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Etiqueta: plantaciones bananeras

Nueva matanza de peces en Batán de Limón

Comunicado de Bloque Verde

Ayer se registró un nuevo incidente de envenenamiento en la Laguna Santa Marta y la Laguna Madre de Dios, en el río Pacuare, en Batán, Limón. Este suceso ocurre apenas quince días después de la anterior muerte masiva de peces (Bloqueverde, 17-10-24).

Vecinos reportaron la muerte de cientos de peces y otras especies. Según los testimonios, las plantaciones bananeras aplicaron nematicidas durante las lluvias, ignorando el impacto que esto tiene en el ecosistema, ya que es más fácil que el veneno llegue al río cercano.

Autoridades del OIJ y del Guardacostas se presentaron para recoger la denuncia y tomar muestras de los peces muertos.

El Instituto Regional de Estudios en Sustancias Tóxicas de la Universidad Nacional (IRET-UNA) ha estado monitoreando estas contaminaciones a través desde 2003 en distintos proyectos, investigaciones e inventarios. Según estudios realizados por el IRET en los cuerpos de agua que alimentan estas lagunas, los plaguicidas aplicados en las tierras de cultivo cercanas son arrastrados por escorrentía hasta los afluentes y, eventualmente, llegan a la laguna.

Por ejemplo, en enero de 2003, murieron miles de organismos acuáticos, incluidos peces juveniles y adultos de hasta un metro de largo, como anguilas, sábalos, róbalos, guapotes, mojarras y machacas. También fallecieron crustáceos, entre ellos jaibas, camarones y cangrejos. Entre los vertebrados muertos se observaron lagartos, tortugas y aves. La causa de este desastre ambiental fue probablemente el derrame de un plaguicida de un tanque en el aeropuerto de Batán (IRET, 2004).

En ese histórico evento, se encontraron peces muertos a lo largo de 15 kilómetros. A raíz de este caso, la multinacional bananera Standard Fruit Co. llegó a una conciliación con el Tribunal Ambiental Administrativo, donde fue «absuelta» de responsabilidad a cambio de comprometerse a pagar ocho mil dólares anuales durante cinco años. Este dinero, en teoría, se destinaría a repoblar el río Pacuare (lmtonline.com,18-7-2004). Una evaluación económica del daño ambiental, preparada para el tribunal, estimó que el tiempo para recuperar el estado de conservación inicial sería de cinco años para la actividad pesquera y de cuatro años para la actividad turística. ( ver estudio).

Otro estudio reciente titulado “Especies de algas del microfitobentos en la Laguna Madre de Dios” del IRET UNA identificó una gran cantidad de plaguicidas, insecticidas y herbicidas en junio y octubre de 2016. Entre las sustancias detectadas se encuentran epoxiconazol, tiabendazol, ametrina, hexazinona, azoxistrobina, diurón, diazinón y difeconazol.

Tras un monitoreo realizado entre 2016 y 2018, los investigadores encontraron la presencia de más de 20 plaguicidas en las aguas de la laguna, que recibe afluentes de los ríos Madre de Dios, Pacuare y del canal de Batán. La contaminación de estas aguas provoca efectos negativos en el ecosistema, como eventos de mortalidad masiva de peces.

Las comunidades más cercanas a la Laguna Madre de Dios albergan alrededor de 100 familias dedicadas a la actividad turística, la pesca y la producción de coco.

Fotos y videos de Julio Knight y Evelyn Casasola (Pacuare): https://drive.google.com/drive/folders/1BbSHQg0QN10NVRDfWpHsEK5qE2-H87e4?usp=sharing

Costa Rica, ¿una Banana Republic o Patio Trasero?

Vladimir de la Cruz

A finales del siglo XIX y principios del siglo XX surgió la etapa superior del capitalismo, de esos años, llamada fase del Imperialismo. Características de aquel momento fueron el llamado desarrollo del capital financiero, cuando se fusionaron, para impulsar grandes negocios, los intereses bancarios comerciales y los industriales; cuando surgieron empresas o corporaciones como los monopolios, oligopolios, trust y carteles, cuando se dividieron y disputaron áreas geográficas de materias primas, de mano de obra barata y de mercados para la colocación de productos caros, que elaboraban con esa materia prima y esa mano de obra barata.

