Otro proyecto regresivo ambientalmente: Isla San Lucas

Compartimos la siguiente inquietud planteada por Álvaro Sagot y María Elena Fournier en cuanto a la nueva forma en que se quiere administrar las Áreas Silvestres Protegidas, en este caso, la Isla San Lucas:

La isla de San Lucas y aguas aledañas conformaban una Área Silvestre Protegida (ASP), bajo la estricta categoría de manejo conocida como Refugio Nacional de Vida Silvestre.

Los actuales diputados ahora le cambian ese estatus protector, sin un informe dentro de los parámetros de la ciencia y la técnica que justifique la reforma. Al parecer, en el fondo se busca darle un matiz comercial, como se los dijo la Procuraduría General de la República, en el criterio que les aportó (No. OJ 082 2020).

Además, se cambia la naturaleza jurídica de lo permitido en un Parque Nacional, donde debe haber protección, investigación y ecoturismo en ese orden, pero no una explotación con fines comerciales como se extrae del proyecto.

Además, el proyecto incluye la creación de una “junta directiva” que administrará esta Área Silvestre Protegida, alejando al SINAC de su regulación y fiscalización que por ley y votos constitucionales le corresponde. Inevitablemente, éste podría ser un camino a la privatización de una Área Silvestre Protegida para darle un fin comercial en nombre de la reactivación económica.

Ya en el pasado Isla San Lucas y sus humedales han sido “atacados” por los políticos de turno que quieren casinos, una marina y hasta hoteles en este sitio.

Costa Rica está perdiendo sus ASP bajo la responsabilidad de personas que no tienen conocimientos técnicos-científicos, que están mal asesorados-as, que están entregando a nuestra naturaleza en bandeja de oro.

 

*Imagen ilustrativa.