Harinas, cereales, tortillas, chips de papas tostadas, magdalenas dulces, embutidos, concentrados de consumo animal y granos de maíz
Ni las poco más de 28 mil firmas recogidas a la fecha ni las promesas de campaña han logrado avances en el etiquetado de estos productos
Un artículo científico reciente publicado en la Revista Agronomía Costarricense revela la presencia de los polémicos transgénicos en una amplia gama de alimentos, sin procesar y procesados, que contienen maíz y soya. Como señala el estudio “en un mercado sin regulaciones que indiquen contenido transgénico en el etiquetado”.
El estudio analizó 36 alimentos de consumo humano y animal, con o sin ingredientes de maíz o soya aparente en su fabricación, de venta en establecimientos comerciales de las provincias de Heredia, Cartago y San José. Entre los alimentos que fueron analizados están tortillas y chips tostados de maíz, chips de papas tostadas, harinas de maíz, cereales de maíz azucarados, magdalenas dulces, embutidos, concentrados de consumo animal y granos de maíz para moler o sembrar.
Más de 85% de las muestras analizadas (31/36) contienen secuencias transgénicas. Según el estudio “Los resultados demostraron que existen alimentos y piensos derivados de cultivos Genéticamente Modificados (GM) en el mercado local y que la significancia y viabilidad del etiquetado de los productos, para proveer información a los consumidores, debería ser abordado por las autoridades competentes. Sin embargo, todavía falta realizar estudios cuantitativos en los análisis de rutina, para detectar si el límite de material GM, establecido por la regulación sobre alimentos y piensos GM de la Unión Europea, se ha extralimitado”.
Las y los investigadores pertenecen a la Universidad Nacional de Costa Rica, específicamente al Laboratorio de Análisis Genómico, la Escuela de Ciencias Agraria y el Laboratorio de Biotecnología de Plantas. También participa un investigador del Laboratorio de Trazabilidad Molecular Alimentaria de la Facultad de Ciencias de la Universidad de la República de Uruguay.
Etiquetado ¿para cuándo? En el documento de “Posición del Partido Acción Ciudadana y su candidato Luis Guillermo Solís” asegura con respecto al etiquetado que: “hay evidencias de efectos dañinos a la salud de ciertos productos transgénicos en animales de experimentación, por lo que las personas consumidoras tenemos el derecho de saber si un alimento contiene o no ingredientes genéticamente modificados por medio de una indicación clara en las etiquetas. En países como Brasil esto se aplica con mucho éxito, a pesar de ser uno de los grandes productores de cultivos transgénicos”.
Sin embargo, y faltando pocos meses para el final del mandato y sin importar las más de 28 mil firmas entregadas, el Gobierno continúa negándonos el Derecho Humano y Constitucional (art. 46) a recibir información sobre lo que comemos, incumpliendo su promesa de campaña electoral para: “elaborar y aprobar un reglamento para que se realice el etiquetado que informe en los alimentos para el consumo humano o animal si contienen ingredientes genéticamente modificados.” Este es un derecho que ya es una realidad en más de 60 países de los cinco continentes (FECON, 13-3-2017).
Invitamos a las personas interesadas en hacer efectivo este derecho a unirse a esta campaña nacional con su firma y las de sus familiares y allegados, de manera física o virtual (en: goo.gl/RJc6tv), hasta que el Presidente Solís cumpla su promesa, para hacer así una realidad en nuestro país el derecho humano a elegir de manera informada los productos con los que decidimos alimentarnos.
Quienes deseen colaborar activamente con esta campaña, pueden solicitar los formularios de recolección de firmas a: etiquetadodetransgenicos@gmail.com
Informes: Jaime García, campaña de Etiquetado de Transgénicos tel. 8723-7343. Rodolfo Umaña Castro (rodolfo.umana.castro@una.cr, tel. 2277-3790, 2277-3959), autor de este artículo.
El Programa de Naciones Unidas para el Desarrollo (PNUD) dio a conocer el pasado 21 de marzo los resultados de su medición anual en materia de Desarrollo Humano (Índice de Desarrollo Humano – IDH) para el 2016, ubicando a Costa Rica en el puesto 66 (véase, de las pocas editadas en Costa Rica, esta nota de prensa de Elpais.cr).