Al construirse el Ferrocarril al Atlántico como se le llamó en Costa Rica, entre 1869 y 1884, sus empresarios contrataron mano de obra negra cesante de las obras del Canal de Panamá que se habían paralizado. Mano de obra industrial, en sus salarios, más cara que la mano de obra agrícola de las haciendas de café y de caña de azúcar que ya estaban en producción, en el país, de allí la necesidad del ferrocarril para el comercio más rápido con Europa.

La mano de obra negra de Panamá fue sustituida, por presión de los hacendados, por mano de obra agrícola traída de Jamaica, más barata en sus salarios, base actual de la presencia afrodescendiente en el caribe limonense costarricense.

El contacto con el Caribe hizo que el empresario ferrocarrilero Minor Keith conociera de las plantaciones bananeras que se estaban desarrollando en Jamaica, dirigidas por Andrew Preston. Experimentó su cultivo en las zonas de construcción del ferrocarril con gran éxito. Al terminar la construcción mediante el Contrato Soto Keith, de 1884, se le concedieron, en gratificación extensas áreas de tierras que libremente escogió en los terrenos aledaños al ferrocarril y en los distritos de Tilarán y Abangares. En la región hacia Limón las dedicó al cultivo del banano y las de Abangares y Tilarán a la explotación minera.

El éxito de la producción bananera llevó a Keith y a Preston a fundar en marzo de 1899 la United Fruit Company, como la empresa monopólica productora de banano más importante de toda la región Caribe, proyectada desde Colombia hasta Guatemala. Para el caso costarricense, Preston controlaba la producción de Jamaica y los medios de trasporte navieros y Keith la producción de Costa Rica.

Preston tenía el control de colocación de banano en los mercados de los estados norteños de los Estados Unidos, y Keith, comercializaba el banano por New Orleans, en los Estados sureños de Estados Unidos. Así operaba este monopolio, que se fue extendiendo por todo Centroamérica.

El peso de la United Fruit Company fue tan grande en las economías centroamericanas que hizo que en el escenario político el monopolio bananero impusiera y quitara gobiernos; impusiera y quitara tiranos y dictadores; ejerciera influencia directa en los Poderes Ejecutivos, Legislativos y Judiciales de la región, y también en las fuerzas armadas, todos los países con ejércitos, algunos de ellos modernizados en la figura de las Guardias Nacionales, a partir de 1910, por iniciativa de los Estados Unidos. Alfredo González Flores se opuso a esta modernización del ejército para Costa Rica.

El contrato Soto Keith de 1884 fue de tal peso en la historia judicial, política y legislativa de Costa Rica, que todos los Contratos que se firmaron con la United Fruit Company desde 1884 hasta 1928, se consideraron adición al Contrato original, afectando por ello, y por las cláusulas establecidas, a los empresarios, productores y bananeros nacionales, como Ernesto Rohmoser, que se hizo vocero de ellos denunciando al “imperialismo” en 1901, y a Ricardo Jiménez Oreamuno, diputado entre 1906-1910, hablando del “imperialismo absorbente que nos carcome”; originando ellos las luchas antiimperialistas en el país, con papel importante de los sectores oligárquicos, afectados por esas desiguales relaciones comerciales, que culminaron, con las protestas y la renuncia del Ministro de León Cortés, Manuel Francisco Jiménez Ortiz, denunciando el Tratado o Convenio de Comercio con Estados Unidos en 1936, por las mismas razones de ser un Convenio que afectaba a los productores nacionales.

En el libro el “Imperio del Banano. Las compañías bananeras contra la soberanía de las naciones del Caribe”, de los abogados de la United Fruit Company, Charles David Kepner y Jay Henry Soothill, redactado a modo de una historia que terminó en denuncia de la empresa bananera, se afirma que, en Centroamérica, autoridades de los poderes públicos eran pagados, corruptamente, por la United Fruit Company, y que eran más baratos que lo que costaba la alimentación de cerdos en las bananeras.

En 1954 el Golpe de Estado en Guatemala, contra el Presidente Jacobo Arbenz, por la reforma agraria que acababa de aprobar, lo dirigió y apoyó la United Fruit Company, con apoyo de la Agencia Central de Inteligencia, CIA, que fue fundada el 18 de setiembre de 1947. La documentación de este Golpe se publicó en el libro “The Bitter Fruit”, o “La fruta amarga”, en 1984 escrito por Stephen Schlesinger. Esto solo para señalar el peso de este monopolio imperialista en las decisiones políticas de los países centroamericanos.

