Ir al contenido principal

Etiqueta: referéndum

Referéndum e institucionalidad

Dr. Oscar Aguilar Bulgarelli

Ciertamente en los últimos días han ocurrido una serie de hechos que, casi inesperadamente, han llenado el tintero. Quisiera escribir y hablar sobre ellos de un solo tajo, pero es imposible, habrá que ir de a poco: el discurso del presidente Chaves, su afán de convocar un referéndum que completó con otro desafuero sobre una constituyente, la quiebra de las políticas sociales, la última encuesta del CIEP y por qué de ese resultado, en fin, muchos y variados temas.

Pero empecemos por uno, que puede parecer un poco abstracto para el ciudadano de a pie, como dicen, y que por el contrario lo toca y afecta todos los días y a toda hora, aunque para alguno pase inadvertido debido, aunque suene muy duro, a su ignorancia.

Ese tema es el de la institucionalidad que el presidente Rodrigo Chaves ha traído en la punta de su zapato desde la campaña política, antes del inicio de su malhadada gestión de gobierno cuando, haciendo gestos y poniendo tono de voz como “payasín” de tercera categoría, anunciaba que no iba a permitir que le impusieran limitaciones a su acción, alegando razones como los límites de la constitución, la ley y la institucionalidad.

Muchos advertimos que venía el lobo o ¨el coyote de la misma loma¨ como los llamo en mi libro pero miles de votantes, irresponsables o indiferentes, se quedaron en sus casas y no fueron a votar, y así permitieron que una minoría atraídos por la flauta demagógica y populista de un Hamelin criollo, le dieran su voto minoritario sin percatarse que tiraban el país al mar de la incertidumbre política, económica, social e institucional. Han transcurridos dos años desde que Chaves asumió el Poder Ejecutivo con su improvisado grupo de gobierno (imposible llamarlo equipo), durante los cuales con una arrogancia que raya en burda malacrianza, ha atentado y pretendido violar la Constitución y las leyes, a las cuales ha dirigido sus ataques con la mordacidad de su lenguaje y gestos histriónicos en conferencias de prensa. Agrede el ordenamiento jurídico nacional, que es el fundamento de nuestra institucionalidad, y con ello se lanza contra la división de poderes, la Contraloría General de la República, la Fiscalía, la prensa y contra todo aquel que se atreve a cuestionar su voluntad, incluyendo en su maniqueo proceder, a casi la mitad de su “grupo de gobierno”.

Todo ello y más constituye un ataque sistemático a nuestra institucionalidad, de la que se burla constantemente hasta con gestos y muecas irrespetuosas, como cuando imita lo que podrían decir personas como la Contralora General o el Presidente de la Asamblea Legislativa, al decir NO a sus deseos autoritarios o bien tratar de “cajita de leche” la sede de la Asamblea Legislativa, mientras azuzaba a un par de cientos de fanáticos troleros que lo esperaban a la salida después de su discurso del 2 de mayo en un acto ilegal, pues por más presidente de la República que sea, para organizar aquel acto en vía pública debió contar con permisos de Seguridad Pública, Salud y Municipalidad y a los tres entes los ignoró con olímpica altanería.

Por ello, me pregunto si el común de la gente, ese pueblo que diariamente debe salir a su trabajo, a estudiar, a sus empresas grandes o pequeñas, o al surco del agricultor cada día más agraviado y arruinado, sabe realmente lo que es la institucionalidad, la gravedad que encierran esos ataques desde el Poder Ejecutivo e, impensable, desde la misma Asamblea Legislativa. Pensando en eso, m permito transcribir unos párrafos del libro de Alex Solís Fallas titulado “Política del Miedo y Desencanto Ciudadano” que, en forma muy sencilla, sintetiza una explicación de lo que es la institucionalidad:

–           “La Constitución Política define y organiza a Costa Rica como un Estado Democrático y Social de Derecho. ¿Qué significa tan sonora expresión? Significa que el Estado debe consagrarse, día a día, a la tutela de las personas, de la libertad y SUS DERECHOS FUNDAMENTALES; que el Estado es hecho para el ser humano y no el ser humano para el Estado; que la CONSTITUCION ES UNA GARANTIA DE LA LIBERTAD y no un instrumento de dominación de unos pocos sobre muchos. En suma, significa que nuestro país NO SE PUEDE GOBERNAR PARA CUALQUIER FIN, NI DE CUALQUIER FORMA y que siempre se sabe, por razones de seguridad jurídica y transparencia política, QUIEN PUEDE HACER Y COMO.

–           En nuestro sistema no se ha dejado nada al azar, NI PARA SER RESUELTO LIBREMENTE DESDE EL PODER. Como sociedad hemos comprendido que en la base de todo ejercicio de poder se encuentran contenidos los gérmenes de su propia degeneración y que, como constata la historia de la humanidad, cuando el poder no está LIMITADO Y CONTROLADO, FÁCILMENTE SE PUEDE TRANSFORMAR EM UNA MAQUINA MASIVA DE DESTRUCCION…” (Las mayúsculas no son del original. Solís F. Alex. 2012. P.20)

Precisamente, la Constitución, el estado social de derecho y nuestro marco institucional en general, incomoda a las mentes autócratas porque los limita y enmarca su ambición de poder, razón por la cual a su gusto, sabor y costumbre. buscan las vías y formas que sean necesarias para saltarlas y violarlas.

Así, por ejemplo, la Ministro de Planificación Nacional Laura Fernández, se atrevió a decir que nuestras leyes eran viejas y si se quiere pasadas de moda para nuestra época, “pues tenían 60 y 70 o más años, donde -según dijo ella- la realidad nacional era otra… y el problema es el estado de derecho que obliga a las instituciones públicas a hacer lo que la ley dice” (Radio Columbia. 30 de abril 2024)

Por supuesto, así debe ser, aunque les incomode a los jerarcas con aires de todo poderosos. ¿Pero qué tan ¨viejas¨ son esas leyes que tanto les estorban?, veamos algunos ejemplos: Ley de Administración Pública (1978), Ley de la Contraloría General de la República (1994), Ley de Administración Financiera (2001) y Ley Contra la Corrupción (2004), hasta la misma Ley de Referéndum que tanto les atrae, es del año 2006, y además, han sido reformadas y actualizadas muchas veces. Por lo tanto, podemos entrar a discutir que es viejo y que es reciente en el Estado de Derecho de un país, pero cómo se puede ver, la ley más “viejita” tiene 46 años y la más reciente tan solo diez y ocho, muy lejos de los cálculos gerontológicos de una ministro, que falla en estos temas al igual que su Superior.

Otro que se mandó a decir otra de esas “corrongueras” gubernamentales contra la institucionalidad fue, coloquialmente hablando, el infumable ministro de Hacienda Nogui Acosta quien, al ser cuestionado por las rebajas al Ministerio de Educación y no presupuestar el 8 por ciento del PIB que exige la Constitución y asignar solo un 5.5, dijo que al no tener dinero la hacienda pública, lo que diga la Constitución Política “no es más que una aspiración”, con esa cabecita al frente de ese ministerio ¡ estamos jodidos!

El periodista, falto de información y agilidad mental, como casi siempre, no le cuestionó semejante y peligrosa afirmación. Bien pudo decirle que mientras no hay fondos para cumplir el mandato de la Constitución y las leyes, si lo hay para regalar 30.000 millones a cuatro empresas arroceras de financistas políticos, o no ha hecho nada para evitar la fuga de billones de colones al año por los evasores de impuestos denunciados inicialmente por el propio Rodrigo Chaves, cuando fue ministro de Hacienda y que también hoy prefiere ver para otro lado; aún más vergonzoso, se hace de la vista gorda para no tramitar la legislación necesaria qué cambie los intereses y pagos de la deuda interna, cuyos poseedores públicos y privados, se chupan la riqueza de nuestro país como si fueran sanguijuelas.

Dentro de esa maniquea forma de proceder y actuar (me resisto a utilizar la palabra pensar) ahora al presidente Chaves y algunos de los iluminados que lo rodean, se les ha ocurrido proponer la celebración de un referéndum. No tengo nada contra esa figura institucional, creada y protegida por nuestras leyes, que promueve la democracia participativa que he defendido y auspiciado toda mi vida. En lo que no estoy de acuerdo es, precisamente, en su manipulación maniquea; Chaves y sus acólitos zapoteños lo plantean como una lucha entre el poder ejecutivo y el pueblo contra la institucionalidad, arrogándose su representación indebidamente, pues el presidente no es soberano, ni tiene soberanía alguna y puede, en su arrogancia, hasta caer en el delito que señala el artículo 3 de la Constitución Política, sobre aquel que se atreve a arrogarse la soberanía que solo reside en la Nación: traición a la Patria. La posición del presidente es la típica del aspirante a autócrata, que crea odios y caos para buscar el apoyo del pueblo a través de un populismo rampante y la utilización de la posverdad…o sea la mentira disfrazada.

Prácticamente todos los temas que el presidente Chaves ha planteado hasta ahora como posible agenda de un referéndum, es para reformar leyes que faciliten la adquisición de bienes y servicios con menos controles y sin debidos procesos licitatorios, o la eliminación de órganos desconcentrados en los Ministerios de Energía, Cultura, Agricultura y el MOPT para concentrar funciones técnicas en los ministros, que son funcionarios políticos obedientes servidores del autócrata de turno.

Por lo tanto, no creo en la sinceridad del llamado chavista a un referéndum, él bien sabe que las condiciones de legalidad y tiempo se lo impiden. Pero, ahí viene la pesca de incautos; es para hacerlos creer que la institucionalidad en el pasado estuvo en manos de corruptos y culpables de todos los males, no lo dejan hacer los “cambios y tomas las rutas” que él desea. Por lo tanto, de acuerdo con su verborrea populista, polariza a los costarricenses y miente descaradamente, típica estrategia populista puesta en práctica igual por el otro Chávez y Maduro, Bolsonaro o Trump, u Ortega o Sánchez en España, para poner ejemplos de todos colores, pero todos nefastos para sus países. ¿Es eso lo que queremos?

El atentado contra nuestra institucionalidad no termina con la alocada propuesta de un referéndum sin pies ni cabeza. En una entrevista por Canal 36, el presidente Chaves se atrevió a decir que lo ideal sería convocar una Asamblea Constituyente que modernizara nuestra viejita Carta Magna y que le gustaría ser asesor de esa Asamblea; y que para ello necesita que los poderes Ejecutivo y Legislativo piensen igual, por eso en las elecciones del 2026 requiere tener mayoría en la Asamblea. ¡Apague y vámonos!, exactamente eso hicieron Chávez el Venezolano y Ortega en Nicaragua y por ese camino va su admirado amigo Bukele en El Salvador.

Vale que el artículo 196 constitucional es muy claro, la convocatoria la hace la Asamblea Legislativa por votación calificada de 38 votos y no el presidente que tampoco puede auto nombrarse asesor…ah, pero si no se despierta este pueblo, y 1de nuevo una minoría los agarra dormidos, pensando siempre solo en los balones de futbol y silicona, a esta democracia se la lleva candanga.

Tengamos cuidado, pues como bien dijo la diputada española Cayetana Álvarez,

” El populista es el “burro de Troya” de la democracia (y digo burro, porque no vamos a ennoblecerlo con lo del caballo). El burro de Troya de la democracia, que se aprovecha de la ignorancia, además, se disfraza de demócrata para reventar la democracia desde el interior. Convoca a elecciones, sí, pero hace trampas, manipula el censo y las encuestas, compra votos, una ayudita por aquí, un subsidio por allá; hace campaña a favor de sí mismo o de su marioneta, aunque la ley lo prohíba y sobre todo utiliza los recursos del estado, es decir los de todos, para sabotear a sus adversarios. El populista tolera que haya algo llamado oposición, algo llamado Congreso, algo llamado Poder Judicial, pero luego los acosa, los doblega y los anula…”

Cuidado costarricenses, que más de un burro de Troya pulula por nuestro ambiente buscando otro taxi político, para ver como acaba con nuestra democracia. Bien dice el dicho que “rebuznos de burro no llegan al cielo”, pero si seguimos creyendo que vivimos en el edén democrático y no nos avispamos, solo La Negrita podrá salvarnos… si Dios quiere.

