Por Memo Acuña (Sociólogo y escritor costarricense)
La imagen dura unos segundos porque a la producción de la televisión internacional poco le importan las acciones afirmativas, las protestas simbólicas, los actos reivindicativos. Más aún en un escenario amplificado en el que las audiencias alcanzan miles de millones en todo el planeta.
En primer plano, durante una exhalación, lo que dura el ojo reteniendo la imagen, aparece la atleta estadounidense Raven Saunders en la ceremonia de premiación de la disciplina de lanzamiento de bala. Con una distancia de 19,79 metros, Saunders se hizo acreedora de la medalla de plata.
Allí, justamente al momento de colgarse la presea en su pecho, levanta las manos cruzadas y las suspende durante unos segundos en el aire, quizá los segundos que le tomó a la producción de la señal internacional decir: “vamos a otra cosa”. Y fueron a otra cosa. Y la acción simbólica no volvió a aparecer en pantalla. Al menos en la transmisión en vivo.
El gesto de la mujer reivindicaba la lucha contra la depresión y colocaba en primer plano la condición de las personas afroamericanas y de los colectivos LGTBI a nivel global. Una interseccionalidad que Raven representa y por la que ha experimentado discriminaciones durante muchos años, al punto de haber intentado acabar con su vida luego de los Juegos Olímpicos de 2016.
La imagen duró unos segundos, su lucha, acaso, le tome toda su vida.
Lo que no pudo editar ni evitar la televisión internacional fue el gesto con que la gimnasta costarricense Luciana Alvarado cerró su participación en su rutina.
Pie al piso, puño en alto y la cabeza inclinada en reverencia hacia atrás, hizo un homenaje al movimiento “Black Lives Matters” que tomó auge luego del asesinato de George Floyd en Estados Unidos en 2020.
“Todos somos iguales y todos somos hermosos e increíbles” diría Alvarado al preguntársele sobre la acción final de su ejercicio, un acto bien planificado, incorporado de modo que la organización, a menudo inmaculada para estas cosas, no levantara resquemores por su significado político.
Levantó su puño como miles de puños levantados en el mundo.
Lo que no deja de ser político es el permanente sentido de humanidad cuando la persona decide simplemente ser. La disruptividad de algunas, porque han sido mujeres las de las acciones, ha sido quizá la marca registrada de los recién terminados juegos y quedó patentada una vez más con un acto de representación de la diversidad.
Contra las protestas de sus propias competidoras y entrenadores adversarios, Japón mostró por primera vez la participación de una atleta transgénero.
La neozelandesa Laurel Hubbard formó parte de la Halterofilia, actividad en la que no pudo pasar más allá de la primera fase con tres resultados negativos. Las protestas de sus contrincantes se basaban en una supuesta ventaja que tendría por su configuración muscular. “La terapia de transición rebaja las diferencias físicas y coloca a todos en un nivel parecido” han comentado algunos especialistas en estos temas.
Luego de su participación, Hubbard ha considerado retirarse del deporte. Durante años tuvo que soportar las protestas y negativas para que su participación fuera efectiva. Pero también sus tratamientos contra los dolores musculares le han mermado su potencia física para los pesos que debe levantar.
Sin embargo, otros kilos más importantes fueron superados por ella. Su trabajo fue hecho: visibilizar el derecho de los y las atletas transgénero a participar en los juegos olímpicos.
De ahora y en adelante, todas, todos, tendrán participación.
Al momento de escribir esta nota, se conoce de la presencia de cerca de diez mil personas provenientes de países africanos, asiáticos, suramericanos y caribeños en la frontera entre Colombia y Panamá. Algunos grupos ya han ingresado a Costa Rica por su frontera sur. Buscan transitar la región para llegar a Estados Unidos como destino final. Con suerte, serán reconocidos y reconocidas en los países de tránsito y aún en el destino, si es que lo logran, como personas refugiadas.
Desde los Juegos Olímpicos en Río de Janeiro 2016, el Comité Olímpico Internacional consideró prestar atención a este tema y conformó un equipo especial con personas refugiadas, representando a esa población.
En una cifra que crece, a junio de 2021 alcanzó 84,2 millones a nivel global, según la Oficina del Alto Comisionado de Naciones Unidad para los refugiados (ACNUR).
Una evidencia de que el ritmo depredador de sistemas políticos, religiosos, heteronormativos y los impactos de la acción de modelos económicos sobre el medio ambiente que provoca desastres y desplazamientos poblacionales ha venido en aumento, lo marcan justamente los cambios cuantitativos de este equipo olímpico entre unos juegos y otros: de 10 atletas en Río, pasó a 29 en Tokio.
