RECOPE y APM, monopolios

Freddy Pacheco León

Un señor Fernández del Instituto Libertad, templo de Milton Friedman y su cofradía neoliberal, clama en El Financiero «¡Rompamos los monopolios creados por ley para crear riqueza y prosperidad!».

Más allá del engaño, comentamos lo siguiente: Hay monopolios importantes para el país. Recope es uno de ellos, pues el abastecimiento energético con combustibles fósiles, es una función estratégica que ha de estar bajo control del Estado. Si alguna empresa quisiera competir con Recope, además, se enfrentaría ante la necesidad de, al menos, duplicar la infraestructura que los costarricenses hemos venido financiando bajo el alero de esa sociedad anónima del Estado. O sea, desde el muelle petrolero, tanques de almacenamiento, control de calidad de todos los combustibles, estaciones de bombeo, cientos de kilómetros de poliductos, planteles de distribución, personal administrativo, etc., con el agravante de que, para resarcirse de esa inversión de miles de millones de dólares, su combustible tendría que venderse no solo más caro que el que nos ofrece Recope, sino también buscando una ganancia sustantiva.

Pero como Recope funciona sin fines de lucro y los gastos administrativos rondan solo el 7%, y calificada por Fitch Ratings como AAA, sus precios seguirían siendo muchísimo más baratos que los de la supuesta empresa competidora.

Es de esperar, por tanto, que no haya en el mundo empresa seria que estuviera siquiera considerando tan mal negocio. Por otro lado, ¡claro que hay monopolios indeseables!, como, por ejemplo, el que crearon con el muelle de APM, que por decisiones administrativas, lo encargan del trasiego exclusivo de todos los contenedores que se trasiegan en Limón, pese a que las terminales portuarias de Japdeva tienen mayor capacidad de funcionamiento.

Y así otros ejemplos propiciados desde el incompetente Consejo Nacional de Concesiones.