¡Si el presidente quiere Referéndum, convoquemos el Referéndum!

Vladimir de la Cruz

Historiador

La vida democrática exige participación y compromiso ciudadano. La hay de manera directa y de forma indirecta. Directa, cuando cada ciudadano participa tomando decisiones, como sucede en los procesos electorales para elegir representantes populares. El acto de elección es una decisión que cada ciudadano hace directamente en la urna electoral, para nombrar su representante popular.

La representación política es eso, una delegación de la voluntad personal política, en un representante, que resulta de ese depósito que hacemos los ciudadanos, de nuestra voluntad política, para que nos representen en los órganos del poder político y de la dirección del Estado, ya que no todos los ciudadanos a la vez pueden, o podemos, gobernar o legislar.

En el acto electoral se manifiesta simultáneamente esa participación directa e indirecta, cuando emito el voto y en el acto que, resultado de ese sufragio se me representa.

El sufragio, como proceso, evolucionó de formas excluyentes a prácticas cada vez más participativas e inclusivas. Las más inclusivas cuando a los analfabetos, a los desposeídos de bienes de fortuna y de capital, a las mujeres y a los jóvenes, ahora a los 18 años, se les reconoció su derecho de sufragio, universalizando de esa manera el derecho a la toma de decisiones político-electorales a toda la población mayor de 18 años, la que se considera, en términos políticos, compuesta por los ciudadanos.

En el proceso de formación de las leyes, que es el acto legislativo que tiene a cargo la Asamblea Legislativa, los diputados son los que tienen esa responsabilidad de legislar, por la delegación que, de nuestra parte, los ciudadanos, les fue delegada, depositada.

En esta decisión legislativa hay una forma de legislar directamente por parte de los ciudadanos. Es cuando todos los ciudadanos, convocados expresamente para tomar una decisión legislativa, son convocados para ello, mediante la figura del referéndum legislativo, cuando en sus manos se pone uno o varios proyectos de ley para que, de manera directa, los ciudadanos se pronuncien a favor o en contra de esos proyectos.

Hay tres formas de convocar el referéndum. El primero, cuando los diputados por una mayoría calificada de 38 votos lo convocan. La segunda, cuando el presidente de la República lo convoca acompañado de 29 diputados y, la tercera, cuando los ciudadanos por sí mismos lo convocan, con el apoyo del 5% de la ciudadanía, que se expresa cuantitativamente en el 5% de los inscritos como ciudadanos en el llamado padrón electoral, que son las personas mayores de 18 años, que por ello son electores, equivalente hoy a unas 180.000 personas o ciudadanos.

En el momento actual, el presidente de la República, está disminuido parlamentariamente con una representación, del grupo de diputados del partido que lo eligió, que se identifican directamente con él, 8 de un total de 57, situación que le impide mucho impulsar proyectos de ley con posibilidad de aprobación parlamentaria, en el deseo presidencial de gobernar directamente, sin parlamento, sin controles administrativos y políticos, para impulsar lo que él considera importante para su gestión y para desarrollar la institucionalidad y organización política estatal que quisiera reformar o modificar, de conformidad a su propia visión y de los grupos, económicos, financieros, políticos e internacionales, que a él le apoyan.

Por otra parte, debido a la incapacidad del gobierno de impulsar la gestión pública del Estado y sus instituciones, y por el deseo de desarticular y desarmar el Estado Social de Derecho, que se ha logrado edificar desde 1943, el presidente amenazó, el 2 de mayo pasado, cuando se presentó ante los diputados, con convocar él de manera directa a toda la ciudadanía a un Referéndum para que le aprueben sus particulares proyectos ley.

Hasta hoy no ha dicho, por su parte, cuáles son esos proyectos de ley, que están puliendo en esta semana, para anunciarlos como parte de la recogida de firmas que se necesitan para convocar el Referéndum.

Las hojas para recoger las firmas para la convocatoria del Referéndum, tienen que ser autorizadas por el Tribunal Supremo de Elecciones, en una papelería especial que el mismo Tribunal emite, y que el mismo Tribunal autoriza los puntos donde recoger esas firmas. No se pueden recoger las firmas en papel higiénico, ni en servilletas, ni en cualquier papel u hoja suelta. Solamente son válidas las que se recojan en la papelería oficial que se emita para ello.

La cantidad de firmas que se necesita es bastante y puede complicar que, por no lograrlas, su convocatoria de Referéndum se frustre y haga de eso su leit motiv, su punto central, hacia la campaña electoral del 2026, demandando apoyo a su partido, Aquí Costa Rica Manda, que ya logró articular nuevamente con su Asamblea Nacional, recientemente realizada en el Club Unión.

En esta dirección, el presidente ha señalado, y ya se ha pronunciado, que va a solicitar públicamente el mayor apoyo posible para que este partido tenga la mayoría parlamentaria en las elecciones del 2026, para quién en el nuevo gobierno, supuestamente de un triunfo suyo, continué con sus reformas y sus proyectos legislativos. Al mismo tiempo, se ha pronunciado por la convocatoria a una Asamblea Nacional Constituyente, porque la constitución tiene que volverse a redactar. No se trata, para él, de seguir con reformas a artículos de la Constitución. Ha dicho, igualmente, que él quiere ser parte de esa Asamblea Nacional Constituyente, y quiere participar para ser electo diputado constituyente, la única forma de volver a ser candidato presidencial, en el 2030, y posiblemente de nuevo presidente de la República, desde su perspectiva.

El presidente, y su grupo de asesores y gestores, interesados en su proyecto político, a través de esta convocatoria, ya pasaron a la ofensiva política para recoger las firmas del Referéndum. Ya empezaron a poner vallas y anuncios preguntando dónde se puede firmar por el Referéndum. Ya está en campaña electoral por el Referéndum y por las elecciones del 2026.

Para el presidente la lucha por el Referéndum es la antesala de las elecciones del 2026 y el anticipo de su lucha electoral hacia esas elecciones.

Ante el impulso y la convocatoria que está haciendo el presidente, ¿qué nos queda hacer?

Los ciudadanos, los demócratas, los que creemos en el desarrollo y perfeccionamiento de la democracia nacional, los que consideramos que el Referéndum es un instrumento muy importante de participación ciudadana. Los que creemos que un Referéndum sirve para elevar la conciencia, la educación y la cultura política de los ciudadanos. Los que valoramos el Referéndum como un instrumento de poder político ciudadano, debemos apoyar la convocatoria que haga el presidente, la que pudiera hacer el presidente con apoyo de 29 diputados, o en extremo, la que la misma Asamblea Legislativa, con 38 diputados pudiera hacer.

El Referéndum, en cualquiera de las formas que se convoque, es para tomar una decisión, a favor o en contra, de los proyectos de ley que se sometan a su conocimiento. Así fue con el Referéndum del 2007, a favor o en contra del TLC con Estados Unidos, Centroamérica y República Dominicana.

En este caso, aun cuando no se conocen los proyectos de ley que el presidente convocará a referéndum, hay que prepararse para votar a favor o en contra de los proyectos, que individualmente se someterán a la consulta electoral popular. No hay que tenerle miedo a la convocatoria que haga el presidente del Referéndum.

La agenda del Referéndum puede ser la agenda política y electoral del 2026. Eso puede ser válido. Que se empiece a discutir desde ahora. Para eso hay que participar en el Referéndum. La cancha del Referéndum no es solo del presidente; es de toda la ciudadanía. Hay que tomarle la palabra. Si quiere referéndum, convoquemos el Referéndum.

Pensemos en otros temas que deben incluirse en la convocatoria del Referéndum. Se votan uno por uno. ¡Sin miedo al Referéndum!

 

Compartido con SURCOS por el autor.

El referéndum del jaguar de Zapote

Vladimir de la Cruz

Fue muy claro, en la sesión parlamentaria que recibió al inquilino de Zapote, para que rindiera cuentas como es su deber constitucional, que el jaguar de Zapote, como se presentó, no tenía idea de lo qué es convocar a un Referéndum, como consulta ciudadana, y más, como lo expresó provocativamente, como un enfrentamiento de los ciudadanos con los diputados, para lo que había que sustituir a los diputados, por los ciudadanos, tomando decisiones de aprobación o no aprobación de proyectos de ley en trámite.

La referencia que hizo fue más una amenaza que una propuesta que procurara buscar salidas legislativas a proyectos de ley que el Ejecutivo Nacional quisiera aprobar, de esa manera.

La forma directa como lo señaló fue: o aprueban mis proyectos de ley o convoco al Referéndum. Evidentemente era un ataque directo al sentido común de los diputados.

Es claro que el presidente puede decir lo que le dé la gana. Lo lamentable de sus expresiones grotescas, vulgares, siempre amenazantes e intimidantes, es que afecta la imagen de la investidura del cargo que tiene.

Lo que se asocia con él, en ese cargo, es el matón de barrio, de pueblo; el bravucón, el gritón, el malandro social, el antisocial, de malos procederes, que no teniendo argumentos ni razonamientos convincentes, ni una actitud de diálogo, acude a la fuerza verbal, a la prepotencia que siente que le da la silla presidencial, al estilo de los dictadores, tiranos, sátrapas, gobernantes autoritarios y militarotes, de la región y de Latinoamérica; al temor reverencial de su figura, lo que no debería de ser.

Ninguno de los gobernantes desde 1949 hasta el 2022, bajo el sello de la Segunda República, ha tenido un comportamiento público tan bajo, despreciable, indigno al ejercicio del cargo de presidente de la República. Su ejercicio que, en estos dos años, ha contribuido a deslustrar, marchitar, estropear, desacreditar o desprestigiar el solio presidencial.

En las encuestas no se valora esto. Es en el alma nacional, en el sentimiento democrático que se vive cuando resultado de sus actos, los valores democráticos institucionales, y el Estado de Derecho, se devalúan, se cuestionan y se trata de alterar para gobernar sin poderes públicos, por la fuerza, de manera directa.

Lejos de ser un amigo del pueblo, se presenta como el enemigo del pueblo, representado mayoritariamente a su investidura, que se manifiesta con los 57 diputados de la Asamblea Legislativa.

Igualmente, pone en evidencia su ignorancia política y constitucional, de entender que en ese acto del 1 de mayo, cuando tiene que entregar ante la Asamblea Legislativa su informe anual de labores, a modo de rendición de cuentas ante el pueblo representado por los Diputados, y del 2 de mayo, cuando en la formalidad del acto, de la entrega de esa Rendición de cuentas lo hace, a viva voz, en el recinto parlamentario, frente a toda la comunidad política nacional, representada con las autoridades de instituciones y de los poderes públicos, y también frente a la comunidad internacional con la cual tenemos relaciones diplomáticas, representadas con la presencia del cuerpo diplomático, que asisten a ese acto. Además, ante el mismo pueblo que sigue el evento por los medios electrónicos que lo transmiten al instante.

El presidente entró arrechado al recinto legislativo. Llegó furioso, retador, iracundo, sin el control mental que el acto exigía.

Aparte de su comportamiento de pachuco presidencial, demostró tener un desconocimiento constitucional asombroso en el reto principal que impuso, el de la aprobación de las leyes o la convocatoria al Referéndum.