El rostro de la joven siria Yusra Mardini ha sido tal vez el más representativo de este particular conjunto. Nadadora olímpica en las dos últimas ediciones, se convirtió en deportista de alta competencia luego de salvarse, salvar a su hermana y a un grupo de personas que buscaban refugio en las costas mediterráneas y estuvieron a nada de morir ahogados.
Ese fue quizá su mejor representación en el agua: preservar la vida.
Las historias compartidas nos reflejan esas otras marcas, los otros tiempos, las otras luchas, otras biografías que quizá no inundarán de gloria los abordajes mediáticos globlales por sus triunfos deportivos. Tal vez sus objetivos personales fueron otros: visibilizar, sensibilizar, acercar.
Los verdaderos violadores de los Derechos Humanos son los Estados Unidos
Solidaridad de los pueblos del mundo desafían el bloqueo a Cuba; ello desespera a USA
Nuestro desarrollo y resultados científicos siempre estarán a disposición de nuestros pueblos
La pandemia ha dificultado el relacionamiento y los intercambios científicos, tecnológicos y culturales con los costarricenses
“Cuba no pone condición alguna para la adquisición de sus vacunas. Todos los países que las necesiten y deseen adquirirlas, podrán hacerlo”, destacó el embajador de Cuba en nuestro país, Jorge Rodríguez, al ser preguntado sí había condiciones para que los costarricenses contaran con Soberana 2, el primer inyectable vacunal desarrollado en el continente por científicos del hemisferio.
Persona locuaz, carismática y precisa en cada una de sus palabras, Jorge Rodríguez, el embajador cubano en Costa Rica es un martiano de pura cepa. Preocupado por Nuestra América, de un conocimiento amplísimo en todos los temas que aborda con profundidad, reduce su ser como diplomático y persona al “deber cumplido sencilla y naturalmente”, como diría el apóstol y poeta.
En una entrevista exclusiva para la revistaSURCOS recordó que la mayoría de los países miembros de la Comunidad de Estados Latinoamericanos y el Caribe (CELAC) ven con muy buenas perspectivas que uno de ellos, este caso Cuba, haya logrado desarrollar cinco candidatos vacunales, uno de ellos, Abdala, que ya es vacuna y Soberana 02 que está en la fase final del registro, certificación y autorización para su uso de emergencia.
Nuestra región, agregó, conoce de la vocación solidaria de nuestro país. Conocen perfectamente que nuestro desarrollo y resultados científicos, siempre estarán a disposición de nuestros pueblos hermanos, destacó. El objetivo principal de nuestra producción de vacunas – sentenció- es el de salvar vidas, no es comercial. El adversario lo conoce y por eso también ha obstaculizado la adquisición de reactivos e insumos para la producción. Una vez más no podrán lograr su objetivo.
El diplomático abordó con el licenciado Rafael Angel Ugalde Quirós los más diversos tópicos de forma abierta, tal como el avance de la democracia en la región, sin que falten esfuerzos por legitimar el injerencismo, contra la soberanía de nuestros pueblos.
Dijo que la llamada ley “global Magnitsky” debería aplicársele a los mismos Estados Unidos, por violaciones de los derechos de sus minorías. Calificó de total “desfachatez”, “cinismo” y la utilización de la mentira abiertamente para tratar de buscar condenas a Cuba.
Como se recuerda recientemente se trató de desestabilizar la Revolución cubana desde las redes sociales utilizadas al mejor estilo de las famosas “revoluciones de colores” promovidas por Estados Unidos en otras regiones del orbe.
Consideró que Estados Unidos no tiene fuerza moral alguna para lograr sus propósitos contra Cuba en la arena internacional, precisó el entrevistado al abordar el tema de búsquedas de condena a su país en organismos como la desprestigiada OEA. “La verdad se abre paso y la política agresiva de Estados Unidos queda al descubierto”, puntualizó.
¿Qué pronostico diplomático hace usted respecto al anuncio de la administración Biden de llevar el tema de los detenidos por actos violentos en Cuba a las Naciones Unidas y la OEA?
R/ El Gobierno de los Estados Unidos actúa con total desfachatez, cinismo y utilizando la mentira abiertamente. Está urgido de una condena a Cuba para justificar su bloqueo genocida y las nuevas medidas y sanciones contra nuestro país. Sin embargo, solo ha podido reunir a un minúsculo grupo de países ejerciendo groseras presiones y chantajes, lo cual considero un soberano ridículo. Ni en la OEA, organización que tradicionalmente le ha servido de pantalla para encubrir sus fechorías, ha podido lograrlo. Hubo una rebelión de la mayoría de los países miembros de esa desprestigiada organización. Más bien ha logrado un efecto contrario y reavivado con fuerza la idea sobre la necesidad de nuestra región de contar con un organismo genuinamente latinoamericano y caribeño que no se someta al vasallaje, ni sirva de instrumento a la política de Estados Unidos. Considero que Estados Unidos no tiene fuerza moral alguna para lograr sus propósitos contra Cuba en la arena internacional. La verdad se abre paso y la política agresiva de Estados Unidos queda al descubierto.