En el gobierno de Rodrigo Carazo Odio, 1978-1982, fueron expulsados dos funcionarios internacionales, del Fondo Monetario Internacional, en 1980, por haberle golpeado el escritorio al Presidente de la República, en una discusión que tenían sobre asuntos de economía interna. Carazo dijo que a un Presidente de Costa Rica ningún funcionario extranjero le golpeaba el escritorio dándole órdenes. Ocho días después para equilibrar esa expulsión también expulsó funcionarios de la Embajada Soviética acusándolos de intervenir en los movimientos huelguísticos que se estaban dando.

Hace pocos días llegó a Costa Rica la General Laura Richardson, Jefa del Comando Sur de los Estados Unidos, que traía una “invitación”, que era un llamado urgente, para el Presidente Rodrigo Chaves, para visitar la Casa Blanca a reunirse con el Presidente Biden, visita que sin demorar se hizo del pasado 28 al 30 de agosto.

Clara fue la General en sus manifestaciones, al estilo de cómo gobernaban a las Repúblicas Bananeras, y a sus Presidentes, como vasallos y súbditos, al imponerse al Presidente Chaves. El mensaje directo fue para expresar sus preocupaciones por las relaciones que Costa Rica tiene con la República Popular China, insinuando que esas relaciones tienen un “eventual uso militar”. Manifestó su preocupación por “la participación que el gigante asiático tiene en el desarrollo de infraestructura crítica, en puertos de aguas profundas, ciber tecnología, inversiones en el campo espacial y las redes 5G”.

Le dijo la Generala al Presidente que China no “invierte” sino que “extrae” inversiones, refiriéndose al flujo de recursos provenientes de China para la región. Señaló su preocupación la General porque según ella China ha desarrollado su mayor Ejército, que lo tiene en China. Se preguntó: “¿por qué China impulsa inversión en infraestructura en América, tan alejada de China?”

Cuestionó, la General, la calidad de las inversiones y de las obras de infraestructura, brincándose todos los mecanismos nacionales que tienen que ver con obras de infraestructura, de inversiones; interviniendo directamente en la toma de decisiones políticas y comerciales de Costa Rica.

Su visita remató en anunciar una “inversión” en Costa Rica de $9.8 millones de dólares en tres años, a razón de $ 3 millones y algo más por año, para que en el Ministerio de Seguridad se establezca un Centro de Operaciones de Ciberseguridad. Anunció también que el Gobierno de Estados Unidos asignará un “asesor estratégico, a tiempo completo, para el desarrollo de las políticas en estrategias nacionales de ciberseguridad, así como una donación de $25 millones de dólares para reforzar la infraestructura digital del país, recursos que estarían a cargo del Ministerio de Ciencia y Tecnología, MICIIT.

Dijo también que harían varias donaciones “para luchar contra el narcotráfico, el lavado de dinero y la trata de personas”, con apoyo “en un sistema de 6 drones no tripulados de largo alcance, tipo Puma, para operaciones antinarcóticos y de patrullaje fronterizo”; drones que han sido probados en el campo de Batalla, con capacidad para múltiples misiones y operaciones de día y de noche, en todos los entornos, y una donación de $14 millones de dólares más para “crear una red de telecomunicaciones para el Ministerio de Seguridad”. El Ministro de Seguridad dijo que los drones ya están en APM Terminals, desde febrero, y “en situaciones de frontera”.

De hecho, la presencia de la General Richardson en la Casa Presidencial fue totalmente injerencista en nuestra política exterior. Vino a definirle al Presidente Chaves cuál era su ámbito de actuación en el contexto geopolítico definido e impuesto por Estados Unidos.

El Presidente Chaves dócilmente, como buen funcionario que fue del Banco Mundial, frente a políticas que les trazan desde Washington, a ciertos funcionarios internacionales de organismos cómo ese, atendió la llamada de atención que le hiciera Richardson y el Presidente Biden, metiéndose a definir con quién podemos comerciar y a cuáles empresas extranjeras se deben bloquear, o impedir que participen en licitaciones internacionales en el país, sobre todo si son de la República Popular China.