Primero, por la forma: se le aprueban las leyes o convoca al referéndum; si los diputados no aprueban leyes, el pueblo de manera directa lo hará, fue lo que dijo.

Segundo, de la lista de posibles leyes que mencionó, para someter a Referéndum, habló de algunas que la misma Ley de Referéndum excluye de esa posibilidad de aprobación, como es el caso de las pensiones, que resultan, no del capricho ni la corrupción de quienes la reciben, sino que son resultado de los años de servicio, de los salarios que devengaron y del sistema de pensiones que las define, las regula y las otorga.

Tercero, porque desconoció, en ese momento, lo que significa convocar un Referéndum, que es un proceso relativamente complejo, que exige trámites, plazos y formalidades procesales, legales y constitucionales.

Obviamente, en la forma que lo hizo, fue una embarcada que le dieron los hacedores de su perorata parlamentaria, la oficina de información y comunicación y los asesores jurídicos de su palacio presidencial.

Anteayer empezó a tratar de enderezar los dolores del entuerto político que le produjo su mal parto de ideas, expuestas el 2 de mayo, en el quirófano parlamentario, donde no pudo parir su Referéndum.

Para ello ha convocado urgentemente un pequeño cónclave, a modo de cardenales, y una Junta de Juristas, a modo de Junta Médica, para ver como salvan esa criatura que el presidente jaguar llamó Referéndum. A propósito, los jaguares, según los estudios, en sus partos solo producen un máximo de dos crías. ¿Cómo el jaguar presidente pretende parir a la vez 14 leyes? Haciéndole un esfuercito biológico lo más de dos leyes en su parto del referéndum es a lo que debería aspirar. No se haga ilusiones de sus capacidades de padrote político vía referéndum. Las demás las puede dejar apuntadas…y tal vez, preñadas, para el parto legislativo correspondiente.

Lo que propuso el inquilino de Zapote tenía, de origen, malformaciones congénitas, que pueden hacer que su adorable propuesta, del Referéndum, no nazca correctamente, que se frustre en el parto final.

Aun cuando su criatura, en el vientre presidencial, siga incubándose, su parto necesitará ser asistido para ver si ese bebé político puede salir de la vía de la convocatoria para su segura realización.

Para ello va a necesitar fórceps médicos, no para guiar la cabeza del bebé referéndum hacia el parto, sino para guiar la cabeza del presidente, en su sesión de parto mental, para que pueda concretar al menos un proyecto de ley, de la lista que quiere someter a la decisión ciudadana.

En el parto real es la madre la que empuja al bebé hacia afuera del trayecto vaginal. En el parto mental del referéndum del presidente, pareciera que hay un grupo empujando la masa encefálica del jaguar zapoteño hacia el despeñadero, a la democracia nacional. La masa encefálica compuesta de tres cerebros, el cerebro humano, el cerebro mamífero hormonal y el cerebro instintivo, deben estar bien integrados para sus múltiples funciones, más cuando se trata de impulsar tantos referéndums, uno por cada proyecto de ley que quiere consultar.

Sus asesores de Santa Ana y de México, y financistas, según se rumora, son los interesados en crear el estado de inestabilidad política y social, que el presidente ha venido provocando con los ataques a la institucionalidad nacional, a los poderes públicos, al descrédito de los partidos políticos al que constantemente acude, tratando de crear el ambiente hacia un estado de excepción, de fuerza, que suspenda las garantías individuales, que le permita extender su gobierno; o por un gobierno de fuerza, o a la fuerza hacer las reformas jurídicas que quiere impulsar.

Esto está cada vez más claro. Esto no se puede hacer si no se cuenta, por lo menos, con el ministro de Seguridad, que es el de las arnas, y el de la posible represión, a su favor.

Espero que en el actual ministro de seguridad prevalezca su tradición histórica, política y democrática, de su vida en el país, y de su trayectoria en otros partidos políticos y gobiernos que se han caracterizado por valores democráticos. Recordemos que el presidente ha vivido 36 años fuera de Costa Rica, trabajando en países que no tienen la tradición democrática costarricense. Pero, a como el presidente cambia funcionarios de su gabinete, y de las juntas directivas institucionales, habría que preocuparse si se le ocurre cambiar al actual ministro de seguridad, como tocan tambores en seguridad, por uno más gorilesco, menos democrático, más afín a acompañarle en esa aventura de la desestabilización nacional, hacia el estado de excepción.

Por ahora, su engendro de referéndum está en sufrimiento fetal. Su parturiento progenitor se puede cansar de empujar con eficacia, para acudir al empuje violento y final del nacimiento, porque su parto puede prolongarse por los trámites legales y constitucionales que pueden hacer viable ese parto.

Los fórceps políticos que necesita el presidente pueden ocurrir también si en este proceso sufre alguna alteración en su masa cerebral, y la de sus asesores, o le surgen problemas cardiacos de funcionamiento para poder parir su referéndum.

Cuando hay un parto difícil los médicos pueden acudir a hacer un corte en la abertura vaginal y el ano, que se llama episiotomía. En esa zona del perineo legislativo no se puede hacer esa incisión. El presidente tiene que someterse a lo que está establecido para el trámite de proyectos de ley. De esto se trata… por la ley y sus trámites o por la fuerza, la salida zapoteña.

El Referéndum pone a discusión un proyecto de ley que está en trámite legislativo. El referéndum no puede poner a votación una lista de proyectos que el presidente quiere tramitar, sin presentación para el trámite legislativo, que es lo que el presidente promueve. Algunos de los acólitos, diáconos y monaguillos presidenciales, defensores a ciegas, de su referéndum promueven, como una simple lista de ideas que se deben aprobar en la consulta popular del Referéndum. Error garrafal y engaño directo a quienes les oyen, y a los fanáticos que se mueven con los tambores y rugidos de guerra del Jaguar de Zapote.

Un Referéndum legislativo se hace sobre un proyecto de ley en trámite. A votación se pone solo un proyecto de ley. Si el presidente quiere que en el referéndum se traten 14 leyes, debe entender que son 14 consultas las que deben hacerse en el referéndum. Son separadas todas ellas. Son 14 referéndums los que deben o estarían convocándose. Son 14 votaciones diferenciadas entre sí. NO se pueden votar en paquete. No es como darle palo a una piñata. Así lo entiende el presidente y sus asesores presidenciales. Pero, así no está establecido en la ley ni en la Constitución Política.

Si la junta de juristas que ha convocado el presidente es seria tiene que advertirle de este simple procedimiento, y de las posibilidades temporales que tiene para empezar a recoger las firmas, porque debe recoger 210.000 firmas para cada proyecto de ley que se quiera llevar a referéndum. Debe recoger, si quisiera ganar tiempo, por lo menos 210.000 firmas por cada proyecto que quiere someter a la consulta ciudadana. Por lo menos un 10% o un 15% de firmas de más, para asegurar el mínimo que se necesita por proyecto de ley, el 5% del padrón electoral, cerca de las 175.000 firmas, porque si no son correctas o están mal recogidas el Tribunal Supremo de Elecciones las puede anular, y aunque dé plazo breve para corregir la recogida de firmas puede no dar tiempo para hacerlo, y le puede resultar un no nato, un no nacido, un “expulsado” del claustro legislativo, el que tampoco puede salvarse por una cesárea política, una intervención quirúrgica de última hora. Por ahora la idea del referéndum del jaguar de Zapote es tan solo un concebido proyecto de Referéndum y no un nacido Referéndum.

En esta perspectiva puede quedarse como gran distractor político nacional, para ocultar la incapacidad de gobierno, y desviar la atención, de los grandes temas nacionales que urge atender con alianzas estratégicas y con acuerdos políticos, con los distintos actores de la vida nacional.

Para recoger las firmas del Referéndum no es cualquier lugar donde se recogen. Son los lugares que el Tribunal Supremo de Elecciones autorice.

Para recoger las firmas no es cualquier papel u hoja que se puede usar. Son las que autorice el Tribunal Supremo de Elecciones, que llevan su sello, y tienen el encabezado correspondiente para justificar la solicitud de firmas. En este caso, tantas hojas como proyectos de ley en posibilidad de consultarse popularmente. Si son 14 proyectos de ley, son14 hojas distintas para recoger sus respectivas firmas.

No hay que preocuparse del financiamiento del Referéndum. Ese dinero el Tribunal Supremo de Elecciones lo tiene garantizado y presupuestado anualmente.

La Asamblea Legislativa no busca ni tiene excusas para enfrentar los posibles proyectos de ley que el presidente quiera someter a referéndum. El presidente es el que tiene la bola en el área de penal. Si mete el gol, o no, es culpa de él. Dice el presidente que el zorro, él, y la gallina, la Asamblea Legislativa, no pueden negociar constructivamente. Añadió que el zorro siempre quiere comerse la gallina y toda la mesa. En este caso, es claro, que el zorro quiere comerse la gallina con todos sus huevos, los 14 o más proyectos de ley, que no ha anunciado claramente cuáles son, algunos que por ahora solo están en el imaginario político del presidente. Están en la etapa de “nasciturus”, como se dice en la jerga jurídica, “el que va a nacer”, y puede que no nazca.

Cuando el presidente valoró la posibilidad de convocar el referéndum analizó que por sí la Asamblea Legislativa no lo haría, se requeriría la convocatoria por 38 diputados, para lo cual no hay consenso. Si es por la convocatoria del presidente aliado a 29 diputados, de pronto podría el presidente no conseguir los 29 diputados que le apoyen. Por eso acudió a amenazar a la convocatoria directa por la vía de recoger las 180.000-200.000 firmas por cada consulta que quiera poner en votación popular. Es un camino muy difícil de lograr.

El escenario que sigue a la propuesta vinculada a la convocatoria que quiere hacer del Referéndum, sabiendo que tiene muy pocas posibilidades de realizarlo son las elecciones nacionales del 2026. Casi me atrevo a asegurar que el Referéndum, como se quiere convocar, no va. Es más un show político distractor del Jaguar zapoteño

Hacia allí está planteado en Referéndum. Para el Jaguar de Zapote su estrategia se define así: no me dejan gobernar, no me dejan legislar, apoyen al partido y al candidato que voy a promover, junto con mis asesores políticos y financieros, hacia las elecciones del 2026, para darle continuidad a mi gobierno. Para eso necesito que ese partido y ese candidato, que ya lo anunciaré, escogido con apoyo de Santa Ana y México, tenga mayoría parlamentaria para poder hacer todo, desde el gobierno, al estilo Bukele, que es para todos los efectos un gobierno legítimo, surgido de las urnas. Todo esto si se llega a las urnas…

El camino que también se piensa es el de la fuerza, el del estado de excepción, el de crear un nivel de ingobernabilidad y de inseguridad ciudadana que justifique su imposición. Eso es lo que hay que evitar.

Compartido con SURCOS por el autor.

De «me como la bronca» … se pasó a «yo hago la bronca»

Por Roberto Zeledón Arias

Actitud necesaria para justificarse en los pírricos resultados como gobierno. Esa actitud alimenta a un pueblo «mal educado», desgraciadamente.

Mi opinión sobre el mentado referéndum es que ellos (el jaguar y compañía) necesitan organizar un partido político y el referéndum es la excusa perfecta para organizarlo.

Recordemos que el rodriguismo ha intentado varios partidos: 1. Una secretaria (tica) de Casa Presidencial que salió huyendo de México, porque quiso ser electa en ese país en un puesto de elección con falsificación de documentos y con algo de cuestionamientos narcos. 2. Nuestro Pueblo (o algo así) de Calixto Chávez (que se distanció de Pilar) y 3. el de Choreco «Aquí Costa Rica Manda» (ninguno se pudo inscribir por distintas razones). Este último fue al que le dieron la adhesión las diputaciones de gobierno y luego Pilar se salió por la presunta participación de narcos en ese partido.