Dentro de la llamada ley global Magnitsky, el “establishment” norteamericano, acaba de imponer sanciones al jefe del Ministerio de las Fuerzas Armada Revolucionarias de Cuba, Álvaro López Miera, entre otros, ¿qué nuevas medidas cabrían sí se ha experimentado con el embargo de las formas más inhumanas?
Los pueblos dicen no al bloqueo (Foto Google Imágenes).
R/ Estados Unidos lo ha ensayado todo desde hace más de 60 años, desde el sabotaje; la invasión mercenaria; la guerra sucia a través de bandas armadas financiadas y organizadas por la Agencia Central de Inteligencia; la guerra bacteriológica; el terrorismo con su secuela de 3478 muertos y 2099 incapacitados; el bloqueo económico, comercial y financiero más integral y prolongado en la historia de la humanidad y la industria del embuste, la mentira, las tergiversaciones y redes (anti)sociales. Las nuevas sanciones son una réplica de las que ha usado contra otras naciones y no le han funcionado. Tampoco tendrán efecto práctico alguno en nuestro país. Desde el 1ero. de enero de 1959, Estados Unidos dejó de gobernar en Cuba. Esas sanciones contra funcionarios cubanos solo tienen un efecto propagandístico para complacer a los sectores más reaccionarios de la mafia de origen cubano radicada en ese país.
Esta ley global Magnitsky tiene carácter global para los estadounidenses; ¿por qué cree usted no se pueda aplicar a Estados Unidos por la violación de los derechos humanos de sus minorías y el asesinato con dolo a representantes de descendencia afrocaribeña?
Tiene Usted toda razón. Los primeros en aplicársela deberían ser ellos mismos que son los verdaderos violadores flagrantes y sistemáticos de los Derechos Humanos. Sólo en este año han muerto más de mil personas a manos de la policía en ese país. Ahí están los ejemplos de George Floyd y otros afronorteamericanos asesinados por la policía. Hay también miles de menores de edad condenados a cadenas perpetuas e incluso a la pena de muerte. Cómo le expresé, Estados Unidos carece de autoridad moral alguna para juzgar y sancionar a ningún país.
¿Considera usted que los cambios políticos en América Latina y el Caribe a favor de la independencia y la no injerencia en los asuntos internos de los Estados arreciará en la región la diplomacia del “garrote” y la “zanahoria”?
R/ Los cambios que están ocurriendo en nuestra región van en la dirección contraria a lo que persigue Estados Unidos. El modelo neoliberal ha fracasado rotundamente y los intentos de revivirlo también. Hoy las naciones de Nuestra América son más libres, lo demostró la rebelión que hubo en la OEA recientemente cuando una mayoría de países se negaron a participar de una reunión del Consejo Permanente convocada para condenar a Cuba, que no pertenece a esa desprestigiada organización. El Presidente del Consejo se vio obligado a posponer la reunión y hasta ahora no ha logrado contar con el quórum necesario para convocarla nuevamente. Es difícil que lo logre. No estamos en los tiempos de la Reunión de Consulta de San José en 1960 ni en la de Punta del Este de 1962 cuando se expulsó a Cuba de la Organización. Los mecanismos ad hoc impuestos por Estados Unidos al margen de la OEA, también han sido un rotundo fracaso. Ya ve lo que ocurre con el llamado Grupo de Lima. Estados Unidos está cada vez más aislado en su política agresiva contra Cuba y contra los gobiernos progresistas en nuestra región. Los pueblos de Nuestra América dijeron basta y han echado a andar.
Cuba inmuniza a su población, pese a bloqueo norteamericano. (Foto AFP en BBC News).
¿Cómo han recibido los países de la CELAC la vacuna Soberana 2?
R/ La mayoría de los miembros de la CELAC ven con muy buenas perspectivas que uno de ellos, este caso Cuba, haya logrado desarrollas cinco candidatos vacunales, uno de ellos, Abdala, que ya es vacuna y Soberana 02 que está en la fase final del registro, certificación y autorización para su uso de emergencia. Nuestra región conoce de la vocación solidaria de nuestro país. Conocen perfectamente que nuestra desarrollo y resultados científicos, siempre estarán a disposición de nuestros pueblos hermanos. Ya hay colaboración con algunos de ellos y seguramente será mayor tan pronto podamos alcanzar los máximos niveles de inmunidad en nuestro país. En eso estamos trabajando con la mayor celeridad posible. El objetivo principal de nuestra producción de vacunas, es el de salvar vidas, no es comercial. El adversario lo conoce y por eso también ha obstaculizado la adquisición de reactivos e insumos para la producción. Una vez más no podrán lograr su objetivo.