A nivel global, Costa Rica y Serbia comparten el puesto 66, escoltados por dos Estados isleños del Caribe: Trinidad y Tobago (en la posición 65) y Cuba (en el puesto 68). En la medición anterior correspondiente al año 2015, estos mismos cuatro Estados se situaban en el siguiente orden: Trinidad y Tobago (64), Serbia (66), Cuba (67) y Costa Rica (69).
En el 2016, el primer Estado miembro de la Unión Europea aparece en la posición 4 (Alemania), el primero del hemisferio americano es Canadá en el puesto 10, mientras que el primer Estado asiático es Japón con la posición 17. El Estado de África mejor ubicado es Mauricio (64), mientras que en la península arábica, es Catar (33).
El IDH en breve
Como bien se sabe, el IDH es un indicador desarrollado por Naciones Unidas desde varias décadas, que clasifica anualmente a los Estados con base en información proporcionada por los mismos Estados. El Informe Global 2016 sobre el IDH (véase texto completo del informe) precisa la metodología y la clasificación obtenida en el 2016. Se lee en esta nota oficial del PNUD que:
«El IDH se creó para hacer hincapié en que las personas y sus capacidades —y no el crecimiento económico por sí solo— deben ser el criterio más importante para evaluar el desarrollo de un país. El IDH índice también puede usarse para cuestionar las decisiones normativas nacionales, comparando cómo dos países con el mismo nivel de ingreso nacional bruto (INB) per cápita obtienen resultados diferentes en materia de desarrollo humano. Estos contrastes pueden impulsar el debate sobre las prioridades normativas de los gobiernos».
La casilla correspondiente al IDH de Costa Rica medido en el 2016 se puede acceder en este enlace oficial del PNUD: en ella, se desglosa el IDH con los diversos valores numéricos usados para cada una de las variables. Nótese en este desglose que el único valor que no fue asignado fue el de pobreza, con un rubro que se mantiene con la indicación «n.a /not available». Se ignora si la gran cantidad de estudios y diagnósticos sobre la pobreza realizados en Costa Rica por entidades estatales impide, por alguna razón, a los investigadores del PNUD cuantificar con algún valor numérico esta variable y se esperaría que, con ocasión de la próxima medición del IDH, sea plenamente integrada.
La evolución de Costa Rica en materia de IDH
En el 2015, Costa Rica ostentaba la posición 69 a nivel mundial, según se desprende del Informe IDH 2015 (véase texto). La desmejorada posición para el 2016 puede también ser comparada al IDH de Costa Rica en el año 2003, año en el que Costa Rica ostentaba la posición 42 a nivel mundial. Desde el año 2006, el descenso de Costa Rica ha sido significativo. En el 2011, cayó al puesto más bajo en su historia, el puesto 69, lo cual puede plantear algunas interrogantes sobre los efectos, en materia social, de la gestión de la administración del Presidente Oscar Arias Sánchez (2006-2010). Al haberse mantenido en el 2014 con un IDH en la posición 68, las interrogantes son mayores, al no haber logrado la administración de la Presidenta Laura Chinchilla (2010-2014) mejorar sustancialmente el IDH de Costa Rica: en el 2015, Costa Rica volvió a ocupar la posición 69.
ÍNDICE DE DESARROLLO HUMANO (Costa Rica)
2003———–Puesto 42 a nivel mundial
2004———– Puesto 45 a nivel mundial
2005———-47
2006———-48
2007———-48
2008———-50
2009———-54
2010———-62
2011———-69
(Fuente: Informe Estado de la Nación / PNUD. Informe EdN, XVIII (2012), p. 363. Cabe señalar que en las últimas ediciones del Estado de la Nación, por alguna razón que desconocemos, ya no se incluye en sus listas de indicadores el IDH desarrollado por el PNUD como tal).
El IDH (2016) en el resto de América Latina
En América Latina, mientras que Chile permanece con el puesto más alto (39), Haití se mantiene como el último Estado de América Latina, con el puesto 163.
De manera a comparar el puesto 66 de Costa Rica con el de algunos de los otros Estados de América Latina, el Informe Global IDH (2016) indica lo siguiente: Argentina se sitúa en el puesto 45, Bolivia en el 118, Colombia en el 95, Cuba en el puesto 68, Ecuador en la posición 89, México en la 77, Perú se ubica en la posición 87, República Dominicana en la 99, Uruguay en la 54 y Venezuela en el puesto 71. Una comparación con el Informe IDH 2015 (véase texto), el Informe IDH 2014 (véase texto) y el Informe IDH 2013 (véase texto) permite apreciar quiénes progresan y quiénes no, y quiénes se estancan.