Todos estos esfuerzos han sido muy desprestigiados.

Entonces Rodrigo Chaves desesperadamente necesita un partido y creo que ese es el objetivo del mencionado referéndum.

Pero, además, no tienen candidato (a), entonces le van a meter presión a la Sala IV para que se pueda efectuar la reelección consecutiva, es decir Rodrigo Chaves presidente.

Así veo yo este asunto.

El jaguar, el animal de Zapote

Vladimir de la Cruz

Con gran entusiasmo el inquilino de Zapote, en su perorata, más de agitación politiquera y de amenaza a los diputados, pesada y sin sustento, molesto e inoportuno, para la ocasión solemne a la que asistía, por lo demás sin un buen razonamiento, tan solo tratando de agitar el ánimo de quienes le escuchaban in situ, los ministros que se levantaron a aplaudirle ciegamente faltándoles los vítores, y quienes le escuchamos y vimos a la distancia, exaltó, varias veces, la condición de que a su gobierno le habían calificado internacionalmente de JAGUAR.

Indicó que era una categoría económica de bienestar para el país, una nueva marca nacional, casi lo presentó como un proyecto de ley para declararlo símbolo nacional, por lo demás un animal considerado casi en extinción…por lo que no faltará que alguno de sus sirvientes legislativos le presente ese proyecto de ley. Para completar el dato: el jaguar (Panthera onca) es el felino más grande de Costa Rica y de América.

Por supuesto, su felicidad radicaba en que, como representante del gobierno, hacía sentir que a él era al que habían calificado con el nombre de ese animal. El Presidente Jaguar, casi igualándose al valor ancestral de nuestras culturas aborígenes mesoamericanas, especialmente de las cosmogonías aztecas, mexicas y mayas, con el jaguar, el Dios Tezcatlipoca o Tepeyóllotl, una de sus manifestaciones. La asociación a la persona le daba fuerza y valentía, capaz de enfrentar miedos y retos con determinación y coraje. En la lengua náhuatl al jaguar se le llama océlotl. En los trabajos artísticos cerámicos, de piedra y de jade de la arqueología y antropología prehispánica costarricense el jaguar está muy presente.

En esa tradición cultural religiosa, el jaguar era la representación de la noche, era el “nagual” o brujo por excelencia de los hombres más importantes, como lo eran los gobernantes o los sacerdotes, o los hechiceros, que se vinculaban a lo sobrenatural, como pareciera el mundo que vive el inquilino de Zapote.

No sé si en Monterán, antes de partir con sirenas, casi siempre a media mañana, cuando las calles están llenas, para hacerse sentir más, haciendo a un lado, con la caravana que le acompaña, a todo el mundo, en su ruta hacia Zapote, consulta a una tarotista, a un quiromante, a un brujo de los que se anuncian diariamente en los periódicos, para cargarse de energía, de luz y soberbia cuando transita a velocidades no permitidas, por las calles y sentirse ese dios precolombino, que ahora se le asocia a ese animal.

En la cultura precolombina al jaguar se le asociaba al poder, a la muerte, el cielo nocturno, el inframundo, la agricultura y la fertilidad, especialmente en ritos y prácticas chamánicas. El jaguar forma parte de los símbolos “del lado nocturno de la vida, del reino del misterio, la oscuridad y las tinieblas, es la bestia salvaje que es capaz de comer todo tipo de animales, que penetra en todos los espacios [además de] un espectacular modo de apareamiento”. También se le considera un espíritu guardián.

Se le describe como tosco, macizo, de cuerpo robusto, que puede alcanzar casi los dos metros de largo, y hasta 60 cm a la altura de la cruz, de piernas cortas y musculosas, de cabeza grande, hocico corto, amplio y chato, ojos grandes color café claro, orejas pequeñas o cortas y redondas, de pelo corto y erizado, ágil, buen nadador y escalador; cazador por naturaleza, de personalidad reservada, observador y analítico antes de tomar decisiones. Se le considera de capacidades cognitivas avanzadas. Son animales astutos. Gran depredador oportunista, mantenedor del ecosistema que vive, de mandíbula muy poderosa para la mordida, con manchas o rosetas que lo distinguen en su piel.

Su principal mordida es a la cabeza de sus víctimas, directamente a los huesos temporales del cráneo, que están entre las orejas de sus presas. Le gusta vivir en pantanos. Son carnívoros; acechan antes de atacar, preferiblemente emboscando de noche.

Hay jaguares de pelo amarillo, rojo y negro. Generalmente son solitarios, territoriales y solo se emparejan para procrear. El animal jaguar está considerado como el más grande de los felinos del continente; el tercero en el mundo después del león y el tigre. Es el segundo felino más rápido del mundo. Como animal, el tigre y el león le superan.

El jaguar ruge, como rugió el 2 de mayo. El rugido del jaguar es un “bramido explosivo y profundo, un sonido forzado a través de la boca abierta”.

No ruge como un león, cuyo rugido puede escucharse a 8 km de distancia.  Rugir es hacer ruido bien fuerte, es gruñir, es rechinar; es pedir algo a alguien, como rugió el jaguar de Zapote ante los diputados, para pedir algo como una gracia o un favor, pero amenazante e intimidantemente… me aprueban las leyes o convoco al referéndum. Aquí, los rugidos del jaguar de Zapote fueron: ¡todo sin el Estado! Como William Walker: ¡las cinco repúblicas o ninguna!

En la tradición popular, ver un jaguar se asocia a que la vida está a punto de pasar a fases difíciles, turbulentas, cambios que alteran y desestabilizan las rutinas diarias como los planes establecidos. ¿Será eso lo que nos espera como país, como sociedad?

Algunos, al jaguar le llaman el “tigre de América”, sin que al felino de Zapote se le considere pariente de los llamados “tigres asiáticos”, que también los llaman “dragones asiáticos”, que en su llamada primera generación fueron identificados como Taiwán, Corea del Sur, Singapur y Hong Kong, de los cuales, Hong Kong dejó de ser colonia inglesa para formar parte de la República Popular China. Sus rugidos dejaron de sonar como hace algunos años… En algunos casos incluyen a Indonesia, donde el ocelote de Zapote vivió buenos años, gerenciando, dirigiendo y manejando proyectos de un organismo mundial, como desea administrar y dirigir el país, sin controles institucionales.

El animal de Zapote puede sentirse halagado porque lo comparan, no con los tigres asiáticos, sino con gobernantes y políticos como Milei, Maduro, Ortega, Bukele, Trump…otros tipos de tigres o felinos y tagarotes.

Taiwán, en cualquier momento, dependiendo de la actual situación mundial y de la geopolítica regional de esa zona, puede ser integrada también a la República Popular China, que la considera su Provincia.

A estos felinos asiáticos se les llama así porque se dice que redujeron la pobreza de sus países, y se colocaron en índices internacionales, de alto desarrollo y de productividad, que los presentan como “milagros económicos”, por los procesos de industrialización lograda por los altos niveles de inversión en empresas públicas, y en focos comerciales, industriales y tecnológicos, en zonas francas, como los que se han venido impulsando en el país, especialmente desde el gobierno de José María Figueres Olsen, 1994-1998, como fue la instalación de INTEL, y las que le siguieron en ese campo, en el área de medicina e instrumental médico y de tecnologías informáticas, aparte de las inversiones en el sector inmobiliario y turístico de cinco estrellas. En Costa Rica quieren lograr eso sin empresas e instituciones públicas, vendiéndolas y privatizándolas.

El desarrollo de esos tigrillos se caracteriza por la eficiencia energética, la alianza de un capitalismo privado muy fuerte y un intervencionismo estatal, también fuerte, lo que no se quiere impulsar en Costa Rica.

Características que se les atribuye a estos países felinos, son calidades internacionales certificadas en educación, salud, ojalá de vanguardia; transparencia política, competitividad económica, corrupción prácticamente inexistente, con alta renta per cápita en términos del poder adquisitivo, alto grado de desarrollo de infraestructuras, con redes de comunicación y telecomunicación muy avanzadas, con sectores constructivos potentes, con sectores universitarios exigentes, economías de libre mercado sólidas orientadas al sector de servicios, con mercados de valores de alta capitalización reconocida internacionalmente. En algunos de estos temas Costa Rica anda y está desastrosamente.

Los tigres como animales tienen rayas en su piel. Los jaguares tienen manchas.

Las rayas de los tigres asiáticos se caracterizan por mano de obra abundante y barata, por zonas francas portuarias, libres de impuestos y aranceles con regímenes laborales especiales, como se quiere establecer aquí el régimen de las jornadas de 12 horas diarias de trabajo, con zonas francas portuarias no marinas, y atracaderos de ciertas embarcaciones, más turísticas, de recreo personales…y de droga como se vio en Limón…

Esas rayas comprenden proteccionismo industrial, presencia de grandes multinacionales, visión de largo plazo, acuerdos y pactos con el Estado, especialmente en el campo de la educación, el mercado laboral y las pensiones, impulsar mega factorías con cadenas de valor, desarrollar más patentes y exportar el conocimiento, con perjuicio de la flora y fauna, y la biodiversidad nacional, como sucedió con la MACA en Brasil.

Para crecer como “tigres” se necesita, no solo saber rugir, sino desarrollar garras, de lo contrario el animal que se entusiasma en Zapote, no pasará de ser un simple gato, sin que yo tenga nada contra los mininos a los que les he venido tomando aprecio.

Esperemos que el animal que habita en Zapote no llegue igualmente a suponerse águila sin tener una sola pluma en su pecho. No es suficiente que al gobierno le llamen jaguar. El animal de Zapote no tiene rayas, tiene manchas…

En los días de la Guerra Civil de 1948 y en los siguientes años, por dicha que pocos, algunos de los combatientes que triunfaron exhibían en sus atuendos una “pantera”, de color negro, obviamente, en un círculo de tela amarillo, con borde rojo, me parece recordar. Eran tenebrosos. Esperemos que los fanáticos del animal de Zapote no empiecen a desfilar con “jaguares” de ese tipo, como símbolos de identificación con el presidente de los jaguares, o como símbolo electoral de las próximas elecciones del 2026 de su partido político continuista que logren impulsar, al estilo de los camisas pardas y negras de la Italia fascista y la Alemania nazi. Podría ser ese su símbolo electoral ahora promocionándolo desde el gobierno.

No nos vaya a pasar, con el tigre de Zapote, el cuento del gato de Schrödinger, aquel experimento mental de la física cuántica, donde el gato encerrado en una caja, sujeto a un evento subatómico aleatorio, que puede suceder o no, del cual se desprende una partícula radioactiva, que libera un veneno, que mata al gato, que no puede salir de la caja.

En un país que no tiene planes de largo plazo, esto fácilmente puede ocurrir, salvo que el jaguar que habita Zapote quiera quedarse allí, como en una madriguera, por la fuerza institucional, o por heredar el campo o su trono, lo que puede aprovechar políticamente con la convocatoria del Referéndum con el que ha amenazado a los diputados, como actores legislativos.

A la alegría del jaguar de Zapote hay que añadirle que en México hay un jaguar del narcotráfico, un “Comandante Jaguar”, llamado José Antonio Torres Marrufo, que fue condenado a 40 años de prisión por delitos de tráfico de droga, crimen organizado, secuestro y conspiración para realizar asesinatos fuera de México. Este Jaguar empezó en el narcotráfico con el Cartel del Pacífico, luego siguió con el Cartel de Juárez, desarrollando una guerra sangrienta con el Cartel de Sinaloa…

También en el Estado de Yucatán de México, a otro dirigente de una de las organizaciones criminales, llamado David “S”, le conocen como el Jaguar, que está principalmente ligado a la red de trata de personas del Cartel de Jalisco Nueva Generación, en la región sureste de ese estado. Este “Jaguar” de Yucatán está vinculado a la desaparición de ocho jóvenes “acompañantes”, “escorts” de origen colombiano.