En vista que esta dosis vacunal tiene permiso para ser administrada en la presente pandemia, ¿cuáles son las condiciones de Cuba para colaborar con Costa Rica en este campo?
R/ Cuba no pone condición alguna para la adquisición de sus vacunas. Todos los países que las necesiten y deseen adquirirlas, podrán hacerlo.
¿Cómo valora Cuba la ayuda internacional proveniente ordenada por el presidente de México, Andrés Manuel López Obrador, y Vladimir Putin, de la Federación Rusa?
R/ Hemos estado recibiendo la ayuda solidaria no solo de México y Rusia. También han llegado de Bolivia, Jamaica, Nicaragua, la República Popular China, Vietnam y de otros países. Los cubanos residentes en el exterior y el movimiento de solidaridad con Cuba han estado jugando un papel importante también en reunir la contribución solidaria de los amigos de Cuba que también quieren hacer su aporte. Aquí en Costa Rica también hay cubanos y costarricenses que están enfrascados en reunir ciertos artículos, insumos y medicamentos para nuestros hospitales. Nuestro país que siempre ha ofrecido su solidaridad, hoy la recibe. Eso también demuestra el aislamiento de Estados Unidos.
¿En qué rubros podría contribuir el pueblo costarricense con el cubano y cómo se canalizaría?
R/ En el acto de solidaridad que tuvo lugar el pasado 19 de julio, las organizaciones de solidaridad con Cuba lanzaron la idea de reunir un grupo de artículos y medicamentos necesarios para enviar a nuestro país. Se acordó que la Asociación Cultural de Cubanos Residentes en Costa Rica “Antonio Maceo”, funja como coordinara de ese esfuerzo. En este momento lo que más urge es un grupo de medicamentos tales como antibióticos, analgésicos, anticoagulantes. De igual forma son necesarias jeringas, mascarillas, caretas, guantes de látex y artículos de higiene y limpieza.
El deporte cubano se baña en oro en Japón. La pandemia interrumpió los lazos de amistad entre ticos y caribeños, dice embajador. (Foto tomada de BBC News).
¿Cuáles son los avances de los vínculos con los costarricenses que ha imprimido como embajador en campos específicos como el científico, tecnológico y cultural?
R/ Lamentablemente la pandemia ha dificultado el relacionamiento y los intercambios en esas esferas. Nuestro trabajo también se ha visto seriamente limitado pues no todo puede hacerse vía virtual y como se conoce se ha privilegiado el teletrabajo. Nosotros mismos tenemos instrucciones precisas al respecto para evitar el contagio entre nuestros funcionarios. Esperemos que cuando se logre el control de la pandemia, se puedan reanudar los intercambios.
*Periodista, abogado y notario por la Universidad de Costa Rica
Por Memo Acuña (Sociólogo y escritor costarricense)
Las imágenes se repiten una y otra vez. En el mundo de la espectacularidad y el testimonio inmediato es prioritario primero atestiguar y luego alzar la voz para denunciar. Al menos así hemos sido programados. En el caso de George Floyd, su asesinato a manos del ex agente de policía de Minneapolis, Derek Chauvin fue viralizado y visto por millones de personas en el planeta a través de las redes sociales. La voz quebrada de Floyd implorando su falta de aire, en una paradoja moderna al encontrarnos en medio de una crisis sanitaria global que ataca las vías respiratorias, no deja de simbolizar los millones de personas en todo el planeta oprimidas por un sistema económico y político avasallante e inhumano. El fallecimiento de Floyd levantó movimientos de protesta que alcanzaron connotaciones globales internacionales. Bajo el lema “Las vidas de las personas negras importan” millones de personas mostraron su indignación y el enojo alcanzó otras esferas más allá de las civiles. Las industrias culturales del deporte y del entretenimiento del norte global, por ejemplo, amplificaron las manifestaciones que en todo Estados Unidos ocurrieron, sin importar el llamado a quedarse en casa en medio de la pandemia que aún no acaba. Todavía hoy, ligas de fútbol importantes como la inglesa reproducen el acto simbólico de arrodillarse antes de los juegos, como símbolo para recordar que la violencia racial permanece como lastre colonial en todo el planeta. Resulta comprensible esa no escucha del llamado al cuido en la salud, cuando el racismo como sistema ha quebrado las bases de la convivencia social en prácticamente todos los países del mundo. Su desarrollo es consustancial al sistema capitalista y de dominación imperante y cuando estalla la ira, asume formas masivas como las que vimos durante los movimientos de protesta el año anterior. Chauvin ha sido declarado culpable de tres cargos: asesinato en segundo grado (la pena consiste en hasta 40 años de cárcel; asesinato en tercer grado (cuya condena máxima es de 25 años) y homicidio en segundo grado (hasta 10 años de privación de libertad) (BBC News). Un juez determinará pronto el alcance de su condena. Sin embargo, esta acción penal no restituirá la vida de Floyd ni acabará con el sistema racista alrededor del mundo. Hace unas cuantas semanas, en una acción de fuerza y brutalidad policial también atestiguada por el ojo de un teléfono celular, Victoria Salazar, migrante salvadoreña con visa humanitaria, fue asesinada por cuatro agentes de la ciudad de Tulum (Quintana Roo), en México. Pese a que la acción desencadenó una ola de protestas en aquel