Para el 2016, en América Central, Belize se sitúa en la posición 103, El Salvador en el puesto 117, mientras Nicaragua en el puesto 124, Guatemala en el 125 y Honduras en el 130. Panamá lidera a los Estados de Mesoamérica en el puesto 60.
El irresuelto problema de la desigualdad social
Es de notar que Costa Rica es uno de los Estados de América Latina en los que la desigualdad ha crecido en mayor proporción, así como en República Dominicana. En este estudio de la Comisión Económica para América Central (CEPAL) del 2015, se lee que: «Los cambios en los indicadores de desigualdad de la región han ocurrido de manera gradual y son apenas perceptibles en las variaciones interanuales, pero resultan evidentes al comparar períodos más largos. Durante el período 2002-2013, en 15 de los 17 países considerados se evidencian mejoras distributivas, reflejadas en la disminución del índice de Gini (véase el gráfico I.1). Las excepciones son Costa Rica y República Dominicana, cuyos índices de Gini son superiores en 2013 que en 2002» (p. 14).
Al ser considerada América Latina la región más desigual del mundo, figurar en posiciones tan destacadas debió haber interpelado a muchos sobre los correctivos a incorporar al modelo económico actualmente en voga en Costa Rica y en otros Estados de la región: no cabe duda que sin estos, se convierte en un generador de abundante riqueza, la cual tiende a concentrarse cada vez mas en menos sectores, mientras los índices de mayor pobreza aumentan.
La tendencia es confirmada en el último panorama social de América Latina publicado por una entidad como la Comisión Económica para América Latina (CEPAL) (véase estudio), en el que se analizan las medidas correctivas implementadas con algun grado de éxito por algunos Estados de América Latina.
El coeficiente Gini en Costa Rica: breves apuntes
Un indicador internacional como el coeficiente Gini que mide la desigualdad social en función del ingreso (véase sitio del PNUD con medición del coeficiente Gini al 2014) advierte que, en el caso de Costa Rica, pasó de 0,485 en el 2005 a 0,524 (2013): en este mismo 2013, un artículo de prensa publicado en Informa-tico se tituló «Costa Rica ya es modelo de desigualdad social en América Latina». En el precitado estudio de la CEPAL publicado en el 2014 (véase documento), los dos gráficos sobre índices de desigualdad (el Gini y otro denominado Theil en la página 100) evidencian lo anómalo de la situación de Costa Rica en comparación con el resto de América Latina.
En otro acápite del mismo estudio sobre el índice de bipolarización en la distribución del ingreso (índice de Wolfson) se lee que:
«En cuanto a la evolución del índice, en el gráfico II.4 se constata que la bipolarización del ingreso disminuyó en 15 de 18 países entre 2004 y 2012, mientras que aumentó solo en tres países (Costa Rica, el Paraguay y Guatemala)» (p. 105).
En este estudio del 2012 de la Fundación Konrad-Adenauer-Stiftung sobre pobreza y desigualdad en América Latina, en el capítulo sobre el caso de Costa Rica, se indica que: «Para el 2009, el coeficiente de Gini se ubica en torno a los 0.44 puntos, cuando en 1990 tomaba un valor de 0.37.5 Como el coeficiente de Gini es más sensible a los cambios en la parte media de la distribución, se puede complementar con otros indicadores de desigualdad como el índice de Theil, más sensible a la parte alta de la distribución, o la varianza del logaritmo del ingreso, más sensible a lo que sucede en la parte inferior de la distribución. Estos otros indicadores ofrecen la misma tendencia hacia el aumento en la desigualdad en las dos últimas décadas» (p.76).
En el caso de Chile, que ha logrado frenar y luego reducir sus niveles de desigualdad en materia social, se precisa en un documento de trabajo del PNUD que aún queda mucho por recorrer: «No obstante, el país está aún lejos de lograr los niveles de equidad y progreso social que presentan las naciones más desarrolladas. En efecto, la desigualdad de ingresos sigue siendo elevada, por lo que hay diferencias muy marcadas de los estándares de vida que logran distintos grupos de la población. El coeficiente de Gini debe caer aún 20 puntos adicionales, para que la desigualdad del ingreso en Chile converja al nivel promedio de la OCDE» (Véase LARRAÑAGA O., RODRIGUEZ M.E., «Desigualdad de Ingresos y Pobreza en Chile 1990 a 2013», Documento de trabajo, Dic. 2014, Santiago de Chile, PNUD, p. 37). La mención de Chile en materia de desigualdad social cobra particular relevancia al tratarse de un Estado que ha ingresado a la OCDE, aspiración que tiene Costa Rica desde el 2013.