En el caso mexicano, también el jaguar se asocia al exterminio que hacen bandas criminales dedicadas al tráfico de especies, donde el jaguar y el yaguareté son las principales víctimas, porque sus huesos son usados en la medicina tradicional oriental, sus testículos son utilizados como afrodisiaco, y sus garras y colmillos los usan para fabricar llaveros y colgantes a modo de talismanes.

La perorata en el recinto parlamentario careció de un buen informe sobre la situación del narcotráfico en el país, que es considerado la bodega de drogas más grande de la región, y de los “problemas” que no se controlan adecuadamente para que se siga exportando droga regularmente a Europa y el Mediterráneo, como del control ineficiente de los grupos exportadores de drogas, que tienen que ver con el empaque de los container, el transporte de esos container desde que salen de sus centros  o empresas exportadoras, el control de paso por los escáneres, y por la recepción en los puertos del Caribe principalmente, junto con los distintos pasos de frontera, que no son Paso Canoas o Peñas Blancas, y de las casi 60 pistas aéreas privadas que existen en  el país.

El anuncio amenazante del referéndum fue eso. Una amenaza: me aprueban los proyectos de ley o convoco al referéndum para que los ciudadanos sustituyan a los diputados en esa decisión de aprobación de proyectos de ley.

Entendamos, elementalmente, que el referéndum que quiere hacer el Jaguar de Zapote con sus rugidos tiene por fuerza que tener, en trámite legislativo, proyectos de ley para que esos proyectos sean los que se someten al referéndum, a la consulta popular con un SI o con un NO, a favor o en contra. Cada proyecto tiene que estar debidamente elaborado y puesto en conocimiento de una comisión legislativa para su trámite. Eso tiene su tiempo de preparación y de trámite. Lleva su rato.

En la agenda enviada por el Poder Ejecutivo, para que inicien las sesiones extraordinarias, hay 32 proyectos de ley presentados para su trámite. Esperaremos a ver como se distribuyen y cuáles comisiones legislativas, los que tienen que ir a comisión, y cuáles de estos están en trámite. Y, cuáles de estos serán de sometimiento al referéndum…

La agenda y sus proyectos, el Jaguar de Zapote, la puede cambiar cuando le dé la gana. Todo eso significará atrasos de trámites legislativos.

Si la convocatoria de referéndum la trata de hacer con apoyo parlamentario, le va a costar mucho elaborar una propuesta acorde con las cinco bancadas llamadas de oposición, que no son los diputados que siguen a la diputada Cisneros y al presidente.

Si la convocatoria la va a estimular recogiendo las casi 200.000 firmas que se necesitan, en las calles, no le va a resultar tan fácil. Requiere mucha gente. No solo los rugidos que pueda hacer, porque puede tropezar con que se le impida participar directamente como le sucedió a Oscar Arias. Lo pueden dejar maullando y no rugiendo…

En el Referéndum del 2007, aprobado el mismo por iniciativa del Presidente y 29 diputados, se le impidió al presidente que actuara directamente en esa convocatoria, y en los llamados a votar, por lo que las fuerzas que estaban a favor o en contra del TLC, tuvieron que realizar, o constituir, dos Comités, uno por el NO y otro por el SI al TLC, al margen de la Casa Presidencial. Y, era solo un tema el que se ponía a discusión nacional, el TLC. Su resultado fue 51% a 49” a favor del TLC.

Si el elogiado animal de Zapote ruge con 10 o más proyectos eso va a ser un enredo para los votantes, que no tienen cultura de votar referéndums, ni tienen cultura de lectura, para entender las preguntas que se hagan, ni los contenidos que se estarán votando. El referéndum tiene que ir con preguntas claras que solo permitan poner una X en una casilla del SI o del NO. Esto no es fácil. La clave de la votación está en la formulación de la pregunta, sin rugir, con razonamientos.

El Referéndum del TLC produjo muchos debates a favor y en contra. Produjo muchas publicaciones, más de una docena de libros, folletos, hojas sueltas, mesas redondas, entrevistas… ¿Qué espera el jaguar de Zapote, que se le voten los proyectos de ley, sin debate, sin discusiones? Eso no va con la democracia directa y participativa.

Pero la clave de la amenaza presidencial del referéndum está en las próximas elecciones. Al presidente ahora realmente no le interesan los temas para su aprobación, que sabe que no se los van a aprobar. Ni le interesa mucho el referéndum, tal como lo propuso rápidamente en el Palacio del Pueblo.

Lo que le interesa es que le rechacen los proyectos del ley y la convocatoria del referéndum para, con vista a las elecciones nacionales, del 2026, llamar a votar al partido que se invente, o alquile, para esa elección, con el candidato que le escojan sus asesores y financistas, sobre todo los del grupo que se dirige desde Santa Ana, diciéndoles qué hay que votar por tal o cual candidato o candidata para poder aprobar esos proyectos de ley, que para él y los planes de sus asesores y directores, son necesarios para el país.

Su discurso se va a mantener en su ineptitud, en su incapacidad política de negociar y gobernar, echándole la culpa a los diputados, a la Corte Suprema de Justicia, a la Sala Constitucional, a la Contraloría General de la República, al Tribunal Supremo de Elecciones si le es necesario, a los partidos legislativos que no le apoyen la iniciativa de convocatoria, de que no le dejan gobernar, a los que lo critiquen y se le opongan políticamente.

Al pueblo se va a dirigir diciéndole que esas instancias no le permiten gobernar en su favor, en favor del pueblo, que por eso hay que votar a favor de lo que él propone en el referéndum; o de votar en contra de todos los partidos que no quieren que se aprueben esos supuestos proyectos de ley a favor del pueblo.

Es un golpe duro y directo a los partidos políticos, a todos; pero, especialmente a Liberación Nacional y la Unidad Social Cristiana, que pueden ver muy reducido su margen electoral en las elecciones del 2026, por situarse en el cabús del tren zapoteño.

Liberación Nacional, si asume la bandera patriótica que izó Rodrigo Arias Sánchez, en la contestación a las amenazas del presidente, al Estado de Derecho, y de oposición valiente a ciertos proyectos que quieren impulsar a referéndum puede salir airoso… si no, se hunde más electoral y parlamentariamente, con un futuro muy incierto hacia el 2026.

No es imposible que una fuerza electoral, impulsada por Zapote, en estas circunstancias pueda reelegirse, repitiendo como sucedió con los gobiernos de Acción Ciudadana, y más grave, como fue la sorpresiva derrota frente al improvisado inquilino de Zapote en el 2022.

Compartido con SURCOS por el autor.

Cardumen chavista

Freddy Pacheco León

Freddy Pacheco León

Dicen los estudios, que el culto a la personalidad es mayoritariamente practicado por los que, por las desigualdades sociales, no han tenido la oportunidad de completar la educación secundaria. Situación relevante a la hora de tomar decisiones, pues no son cualquier cosa, ya que son mayoría en Costa Rica, donde más de dos millones de personas forman ese inmenso grupo de ciudadanos. Cabe anotar que, dentro de los países del «club rico» de la OCDE, por dicha situación, nuestro país ocupa la posición 38, o sea, estamos en el vergonzoso sótano, aunque no preocupe a las desorientadas autoridades de educación.

Como van de la mano, el bajo nivel educativo y el personalismo que le encanta a tal conglomerado de compatriotas, incluyendo sus consecuencias antidemocráticas, creemos que ni a mediano plazo, se podría mejorar esa situación. Demandaría muchos años ir mejorando esa inhumana realidad, y, además, si no existe un proceso bien planificado, una ruta valorable, trazada por las autoridades educativas, para, al menos, mitigar tan grave deficiencia, el problema se mantendrá hasta quién sabe cuándo.

Asimismo, no es extraño, que, en las provincias con mayor pobreza, como son Limón y Puntarenas, el culto a la personalidad, se manifieste cual dogma religioso; como algo que no necesita de razones para expresarse. Es un hecho, que los que en general, no se esfuerzan siquiera por informarse, ni mucho menos pensar, se encuentran cómodos en ese nicho fuera de cualquier partido político o conglomerado cívico, pues les basta con «su santo», con el personaje que veneran, con quien les dice lo que quieren escuchar, por donde caminar, qué decir, aunque éste, paradójicamente, les esté engañando. En él, duele reconocerlo, depositan la frustración hija de su pobreza. Si ese ser «venerable» habla su idioma, y si además alza la voz para impactar, como actor de teatro callejero, para ellos es más grande su satisfacción, aunque, en sus familias cunda el hambre y la miseria.

El conflicto le cae muy bien al líder personalista, y, por tanto, él promueve la confrontación, entre las personas que no creen sus cuentos, y los que, aunque quizá tampoco los crean, se sienten «realizados», cómodos, cuando se les trata como obediente cardumen armónico.

En sistemas políticos democráticos, ha sucedido en otros lares, esa provocada, nefasta y amenazante confrontación, se ha logrado mitigar con el paso del tiempo, gracias a la aparición de grupos sociales, prometedores, con filosofía democrática y con dirigentes naturales, respetuosos, claros, propositivos, estudiosos, que propician que las separatistas cercas con alambre de púas, vayan cediendo ante las cercas vivas, amigables con el ambiente.

Sin embargo, la mala noticia es que, al que porta el estandarte de ese personalismo, ante quien solo falta que se arrodillen sus fieles seguidores, es consciente de que, si su misión personal no es gobernar, sino ocupar un pedestal donde le pongan flores, sus mayores esfuerzos se limitan a promover, propiciar, alimentar, la confrontación entre su cardumen, y los que, todavía se atreven a pensar y actuar, para así cumplir con comodidad con los compromisos adquiridos con los de su clase social, mientras la lucha se da por otros lados.

Así las cosas, él lo que requiere es ese “algo” que le permita volver a sus días de candidato presidencial. Algo, donde se puedan anunciar promesas que, sabe, cínicamente, jamás serán cumplidas.  Algo que, así espera, le permita a su cardumen mostrarse enardecido, ojalá violento, frente a todos los que no se alinean. Algo que, cual campaña electoral presidencial, otra vez lleve al ungido, a repartir abrazos y mandar besitos desde una playa. Y, ese algo, ustedes lo presienten amigos, se puede obtener tramitando un referéndum, para que supuestamente, un millón y medio de ciudadanos, sin conocer los proyectos de ley, pudiesen sustituir a los diputados, en su deber de legislar, en oposición al espíritu que una vez movió a los señores diputados, que una vez tomaron la feliz iniciativa y aprobaron, esa innovadora expresión de democracia popular, que, dolorosamente, quieren manchar.

Para sus intereses, al líder populista, lo que menos interesa es llegar a la votación, que decidiría sobre unos 15 proyectos. No, para él, eso es lo de menos. A él lo que realmente le interesa es la adelantada campaña electoral, que le ofrece el escenario del referéndum. Más de un año, durante el cual, se detiene el funcionamiento del poder ejecutivo, para dedicar toda la energía del Consejo de Gobierno, hacia el nuevo y exclusivo foco de atención público. Tiempo durante el cual, sin duda, lanzará acusaciones contra el Tribunal Supremo de Elecciones, la Corte Suprema de Justicia, la Asamblea Legislativa, la Contraloría General de la República, los medios de prensa, las organizaciones de trabajadores, etcétera. Él contra el mundo, es lo que veremos, según la imagen que ha venido forjando, desde hace más de dos años, y que reforzará en busca de dividendos electorales. Esa es la premisa fundamental de ese particular personalismo (muy alejado, por cierto, del personalismo acogido como filosofía, por sectores de la Democracia Cristiana internacional), y de ella no se apartará.