país, El Salvador y otras ciudades y que fue comparada con la muerte de George Floyd, la amplificación de esta tragedia no ha tenido el mismo efecto ni comunicacional ni simbólico. Las explicaciones pueden ser muchas. Pero quizá la que pareciera tener mayor peso es la que considera que los migrantes no le importan al sistema global y en consecuencia las industrias que administran las migraciones desechan a partir de un aparataje securitario de exterminio, esas otras corporalidades. Así como el racismo se adhiere en la piel, el odio contra las personas migrantes percute las acciones de administración migratoria, las percepciones sociales y su rechazo. Hemos dicho en otras reflexiones que la pandemia activó los miedos contra esas corporalidades extranjeras como la de Victoria y por eso el ensañamiento físico y simbólico. Esperemos que la acción de la justicia que ya tuvo su respuesta para los familiares de George Floyd, lo haga también en el caso de la mujer salvadoreña cruelmente asesinada. También es permitido tener este tipo de esperanzas.
Racismo en Estados Unidos: llamado conjunto de varios mecanismos de derechos humanos de Naciones Unidas
Ante las diversas protestas desatadas en Estados Unidos desde la muerte en manos de policías blancos del ciudadano norteamericano George Floyd en la ciudad de Minneapolis, varios mecanismos de derechos humanos de Naciones Unidas unieron sus voces este 5 de junio.
El contenido de ambos documentos en breve
En un primer texto colectivo, titulado «Statement on the Protests against Systemic Racism in the United States«, repudian el discurso de odio y de incitación a la violencia por parte de la máxima autoridad en Estados Unidos, recordándole las obligaciones internacionales en materia de derechos humanos suscritas por Estados Unidos. En este comunicado conjunto, firmado por 44 mecanismos no convencionales de Naciones Unidas (véase texto completo), se puede leer que:
«The response of the President of the United States to the protests at different junctures has included threating more state violence using language directly associated with racial segregationists from the nation’s past, who worked hard to deny black people fundamental human rights. We are deeply concerned that the nation is on the brink of a militarized response that reenacts the injustices that have driven people to the streets to protest«.
En la parte final de su texto, los diversos mecanismos de Naciones Unidas en materia de derechos humanos recuerdan también la obligación para los Estados de remediar mediante medidas de reparación actos como el perpetrado contra la vida de George Floyd, a la vez que exigen a líderes internacionales que se hayan expresado sobre este asesinato atacar las raíces estructurales de racismo y de la discriminación racial, al indicar que:
«Reparative intervention for historical and contemporary racial injustice is urgent, and required by international human rights law. This is a time for action and not just talk, especially from those who need not fear for their lives or their livelihoods because of their race or ethnicity. Globally, people of African descent and others have had to live the truths of systemic racism, and the associated pain, often without meaningful recourse as they navigate their daily lives. International leaders that have spoken out in solidarity with protestors, and with black people in the United States should also take this opportunity to address structural forms of racial and ethnic injustice in their own nations, and within the international system itself«.
En otro comunicado conjunto, también con fecha del 5 de junio, titulado «UN experts condemn modern-day racial terror lynchings in US and call for systemic reform and justice» (véase texto completo) varios expertos en derechos humanos de Naciones Unidas estiman que:
«We strongly condemn the killings of Ahmaud Arbery, Breonna Taylor and George Floyd, and call for systemic reform and justice. The latest videos to surface showing white men chase, corner, and execute a young man who was out jogging, or showing an officer kneeling with his weight on a man’s neck for eight minutes shock the conscience and evoke the very terror that the lynching regime in the United States was intended to inspire,” the experts said. “Given the track record of impunity for racial violence of this nature in the United States, Black people have good reason to fear for their lives«.
Se lee también en la parte final de este comunicado la preocupación generada por mecanismos internos policiales en Estados Unidos que favorecen la militarización de los integrantes de las fuerzas policiales; así como por el hecho que la presión que significa la pandemia del COVID-19 es mucho mayor para la población afrodescendiente en Estados Unidos, al aumentar significativamente el riesgo de verse afectada:
» The experts also recommended that the government of the United States revisit and cease policies facilitating qualified immunity, provision of military equipment to, and military-type training of police, no-knock warrants and use of non-uniformed police in citizen interactions. Finally, civilian oversight boards, mandated body worn camera use, de-escalation training, and independent review of all extrajudicial police killings would enhance both transparency and accountability.