La evolución del coeficiente Gini en Costa Rica entre 1987 y el 2012 puede ser revisada en este estudio del Informe del Estado de la Nación del 2013 (gráfico p.2). Se ha intentado obtener un gráfico reciente (al 2016) sobre la progresión del coeficiente Gini en Costa Rica con relación al resto de América Latina en los últimos 10 años, sin éxito a la fecha: al respecto, agradecemos desde ya a nuestros estimables lectores el hacernos llegar alguna publicación digital que lo contenga. Posiblemente este gráfico arroje algunos datos que puedan explicar mejor este notable declive del IDH en Costa Rica durante ese período, mientras que otros Estados progresan en materia de Desarrollo Humano.
Con relación a la pobreza en Costa Rica, en el 2014 se leyó en este artículo de La Nación, que: «La pobreza en los hogares de Costa Rica llegó al nivel más alto en cinco años al alcanzar en el 2014 un 22,4%. Esto significó un incremento de casi dos puntos porcentuales frente al 2013 según reveló, la mañana de este jueves, la Encuesta Nacional de Hogares 2014 realizada por el Instituto Nacional de Estadística y Censos (INEC)». Otro documento del Ministerio de Planificación (MIDEPLAN) del 2016 arroja cifras similares con relación a la pobreza (véase documento). Tanto MIDEPLAN como el INEC son entidades estatales, sus datos no han sido cuestionados, por lo que surge nuevamente la pregunta de saber porqué el IDH 2016 se estableció para Costa Rica sin contar con un valor numérico correspondiente a la variable de la pobreza.
El desmejoramiento de la calidad de los servicios públicos, también puede estar influyendo, entre otros factores, en esta medición en la que Costa Rica se ve superada por ocho Estados de América Latina y del Caribe con respecto al IDH en este último ejercicio correspondiente al 2016.
De otros indicadores y datos preocupantes
En una materia como la ambiental, en la que Costa Rica figura en diversos foros internacionales como un Estado a la vanguardia, un indicador desarrollado por dos universidades norteamericanas (indicador EPI) arrojó en el 2014 un vertiginoso descenso de Costa Rica, pasando del puesto 5 al puesto 54 (véase nota en este mismo sitio). Los investigadores norteamericanos consideraron oportuno elaborar una nota sobre Costa Rica a raíz de algunas declaraciones oficiales de Costa Rica cuestionando la metodología EPI (véase nota).
Posiblemente relacionado con el tipo de partículas que circulan en el aire que respiran a diario los costarricenses, en particular los habitantes de la Gran Área Metropolitana (GAM), este dato se leyó en un reciente artículo en temas de salud: «Cerca de un 12% de la población costarricense padece de asma, de acuerdo con la Iniciativa Global para el Manejo del Asma, en tanto que con un 32%, Costa Rica es el país con mayor prevalencia de asma en niños en América Latina».
En un ámbito muy distinto, este otro gráfico extraído de un informe del 2014 del Mecanismo Nacional de Prevención (MNP) de Costa Rica (órgano técnico adscrito a la Defensoría de los Habitantes) ilustra otro alarmante síntoma que debería de haber interpelado a los decisores políticos costarricenses desde hace muchos años: el aumento vertiginoso de la tasa de personas privadas de libertad por cada 100.000 habitantes en Costa Rica.
Estos datos (así como muchos otros) permiten evidenciar el notable deterioro del clima social, de la calidad de vida, de la salud, consecuencia lógica de advertencias tan sostenidas como recurrentes de los diversos instrumentos de medición en materia social en Costa Rica.
Estos datos (así como muchos otros) permiten evidenciar el notable deterioro del clima social, de la calidad de vida, de la salud, consecuencia lógica de advertencias tan sostenidas como recurrentes de los diversos instrumentos de medición en materia social en Costa Rica.
