Por Uriel Rojas
Más de cien estudiantes indígenas del Liceo Tsikriyök, situado en Yuavín de Cabagra, Buenos Aires, estrenarán mobiliario, gracias a la gestión inclaudicable de su directora, Sonia Rojas Méndez.
Debido al faltante de estos recursos, los estudiantes tenían que turnarse para utilizar las pocas sillas y mesas que tenían y hasta utilizar algunas en mal estado.
Esta donación se logró a través de la gestión ante la Dirección de Infraestructura Educativa (DIE) del Ministerio de Educación Pública, quien es el órgano encargado de planificar, desarrollar, coordinar, dirigir, dar seguimiento y evaluar planes, programas y proyectos tendientes al mejoramiento y ampliación de la infraestructura física educativa y su equipamiento, como medio para facilitar el acceso, la calidad y la equidad de la educación pública costarricense.
El Liceo Tsikriyök cuenta con más de 100 estudiantes los cuales, la mayoría son indígenas y provienen de pequeños poblados enclavados en las montañas de este territorio bribri.
De acuerdo con Sonia Rojas Méndez, directora de esta institución, “este equipo de mobiliario viene a empujar los esfuerzos que se hace por brindarle a los estudiantes un proceso educativo de la mejor calidad posible».
En estos centros educativos hay muchas necesidades que debemos solventar, tanto en las áreas educativas, sociales y ambientales”, agregó Rojas.
El Liceo Tsikriyök se ubica en la comunidad de Yuavín de Cabagra, 30 km al norte de Buenos Aires, Puntarenas, y fue fundado en el 2014.