The recent incidents are set in the context of COVID-19, which has heavily and disproportionately impacted people of African descent who faced greater risk and lesser ability to quarantine. These risks, the experts said, have been exacerbated by increased abuse of police authority, over-policing, and excessive force in the enforcement of physical distancing restrictions«.
Estos dos comunicados se dan a conocer en plena progresión de la pandemia del COVID-19 en Estados Unidos y una semana después de haberse oficialmente retirado Estados Unidos de la Organización Mundial de la Salud (OMS): remitimos a nuestros estimables lectores a la nota que elaboramos al respecto, titulada “Estados Unidos anuncia su retiro de la Organización Mundial de la Salud (OMS)” (disponible en este enlace). Como es sabido, Estados Unidos superó la dramática cifra de 100.000 muertes causadas por el COVID-19 el pasado 28 de mayo. Según los registros de la Universidad John Hopkins (véase enlace oficial a mapa del mundo), de las más de 6,9 millones de personas contaminadas a nivel global al 7/06/2020, Estados Unidos concentra en su territorio más de 1.931.000, seguido luego por Brasil con más de 672.000 personas afectadas.
Un llamado de atención a Estados Unidos raramente escuchado que reitera recomendaciones urgentes hechas… en el 2014
Los señalamientos y las recomendaciones que plantearon este 5 de junio los expertos de Naciones Unidas y los mecanismos no convencionales de derechos humanos en los dos precitados comunicados constituyen, sin lugar a duda, un verdadero desafío para las actuales autoridades norteamericanas.
Al respecto, merece mención recordar la letra del artículo 2 de la Convención Internacional para la Eliminación del Racismo y de todas las Formas de Discriminación, adoptada el 21 de diciembre de 1965 (véase texto completo), de la que Estados Unidos es parte desde 1994 (véase estado oficial de firmas y ratificaciones), y que se lee como sigue:
«Artículo 2
1. Los Estados partes condenan la discriminación racial y se comprometen a seguir, por todos los medios apropiados y sin dilaciones, una política encaminada a eliminar la discriminación racial en todas sus formas y a promover el entendimiento entre todas las razas, y con tal objeto:
a) Cada Estado parte se compromete a no incurrir en ningún acto o práctica de discriminación racial contra personas, grupos de personas o instituciones y a velar por que todas las autoridades públicas e instituciones públicas, nacionales y locales, actúen en conformidad con esta obligación;
b) Cada Estado parte se compromete a no fomentar, defender o apoyar la discriminación racial practicada por cualesquiera personas u organizaciones;
c) Cada Estado parte tomará medidas efectivas para revisar las políticas gubernamentales nacionales y locales, y para enmendar, derogar o anular las leyes y las disposiciones reglamentarias que tengan como consecuencia crear la discriminación racial o perpetuarla donde ya exista;
d) Cada Estado parte prohibirá y hará cesar por todos los medios apropiados, incluso, si lo exigieran las circunstancias, medidas legislativas, la discriminación racial practicada por personas, grupos u organizaciones;
e) Cada Estado parte se compromete a estimular, cuando fuere el caso, organizaciones y movimientos multirraciales integracionistas y otros medios encaminados a eliminar las barreras entre las razas, y a desalentar todo lo que tienda a fortalecer la división racial.
2. Los Estados partes tomarán, cuando las circunstancias lo aconsejen, medidas especiales y concretas, en las esferas social, económica, cultural y en otras esferas, para asegurar el adecuado desenvolvimiento y protección de ciertos grupos raciales o de personas pertenecientes a estos grupos, con el fin de garantizar en condiciones de igualdad el pleno disfrute por dichas personas de los derechos humanos y de las libertades fundamentales. Esas medidas en ningún caso podrán tener como consecuencia el mantenimiento de derechos desiguales o separados para los diversos grupos raciales después de alcanzados los objetivos para los cuales se tomaron«.
