En el Día internacional de los Pueblos Indígenas

FECON. 9 de agosto, 2020. En Costa Rica son 8 los pueblos indígenas que existen y resisten después de 500 años de reducciones por parte del pasado sistema colonial y actual modelo neocolonial del Estado costarricense.

Desde 1977 en medio de un proceso agresivo de expansión de la frontera agrícola incentivada por la Ley de Tierras y Colonización, se tuvieron que demarcar territorios para cada pueblo como parte de las luchas de esa generación indígena.

Para el gobierno central se consideraba baldías y ociosas las tierras boscosas. La deforestación estaba en auge de la mano con la ganadería, que sería la actividad más destructiva de la naturaleza a gran escala durante esa época en Costa Rica.

A 43 años de esa demarcación territorial, que se constituía como un mecanismo para la protección de los sistemas de valores tradicionales de la colectividad social indígena, el desinterés estatal y las invasiones de no indígenas ambiciosos de tierras siguen minando los territorios.

Algunos de estos espacios delimitados para los pueblos, se mantienen usurpados hasta en un 90% por grandes terratenientes. El incumplimiento de las expropiaciones y el tiempo han generado un caos de ilegalidades dentro de los territorios indígenas de Costa Rica.

Como respuesta, desde hace nueve años los pueblos indígenas han tenido que empoderarse de su autonomía impulsando las recuperaciones de grandes fincas que explotan ilegalmente personas que no son del pueblo para el que se destinó cada territorio.

Es vastamente sabida la conflictividad que esto desencadenó, por irresponsabilidad de los gobiernos que nunca sanearon estos territorios. La recuperación de la autonomía ha costado a los pueblos Bribri y Broran la caída de dos de sus líderes por las balas de los invasores de tierras.

La impunidad judicial que arrastran los asesinatos a sangre fría de Sergio Rojas (2019) y Jerhy Rivera (2020) nos recuerdan los tiempos de la denominada “guerra justa” que apalancaba la Corona Española en 1530 para someter a los pueblos que resistían a sus intereses.

La defensa de la historia, el territorio y los valores de convivencia con la tierra son una causa compartida entre los pueblos indígenas y el movimiento ecologista de Costa Rica. Son grandes los desafíos que asumimos al enfrentar al gran capital que saquea y destruye la naturaleza.

Por lo tanto, este día internacional de los pueblos indígenas, reivindicamos nuestro compromiso social con la lucha de los pueblos indígenas de Salitre, Térraba, China Quichá, Curré, Cabagra y Maleku que recuperan la integridad de sus territorios con acciones colectivas.

En este día, demandamos al Estado la protección total e improrrogable de los derechos de las personas recuperantes, de su integridad física, y el reconocimiento de la autonomía como reivindicación del derecho a la autodeterminación de los pueblos indígenas.

 

*Imagen ilustrativa, UCR.