Como muestra ya lo escuchamos, ¡siempre desinformando!, decir que los que crearon la legislación del referéndum, no le permiten aprobar reformas parciales a la Constitución Política, si antes no le “pide permiso” a la Asamblea Legislativa. Lamento que pareciere nacer de la imposibilidad de reformar la Carta Magna, de tal manera que él pudiese optar por la reelección presidencial consecutiva. Sueño que se le desvanece, y le preocupa, pues sabe que, por su mismo personalismo, no habría candidato capaz de ser heredero de su caudal electoral, pues, fiel a su estilo, ni siquiera tiene un partido político que lo respalde y lo identifique, con equis o ye ideología.

Para finalizar, vemos que se ha publicado un reciente estudio del CIEP-UCR, que nos permite ensayar algunas conclusiones. En dicha encuesta se indica que, sobre su gestión, «Los que dicen tener poca o ninguna confianza, ahora superan el 72,6%, el porcentaje más alto desde que Chaves tomó el poder en el 2022«, leemos en el Semanario Universidad (que, por cierto, ahora más que semanario, es un muy ágil diario en su formato digital).

Pese a ese resultado, desalentador para cualquier gobernante que busque dejar un buen legado de su administración, él dice sentirse satisfecho, pues agrega, eso demuestra que está haciendo bien su trabajo (¿?).

Por otro lado, es paradójico que, ante esa estadística, los del cardumen (reforzados por miles de perfiles falsos y troles contratados) no solo reaccionan negando ciertos resultados del trabajo académico independiente, sino que, mientras dejan de lado cualquier esfuerzo de reflexión razonable, cumplen su función de cardumen. Así, instintivamente, por esa fuerza extraña que les provoca el vicio personalista que les ha contagiado, corren a culpar a los “desechables” (para Chaves), ministros y presidentes ejecutivos, por los errores frecuentes del gobierno, eximiéndolo a él, al incólume, al santo varón, al héroe, al incapaz de equivocarse, de cualquier culpa que pudiese tener.

8.5.24

La legislación del referéndum está para cumplirla, no para interpretarla

Freddy Pacheco León

Freddy Pacheco León

Como aclaramos en «El ABC ESCOLAR del referéndum«, lo señalado es un resumen de algunas de las normas vigentes, no todas. Hace dos años, como ahora, pero unido a Chaves esta vez, Otto Guevara lo intentó para comprar o alquilar Recope, y se quedó en el camino.

Lo del TLC fue diferente. Óscar Arias presentó el proyecto de convocatoria, y la Asamblea Legislativa lo aprobó, por lo que nadie tuvo que desgastarse recogiendo firmas. Pero había diálogo respetuoso con la Asamblea Legislativa. Ahora es todo lo contrario. Otto está embarcando a Chaves aún más, al meter varios proyectos de ley, que obviamente, el Departamento de Servicios Técnicos del Congreso, los tendrá que ver cada uno por separado, en un plazo de 8 días hábiles (es decir semana y media cada uno). Eso dice la ley: «El TSE remitirá el texto del proyecto normativo a la Asamblea Legislativa, a fin de que sea evaluado desde el punto de vista formal por el Departamento de Servicios Técnicos, el cual se pronunciará en un lapso de ocho días hábiles, luego de realizar las consultas obligatorias correspondientes. Si el texto contiene vicios formales, dicho Departamento los subsanará de oficio y devolverá el texto corregido al Tribunal».

O sea, si mandan 10 proyectos, se está hablando de 80 DÍAS HÁBILES. Si se deciden por cinco, pues 40 días hábiles, o sea, 2 MESES. (¿O pensará Otto, que si se envían sus 15 proyectos los abogados del Congreso tendrían que estudiarlos y dictaminarlos en una sola semana?).

Pero hay más, si un proyecto como el de reforma de la Ley de Contratación Administrativa (para contratar «a dedo» la construcción de la ciudad gobierno, por ejemplo), o la compra-venta del Banco de Costa Rica y la erosión de la Ley Orgánica del Ambiente (otros ejemplos), en los que juristas han encontrado evidentes roces con la  Constitución Política, el TSE tiene el deber, por la misma Ley del Referéndum (¡que parece no han estudiado!), de tramitar «consultas de constitucionalidad facultativas», ¡como hace igual y regularmente la Asamblea Legislativa!, ante la Sala IV, para que esta se pronuncie en UN MES…para cada proyecto.

O sea, si se tuvieran que enviar tres proyectos a consultar (solo para citar un número cualquiera), eso significa, quizá, otros tres meses de espera, pues, no podría la Sala Constitucional, emitir resoluciones a la ligera, ya que, si un proyecto de ley fuese aprobado eventualmente, y resultare inconstitucional en respuesta a una acción o varias acciones de inconstitucionalidad, el desperdicio de recursos sería muy lamentable.

¡Nótese que no se estarían “poniendo zancadillas” al proceso, sino recordando lo que dice la normativa! Y la normativa parece hacernos concluir, que sería imposible tener un referendo «multitemático» (17 proyectos… dice Otto) para antes de la campaña electoral, para presidente y diputados, que se inicia el 2 de agosto del año entrante. Y si quieren el referendo para después de las elecciones de febrero 2026, el mismo se realizaría cuando en Zapote ya no estaría Chaves, y esa por supuesto, no es la idea.

Ecuador: ¡Que «parapeto» de Consulta y Referéndum!

Mg. José A. Amesty Rivera

En Venezuela, la palabra «parapeto«, tiene varios sentidos, y sirve para ejemplarizar el tema de este artículo, puede significar: estructura, objeto o cosa inútil o mal hecha; cuando un venezolano visita una construcción o una instalación industrial y se tropieza con una máquina que nunca ha visto, por lo regular pregunta “¿y para qué sirve este parapeto?”; también puede significar trampa, engaño, invención para ocultar algún mal proceder, que puede ser hasta un robo o estafa. Montar un parapeto es crear un falso problema para rehuir una responsabilidad; y esta es la realidad y ejemplo de la Consulta y Referéndum celebrado en Ecuador.

Como generalmente sucede, las consultas nacionales son un gran engaño para que votemos «Sí» y de esta manera confirmemos al presidente que la propone. La consulta promovida a diestra y siniestra por el presidente Noboa, sigue esta misma línea llena de promesas ilusorias, señala el escritor Pedro Pierre, sacerdote diocesano francés, quien acompaña las Comunidades Eclesiales de Base (CEB) urbanas y campesinas de Ecuador, país adonde llegó en 1976.

Indicando, además, Pierre, que la consulta (si se aprueba) no hará otra cosa que no sea profundizar las situaciones catastróficas de los gobiernos de Guillermo Lasso y Lenin Moreno.

Recordemos que el pasado 21 de abril del año en curso, en Ecuador, el gobierno de Daniel Noboa, llevo a cabo lo que ellos llamaron una consulta electoral «popular» (para cambiar leyes), y un referéndum, (para enmendar la Constitución), consultando al pueblo ecuatoriano con 11 preguntas sobre diversos temas. Haciendo una especie de «ensalada«, una total manipulación, y muchas preguntas innecesarias. Agregándose, además, que algunas preguntas iban acompañadas de largos y hasta confusos anexos. *Al final de este artículo, dejaremos las preguntas, de esta imitación de Consulta y Referéndum.

En este sentido, según el escritor ecuatoriano Edgar Isch, docente de la Universidad Central del Ecuador, «Se pueden agrupar las preguntas presentadas en tres grupos: las que no se necesitaban porque hay leyes que ya cumplen lo consultado; las que podrían no consultarse porque ya hay leyes en ese sentido que se debaten en la Asamblea; y las que son de mayor importancia para cambiar la Constitución, con el fin de ampliar las ganancias empresariales y poner al país a los pies de los arbitrajes internacionales».

Se añade, además, que, en esta trampa contra el pueblo ecuatoriano, primero, no hubo debate del pueblo, no se consultó al mismo, a las bases populares, con ni siquiera la mínima difusión a nivel social, hasta el punto que un alto porcentaje de los votantes no fue preguntado; segundo, la propaganda masiva del gobierno, insistió y manipulo, al proponer una sola opción, el Sí a los votantes. En fin, fue una consulta electoral inconsulta y mañosa, así como poco útil y emponzoñada.

En definitiva, nos hacemos eco con las ideas del escritor Alberto Acosta, quien fuera el Presidente de la Asamblea Constituyente ecuatoriana (2007-2008), (no se requiere mucha inteligencia, para darse cuenta de que la consulta popular es un paso hacia la reelección del presidente Daniel Noboa en 2025, por ejemplo, en línea con una mayor militarización de la sociedad y una mayor neoliberalización de la economía. También de ser, de ser un instrumento democrático para decisiones cruciales, la consulta queda reducida a una pantomima electoral. Lo fundamental para el gobierno era ganar y arrancar con más fuerza hacia la siguiente elección. Al presidente Daniel Noboa, le interesa concentrar todo el poder posible para conseguir sus objetivos, prueba de ello fue el brutal asalto a la Embajada de México, (maltratara al personal diplomático de ese país y secuestrara a un refugiado político, que se encontraba en esa sede diplomática), o la misma Constitución, y el tratar de imponer la minería a sangre y fuego en la provincia de Cotopaxi).

Podríamos inferir, además, según el escritor Renán Vega Cantor, historiador y docente colombiano, que el gobierno ecuatoriano de alguna forma quiere implementar el método Israel en Ecuador, que es «el conjunto de prácticas criminales, terroristas, bestiales y genocidas del régimen israelí contra el pueblo palestino y de terrorismo internacional». La esencia del Método Israel en el campo del «derecho internacional» en un mundo que termina siendo no el de los derechos humanos o el de los derechos adquiridos, sino el de los derechos violados. El Método Israel es el terrorismo de Estado sin fronteras, en este sentido, Ecuador podría convertirse en el nuevo Israel de América del Sur».

Por otro lado, el escritor Pedro Pierre, sacerdote diocesano francés, indica de alguna forma que la Consulta-Referéndum no refleja ni menciona, entre muchas otras cosas, la situación del país ecuatoriano, como, por ejemplo: «Además, no hay plan de gobierno, no hay propuestas de economía, ni proyecto de mantenimiento de las empresas eléctricas que están al borde del colapso con los consecuentes apagones interminables. ¿Y las medicinas en los hospitales, la ausencia de aulas y profesores en las universidades, el arreglo de las carreteras, el turismo en su nivel muy bajo, las inversiones extranjeras que no llegan, etc. Los impuestos aumentan y también los combustibles, el costo de la canasta básica, el pago de los salarios atrasados. Yo no se habla de las deudas de las más grandes empresas -más de 4’000 millones de dólares- olvidadas…. El presidente contradice sus promesas de campaña: ¡No más impuestos, no más persecución política, no más desempleo, no más pobreza!». 

Enfatizando, «Votar No en la consulta, es rechazar el plan colonizador de nuestra patria. Además de votar 11 veces No, ojalá sepamos retomar el camino de la dignidad y construir juntos el Ecuador que queremos».

Finalmente, deseamos precisar dos elementos importantes. El primero es, como vemos en las preguntas de la Consulta-Referéndum, 9 preguntas están relacionadas con la seguridad, ya que en los primeros 100 días del presidente de Ecuador, Daniel Noboa, se cumplieron en medio de una grave crisis de inseguridad, que no pudo ser frenada con la declaración de estado de excepción y conflicto armado interno a nivel nacional.

Muchas organizaciones defensoras de Derechos Humanos expresan su preocupación por la violencia que atraviesa al país, y lamentan que el discurso de la “bukelización” esté calando con una visión punitiva (castigadora), sin profundizar en las causas detrás de la criminalidad.