El sometido Presidente, sin pudor alguno, no se había terminado de bajar del avión cuando anunció su decisión que empresas Chinas no podían participar en concursos nacionales, como ya se había anunciado lo de Huawei. La jalada de orejas fue contundente… apenas le dio margen de sonreírle al Presidente Biden.

Al Presidente Chaves, Biden lo considera un simple peón en su juego de ajedrez internacional, una simple marioneta al que le pueden dar órdenes y mandatos, ofreciéndole unos cuantos manís, para actuar en el campo de las relaciones internacionales de acuerdo y alineado a la política exterior de los Estados Unidos.

Al mono aunque lo vistan de Presidente, mono lo tratan. Al Presidente Chaves lo están elevando a la condición de Presidente vasallo de una Republic Banana… ¡qué tristeza para Costa Rica!

Esa fue la impresión que me causó la visita del Presidente Chaves, luego de que ha anunciado su decisión presidencial, hablada con Biden, de dejar por fuera cualquier negociación con China, que puede ser tan beneficiosa o más para Costa Rica en algunos aspectos, violando en este sentido preceptos constitucionales y legales nacionales. También ha dejado por fuera a 5 de 8 empresas que son líderes mundiales en alta tecnología, por apegarse a los intereses de las empresas de Estados Unidos, como lo marcó y trató Biden, de Presidente de su República Bananera y su patio Trasero. Funcionarios del MICIIT ya se pronunciaron en igual sentido que el Presidente, seguramente acatando sus directrices washingtonianas.

China ya ha publicado que el Huawei lo están fabricando totalmente con materiales chinos, lo que Estados Unidos no puede evitar de su producción, porque en sus materiales no participan empresas norteamericanas o que realizan negocios comerciales con Estados Unidos.

Mientras a Chaves lo sermonearon, al mismo tiempo Biden ha enviado a la República Popular China misiones muy importantes para mejorar sus relaciones comerciales, productivas y financieras.

Cuando se dio la lucha contra la ALCOA, 1969-1970, el Presidente Carazo, entonces diputado opositor a ese Contrato, decía que a los diputados a favor les habían hecho buen pago. De allí aquel cartel de los estudiantes en la calle, “¿Diputados how much!”.

Presidente, ¿hubo pago, ¿how much?, para sacar a China de toda negociación en Costa Rica?

Mensaje de Didier Leitón Valverde, secretario general de SITRAP para la población trabajadora agrícola de todo el país

Didier Leitón Valverde, secretario general de SITRAP explica la situación que padecen trabajadores de plantaciones con el irrespeto a los derechos humanos y a los derechos laborales.

Además, expone el papel que cumplen las certificadoras internacionales de esas plantaciones, que emiten sus calificaciones sin considerar la violación de derechos y las condiciones de vida no dignas para estas personas y sus familias.

Le invitamos a escuchar la breve exposición siguiendo este enlace.

Sindicatos ANEP y SITRAP denuncian violación de derechos humanos en Plantaciones Bananeras del GRUPO ACON certificadas por Rainforest Alliance

Ante el llamado de personas trabajadoras de fincas bananeras en Siquirres Limón, Freeman 01 y 02 de la empresa Limofrut S.A propiedad del denominado GRUPO ACÓN, una delegación de SITRAP y ANEP nos hicimos presentes en los baches de la finca el día miércoles 07 de junio para escuchar a las personas trabajadoras, las personas entrevistadas denuncian las graves violaciones de derechos humanos prácticamente están en estado de esclavitud como sucede en algunas plantaciones bananeras.

Según los trabajadores en estas fincas hay grandes grupos de trabajadores que laboran para esta empresa GRUPO ACON atravez de una empresa contratista denominada Company Ceskey Sociedad Anónima, el cargo de presidente de esa sociedad es ocupado por el señor Cesar Rodolfo Colman Arce.