También merecen ser recordadas las últimas observaciones del órgano encargado de verificar el cumplimiento de las disposiciones contenidas en esta convención (el Comité para la Eliminación del Racismo y de otras Formas de Discriminación o CERD) con relación al informe oficial remitido por Estados Unidos, hechas en el 2014 (cuyo texto completo está disponible en este enlace). En ellas, se podrá leer que dos aspectos específicos relacionados a prácticas policiales en Estados Unidos dieron lugar a recomendaciones de carácter urgente por parte de los integrantes del CERD:
«8./…/Recordando su recomendación general Nº 31 (2001) sobre la prevención de la discriminación racial en la administración y el funcionamiento de la justicia penal, el Comité insta al Estado parte a que intensifique los esfuerzos por combatir eficazmente y eliminar la práctica de la caracterización racial por parte de los agentes del orden en los niveles federal, estatal y local, entre otros medios:
a) Adoptando y aplicando leyes que prohíban específicamente a los agentes del orden la elaboración de caracterizaciones raciales, como la Ley destinada a poner fin a la caracterización racial;
b) Revisando urgentemente las políticas que permiten la caracterización racial y las prácticas ilegales de vigilancia, supervisión y reunión de datos, incluidas las Directrices sobre la Utilización de Criterios Basados en la Raza por los Órganos de Policía Federales de 2003;
c) Poniendo fin a los programas y políticas coercitivos de inmigración que promueven indirectamente la caracterización racial, como la iniciativa Comunidades Vigiladas y el programa previsto en el artículo 287 g) de la Ley de Inmigración y Naturalización;
d) Llevando a cabo investigaciones prontas, exhaustivas e imparciales de todas las denuncias de caracterización racial, vigilancia, seguimiento y recopilación ilegal de información de inteligencia; obligando a los responsables a rendir cuentas; y proporcionando recursos efectivos, incluidas garantías de no repetición«.
/
«8. /…/Recalling its general recommendation No. 31 (2001) on the prevention of racial discrimination in the administration and functioning of the criminal justice system, the Committee urges the State party to intensify efforts to effectively combat and end the practice of racial profiling by federal, state and local law enforcement officials, including by:
(a) Adopting and implementing legislation which specifically prohibits law enforcement officials from engaging in racial profiling, such as the End Racial Profiling Act;
(b) Swiftly revising policies insofar as they permit racial profiling, illegal surveillance, monitoring and intelligence gathering, including the 2003 Guidance Regarding the Use of Race by Federal Law Enforcement Agencies;
(c) Ending immigration enforcement programmes and policies, which indirectly promote racial profiling, such as the Secure Communities programme and the 287(g) programme; and
(d) Undertaking prompt, thorough and impartial investigations into all allegations of racial profiling, surveillance, monitoring and illegal intelligencegathering; holding those responsible accountable; and providing effective remedies, including guarantees of non-repetition«.
En otras de sus observaciones, los miembros del CERD urgían a Estados Unidos en los siguentes términos:
«17./…/El Comité insta al Estado parte a que:
a) Vele por que todas las denuncias de uso excesivo de la fuerza por los agentes del orden sean investigadas de manera pronta y eficaz; por que los presuntos autores sean enjuiciados y, en caso de que sean declarados culpables, se les impongan penas adecuadas; por que se reabran las investigaciones cuando se disponga de nuevas pruebas; y por que las víctimas y sus familias obtengan una indemnización adecuada;
b) Intensifique sus esfuerzos para prevenir el uso excesivo de la fuerza por los agentes del orden velando por el cumplimiento de los Principios Básicos sobre el Empleo de la Fuerza y de Armas de Fuego por los Funcionarios Encargados de Hacer Cumplir la Ley, de 1990, y se asegure de que la nueva directiva sobre el uso de la fuerza del Servicio de Aduanas y Protección de Fronteras se aplique y se haga cumplir en la práctica;
c) Mejore los informes sobre los casos relacionados con el uso excesivo de la fuerza y refuerce la supervisión del uso inapropiado de la fuerza y de la rendición de cuentas por esta práctica;
d) Proporcione, en su próximo informe periódico, información detallada sobre las investigaciones emprendidas en relación con las denuncias de uso excesivo de la fuerza por los agentes del orden, incluidos los miembros del Servicio de Aduanas y Protección de Fronteras, así como sobre sus resultados, incluyendo las medidas disciplinarias o las actuaciones judiciales contra los autores y los recursos puestos a disposición de las víctimas o sus familias«.
/
«17. /…/ The Committee urges the State party to:
(a) Ensure that each allegation of excessive use of force by law enforcement officials is promptly and effectively investigated; that the alleged perpetrators are prosecuted and, if convicted, punished with appropriate sanctions; that investigations are re-opened when new evidence becomes available; and that victims or their families are provided with adequate compensation;
(b) Intensify its efforts to prevent the excessive use of force by law enforcement officials by ensuring compliance with the 1990 Basic Principles on the Use of Force and Firearms by Law Enforcement Officials, and ensure that the new CBP directive on the use of force is applied and enforced in practice;
(c) Improve the reporting of cases involving the excessive use of force, and strengthen oversight of and accountability for inappropriate use of force; and
(d) Provide, in its next periodic report, detailed information concerning investigations undertaken into allegations of excessive use of force by law enforcement officials, including the CBP, as well as their outcomes, including disciplinary or prosecutorial action taken against the perpetrator and remedies provided to victims or their families«.
Cabe destacar la incuestionable pertinencia de estas recomendaciones hechas a Estados Unidos en el 2014 para prevenir en el futuro el racismo estructural y la discriminación racial que se evidencian en el actuar cotidiano de varias de sus fuerzas policiales.
