente, a la Tierra Prometida, donde se resolverán todos los problemas creados por los partidos corruptos del pasado.

Esa Tierra Prometida será construida por el triunfo el año entrante de la presidencia en primera vuelta y la elección de 40 diputados. De esta manera se acabarán la corrupción, el entrabamiento de los diputados que no trabajan y podrán construir el nuevo régimen.

Con 40 diputados tendrán más que la mayoría absoluta y podrán reformar la Constitución para establecer la “reelección presidencial continua” como ya lo ha dicho Pilar. Podrán nombrar magistrados y poner a Juan Diego de presidente de la Corte y a Villalobos de presidente de la Sala III-Penal, a Martha, la de la Caja, como Contralora, transformar el TSE y quitar a la tupamara que lo dirige, destituir al fiscal general y al director del OIJ para poner personas complacientes con la secta y así “tomar” todas las instituciones para que dejen de “fregar” o de joder.

También los 40 diputados les permitirán aprobar reducir el salario mínimo como propone Pilar, aprobar las jornadas 4×3, eliminar las horas extras, aprobar impuestos, aplicar la austeridad extrema en educación, salud y seguridad, eliminar las garantías procesales penales, crear más grandes y fortificadas cárceles para encerrar a todo aquel que se pueda, endeudar sin límite el país y convertirlo en un nuevo protectorado estadounidense.

La prensa como es canalla, hay convertirla en prensa vasalla para limitar o eliminar las críticas y que a todo digan que está muy bien, las universidades deben formar profesionales acríticos, aunque esto signifique violentar la autonomía universitaria (¡De todas maneras eso para qué sirve!).

¿Exagero? Desgraciadamente no. Eso es lo que han manifestado en diferentes ocasiones los dirigentes del chavismo.

De esta manera habremos pasado de la corrupción del bipartidismo a la corrupción de la secta, sin contrapeso alguno.

Los miembros de la secta no van a cambiar de opinión. Es como el drogadicto que sabe que las drogas son malas y continúa consumiendo.

Lo importante es tratar de que la secta no contamine al resto de la población que aún puede razonar con menos fanatismo y comprendan el futuro que nos espera si la secta gobierna.

Según las encuestas su influencia electoral está limitada a un 10% de los votantes. Hay que limitarla cada vez más. Aunque los hechos, la realidad, no le haga mella a la secta, el resto de la población podrá entender la situación actual y el futuro que nos acecha.

La lucha se concentra mucho en las redes sociales, pero me pregunto:

¿Hay vida después de las redes sociales?

Y…

¿Hay política fuera de las redes sociales?