Muchos investigadores están enfatizando que Noboa pretende llevar a cabo una especie de «bukelizacion» en el país. A su vez, el escritor Guido Vassallo, periodista, enfatiza: «El presidente Daniel Noboa comparó su “Plan Fénix” con el “Plan Control Territorial” de su par de El Salvador, Nayib Bukele, quien declaró el estado de emergencia para combatir a las pandillas en marzo de 2022. Nadia Rivadeneira, del colectivo Mujeres de Frente, sostiene que la “bukelización” está creciendo en Ecuador y “se está desencadenando una guerra contra las personas empobrecidas y racializadas”. “Hablamos de más cárceles y de más penas”, indica Rivadeneira, quien cuestiona la visión de aumentar la población penitenciaria sin pensar en la reconstrucción del tejido social».

El segundo elemento a considerar es que, el plebiscito realizado, reactiva a la izquierda para las elecciones de 2025. Como lo reseña el sociólogo y profesor del Instituto de Altos Estudios Nacionales del Ecuador, Daniel Pontón, «el resultado final parece positivo para el gobierno en temas urgentes de seguridad, pero allana el camino para la izquierda, que tumbó las propuestas de «profundización neoliberal». Es la oportunidad de la izquierda ecuatoriana, para rescatar el saldo positivo que deja esta Consulta-Referéndum para el pueblo.

Obispo. Patriota Bolivariano– 28 abril, 2024.

Foto: Presidente Daniel Noboa

*La consulta se compone de 11 preguntas:

La papeleta de votación está organizada en casilleros, identificados con letras de la A a la K, y se divide en dos categorías principales:

– Referéndum (A-E): Se refiere a las preguntas de la A a la E, destinadas a proponer reformas a la Constitución.

– Consulta Popular (F-K): Incluye las preguntas de la F a la K, que abordan reformas a leyes de rango inferior a la Constitución o consultas sobre temas específicos de política pública. Estas preguntas permiten al electorado expresar su opinión sobre cambios legislativos o decisiones gubernamentales que no requieren una enmienda constitucional.

¿Cuál es el enfoque principal de las preguntas?

9 preguntas están relacionadas con la seguridad, 1 pregunta aborda el arbitraje internacional, y 1 pregunta trata sobre el trabajo por horas.

*PREGUNTA 1: (A) ¿Está usted de acuerdo con que se permita el apoyo complementario de las Fuerzas Armadas en las funciones de la Policía Nacional para combatir el crimen organizado, reformando parcialmente la Constitución de conformidad con lo previsto en el Anexo 1?

PREGUNTA 2: (B) ¿Está usted de acuerdo con permitir la extradición de ecuatorianos, con las condiciones, requisitos, restricciones e impedimentos establecidos en la Constitución, los instrumentos internacionales y en la Ley, enmendando la Constitución y reformando las leyes, conforme el Anexo 1?

PREGUNTA 3: (C) ¿Está usted de acuerdo con el establecimiento de judicaturas especializadas en materia constitucional, tanto en primera como en segunda instancia, para el conocimiento de las garantías jurisdiccionales que les corresponda, enmendando la Constitución y reformando la Ley Orgánica de Garantías Jurisdiccionales y Control Constitucional, de acuerdo con el Anexo 2?

PREGUNTA 4: (D) ¿Está usted de acuerdo que el Estado ecuatoriano reconozca el arbitraje internacional como método para solucionar controversias en materia de inversión, contractuales o comerciales?

PREGUNTA 5: (E) ¿Está usted de acuerdo con enmendar la Constitución de la República y reformar el Código de Trabajo para el contrato de trabajo a plazo fijo y por horas, cuando se celebre por primera vez entre el mismo empleador y trabajador, sin afectar los derechos adquiridos de los trabajadores, de acuerdo con el Anexo 4?

PREGUNTA 6: (F) ¿Está usted de acuerdo con que las Fuerzas Armadas realicen control de armas, municiones, explosivos y accesorios, permanentemente, en las rutas, caminos, vías y corredores autorizados para el ingreso a los centros de rehabilitación social?

PREGUNTA 7: (G) ¿Está usted de acuerdo con que se incrementen las penas de los delitos de: (i) terrorismo y su financiación, (ii) producción y tráfico ilícito de sustancias catalogadas sujetas a fiscalización, (iii) delincuencia organizada, (iv) asesinato, (v) sicariato, (vi) trata de personas, (vii) secuestro extorsivo, (viii) tráfico de armas, (ix) lavado de activos y (x) actividad ilícita de recursos mineros, reformando el Código Orgánico Integral Penal conforme el Anexo de la pregunta?

PREGUNTA 8: (H) ¿Está usted de acuerdo con que las personas privadas de la libertad cumplan la totalidad de su pena dentro del centro de rehabilitación social en los delitos detallados en el Anexo de la pregunta, reformando el Código Orgánico Integral Penal conforme consta en el referido Anexo?

PREGUNTA 9: (I) ¿Está usted de acuerdo con que se tipifique el delito de tenencia o porte de armas, municiones o componentes que son de uso privativo de las Fuerzas Armadas o la Policía Nacional, sin afectar a las armas de fuego permitidas para uso civil, reformando el Código Orgánico Integral Penal conforme el Anexo de la pregunta?

PREGUNTA 10: (J) ¿Está usted de acuerdo con que las armas, sus partes o piezas, explosivos, municiones o accesorios que fueron instrumentos u objeto material de un delito, puedan destinarse al uso inmediato de la Policía Nacional o las Fuerzas Armadas, reformando el Código Orgánico Integral Penal conforme el Anexo de la pregunta?

PREGUNTA 11: (K) ¿Está usted de acuerdo con que el Estado proceda a ser el titular (propietario) de los bienes de origen ilícito o injustificado, simplificando el procedimiento de la Ley Orgánica de Extinción de Dominio, conforme el Anexo de la pregunta?

Imagen: https://www.jornada.com.mx/

El abc escolar del referéndum

Freddy Pacheco León

Freddy Pacheco León

Sumado a que no tememos para nada, la iniciativa de Chaves, Pilar y Otto, de convocar a un referéndum, para que vean que no somos tan malos como ellos nos pintan, con gusto les instruimos, como lo hacía nuestra queridísima maestra en la Escuela Juan Rudín. Tal vez así, lo logren comprender y consideren que una gestión de democracia popular, que pareciere innecesaria en estos momentos, y que podría estar condenada al fracaso, le costaría al Estado, más de ¢3.000 millones.

¡Veamos!

A. El referéndum es un mecanismo especialísimo de democracia popular, amparado en la Carta Magna.

B. NO podrán someterse a referéndum, proyectos de ley (porque eso tienen que ser) sobre materia presupuestaria, tributaria, fiscal, monetaria, crediticia, de pensiones, seguridad, aprobación de empréstitos y contratos, ni actos de naturaleza administrativa, así como derechos fundamentales, tal y como está en la Constitución Política, que, por supuesto, está para cumplirla y no para interpretarse. Además, recordemos que los convenios internacionales sobre derechos humanos están un peldaño arriba de la Constitución Política, por lo que, con más razón, no pueden plantearse en un referéndum.

C. El, o los proyectos de ley que se quieren someter a decisión del soberano, por un camino diferente al que siguen las iniciativas de ley en la Asamblea Legislativa, han de cumplir, por razones comprensibles, con los requisitos estructurales y formales, que caracterizan a los proyectos usuales, que conocen nuestros representantes populares. Con ello, se evitarían, en lo posible, eventuales interpretaciones confusas de sus textos. Es importante que se valore, seriamente, este aspecto, pues los textos que eventualmente se someterían a la recolección de firmas y eventual votación popular, no podrían ser modificados ¡ni en una coma! Por ellos solo se presenta la alternativa de votar SI o NO.

D. Para iniciar el proceso, que podría desembocar en el referéndum, el o los proyectos (aunque complicado, puede promoverse un referéndum para varios proyectos de ley) han de ser presentados al Tribunal Supremo de Elecciones (TSE), para su análisis y, seguramente consulta, ante el Departamento de Servicios Técnicos, de la Asamblea Legislativa, para su correspondiente criterio legal, que podría incluir un análisis de constitucionalidad de parte de la Sala IV de la Corte Suprema de Justicia. Cumplido ese paso en la sede del Primer Poder de la República, el o los proyectos serían remitidos de regreso al TSE, para su valoración y acuerdo.

E. En caso de que la resolución sea favorable, para los intereses de los que han tramitado la iniciativa, el TSE solicitará, un resumen de la propuesta, para que el ciudadano que firmaría para que se convoque, se entere, al menos en lo fundamental, sobre cuáles son los contenidos de los proyectos de ley, que se le ofrecen. Resúmenes que, por supuesto, deberán ser parte de las hojas en que firmarán los ciudadanos, pues sería irrespetuoso, “firmar cheques en blanco”.

F. El proceso previo a lo señalado en los puntos anteriores, puede ser iniciado por el Poder Ejecutivo, mediante proyectos de ley que sometería a la Asamblea Legislativa, requiriendo para su aprobación (o sea, para que los textos sean sometidos a conocimiento del TSE), una mayoría favorable no menor a 29 votos. Una segunda opción, sería que la propuesta sea conocida directamente por el Poder Legislativo (sin participación del Presidente de la República) quien la hará de conocimiento del órgano superior electoral, quien, cumplidos los requerimientos, la devolvería al Primer Poder de la República, para una votación favorable, que no puede ser menor a 38 votos.

En ambos casos, de no lograrse las mayorías anotadas, se archivarán los proyectos. (Decimos los proyectos, porque si lo que se desea es armar un alboroto, un solo proyecto no cumpliría con ese medio oculto objetivo político).

G. La tercera opción, en caso de que se estime de que no son viables las opciones que involucran la voluntad de los señores diputados (que, por supuesto, provocarían debates complicados, que demandarían mucho tiempo, como sucede con otros proyectos de ley conflictivos, ayunos de consenso), es mediante la recolección de firmas entre la ciudadanía.

H. Empezamos por anotar que es un proceso regulado estrictamente, por mandato legal. ¡El asunto no es jugando! No se trata, como hemos escuchado, de simplemente recoger firmas en un puñado de hojas, en paradas de bus o la salida de un estadio, en el tren o de puerta en puerta. No, ¡jamás! Las hojas foliadas por el TSE deberán incluir resúmenes de los proyectos de ley que se proponen y que, como hemos indicado, han cumplido los pasos señalados antes. Si son varios los proyectos, lógicamente para cada uno habría de consignarse, esa información fundamental, pues, reiteramos, ha de quedar claro para el ciudadano, por qué estaría anotando su nombre completo, su número de cédula y su firma, tal y como aparecen en su cédula de identidad. Y ello, en instalaciones, como centros educativos públicos, por ejemplo, seguros, resguardados, previamente designados formalmente, y siempre con la presencia de personas que fungirán como delegados del TSE, debidamente juramentados, que habrán de velar por la legalidad de tan importante acto ciudadano, y custodiarán los documentos.

I. Para cumplir esta etapa formal, los ciudadanos proponentes del referéndum habrán de recoger el equivalente al 5% del padrón electoral vigente. Al día de hoy sería ~177.095 firmas válidas, para las cuales se tiene un plazo de 9 meses para su recolección y entrega en tiempo al TSE. Ello para su cuidadosa revisión (que no hayan repetidas, que los datos de la cédula de identidad, incluyendo las firmas, coincidan con el registro electoral, etc.). O sea, trabajando los 7 días de la semana, ininterrumpidamente, unos 655 ciudadanos tendrían que firmar cada día, pues, a menor ritmo, no alcanzaría el tiempo para superar las 177 mil. Se requiere pues, una gran organización, de parte de los proponentes, y muchos ciudadanos trabajando, voluntariamente, jornadas, aquí sí, de al menos 12 horas. Intentos anteriores han fracasado después de unas cuatro o cinco semanas.