De algunas iniciativas privadas recientes
Con respecto a estos últimos, resulta oportuno indicar que desde Costa Rica, en el 2013, una alianza entre una entidad como el INCAE Business School y las universidades Oxford y de Harvard (con el generoso apoyo de la Fundación Rockefeller, la Pratham Education Foundation, y la empresa Deloitte) propuso una nueva forma de medir el desarrollo social, con la creación del Índice de Progreso Social (véase nota del INCAE). Se puede consultar la plataforma del Social Progress Index en este enlace. No se ha podido conocer cuáles son las deficiencias detectadas en el IDH que elabora el PNUD por parte del INCAE y de sus socios anglosajones para proceder a crear una nueva metodología de medición, en la que, como era previsible, Costa Rica aparece en una posición privilegiada en América Latina.
De igual forma, el reciente creado Índice de Felicidad (Happy Planet Index), otorga a Costa Rica una envidiable posición como uno de los países «más felices» del mundo.
Es de notar que estas y algunas otras iniciativas de índole privado encuentran mayor eco en los medios de prensa que la medición del IDH elaborada por el PNUD.
A modo de conclusión: la persistente pertinencia del IDH en Costa Rica
Jugar con variables, datos y metodologías para reflejar de la manera más precisa la realidad social constituye siempre un desafiante ejercicio. Con relación a la metodología utilizada para establecer el IDH, es posiblemente perfectible, y podría incluso ser mejorada en el futuro. En el 2014, el economista costarricense Pablo Sauma discutió y analizó algunos aspectos metodológicos relativos al IDH, concluyendo su artículo de opinión publicado en La Nación en los siguientes términos: «En cualquier caso, se concluye que el IDH sigue siendo un indicador importante para comprender la situación del desarrollo a nivel mundial y de Costa Rica en particular, y que con una perspectiva de mediano y largo plazo se confirma que como país hemos perdido impulso en el avance hacia el logro de mayores niveles de desarrollo, por lo que debemos realizar esfuerzos renovados en las dimensiones consideradas, especialmente en educación».
La posición 66 obtenida por Costa Rica en año 2016, precedida por la posición 69 para el 2015, confirman ambas que, además de haber perdido impulso, los esfuerzos de sus autoridades no han (aún) logrado extraer a Costa Rica de las posiciones en las que la administración (2006-2010) concluyó su ejercicio gubernamental.
(*) Nicolas Boeglin, Profesor de Derecho Internacional Público, Facultad de Derecho, Universidad de Costa Rica (UCR).
Hoy estamos de duelo. El asesinato de ayer en Liberia, ejecutado con saña en contra de tres muchachas, dos muchachos, y una tercera víctima menor de edad que lucha por su vida, nos llena del más profundo dolor.
Toda muerte, producto de la violencia, corroe la sociedad. Y más aún cuando las víctimas son jóvenes quienes, según las investigaciones preliminares, eran personas tranquilas y sin ningún tipo de antecedentes, más que sus sanas aspiraciones de convertirse en profesionales y ciudadanos de bien.
En medio de este dolor, tenemos también que recordar principios básicos del respeto humano, aplicables tanto para los profesionales en comunicación que representamos, corno para las autoridades judiciales, cuerpos de rescate y ciudadanos en general.
No debemos jamás exacerbar el sufrimiento de las familias dolientes con el manejo imprudente de la información. Es indiscutible que un crimen de esta magnitud reviste importancia noticiosa, y es deber de los medios de comunicación informar a la población.
En esa labor informativa es absolutamente innecesaria la utilización de imágenes que irrespeten la imagen de las personas difuntas.
Así lo hemos expresado en otras ocasiones, y seguiremos insistiendo en esto hasta lograr crear conciencia para hacer caer en desuso esta práctica.
Nuestra posición siempre ha sido clara: el respeto al momento último de la muerte está por encima de cualquier otra consideración; aunque para algunos este punto sea debatible.
Respetamos la libertad de los medios de decidir qué publican y cómo lo publican, pero somos claros de que esta violación a un derecho humano, no la vamos a compartir.
Hacemos también un llamado a los ciudadanos para que se abstengan de formar parte de cadenas utilizadas para compartir imágenes por medio de teléfonos celulares y redes sociales.
Preguntémonos cómo nos sentiríamos si en una situación similar fueran las fotos de seres queridos las que circularan por todo el país para satisfacer el morbo de la gente.