A modo de conclusión
No cabe duda que la extrema precisión de estas observaciones de carácter urgente dadas a conocer por el CERD en el 2014, al parecer no atendidas debidamente por la administración norteamericana, haga que revistan una actualidad particular en esta primera semana del mes de junio del 2020.
Una ocasión propicia para reafirmar nuevamente cuán necesario es que sean implementadas las observaciones que emanen de los órganos de tratados de derechos humanos; y cuán imperioso resulta que sean ámpliamente divulgadas y analizadas en el seno de las sociedades, en Estados Unidos como en muchos otros Estados.
Pamela Cunningham-Chacón habló con SURCOS acerca del racismo en Costa Rica y en “todo el mundo” a propósito del asesinato de George Floyd en Estados Unidos de América.
Esta fundadora de la Colectiva Costa Rica Afro y quien es especialista en Recursos Humanos, tiene un activismo afro-feminista y en derechos humanos.
Para combatir el racismo en Costa Rica específicamente, Pamela cree que “hay que hacer un análisis de las políticas públicas en educación, infraestructura, acceso a la salud, acceso al agua, acceso a la tierra”.
Puede conocer el enfoque de Pamela Cunningham-Chacón en el siguiente video de tres minutos, asimismo la convocatoria a la marcha virtual de este martes 2 de junio (detalles en el afiche).
Una ola de protestas se está extendiendo por diferentes ciudades de los Estados Unidos de América como reacción inicial al asesinato de George Floyd a manos de un policía en Minneapolis; diversos analistas las describen como las más grandes desde finales de los años 60.
Para un país que a lo largo de su historia ha recurrido a revueltas e invasiones fuera de sus fronteras, golpes de estado, asesinatos en masa o selectivos, y primaveras de muy diversos colores en nombre de la democracia y de sus intereses geopolíticos, este momento histórico asume una complejidad inusitada que nuevamente desborda a su clase política, a los sistemas de inteligencia, y a los think tanks que definen la política de ese país.
Como siempre, Trump ha sido no solo incapaz de entender la compleja situación por la que pasa el país, sino que lamentablemente le ha echado más fuego a la hoguera con una serie de comentarios y acciones que aumentan el odio, la polarización y la confrontación social, en un país que de buenas a primeras daba una falsa sensación de normalidad socio-política. Así las cosas, hoy nos despertamos con el fantasma del terrorismo interno, llámese protesta y movilización social, y la urgencia de censurarla y combatirla para llegar a la normalidad política.
Su hígado está puesto en las elecciones de noviembre próximo en las que aspira a reelegirse, precisamente en un contexto en que la incompetencia propia le cobra la factura por ser el país con más personas contagiadas y muertas por el coronavirus (casi 1,800,000 y 105,000 respectivamente), así como las millones de nuevas personas desempleadas, el espectro de la recesión, el ataque frontal a China para limitar sus posibilidades de expansión, o la confrontación regular con diferentes medios de prensa que le cuestionan, entre otros.
Las protestas que con justa razón condenan el asesinato de Floyd, y que derivaron en saqueos, también condenan la impunidad, la complicidad y la tolerancia del sistema judicial estadounidense para con esta clase de crímenes; y de paso, se constituyen en un escenario que afecta las aspiraciones de Trump para reelegirse, cosa que él no puede permitirse.
A diferencia de otras movilizaciones, las actuales denotan la sugestiva confluencia de personas de la mayor diversidad étnica, etárea, así como de movimientos sociales de muy diverso cuño; lo que permite entrever que, junto al tema de la violencia policial hacia las personas afrodescendientes, se conjugan una serie de demandas y preocupaciones en una agenda política que aún parece muy dispersa, pero que evidencia una fuerte capacidad de movilización.
La tensión societal acumulada, finalmente explotó, y le explotó a Trump en la cara sin saber que tenía una bomba en la mano; tal y como le ocurrió a Lenín Moreno y a Sebastián Piñera en Ecuador y Chile con las sendas manifestaciones sociales del año pasado. Por donde lo veamos, el modelo económico sigue haciendo aguas, la pregunta es si solo habrá salvavidas para aquella parte de la humanidad que concentra la mayor parte de la riqueza.
Una mujer joven reclama a quienes han ejercido el poder en Estados Unidos de América: “No nos hablen de saqueos, son ustedes los que han saqueado. EUA ha saqueado a los negros, EUA ha saqueado a los pueblos indígenas cuando llegaron aquí por primera vez”. Ella es Tamika Mallory, activista por los derechos civiles, el feminismo y otras luchas sociales.
En este video de la cadena FOX puede ver la contundente exposición de la joven a propósito del fuerte movimiento antirracismo y anti discriminación que se desarrolla en Estados Unidos de América en estos días, luego de que un policía con el concurso de otros asesinara a George Floyd.