  • Indican que hay muchas personas nicaragüenses trabajando con documentos de personas costarricenses, que la forma de obtener los documentos de los nacionales, es cuando estos llegan a buscar trabajo, les toman los datos, y para cuando llaga un compañero nicaragüense a buscar trabajo, lo contratan con los papeles del costarricense, pero el trabajador nicaragüense, ni tan siquiera conoce al costarricense del cual tiene su nombre.
  • Que el pago se lo depositan a los nicaragüenses en una cuenta de un trabajador costarricense del mismo contratista que tiene cuenta en el Banco de Costa Rica, al cual le paga una comisión para que le saque el pago del cajero del banco.
  • Que cuando una persona está enferma por un riesgo de trabajo sufrido en la finca o por alguna otra enfermedad, en mismo contratista le presta dinero, del cual le cobra una gran comisión por interés, lo peor es que también le rebaja la cuota del seguro social.
  • Que el contratista les da una tarifa de una labor, por lo que los trabajadores se esfuerzan para alcanzar un salario regular, pero cuando les pagan, les indican que la tarifa es muy inferior.
  • Que señor contratista altera los montos de los rebajos por concepto del servicio que da la fonda, o sea les hace deducciones superiores a que realmente consumen.
  • Estas personas denuncian que muchos trabajadores que han laborado por varios años, les hacen las deducciones de las cuotas obrero patronales y no las trasladan a la Caja Costarricense del Seguro Social.
  • No les pagan aguinaldo, vacaciones, no les reconocen días feriados, horas extra, cesantía etc, etc.
  • Nos informan dos de los trabajadores que denunciaron las violaciones laborales y de las acciones a todas luces ilegales, que, como represalia por la conversación con nosotros, el contrista los despidió y le ordenó al fondero o persona que le vende la comida a las personas que viven el en baches, (casas de solteros) que no les dé más servicio de la comida.
  • Es importante mencionar que este grupo empresarial GRUPO ACON cuenta con más de 33 fincas bananeras y piñeras en el Caribe, Puerto Vejo de Sarapiquí y Zona Norte, según la información que dan los trabajadores, este contratista opera en más de 10 fincas de esta empresa, y al parecer la situación es muy similar.

Por lo anterior solicitamos lo siguiente:

  • Que la empresa GRUPO ACON interceda para que no se desaloje a los trabajadores del bache, y se les mantenga el trabajo de forma directa por la finca a todos los trabajadores de este contratista.
  • Se les reconozca todos los derechos laborales de los años laborados para la empresa a través del contratista.
  • Que la empresa elimine de forma inmediata la contratación por medio de los contratistas.
  • Que el Ministerio de Trabajo inicie una inspección profunda en las fincas donde opera este contrista, además que se tenga al sindicato SITRAP y ANEP como parte en el proceso.
  • A las organizaciones nacionales e internacionales defensoras de los derechos humanos condenar estas acciones ilegales, exigir a la empresa y al gobierno resolver estas injusticias que se está cometiendo contra las personas trabajadoras en estas fincas.

Atentamente

Didier Alexander Leitón Valverde.
Secretario General SITRAP.
Correo electrónico: secretariageneral@sitrap.net
SITRAP integrante de la Central Social Juanito Mora Porras (CSJMP)
Coordinadora Latinoamericana de Sindicatos Bananeros y Agroindustriales (COLSIBA)
SIN CONVENCIÓN COLECTIVA…NO HAY DEMOCRACIA CC. M T S S SITRAP: 50 años de lucha en la defensa de los derechos de la clase trabajadora de las plantaciones agrícolas en Costa Rica.
“Los derechos se toman, no se piden; se arrancan, no se mendigan” Josep Pla.

HASTA QUE EL CUERPO AGUANTE

Por Memo Acuña (Sociólogo y escritor costarricense)

Las mesas pasan a un segundo plano mientras el centro de la pista se convierte en escenario donde los cuerpos se trenzan movidos por un ritmo acompasado a seis tiempos. Una voluntad colectiva explica el montaje: saltos, sincronías, movimiento.

Se trata de un tipo de baile traído a estas geografías en los viajes que transportistas hacían por las carreteras nacionales. Esta vez hago observación de lejos, porque lo mío, en realidad no es el movimiento ordenado y cadencioso. No nací para el baile. Pero disfruto ver cómo en un momento veinte, tal vez treinta personas, se sincronizan y parecieran “coreógrafearse” motivadas por la música que suena a altos decibeles.

Al llegar a nuestro país este ritmo, Costa Rica era una sociedad distinta. Eran los años de las bandas del swing estadounidense en las que Glen Miller “tocaba a morir”, como habrá dicho un exhultante Miguel Ríos en su icónico “Mientras el cuerpo aguante”. Ese ritmo, esos ritmos vinieron a nuestros territorios de alguna manera entre las llantas y las radios de los grandes camiones cargueros que transitaban por las carreteras costarricenses.