J. Debidamente cumplido lo anterior, y si el TSE verifica y acuerda, que todo está conforme a la legalidad, éste procederá a realizar los trámites pertinentes, relativos, por ejemplo, a los espacios y demás regulaciones, de las campañas del SI y del NO, así como el diseño de las papeletas que se le presentarán al votante el día del referéndum (un domingo de 6 de la mañana a 6 de la tarde), en las mesas receptoras, con representantes de ambas tendencias, debidamente juramentados. Es, como habrán notado, un proceso similar al usado para una elección presidencial, por ejemplo.

K. Terminado el acto final de la votación, el TSE emitirá preliminarmente, en pocos minutos, un resultado de la votación, antes de una ulterior revisión de los votos, si se considerare necesario.

L. Pero hay otro detalle determinante. Aunque el resultado de la votación se determina por simple mayoría, no necesariamente el resultado obtenido tiene validez. Resulta que, si los proyectos de ley sometidos al proceso de referéndum habrían requerido una mayoría de 38 votos, si fueren tramitados en la Asamblea Legislativa, la legislación estipula un requisito incuestionable, y muy razonable. La norma dice que el quórum mínimo alcanzado durante la votación, ¡para que se pueda decir si ganó el SI o el NO!, ha de ser equivalente al 40% del total del padrón electoral. Hoy, la cifra sería igual a 1.416.763 votantes, por lo cual, un abstencionismo un poquito mayor al 60% (que tendría muchas posibilidades de presentarse), daría al traste con todo el esfuerzo anterior. ¡No habría ganador!, aunque una de las alternativas obtuviera, exagerando un poco o mucho, más del 90% de los votos (para mayor claridad).

M. Si, por otro lado, los proyectos de ley hubieran requerido una mayoría simple de 29 votos en el Congreso, su aprobación en el referéndum solo sería viable, si 1.062.572 ciudadanos, acudiesen a votar, pues el requisito sería equivalente al 30% del padrón electoral. Algo igualmente muy difícil de alcanzar, aunque en caso de darse una campaña a nivel nacional, tan intensa y plena de debates, como la que se diera hace casi 17 años, con el TLC, podría ser posible, pero la campaña alrededor del TLC fue muy intensa a lo largo y ancho del país, con manifestaciones formidables, que no creemos que se pudiere repetir bajo las condiciones actuales. Esa posibilidad la vemos muy lejana.

N. Por si acaso, nos referimos a ciertas cosas que se comentan. Dicen, no nos consta, que andan por Zapote ideas sorprendentes (aunque ahora nada debería sorprendernos) como es la de incluir en el referéndum, en una ensalada de proyectos, un proyecto de reforma constitucional parcial, que le abriera a Chaves, la posibilidad de postularse para una reelección presidencial. Si fuere así, al presuntamente interesado y sus asesores, les tenemos malas noticias. Para tales casos, el proyecto de acuerdo para ser incluido en el referéndum deberá presentarse DESPUÉS de haber sido aprobada la reforma en una legislatura y antes de la siguiente. Claro que todavía lo pueden intentar, enviando el proyecto de reforma parcial a la Constitución, para ser conocido ahora que se inician los tres meses de sesiones extraordinarias, y la agenda es iniciativa del Poder ejecutivo. Lo que no parece posible, es que los señores diputados se lo aprueben, y mucho menos, con los 38 votos requeridos.

O. Si se alcanzara el quórum correspondiente, que, por los proyectos de ley que se han mencionado, seguramente requerirían del quórum superior al millón cuatrocientos mil votantes, ha de quedar muy claro, que el resultado del referéndum será vinculante para el Estado. Así, las leyes promulgadas serán obligatorias y surtirán efectos, desde el día que las normas lo designen o, diez días después de su publicación en el diario oficial La Gaceta. Así que, no es como escuchamos recientemente un exministro y expresidente legislativo, ahora dedicado al fútbol, decir lo contrario.

P. El asunto del quórum, es de tal relevancia, que ya hay amigos que estarían alistándose para decir NO, de una manera muy particular, pero muy válida y efectiva, a la venta del Banco de Costa Rica, a la explotación petrolera, a la concentración del poder en el ministro de Ambiente, el ministro de Obras Públicas, el ministro de Ganadería, la ministra de Cultura, así como debilitar la Ley de Contratación Administrativa, para contratar a dedo, las empresas que construirían la llamada ciudad gobierno, en una cuadra perteneciente al Liceo de Costa Rica, principalmente, o un extraño proyecto de marina y condominios privados, en terrenos de Japdeva, la venta de Fanal, la venta del INS, el proyecto de las jornadas de 12 horas, etcétera. Pues frente a esas hipotéticas iniciativas de ley, la manera, planteada por los amigos como estrategia, sería la de ¡NO ACUDIR A VOTAR!, pues al quedarse en casita, jamás los seguidores de Chaves, Otto, Pilar…, alcanzarían a reunir, más de medio millón de votantes, por lo que quedarían muy lejos del quórum que le daría validez a la votación.

Q. Como este ABC seguramente es conocido por algunos en Zapote, pensamos que, por ello, hace dos años, desistieron de tomar ese arduo camino. Si ahora se vuelve a plantear, cabe pensar que lo hacen con el único objetivo, de, por un lado, recuperar un poco la imagen política que una vez tuvo (Otto), o, para el caso del presidente y la diputada, para tratar de desviar la atención de la ciudadanía frustrada, lejos de los conflictos que ha provocado el inestable gobierno, donde abunda la ignorancia, el desprecio a la ley y la patanería.

Ecuador dijo sí a la protección de la amazonia ecuatoriana: Parque Nacional Yasuní sin más petroleras

  • En una consulta popular histórica para el mundo y en una ruta clara hacia una sociedad post-petrolera

OILWATCH COSTA RICA; Fabian Pacheco y Mauricio Álvarez

Hoy se inicia un nuevo capítulo para Ecuador y para el mundo entero ante los resultados electorales para detener la explotación petrolera en Yasuní. Ayer 20 de agosto más de doce millones de ecuatorianos se dieron cita para escoger presidente y además votar contra el avance de las petroleras en lo que se considera el “corazón” de la amazonia ecuatoriana.

Con más del 98% de actas escrutadas, según el Consejo Nacional Electoral: el sí al Yasuní se impone con 58.99% con un total de 5 243 703 personas frente a un 41.01% a favor de la explotación petrolera que sumó a 3 645 334 personas. La pregunta que contestaron fue: “¿Está usted de acuerdo en que el gobierno ecuatoriano mantenga el crudo del ITT, conocido como bloque 43, indefinidamente en el subsuelo?”

El llamado “Bloque 43-ITT” ocupa un sector del Yasuní, un área natural protegida que abarca un millón de hectáreas y hasta donde se conoce alberga más de 2.000 especies de árboles y arbustos, 204 de mamíferos, 610 de aves, 121 de reptiles, 150 de anfibios y más de 250 de peces. Pero su principal función es ser parte de la casa de los pueblos indígenas en aislamiento voluntario conocidos como “tagaeri”, “taromenane” y “dugakaeri”,

Ecuador ha definido en una consulta histórica detener la explotación petrolera en el Parque Nacional Yasuní. Este referéndum es fruto de un arduo proceso de más de dos décadas de trabajo de la sociedad ecuatoriana que comprende que la verdadera riqueza de este país se encuentra en su biodiversidad y no en el petróleo y la industria destructiva que lo extrae.

Esta decisión sin precedentes se nutre en una larga historia de desastres ambientales que han dañado de forma devastadora la salud de las comunidades y sus ecosistemas y que nutre la conciencia del pueblo ecuatoriano plasmada hoy en las urnas con un: sí a la vida, con un sí a la Amazonia y con un sí al Parque Natural Yasuní.

Ha sido un proceso de deliberación y discusión nacional muy rico, por primera vez se ha logrado llevar a tan alto nivel esta discusión ecológica y someter a consulta popular el futuro de los ecosistemas amazónicos. Este referéndum abre un nuevo capítulo para la defensa de la vida en el continente.

Los resultados de este referéndum constituyen un paso firme hacia la transición de una sociedad post petrolera en América Latina. Una transición justa hacia la reparación ecológica que hoy se muestra como una realidad posible que empieza a amanecer desde el centro de una América herida.

Esta es una gran oportunidad para pensar en cómo se va a desmantelar, cerrar y clausurar la infraestructura petrolera de forma responsable y ordenada. Se debe exigir el debido saneamiento ambiental. Se debe exigir la reparación y restauración ecológica. Las empresas responsables como lo es Petroecuador no pueden sencillamente desaparecer y abandonar las áreas de explotación y extracción sin hacerse responsables de los daños ambientales y sociales que resultan de su insostenible extracción, con el agravante de haberlo hecho dentro de un parque nacional dedicado a la conservación, siendo una de las áreas de mayor diversidad ecológica en el mundo.

Más allá de celebrar el triunfo en defensa de la vida, también es momento de estar vigilantes para la no repetición de este tipo de crímenes ecológicos, para que no se vuelva a cometer estos delitos ambientales que a todas luces han dañado el tejido socio-ecológico amazónico del Ecuador. Porque la extracción petrolera en Yasuní ha sido un crimen donde incluso se ha ocultado la presencia de pueblos indígenas en aislamiento voluntario y se ha evidenciado una criminal actitud del gobierno y las industrias extractivas en ignorarlos.

La consulta del Yasuní plantea una transición territorial que protege los ecosistemas, la vida y la Amazonia. Esta Consulta abre las puertas a un avance enorme para la humanidad ya que sin la Amazonia no sería posible la vida en el planeta.

La deuda ecológica de la industria petrolera también es un tema a discutir en el marco de esta consulta histórica y el desmantelamiento respectivo de su carcasa extractivista con todos sus costos económicos y ecológicos para el país. Petroecuador debe asumir su deuda ecológica y el caso de Yasuní es una buena oportunidad para estudiar las implicaciones de desmantelar dicha infraestructura.

Para Oilwatch Costa Rica ha sido un honor poder participar en calidad de observadores internacionales de estas elecciones y en este proceso en nuestro país hermano del Ecuador. Las organizaciones ecologistas, indígenas de Ecuador no están solas en esta contienda histórica y medular en defensa de la vida en el planeta. De corazón estamos con ustedes.

Sumada a la moratoria petrolera que Costa Rica ha mantenido desde hace más de veinte años a pesar de las presiones internacionales, este referéndum en Ecuador permite dilucidar la necesidad urgente de construir una sociedad post petrolera y llega a tejer y nutrir la resistencia que desde las comunidades locales y el ecologismo internacional hemos sabido sostener en defensa de la vida misma.

Hoy el Gobierno de Costa Rica nuevamente recae en la tentación de abrir dicho paraíso a la industria extractivista de gas sin ni siquiera respetar el consenso socio-político costarricense que ha sabido orientar el desarrollo nacional hacia actividades respetuosas para con la mega diversidad biológica que alberga el territorio costarricense. No sólo se retrata el gobierno de Chaves desde una perspectiva cavernaria, demagógica y desesperada, sino que delatan su irresponsable discurso trasnochado y anclado en el pasado que la humanidad debe superar.

Los resultados de los comicios en defensa del futuro del Planeta muestran el camino correcto para el buen desarrollo de la humanidad. Desde el centro del mundo hoy resplandecen los resultados de esta histórica consulta que alumbra hacia el futuro y remueve el crudo que no debe oscurecer la vida y la esperanza de una nueva humanidad en este hermoso planeta.

Fuente: https://elecciones2023.cne.gob.ec/Consultas/yasuni