Cómo llegan tan rápido fotografías y videos, que en principio solo deberían estar en custodio de las autoridades encargadas de atender estos crímenes, a manos de la prensa y ciudadanía, es una pregunta que deberían hacerse los responsables de proteger estas imágenes, para salvaguardar los derechos de las víctimas.
Para terminar, y no menos importante, hay que recordar, una vez más, que nos corresponde a todos, y en especial a los profesionales en comunicación, proteger los derechos de imagen, honor y privacidad de las personas menores de edad, establecidos en el Código de Niñez y Adolescencia.
Tal y como señala el artículo 27 sobre derecho a la imagen, y en relación con este caso específico, es prohibido publicar, reproducir, exponer, vender o utilizar, en cualquier forma, imágenes o fotografías de personas menores de edad que hayan sido víctimas o testigos de un crimen.
No querernos cerrar este comunicado sin antes expresar nuestras más sinceras condolencias a los familiares de las víctimas de este repudiable crimen.
Nos unimos en oración para que reciban la fortaleza divina que les ayude a sobrellevar el duelo que hoy enluta a una nación.
Información generada desde el Colegio de Periodistas de Costa Rica.
Carreras vendrán a llenar necesidades profesionales de la zona y el país
Grettel Rojas Vásquez,
Periodista Sede de Occidente
Con el objetivo de diversificar la oferta académica que ofrece la Sede de Occidente actualmente se está trabajando en ocho nuevas carreras para responder a algunas necesidades detectadas en la región.
Según el Lic. Carlos Ulate Ramírez, coordinador de Docencia, tres de estas ocho nuevas carreras están muy adelantadas y se pretenden abrir en el 2017. Se trata del Bachillerato y Maestría en Modelación Matemática, Bachillerato en Gestión Integral del Recurso Hídrico y Bachillerato en la Educación del Movimiento Humano para la salud y calidad de vida y Licenciatura con énfasis en adulto mayor.
Además, se está trabajando en la Maestría en Informática Empresarial proceso que está muy avanzado, pero según lo indica Ulate es más distante ya que es una opción que se maneja en conjunto entre todas las Sedes Regionales.
Ramírez añadió que hay dos opciones que están iniciando el proceso, una es la Licenciatura de Gestión de los Recursos Naturales, carrera que se ofrece en la Sede a nivel de bachillerato y el Bachillerato en Informática Bilingüe.
También señaló que hay dos propuestas más las cuales apenas están dando los primeros pasos, se trata del Bachillerato en Artes del movimiento dancístico contemporáneo, urbano, emergente y promoción cultural y el Bachillerato en Dirección Editorial.
El coordinador de docencia se manifestó satisfecho con estas iniciativas, ya que las carreras propias de las sedes son ventajosas. Destacó que “si el ejercicio es consciente, estas carreras atienden las necesidades de la región y permiten hacer cambios sobre la marcha que respondan a las necesidades y a la evolución natural que pueda tener una comunidad y las diferentes necesidades que aparezcan en una región”.
Bachillerato y Maestría en Modelación Matemática
Según el M.Sc. Jesús Rodríguez Rodríguez, profesor de Matemática de la Sede de Occidente, esta carrera viene a aportar profesionales que no existen en el país, pero que sus conocimientos son requeridos y contratados fuera de las fronteras.
Destacó que por medio de la docencia han identificado un deterioro en los conocimientos matemáticos con que llegan los jóvenes de secundaria, lo que afecta su rendimiento en carreras como ingenierías u otras que requieren de esta área.
Rodríguez aseguró que por medio del plan de estudios propuesto para esta carrera se pretende formar profesionales capaces de aportar a equipos de trabajos en la interpretación matemática y en la computación científica, ya sea en el uso de software matemático, así como en trabajos de procesamiento de cálculos numéricos finos y en la creación de modelos para mejorar la producción, modelos físicos para mejorar la manufactura, entre otros.
La carrera incluye tres ejes principales: matemática, informática y estadística, además contempla algunos cursos necesarios de física.
Movimiento humano con especialización en personas adultas mayores
Esta carrera nace gracias a la experiencia que la Sede ha acumulado en el trabajo con personas adultas mayores. La propuesta permite a las nuevas generaciones especializarse en movimiento humano y calidad de vida y enfocarse a una población creciente a nivel nacional.
Según el profesor Tyrone Loría, de la sección de Educación Física, la iniciativa surge con el fin de proporcionar a las personas interesadas “una carrera orientada hacia la concientización de la salud, la investigación y el movimiento humano; así como la apertura del campo laboral que permita a los futuros profesionales realizarse en los diferentes sectores de actividad física, ejercicio y salud en el ámbito nacional”.