Y se quedaron entre los sectores populares. Y Aquí fueron “criollizados”.

Considerado por años un ritmo vulgar y arrabalero, el denominado swing criollo fue resignificado en las plantaciones bananeras, en las fábricas, bailado en salones populares de la capital, particularmente por actores de las clases excluidas y empobrecidas del país. Tal vez por eso recibía gestos de desaprobación de unas élites mojigatas y conservadoras, las mismas que hoy se ruborizan por la forma mediante la cual el arte toma el espacio público.

Durante mucho tiempo fue un baile prohibido, como tantas cosas que le son negadas a los sectores populares que terminan respondiendo y asignando nuevos significados a las prácticas y los consumos culturales. Su forma subterránea de practicarse fue moldeando la importancia social de un ritmo absolutamente indispensable en la antropología de las culturas (en plural) que se reproducen en la vida cotidiana nacional.

Johan Rugama, funcionario municipal recolector de basura, protagonizó hace unos días una de las escenas más refrescantes en tiempos de pandemia. A bordo de un camión recolector y observado de cerca por sus compañeros de trabajo, bailó swing criollo y así fue captado por alguna persona que lo grabó y que de inmediato convirtió su video en tendencia en redes sociales.

En tiempos de estrés permanente, preocupaciones económicas y de salud, una actitud así replantea la capacidad del ser humano para reír en la adversidad, dignificarse a partir de su gusto por el baile y la vida.

Declarado patrimonio cultural inmaterial costarricense hace algunos años, este baile prohibido debiera ser materia obligada en cursos sobre ciudadanía, sociología y arte nacional. Nos permitiría por ejemplo, reconocer la labor de investigación de Ligia Torijano durante más de 25 años para posicionar el alto valor social y cultural de este ritmo, ver el documental “Prohibido bailar swing” producido en 2003 por la cineasta Gabriela Hernández para conocer más de cerca a las figuras que durante muchas décadas construyeron con su dedicación a impulsar la práctica y permanencia del swing criollo ahí mismo, en los espacios donde las corporalidades toman sus verdaderos significados.

En la década de los años setenta muchos salones de baile capitalinos colocaban carteles donde se leía “se prohíbe bailar Swing”. Este lema inspiró años después el espectáculo “Del Swing prohibido al permitido”, presentado en el aristocrático Teatro Nacional en San José.

El arte y la cultura populares nunca pueden ser silenciados y así lo evidenció Johan a través de su baile y su gusto por la vida. Mientras observo un solo cuerpo colectivo moverse dando saltos sincronizados e improvisando sobre la marcha, pienso en el alto valor político de cualquier expresión artística.

Pienso en el swing criollo. Pienso que debemos seguir abonando las posibilidades para que nuestros cuerpos aguanten y la música siga sonándonos por dentro, como acto de posibilidad para la vida.

 

Imagen: UNA-Encuentro Popular de Baile.

Talamanca: denuncian fumigación aérea por daños a la salud y ecosistemas

  • Área de salud solicita ayuda a Aviación Civil

  • Estudios demuestran que mujeres embarazadas y escolares se contaminan por plaguicidas

Las personas que viven cerca de plantaciones bananeras han denunciado por décadas las fumigaciones aéreas que las comunidades viven a diario. En una reciente denuncia del área de Salud de Talamanca se solicita la colaboración de Aviación Civil para que verifique “el estado de funcionamiento, mantenimiento y operación de la aeronave agrícola”, entre otras características del avión, campo de aterrizaje y “el estado de cumplimiento de la empresa a cargo de la avioneta, relacionado con los permisos, certificados y la aplicación de manuales”.

El Área de Salud hace hincapié “en la importancia de verificar las responsabilidades del piloto relacionadas con las técnicas empleadas en la aplicación aérea de agroquímicos y la realización de vuelos rasantes, ya que son los principales aspectos que afectan a los denunciantes, así como el ruido generado por aeronave.

Según el documento firmado por la Dra. Jennifer Jones Villers del Área Rectora de Salud de Talamanca: “mediante visitas realizadas a lo largo del 2019 y 2020 se ha evidenciado una serie de irregularidades, entre ellas que el follaje de distintas plantas y arbustos de las propiedades de dos de los denunciantes, estaban llenas de partículas muy pequeñas de algún producto sintético que les fue rociado, en apariencia agroquímico”.

Según el testimonio de una de las denunciantes “el ruido que genera la avioneta fumigadora produce muchas molestias porque sobrevuela, en sus propiedades, a muy baja altura. Como prueba guarda videos donde se aprecia la aeronave haciendo vuelos sobre su casa. Una de las denunciantes presentaba afectación en su pecho, garganta y tenía mucha tos, y manifestó que además ha presentado otros síntomas en diversas ocasiones como picazón en la garganta, dolores de cabeza, tos y ganas de vomitar, entre otros”.

También se recoge la denuncia en redes sociales de una avioneta agrícola sobrevolando Playa Grande de Cahuita en “un video en el que claramente se observa una avioneta esparciendo el producto”. La plantación más cercana al sitio estaría en el poblado de Penshurt.

Según el reglamento para las actividades de la Aviación Agrícola Nº 31520-MS-MAG-MINAE-MOPT-MGPSP[i] es competencia del Consejo Técnico de Aviación Civil y de la Dirección General de Aviación Civil ejecutar, garantizar y velar por el cumplimiento de las disposiciones legales y reglamentarias que rige la materia de aviación civil y agriada relacionadas con la protección de la salud de las personas, animales y de la conservación del ambiente.

Estudios alertan contaminación por fumigaciones áreas

En 2009 el Instituto Regional en Sustancias Tóxicas de la Universidad Nacional encontró restos de Mancozep en la orina de los niños en Talamanca. El Mancozep es utilizado en las plantaciones bananeras y es catalogado como un Plaguicida Altamente Peligroso[ii] (ver más).

En un estudio publicado en 2014[iii] se encontró que las mujeres embarazadas que viven cerca de plantaciones de banano del cantón de Matina en Limón, tienen elevadas cantidades de Etilentiourea (ETU) en su orina. ETU es un derivado del plaguicida Mancozeb, el cual se aplica mediante fumigación aérea. Las regulaciones actuales para las fumigaciones áreas parecen ser insuficientes para prevenir el contacto de las mujeres con este plaguicida. El estudio mencionado corresponde a “Aplicación Aérea de Mancozeb y Concentraciones Urinarias de Etilentiourea en Mujeres Embarazadas de Costa Rica: el Estudio Infantes y Salud Ambiental (ISA)”. La investigación la realizó un grupo de especialistas del Instituto Regional en Sustancias Tóxicas de la Universidad Nacional (IRET-UNA) en colaboración con investigadores de la Universidad de Lund y el Instituto Karolinska (Suecia), de la Universidad de Quebec en Montreal (Canadá), y la Universidad de California en Berkeley (Estados Unidos).

Según los investigadores, algunas de las mujeres tenían cantidades más altas que otras porque vivían más cerca de las plantaciones bananeras, trabajaban en agricultura durante su embarazo, y/o lavaban la ropa de sus familiares, quienes principalmente trabajan en banano[iv]( ver más).

Otra investigación de la Escuela de Salud Pública de la Universidad de Costa Rica abocada a estudiar la presencia de plaguicidas en las escuelas de Matina de la provincia de Limón, encontró presentes en el aire y el polvo, restos de 18 agrovenenos rociados por las avionetas (ver más). Este estudio fue desarrollado en 12 escuelas aledañas a plantaciones de banano.

En nuestro país están autorizados hay más de 449 agrotóxicos para las fumigaciones en plantaciones mayormente de banano, arroz, caña y cítricos entre otros [v](ver más) , y a pesar de los estudios y las denuncias más bien se está tratando de flexibilizar y permitir que las avionetas rocíen plaguicidas en lugares próximos a casas, escuelas y centros de salud[vi] ( ver más).

[i]http://www.pgrweb.go.cr/scij/Busqueda/Normativa/Normas/nrm_texto_completo.aspx?param1=NRTC&nValor1=1&nValor2=52129&nValor3=70809&strTipM=TC

[ii] https://historico.semanariouniversidad.com/pais/en-talamanca-estudio-revela-presencia-de-agroqumicos-en-orina-de-nios/

[iii]http://www.isa.una.ac.cr/images/articulos/cientificos/2014_Aplicacion_aerea_de_Mancozeb_esp.pdf

[iv]http://www.campus.una.ac.cr/ediciones/2014/octubre/2014octubre_pag05.html%23:~:text=Las%20mujeres%20embarazadas%20que%20viven,se%20aplica%20mediante%20fumigaci%C3%B3n%20a%C3%A9rea.