Loría afirmó que el énfasis en persona adulta mayor que se abrirá a nivel de Licenciatura pretende dar respuesta a las demandas de una población creciente, ya que según datos del Estado de la Nación para los años del 2025 al 2050 habrá más personas mayores de 65 años que jóvenes.
Destacó que esta nueva carrera pretende preparar profesionales especializados que aporten en este nuevo escenario poblacional y que el impacto del cambio que se avecina sea positivo en la sociedad costarricense.
Gestión integral del recurso hídrico
Esta opción académica se está trabajando en el Recinto de Grecia, la idea según del M.Sc. John Diego Bolaños, coordinador de la comisión que desarrolla la propuesta, es terminar con toda la tramitología en el 2016 y lograr abrir la primera promoción en el 2017.
Según Bolaños, el entorno actual en relación con el recurso hídrico fue el que impulsó a la institución a presentar en la Sede de Occidente, una carrera en esta materia específica.
Con esta nueva opción se pretende formar “gestores con un manejo integral de cuencas, que velen por un monitoreo de la calidad y el abastecimiento de agua, aseguren el uso eficiente del recurso hídrico y propicien una valoración social, económica y ambiental del recurso, con miras a la solución de conflictos entre recurso y usuarios, incrementando la participación social en la toma de decisiones y realizando una administración adecuada de sus funciones profesionales”.
Señaló que está opción académica integrará dos áreas importantes: las Ciencias Naturales y las Ciencias Sociales, esto con el fin de que “los abordajes de la temática hídrica sean integradores, conciliados y sustentables”.
De esta forma, según Bolaños Costa Rica sería un país pionero en Centroamérica ya que con esta carrera se estará ofreciendo el insumo profesional capaz de aplicar los principios de gestión integral, que considera la ley de recurso hídrico aprobada en primer debate en marzo de 2014.
Más de mil personas entre estudiantes, decanos, directores de unidades académicas, centros de investigación y otras instancias universitarias, docentes y funcionarios administrativos respaldaron con su firma la iniciativa de la Universidad de Costa Rica (UCR) para construir los nuevos edificios del Centro de Investigación en Ciencias del Movimiento Humano (CIMOHU), en Finca 3 y de la Facultad de Odontología, en Finca 4.
Dos documentos fueron suscritos respectivamente por la Asociación de Estudiantes de Educación Física y por el Consejo de Estudiantes de Educación (CEED), los cuales respaldan las gestiones que realiza la Institución ante la Municipalidad de Montes de Oca con el fin de conseguir el derecho de uso de suelo para la edificación de la nueva sede de la Facultad de Odontología. Además en éstos desmienten supuestos daños a la naturaleza que según algunos vecinos ocasionarían las obras para construir el CIMOHU.
“Lamentablemente por desconocimiento y prejuicios, algunos vecinos se han confundido y se han organizado para oponerse al proyecto con una serie de argumentos científicos cuestionables, como la riqueza natural de Finca 4 (…) esto sin siquiera dialogar con nosotros los estudiantes, lo cual está frenando el proyecto que es tan importante para la comunidad universitaria. Incluso se está a un paso de retroceder totalmente en el proceso, ya que si no se inician los trabajos de construcción en Finca 4, el terreno se perdería”, expresa el comunicado del CEED.
De igual manera reaccionaron más de 130 autoridades universitarias, quienes en un pronunciamiento común apoyaron a la UCR para ejercer su derecho de construir estos edificios en sus terrenos.
“Nosotros los miembros del Consejo de Rectoría Ampliado de la Universidad de Costa Rica les solicitamos una resolución favorable para que nuestra institución haga un uso sostenible y en armonía con el ambiente del terreno de Finca 4, permitiéndole a su vez el desarrollo de sus servicios de docencia, investigación y acción social”, expresa la carta dirigida a los regidores municipales.
Además, este viernes 13 de marzo la Comisión Especial Estratégica Territorial de la Municipalidad de Montes de Oca recibió otro documento similar firmado por 935 docentes y funcionarios de la universidad, haciendo hincapié en las necesidades de crecimiento de la UCR en respeto con el ambiente y acompañado de políticas de preservación de las áreas verdes y la reforestación de esos espacios.