[v]https://www.repositorio.una.ac.cr/handle/11056/13014

[vi] https://surcosdigital.com/podrian-permitir-fumigacion-cerca-de-escuelas-ebais-y-centros-de-poblacion/

Compartido con SURCOS por Fabián Pacheco

Anarquía ambiental y negocios

Limón, 2 de noviembre de 2020

Licda. Emilia Navas Aparicio
Fiscala General, Ministerio Público

Estimada señora fiscala general:

Tal y como le expusimos, la anarquía impera en los centros de rescate a nivel de la región Caribe. Igualmente, debemos de agregar que en nuestra región se han drenado miles de hectáreas de humedales de yolillo para ampliar la frontera agrícola, a vista y paciencia de un inoperante Sistema Nacional de Áreas de Conservación (SINAC-MINAE) que, únicamente reacciona a gestión de parte, olvidando aspectos básicos de planificación y gestión.

Tan grave como lo anterior, tenemos la incesante lluvia de biocidas y plaguicidas que día a día recibimos por parte de actividades agroindustriales mal reguladas por el Ministerio de Salud, que hace interpretaciones antojadizas del reglamento para las actividades de Aviación Agrícola, en detrimento de la ley y la calidad de vida de miles de sencillos pobladores, que a su vez son trabajadores de empresas bananeras, a los cuales ni siquiera se les respeta los estándares internacionales sobre retorno a las plantaciones bananeras después de la aplicación de los productos químicos, lo cual es absolutamente abusivo para ese importante sector de trabajadores, que son extranjeros en algunos casos, lo que quizás favorece la comisión de estos abusos.

Los reglamentos y leyes ambientales que conforman nuestra normativa no cuentan para dicha población, debido a una corrupta casta de inspectores del Ministerio de Salud, que privilegian los intereses de los empresarios bananeros por encima del bienestar común. Los ejemplos abundan en casi todos los cantones bananeros de nuestra región Caribe, en las cuales existen barreras arbóreas naturales que no contienen el desplazamiento de los productos químicos (la llamada deriva), como consecuencia de los fuertes vientos que imperan en nuestra zona.

En ese mismo orden, tenemos enormes diques construidos en su mayoría de manera ilegal o al amparo de decretos de emergencias ya caducos o inaplicables, por empresas bananeras en los cantones de Limón, Matina, Siquirres y Sixaola, generándose un ilegal negocio para un reducido grupo de empresas allegadas a CORBANA, a la Dirección de Obras Fluviales, la Comision Nacional de Prevención y Atencion de Emergencias (CNE) y JAPDEVA, instituciones todas que tienen por norma reconstruir diques que fueron construidos ilegalmente, librando así de toda responsabilidad a algunos conocidos empresarios de la región, que usualmente cuando se ven afectados por inundaciones generadas por las mismas obras empíricas que han edificado (muchas veces dentro de la ripa y cauces de dominio público), entonces encuentran muy pronto amparo en las instituciones supra citadas, lo cual constituye claramente un asalto «legalizado» a la hacienda pública. Los ejemplos y las pruebas abundan, a la espera de un acucioso esfuerzo de coordinación entre las fiscalías Agrario Ambiental y de Probidad.

Adicionalmente, en el cantón central de Limón, se está impulsando el precarismo y ocupación de zonas de recarga acuífera a vista y paciencia del Instituto Costarricense de Acueductos y Alcantarillados (ICAA) y del Servicio Nacional de Aguas Subterráneas (SENARA).

Estimada señora fiscala general: esta es una pequeña muestra de la anarquía y la corrupción que impera en nuestra región, que es una de las que ostenta los más bajos índices de desarrollo, lo cual ha venido sucediendo de manera ininterrumpida por décadas, todo lo cual nos impone el deber de solicitarle muy respetuosamente, se sirva interceder en favor de nuestra gente, aras de la institucionalidad y los derechos humanos ambientales de quienes no son atendidos como en derecho corresponde.

Ruego proceder de conformidad, asignando un funcionario o funcionaria que ponga un alto a los abusos antes indicados, estableciendo plazos y cronogramas de cumplimiento.

Gracias y saludos,
Marco Levy

 

Imagen ilustrativa: Fecon.